Historia Marítima del Ecuador TOMO XIII Los Faros de la República del Ecuador 1841 - 1941 Por Eduardo Estrada Guzmán Miembro Correspondiente Academia Ecuatoriana de Historia Marítima Instituto de Historia Marítima Armada del Ecuador Guayaquil 2002 Créditos y Registros Historia Marítima del Ecuador Tomo XIII: Edición: Autor: Diagramación: Artes: Impresión: Corrección de pruebas: Índice Alfabético: Publicado por: Portada: Contraportada: © Derechos: © Derecho de Autor: ISBN: 2 Los Faros de la República del Ecuador 1841 - 1941 Primera Edición - INHIMA 2002 – Rev. 1, octubre de 2005. Eduardo Estrada Guzmán Autor Arq. Alfredo Ochoa Litardo Macformas Lorena Muñoz Mera - Ezio Garay Arellano Ab. Alicia Mosquera Sampedro, Patricia Morán Cañarte y Angélica Urresta Vásquez Instituto de Historia Marítima - INHIMA Recreación artística de la inauguración del primer faro de la Isla de Santa Clara. Constan el Capitán George Peacock, el Sr. Diego Girdon, el Comandante Juan María Doyle, el Comandante Lucas Rojas, marineros y carpinteros. Los buques son el vapor "Guayas" y la goleta "Diligencia." Arte del Arquitecto Alfredo Ochoa Litardo bajo la dirección del Autor Linterna Barbier & Fenestre del 2° Faro de Santa Clara, ubicada en el Salinas Yacht Club. Foto de la colección del Autor. Reservados por el Autor. Prohibida la reproducción total o parcial sin la autorización escrita del Autor 016506 del 18 de abril de 2002 9978-42-307-9 PRESENTACIÓN El Instituto de Historia Marítima ha tenido el acierto de publicar la obra "Los faros de la República del Ecuador 1841-1941", autoría del Sr. Eduardo Estrada Guzmán, miembro correspondiente de la Academia Ecuatoriana de Historia Marítima; libro que sale a la luz como tomo XIII de la Historia Marítima del Ecuador, en consideración al importante trabajo histórico presentado por este historiador, pues hay que reconocer que su contenido es el producto de su entrega total a una labor no por silenciosa, menos ardua y sacrificada. El autor incursiona en un tema poco trabajado de nuestra historia: los faros, cuya investigación permite que desde ya el lector se beneficie con el conocimiento de hechos y vivencias que de no ser por el empeño de aquel, seguirían ocultos, como lo han estado por muchos años. Desde que se instaló el primer faro en nuestras costas, esto es en la isla Santa Clara en 1841 y siguieron otros, vemos figurar personas que se dedicaron a la especial tarea de instalarlos, mantenerlos y vigilar su funcionamiento, pues la necesidad de una navegación segura hacía indispensable la presencia de su linterna luminosa en puntos o lugares establecidos, alertando al navegante ante cualquier peligro que pudiera malograr la nave y su misión. A los primeros faros, les seguirá la instalación del primer sistema de faros de la República en la década de 1870, y a éstos, los faros AGA desde 1921; esto representa un proceso con sus diferentes etapas, el cual se va detallando en este libro de forma explícita, para satisfacción de todos los que se introduzcan en este fascinante mundo de la Historia. Por lo expuesto, este Comando General se satisface en poner a vuestra disposición, distinguido lector, el sexto de trece tomos proyectados por el Instituto de Historia Marítima, en el que se pone en circulación aquello que permanecía inamovible en los archivos del tiempo. JORGE VILLACÍS GRANJA VICEALMIRANTE COMANDANTE GENERAL DE MARINA 3 4 DEDICATORIA Este libro está dedicado a la memoria de todos aquellos hombres y mujeres cuyas vidas se entrelazaron en algún momento con el Servicio de Faros del Ecuador. En especial, se dedica a: Los Guardafaros, quienes estaban en la línea del frente en cuanto a las vicisitudes del Servicio, A Ferdinand Dioudonnat, mecánico de faros, quien sacrificó su vida por los Faros del Ecuador, y A Lucas de Rojas, Oficial de la Marina de Guerra del Ecuador, quien dedicó gran parte de su dilatada carrera profesional al Servicio de Faros. 5 Notas Para la Lectura Este libro contiene abundantes citas para que, en la medida de lo posible, la historia se desarrolle en las palabras de los protagonistas. Todas las citas son textuales y están escritas tal cual las escribieron sus autores, al estilo de la época y con la ortografía que usaban. El texto del libro está respaldado por 548 documentos, cuyas referencias bibliográficas están en la parte correspondiente a las Notas - Fuentes Bibliográficas. Cada referencia está marcada con números en superíndice , luego o dentro del texto correspondiente. 123 El cargo de Capitán del Puerto se menciona muchas veces en el libro y por ello he optado por usarlo completo cuando se justifica y usar solo Capitán o la abreviatura Capt. cuando el cargo está claro. Este uso es sin tomar en cuenta el rango militar que pudiera tener la persona. En el caso de los rangos militares, cuando ya se ha establecido el rango de una persona, de ese punto en adelante, por lo general, se usa el rango abreviado o sus siglas. Lo mismo ocurre con los rangos políticoadministrativos de los civiles. Durante algún tiempo se acostumbró usar indistintamente rangos del Ejército para la Marina. Así, por ejemplo, el capitán de navío Lucas Rojas a veces era referido como coronel. A los contralmirantes se los refería como general de marina. El GLOSARIO cuenta con definiciones para la mayoría de los términos especializados usados en el libro. 6 TABLA DE CONTENIDO LOS FAROS DE LA REPÚBLICA DEL ECUADOR.................................... 1 Créditos y Registros...................................................................................................................... 2 PRESENTACIÓN...............................................................................................................................3 DEDICATORIA..................................................................................................................................5 Notas Para la Lectura.................................................................................................................... 6 TABLA DE CONTENIDO.................................................................................................................7 PRÓLOGO........................................................................................................................................ 11 INTRODUCCIÓN Y AGRADECIMIENTOS............................................................................... 17 Parte 1.- Antecedentes Sobre Faros en General.............................................................................21 Capítulo 1.- Definición de FARO................................................................................................... 23 Capítulo 2.- Historia General.......................................................................................................... 24 Capítulo 3.- Los Componentes del Faro......................................................................................... 28 La Torre...................................................................................................................................... 28 La Fuente de Luz.........................................................................................................................29 Capítulo 4.- Las Lámparas Modernas............................................................................................. 31 La Lámpara Argand.................................................................................................................... 31 Características de la Luz............................................................................................................. 32 Mecanismos de Rotación............................................................................................................ 32 Capítulo 5.- La Óptica en los Faros................................................................................................ 33 El Lente Fresnel.......................................................................................................................... 33 Los Tipos de Lente Fresnel.........................................................................................................35 Los Órdenes de Lente Fresnel.....................................................................................................36 Los Fabricantes de Lentes Fresnel.............................................................................................. 37 El Cristal Óptico......................................................................................................................... 38 Capítulo 6.- Los Sistemas de Faros en el Mundo...........................................................................39 Los Comienzos............................................................................................................................39 La Época de Oro......................................................................................................................... 41 El Ocaso...................................................................................................................................... 42 Parte 2.- Antes de la República.......................................................................................................45 Capítulo 7.- Las Balizas y los Fanales Antes de la República........................................................ 47 La Colonia...................................................................................................................................47 Guayaquil Independiente............................................................................................................ 48 La Gran Colombia.......................................................................................................................49 Parte 3.- El Primer Faro de la República del Ecuador..................................................................51 La Zona Donde se Desarrolla la Mayor Parte de Esta Historia.................................................. 52 Capítulo 8.- Los Antecedentes - 1833 a 1841.................................................................................53 Vicente Rocafuerte Regresa al Ecuador......................................................................................53 7 Capítulo 9.- Relato Sobre el 1° Faro...............................................................................................59 Capítulo 10.- El Primer Faro - 1841 a 1872................................................................................... 70 Parte 4.- El Primer Sistema de Faros de la República..................................................................85 ............................................................................................................................................................85 Capítulo 11.- Los Antecedentes - 1869 a 1871...............................................................................87 La Convención Nacional Establece Faros...................................................................................87 Se Piden Faros.............................................................................................................................89 Se Contrata un Experto............................................................................................................... 90 Capítulo 12.- Llegan los Faros - 1872.............................................................................................93 Llega el Experto.......................................................................................................................... 93 Los 9 Puntos del Mecánico Francés............................................................................................95 El Informe del Mecánico. ...........................................................................................................99 Llegan los Aparatos.................................................................................................................. 105 Capítulo 13.- Se Instalan el Faro de Santa Clara y las Boyas....................................................... 108 Armado y Preparación de los Aparatos.....................................................................................108 Se Instala el Faro de Santa Clara.............................................................................................. 111 Se Instalan las Primeras 3 Boyas con Campana........................................................................124 La Torre.................................................................................................................................... 127 El Aparato de 3° Orden.............................................................................................................128 Capítulo 14.- Se Instala el Faro de Punta Mandinga.....................................................................134 Listado de Faros y Boyas Instalados y por Instalar...................................................................136 Se Instala la 4° Boya con Campana.......................................................................................... 138 Capítulo 15.- Se Instalan las Luces de Puerto...............................................................................141 Se Instala la Luz de Puerto de Manta........................................................................................141 Se Insiste en el Reglamento...................................................................................................... 142 Se Instala la Luz de Puerto de Esmeraldas............................................................................... 147 Asalto al Faro de Santa Clara....................................................................................................147 Se Presenta un Segundo Reglamento........................................................................................ 158 Capítulo 16.- Se Instala el Faro de Punta Arenas......................................................................... 160 Capítulo 17.- Actividades Post-Instalación...................................................................................171 Informes al Congreso................................................................................................................ 171 El Presidente Informó:.............................................................................................................. 172 El Ministro de Hacienda Informó:............................................................................................ 172 Empieza a Decaer la Estrella del Mecánico Francés................................................................ 173 El Faro de Punta Española........................................................................................................ 177 Una Mala e Inesperada Nueva.................................................................................................. 189 Parte 5.- Los Faros en Servicio .................................................................................................... 191 Capítulo 18.- El Servicio de Rutina.............................................................................................. 193 Capítulo 19.- La Inspección General de Faros..............................................................................202 Lucas de Rojas es Inspector General de Faros..........................................................................202 Capítulo 20.- Se Instalan Faros en Jambelí y Santa Elena............................................................ 213 Capítulo 21.- Se Reglamenta el Servicio...................................................................................... 218 El Primer Reglamento de Faros - 1883.....................................................................................219 El Inspector Tolera la Política.................................................................................................. 220 Capítulo 22.- Trabajo Reglamentado............................................................................................223 Francisco Pacheco es el Inspector General de Faros................................................................ 223 Se Emite un Nuevo Reglamento para los Faros - 1884............................................................ 223 El Personal de Guardafaros, Problemas Permanentes.............................................................. 225 8 Llegan y se Instalan Faros Nuevos y Refaccionados................................................................ 225 El Primer Faro de las Islas Galápagos...................................................................................... 228 Informe de 1888........................................................................................................................229 Francisco Lecaro es el Inspector General de Faros.................................................................. 232 Los Faros y los Desastres Naturales..........................................................................................233 La Balandra “Santa Clara.”.......................................................................................................233 Los Problemas con el Personal de Guardafaros Continúan...................................................... 234 El Presidente Flores-Jijón Informa........................................................................................... 234 La Jurisdicción del Inspector General y los Gobernadores.......................................................236 Torre de Punta Arenas Deteriorada.......................................................................................... 237 Incendio en Santa Clara............................................................................................................ 238 Faro de Santa Elena Continúa con Problemas de Techado.......................................................239 Informe Ministerial de 1890..................................................................................................... 240 Informe Ministerial de 1892..................................................................................................... 241 Carta # 1391, Approaches to Guayaquil................................................................................... 241 Una Polémica por la Prensa – Santa Clara Apagado................................................................ 243 Fernando Pareja es, por breve tiempo, Inspector General........................................................ 246 El Ecuador en Chicago, 1894....................................................................................................246 Capítulo 23.- La Etapa Liberal......................................................................................................247 Francisco Fernández de la Madrid Bello es Inspector General................................................ 247 Leyes que Afectaban a los Faros...............................................................................................250 Ley de Presupuesto................................................................................................................... 250 Ley de Aduana.......................................................................................................................... 251 Decreto Elimina la Inspección General de Faros......................................................................251 Informes de 1898...................................................................................................................... 252 Informe de 1899 - Algo Insólito............................................................................................... 258 Informe de 1900........................................................................................................................260 Informe de 1901........................................................................................................................261 Informe de 1902........................................................................................................................261 Informe de 1903........................................................................................................................262 Informe de 1904........................................................................................................................262 Informe de 1905........................................................................................................................265 Reglamento de Policía Marítima Incluye a los Faros - 1906.................................................... 267 Informe de 1906........................................................................................................................268 Informe de 1907-1908...............................................................................................................269 Un Nuevo Reglamento para los Faros - 1909........................................................................... 273 Informe de 1909........................................................................................................................273 Informe de 1910........................................................................................................................274 Informe de 1911........................................................................................................................275 Informe de 1912........................................................................................................................276 Informe de 1913........................................................................................................................277 Geo Chambers Vivero es Inspector de Faros............................................................................277 Informe de 1914........................................................................................................................279 Informe de 1915........................................................................................................................281 Informes de 1916...................................................................................................................... 283 Informe de 1917........................................................................................................................283 Informes de 1918 y 1919.......................................................................................................... 283 Parte 6.- Los Faros AGA............................................................................................................... 285 Capítulo 24.- Los Faros AGA....................................................................................................... 287 Antecedentes............................................................................................................................. 