Dr. Miguel Fernández Ruiz, Cirujano General y Digestivo. Cirujano Jefe de las Enfermerías de Logroño, Calahorra y Haro PARTES FACULTATIVOS EN CIRUGÍA TAURINA ¿Pasa algo raro con los partes facultativos….? Así terminaba el año pasado en su emisión radiofónica, un afamado crítico taurino, tras poner en duda la veracidad de los partes facultativos y su relación con la gravedad de las cogidas. Evidentemente, no existe esta discrepancia. Potencialmente todas las heridas por asta de toro son graves, por lo incierto de su evolución (infección, hemorragia, etc.), a pesar de una asistencia precoz. Existen factores que pueden inducir a pensar que existen discrepancias; se puede pensar en una exageración deliberada o por el contrario en una prudencia exagerada, pudiera considerarse incluso una cierta inexperiencia del equipo médico, o se puede considerar al torero de una “pasta especial” con una evolución biológica de excepción e incluso puede llegar a existir influencias sobre el cirujano o el torero. Uno de los factores que más influye en esta polémica es el de las reapariciones “precoces”. En realidad, los causantes de la recuperación y curación biológica, son los “fibrocitos”, células que intervienen de forma activa en los fenómenos de cicatrización y que actúan tanto en los toreros como en los demás mortales. El tiempo biológico de la curación va a depender del tipo de heridas: las heridas superficiales, una semana y media; las heridas profundas y musculares, tres semanas; las lesiones osteoarticulares, ocho semanas; las lesiones vasculares graves más de ocho semanas; las lesiones viscerales más de diez semanas y las lesiones psicológicas…. (?) El informe médico debe de reseñar con claridad las direcciones y trayectorias, así como la situación de los drenajes. Esta información debe ser realizada por escrito y de la forma más clara posible para facilitar el trabajo a los colegas que reciban al herido en el hospital y vaya a continuar el tratamiento. El interés iconográfico y la facilidad de utilizar cámaras digitales, facilitan en extremo la labor de documentación y tansmisión de la información, existiendo portales web en las que algunos compañeros “cuelgan” los partes facultativos. .Es preciso recalcar que una cornada nunca tiene un pronostico leve por su profundidad y contaminación, evitando el pronóstico reservado, salvo en el caso de las lesiones osteoarticulares. Los factores que influyen en la evolución van desde la gravedad intrínseca de las lesiones (únicas, múltiples, ocultas, etc.), el agente lesional (asta, estoque, banderilla, etc.), los “primeros cuidados”, el traslado, la capacitación del equipo y también la “obediencia” del lesionado. Se puede concluir que en medicina taurina, el pronóstico es orientativo. No existe una “pasta especial”, si existe una predisposición psicológica especial con una voluntad de volver a torear. La atribución del pronóstico necesita de una gran prudencia, experiencia y consenso.