286 .AHA13S KÜANA.LES DE HISTORIA NATURAL. ( Q) cion previsora, restrictiva y severa, que haga posible la mayor abundancia en las especies, la conservación de las mejores y el más útil aprovechamiento de todas. España posee aguas corrientes que por su pureza y por las condiciones del clima y déla Península, se prestan á la reproducción de gran parte de las especies conocidas, y principalmente de aquellas que por su valor y mérito, como sucede á las salmónidas, son codiciadas de todos, y abundan en otros países quizá menos favorecidos y propios para su desarrollo que el nuestro: y sin embargo, es notoria la escasez de pescado en casi todas nuestras a g u a s , la carencia absoluta en algunas que antes abundaban, la desaparición de las mejores especies en otras, y como consecuencia inmediata y natural de todo el exorbitante precio que alcanza el pescado de rio.: El mal es tan profundo, data de i tan larga fecha la incuria y el abandono, y de tal modo se ha generalizado el abuso y sedia hecho frecuente el olvido de cuantas disposiciones y medios podían-contribuir á la conservación y fomento de la pesca, que no bastan ya reformas parciales, son indispensables medidas radicales: se necesita una nueva legislación en armonía con los progresos realizados por la ciencia, y es preciso además ayudar por medios: artificiales la repoblación de nuestras aguas, porque la legislación, por completa y perfecta que sea, no puede reemplazar á la naturaleza, y es impotente para restituir á las aguas las especies que de ellas han desaparecido ó se han agotado, por la imprevisión, abandono y codicia de los hombres. La empresa es ardua, pero no imposible; antes bien de seguros resultados: si nos inspiramos en el ejemplo que nos ofrecen otras naciones, y seg-uimos con perseverancia los procedimientos por ellas adoptados en casos análogos, repoblando nuestros ríos, albuferas, lagunas y estanques. A este fin se dirigen las consideraciones que vamos á presentar, aun cuando no pretendemos hacerlas extensivas á todas ¡las especies que pueblan las aguas dulces, sino que las hemos de limitar principalmente á las salmónidas, que á la-vez que son las más codiciadas, producen mayores rendimientosiai l& X ; aoaut/rco siaiav \ sslasx svsxrxi 9Í>. •rolsv tía ¡.otbsmoainr -utóni oiaiíL ¿ oie-ide'í sbaéb sap ssissiniíae absaq bhbsK k oíao^A sbssb v , oljbsxn r ndlsu-i 9 M Q Í B O HOÍUI siaaao , 9vi8: *>h h nao s o k m q P.OÍHÍ» wwnhqatQD .oonte'úate'r'9?dia9Í9f<l t