287 9 Preparación para la Llegada de los Faros................................................................................. 289 Informe de 1921........................................................................................................................290 Continúan los Preparativos para Recibir los Faros AGA..........................................................291 El Fin de una Etapa... y Comienzo de Otra...............................................................................294 Informe de 1922........................................................................................................................295 Trabajos Rutinarios...................................................................................................................295 El Relato de Mr. Ellwe..............................................................................................................297 Informe de 1923........................................................................................................................303 Informe de 1924........................................................................................................................304 Rafael Pino Roca es Inspector General de Faros...................................................................... 306 Se Establece, por Decreto, la Inspección de Faros................................................................... 307 Se Establece un Nuevo Reglamento......................................................................................... 309 Informe de 1928........................................................................................................................309 Informe de 1930........................................................................................................................310 Informe de 1932........................................................................................................................310 Informe de 1933........................................................................................................................312 Informe de 1935........................................................................................................................313 Informe de 1938........................................................................................................................314 Informe de 1939........................................................................................................................314 Informe de 1940........................................................................................................................315 Informe de 1941........................................................................................................................315 Capítulo 25.- Preservando el Pasado............................................................................................ 316 Epílogo............................................................................................................................................. 319 Sobre el Autor........................................................................................................................... 321 Post Scriptum............................................................................................................................ 322 ANEXOS.......................................................................................................................................... 323 Anexo A........................................................................................................................................ 325 Anexo B........................................................................................................................................ 326 Anexo C........................................................................................................................................ 330 Anexo D........................................................................................................................................ 336 Anexo E........................................................................................................................................ 338 GLOSARIO..................................................................................................................................... 340 NOTAS – Fuentes Bibliográficas...................................................................................................348 ÍNDICE DE IMÁGENES............................................................................................................... 372 ÍNDICE ALFABÉTICO.................................................................................................................376 10 PRÓLOGO El autor de este libro, señor Eduardo Estrada Guzmán con su proverbial amabilidad, me ha dado el privilegio de escribir este corto prólogo en consideración supongo, a mi calidad de Director del Instituto de Historia Marítima, pedido que he atendido con mucho agrado, pero teniendo siempre presente que este libro, resultado de la extensa y fructífera investigación realizada por su autor, no necesita de prólogo. Sin embargo atendiendo a su pedido me concretaré a exponer algunos hechos que por su importancia afirma lo que ha sido y es el trabajo silencioso pero transcendente de la Marina de Guerra Nacional, que a más de su misión eterna y principal: La defensa de la soberanía del Ecuador en su espacio marítimo, ha contribuido permanentemente al desarrollo del Estado Ecuatoriano, lo que se manifiesta con mayor nitidez cuando se conoce su historia como mantenedora y propulsora del Servicio de Faros. Es por todo esto que la investigación de la Historia Marítima y Naval del Ecuador debe interesarse por el proceso seguido en el establecimiento y mantenimiento de los faros, balizas y boyas de la costa y Golfo de Guayaquil y de los hombres que han realizado estas tareas; que han trabajado sin esperar más recompensas que su satisfacción por el cumplimiento del deber. La importancia que en general tienen todos los hechos relativos a este servicio es tal por su trascendencia en la navegación, el comercio y la economía de las naciones, aspectos todos relacionados entre sí. Sin un buen servicio de faros y boyas no se puede pretender que haya seguridad para la navegación de los buques que arriban a sus puertos, lo que determinaría a la vez que el comercio por vía marítima sea poco próspero con gravísimo perjuicio de sus economías. Por otro lado, para la Historia Naval del Ecuador, es decir de su Armada, el conocimiento de un pasado a veces ignorado por las nuevas generaciones es de suma importancia, especialmente ahora que se habla de cambiar los roles de las instituciones armadas de la nación. Al citar los conceptos de seguridad y desarrollo, hoy se piensa en dos cosas antagónicas, cuando en realidad son dos aspectos complementarios. Así lo ha entendido siempre la Armada Nacional, y especialmente debemos recordar que el mantenimiento y cuidado de los faros estuvo siempre a cargo, directa o 11 indirectamente de la Armada, actividad que ha sido muchas veces considerada prioritaria por algunos Gobiernos que equivocadamente desestimaron la importancia del poder naval en la problemática de la seguridad nacional. El Presidente Rocafuerte al ordenar al General de Marina Leonardo Stagg la elaboración de un proyecto de obras necesarias para la seguridad de la navegación de los buques que entraban al puerto de Guayaquil, y en cuyo numeral 1 disponía la instalación de un faro en la isla Sta. Clara o el Muerto, puso el primer hito en la historia de los faros de la costa del Ecuador. Sin embargo no fue sino en 1841 cuando se instaló dicho faro, siendo el señor Rocafuerte gobernador de la provincia del Guayas. Uno de los involucrados en estos trabajos fue el Teniente de Navío Lucas Rojas. Hasta 1939 no hubo un organismo especial y único encargado de la instalación y mantenimiento de los faros. Eran los gobernadores de las provincias los responsables del buen funcionamiento de los faros instalados en los sectores de la costa de sus respectivas jurisdicciones, pero el faro de la isla de La Plata estaba a cargo la del Gobernador del Guayas, mientras los otros faros de la costa manabita si estaban bajo la jurisdicción del Gobernador de Manabí. Los guardafaros que eran nombrados por los respectivos gobernadores dependían por lo tanto de estas autoridades, pero en los informes que anualmente presentaban los jefes de la Marina de Guerra constaba casi siempre una parte dedicada a los faros y generalmente la instalación de un nuevo faro demandó la intervención de un buque de la Armada. En 1888, por ejemplo, el Capitán de Navío Nicolás Bayona Ors en ejercicio de su función de Comandante de Marina, informaban que eran 9 los faros de la costa y golfo de Guayaquil, y también hacía un llamado a la atención de quienes tenían la responsabilidad de conferir nombramiento de guardafaros, opinando que debían ser éstas, personas que hubieran servido en la Escuadra o en dependencias de la Marina de Guerra porque eran los que conocían de la importancia de los faros para la seguridad de la navegación. En ese mismo año el Ministro de Guerra y Marina, General José María Sarasti en su informe al Congreso Nacional anexa el del Inspector General de Faros, Francisco Pacheco, quien en forma muy precisa y detallada da a conocer el estado de desarrollo del servicio de faros, desde que había asumido su cargo en 1883. 12 Diez años después el Capitán del Puerto de Guayaquil, Capitán de Navío Francisco Fernández Madrid Bello presentaba su informe al Ministro de Guerra y Marina, General Nicanor Arellano quien a su vez lo incluyó en el suyo al Congreso Nacional de 1898, sobre los faros que ya estaban en servicio y sobre otros que se iban a instalar. Este documento que tiene por título "Informe del Capitán del Puerto de Guayaquil sobre los faros que están a su cargo" se publicó en la revista del Instituto de Historia Marítima del mes de julio de 1987. El Capitán de Navío Fernández Madrid Bello dice, al mencionar el faro de Santa Clara, que éste fue instalado el año 1871, lo que significa que hasta ese año había sido reemplazado por una o más veces el primer faro instalado en 1841. Los faros que se menciona en este informe son los siguientes: Faros de Santa Clara, Punta Arenas y Santa Elena; fanales de Isla de La Plata, de Punta Española, de Punta Mandinga, de Data y de San Cristóbal (Galápagos). Respecto a los faros de Manta y Esmeraldas dice que están bajo la inspección de los Capitanes de esos puertos y que el de Manta esta bien servido pero que el de Esmeraldas, tiene noticias, esta apagado. Además dice que hay necesidad de instalar faros en la punta de Jambelí y en el Cabo de San Francisco y fanales en Cabo Pasado, Punta Salinas, Isla Verde, Punta de Piedra y Sono (La Angostura). En 1918 se incluye anexo al informe que el Ministro de Guerra y Marina presenta a la Nación un cuadro del "Escalafón de los señores guardafaros al servicio de la Armada Nacional". Por este documento se puede conocer los nombres de algunas de las personas que desempeñaron las funciones de guardafaros y en que faro lo hicieron. Al reemplazarse los antiguos faros que iluminaron la costa ecuatoriana hasta el año de 1921, por los del sistema AGA el oficio de guardafaros dejó de tener vigencia porque ya no era necesario la vigilancia permanente de los aparatos de iluminación y de los mecanismos de rotación de los 13 antiguos faros, y porque los nuevos solo requerían inspecciones cada cinco y seis meses para efectuar el cambio de los cilindros de gas acetileno. Así pasaba a la historia el sacrificado oficio de guardafaro que había sido motivo de inspiración de quienes escribieron románticos relatos sobre este tema. En las páginas de este libro, el señor Eduardo Estrada recoge todos los hechos importantes que han ido marcando el proceso histórico del Servicio de Faros y los presenta en forma amena y documentada, de tal manera que su lectura constituye un placer y una obligación para quienes aspiramos a conocer la verdadera historia de nuestra Nación y en este caso particular la de la Institución Naval en una de sus facetas más destacadas en el área del desarrollo nacional, puesto que, las relaciones que hay entre este servicio y la navegación, el comercio y la economía del pueblo ecuatoriano son claramente percibidas a través de una rápida reflexión. Sin alinearme con los que pensaron que la Misión de la Armada era fundamentalmente la de contribuir al desarrollo económico del Ecuador, y no su legítima de seguridad, si considero que, habiendo sido las tareas relacionadas con el mantenimiento de los faros, balizas y boyas las más frecuentes en el trabajo diario del personal de la Marina del Ecuador, la investigación y difusión de este pasado histórico es contribución importantísima para descubrir la verdadera identidad de nuestra Armada Nacional. Finalmente como afirmación de lo arriba expresado debo recordar que en el mes de julio de 1941 el glorioso cañonero "Calderón", en vísperas del combate de Jambelí, estaba alistándose hasta pocos días antes del 25 de ese mes para su habitual recorrido de los faros y boyas de la costa y del Golfo de Guayaquil. Y que después que se suspendieron las acciones militares en la frontera por intervención de los países mediadores, el aviso "Atahualpa" reinició su rutinaria tarea de mantenimiento y reparación de los faros y boyas. Con ese fin, este buque zarpó de Guayaquil el 9 de septiembre de 1941, al mando del Alférez César Endara, portando un salvo conducto del cónsul de los Estados Unidos como garantía de su libre navegación por el Golfo de Guayaquil. 14 Carlos Monteverde Granados Contralmirante (s.p.) Director del Instituto de Historia Marítima Presidente de la Academia Ecuatoriana de Historia Marítima 15 16 INTRODUCCIÓN Y AGRADECIMIENTOS ¿¡Faros!? Esa interrogación exclamativa fue, invariablemente, la primera reacción que encontré en la fase investigativa de este libro, y aún en la de desarrollo del texto. ¡Qué tema más curioso! Era frecuentemente la segunda, y luego recibía un apoyo increíble por parte del personal de todas las bibliotecas, archivos y otras fuentes de información a las que recurrí. La reacción que me animó a dar el salto y aceptar el reto de escribir este libro fue la de Mariana Ochoa, encargada del Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil. Su reacción fue: "¿¡Faros!? ¡Aquí tenemos maravillas!" Y, en efecto, maravillas tenían en documentación que ha sido el pilar central de este trabajo. Más adelante agradezco a las demás personas e instituciones que me han ayudado y facilitado el desarrollo de este libro, que ha sido la apertura de una página de nuestra historia que, tal cual una puerta, hasta ahora había permanecido casi cerrada, con sólo una pequeña rendija abierta. Mi primer encuentro con un faro ocurrió entre 1956 y 1958, cuando tenía entre tres y cinco años. Una tarde en que había regata de veleros en el río Guayas, acudí a la sede del Guayaquil Yacht Club en compañía de mis padres. Estando en la terraza al pie del río al caer el sol, súbitamente se encendió el faro que estaba en una pequeña torre y quedé embelesado al ver este maravilloso aparato que parecía un diamante rotatorio, iluminado desde adentro. En ese momento no tenía idea de lo que era un faro, pero el aparato me fascinó y el resto de la noche no quité los ojos de él. Luego, cada vez que acudía al Club, tenía una visita obligada al faro para maravillarme nuevamente con su belleza. Desde ese encuentro, los faros han sido un atractivo personal y cada vez que ha habido la oportunidad de visitar alguno, no la he perdido. Este libro se inició en septiembre de 2001 como una investigación histórica sobre el faro del Guayaquil Yacht Club, que pronto descubrí había sido el 2° faro de la Isla de Santa Clara. La riqueza de información y la mención de otros faros me llevó a ir ampliando la investigación, hasta que me di cuenta de que había suficiente material para escribir un libro sobre el primer siglo de los faros de la República. 17 Esta idea fue apoyada con entusiasmo por el Instituto de Historia Marítima y en especial por su Director, el Contralmirante en servicio pasivo Carlos Monteverde Granados, y el Subdirector, Capitán de Fragata en servicio pasivo Mariano Sánchez Bravo. La experiencia ha sido maravillosa, pues cada documento que se localizaba enriquecía más la historia y algunos aparecieron como por fuerza del destino, después de haber estado inaccesibles durante décadas. El apoyo que recibía en algunas ocasiones me dejaba un poco asombrado y sin palabras. Tal fue el caso de la colaboración prestada por Linde Gas A.G., actuales propietarios de AGA. AGA no tiene el negocio de faros desde hace mucho tiempo, pero se mantienen los archivos de esa faceta de la empresa en una bodega ubicada en Lidingö, Suecia. La sede de Linde Gas está en Munich, Alemania. Cuando hice contacto con ellos, inicialmente no se veía muy positiva la posibilidad de obtener información histórica. Maris Sedlenieks, funcionario a cargo, me explicó que él estaba en Munich y que iba muy poco a Suecia y menos a Lidingö. Sin embargo, en un viaje a Estocolmo, él comunicó mi pedido a Anders Andersson y éste se ofreció para ir a Lidingö a buscar lo que yo había pedido. Lo mismo hizo Anders Takman. Ellos viajaron a las bodegas de archivos en tres ocasiones en el lapso de cinco meses, para buscar los documentos y fotografías que yo necesitaba. El resultado de tanta generosidad lo verán ustedes en el libro. AGA tenía más información que la existente en los archivos de nuestro país. ¿El costo de esta investigación? ¡Muchas gracias! de mi parte y tres viajes con viáticos, pasajes, sueldos, etc. para Linde Gas A.G. ¿Qué obtendrán como empresa? La satisfacción de saber que ayudaron a un investigador de historia para que su relato sea veraz, y que ustedes sepan que esa empresa tuvo ese gesto de generosidad. Solo en un detalle fallaron: No encontraron el nombre completo de Mr. Ellwe, instalador de los faros AGA originales. ¿Cómo agradecer tanta generosidad? Ningún libro histórico es realizable sin el apoyo y la colaboración de muchas personas y éste no ha sido la excepción; por lo tanto, a continuación agradezco a quienes han apoyado y colaborado para que sea realidad. Todos ellos son parte de este esfuerzo. 18 AGRADECIMIENTOS A mi esposa Leticia, por su santa paciencia para aguantar mis “humores literarios,” y por su entusiasmo y apoyo. A mis hijos y mi familia cercana, quienes de seguro están “hartos de faros,” por su paciencia. A mi tío Julio Estrada Ycaza, por su ejemplo. A cada paso de la investigación y desarrollo del texto podía apreciar mejor su altísima calidad como investigador e historiador. A Marianita Ochoa. Sin su conocimiento enciclopédico del contenido del Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil, este libro no habría sido posible. Mireya Fernández, su asistente, también colaboró. A Ezio Garay Arellano, por su trabajo investigativo y de edición. Al CALM (sp) Carlos Monteverde Granados, por su apoyo. Al CPFG (sp) Mariano Sánchez Bravo, por su asesoría en investigación. A Angélica, Patricia y el resto del personal del Instituto de Historia Marítima. A Honorio Granja Azanza, por su apoyo desde el Archivo Histórico del Banco Central de Ecuador, en Quito. A doña Grecia Vasco de Escudero y el personal del Archivo Nacional, en Quito. Al Rev. Iván Lucero S.J., Director; doña Alicia Andrade Stacey, Jefe del Área de Biblioteca, y el personal de la Biblioteca Ecuatoriana Aurelio Espinoza Polit, en Quito. Al personal del Archivo del Congreso Nacional. A José Antonio Gómez Iturralde y el personal del Archivo Histórico del Guayas. A los Srs. Oswaldo Peñaherrera y Jaime Noboa, del Archivo de la Presidencia de la República. A Cecilia Estrada Solá y Antonieta Palacios, de la Biblioteca de Julio Estrada Ycaza. A Alfredo Ochoa, por su esmero en las artes que contiene el libro. A Wayne Wheeler, Presidente de la United States Lighthouse Society, por su apoyo y clarificaciones de información técnica e histórica general. A Mme. Catherine Masteau, del Fonds Ancien de la Escuela de Puentes y Caminos de Francia, quien dió luces sobre el fabricante de algunos faros y proveyó información y documentos. 19 A Maris Sedlenieks, Anders Andersson y Anders Takman, de Linde Gas A.G., por la información y documentos sobre los faros AGA. Al United Kingdom Hydrographic Office, por las varias ediciones de la carta 586 del Almirantazgo Británico. A mi tío José Urbina Ortiz, por sus traducciones a y del francés. A Guillermo de Rubira Orellana, por su entusiasmo que me levantaba el ánimo cada vez que éste flaqueaba. A Guillermo Arosemena Arosemena, por la información económica relacionada con los faros y su período histórico. Al Capitán de Marina Mercante Alberto Dillon, por transmitirme su sentir por los faros, como "Viejo Lobo de Mar." A mis sobrinos Eddie y Carol Hidalgo, por cumplir con entusiasmo las misiones encargadas a ellos, de investigación sobre la historia de faros de la costa sur de California. A mis primos Sergio y Maria Victoria Vinueza, por su apoyo logístico. A Lorena Muñoz Mera, por la revisión gramatical y ortográfica del libro. Al Doctor Carlos Matamoros Trujillo, por los derroteros sobre el Faro de Puerto Chico. Y, si alguien se me escapa, le pido disculpas por la omisión. A todos ellos, muchísimas gracias. El Autor 20 Parte 1.- Antecedentes Sobre Faros en General 21 22 Capítulo 1.- Definición de FARO Hay varias definiciones de lo que es un faro. El Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española lo define así en su primera acepción: "Torre alta en las costas, con luz en su parte superior, para que durante la noche sirva de señal a los navegantes." El Pequeño Larousse Técnico define al faro de mar como: "Torre alta construida sobre un islote o escollo, y también en los puertos o en el litoral, que lleva en su parte superior una luz potente para señalar los peligros a los navegantes o permitirles identificar las costas y entrar por la noche en los puertos." Tal vez la mejor definición para el propósito de este libro es la que nos ofrece la Enciclopedia General del Mar: "FARO (del lat. Pharus, y éste del gr. Pharos, isla de la desembocadura del Nilo que dio nombre al primero que se alzó en ella). Nav. e Ing. Construcción costera que sirve para mantener una luz de apariencia característica destinada a orientar a los navegantes." Y, en las palabras de un marino mercante, el Capitán Alberto Dillon, el faro es: "Una Luz que Salva Almas y Vidas. Por siempre ha sido la luz la guía del hombre por alcanzar su prosperidad. El tramo más peligroso de una travesía oceánica son las últimas millas, cuando la nave se aproxima a tierra. El Capitán espera avistar en cualquier momento la luz de un faro, que le guiará al puerto seguro. Gracias a esta luz las embarcaciones arriban a su destino." 23 Capítulo 2.