EL SISTEMA SOLAR Los componentes del Sistema Solar El Sistema Solar está formado por el Sol y todos los astros que giran en tomo a él: planetas, satélites (que giran alrededor de los planetas), cometas y asteroides. El Sol se formó hace unos 5.000 millones de años, y es una estrella de magnitud media. Su superficie está a unos 9.000 °C de temperatura. En ella podemos observar las manchas solares, zonas donde la temperatura es de «sólo» 4.000 °C También aparecen protuberancias, que son enormes lenguas de gases, y fulguraciones, explosiones con gran emisión de energía que aparecen rodeando las manchas solares. Los planetas Los planetas del Sistema Solar son astros que describen órbitas elípticas, casi circulares, alrededor del Sol. No tienen luz propia y su brillo se debe a la luz solar que reflejan. Podemos clasificar los planetas en interiores y exteriores. .Los planetas interiores son pequeños y rocosos. Son planetas interiores Mercurio, Venus, la Tierra y Marte. .Los planetas exteriores son mucho más grandes y algunos tienen una gruesa atmósfera, por lo que se conocen como gigantes gaseosos. Son planetas exteriores Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno. Los planetas interiores Mercurio. Carece de atmósfera debido a su escasa gravedad Su superficie presenta numerosos cráteres producidos por el impacto I de meteoritos. Venus. Se le conoce desde antiguo como el lucero del alba o del atardecer. Sigue una órbita prácticamente circular. Posee una atmósfera compuesta por dióxido de carbono y dióxido de azufre que provoca un ambiente ácido. Esta atmósfera gira al revés del sentido de la rotación del planeta, originando vientos de velocidades enormes en su superficie. Tierra. Con una atmósfera densa, rica en oxigeno, por lo que es única en el Sistema Solar, y que llega hasta los 1.000 km de altura. La temperatura media en la superficie es de 15°C. Es el único planeta en el que conocemos vida. Marte. Es un planeta rocoso con una atmósfera muy tenue de dióxido de carbono, oxígeno, nitrógeno y algo de vapor de agua. En su superficie aparecen huellas de haber tenido agua líquida y unos pequeños casquetes de hielo en los polos. Los planetas exteriores Júpiter. Es un gigante gaseoso, el planeta más grande del Sistema Solar. Tiene una atmósfera en bandas formada por hidrógeno, helio, amoníaco y metano. En ella aparece una gran mancha que se supone que es una tormenta tropical. A su alrededor tiene dieciséis satélites y un pequeño anillo. Saturno. Gigante gaseoso, un poco más pequeño que Júpiter y que tiene unos anillos de materia que no llegó a unirse al planeta en su formación. Tiene 18 satélites. Urano. Tiene una atmósfera con los mismos componentes que la de Júpiter. También es un gigante gaseoso. Su eje de rotación está muy inclinado y presenta un tenue anillo. Neptuno. Gigante gaseoso, de composición semejante a Júpiter. Tiene agua en estado sólido y atmósfera con metano, amoníaco, hidrógeno y helio. También presenta un anillo tenue. Los otros astros del Sistema Solar Dentro de la categoría de «cuerpos pequeños del Sistema Solar» destacan: • Los asteroides. Son cuerpos rocosos de diversos tamaños, Se encuentran formando dos cinturones alrededor del Sol. Se conocen más de 2.000 aunque su número puede ser de varios millones. - El cinturón de asteroides. Se halla situado entre la órbita de Marte y la de Júpiter. El tamaño de estos asteroides es muy variado, la mayoría tiene unos pocos metros de diámetro, El cinturón de Kuiper. Se encuentra más allá de la órbita de Neptuno. En este cinturón hay asteroides mucho mayores, Un planeta menor es un astro opaco redondo que gira alrededor del Sol y que no domina su entorno, aunque como mínimo tiene 800 km de diámetro. Los tres planetas menores ordenados de menor a mayor distancia del Sol son: Ceres, Plutón y UB313 (Eris). Los cometas. Son cuerpos formados de hielo mezclado con fragmentos de roca, Tienen tamaños muy variados, y forman un tercer cinturón, más allá de la órbita de Plutón. Este tercer cinturón se llama Nube de Oort y se encuentra a unas 60 000 unidades astronómicas del Sol. En ocasiones, uno de estos cometas es expulsado de la Nube de Oort hacia el