¡Venga tu Reino! ¿Qué es depender de algo? ¿Qué son los trastornos de dependencia? Estimado P. John: Me gustaría conocer más sobre el tema de la dependencia. ¿Qué es un trastorno de dependencia y cuál es la diferencia, digamos, entre una necesidad normal de comida y el trastorno que nos ata a la comida? ¿Cómo puedo diferenciarlos? Un apego desordenado es la dependencia emocional, o psicológica, a una persona, objeto o actividad. Esta dependencia es más de lo que la razón dictaría. La razón, a los seres humanos, nos da acceso a la justa medida de las cosas: la medida en conformidad con el plan de Dios. ORDENADO significa RAZONABLE Por ejemplo, es razonable que los adultos duerman regularmente siete horas por la noche. Es razonable porque ése es, más o menos, el tiempo que la mayoría de la gente necesita para funcionar de manera saludable y normal. Si alguien habitualmente duerme doce horas por la noche, probablemente algo esté mal, ése es un patrón desordenado de sueño. Puede haber un problema fisiológico, o puede haber un problema emocional, y dormir demasiado es un escape de la realidad de una u otra manera. Si ese escape es un síntoma de un problema de conciencia, no resuelto, que ha hecho la vida insoportable, o simplemente si es un hábito bien desarrollado de la pereza y la comodidad, entonces bien podría ser un apego desordenado: Soy demasiado dependiente del sueño porque lo uso como un escudo para evitar enfrentar las exigencias ordinarias de vida. En cualquier caso, distinguir entre una dependencia sana y una malsana (desordenada) tiene que ver con lo que es razonable. Y lo que es razonable siempre está relacionado con – ordenado a ¿cuál es el propósito dado por Dios al objeto en cuestión? El sueño está destinado a ayudar a una persona a recuperar energía, no para evadir la responsabilidad. Es razonable, por poner otro ejemplo, que disfrutes de películas o deportes como una forma de recreación. Necesitamos descanso y la recreación para mantener un sano equilibrio psicológico y emocional. Pero cuando la pérdida de mi equipo de fútbol provoca caos en mi vida durante toda una semana, o cuando soy negligente y no cumplo otros deberes por no poder dejar de ver un juego, se puede decir que ahí hay un apego desordenado a esa forma de recreación. Si paso veinte horas a la semana jugando juegos de video en línea y sólo tres horas a la semana jugando con mis hijos o disfrutando de tiempo con mi esposa, es seguro decir que estoy dependiendo de una manera no razonable –desordenada- al videojuego. Veamos ahora tu ejemplo de la comida. El propósito de ésta es alimentarnos. Dependemos del alimento para vivir, y la vida es algo bueno, hemos sido creados a imagen de Dios. La bondad de la vida se refleja en el plan de Dios, en el placer que experimentamos al comer una buena comida. El placer no es malo ni pecaminoso, es parte de la experiencia de alimentarnos; es parte del plan de Dios para la vida. ¡Damos gloria a Dios al disfrutar de las cosas buenas de su creación! Por eso es razonable comer y disfrutar diversos tipos de alimentos, necesarios para estar bien nutridos. Centro de Recursos del Regnum Christi www.missionkits.org [email protected] ¡Venga tu Reino! Ahora bien, la cantidad razonable varía de acuerdo a cada individuo. Un leñador, que corta árboles nueve horas al día y mide dos metros, probablemente no va a tomar la misma dieta que una secretaria, que pasa mucho tiempo sentada en su oficina. Sabemos que nos estamos desviando del uso razonable de la comida si habitualmente comemos de tal forma que llegamos a dañar nuestra salud. Cuando el comer de más o cuando simplemente nos gratificamos con la comida interfiriendo en el sano funcionamiento de nuestra mente y cuerpo, en lugar de contribuir a ello, esto no es razonable - es desordenado -. Como en el caso de los trastornos del sueño, los trastornos en el comer pueden ser síntomas del pecado de la autogratificación (manifestación del pecado de sensualidad), pero también puede ser síntoma de un problema más profundo. El pecado habitual, por ejemplo, puede causar vanidad y orgullo al hacer de la comida, o de la apariencia física, una especie de ídolo. Por otro lado, heridas emocionales o psicológicas, cuando no han sido curadas por la gracia de Dios y en su amor incondicional, pueden encarnarse en el alma de la persona y eventualmente manifestarse en este tipo de trastornos. En el área de comer de más, que generalmente es un comportamiento compulsivo, no vacilaría en decir que el motivo por sí mismo es grave, porque es una amenaza directa e inmediata para la vida. También hay áreas relacionadas: el abuso del alcohol o drogas. El abuso de esas substancias pone tu vida (y la de otros) en peligro inminente y cuando alguien a propósito se emborracha o se droga, pierde o perjudica su uso de razón, se convierte a sí mismo en menos que humano, deformando la imagen de Dios. Es un buen tema para la dirección espiritual consultar sobre los apegos desordenados. UNA NOTA SOBRE EL AYUNO La Iglesia siempre ha alentado al ayuno voluntario como una disciplina espiritual. Sólo nos pide que ayunemos el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo, pero todos los escritores espirituales recomiendan incluir esta disciplina espiritual como parte regular de nuestras vidas. Haciendo pequeños sacrificios en cada comida o, por ejemplo, evitar bocadillos entre comidas o abstenerse de carne todos los viernes del año (no sólo durante el ayuno), es un medio para mantener una vida ordenada y alejada de los apegos desordenados. El ayuno es un sacrificio que da fruto cuando lo unimos con el sacrificio de Cristo en la Cruz. Fuente: Adaptación de artículo del P. Bartunek, L.C. publicado en http://spiritualdirection.com , 23 de enero de 2012. «La dirección espiritual también presta atención a los problemas, dificultades y dudas que afectan a cada persona, según sus circunstancias particulares, para brindarle la luz y el apoyo necesarios. Se pretende de este modo que el crecimiento espiritual no se retrase debido a situaciones o problemas no resueltos oportunamente, dada la compacta unidad interior del hombre.» (Manual del miembro del RC, n. 402). La Cuaresma es para arreglar la propia vida, ordenarla, cambiar de vida, para acercarnos al Señor. (P. Francisco, 18 de marzo 2014) ¡Fortalece tu corazón con un auténtico ayuno! Haz tu corazón semejante al de Jesús. Centro de Recursos del Regnum Christi www.missionkits.org [email protected]