- Historia General Desde que comerciantes marítimos empezaron a extender sus rutas de navegación a través del mar Mediterráneo, y antes de que la historia registre sus proezas navales, se determinó la necesidad de señalizar ciertos accidentes geográficos que representaban peligros para la navegación, así como señalar la entrada y ubicación de puertos importantes. Esta señalización era especialmente importante durante las noches y cuando los barcos se alejaban de la costa para luego regresar, o entrar a un puerto extraño. En términos generales, se puede distinguir cuatro períodos en lo relativo a la señalización para la navegación marítima: El primero cubre antes de la construcción del Faro de Alejandría; el segundo cubre desde la construcción de ese faro hasta el Siglo XVIII d.C.; el tercero desde ese siglo hasta la aplicación de la electrónica a la navegación; y, el cuarto, desde esa aplicación hasta el presente. Homero, en la Ilíada, escrita posiblemente en el Siglo VIII a.C., en el Canto XIX menciona señales de fuego al comparar el brillo que irradiaba el escudo de Aquiles con el que despedía el fuego que ardía en lo alto de una montaña solitaria que se presentaba a la vista del navegante. Leschés, poeta griego que vivió en la época de las 30° Olimpiadas (circa 656 a.C.), menciona una torre de fuego en el promontorio de Sigé. El sabio Montfaucón, en su gran obra “La Antiguedad Explicada,” menciona también la torre en el promontorio de Sigé. 284 Hay indicios históricos de que en la época de la Guerra de Troya existía un faro en la entrada a Helesponto. 24 Las primeras edificaciones específicas para faros que registró la historia, fueron construidas por los griegos en el Siglo VI a.C. con el fin de marcar la entrada a los puertos, como el de Pireo. Estos faros eran de fuego de leña en un bracero abierto. En el Siglo III a.C. fue construido, en bronce, el Coloso de Rodas, que marcaba la entrada al puerto del mismo nombre; pero esta estatua tuvo una corta duración, pues fue destruida por un terremoto a los pocos años. Si bien servía de faro diurno, no hay registro histórico alguno de que haya contenido una luz para la noche. Ptolomeo II Filadelfo, faraón macedonio de Egipto desde el año 285 hasta 246 a.C. construyó, en la isla de Pharos, en la desembocadura del Nilo, frente a Alejandría, el célebre Faro de Alejandría, tal vez el más famoso de la historia. El edificio cubierto de mármol blanco, diseñado por el arquitecto Sostrato, tomó el nombre griego de la isla y ese nombre se convirtió en el genérico para ese tipo de edificación. Su construcción en el siglo III a.C., marcó un hito e inició un período, tanto en tecnología de navegación como en arquitectura. La torre fue considerada entre las maravillas del mundo antiguo y su luz sirvió de ejemplo para la instalación de otros faros. El Faro de Alejandría prestó servicio, con algunas interrupciones, por más de mil quinientos años, hasta su destrucción por un terremoto en el Siglo XIV d.C. 25 Existe una anécdota sobre este faro, originada luego de investigaciones arqueológicas relativamente recientes. Resulta que el faraón ordenó se inscriba su nombre como constructor de la obra y el arquitecto cumplió con la orden, pero a su manera. Sostrato hizo tallar la siguiente inscripción en la piedra: "Sostrato de Cnido, hijo de Daphne, a los Dioses salvadores, a favor de aquellos que van sobre el mar" y sobre esta inscripción se fundió, en mampostería, lo ordenado por el faraón. Siglos después, cuando la torre estaba en ruinas, lo arqueólogos encontraron la inscripción tallada pero ya no el crédito al faraón. Sostrato había logrado dejar su nombre inscrito en la piedra para la posteridad, mientras la inscripción del faraón desapareció con el material efímero. Como dice el dicho: "Quien ríe último ríe mejor." 389 En el Bósforo de Tracia existió la Torre de Timea, que menciona Dionisio de Bizancio, escritor del siglo I d.C. Los romanos siguieron el ejemplo de los griegos y se convirtieron en prolíficos constructores de faros, que ayudaron a sus naves en la expansión del Imperio. Ellos emplearon técnicas de construcción que aún se aplican, como el uso de diversos cuerpos que iban disminuyendo a medida que se elevaban. La planta era en unos cuadrada, en otros circular o poligonal, rematando su parte superior con una plataforma en que se encendía el bracero al aire libre o bajo una bóveda abierta. De esa era sobrevive aún en La Coruña, España, la Torre de Hércules, construida por Gaius Sevius Lupus en el Siglo IV d.C. Este faro, que en su inicio contaba con un bracero de leña como fuente de luz, está aún en servicio, diez y siete siglos después, por supuesto con mejoras en el edificio e iluminación de última tecnología. Es el faro activo más antiguo del mundo y aún se pueden observar su partes romanas en los muros interiores. En Dover, Inglaterra, se pueden apreciar las ruinas de un faro romano que tiene forma de una torre octogonal. Otros faros famosos construidos por los romanos fueron destruidos al declinar el Imperio occidental, entre estos el 26 de Ostia, cerca de Roma, que tenía una gigantesca estatua del Emperador Claudio; los de Pisa, Ravena, Centumcellae y Leptis Magna. Un faro construido en Francia para celebrar una victoria del Emperador Calígula fue la Tour d’Ordre, que existió hasta 1.644. Después de la caída del Imperio Romano de occidente, se entró en el Oscurantismo, causado por el retroceso de la civilización europea. Este período medieval empezó a declinar a fines del Siglo XII d.C., cuando se dieron eventos de evolución social que culminarían, en el Siglo XIV d.C., con el comienzo del Renacimiento. Si bien estos términos están ya en desuso por parte de historiadores, se ajustan muy bien a la historia de los faros, pues luego de la proliferación de faros en la era de los griegos y los romanos, este tipo de edificación prácticamente desapareció hasta el Renacimiento, en que resurgieron. En el Segundo Milenio de la era Cristiana, cuando comenzó nuevamente la construcción de faros, se construyó en Génova, Italia, en el Siglo XII d.C., el Capo di Faro, mejor conocido como “La Lanterna.” En 1.449, el Guardafaro de “La Lanterna” era Antonio Columbo, tío de un jovencito llamado Cristóforo. También se construyeron faros en Meloria (c. 1.157) y Messina (c. 1.194). El de Meloria fue el primer faro construido en un bajo alejado de la costa y el de Messina guiaba el paso de naves a través del estrecho del mismo nombre. En el Siglo XVIII d.C., con la aplicación conjunta de varios inventos como: Técnicas modernas de construcción de torres, lámparas eficientes de aceite animal y vegetal, vidrio transparente, reflectores parabólicos y mecanismos de rotación, se aceleró la construcción de faros en Europa. En el Siglo XIX d.C., con la aplicación de la óptica y mejoras en las lámparas, se aceleró aún 27 más la construcción de faros alrededor del mundo, llegando a su apogeo a fines de ese siglo. Ya en el Siglo XX, después de 1945, se empezó a aplicar las ondas hertzianas a la navegación, utilizando radiofaros que funcionaban en conjunto con las luces costeras. En la actualidad, con los sistemas satelitales de navegación y la extraordinaria precisión que éstos permiten en la determinación de la ubicación geográfica de las naves, los faros han perdido preeminencia. Sin embargo, su luz que ilumina en la obscuridad, sigue brindando seguridad a los navegantes que no cuentan con equipos electrónicos de navegación. Capítulo 3.- Los Componentes del Faro El faro tiene dos componentes elementales que van uno con otro de manera inseparable. Son la torre, que le proporciona soporte y altura al segundo elemento, que es la luz. La Torre. La torre es una construcción que debe ser lo suficientemente sólida para cumplir su propósito y que debe tener las dimensiones adecuadas para alcanzar la altura deseada sobre el nivel del mar. La altura de la torre depende del alcance geográfico o geométrico que se desee dar a la luz y del sitio o la cota del lugar donde se ubica. La altura también tiene relación con la potencia lumínica de la luz. Una luz más potente deberá tener una mayor altura sobre el nivel del mar para tener mayor alcance. Durante el día, en que la luz no funciona, la forma y el patrón de pintura de la torre identifican al faro. Los materiales de construcción a utilizarse en la torre dependen de la ubicación del faro, así como de los materiales disponibles en el medio. Estos pueden ser piedra, madera, hierro, mampostería, hormigón armado y, en la actualidad, plástico. La sección horizontal del faro, cuando la torre es cerrada, puede ser circular o poligonal, siendo las formas más usadas la circular y las octogonales o cuadradas, dependiendo de las condiciones predominantes de viento que tenga la zona, pues debe presentar la menor resistencia posible. La torre en 28 esqueleto o malla tiene menor resistencia al viento, pero estas estructuras abiertas tienen muchas desventajas para el personal de servicio. En los faros que no requieren de personal, este tipo de torre es muy utilizado. En los faros con personal residente y ubicados en islas grandes o tierra firme, donde el espacio lo permite, las bases de los faros suelen ser la vivienda del personal. En estos casos, la torre sale de una base cuadrada o rectangular. En otros casos, las torres pueden tener construcciones colindantes o separadas, con el fin de albergar a los guardafaros. Las torres ubicadas en rocas o islas pequeñas en mar abierto, normalmente son circulares y de construcción muy sólida, con el fin de soportar el embate de las olas y viento. En esas torres, todas las facilidades necesarias para la operación del faro y vivienda del guardafaro están contenidas dentro de ellas. El interior de la torre tiene una escalera que lleva de la base a la linterna, teniendo descansos intermedios en la medida de la altura y de las habitaciones ubicadas en los varios niveles. Sean cuales fueren las características individuales de cada torre, todas tenían y tienen algo en común: Terminan en una plataforma con barandilla, sobre la cual se eleva la linterna que aloja la óptica y el mecanismo de rotación, si lo hubiera. Sin embargo, el uso del tiempo presente tal vez no sea el más adecuado para describir las torres de los faros con vivienda, pues en la actualidad es una rareza que un faro cuente con personal residente y no esté automatizado. Tal vez a esta fecha ya no exista siquiera uno. La Fuente de Luz. La luz es, por supuesto, el componente principal durante las noches, pues es el aviso a los navegantes de que algo se encuentra en su camino y, al mismo tiempo, les permite ubicar su posición geográfica en base a las características propias de iluminación. Desde la construcción del primer faro, el esfuerzo por mejorar el alcance y la calidad de la luz fue una constante. La luz está compuesta por tres partes: La fuente de luz o iluminante, la óptica y el mecanismo de rotación, en el caso de un faro giratorio. Todo esto está contenido dentro de un cuarto metálico con escalera interior, puerta al exterior y ventanas amplias de vidrio. El conjunto del cuarto y su contenido se denominan linterna, pero algunas personas usan el término para referirse solamente al cuarto. 29 Las fuentes de luz no variaron mucho en los primeros siglos de historia. El bracero de leña en un punto geográfico alto o en la cima de una torre abierta, era la forma de iluminar. El mayor avance en los primeros siglos lo constituyó la cubierta de piedra que permitía a la luz funcionar aún bajo la lluvia. Esta innovación ya la tuvo el Faro de Alejandría, del que también se dice contaba con un gigantesco espejo reflector ideado por Arquímedes. No se sabe cuando se empezaron a usar primitivas lámparas de aceite, ni cuando se empezó a utilizar velas de cera o sebo, pero en el Siglo I d.C. se usaban estos tipos de iluminación en algunos faros. Las velas daban una luz más controlable que la de la leña, pero eran fácilmente afectadas por el viento. El aceite y las velas tenían ventajas en cuanto a volumen y peso; sin embargo, para obtener una luz lo suficientemente fuerte era necesario prender muchas lámparas de aceite o velas, y aun así la luz era relativamente tenue. Adicionalmente, estos combustibles tenían el inconveniente de su alto costo, pues producir aceite, cera o sebo en esa época no era tan fácil o económico como utilizar leña. Siglo Un avance de mucha importancia que fue clave en la evolución rápida de los faros fue la colocación de vidrios para evitar los efectos del viento sobre la llama, lo que se dio en el XIII d.C. con el advenimiento de los primeros vidrios, aunque éstos eran de mala calidad y transparencia. Esto dio inicio al concepto de la "linterna." El carbón vegetal y mineral también fue usado en braceros desde hace muchos siglos y luego fue ubicado dentro de linternas con flujo de aire bien manejado. Estos faros de carbón o leña requerían de mucho mantenimiento y constante limpieza. La temperatura al interior de la linterna era muy alta y los vidrios tenían que ser gruesos para soportar las diferencias de temperatura exterior e interior. El último faro iluminado por carbón, que funcionaba en Inglaterra, dejó de hacerlo en 1823. 30 Capítulo 4.- Las Lámparas Modernas Las lámparas funcionaban en base a combustibles de aceite animal como el espermaceti y vegetal como el de colza o el de oliva, usándose también en pocos casos gas natural, y ya en el Siglo XIX d.C., aceites minerales como el queroseno o parafina. La Lámpara Argand. El siguiente paso en la evolución de la luz fue la mejora de las simples lámparas de aceite, que habían sido inventadas por los egipcios. Por muchos siglos, la lámpara de aceite consistió en un recipiente abierto con una o varias mechas de lana. Los avances no fueron muchos hasta que, en 1782, el científico suizo Ami Argand inventó una lámpara de aceite que tenía una luz diez veces más potente. Este aumento de luminosidad lo logró modificando la mecha e instalando una pantalla alrededor de la luz para manejar el flujo de aire ascendente, lo que proveía a la luz de más oxígeno. Mientras unos experimentaban con la luz, otros experimentaban con los reflectores. Ya en el Siglo XVI d.C. se había aplicado a la vela un reflector plano simple para aumentar la luminosidad de la luz, aunque daba un reflejo difuso. Éste fue el primer reverbero. Fue el científico francés Antoine Lavoisier quien demostró, en 1765, que un reflector parabólico podía reflejar en toda su superficie la luz de punto producida por una vela, multiplicando así su luminosidad. El reflector parabólico, unido a la lámpara de Argand, constituyó uno de los mayores avances técnicos, 31 pues una sola lámpara podía proveer igual luz que muchas lámparas comunes o velas juntas. Durante años, a partir de fines del Siglo XVIII d.C., la lámpara Argand con reflector fue la principal fuente de luz para los faros. Si bien la lámpara Argand era muy eficiente, los experimentadores no dejaron de tratar de mejorarla, con mucho éxito. En 1800, el relojero francés Bertrand Carcel diseñó una variante de esta lámpara que tenía varias mechas concéntricas y un mecanismo para bombear aceite a presión a través de las mechas, lo que mejoró mucho la eficiencia de la luz. Otros experimentadores como Borda, Franchot, Thompson, Francois Arago (quien fue Director de la Commission des Phares de Francia), Léonor Fresnel, el hermano de Agustín; Degrand, Doty y Maris, entre otros, hicieron mejoras, de tal forma que la lámpara de Argand en su versiones mejoradas fue, por más de cien años, la principal fuente de luz para los faros, hasta el advenimiento del gas acetileno con el sistema Dalén, y la electricidad. Características de la Luz. En algunos faros, se instalaron varias lámparas reflectoras para dar una luz más fuerte y para cubrir el horizonte; luego se instalaron mecanismos de relojería para hacer que las lámparas y relectores giraran en conjunto, creando así señales distintivas de acuerdo a la velocidad de rotación. En otros faros se instalaron persianas o cristales de colores para cambiar la secuencia y frecuencia de la señal así como el color. En algunos lugares se instalaron dos o más luces individuales para crear señales únicas y así facilitar a los navegantes la identificación del faro y su ubicación geográfica. Mecanismos de Rotación. El avance mecánico más importante de esta época fue la aplicación de mecanismos para hacer que la luminaria rotara. En los faros en que la luminaria gira, este mecanismo giratorio ha variado poco desde su primera aplicación, cambiando solo de la cuerda accionada y regulada por resorte o pesas, al motor eléctrico. La base rotativa también cambió poco, pues se usaban las ruedas de bronce, rulimanes o el mercurio para disminuir la fricción. La cuerda podía diseñarse técnicamente para que durara toda la noche, pero se diseñaba a propósito para que el guardafaro tuviera que 32 darle cuerda de una a tres veces durante la noche, con el fin de asegurar que se visitara la linterna. Capítulo 5.- La Óptica en los Faros Con el advenimiento de la revolución industrial y del vidrio de buena calidad a fines del Siglo XVIII d.C., los experimentos en óptica evolucionaron al igual que las demás artes y ciencias. En ese siglo ya se experimentaba con lentes convexos frente a la luz de velas o lámparas de aceite, con el fin de amplificar la luz. La combinación de la lámpara de Argand, el reflector parabólico y el lente convexo, dieron a los faros una calidad de luz nunca antes vista. El físico Maris realizó algunos experimentos combinando su lámpara con lentes convexos para concentrar la luz y darle mayor alcance; sin embargo, el lente debía tener un diámetro muy grande, casi dos metros, para surtir el efecto deseado partiendo de un punto focal con reflector de nueve centímetros, por lo que tenía un peso y tamaño que lo hacía impráctico dentro del pequeño cuarto de la linterna de un faro. Un problema era la calidad relativamente mala de los reflectores y otro era la absorción excesiva de luz por el lente. Thomas Stevenson, Thomas Rogers y George Robinson también experimentaron utilizando una lámpara, un reflector y un lente convexo, sin mayor éxito, pero aún así este sistema se utilizó por varios años. Esta fue la combinación que aplicó Winslow Lewis en 1810 para su sistema, usado en los faros de los Estados Unidos de Norte América. El lente de Lewis tenía un diámetro de nueve pulgadas y un espesor de dos y media a cuatro pulgadas. El vidrio usado era verde, por lo que la luz tenía una gran pérdida de potencia. El reflector parabólico tenía el mismo diámetro que el lente. Como dijimos antes, el vidrio, usado inicialmente en el Siglo XIII d.C. para las ventanas de la linterna, fue mejorando poco a poco hasta que, a fines del Siglo XVIII d.C., el francés Pierre Louis Guinand inventó el primer proceso y formulación de ingredientes realmente exitoso para la producción de cristal óptico, lo cual veremos más adelante. El Lente Fresnel. Entra entonces en el campo de los faros el científico francés Agustín Jean Fresnel, ingeniero del Departamento de Puentes y Caminos que estaba a cargo de los faros franceses. Fresnel, basado en experimentos anteriores de 33 los científicos Georges Leclerk de Buffon y Antoine de Condorcet, inició sus experimentos con la óptica en 1819, hasta que diseñó un sistema de lentes dióptricos que, arreglados de una manera específica, refractaban la luz para crear un haz horizontal o vertical a partir de un punto de luz ubicado en su eje focal. Este haz daba una luz brillante de extraordinaria potencia lumínica. A partir de 1823, una vez refinado, el Lente Fresnel, en sus varias formas y tamaños, se convirtió en el tipo de óptica más usado para los faros. El primer Lente Fresnel, que contaba con espejos para su parte catóptrica superior e inferior, fue instalado en el Faro de Cordouan, Francia, en 1823. Cordouan ha servido como banco de prueba para el prototipo de los experimentos franceses en construcción de torres y en iluminación. El primer fabricante de lentes Fresnel fue la firma Soleil, en St. Gobain, París, Francia. Fresnel no había logrado aplicar el uso de prismas para el efecto catadióptrico y usó espejos en los extremos superior e inferior del conjunto del lente. A los faros que utilizaron lente para amplificar la luz se los denominó "Faros Lenticulares" o "Dióptricos" y a los de reflectores, como del Sistema Lewis, "Catóptricos." Los lentes Fresnel eran diseñados y construidos cada uno con características propias. Habían dos tipos principales, a más de los seis órdenes básicos diseñados por Fresnel, y el un orden intermedio y los dos, meso e hiper radiantes, que se desarrollaron después. 34 difícil demás, lo Los Tipos de Lente Fresnel. Los tipos son el fijo y el rotatorio. El fijo muestra una luz estable en todo el horizonte alrededor del faro. A este tipo se lo conoce como "de barril" o "cilíndrico" y está compuesto de una faja horizontal de lente convexo en el plano focal y lentes prismáticos dióptricos y catadióptricos arriba y abajo de la faja central, los cuales producen un haz continuo de luz, que se proyecta al horizonte. Los lentes fijos son adecuados solamente donde hay pocas luces en el entorno. A medida que se construyen edificaciones alrededor del faro se hace más diferenciar entre las luces, confundiéndose así el faro con las con el consiguiente peligro a la navegación. Este problema veremos en esta historia en el caso del Faro de Manta. El rotatorio muestra una luz variable con características específicas que se repiten en ciclos de duración determinada. El "lente" se compone de varios paneles de lentes, desde dos hasta veinticuatro, ubicados uno al lado de otro para formar un "tambor lenticular" equidistante alrededor de la fuente de luz, que está ubicada en el eje focal de los paneles. Cada uno de los paneles cuenta con un lente convexo redondo conocido como ojo de buey en el eje vertical, y prismas dióptricos curvos arriba y abajo de éste. En la parte superior o corona del lente y en la parte inferior o falda, tiene prismas catadióptricos. El número de paneles, su diseño y la velocidad de rotación le dan al faro la característica de destello y eclipse. El destello ocurre cuando el ojo de buey está en línea recta con el punto de observación y el eclipse ocurre en el intervalo entre los ojos de buey. A estos paneles se los denomina "paneles de destello." El eclipse puede ser parcial o total. 