un esquema simplista y cerrado (¿Era Darwin darwinista?. 1982. Mundo Científico, versión en castellano de La Recherche, 2 ,12: 272-287), pero además se han formulado otras propuestas que persiguen explicar los mecanismos de la evolución con nociones no darwinistas. La ciencia es cambiante, como lo es la propia realidad que busca aprehender. La teoría de la evolución se modifica y enriquece. No todo es darwinismo, están surgiendo otras aproximaciones y es posible que nos encontremos en los albores de nuevas teorías de la evolución. Pero el pensamiento y la obra de Charles Darwin constituirán un referente obligado, no solo en el desarrollo de nuevas teorías (las que indudablemente tendrán elementos darwinistas), sino en el permanente abordaje de las preguntas que más nos han intrigado durante todos los tiempos: ¿quiénes somos?, ¿de dónde venimos?, ¿qué sentido tiene nuestra existencia?. Estos son motivos más que suficientes para festejar en este año 2009 el 12 de febrero (bicentenario del natalicio de Darwin) y el 24 de noviembre (150 años de la primera edición de “El origen de las especies”). Celebraremos estas memorables fechas en República Dominicana, junto a la comunidad científica nacional e internacional, con la expresa intención de incorporar al público en general y especialmente a nuestros jóvenes estudiantes, quienes encontrarán en Darwin el apasionante ejemplo de un hombre modesto y hondamente humano que supo combinar genialmente la imaginación y el entusiasmo con el trabajo creativo, la perseverancia y la firmeza de carácter ante las críticas y vilipendios, con gran confianza en sí mismo, en la observación de los hechos y el poder de la razón. 2009 1809-1882 Bicentenario Celebremos el bicentenario del natalicio de Charles Darwin (12 de febrero de 1809) y los 150 años de la publicación de su obra magna El Origen de las Especies (24 de noviembre de 1859) Los Editores Plaza de la Cultura, Santo Domingo, R.D. Tel.: 809-689-0106. Fax: 809-689-0100 Dedicatoria a Charles Darwin: bicentenario de su nacimiento y 150 años de El origen de las especies Numerosas instituciones y personalidades de diferentes países, teniendo como centro el Natural History Museum de Londres, celebran el bicentenario del nacimiento del naturalista inglés Charles Darwin y los 150 años de la publicación de su obra cumbre “El Origen de las especies por medio de la selección natural o la preservación de las razas favorecidas en la lucha por la vida”. El Museo Nacional de Historia Natural se une a estos festejos en República Dominicana con diversas actividades; a seguidas reproducimos con fines divulgativos la nota de dedicatoria a Darwin del No. 2 de nuestra revista científica Novitates Caribaea (editores: Celeste Mir y Carlos Suriel). La obra y el pensamiento de Darwin no solo transformaron la Biología para siempre y la elevaron a la categoría de una auténtica ciencia, sino que influyeron en todas las áreas del conocimiento y removieron los cimientos del pensamiento humano. Para una amplia documentación sobre la vida, la obra y el pensamiento de Darwin, recomendamos entrar a la página http://darwin-online.org.uk/ El Museo Nacional de Historia Natural relanza sus publicaciones científicas con el número 2 de Novitates Caribaea, dedicándolo con júbilo al bicentenario del nacimiento del naturalista inglés Charles Darwin (1809-1882) y a los 150 años de su obra magna “El origen de las especies”. De esta manera nos unimos a los festejos que se realizan en muchos países, teniendo como centro al Natural History Museum, Londres. El darwinismo, entendido como el conjunto de las ideas, teorías y obras de Charles Darwin, no solo transformó la Biología para siempre, sino que trascendió a las esferas de las ciencias sociales, la Psicología, la moral y la religión, constituyendo una revolución del pensamiento que moldeó la cultura moderna. “La teoría de Darwin se propagó removiendo los cimientos de la ciencia y la sociedad, de tal modo que fue poco lo que permaneció igual tras sentir su fuerza” (Edward J. Larson. 2006. Evolución. La asombrosa historia de una teoría científica. Random House Mondadori, S.A. Barcelona. 415 pp). La primera edición de “El origen de las especies por medio de la selección natural o la preservación de las razas favorecidas en la lucha por la vida”, el 24 de noviembre de 1859, fue el evento principal en el proceso de establecimiento definitivo de la idea del cambio en la naturaleza, coronándose con las teorías desarrolladas en “El origen del hombre y la selección en relación al sexo” en 1871 y otras tantas obras menores de Darwin, anteriores y posteriores de aquellas. La visión predominante en el pensamiento humano de hoy es la de un mundo cambiante, donde todo lo que existe, como lo conocemos, no ha existido todo el tiempo, sino que es resultado de un largo proceso evolutivo de transformaciones continuas que rebasa los límites del tiempo establecidos en las concepciones tradicionales; pero no solo las especies han cambiado y siguen haciéndolo, sino el planeta que habitamos y todo el universo, así como también nuestras ideas de la realidad observada y del propio hecho humano. La Biología antes de Darwin consistía en un conjunto de disciplinas descriptivas, siendo éste quien enseñó a buscar y establecer las relaciones causales en las diferentes manifestaciones de “lo vivo”. La teoría de la evolución pasó a ser el hilo unificador de todos los fenómenos biológicos conocidos, elevando la Biología a la categoría de ciencia respetable, permeando todas sus líneas de investigación y orientando su discurrir. La Biología moderna es evolutiva, esta realidad la resumió Theodosius Dobzhansky en 1973 con su ya paradigmática frase “Nada en Biología tiene sentido si no es a la luz de la evolución” (Nothing in biology makes sense except in the light of evolution. American Biology Teacher, 35: 125-129). La Biología de hoy dista mucho de aquella que conoció Darwin y aún de la que se desarrolló durante la primera mitad del siglo xx. La Biología evolutiva se apoya actualmente en hechos empíricos y desarrollos teóricos de campos revolucionarios como la genética de poblaciones y la biología molecular, articulando con las disciplinas clásicas. La propia teoría de la selección natural ha tenido una trayectoria larga y tortuosa, pasando por etapas de aportes enriquecedores y ampliaciones, así como por momentos de duras críticas de científicos evolucionistas no darwinistas, al menos no ortodoxos. Podemos afirmar junto a Pierre Thuillier que existe más de una manera de llamarse darwinista, aceptando la teoría del sabio inglés como una visión pluralista del cambio biológico y no como