interior del Sistema Solar, A medida que se aproxima al Sol, se va calentando y el hielo se vaporiza. El cometa pasa a estar formado entonces por un núcleo de hielo y rocas, y una cola, que es un larguísimo rastro de vapor y partículas de hielo que reflejan vivamente la luz del Sol. Los cometas describen órbitas elípticas amplísimas alrededor del Sol. Satélites. Son astros sin luz propia que giran alrededor de los planetas. El más conocido es la Luna, que gira alrededor de la Tierra. Meteoritos. Son cuerpos rocosos de tamaño y masa variada y de origen diverso; no siguen una órbita definida. Pueden llegar a la Tierra y atravesar la atmósfera, e incluso caer en la superficie. Fragmentos de éstos, así como de cometas o de materia interplanetaria, producen estelas luminosas en su choque con la atmósfera; es lo que conocemos con el nombre de estrellas fugaces. OBSERVANDO EL CIELO NOCTURNO La esfera celeste El Sol, la Luna, los planetas y las estrellas están a distancias muy distintas de la Tierra, pero desde la Antigüedad se imaginaron sobre una esfera en el centro de la cual estaba la Tierra. A esta esfera imaginaria se le dio el nombre de esfera. celeste. La Tierra presenta un movimiento de rotación sobre sí misma respecto de un eje imaginario que pasa por los polos norte y sur. La prolongación de este eje en la esfera celeste nos marca en ésta los polos norte y sur celestes, respectivamente, y la prolongación del ecuador terrestre en la esfera el ecuador celeste. En el polo norte celeste está la Estrella Polar. Como la Tierra gira en el sentido contrario a las agujas del reloj y el Sol y las estrellas están teóricamente fijas en la esfera celeste, desde la Tierra se aprecia un movimiento aparente de la bóveda entera, de Este a Oeste en el hemisferio norte. La esfera celeste se divide en dos hemisferios por; el ecuador celeste. Sobre la esfera celeste se suele dibujar una curva, la eclíptica, que es la trayectoria descrita por el Sol en su movimiento aparente alrededor de la Tierra. Las constelaciones A lo largo de la historia, la humanidad ha organizado la bóveda celeste haciendo grupos de estrellas, a los que se les asoció un nombre significativo para la civilización que observaba el cielo. En la civilización grecorromana, los nombres correspondían a animales, a figuras de su mitología, etc. y han llegado hasta nosotros. Estos agrupamientos totalmente artificiales (ya que las estrellas que lo componen pueden estar muy lejos entre sí) se llaman constelaciones. En la esfera celeste las estrellas se mueven tan lentamente que no se aprecia a lo largo de la vida humana, pero sí a lo largo de los siglos, por eso las constelaciones actuales son ligeramente distintas de las que vieron las civilizaciones antiguas y de las que verán las venideras. Los movimientos de las estrellas Algunas estrellas, como la Estrella Polar, y las constelaciones más cercanas a ella, pueden verse toda la noche y durante todo el año. Sin embargo, otras constelaciones salen por el Este y se ponen por el Oeste y aparecen sólo en algunas épocas del año. La causa del movimiento nocturno de las estrellas es la rotación de la Tierra. En cambio, la variación de las estrellas y constelaciones a lo largo del año, se debe al movimiento de traslación de la Tierra respecto al Sol, que nos permite apreciar por la noche sólo una parte del hemisferio celeste en el que nos encontramos. Ya civilizaciones muy antiguas apreciaron que algunas constelaciones salen por el Este y se ponen por el Oeste, desplazándose aparentemente por el plano de la eclíptica y abarcando todo el perímetro de la esfera celeste. Estas constelaciones forman el zodíaco y son doce; cada una ocupa, aproximadamente, 30º de los 360º del círculo de la eclíptica. Mapas del cielo El planisferio celeste es una representación en un plano de todo el cielo visible desde una determinada latitud de la Tierra. Sobre este plano del cielo suele adaptarse un disco giratorio que, ajustándolo a una determinada fecha y hora, nos muestra la porción de la esfera celeste que podemos ver en este momento. Dependiendo de la latitud en que nos situemos, podremos observar una u otra porción de la esfera celeste.