35 El lente rotatorio tiene muchas variantes, entre las que se incluye una combinación del lente cilíndrico usado en los faros fijos, con paneles de destello intercalados. Esto da una luz fija que tiene un destello cada cierto tiempo, sin o con eclipse. Al tambor lenticular del lente rotatorio de dos paneles se lo denomina "bivalvo." Tanto el faro de lente fijo como el rotatorio pueden tener variación de colores, lo que se consigue poniendo frente al lente paneles del color que se quiera. Otra forma de cambiar el color es poniendo vidrios de color en las ventanas de la linterna, o que la fuente de luz sea de color. En los aparatos del primer sistema de faros del Ecuador, se daba el color con la chimenea de la lámpara o con los vidrios de las ventanas de la linterna o armarín en el caso de los fanales. El vidrio de color tiene el inconveniente de que disminuye la potencia de la óptica en un 40% en relación al vidrio claro. Los colores, principalmente el rojo y el verde, se utilizan para ayudar a los navegantes a determinar cuando se acercan a un peligro o se alejan de él. Los Órdenes de Lente Fresnel. A parte de inventar el principio del sistema, Fresnel diseñó órdenes o tamaños de lentes para diferentes usos. Fresnel diseñó seis órdenes originalmente. El mayor era el de primer orden, con 182,88 centímetros de diámetro interior y 548,64 centímetros de alto. Los órdenes descendían hasta el pequeño lente de sexto orden que tenía 30,48 centímetros de diámetro interior y 45,72 centímetros de alto. Años después se añadieron al sistema los lentes de 3½ orden, que está entre los del 3° y 4° orden, y dos mayores al de 1° orden, denominados meso-radiante e hiper-radiante, en orden ascendente. El lente hiper-radiante era un gigante que tenía 259,08 centímetros de diámetro, 670,56 centímetros de alto y pesaba alrededor de 15 toneladas métricas. Los diseñadores de esta óptica enorme fueron la casa 36 F. Barbier et Cie., de París. Este lente también fue fabricado por Chance Brothers, de Inglaterra. Los lentes de los órdenes mayores, esto es desde el hiper-radiante hasta el lente de 2° orden, fueron usados para costas abiertas. A estos faros se los conoce también como "de recalada." Los de órdenes medios, del 3° al 4° se usaban para navegación costera: ensenadas, golfos y bahías grandes. Los de órdenes menores, 5° y 6°, también denominados “fanal” o “luz de puerto,” servían para bahías pequeñas, canales, estuarios y para señalar puertos. El principio de manejo de la luz usando refracción y reflejo aplicado por Fresnel sigue siendo, hasta esta fecha, un elemento esencial en faros de todo tipo. Ahora los lentes se hacen de varios materiales a más del vidrio, incluyendo varias calidades de plástico. Los Fabricantes de Lentes Fresnel. El primer lente de Fresnel fue fabricado bajo encargo de su inventor por Francois Soleil, padre, de Saint Gobain, París, Francia. Su hijo, del mismo nombre, también se dedicó a la fabricación de lentes, y luego se trasladó a San Petersburgo, Rusia, donde montó una fábrica. Cuando comenzó la producción en volumen de los lentes, habían ocho fabricantes en Francia: Soleil Sr.; Soleil Jr.; Henry Lepaute; Lemonniere et Cie.; Chaix et Cie.; Bénard et Cie.; Sautter-Harlé ; y, Barbier & Fenestre. Por un tiempo el hermano de Agustín, Léonor Fresnel, fabricó lentes en París, pero luego de poco tiempo se trasladó a Inglaterra y trabajó para la firma Cookson. Durante el período de operación de esas compañías se dieron muchos cambios: Cuando Francois Soleil hijo se fue a Rusia, su fábrica fue continuada por Letourneau. Chaix et Cie. no duró mucho tiempo. Sautter-Harlé luego fue solo Sautter. La fábrica de Letourneau fue continuada por Sautter y luego Sautter se fusionó con Lemonniere et Cie. 37 Barbier & Fenestre luego fue F. Barbier et Cie. y, para 1930, todas se habían fusionado en una sola denominada Barbier, Bénard et Turenne. Esta firma, a su vez, fue absorbida por otra denominada Gisman. En Inglaterra, los mayores fabricantes fueron Cookson, de Newcastle, y Chance Brothers, de Birmingham. Chance Brothers luego fue Stone-Chance y la compañía Cookson tuvo una corta vida. En los Estados Unidos funcionó una compañía denominada McBeth-Evans, que fabricó solamente lentes de 4° a 6° orden. Luego otros fabricantes, como Corning, fabricaron lentes para boyas y linternas pequeñas. En Alemania existió una compañía denominada Wilhelm Weule. 258 Más adelante, a comienzos del Siglo XX, AGA se dedicó a fabricar los lentes que usaba su sistema iluminado por gas acetileno. La gran mayoría de los faros lenticulares que se encuentran en América, el Caribe, el Mediterráneo y Africa fueron fabricados por compañías francesas. La mayoría de los faros de Rusia, India, China, Japón y el resto de Asia y Oceanía fueron fabricados por Chance Brothers. El Cristal Óptico. El vidrio que era usado en la manufactura de lentes Fresnel fue desarrollado por Pierre Louis Guinand. Era un vidrio óptico de alta calidad denominado "Crown." El Crown no contenía plomo. El número de burbujas y estrías que contenía era mínimo y era fácil fundirlo en diferentes formas. Tenía un índice de refringencia entre 1,5 y 1,6 y sus características eran ideales para la aplicación en óptica. Una de las características del vidrio Crown era su tinte ligeramente verdoso. Los ingredientes del vidrio francés eran arena fina de Francia, carbonato de soda, óxido de calcio (cal), polvo de vidrio molido y arsénico. Esta fórmula fue cambiando con el tiempo. 38 Otro tipo de vidrio, que fue usado por los ingleses, era el denominado "Flint," que era más duro que el "Crown" y con características de refringencia menores. Las fórmulas de mezcla de materias primas tenían variaciones de acuerdo con los requerimientos específicos del vidrio y los avances técnicos. 258 Los vidrios y sus tipos pueden ser sujeto de un libro entero por la complejidad del tema. Capítulo 6.- Los Sistemas de Faros en el Mundo Los Comienzos. Desde los romanos, que instalaron el primer sistema organizado de faros, pasando por la Liga Hanseática y el Imperio Británico, todas las potencias de comercio marítimo se preocuparon por señalizar sus costas para dar seguridad a la navegación. En algunos casos, los gobiernos concedieron patentes a ciudadanos particulares para instalar faros y cobrar peaje; en otros, la instalación y manejo de faros fue un monopolio del estado. Por cierto, no faltaron los delincuentes emprendedores que colocaban faros falsos con el único propósito de lograr que encalle algún barco y así hacerse de un botín. Durante el oscurantismo, período comprendido entre la caída del Imperio Romano de occidente y el Renacimiento, se destruyeron muchos de los faros construidos por los romanos y los griegos, pero con el Renacimiento empezó nuevamente el comercio y la evolución de la civilización, lo que llevó a la construcción de nuevos faros. A partir de fines del Siglo XVIII d.C., con el advenimiento de mecanismos de iluminación como la lámpara de Argand y sus versiones mejoradas, los reflectores parabólicos y mecanismos de rotación, se facilitó la instalación de faros, por lo que se dio un crecimiento extraordinario en su número en el continente europeo. En América, las potencias colonizadoras no se habían preocupado mucho por la seguridad de la navegación, siendo el número de faros activos muy pequeño; pero las nuevas repúblicas que surgieron a partir de la revolución de las colonias inglesas de Norte América, en el último cuarto del Siglo XVIII, sí se preocuparon por darle mayor seguridad a sus costas. 39 Los Estados Unidos de Norte América tomaron el liderazgo y de 12 faros que había en el inventario colonial, para 1820 habían 55 y en 1852 habían 331, más 42 faros-barco. El número siguió creciendo. Inclusive, contaron con fábricas propias para los varios elementos integrantes de las linternas. Winslow Lewis, un marino americano a quien mencionamos anteriormente, unió una lámpara Argand, un reflector parabólico, un lente convexo y en algunos casos, un mecanismo giratorio, y “creó” el Sistema Lewis, que usaron la mayoría de los faros americanos hasta mediados del Siglo XIX. Este conjunto era básicamente el ideado por el francés Maris, como lo vimos anteriormente. El número de faros instalados por el nuevo gobierno de los EE. UU. fue impresionante, pues se dieron cuenta de que con la seguridad a la navegación y al comercio, estas actividades se incrementaron enormemente. El ingreso reportado por los impuestos generados directa e indirectamente demostró que el sistema de faros había sido una excelente inversión para el Estado. Sin embargo, la supremacía de mercado que tuvieron los EE. UU. con sus aparatos catóptricos para faros decayó súbitamente a partir de 1823, cuando entraron al mercado los faros lenticulares de fabricación francesa, provistos de Lente Fresnel. Si bien la linterna con Lente Fresnel era inicialmente más cara por los elementos ópticos, la calidad y alcance de su luz, así como el ahorro de combustible más que compensaban la diferencia por la seguridad a la navegación. Los faros lenticulares comenzaron a reemplazar rápidamente a los faros antiguos de reflector parabólico (catóptricos) al punto que, en su apogeo, hubo ocho fabricantes de faros Fresnel en Francia. Es interesante anotar que Agustín Jean Fresnel, a diferencia de otros científicos, decidió no patentar su invento y permitir que la humanidad entera se beneficiara de él. Aún los ingleses, a pesar de los antagonismos históricos con los franceses, adoptaron sin demoras el Lente Fresnel, eso sí, provistos por fabricantes ingleses, quienes también montaron sus propias fábricas de componentes para linternas. 40 Una de ellas, Chance Brothers, introdujo mejoras importantes al sistema de lentes Fresnel. Alan Stevenson y James Timmins Chance fueron los responsables de esas mejoras. Alan era miembro de la familia Stevenson, quienes estaban dedicados a los faros: Unos miembros de la familia experimentaban con la óptica y los mecanismos, mientras otros se dedicaban a la construcción de las torres y los faros en distintas partes del Imperio Británico. Esas mejoras, introducidas por Chance Brothers, fueron estudiadas en Francia y en vista de su utilidad, fueron rápidamente incorporadas por los fabricantes franceses, por lo que no perdieron su liderazgo. Los norteamericanos no querían dar su brazo a torcer y se aferraban al sistema Lewis, a pesar de sus deficiencias, aduciendo su menor costo; pero en 1852, el Congreso de los EE. UU., al crear una Comisión de Faros (The Lighthouse Board), decidió romper el monopolio de Lewis y dispuso la instalación de linternas equipadas con Lente Fresnel, pues se demostró que a la larga su operación sería más económica. Desde entonces, hasta el advenimiento de los faros automatizados, los franceses fueron los principales proveedores de linternas para el mundo entero. La economía era en el consumo de combustible para la luz, como veremos más adelante cuando tratemos sobre los faros ecuatorianos. La Época de Oro. La época entre 1822 y 1922 fue la de oro para los faros. Las majestuosas torres, la extraordinaria luz, la belleza física de los lentes Fresnel y las leyendas y romanticismo que se desarrollaron alrededor de la vida de los guardafaros, los convirtieron en parte de la tradición y folclor del mar. 41 Los aparatos luminosos y su mecanismo eran verdaderas joyas y maravillas de la ingeniería. En los faros grandes, desde el hiperradiante al 4° orden, los lentes catadióptricos y dióptricos estaban montados en una estructura de bronce. En el caso de los faros de 1° orden, la estructura contenía más de mil piezas individuales de cristal pulido a brillantez de joya y pesaban casi diez toneladas métricas. El mecanismo de iluminación, ubicado en el eje focal del lente, consistía de una lámpara Argand o Carcel en sus varias versiones mientras se usó el aceite, y luego, cuando se introdujo el gas y la electricidad, consistía de luminarias que hacían aún más glorioso y potente el haz de luz proveniente del faro. El mecanismo giratorio de cuerda era otra maravilla. Basado en mecanismo de relojería ajustado a la escala del faro, requería la atención de los cuidadores al menos una vez en la noche, pues había que darles cuerda con manivela y se regulaba con las pesas que descendían por el centro de la torre. El Ocaso. Pero fue la misma naturaleza compleja de los componentes que llevaron a la extinción de los faros lenticulares grandes. El constante trabajo para abastecer de combustible a la luminaria, pulir los cristales del Lente Fresnel, limpiar los vidrios de la linterna, lubricar el mecanismo giratorio y darle cuerda, requería de personal residente, a veces en lugares de difícil acceso. El mantener ese personal, su sueldo, la provisión de alimento y el transporte de combustible hacían que la operación de cada faro fuera muy costosa. Con el advenimiento del gas en cilindros y la electricidad, se hizo más fácil automatizar los faros y eliminar el personal. Por eso, a partir de comienzos 42 del Siglo XX, se empezó a reemplazar los mecanismos complejos e instalar faros de poco mantenimiento que cumplían la misma función, y con los avances tecnológicos, daban igual o mejor luz. Para fines del Siglo XX, eran pocos los faros lenticulares complejos que quedaban en operación y muchos se perdieron al quedar abandonados y sujetos a vandalismo. Afortunadamente, la belleza de los faros antiguos motivó la creación de grupos y sociedades dispuestos a rescatarlos y operarlos como museos y aún como señales secundarias de navegación, por lo que en la actualidad hay muchos de ellos restaurados y en operación, como un recordatorio de que lo estético y bello debe perdurar. 43 ALCANCE GEOGRÁFICO DE LOS FAROS EVOLUCIÓN DEL ALCANCE LUMÍNICO DE LOS FAROS A continuación presentamos una tabla en que se puede apreciar la evolución de la potencia lumínica de los faros en relación con su fuente de combustible y material iluminante. 44 Parte 2.- Antes de la República 45 46 Capítulo 7.- Las Balizas y los Fanales Antes de la República La Colonia. La entrada al Golfo de Guayaquil, sus puertos, ríos y estuarios no estaban bien señalizados en la época colonial. Rodrigo Chávez González, también conocido como "Rodrigo de Triana," en su obra inédita "Nuestro Primer Faro" tiene esto que decir sobre la navegación en esa época: "... Cosa igual en la navegación tuvieron que hacer los pilotos que siguieron a Ruiz Estrada durante la Colonia, cuando no venían costeando durante el día. Es decir, guiarse por la posición de las estrellas y los astros. No tenían otros avisos de la proximidad de la costa que las luces nocturnas de algunas chozas playeras, primero, y luego de algunas casitas de los habitantes indios, mestizos y criollos. Así se guiaron navegando cerca de la costa durante trescientos años, y así actuaron las naves de nuestra independencia, procurando alejarse de la costa durante las noches oscuras, salvo que el piloto conociera muy bien la ruta y con las cartas de navegación no tan perfectas de esa época, avanzara confiando en la brújula y el compás para adentrarse en golfos, bahías y ensenadas." 283 Paradójicamente, en una época las cartas de navegación más detalladas, que hasta incluían sondajes, fueron elaboradas por piratas como Clipperton, en una especie de iniciativa privada. José Antonio Campos, en su Historia Documentada de la Provincia del Guayas -XI-, tiene esto que decir sobre la hidrografía y navegación: "La entrada y salida de los buques al puerto de Guayaquil sorteando los numerosos bajos que forman el relieve del fondo del río, fue objeto de muy seria preocupación para los navegantes y autoridades en la colonia, quienes no cesaron de hacer practicar sondeajes a todo lo largo de estuario, desde Puná al puerto principal, a fin 47 de señalar una ruta exenta de peligros, buscando la canal más conveniente para la navegación fluvial de los buques de alto bordo. Existiendo en Guayaquil un Astillero de tanta importancia como el que hubo en esta ciudad, considerado como el primero de la Mar del Sur, donde se construían grandes navíos para el servicio del Rey y venían a carenarse todos los que navegaban en esta parte del Océano, era muy natural que se estudiara con el mayor interés la hidrografía del Guayas, y de ello habla el documento que vamos a reproducir en seguida, a título de curiosidad histórica del tiempo del Corregidor Ponce de León, en 1692, en el que se da a conocer una provisión venida de Lima y suscrita por el Virrey, en la que manda bajo severas penas, a los pilotos y navegantes de esta aguas, no hacer uso de la canal de Isla Verde, sino de una nueva que ha sido descubierta y a la cual se le ha dado el nombre de Santa Cruz. (En cartas del Siglo XVIII se designa Santa Cruz al estero al sur de Isla Verde). 320 No vamos a citar el resto del documento, pues para el propósito de este libro, lo importante ya está dicho. En las Actas del Cabildo colonial no hay menciones específicas ni detalles sobre balizamiento, lo que demuestra que las autoridades no ponían mucho interés en los sistemas de balizas, como sí se lo hacía en Europa. Las cartas primitivas no eran muy exactas y navegar en estas aguas era muy arriesgado. De hecho, el número de naufragios en relación al número de barcos activos era muy alto. Entrar al puerto de Guayaquil requería de mucha destreza al navegar y los barcos usualmente tomaban un práctico en Puná. La mayoría de los barcos no navegaban en las noches y, en algunos puertos coloniales, estaba prohibida la navegación nocturna. 264 Guayaquil Independiente. Sobre la época de independencia, “Rodrigo de Triana” tiene esto que decir: "Con el aumento del comercio proporcionado por la libertad, eran frecuentes los encallamientos, varamientos y hasta naufragios por falta de guía luminosa, lo que 48 constituía grave perjuicio económico, no faltando algunas compañías que tenían miedo de entrar con cargamentos a nuestro golfo dando la vuelta a Puná por el Muerto, si venían del norte, o entrando a buscar el canal de Jambelí, si venían del sur. De ahí que el establecimiento de un faro se hacía indispensable y urgente, debiendo pensarse que el faro tenía que colocarse justamente en la entrada sur del golfo para indicar dónde estaba Puná y el comienzo del canal de Jambelí." Esta apreciación es muy correcta y responde a la realidad que se vivió en la costa durante mucho tiempo, pero no se actuó decididamente sobre esa necesidad hasta 1841. Fue una de la primeras preocupaciones del Cabildo de Guayaquil independiente el ampliar y mejorar el primitivo sistema de balizas y fanales. Para ello, pusieron esa tarea a cargo del Capitán de Fragata Manuel Antonio Luzarraga, pero el trabajo no progresó mayormente por falta de recursos y la incorporación de la Provincia de Guayaquil a la Gran Colombia. La Gran Colombia. Esta situación de inercia duró hasta que, poco antes de producido el conflicto con Perú en 1828, se reiniciaron los trabajos, que por ese problema quedaron otra vez inconclusos. En "El Colombiano de Guayas," en el número 51 del 4 de octubre de 1828, se lee que "...los gastos de aduana se egresaron por limpieza, baliza y fanal," de tal forma que se estaba invirtiendo en la mejora de las primitivas ayudas a la navegación. La información que existe en los archivos y bibliotecas nacionales sobre ayudas a la navegación de esa época se limita a lo ya mencionado, por lo que no es posible ampliar la información hasta la publicación de esta obra. 49 50 Parte 3.- El Primer Faro de la República del Ecuador Desde 1833 hasta 1872 51 La Zona Donde se Desarrolla la Mayor Parte de Esta Historia 52 Capítulo 8.- Los Antecedentes - 1833 a 1841 Vicente Rocafuerte Regresa al Ecuador. Nuestra historia documentada comienza en el puerto de Acapulco, en 1833. Vicente Rocafuerte se embarcaba, en compañía de su amigo y secretario Pedro Carbo, para regresar a su tierra natal luego de pasar algunos años en Europa y Norte América. En México, que en ese momento estaba convulsionado políticamente, había servido como diplomático negociando préstamos con Inglaterra. Lo mismo había hecho para Bolívar y la Gran Colombia en su afán por ayudar a la causa libertaria. Era el mes de enero cuando Rocafuerte embarcó en el bergantín genovés "Colombo," y 31 días después llegaba a la Isla Puná, donde se varó la embarcación en uno de los bajos. El percance debe haber ocurrido en creciente, por cuanto se reporta que no tardaron en salir del atolladero, arribando con toda felicidad a Guayaquil horas después. Rocafuerte se dedicó inicialmente a sus asuntos particulares, pero su personalidad lo propulsó en poco tiempo a participar en la política. En la campaña de oposición a Juan José Flores, durante la Guerra de los Chihuahuas, en 1833-1834, al menos una nave rebelde sufrió varamiento. Sin duda esas experiencias fueron aleccionadoras para Rocafuerte, quien venía de ver costas y puertos bien balizados y faros bien instalados en Europa y Norte América. Ligado como estaba Rocafuerte al comercio de Guayaquil, debe haber escuchado de los frecuentes percances que sufrían las embarcaciones que navegaban por nuestras costas, y en especial las que entraban al Puerto de Guayaquil. Los naufragios y daños a las naves, causados por la falta de señales adecuadas en los bajos y canales de navegación, significaban cuantiosas pérdidas para los armadores y para los importadores y exportadores de productos. Pero más que nada, para Rocafuerte esto era una clara señal del atraso en que se encontraba la flamante República. Cuando Rocafuerte tomó el poder como Jefe Supremo en 1834 y luego como Presidente de la República a partir de 1835, se empeñó en llevar al país "al progreso de las luces del Siglo y la marcha de la civilización," como gustaba decir, por cierto sin mucho éxito debido a la fuerte oposición que encontró por parte de la "rica pero obscurantista elite." El comercio externo presionaba por abrir las puertas del país y se dio progreso cuando hubo estabilidad política, pero siempre venciendo obstáculos políticos y administrativos. El número de naves comerciales crecía y era menester darles seguridad en la navegación. 251 257 256 53 Rocafuerte en pero sus del país estaba empeñado en el progreso del país y, sin duda, lo comparaba desfavorablemente con lo que había visto Europa y Norte América. Cualquier evento encendía su espíritu progresista, intenciones no progresaban por la realidad política y, más que nada, por la realidad económica. La inglesa llegada al puerto de Guayaquil de la fragata “H.M.S. Sulphur,” el 26 de agosto de 1836 fue, muy probablemente, un evento de los antes mencionados. Esa nave traía a bordo una comisión científica que tenía la misión de efectuar el levantamiento topográfico de las costas de Sudamérica, para la elaboración de cartas náuticas para el Almirantazgo. El Presidente Vicente Rocafuerte ordenó que se le diera a la comisión todas las facilidades para el cumplimiento de su misión. Parece que esa visita influyó en el Presidente, quien en octubre del mismo año dispuso al Gral. Leonardo Stagg que elaborara un proyecto de obras que el Presidente consideraba necesarias para dar más seguridad a la navegación de los buques que entraban al puerto de Guayaquil. Los puntos que dispuso se consideraran eran los siguientes: 1° Establecer un faro en la isla de El Muerto. 2° Situar en la misma isla la estación de los prácticos. 3° Situar en este lugar dos buques pequeños para que provean de víveres a los prácticos y para que salgan al encuentro de los buques. 4° Establecer habitaciones para los prácticos y, si el medio lo permite, plantaciones. 5° Exigir matrículas. 