CELEBRACIÓN DE COMIENZO DE LA CUARESMA (Catequesis

CELEBRACIÓN DE COMIENZO DE CUARESMA
Miércoles de Ceniza
Esta celebración podría realizarse tanto en la iglesia, como en los locales de la
catequesis debidamente ambientados. Sugerimos realizarla en el día de
catequesis más próximo al miércoles de ceniza.
Monición:
La Cuaresma es tiempo para el cambio y oportunidad para mejorar nuestras vidas.
Los cristianos y cristianas comenzamos la ruta de la Cuaresma: un recorrido de
cuarenta días hasta llegar a la fiesta más importante para nosotros: El Triunfo de
Jesús sobre la muerte, la Pascua de Resurrección.
Los atletas, para estar en forma se dan masajes. A los cristianos, al iniciar esta
ruta se nos impone ceniza sobre nuestras cabezas, es una invitación a la
conversión, a reconciliar nuestras vidas con nosotros mismos, con los demás y con
Dios.
Símbolos:
La Biblia.- La Palabra de Dios quiere que en este día escuchemos con atención el
mensaje de Jesús. Ella será nuestra mejor consejera a lo largo de toda la
Cuaresma.
Una vela encendida.- A los cristianos nos ilumina la luz de Jesús porque Él es la luz
del mundo. Si perdemos el contacto con ésta Luz, vamos caminando por la vida a
ciegas. Hay que mantener la Luz encendida: hay que caminar durante la Cuaresma,
iluminados por la Luz de Jesús.
La Ceniza.- Por el camino siempre encontramos polvo, que es nuestro egoísmo…
esa violencia que a veces mostramos…, pero, contamos con Jesús que recorrió el
mismo camino y llegó hasta el final.
El agua.- Lo mismo que la luz puede a las tinieblas, también el agua le puede a la
suciedad. El agua purifica, refresca, limpia…. da vida. Es el símbolo de nuestro
Bautismo de nuestra incorporación a la Iglesia.
Una vez que explicamos cada uno de estos elementos, los vamos colocando en el
altar o en algún lugar destacado del lugar de la celebración.
Oración: (se podría proyectar para leerla juntos)
Señor, danos fuerza y energía, al empezar la Cuaresma.
Mira nuestro sincero deseo de caminar hacia la Pascua.
con un corazón arrepentido y dispuesto a seguirte.
Ayúdanos a ser fieles al Mensaje de Jesús,
y a pedir perdón si nos apartamos del camino.
Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
LECTURA DEL EVANGELIO: (Mateo 6,1-6.16-18) o (Lc. 15,1-7)
Reflexionamos sobre la Palabra de Dios:
Dios siempre nos espera… nos busca… le alegra cuando nos acordamos de El y
rezamos…
Imposición de la ceniza:
Mientras dura este rito, poner una música suave que invite al recogimiento. (Se
adjunta en este envío en archivo aparte).
El símbolo de la ceniza nos habla de conversión y de acogida del Evangelio.
Simboliza que nosotros nos comprometemos con la causa de Jesús. Este gesto ya
lo realizaban los primeros cristianos como signo de arrepentimiento y cambio.
De uno en uno nos vamos acercando hasta el altar. Apoyamos la mano izquierda
sobre la Biblia y con la derecha cogemos la ceniza hacemos la señal de la cruz
sobre la frente y decimos: “Quiero ser cada día mejor”.
Oración de los fieles:
 Padre Dios, te pedimos por nuestras familias para que estemos cada vez
más unidos y nuestras casas sean un lugar feliz donde todos nos
encontremos bien. ROGUEMOS AL SEÑOR…
 Padre, hoy te pedimos por todos los que están sufriendo en el Cuerno de
África. Para que sientan que Tú estás junto a ellos, y les llegue la ayuda
del mundo entero y también la nuestro. ROGUEMOS AL SEÑOR…
2
 Padre, hoy te pedimos por todos nosotros que nos hemos reunido para
iniciar juntos este camino hacia la Pascua, para que vivamos con gozo este
tiempo tan especial. ROGUEMOS AL SEÑOR…
 Dejamos un tiempo para que se puedan realizar peticiones espontáneas.
Rezamos la oración que nos enseñó Jesús: “Padre nuestro…”
Antes de terminar, repartimos una vela pequeña encendida a cada participante.
Todos juntos con la vela encendida, rezamos la oración final.
En casa la vela nos recordará esta celebración y el camino que hemos iniciado
hasta llegar a la Pascua.
Sugerimos rezar el Padrenuestro en familia, con la vela encendida, durante este
tiempo de cuaresma.
Oración final:
Jesús, no tienes manos. Tienes sólo nuestras manos,
para construir un mundo mejor.
Jesús, no tienes pies. Tienes solo nuestros pies,
para poner en marcha la libertad y el amor.
Jesús, no tienes labios. Tienes solo nuestros labios,
para anunciar por el mundo la Buena Noticia que nos diste.
Jesús, ayúdanos para que podamos ayudarte. Amén.
Eritrea
Yibuti
Cuerno
de
Etiopía
Somalia
África
3