6° Establecer una línea telegráfica desde El Muerto o desde un punto que sea más acomodado al efecto; ya se considere mas arriba o abajo hacia Guayaquil. 7° Formar presupuestos de los costos que puedan tener el faro, las habitaciones, los dos buques pequeños y la línea telegráfica. Sin embargo, el ambicioso proyecto no se concretó hasta algunos años después y sólo en el primer punto, cuando Rocafuerte fue Gobernador de la provincia de Guayaquil. 255 257 54 Otro proyecto en beneficio del progreso fue el primer muelle en el río Guayas. Ya desde junio de 1840 le anunciaba a Flores su intención de construirlo y en 1841 se continuaron esfuerzos. Sin embargo, el muelle no se pudo construir en el período de Rocafuerte como Gobernador y recién se lo construiría algunos años después. En "El Siglo de los Vapores Fluviales: 1840 - 1940," Julio Estrada Ycaza escribe: "En la iniciación de la navegación a vapor en el Ecuador, Vicente Rocafuerte aparece en dos facetas: La primera, como mandatario que acoge una idea de carácter internacional y la impulsa; la segunda como verdadero propulsor de su aplicación a la navegación interior en nuestro país." 254 José Antonio Campos, en su Historia Documentada de la Provincia del Guayas, Tomo V, tiene esto que decir con motivo del ingreso de naves a vapor al puerto: "Necesario complemento de la navegación marítima a vapor, que fue un poderoso impulso dado al comercio de Guayaquil, debía ser la instalación de faros en nuestras costas para dar seguridad a los navegantes, y en ello se interesó la Compañía Inglesa de Vapores del Pacífico (PSNC) con repetidas solicitudes al Gobierno del General Flores. A Rocafuerte le tocó llevar a cabo esta obra, como Gobernador de Guayaquil, comenzando por el islote de Santa Clara o El Muerto, que era el más peligroso para la entrada de los buques al Golfo de Guayaquil." 321 El historiador Económico, Guillermo Arosemena A., en su obra "La Gran Bretaña en el desarrollo económico del Ecuador 1820 - 1930," cita una carta de Rocafuerte a Juan José Flores en que justifica por razones económicas la instalación del faro en Santa Clara: "Primero, el faro producirá una renta de 1,200 pesos poniendo el derecho de canal a medio real por tonelada, derecho que pagan volando y con muchísimo gusto los barqueros. Segundo, él facilitará la entrada al río de los balleneros, que van a Túmbez, por los riesgos que les ofrece el Muerto. Tercero, él atraerá muchos buques extranjeros, porque bajarán los seguros, y porque encontrarán aquí cuanto necesiten en víveres y cargamento." Arosemena también asegura haber leido en un libro sobre la historia de la Pacific Steam Navigation Company que la instalación del faro fue un requisito que puso Wheelwright para la entrada de los buques de esa compañía a Guayaquil. Respetando esa opinión que corroboraría lo escrito por José Antonio Campos en su historia ya citada, nos inclinamos a considerar las solicitudes de la PSNC como un catalizador para la instalación, pues Rocafuerte ya había pensado en ello en 1836, antes de los contactos formales con Wheelwright. 322 55 El CALM (SP) Carlos Monteverde Granados, en la Historia Marítima del Ecuador, Tomo VI, comenta que "... por las declaraciones frecuentes del Presidente Rocafuerte respecto a la importancia del comercio y la industria es probable que su intención fue sentar las bases de una Marina Mercante necesaria para el comercio del Ecuador con el exterior, proyecto digno de toda alabanza pero que relegó al olvido a la Marina de Guerra, sin considerar que la seguridad de los buques mercantes y en consecuencia del comercio marítimo depende de la existencia de un poder naval, en situaciones de guerra." No podemos más que estar de acuerdo con el CALM Monteverde, pues el mismo Rocafuerte durante su presidencia, en una carta al ex-presidente Flores, decía: "Nuestro siglo no es guerrero, sino pacífico. Esta es la época de la paz, del orden, de las ciencias, artes, comercio y riqueza." 256 La farola había llegado en julio de 1840 a bordo de la barca "Miceno" pero no se la había adquirido, sino que permaneció guardada en la Aduana. El trámite para la adquisición de "La Farola" se había iniciado en la Junta de Hacienda del Guayas, a fines de 1840. Luego, la Junta resolvió la instalación de la misma y esta decisión se comunicó al Gobierno. El 23 de Julio de 1841 el Ministro de Hacienda escribe al Gobernador del Guayas el siguiente oficio, que tiene su interés por las condiciones que se ponen: "N° 259 Ministerio de Estado en el Despacho de Hacienda Sección 2a Al Sr. Gobernador de la prov a de Guayaquil. El Sr. Presidente del Concejo de Gobierno me dice lo siguiente: 'Señor. = Se impuso el Consejo del acta de la junta de hacienda de Guayaquil sobre la colocación de la farola, y otros particulares, y ordenó que se autorice á la Gobernación de dicha provincia pa colocar la farola con el orden debido, siempre que los costos que se deben ocasionar nole impida remitir el continjente, según lo ecsijen las circunstancias. Y en consecuencia S.E. el Vice Presidente encargado del Poder Ejecutivo ha dictado con fha ppda la resolución que copio-' 'El Gobierno se conforma con el dictamen de su Consejo, qe se transcribirá a quien corresponde..." Rocafuerte se da por enterado del acuerdo del Consejo de Estado y la resolución del Gobierno mediante oficio que envía al Ministro de Hacienda el día 4 de agosto de 1841. 318 396 56 Interesantemente, el Ministro de Estado en los despachos del Interior y Relaciones Exteriores, bajo el acápite de “Adelantamientos Industriales,” en su informe de 1841, se anticipa en informar que: “Para la Isla del Muerto, y con el fin de encaminar á los navegantes, se ha comprado una magnífica farola, cuyo costo ascendió á la cantidad de dos mil y doscientos pesos: los buques del comercio nacional, y extranjero, compensarán este importante servicio, con un impuesto muy reducido, que se calcula rendirá anualmente cerca de dos mil pesos. El país gana considerablemente, porque entrarán sin dificultad á la ría de Guayaquil los buques balleneros que arriban á diversos puntos de la costa del Perú en solicitud de víveres: y se cree con bastante fundamento, que por esta parte quedarán en Guayaquil y sus dependencias, cuarenta ó cincuenta mil pesos anuales.” 8 La Revista del Instituto de Historia Marítima, Año XV, N° 27 de julio del 2000 tiene las siguientes citas de documentación de la época: "El 5 de noviembre de 1841 escribe Rocafuerte al General Wright: 'Habiéndose brindado generosamente el Sr. Picot (Peacock ), Comandante del buque de vapor "Chile", para la colocación de la farola en El Muerto, a cuyo objeto es indispensable que pase personalmente a reconocer aquella isla, y no debiendo desperdiciar la oportunidad de los conocimientos y generosidad, se servirá US. disponer se aliste el buque de vapor del Estado ("San Vicente") para que el día 9 del presente se dirija a aquel puerto conduciendo a su bordo al expresado Sr. Comandante." Otro documento citado a continuación en la misma Revista, en que Rocafuerte se dirige al Cmdte. Gral. del Distrito, dice: "Debiendo de salir para El Muerto el día de mañana el buque de vapor "San Vicente," con el objeto de conducir la farola para su colocación en aquel punto, se servirá Ud. disponer su ejecución, como también dar orden al comandante de la "Diligencia" franquee algunos útiles que se necesitan de su buque y una vela para poner a una balsa que debe seguir igualmente a aquella isla." 259 (SIC) autor 57 Así, con estos antecedentes y la acción ejecutiva del Gobernador Rocafuerte, el 25 de noviembre de 1841 fue inaugurado el primer faro ecuatoriano en la Isla de Santa Clara, también conocida como El Muerto o El Amortajado. Entró en funcionamiento el 1° de diciembre de 1841 (Esa fue la fecha "oficial," pero en realidad empezó a operar regularmente el día 2). Los reportes indican que el faro fue adquirido en Baltimore, EE. UU. y lo más probable es que haya sido del Sistema Lewis, fabricado en Boston, Massachusetts, que era el de uso en los EE. UU. en esa época. La luminaria contaba con 16 lámparas con reflectores y estaba instalada en un cuarto metálico sobre una torre de madera. Como veremos más adelante, también se instalaron boyas que señalizaban algunos bajos. 3 Quien se encargó de la instalación y puesta en funcionamiento del aparato fue el Sr. Diego Girdon, estadounidense residente en Guayaquil, quien informó del cumplimiento de su comisión al Gobernador Rocafuerte, el 6 de diciembre de 1841: “Al concluir la comision que U.S. se sirbió darme para dirijir la colocacion de la farola que se ha puesto en la Isla de Santa Clara, tengo el honor de comunicarle: que el 2 del presente llegue a dicha Isla y desde esa noche se encendió la farola, la cual consume de las 6 de la tarde á las 6 de la mañana tres galones de aceite: de este articulo he dejado dos barriles y conceptuo que cada uno contendrá treinta galones de modo que ambos solo alcanzarán para veinte noches á lo mas. A las ... de la noche del 3 del corriente sali de la referida Isla para esta Ciudad dejando encendida la farola y el encargo del mayor esmero en su servicio. Como las tablas de pechiche no alcansaron para cubrir todo el campo de la torre del faro, lo hice cubrir provisionalmente con tablas de caña y creo de suma necesidad que antes de la entrada de las aguas, que ya se aprocciman se deben poner las de pechiche pues con veinte de ellas habra suficiente para dejar completamente cubierta dicha torre. El encargado del cuidado de la farola y su ayudante tienen las raciones necesarias para un mes que empesó a correr desde el 20 de Noviembre popo. Aunque el agua no les alcansaba mas que para diez dias, tomé la precaución de traer los barriles bacios á la Puna donde encargué al Señor Francisco Robles los hiciera llenar y remitiera cuanto antes á la susodicha Izla. Acompaño á U.S. una lista de los indispensable utiles que necesitan los individuos que se hallan en la Izla para que U.S. disponga lo que estime conveniente...” A continuación la lista que menciona Girdon: "Razon de los utiles que son indispensables para el encargado del servicio de la farola en la Izla de Santa Clara. 3 58 Una bandera Nacional de lanilla Una piola para la drisa de idp Un anteojo larga vista Dos embudos Azufre para pajuelas Velas de cebo Un serrucho Un martillo Tres formones Tres barrenas Un cepillo Guayaquil a Diciembre 6 de 1841 Diego Girdon.” 2 De esos años, aparte de los dos documentos citados anteriormente, no hay muchos documentos oficiales que den cuenta de la operación del faro, su personal, el abastecimiento de combustible para la lámpara y alimento para los guardafaros, así como el efecto que tuvo su presencia en la seguridad de la navegación. Lo que si hay son reportajes de prensa en el CORREO SEMANAL, que dan cuenta de lo acontecido en la instalación e inauguración, citando el informe presentado por el Capitán George Peacock, delegado por el Gobernador Rocafuerte para supervisar la instalación del faro y las boyas. Este informe y uno posterior relatando la inauguración, fueron ampliamente difundidos en esa época y reproducidos en el periódico oficial GACETA DEL ECUADOR, pocos días después de su publicación original. 1 y 7 6y9 Capítulo 9.- Relato Sobre el 1° Faro Boletín de la Biblioteca Municipal de Guayaquil El historiador Camilo Destruge publicó en el Boletín de la Biblioteca Municipal de Guayaquil, en 1916, un relato de la instalación de este faro, en el que cita los reportajes del CORREO SEMANAL y completa el contexto de la época, relato que transcribimos en su totalidad por su relevancia al tema. La descripción se acompaña con detalles de la Carta 586 de 1836. 232 544 59 "En el hermoso Golfo de Guayaquil, se destaca, á los ...° de latitud y ...°(SIC) de longitud la isla conocida por los nombres de Santa Clara, El Muerto ó El Amortajado, este último porque su forma, á la distancia, semeja efectivamente, un amortajado en posición horizontal. Por su posición en el Golfo era el lugar más indicado para la colocación de un fanal que indicara á los navegantes, ya la existencia de un peligro, ya la ruta libre hacia el fondeadero de la Puná, en la desembocadura del río de Guayaquil. Habían, sin embargo, transcurrido años y más años, sin que nuestro Gobierno se preocupara de una obra tan importante; hasta que fue realizada en 1842, bajo la Presidencia del General Juan José Flores y debido á los empeños del entonces Gobernador de esta provincia, don Vicente Rocafuerte. Establecido el tráfico de los vapores marítimos de la Compañía Inglesa, desde 1841, era éste un motivo más para apresurar la colocación del fanal en Santa Clara, Y el señor Rocafuerte, que había apoyado con toda eficacia el establecimiento de ese tráfico marítimo, desde que durante su Gobierno se concedió á don Guillermo Wheelrught (Wheelwright ) el privilegio para dicha navegación; el señor Rocafuerte, -decimos- puso manos á la obra y pronto pasó á la ejecución su proyecto. Arbitró los fondos necesarios para la adquisición de una farola; fondos que no pudo, por entonces, suministrar el Erario y que fueron devueltos en la forma que veremos más adelante. En cuanto llegó la farola á Guayaquil, el Gobernador Rocafuerte activó su colocación en el lugar designado. Vivía en Guayaquil el señor don Diego Girdón, honorable caballero francés, que ya había prestado grandes servicios á la ciudad, en la organización del Cuerpo de Bomberos, siendo Comandante de una de las compañías y desempeñando también el cargo de Juez de Incendios ó sea Jefe del Cuerpo benemérito que tanto nos ha honrado y tanto nos ha salvado en su legendaria abnegación. El señor Girdón recibió de Rocafuerte el encargo de colocar la farola, dirigiendo previamente la construcción de la torre á ella destinada. Al señor Girdón acompañaba el Comandante don Lúcas Rojas, marino venezolano de los de la Independencia, llegado á Guayaquil en la fragata "Colombia", en Enero de 1830. En Noviembre de 1841 estaba ya la farola en Guayaquil, y el señor Rocafuerte se puso de acuerdo con el experto marino inglés Mr. George Peacock, Capitán del vapor marítimo "Chile", que fue el primero que puso al servicio de nuestras costas la Pacific Steam Navigation Company; y puestos de acuerdo, la farola fue transbordada de esa nave y conducida á su destino; llevando Peacock el encargo de dirigir la colocación, de acuerdo con el señor Girdón; así como de localizar algunas boyas en los bajos de nuestro Golfo. autor 60 Ya para el 26 de Noviembre oficiaba el Capitán del 'Chile' al Gobernador Rocafuerte diciéndole: 'Tengo el honor de informar a Ud. que el 19 del presente embarcamos en una balsa el edificio del Faro, así como el armarín de fierro correspondiente á la linterna, etc. Dicha balsa fue conducida á remolque por el vapor Guayas hasta la isla del Amortajado, á la cual llegamos el domingo (día 21) por la noche; y no fue sino con mucha dificultad, que conseguimos desembarcar, al anochecer del lunes, á causa de las grandes marejadas que encontramos. Después de dirigir la colocación de los cimientos del Faro, me dirigí en el Guayas á los bajos de Payana. Habiendo dejado la continuación de la obra al cuidado del Comandante Rojas y del señor Girdón; y el martes coloqué una boya negra, teniendo encima un palo de quince pies de altura y coronado de una bola, en frente de la punta más sobresaliente, cuya posición, con respecto al Faro, y las otras boyas, tengo el gusto de incluir á Ud. por separado. El martes, por la noche, anclamos en frente de la casa del señor Cope, (Mr. Walter Cope, Cónsul Inglés que residía habitualmente allí) en Punta Española, donde hicimos nuestra provisión de agua para el uso de la isla (la de Santa Clara), y recogimos las dos boyas blancas dejadas por el Comandante Rojas á bordo de la Diligencia, hacía media noche. El día siguiente, por la mañana, mientras el Comandante Doyle estaba haciendo la provisión de combustible para el vapor; subí al cerro de Mala con el señor Cope, para examinar los puntos más á propósito para establecer telégrafos, y para hacer un examen geológico de esta parte de la isla de Puná; y el resultado de lo que he visto y examinado, me induce á creer que allí debe haber carbón de piedra. He designado al señor Cope el lugar en que considero más probable se halle una veta, lo cual este caballero intenta buscar sin pérdida de tiempo. En apéndice tengo ya enumerados los mejores lugares para establecer telégrafos. Me aprovecho de esta ocasión para informar á Ud. que Punta Española me parece un lugar muy adecuado para que los vapores y demás buques se aprovisionen de combustible y agua, los cuales son de la mejor calidad; siendo también fácil construir un muelle ó dique. El miércoles, á las dos de la tarde, subimos de Punta Española, y colocamos una boya blanca sobre la punta más sobresaliente al norte del bajo de Mala, y en seguida nos fuimos en busca del bajo que dicen se haya en frente de Punta Arenas, y el cual tuvimos la dicha de hallar, después de muchísimo trabajo y empleando 61 tiempo y paciencia: é inmediatamente colocamos la otra boya blanca en frente de la extremidad S. E. Este bajo es muy peligroso y, por tanto, recomiendo infinito que, en cuanto se presente una oportunidad, se amarre una balsa en el mismo lugar ocupado hoy por la boya, la cual balsa lleve consigo una luz, á la altura de 50 ó 60 pies sobre el nivel del mar, colocando enseguida la boya en el medio del bajo de Mala. Del mismo modo, encargaría que, tan pronto como fuere posible, se colocara una boya negra sobre la punta más sobresaliente del bajo que se halla á la desembocadura del río Balao; otra en el bajo que se halla como milla y media al Este de Punta Mandinga, ó punta de Puná, que algunas veces se halla en seco; y por fin, otra negra, junto al costado occidental de la Piedra-ahogada (Sunken Rock), que se halla al frente de Punta de Piedra, lo cual completaría la navegación de este noble río, haciéndola perfectamente segura. En cuanto el comercio del puerto lo permita, sería muy útil colocar un faro giratorio sobre la Punta Mandinga ó Puná, para que sirva de guía á los buques por la noche, hasta la Puná. El jueves, por la mañana, volvimos á la isla del Amortajado; y, á las cinco de la tarde después de hallarse el edificio perfectamente en pié, tuvimos el honor de beber á salud de S. E. y á la prosperidad de la República del Ecuador, desplegando al mismo tiempo, desde lo alto del Faro, el pabellón de la República, el cual fue al punto saludado por los cañones de la goleta Diligencia. El Faro se encenderá permanentemente desde el 1° de Diciembre. Como todos nuestros esfuerzos han sido dirigidos á la erección del Faro, cuya conducción á lo alto de la roca fue una obra muy penosa, no nos hemos ocupado de buscar la veta de carbón ni el agua: pero tengo el gusto de remitir a Ud. otras muestras que recogí anoche, de una capa de esquita carbonizada, como á cien pies sobre el nivel del mar; y, antes de embarcarme, hice que cuatro hombres elevaran una estaca en un paraje donde me parece probable pueda hallarse la veta.' 62 Al separarse de la isla el Capitán Peacock, quedó en ella Monsieur Girdón, para terminar la obra de la torre y dar á todo la última mano. Trabajó tan bien, que, á pesar de todas las dificultades, si no el 1° de Diciembre, el 3 (fue el día 2 autor) de ese mismo mes, fue encendida la farola, poniéndose al servicio de la navegación desde ese día. El edificio del faro se levantó en la parte de la isla que comprende, por decirlo así, al pecho del Amortajado, é irradiaba una luz fija, á unos 200 pies de elevación sobre el nivel del mar, visible de todos lados, excepción hecha desde el Norte un medio cuarto al Oeste hasta el Norte un cuarto al Este. Su disco más brillante se veía desde el O.N.O. hasta el E.N.E., pasando por el Sur. En cualquiera de esas direcciones podía verse la luz, en tiempo claro, á distancia de cinco á seis leguas; y vista desde la boya del bajo de Payana, demoraba al O.N.O. un cuarto O., á diez millas de distancia: así como de la boya de Punta-Arenas, al O. un cuarto Sur, veinticinco millas. En cuanto á las direcciones de navegación determinadas por las boyas, el Capitán Peacock, decía en un informe lo siguiente: 'Desde alguna distancia afuera de la punta S. de la isla, hasta la boya de S. del bajo de Mala, el rumbo es, con creciente, E. un cuarto N.; y con vaciante E.N.E. Desde esta boya se debe gobernar al N.E.¼N., diez millas, hasta llegar á la boya al N. del mismo bajo de Mala, cuidando de no ir en menos de cuatro brazas de agua. Desde esta boya se debe gobernar directamente á Punta Mandinga. Al E. corregido de dicha punta, distante una y media millas, se halla un bajo peligroso, que á veces se descubre á baja mar: cerca de la punta, hay mucho fondo. La boya de la parte más saliente del bajo de Payana, se halla en cuatro y media brazas de agua en la baja mar de los aguajes; y desde esa boya, la punta de Tembleque demora al S.O., cuarto al S. El grupo de árboles que se halla á la entrada de la isleta de Chupador, demora al S.S.E. La parte más saliente de Punta Arenas, demora al E., cuarto al S. El Faro demora al E.N.O., cuarto al O. La punta de estribor á la entrada de Chupadores, demora al S., cuarto al E., como á dos cables distante de la reventazón más inmediato á la baja mar, y como á dos y cuarto millas de la tierra más próxima. La boya del S. del bajo de Mala ó de Punta Arenas, se halla en cuatro brazas de agua, en la baja mar de los aguajes: y, desde ésta boya, el remate de los árboles de Punta Arenas, demora al O. un cuarto al S. El pico del cerro de las Animas, 63 demora O., medio cuarto al N. El cerro de Mala demora al N., y la punta de Punávieja al N.O. un cuarto N. La boya del N. del bajo de Mala, se halla en fondo de arena, cuatro brazas de agua; y desde esta boya, la pequeña casa que se halla en el centro de la posición del señor Cope, principia á ocultarse detrás del magote de arena de Punta Española, que demora al O. un cuarto N.; y la punta O. de la isla de Mondragón, hallándose como al largo de un buque, de Punta Mandinga, demora al N. un cuarto O.; y el cerro de Mala al O. Desde esta boya se puede también gobernar directamente á Punta Española ó viceversa; y señala asimismo, la entrada de ambos canales.' Como hemos dicho, el Jueves 25 de Noviembre de 1841, quedó colocado el Faro, y faltaban pocos detalles para terminar la torre. Tuvo lugar entonces una ceremonia sencilla en la forma, pero importante en si misma, puesto que se dirigía á celebrar y dejar constancia de un hecho altamente significativo para el progreso ecuatoriano. Reunidos en ese lugar los señores Capitán Peacock, Diego Girdón, Comandantes Rojas y Doyle, algunos oficiales del vapor GUAYAS y de la goleta DILIGENCIA, el entendido maestromayor de carpinteros de ribera don Juan María Martínez y Coello, que fue el constructor de la torre, y algunas personas más. Fue colocada en la fachada del edificio una plancha de cobre en la cual se había grabado la siguiente leyenda: En esta isla de Santa Clara, á las 12 del día 25 de Noviembre de 1841, se colocó por los señores comisionados Capitán Jorge Peacock, segundo Superintendente de la Compañía de Navegación por Vapor en el Pacífico y Diego Girdón este FARO para aviso y resguardo de los navegantes. El Sr. Vicente Rocafuerte actual Gobernador de la Provincia de Guayaquil, fundó tan importante obra manifestando 64 65 66 así su gran interés por la seguridad del comercio y prosperidad de la industria. Se copió en pergamino esta inscripción y fue colocada en una botella, junto con una moneda nacional valor de cuatro reales, de la acuñación de ese mismo año de 1841. La botella fue enterrada al pié de la torre, donde acaso exista todavía, si no desapareció en alguna de las obras posteriores que allí se efectuaron, como han desaparecido tantos objetos históricos, debido á la más censurable de las indiferencias. Al enarbolar el pabellón nacional en lo alto de la torre la goleta DILIGENCIA disparó tres cañonazos. El señor Peacock invitó á los presentes á beber una copa en ese mismo lugar, y pronunció el siguiente brindis: 'Amigos y compatriotas: Estando erigida el armazón y fijado el cimiento del Faro, llamo la atención de ustedes para celebrarlo, brindando por la salud del señor don Vicente Rocafuerte, actual Gobernador de la provincia de Guayaquil, uno de los hombres más distinguidos en esta parte del mundo, como un patrono de las ciencias, de las artes y de la civilización de su país. Lo que da más lustre á esta empresa, es que los útiles del Faro hayan sido conducidos hasta aquí, desde Guayaquil, en el primer vapor construido en Sudamérica: y mientras esta obra resplandece, para advertir al navegante de los peligros que existen en la entrada de esta magnífica ría, florecerá el tráfico, aumentará la industria, y el nombre de Rocafuerte será recordado con placer y gratitud. - Brindemos á la salud del señor Rocafuerte, victoriándolo tres veces; y quiera la providencia poner á la vanguardia de su contemporáneas á la República del Ecuador, mostrándoles el progreso de la paz y el progreso de las ciencias.' Como hemos dicho, el valor del Faro no lo había pagado el Fisco: pero era natural que arbitrara el Gobierno algún medio para satisfacer las cantidades conseguidas é invertidas por el Gobernador Rocafuerte; y de allí nació el derecho de Faro que hasta el día se cobra a los vapores y veleros que arriban á nuestro puerto. En efecto, el Presidente Flores, en la visita que hizo á Guayaquil en Diciembre de 1841, dictó el decreto del 13 de ese mes y año que dice: 'Autorizado por decreto del Supremo Gobierno, el 22 de Noviembre último para disponer los arreglos convenientes á esta provincia: y, teniendo en consideración que es conforme á justicia que la Gobernación del Guayaquil sea indemnizada de los considerables gastos emprendidos y los que están impidiendo en la adquisición, colocación y sostenimiento de la Farola puesta en la isla Santa Clara, he venido en decretar y decreto: 67 Artículo único.- Desde el 1° de Enero próximo, todo buque pagará medio real en cada tonelada, por derecho de Farola, el que se colocará en la Aduana, junto con el derecho de toneladas.' Tal es la historia del primer Faro que tuvo la República, y que fue el punto inicial de un servicio que hoy se hace en mejores condiciones en toda la costa ecuatoriana." Camilo Destruge - 1916 Esta historia dice mucho sobre nuestro primer faro, aunque no tanto como quisieramos sobre el aspecto técnico y los personajes que estuvieron involucrados en su instalación. Las palabras del Capitán Peacock confirman el afán de Rocafuerte de traer progreso al país, algo que, paradójicamente, logró mayormente cuando fue Gobernador de la provincia de Guayaquil que cuando fue Presidente de la República. Y es que en esa época los gobernadores actuaban con mayor autoridad que en tiempos recientes, debido a factores políticos y geográficos. Rocafuerte era la autoridad que mandaba en la provincia y así hizo por ella, y a través de ella por el país, lo que consideró necesario para su evolución hacia “las luces del siglo.” El Capitán Peacock, quien obviamente respetaba a Rocafuerte y sus esfuerzos de modernización, dio un apoyo que a su vez beneficiaría a la empresa para la cual trabajaba, pues sus naves tendrían una entrada más segura al Puerto de Guayaquil. El historiador Guillermo Arosemena A. asegura que Peacock fue contratado por Rocafuerte para la instalación del faro, pero no encontramos sustento para esa aseveración, y es más, el tenor de la correspondencia tiende a confirmar que lo hizo voluntariamente, dentro de los intereses que representaba. El señor Diego Girdon (él se firmaba sin acento) se apersonó a realizar un trabajo que poco tenía que ver con su función de Juez de Incendios, pero su actitud es característica de muchos de los extranjeros radicados en nuestro país, quienes encuentran fácil dar todo de sí por la tierra que los ha recibido con brazos abiertos. Girdon fue clave para la instalación de la parte mecánica, esto es, el armado de los componentes de la farola y su iluminación. 68 El Maestro Mayor de carpinteros de ribera, don Juan María Martínez y Coello realizó un trabajo digno de los maestros de nuestro legendario astillero. La torre por él construida duró, abandonada y sin mayor cuidado ni atención, hasta el año 1890, casi cincuenta años. Cuando se cambió el faro en 1872, las razones por las que no se pudo utilizar la antigua torre fueron dos: La primordial y técnica fue que era muy pequeña para las necesidades de la nueva linterna, y la secundaria y práctica fue que cuatro de los ocho pilares estaban podridos en la parte que tocaban el piso. Esto quiere decir que, si la torre hubiera sido de las dimensiones que requería la nueva linterna, se la podría haber rehabilitado. Los Comandantes Rojas de la goleta “DILIGENCIA” y Doyle del vapor “GUAYAS” cumplieron, con sus unidades navales, un trabajo destacado en el transporte del faro, la colocación de las boyas y el apoyo a los técnicos. Vamos a hacer un disgresión momentánea de la historia para comentar una de las observaciones del Capt. Peacock en su informe: Él menciona mucho las vetas de carbón de piedra existentes en Santa Clara y Puná. Esas vetas también las había en la Península de Santa Elena. El interés del Capt. Peacock y otros estaba en que, de existir, sería una excelente fuente de combustible para las máquinas a vapor. Su posible existencia en Puná o Santa Clara aseguraría a estos como puertos de abastecimiento para los vapores. En esos años nada resultó de la búsqueda del carbón de piedra, pero no por eso fue olvidado. Nos adelantamos en la historia para ver lo que ocurrió: En 1872 se reactivó el interés y se realizaron los análisis respectivos en un laboratorio. Éste fue el resultado: "Ofc. N°659 Quito á 3 de Agosto de 1872 De: Ministro de Hacienda Para: Gobernador del Guayas ... carbón no es de piedra (hulla) sino una especie de carbón que según sus propiedades tiene lugar entre lignita y asfalto. Su valor calorífico es muy bajo. Pues mezclado con gran cantidad de arcilla se enciende con suma dificultad." El análisis fue realizado por la Facultad de Ciencias y Escuela Politécnica de Quito y el informe está firmado por el Padre Juan Menten S.J. Y con este informe se acabó esa esperanza... 282 69 Capítulo 10.- El Primer Faro - 1841 a 1872 En este punto del desarrollo de la historia del primer faro, encontramos necesario hacer algunas observaciones a historias previas sobre los faros que han sido escritas por eminentes historiadores, quienes no tuvieron la fortuna de este autor de analizar documentos de difícil acceso. El historiador Rodrigo Chávez González, en su obra inédita “Historia de la Marina Nacional Ecuatoriana” en el Capítulo XVI denominado "Nuestro Primer Faro," tiene varios errores sobre la farola de 1841 y otros faros, los que, a falta de otra información, han sido recogidos por otros autores. Dice que la farola "fue construida expresamente en Baltimore." La farola no fue construida en Baltimore, pues no existió en esa ciudad ni en el Estado de Maryland o los de su entorno, un fabricante de equipos para faros. Bien puede haber sido adquirida en Baltimore a un comerciante que a su vez puso el pedido al fabricante. El único fabricante de los EE. UU. en esa época era Winslow Lewis, que tenía su fábrica en Boston, Massachusetts. No es sorprendente que se haya adquirido en Baltimore, pues las relaciones comerciales con ese puerto eran ámplias y no debemos olvidar que fue allí donde se adquirió la maquinaria para el primer buque a vapor, el "San Vicente" o "Guayas." Don Rodrigo Chávez dice que él conoció fragmentos de los cristales de aumento del primer faro, que tenía en su poder el Capt. Geo Chambers Vivero (por 1922 autor). Sin embargo, parece desconocer la existencia del segundo faro y los demás que integraron el primer sistema de faros, pudiendo ser los fragmentos de cualquiera de ellos. De hecho, él piensa que el primer faro existió en operación hasta 1895, según la siguiente cita: "Tanto la torre del faro como la casa del guardafaro, duraron hasta 1895... ...por lo que se mandó a reparar y construir la nueva casa que hasta hace poco existía, así como la torre de ese nuestro primer faro de la costa ecuatoriana." La razón por la que dudamos que los fragmentos hayan sido del primer faro es que éste fue retirado de Santa Clara, posiblemente en 1861, cuando se realizaron arreglos importantes; fue reemplazado por una luz de 6° orden, de una sola lámpara, sin cambiar el cuarto de la linterna. Éste era el faro que estaba en Santa Clara cuando se instaló el nuevo en 1872, y es el faro que se trasladó a Punta Mandinga, el que a su vez, en 1888, fue cambiado por otro más moderno, sin cambiarse el cuarto de linterna, solo el lente con la lámpara. El antiguo y primer faro catóptrico, sistema Lewis, de al dieciséis lámparas con reflectores y lentes, fue removido de Santa Clara 259 233 255 259 70 en algún momento entre 1841 y 1869, siendo la fecha más probable, como ya anotamos, la de 1861, y no se sabe nada de él, habiendo quedado en la torre solo el cuarto de linterna que recibió el aparato de 6° orden. Para 1922, no debe haber quedado nada de ese equipo. Por otro lado, cuando el Capt. Chambers enseñó al Sr. Chávez los fragmentos, en 1922, se acababan de retirar los faros lenticulares para reemplazarlos por faros AGA, por lo que los cristales pueden haber sido de cualquiera de los 3 faros lenticulares de rotación (Santa Clara, Punta Arenas o Santa Elena). Otra imprecisión es que él dice que los faros de Puná y Santa Elena fueron colocados por el general José María Urvina Viteri, lo cual no es correcto. Es más, el presidente Urvina no colocó faro alguno, lo cual ha sido comprobado en la revisión de la documentación de la época. 255 También es necesario aclarar que parte de la información sobre los faros recopilada por el Sr. Chávez González, es históricamente exacta, y la oportuna y necesaria para este libro ha sido recogida por el autor. Y continuamos con la historia. El Gobernador Rocafuerte estaba justamente orgulloso de "La Farola" y no perdía la oportunidad de hacerla inspeccionar por visitantes ilustres. Así, el 19 de enero de 1842 escribía al Presidente Flores: "... se embarcó en el vapor Guayas con Mr. Cope, el General Santa Cruz (ex presidente de la Confederación Perú-Boliviana), Irrisari y una numerosa compañía con el objeto de ir al Muerto, de examinar la farola..." También se ocupaba personalmente de los pormenores de la operación. El 12 de marzo de 1842 escribía al Gral. Cmdte. General del Distrito, pidiendo disponga que se aliste el buque de vapor (el Guayas) para que "se dirija a la isla con el fin de aprovisionar de aceite para el faro y víveres para la manutención de los que están encargados de su conservación." 10 11 Vamos a enfatizar que los reportajes de la época indican que la farola, si bien ya estaba en Guayaquil desde mediados de 1840, fue adquirida con un empréstito conseguido por el Gobernador Rocafuerte a fines de 1840. Luego su instalación fue autorizada por la Junta de Hacienda a comienzos de julio de 1841 y esa autorización fue aprobada por el Gobierno el 23 de julio del mismo año, como hemos conocido anteriormente. 71 En su informe de 1843, el Ministro de Hacienda informaba que entre otros impuestos, "El 13 del mismo mes y año (diciembre de 1841), se estableció un módico derecho para la conservación de la farola, colocada en la isla de Sta. Clara, obra construida esclusivamente en beneficio del comercio." 397 El Ministro de Guerra y Marina informaba en 1846 sobre las cantidades que se invertían en varios rubros, entre estos "...el cuidado de la farola." Para ese cuidado estaban destinados un alférez de fragata y un marinero de 2° clase como su asistente. El gasto anual en ese personal, según el Ministro, era de 834 pesos. Curiosamente, el Ministro de Hacienda informa ese mismo año que la farola, por sueldos y gastos, representa un egreso de 1.788 pesos, 3½ reales. Presumiblemente, la difrencia es por combustible y materiales. 398 399 Como vimos en la historia de Camilo Destruge y el informe ministerial de 1843, a raíz de la instalación del Faro de Santa Clara el Gobierno estableció un "Derecho de Faroles," que debían pagar los barcos. El propósito declarado era indemnizar a la Gobernación del Guayas por el gasto realizado, pero el ingreso, luego de la indemnización, iría al Fisco. Y es allí donde estaba el principal interés del Gobierno. El Ministro del Interior, quien estudió los supuestos beneficios económicos que traería la colocación del faro y las boyas, fue muy optimista, pues calculó que el rendimiento por derecho de faroles sería de alrededor de dos mil pesos fuertes al año. Esto se sumaría a beneficios colaterales que se calculaban entre cuarenta y cincuenta mil pesos fuertes al año. Esto no se materializó y a los pocos años, precisamente en 1847, el Contador Mayor del Distrito de Guayaquil informaba al Ministro de Hacienda: "...notará US. H., que el faro de Santa Clara tiene de pensión anual la suma de 1,800 pesos; y no habiendo producido en el primer año económico mas de 1,057 pesos, resulta contra el Tesoro un gravámen de 733 pesos, el que podía evitarse en mi concepto sacando dicho ramo á remate público, para que un particular lo sirviese al mismo tiempo con mayor atención, y se evitasen los reclamos que hacen los capitanes de buques, por la poca vijilancia con que es atendido un objeto que es de tanta importancia para las embarcaciones en sus entradas y salidas del puerto, y de cuyas faltas por leves que fuesen seria responsable el rematador sin duda alguna." El faro estaba avaluado en 2.900 pesos, en el cuadro de avalúos de los bienes Nacionales en ese año 1847. 4 400 En 1848, el Ministro de Hacienda informaba al Congreso que: "El Capitán del Puerto de Guayaquil ha hecho presente al Gobierno los exiguos ingresos del 72 derecho de faro, y ha propuesto su remate para mejoralos. El Ejecutivo no se ha considerado con facultad para decretarlo, y ha reservado la indicación para la representación nacional, apoyándola de su parte, convencido de la utilidad que resultará al Fisco, y de que a beneficio de un contrato estará mejor servido, refundiendo en uno si se puede conseguir, o celebrando otro para su servicio, que se asegura no es muy bueno en el día." El Congreso emitió el respectivo decreto que autorizaba el remate poco después del informe. No habían pasado siete años y ya el gobierno declaraba que el faro estaba en malas condiciones y quería rematarlo, para salirse de una carga económica. En efecto, la Contaduría Mayor del Distrito de Guayaquil tenía estas cifras sobre el faro para el año de 1848: "Ingreso: 1.001 pesos 6 reales; egreso: 1.703 pesos 6 reales" e indica: “...comparados resultan 702 pesos de gravamen al Tesoro, como en el año 1° económico tuvo de quebranto 733 (pesos), como tengo informado en aquella fecha, á que se agrega que los capitanes de buques en sus entradas y salidas se quejan altamente de la falta de luz en que les anuncie los peligros, cuando pagan religiosamente sus pensiones; me veo en la necesidad de repetir que nunca estará la farola bien servida, sino es por cuenta de particulares, y por consiguiente puede sacarse á remate el establecimiento por ...” 13 12 El problema de bajos ingresos, no solo por concepto de derecho de faros sino por ingresos aduaneros en general, se debía al simple hecho de que muchos buques no ingresaban al puerto sino que descargaban su mercadería como contrabando en las muchas caletas de nuestro estuario. En cuanto a este tema, en 1847 el Ministro de Hacienda había informado enérgicamente al Congreso en cuanto a las aduanas: "Es un principio reconocido que los contrabandos tienen su origen en los excesivos derechos impuestos a las importaciones y que entonces el deseo de lucro supera a todo temor. Las introducciones clandestinas germinan con quebranto de los intereses fiscales y con ofensa a la moral que se corrompe." En el año de 1848 se discutía ardorosamente las formas de controlar el contrabando, que era de proporciones desastrosas para el fisco y el comercio legal. Sin embargo, no se tomaron las medidas lógicas que proponían los fiscalistas y los comerciantes honestos que sufrían graves pérdidas por ese concepto. En "El Nacional" N° 215 de enero de 1849 se publicó el Decreto Legislativo "prescribiendo el modo en que debe darse cumplimiento al Decreto Legislativo de 5 73 de Diciembre último, sobre remate del derecho de faro que se cobra en Guayaquil." El decreto especificaba que se remataría al mejor postor, pero no consideró aumentar el derecho de faro para cubrir el déficit que tenía el mantenimiento. Esto haría que nadie se interese en rematarlo. 401 Finalizado 1849 la situación no había variado, ni se había rematado el servicio de la farola. El ingreso ese año fue de 880 pesos con 2 reales y el egreso fue de 923 pesos. 14, 15 En 1853 tenemos un artículo de prensa que da cuenta de la situación del faro: "El de la isla de Santa Clara ó Amortajado gracias á las instancias de nuestro Capitan del puerto y á las activas órdenes del Señor Gobernador, se halla encendido desde el primero del presente mes. Nosotros nos congratulamos de poder anunciar al comercio y á los navegantes esta noticia que dá mas seguridad á sus especulaciones y mas garantias á las vidas é intereses de los que visitan este puerto y que antes estaban espuestos á fracasar al entrar en nuestro rio-Reproducimos la carta que el encargado del entretenimiento del faro dirije al comandante Rojas. 'Al Señor comandante Capitan del puerto de la provincia de Guayaquil--Isla de Santa Clara, Enero 2 de 1853--9° de la Libertad-Señor Comandante: En cumplimiento de mi deber debo decirle:-que he recibido el Faro de Santa Clara en un estado bastante deplorable, y en tal estado procedí á su aseo y limpieza, encendiendolo al mismo tiempo por ayer 1° de Enero del presente año, y segun las luces que se han colocado, queda perfectamente iluminado, asegurandole á U. que se distingirá en una distancia competente, como informará á U. el Señor Astete.Por la razon que remito al Señor Perez se informará U. de los útiles que me he hecho cargo para los fines que sean convenientes. Deseo su mejor salud y mande como guste á su atento y S.S. José Dávila Ad.-- Suplico á U. no se desatienda de mi situacion, y yo cumpliré fiel y legalmente.--'" 539 Esta comunicación es reveladora porque habla de varias luces, lo que confirma que hasta ese año la óptica Lewis seguía activa. El adendum al final es interesante, pues demuestra que ya había experiencia con el abandono de los guardafaros. 74 Para 1854, cinco años más tarde, el déficit operativo continuaba. El Ministro de Hacienda informaba: " El producto de estos ramos ha sido de 1.672 pesos 5 reales y su gasto de 1.970 pesos 2 reales, y se nota que su producto no alcanza á cubrir los gastos, como se verá en el estado Número 1°, por lo que sería bueno rematarlo conforme á la lei dada por el Congreso en 5 de Diciembre de 1848. este remate solo debe tener por base el mejor servicio público, sin aumentar el impuesto, y sin que se pretenda ninguna ventaja pecuniaria para el Tesoro." 16 Por este informe podemos ver que el decreto de 1848 no se había ejecutado. Por otro lado vemos que el Ministro, en 1854, no estaba apegado a la realidad, pues teniendo la operación del faro un déficit, esperaba que algún particular lo explote sin aumentar el ingreso, y por lo tanto sin beneficio. Por supuesto, ningún particular quiso hacerse cargo del problema. El alto costo operativo que tenía el Faro de Santa Clara se debía a sus fuentes de iluminación. Dijimos anteriormente que no hay información técnica del aparato, pero de los pocos informes que dejaron Girdon y Peacock podemos determinar, sin temor a equivocarnos, que el faro original era, como lo indicamos antes, de 16 lámparas, del sistema Lewis en su variante fija. Girdon nos da una pista importante en este sentido al informar al Gobernador Rocafuerte que: "... se encendió la farola, la cual consumió de las 6 de la tarde a las 6 de la mañana tres galones de aceite..." Ese consumo solo puede responder a la necesidad de alimentar varias lámparas no muy eficientes, pues el consumo de las lámparas más avanzadas de los faros lenticulares era mucho menor, tanto como la octava parte, a pesar de alimentar varias mechas juntas y dar mucho mejor luz. He aquí una demostración práctica de por qué resultó más económico el instalar los faros de lentes Fresnel a pesar de su mayor costo inicial, situación que conocimos ya en relación con los faros de los Estados Unidos de Norte América. 3 En 1855, el Secretario de Estado encargado del Despacho de Guerra y Marina informó al Congreso que: "...se ha atendido también á la capitanía del puerto, pues se han recompuesto un faro, sus botes y lancha y además tiene todos los útiles de oficina." El Ministro era don Gabriel Urvina y el Presidente era el General José María Urvina Viteri. Sin embargo, no creemos que el cambio de la óptica del faro se haya dado en este período por el alto costo de operación de la farola reportado en 1856, como veremos a continuación. A 17 75 mas de eso, aún no se utilizaba el queroseno con que se iluminaba el faro de 6° orden que reemplazó al antiguo. En 1856 tenemos un artículo del periódico "El Progreso" que tiene interés por cuanto entrelaza a dos protagonistas del Servicio: "Ria de Guayaquil, a bordo de la Goleta ‘Norma’ 4 de octubre de 1856. Señor don Lucas Rojas. Mui señor mio: Creo de mi deber hacer un elojio del individuo que cuida la farola en la isla del Amortajado. Nunca, en las diferentes vezes que he pasado por dicha isla, la he visto tan clara. Aseguro a VD. que la divisé a doce millas de distancia, y que la luz estuvo perfectamente conservada toda la noche. Como sé lo celoso que ha sido vd. siempre por nuestra única farola, es que le recomiendo que estimule al individuo que está al cargo de ella para que la conserve como ahora. Este favor le pido a vd. en nombre de la marina chilena a la cual pertenezco y deseo prosperidad.- Su atento amigo y S. S. Q. B. S. M.* Aurelio Ballén" Del Sr. Ballén leeremos algo que nos sorprenderá, un poco más adelante. * Seguro Servidor Que Besa Su Mano. 540 Para 1857 el presupuesto de mantenimiento de la farola estaba en manos del Ministerio de Guerra y Marina como parte de la plaza de Guayaquil, dentro de la Capitanía del Puerto. En el año 1856 se gastó 1.894 pesos 2 reales en el faro, el segundo rubro de mayor importancia, luego del gasto de 2.500 pesos 4 reales en el Vapor de Guerra "Machala." Por este alto costo, es probable que se continuara con el faro del sistema Lewis con sus dieciséis lámparas de alto consumo y baja eficiencia. 18 En 1861 el Gobernador del Guayas, Sr. José Antonio Gómez, informó a la nación: "Se han dado providencias más eficaces para poner en buen estado de servicio esta obra de tan vital necesidad, para asegurar por la noche la entrada de buques a nuestro golfo. Hasta ahora había permanecido en el más completo abandono, y sin embargo el derecho de faro rara vez se ha dejado de hacer efectivo." 285 Es posible y muy probable que en ese año se haya cambiado el aparato completo por uno nuevo lenticular de 6° orden, y también es muy probable que este arreglo haya incluido el cambio de las lámparas originales de aceite animal o vegetal, a la novedosa de queroseno. Como no hay documentos más allá del informe del Gobernador, no se conoce los 76 pormenores de los trabajos que incluyeron las "providencias más eficaces." Sin embargo, el posterior informe del mecánico francés de faros, sobre el traslado del faro a Punta Mandinga y su descripción como un aparato de 6° orden, apuntarían a ese probable cambio en la óptica del faro. Esto no sería sorprendente, por el alto costo en combustible que debe haber representado las dieciséis lámparas del antiguo aparato. Para 1861, se sabía de los beneficios de los faros lenticulares y de las lámparas de queroseno. Aunque un faro de 6° orden no era adecuado para Santa Clara por su relativamente poco alcance, si se instaló uno de ese orden debe haber obedecido a razones económicas antes que técnicas. Más aún, la potencia luminosa de una faro Fresnel de 6° orden puede haber sido similar o apenas un poco menor a la del antiguo faro del sistema Lewis. El asunto del cambio o modificación de este faro entre 1841 y 1869 es una incógnita que esperamos se pueda esclarecer algún día, si se encuentra la documentación faltante. El Presidente en 1861, Gabriel García Moreno (primer período), era francófilo y ya estaba aplicando sus ideas modernizadoras, lo que hace más probable que en ese año se haya cambiado el aparato por uno que no se fabricaba en los EE.UU., sino en Francia. El presupuesto de la marina para 1861 contemplaba el siguiente gasto para el faro: "174 pesos con 7 reales para sueldos del personal y 253 pesos con 7 reales para raciones." La Aduana de Guayaquil reportaba los siguientes valores como ingresos por concepto del derecho de faro: "Para 1861: 1,094 pesos con 82 reales. Para 1862 reportaba: 946 pesos con 85 reales." 402 Cuando pensabamos que el interés por el faro era puramente económico y comercial, la investigadora Antonieta Palacios encontró el toque de romance que lo ponía a la par con los faros de otros lares. En la edición del diario La Unión Colombiana del 4 de septiembre de 1862, se publica una composición sobre el guardafaro, que aparentemente causó sensación, pues se agotaron los ejemplares originales en que salió y tuvo que ser publicado nuevamente. Citamos del diario: "Habiendose agotado los números en que se publicó la composicion que a continuacion copiamos, y a solicitud de muchas personas, que desean tenerla, nos complacemos en reimprimirla hoy. 77 Aprovechamos tambien esta ocasion para decir dos palabras acerca de ella. Como se vé, es una bella imitacion del PIRATA del Señor Espronceda, y creemos no avanzarnos mucho si decimos que aquella es digna de figurar al lado de esta. El GUARDA FARO revela no solo injenio, gusto, poesía, sinó que el autor está dotado de ese don sublime, que no a todos prodiga el cielo, y que se llama jenio. El GUARDA FARO es hijo de la inspiración, sus bellezas son destellos de una imaginacion feliz, creadora. En cada verso se admira ese algo que manifiesta al poeta, a la par que al versificador. Se nota en ella tal suavidad, tal cadencia, tal armonia, que bien se conoce la delicadeza del oido, lo que es una de las mejores condiciones o cualidades del poeta. I por esto creemos que ha sido escrito con la facilidad propia del jenio. Cualquiera que conozca la métrica puede hacer versos; pero si no está dotado por la naturaleza de las disposiciones que distinguen al poeta, sus versos serán frios, monótonos, forzados. ¿I en qué verso del jóven e inspirado autor del GUARDA FARO se puede encontrar un defecto de tal especie? La gran aceptacion, que con justicia ha alcanzado la mencionada composicion, habla muy alto en su favor, y es, talvez, la prueba mas clásica que podríamos dar en corroboración de lo que dejamos dicho. Concluirémos invitando a su autor que continúe regalándonos con sus bellas producciones y ecsortándolo al mismo tiempo para que, matando la apatía, se dedique con empeño a conquistar el renombre que le está reservado. EL GUARDA FARO CANCION (Imitacion del pirata) Lejos de su amada patria I habitando en el desierto De la triste isla del Muerto En eterna soledad, Se encuentra impasible un jóven De mas de veinticuatro años, Sufriendo los desengaños De su cruel fatalidad. No demuestra sentir pena, Aunque a veces abatido Parece estar sumerjido En triste meditación; Mas vuelve su faz tranquila, 78 I olvida en aquel momento A la imagen que el contento Robó de su corazon. Miradle en su limpia frente No muestra rencor ni agravios, Pues que no dicen sus labios Lo que siente su corazon. I se le vé siempre afable, I esté ocioso o trabajando Siempre se le oye cantando Su predilecta cancion. Apenas la aurora raya, Me preparo Para bajar a la playa En busca de mi sustento, Subo a la torre al momento, Apago y alisto el faro: I es el humo Del aceite Mi deleite, Mi alegría, I el olor De pavesa, Me embelesa Me estasía. Es la farola mi amada, Con aceite me perfumo, El hollín mis manos tiñe, I mis bigotes, el humo. Aunque piso sobre el oro, Las riquezas Del codiciado tesoro Que oculto ecsiste a mi pies No me mueven a interés, Mas estimo mis pobrezas. 79 I en teniendo Mis tijeras, Aceiteras I candil. Me contemplo Mas armado Que cargado De fusil. Es la farola mi amada, Con aceite me perfumo, El hollín mis manos tiñe, I mis bigotes, el humo. No me arredran enemigos, Ni temores; Vivo solo, sin testigos, I no anhelo mas fortuna Que los rayos de la luna I del sol los resplandores. I yo cruzo Mi camino, Del destino Al cruel rigor, Sin amigas Ni ilusiones, Sin pasiones, Sin amor. Es la farola mi amada, Con aceite me perfumo, El hollín mis manos tiñe, I mis bigotes, el humo. Yo no escucho mas acento De amistad, Que los clamores del viento, O los monótonos trinos De los pájaros marinos 80 Dueños de esta soledad. I tranquilo Yo me arrullo Al murmullo De la mar, I trabajo Con empeño De mi sueño Al despertar. Es la farola mi amada, Con aceite me perfumo, El hollín mis manos tiñe, I mis bigotes, el humo. F. M. H. A mi amigo L. E. E.-- Mayo 20 de 1862" Sin la música, la canción se convierte en un lindo poema que idealiza la dura vida del guardafaro. Pero hasta en la literatura sale la realidad, pues en una estrofa dice: "Para bajar a la playa / En busca de mi sustento" lo que nos indica que entonces tampoco abastecían al faro de manera regular y metódica. Sabemos que el faro estaba funcionando en 1863, aunque con problemas, por un incidente que afectó a la Capitanía del Puerto de Guayaquil. En ese año el Sr. Comandante General del Distrito de Guayaquil nombra al Sr. CPNV Agustín Oramas como Capitán del Puerto, en reemplazo del TNFG Aurelio Ballén. A continuación citamos texto del Tomo IX de la Historia Marítima del Ecuador: “Luego de posesionado, el CPNV Oramas hace serias acusaciones contra el TNFG Ballén, entre otras que tiene pendientes los sueldos de los prácticos, recaudados por el mes de junio hasta el 12 de julio, de que no ha dado cuenta alguna y los interesados reclaman con justicia sus haberes. Por otro lado el Oficial encargado de la administración del Faro de la Isla de Santa Clara denunció que en el mes de julio en vez de dos barriles de aceite que mensualmente se remiten para el alumbrado de la farola, el Sr. Ballén le mandó uno, quedándose con los 40 pesos, valor del barril que no remitió, y que cuya falta de aceite ha tenido en total oscuridad al faro por algunos días. 81 A más que los encargados del cuidado se han ayudado con las grasas que han podido sacar de la pesca realizada. También estos se quejan de que han sido mal asistidos en sus alimentos, y que el Teniente Ballén se ha quedado con sus sueldos, correspondientes al mes de junio, los que sacó puntualmente de la Tesorería de la Provincia.” Por cierto, el Sr. Ballén puso pies en polvorosa y no pudo ser capturado. Sin embargo, unos años después, cuando muchos ya se habían olvidado de sus actos, reapareció y pretendió un puesto, como veremos más adelante. 261 Entre 1863 y 1867 no se cuenta con documentación relacionada con el faro, y los varios informes de ministros no lo mencionan, salvo una breve mención en el Informe del Ministro de Hacienda en 1865, para informar que en 1849 se había aprobado un decreto sobre el remate de la farola. En 1867 el Administrador de Aduana reportó al Ministro de Hacienda: "Los derechos destinados á la conservación del faro en la isla de Santa Clara no producen anualmente mas de mil pesos, y los gastos que éste demanda actualmente, por hacerse uso de la kerosine en lugar de aceite, ascienden á tres mil seicientos pesos. De esta comparación resulta un déficit contra las rentas comunes, que es justo precaver atendiendo al importante objeto de su destino y á que el derecho redunda inmediatamente en favor de quienes lo pagan. Hay mas: continuamente es menester emplear sumas no pequeñas en los reparos y la composición de los útiles de dicho faro. En el mes de marzo último hubo que reconstruirlo y mejorar sus lámparas, de manera que la luz fuese mas viva y por lo mismo visible á considerables distancias. Así, agregando á los gastos naturales estos que no dejan de ser frecuentes, se verá que el derecho no basta para costear ni la cuarta parte de lo que se gasta. En lugar de medio real por cada tonelada, que se cobran á los buques que entran á los puertos mayores de la República, deben exigirse tres reales." 403 La Lista Mundial de Faros de 1869 registra el Faro de Santa Clara de la siguiente manera: "Nombre de la luz: Guayaquil; N° de luces y características: 1 luz fija; Visibilidad: 5 a 8 M.N.; Altura de la luz sobre el mar: 230 pies; Ubicación: Cerca del centro de la isla de Santa Clara; Latitud: 3° 10'; Longitud: 80° 25' 8'' W.; Descripción del faro: Ninguna; Observaciones Generales: No estaba prendida en mayo de 1866. Aparentemente está servida con indiferencia." La visibilidad o alcance luminoso es consistente con un faro de 6° orden. 19 82 Dibujo que recrea el 1° Faro de Santa Clara con la óptica original, y según la descripcion de la torre hecha por el mecánico francés en 1872. 83 Extracto de los faros fabricados para el Ecuador, del listado de faros lenticulares fabricados por Barbier & Fenestre entre 1871 y 1873. 84 Parte 4.- El Primer Sistema de Faros de la República 1869 - 1874 85 Plantilla de chimenea de la lámpara del faro de Santa Clara, elaborada por el mecánico de faros para ordenar repuestos a Francia. En la lámpara a la derecha se aprecia la chimenea de vidrio cubriendo la llama. 86 Capítulo 11.- Los Antecedentes - 1869 a 1871 La Convención Nacional Establece Faros. Según el historiador Julio Estrada Ycaza, "El 28 de agosto de 1869 la Convención Nacional reconocía oficialmente su inutilidad (la del Faro de Santa Clara) y facultaba al Ejecutivo a reemplazarlo..." En efecto, la Convención desconoció la mera existencia del antiguo faro al decretar: "Art. 1° Se autoriza al Poder Ejecutivo para establecer, en el lugar conveniente de la isla de Santa Clara, un faro con luz de primera clase, y dos mas con luces de segunda, el uno en Puntarenas y el otro en Punta-mandinga. Art. 2° Autorízasele igualmente para que mande balizar con bogas de color y campanas, los bajíos peligrosos de nuestras costas, y de los ríos y canales que conducen á los puertos autorizados por el Gobierno para el comercio." Para la Convención, el Faro de Santa Clara prácticamente no existía y por lo tanto era necesario establecer uno. Más adelante nos encontraremos con una sorpresa en relación con este asunto. Nótese aquí el uso de la palabra “boga” para referirse a “boyas,” uso que veremos repetido más adelante, y que luego, en otro caso, es usado como corresponde. 251 20 al 25 Una curiosidad que tiene el Acta de sesión de la Convención Nacional en que se recibe el Decreto con la Sanción Constitucional está relacionada con los lugares de instalación de faros. El Acta dice que “... i el He. Sr. Ministro de Hacienda devuelve, asimismo con la sanción constitucional el proyecto sobre colocación de faros en las islas (? ) de Santa Elena, Puntarenas y Punta mandinga; y el que autoriza al Poder Ejecutivo para la reforma de la tarifa de aduanas.” Era lógico que se estableciera un faro en la Puntilla de Santa Elena, pues es el punto más sobresaliente en el Pacífico, de toda la costa Ecuatoriana. Pero como supuestamente no había un faro en la Isla de Santa Clara, puerta de entrada a Guayaquil, había que darle prioridad a esto. Creo que ese desliz del Secretario de la Convención da una idea de las discusiones de trasfondo que no se hicieron públicas. autor 25 Interesantemente y como una nota histórica, el presupuesto del Estado para 1870-1871 no contemplaba la adquisición de los faros y mas bien asignaba 87 la cantidad de 6.960 pesos para la compra de veinte y nueve “bogas” (boyas ). Bogas son remos o botes a remos, pero en este caso se refiere a boyas. autor 26 La resolución de la Convención de establecer faros y boyas dio un impulso extraordinario a la señalización del Golfo de Guayaquil y por tanto mejoró significativamente la seguridad de la navegación. Estos faros constituirían el primer sistema organizado de faros que tendría la República. La Convención Nacional también autorizó al Ejecutivo la reforma de la Tarifa de Aduana, como así lo hizo éste el 28 de agosto de 1871. La 6° base del Artículo 1° dice: “Los derechos de puerto serán suprimidos, excepto el de práctico. El de faro se cobrará en los puertos donde se establezcan; pero mientras no se cambie el de Santa Clara, dejará de percibirse en Guayaquil.” Adicionalmente, el 15 de septiembre se expidió un nuevo Decreto Ejecutivo denominado “Adicional a la Ley de Aduanas,” que decía así en su Artículo 1°: “Se suprimen los derechos denominados de puerto, á saber, el de toneladas, anclaje, limpia, baliza, y faro, con excepción del de piloto ó práctico. El de faro se cobrará en el puerto de Guayaquil, cuando se cambie la farola de Santa Clara; y en los demás puertos, cuando en ellos se establezcan las luces convenientes.” 23 23 Si bien el faro existente podía estar apagado, aunque esto no se podría asegurar categóricamente por la razón que veremos más adelante, con la eliminación de la fuente de su sustento se garantizó su defunción como entidad operativa, pues sin el ingreso que reportaba el derecho, la Capitanía del Puerto de Guayaquil, que probablemente era la entidad a su cargo, se debe haber encontrado en serios problemas económicos. Decimos probablemente porque, si bien la tradición dice que era la Capitanía del Puerto quien estaba a cargo del faro, no tenemos documentación que lo sustente para ese año. Como no había una ley o reglamentación clara, había inestabilidad en la responsabilidad y el manejo de aparato, y es por esto que, en diferentes años, son diferentes funcionarios quienes responden por él. Aunque no se lo menciona en el decreto de la Convención, la fuerza motora detrás de la idea de establecer los faros nuevos era el mismísimo Presidente de la República, quien como veremos más adelante, ponía un interés directo y personal en la evolución del proceso de compra e instalación de los faros y las boyas, y luego de su mantenimiento. 88 El Presidente Gabriel García Moreno, al igual que Vicente Rocafuerte Bejarano, tenía una fuerte personalidad, y cuando le interés personal a un asunto, las cosas tenían que marchar la tarea de los faros lo ayudaron eficientemente el Ministro de Hacienda, Sr. José Javier Eguiguren y el Sr. Vicente de Santistevan y Rocafuerte, Gobernador Guayas. ponía bien. En del Se Piden Faros. En 1870, el gobierno del Ecuador encargó a la firma Barbier & Fenestre de París, Francia, a través del Cónsul General del Ecuador en París, Sr. Beltran Fourquet, la fabricación de dos faros, dos luces de puerto y cuatro boyas con campana, los que serían instalados en Santa Clara y Punta Arenas los primeros, Manta y Esmeraldas las segundas, y en los Bajos de Mala las últimas. Sin embargo, por motivo de la Guerra Franco-Prusiana, la entrega no se realizó sino hasta fines de 1871. El entusiasmo en el Gobierno era tal que el Ministro de Hacienda, en su informe al Congreso de 1871, antes de que sean entregados los aparatos, informaba: “Para dar mayor seguridad á las embarcaciones mayores en la entrada y navegación de la ría de Guayaquil, se esperan dos faros de resplandores de luz blanca, de medio en medio minuto, y el otro de resplandores de luz roja de minuto en minuto: dos luces de puerto, de luz blanca; cuatro boyas con campanas para anunciar el peligro, en tiempo de niebla ó de noche. Para montar estos aparatos tan útiles á los navegantes vendrá una persona capaz de dirigir la obra y enseñar su manejo. Para este objeto se han enviado cincuenta mil Francos al Sr. Beltran Fourquet, Cónsul del Ecuador en París.” (Notar que habla de tres faros). 27 El Cónsul Fourquet, consciente del interés presidencial por estos aparatos, puso también un interés muy personal y mantenía contacto con el 89 fabricante para saber el estado del pedido. Esta preocupación llegó al punto de que, a pesar de que la Convención había aprobado “una luz de primera y dos de segunda,” se determinó que el faro para Santa Clara no necesitaba ser mayor al tercer orden y el de Punta Arenas no mayor al cuarto orden. El otro faro de que se habla, previsto originalmente para Punta Mandinga, no fue ordenado. Esto significó un gran ahorro para el erario ecuatoriano y al mismo tiempo es un indicio de que las personas en el poder sabían que no era necesario adquirir ese faro, lo que se confirmaría más adelante. El 18 de octubre de 1871, el entonces Gobernador Gabriel J. Luque, escribía al Ministro de Hacienda: "El Señor Consul Jeneral de la República en Paris con fha 16 del pasado me dice lo sigte. 'Segun tuve la satisfaccion de avisar á U.S. en mi última siete del corriente, incluyo á esta el conocimiento de los faros que recibo de Burdeos por el correo de hoy.= Mi citada contenia el detalle de este envio que hallará U.S. escueto y á la fecha mencionada prevenia al Supremo Gobo. del Ecuador daba á U.S. aviso de todo.= Me suscribo de U.S. att. SS.= B. Fourquet'" 404 Se Contrata un Experto. Estando ya próxima la entrega, los directores de Barbier & Fenestre habían sugerido la conveniencia de que sea una persona debidamente capacitada quien instalara los delicados equipos. El Cónsul hizo la consulta, la que fue aprobada por el Presidente, según leímos en el informe del Ministro de Hacienda. Así, el 19 de noviembre de 1871, se firmó un contrato con el Ing. Ferdinand Dioudonnat, mecánico de faros, para que venga al Ecuador e instale los equipos. Los términos del contrato fueron los siguientes: "Contrato celebrado entre los infrascritos Señor Beltran Fourquet, Cónsul Gl. de la República del Ecuador, residente en Paris, calle des Petites Ecurier, no. 54, por sí y en su calidad de Cónsul, en nombre de la misma República; y Fernando Dioudonnat, mecánico, residente en Paris, calle de 4 Fils, n o. 3. Artículo 1° El señor F. Dioudonnat se compromete con el señor Fourquet y con el Gobierno del Ecuador, á ir á montar y establecer en las Costas marítimas de la República, los faros, fanales y boyas que han sido construidos este año por los Señores Barbier & Fenestre de Paris, que constan de lo siguiente. Un faro giratorio de 3° órden. Un faro giratorio de 4° órden. Dos faroles de puerto colocados sobre "cabane" de fierro. Cuatro boyas de fierro batido, en forma de campana. árt. 2° Recibirá el día de su partida, para gastos imprevistos, doscientos cincuenta francos. 90 Los gastos de conducción, tanto de ida como de vuelta, serán á cargo del Gobierno. Gozará la renta mensual de quinientos francos. Esta renta comienza á correr desde el dia siguiente de su arribo á Guayaquil, advirtiendo que el primer mes ha de serle pagado treinta dias despues de su desembarque, salvo lo que se estipule en este contrato. árt. 3° El Gobierno proporcionará al Sor Dioudonnat los ayudantes, materiales y aparatos necesarios para la ejecución de la obra. árt. 4° El Sor Dioudonnat consagrará todo su tiempo al servicio del Gobierno y se compromete á ejecutar las obras que se le encargue con la mayor actividad; pero queda, sinembargo, estipulado que, salvo el caso de contratos posteriores, su objeto se ha de ceñir á plantear los aparatos de que se ha hablado, y á instruir á las personas que hayan de manejarlos. El Sor Dioudonnat no podrá dedicarse á trabajo ninguno fuera del estipulado en este contrato, sin permiso de las autoridades bajo cuyas órdenes haya sido puesto. Si los faros y fanales no hubieren llegado á Guayaquil cuando desembarque el Sor Dioudonnat, éste deberá emplearse exclusivamente en los trabajos preparatorios para plantar la obra. árt. 5° Miéntras dure su ausencia de Paris y desde 1° de febrero de 1872, el Sor Dioudonnat autoriza al señor Fourquet para dar mensualmente la mitad de la renta, ó sea doscientos cincuenta francos mensuales directamente á su esposa. El Sor Dioudonnat confiesa haber recibido del Sor Fourquet, hoy mismo, la anticipación de quinientos francos correspondientes al primer mes de su renta que le corre desde el día de su desembarque. árt. 6° En caso de enfermedad del comprometido ó de cualquier accidente que pudiera sobrevenirle, gozará de su renta por un mes. Si por enfermedad ó accidente, no pudiera trabajar mas de un mes; pasado este tiempo, gozará solo de la mitad de la renta. Si la enfermedad dura y exige la vuelta á Francia del Comprometido, los gastos de regreso serán á cargo del Gobierno. En caso de desacuerdo ó falta de cumplimiento á lo estipulado en este contrato, el Comprometido será despachado á Francia á cargo del Gobierno, pero no tendrá derecho á ninguna indemnización ni á otra cosa sino á la parte proporcional de su renta mensual que se le deba hasta el dia de su embarque para Francia. Firmado por triplicado, en Paris, el 19 de Novbre de 1871.- Aprobado - F. Dioudonnat. = Aprobado B. Fourquet. = Registrado en el Consulado general del Ecuador en los fos 68 i 69. = Paris 7 de diciembre de 1871. = Por el Consul general = A de Bustamante = Vicecónsul. = Ministerio de Hacienda = Quito, enero 17 de 1871 = Aprobado. = Por S.E. = José Javier Eguiguren." El contrato era muy claro en sus condiciones y el mecánico tenía la función específica de instalar los equipos y enseñar a usarlos. 91 Anticipadamente, en octubre o comienzos de noviembre, se enviaron al Ecuador las especificaciones de construcción de las torres y los diagramas de los faros, con el fin de que se tuvieran listas las torres y el material complementario para proceder a la instalación en cuanto llegaran los equipos. El mecánico francés se embarcó en el puerto de St. Nazaire, Francia, el 7 de diciembre de 1871. El 13 de diciembre de 1871, cuando recién se deben haber estado embarcando los faros, el Ministro de Hacienda escribía al Gobernador del Guayas: “Dispone el Supremo Gobierno que, de conformidad con la factura que devolví a US con mi oficio N°788, proceda US á recibir los faros que han llegado a Guayaquil y cuyos diseños remito inclusos en la presente; y que, tan luego que arribe a esa ciudad el operario contratado para armarlos y colocarlos en los puntos convenientes, haga US que el más grande y de mayor luz se ponga en la Isla de Santa Clara, y de los menores el uno en Punta Arenas y el otro en Punta Española. Lo que comunico a US para su cumplimiento, del cual dará US cuenta a este Despacho. D.G. á US José Javier Eguiguren” Esta comunicación, aunque equivocada por cuanto los faros no llegarían sino hasta después de casi tres meses, es clave por dos razones: Primero, porque está delegando en el Gobernador directamente la recepción e instalación de los aparatos; y, segundo, porque establece el mecanismo de comunicación en este respecto, directamente entre el despacho de Hacienda y Obras Públicas y la Gobernación del Guayas. Incidentalmente, la mención de los puntos donde debían ser colocados los faros es interesante, pues cuando se puso la orden de fabricación se definieron los puntos donde irían. Más adelante veremos que esto fue motivo de varias opiniones e intervenciones que, por lo general, no surtieron efecto alguno. 29 92 Es importante anotar aquí, para claridad de la lectura, que la obra pública en el país estaba a cargo del Ministerio de Hacienda, en una sección de ese ministerio, por lo que las citas futuras se referirán al Despacho como Ministro, Ministro de Hacienda o por su nombre y apellido. Capítulo 12.- Llegan los Faros - 1872 Llega el Experto. El 6 de enero de 1872, casi dos meses antes de que llegaran los aparatos, desembarcó en Guayaquil el ingeniero Ferdinand Dioudonnat, mecánico de faros, quien se reportó de inmediato al Gobernador del Guayas, don Vicente de Santistevan, para iniciar su trabajo. Los trabajos preparatorios empezaron desde el día siguiente. El 7 de enero, en oficio N° 8, el Gobernador enviaba al Ministro de Hacienda copia de carta enviada a él por el Cónsul Fourquet, la cual dice lo siguiente: "El Sr. Consul Jeneral dela República en Paris, con fecha cinco de Diciembre que pasó, me dice lo que á US. H. comunico: 'Participo á US. que en el Vapor de Ste. Nazaire del 7, saldrá para esa el dador, Mr. Ferdinand Dioudonat, encargado de montar los faros que espedi para el Gobierno de la Republica del Ecuador, dirijidos á US. por el Barco Franses 'Carolina' de Burdeus. Este intelijente operario va autorizado de su correspondiente contrato hecho en este consulado, y por consiguiente, dispuesto a ponerse á las ordenes de US. Persuadido por el supremo Gobierno habrá recibido US. las instrucciones ál efecto y previa mi comunicación oficial creo de mi deber recomendar á US. el espresado Mr. Ferdinand Dioudonat, para que aún llegada á esa y presentandose á US, reciba los aucsilios que necesitare.= Soy de US. con todo respeto S S S G S M B. = B Fourquet.' En tal virtud me es satisfactorio comunicar á US. H. la llegada de hoy en el Vapor Ingles 'Chile,' del espresado Ayudante Injeniero Dioudonat... Vte. de Santistevan." 405 93 Ese mismo día enviaba al Ministro otra comunicación, N° 9, en la que cita al Cónsul Fourquet: "Con fecha cinco del actual entregué para Usa. una carta ál Sor Ferdinand Diodounat que pasa á esa para colocar los Faros segun convenio que hé celebrado con él, de orden del supremo Gobierno de esa Republica. Tengo el honor de remitir á USa un ejemplar del contrato hecho con dicho Sor Diodunant, para que USa tenga conocimiento de las obligaciones recíprocas que en él se establecen. Estoy seguro por los antecedentes que de dicho Ayudante de Injeniero tengo, que sabrá habilmente establecer en esos puertos, dichos Faros, como asi lo ha hecho cuando ha sido empleado por los Gobiernos de España y de Gresia, habiendo sido honrrado por ellos con marcadas distinciones." El Gobernador concluye la carta así: "En esta virtud tengo el honor de acompañar á US. H. la siguiente contrata orijinal, para conocimiento de S E el Presidente de la Republica, quedandome con una copia literal de ella para los fines consiguientes; y manifestando á US. H. que me procuraré dar pricipio á los trabajos de colocación de los faros indicados, de conformidad con las ordenes de US. H. recomendada de ante mano..." 406 El 17 de enero de 1872 el Ministro de Hacienda enviaba copia del contrato con el francés al Gobernador Santistevan, encargándolo del cumplimiento del mismo. 30 Ese mismo día el Gobernador recibió una comunicación del Ministro del Interior encargado del Despacho de Guerra y Marina, en que le dice textualmente: “Hoy digo al Sr. Comte. Gral. de ése Distrito lo siguiente. 'Con vista del estimable oficio de VS fecha 10 del pte. N°22, transcribiendo el que ha recibido del Sr. Capitán del puerto, sobre la necesidad de designar los puntos en que según la orden de SE. el Presidente de la República deben ser colocados los faros, i atenta va indicación contenida en el último acápite de su citado oficio, SE el Encargado del Poder Ejecutivo, ha tenido á bien autorizar á VS. para que de acuerdo con el Sr. Gobor. de la provincia i el Capitán del puerto, designen los puntos en que deben establecerse, comisionando para su colocación al espto. Capitán del puerto.---' Lo transcribo á VS para su conocimiento i para que por su parte cumpla con lo prevenido en el oficio inserto. --Dios gue. á VS. Por el Mtro. De Guerra, el del Interior. Francisco A. Arboleda.” La cita completa de este oficio es importante por cuanto en su texto está el preludio de lo que sería poco más adelante un conflicto entre el mecánico y 31 94 el capitán del puerto, que puede haber afectado la instalación misma de los faros al prolongar el tiempo de los trabajos. Por otro lado, los puntos generales de colocación de los faros y los fanales ya habían sido definidos al poner la orden a Barbier & Fenestre, quienes ya habían registrado en su archivo las ubicaciones generales, y cuando tenían las exactas, automáticamente las notificaban a quienes elaboraban el “World Lights List.” Los 9 Puntos del Mecánico Francés. El día 20 de enero el mecánico presentó al Gobernador un oficio en el que sugería 9 puntos para agilitar la instalación de los faros. El Sr. Santistevan lo envió al Ministro para la debida aprobación: “El mecánico de faros del Gobierno, con fecha de hoy, me dice lo siguiente: ‘Es mi deber participar á US. lo que sigue: 1° - Me es imposible hacer nada sin haber ido antes á reconocer los terrenos y las posiciones á donde se debe poner los faros. Por consiguiente, vengo á suplicar á US. ordene á quien corresponda para mi salida á esa, así como lo necesario para el viaje de ida y vuelta; 2° - Una vez bien determinados los puntos tendré el gusto de remitir á US. tres planos de las construcciones de las torres. No obstante, y para no perder tiempo, desde luego, se podrá emplear un carpintero en dichos trabajos; 3° - Mi oficio número 2 indica que US. se digne nombrar un sobrestante para que sea de su cargo hacer los ajustes con los operarios y peones, así como para llevar un libro diario de las operaciones hechas, indicar los adelantos y gastos para la obra; 4° - US. tendrá á bien reconocer que si las torres se fabrican en la ciudad, será una economía muy importante, porque calculo que se necesitarán diez hombres, entre carpintero y peones. Desde luego, sería preciso hacer construir casas provisionales y contiguas sobre tres lugares. Con mi opinión evito todos estos gastos. Una vez concluidas las torres se desarmarán y se conducirá cada una á la positiva que el Supremo Gobierno ordene, lo que se hará con mucha facilidad y con economía sensible; 5° - Adjuntos tengo el honor de remitir a US. dos planos de las varias máquinas, la una hace girar el aparato y la otra la lámpara, con el objeto de participar á US. la importancia y lo difícil de manejar y entretener los aparatos; sobre todo, el destinado para Santa Clara. Y voy á decir á US. el personal que se necesitará: Para Santa Clara 3 torreros Para Puntarena 2 “ Para Punta Española 2 “ Para cada luz de puerto 2 “ 95 Total: 9 empleados Estoy á las ordenes de US. para ponerme á la enseñanza de los alumnos para torreros, la que será solamente en mi habitación unas horas diarias, siendo necesario una escuela, de la cual me haré cargo, salvo el mejor parecer de US.; 6° - Estoy redactando para la aprobación de US. un ‘Reglamento de faros’ bastante extenso y obviará todas las dificultades para el mejor servicio de los faros; 7° - No puedo olvidar de participar á US, y con la importancia que merece, la necesidad de contratar un valandro, sea por remate ó por subasta, en una palabra, tener un contratista con la fianza necesaria que estimará US. El patron tendrá por mision dar las provisiones á los torreros, llevar los oficios y cargar los efectos que se puedan ofrecer para el mejor entretenimiento de los faros; 8° - Estoy haciendo para someter á la aprobación de US. una serie de modelos para impresos mensuales, que los torreros deberán estar obligados á llenar y mandar á US. segun juzgue conveniente; 9° - El punto mas importante es el consumo de aceite, es preciso ser muy rígido sobre el asunto; para el efecto US. encontrará un modelo para que los encargados formen un estado diario del aceite consumido. Dios guarde á US. muchos años – Guayaquil, 20 de enero de 1872. --- El mecánico de faros, F. Dioudonnat.’ Lo que tengo el honor de comunicar á US. H. para que el Supremo Gobierno disponga lo conveniente; asegurando á US. H. que por de pronto marchará dicho mecánico á los puntos indicados para satisfacer sus científicos y justos deseos. Dios guarde á US. H. – Vicente de Santistévan.” 336 y 407 Esta comunicación y su aprobación por parte del Gobierno era un buen comienzo para el Servicio de Faros y auguraba su operación organizada y eficiente – si se cumplían los 9 puntos... El día 24 de enero el Gobernador recibía un oficio del Ministro de Hacienda que comienza así: “Con la llegada del Ingeniero Director de Faros...” En un santiamén el mecánico se había convertido en Director de Faros, título que hasta ese momento no había existido en la República, y si bien este título no se lo menciona constantemente, el mecánico sí apela a él en un momento difícil para su función, dentro del conflicto que mantendría con el Capitán del Puerto de Guayaquil. En ese oficio el Ministro urge la construcción de las torres en los puntos convenientes y dice “Como este Director necesita de un auxiliar, por el respectivo Ministerio se le llamará al servicio al mismo Sr. Aurelio Ballén, encargándole la ejecución de la obra de dichas torres.” ¡El mismo Sr. Ballén que 32 96 en 1863 había sustraído el dinero para el aceite de alumbrado y los sueldos del personal de la farola! También hace una observación sobre los lugares de instalación de los faros: “Como algunos marinos opinan que la “Punta Centinela” es más adecuada que 'Punta Española' para la colocación de un faro, también queda US. Autorizado para que, oyendo previamente a los Capitanes de los buques existentes en Guayaquil y sobre todo a los Capitanes de vapores de la 'Mala', designe cual de estas dos puntas ha de ser preferida... ...todo con arreglo a lo que diga la mayoría de los Capitanes consultados, entre los cuales debe figurar y presidir el Capitán del Puerto.” Por alguna razón el Gobernador se estaba haciendo el desentendido en cuanto a la prerrogativa del Capitán del Puerto, y el objeto de esta observación es decir que no se lo deje fuera de las decisiones a tomar. Lo más probable es que el francés debe haber informado al Gobernador que esta intervención sobre ubicaciones no era necesaria, por cuanto no había decisiones que tomar en relación con el lugar general de instalación de los dos faros y las dos luces de puerto. Su destino había sido fijado, como vimos antes, al poner la orden a Barbier & Fenestre. Más adelante veremos que el Francés, sin discutir, coloca los faros en los sitios fijados originalmente, con la adición del de Punta Mandinga, que no estaba en la lista original. Lo que sí era necesario fijar era el lugar exacto dentro del punto general ya establecido, y veremos más adelante cómo el mecánico pide la participación de una comisión para definir la ubicación exacta de uno en particular. Continúa el Ministro: “... encargo a VS. que concluida la colocación de los tres faros, se traslade el Director destinado a colocarlos a Manta y Esmeraldas. Las luces de puerto tienen su torre de hierro y no necesitan nada de madera.” Estas últimas, si bien tenían su armarín (cabanne) de hierro y cobre, no tenían torre, por tanto sí era necesario elaborarlas en madera. Concluye el Ministro: “...deberá VS. exigir del contratista venido para este objeto, que enseñe a manejar, limpiar y conservar los faros y luces de puerto, dejando una instrucción escrita sobre todo esto.” El mismo día 24 de enero el Ministro de Hacienda escribía otro oficio al Gobernador sobre el Sr. Ballén, el que citamos íntegro pues nos da una idea 97 de las gestiones que se hacían entretelones para que entre a formar parte del trabajo de instalación de los faros: “Hoi me dice el H. Sor. Mtro. del Interior lo que sigue: Con esta fcha. Digo al Sr. Comandante Gral. del Distrito de Guayaquil, lo que a US. H. Copio: S.E. el Vicepresidente de la República Encargado del Poder Ejecutivo, ha tenido a bien disponer que US. llame al servicio activo al Teniente de fragata de la Armada Nacional Aurelio Ballén, para que marche con el ingeniero, en calidad de auxiliar, a colocar los faros en los lugares que se designe, y se encargue de la dirección del trabajo de las torres, a cuyo fin la Gobcion de esa prova recibirá las ordenes correspondientes por el Mtrio. de Hcda...” 272 Ese mismo día el Ministro del Interior oficiaba al Cmdte. General del Distrito de Guayaquil con la disposición de la incorporación del Sr. Ballén. 273 El día 27 del mismo mes, el Ministro de Hacienda contesta al Gobernador con la aprobación de los 9 puntos sugeridos por el mecánico, indicando que: “...el Supremo Gobierno aprueba las indicaciones hechas por el Mecánico, debiendo en todo caso ceñirse Ud. á las instrucciones contenidas en mi oficio n° 14 (el recibido el 24 de enero). Por lo que hace al nombramiento del sobrestante, lo está ya el Sr. Aurelio Ballén.” Seguramente el Gobernador había objetado la designación del Sr. Ballén por los antecedentes, pero había alguna fuerza que lo quería allí. Ciertamente no era el Ministro Eguiguren, pues poco debe haber conocido de los pormenores ocurridos aquí ocho años antes. 33 También el 27 de enero el Gobernador informaba al Ministro de Hacienda que: “...hoy sale en la Goleta de Guerra Mercedes el Sr. Fernando Dioudonnat... ... con el objeto de inspeccionar y hacer las observaciones necesarias para la colocación de ellos, así como para la construcción de los torreones de los faros i mas que fuere necesario con relación á lo mencionado.” Nuevamente vemos que el Gobernador ha dejado de lado al Capitán del Puerto y el mecánico ha salido solo a inspeccionar los sitios de instalación. El 3 de febrero el Ministro se da por enterado de la salida del mecánico. 34 377 A su regreso del viaje, el mecánico presenta al Gobernador una carta y su informe de inspección. Primero examinaremos la carta, por cuanto dice algo de la situación del momento. En la carta, el mecánico observa que era de su entendimiento y así se lo había indicado el Cónsul Fourquet, que las torres estarían listas (no 37 y 409 98 olvidemos la información técnica que había sido enviada meses antes) para recibir las linternas. Si esto era cumplido, el mecánico iría directamente a los sitios de instalación a trabajar y no tendría que estar en la ciudad, con los gastos adicionales consiguientes. Por ello, el mecánico pide al Gobernador que, mientras tenga que estar en la ciudad dirigiendo trabajos, se le reconozca 2 pesos diarios para cubrir sus gastos extras no tomados en cuenta en el contrato. El Gobernador, sin decirlo directamente, recomendó atender este pedido del francés. Las torres debían haber estado armadas, pues para ello se envió los diseños con anterioridad. Sí sabemos que el Ministro Eguiguren envió al Gobernador del Guayas los documentos, pero no sabemos qué hizo el Gobernador con ellos. Siguiendo el órgano regular, debía haber sido la Capitanía del Puerto de Guayaquil la que se debía de haber encargado del armado de las torres y así tomar el liderazgo en cuanto a los nuevos faros, pero aparentemente nunca les llegó el encargo. El Informe del Mecánico. A pesar del interés que tiene el informe, no lo citaremos textualmente debido a su extensión, pero sí lo iremos haciendo a medida que avanza el relato. El mecánico salió a reconocer las costas y los puntos de instalación de los faros, en respuesta a lo dispuesto en el oficio fechado 13 de diciembre de 1871, enviado por el Ministro de Hacienda al Gobernador. Se movilizó en el pailebot de guerra “Mercedes,” en compañía del Cmdte. del buque, José Hermeregildo Chávez y un práctico. El primer punto que reconocieron fue Punta Mandinga, usando como pauta en el reconocimiento una carta de Horatio Battle, entonces Capitán del vapor “San Carlos,” publicada en el periódico oficial "El Nacional," el 10 de enero de 1872. Subieron al monte y determinaron que, en la parte denominada “Boyacá,” se podía colocar fácilmente una luz, sugiriendo el francés “la de Santa Clara, supongamos, cuanto sea desarmada” ¿Cómo? ¿Y no había declarado la Convención que era totalmente inútil? Se podría decir aquí que el mecánico aún no había llegado a Santa Clara y por tanto no sabía lo que decía (aunque ya había pasado por Santa Clara en el buque cuando llegó al país). El 30 de enero reporta que llegaron a Santa Clara. Dice que “...el material (de la torre ) del aparato viejo no puede servir en vista que no corresponde con las dimensiones nuevas; sobre ocho pilares de 0 m. 25 ps. Cuadrados, quatro están 36 y 408 autor 99 pudridos. La torre que existe es una pirámide octogonal truncada, su base tiene 5 m. 50 circuito; para la torre nueva, necesita 12 metros de diámetro en su base y 5 metros en el piso superior, para recibir el aparato. La torre que existe a sido construida sobre una solera que descansa sobre la tierra misma; en la parte al N. dos soleras están pudridas, lo que hace que la torre incline bastante al norte.” Y luego nos dice algo sorprendente, y esta es la sorpresa que les mencioné antes: “En el tiempo que se hará la instalación del nuevo faro, no se desarmará el viejo, no se apagará un solo día la luz existente. Además la torre vieja dará recurso inmenso que servirá de alojamiento para los operarios y almacén para recibir el aparato nuevo.” ¡No se apagará un solo día la luz existente! ¡De un aparato que era inútil! Para rematar esta información, al final de su informe el francés indica en un “post scríptum:” “El aparato de Sta. Clara está bien entretenido y limpio.” Entonces el francés sí sabía lo que decía cuando observó en Punta Mandinga que allí se podría instalar el faro antiguo de Santa Clara. Esto responde a los comentarios que hiciéramos cuando la Convención declaró que el faro era inútil y que había que establecer un faro en Santa Clara. Por otro lado, queda clara la razón por la cual no se ordenó el faro para Punta Mandinga. No sabemos si en 1869 el faro estaba apagado a propósito, con el fin de hacerle el juego a la Convención para que se adquirieran nuevos faros, pero las observaciones en diversas épocas de que el faro no funcionaba tienen sustento, por lo tanto puede haber sido parte del perenne y hasta ahora existente problema de presupuestos insuficientes para los requerimientos de los servicios. También es muy posible que esta “resucitación” del faro para la visita del francés se haya debido a una inusual actividad de los encargados, con el fin de tratar de salvar de alguna forma su imagen, disminuida por la irregularidad en la operación del aparato. En todo caso, el antiguo cuarto de linterna de Santa Clara sí fue trasladado a Punta Mandinga, donde sirvió hasta entrado el Siglo XX, a pesar de que la óptica de 6° orden fue cambiada en al menos una ocasión. Y en cuanto a combustible, aunque el francés no lo menciona, debe haberse sorprendido al encontrar que el faro antiguo usaba queroseno para su lámpara. Los derivados del petróleo, como el queroseno, empezaron a comercializarse recién a comienzos de los años 1860. Para un técnico acostumbrado a las lámparas de aceite de colza y de oliva, el que ese faro antiguo contara con lámparas alimentadas por este combustible moderno debe haber sido de lo más curioso. De hecho, se impresionó tanto que, a la 100 primera oportunidad, cambió las lámparas de todos los faros, como veremos más adelante. Este relato del francés también nos da la única referencia que tenemos sobre la torre del antiguo faro, pues ningún otro relato, incluyendo el de la instalación, había dado una descripción, siquiera parcial, de ella. Luego, el mecánico observa que no encuentra muchas dificultades para que las piezas de la torre nueva se labren en Guayaquil y sean llevadas a la isla, para armar la torre en el sitio. El mecánico hace el cálculo del alcance que tendrá la luz e indica que “La altura del plano focal, hasta el nivel medio del mar, será de 79 metros, lo que da una tangente de 34.835 metros o sean 18 millas y ½, más tomando en consideración la altura de un buque alcanzará la luz a 24 millas mínimum.” El dos de febrero estaban en Punta Arenas y el mecánico bajó a tierra para reconocer “...una loma de arena fina que daba al parecer, todas las esperanzas para colocar el faro.” Pero una inspección más a fondo le demuestra que ese lugar no tiene la consistencia necesaria. El día tres reconocen la parte norte de la punta y reporta “...por fin encuentro con mucha dificultad un manglar que da lo necesario para la buena instalación de una torre que es en terreno firme, consolidado forzosamente por las raíces de los mangles.” Determina también que “...la torre necesita tener 25 metros de altura y por tanto es una obra de importancia por las dificultades a vencer.” Comenta que será necesario desmontar dos cuadras de mangle y por tanto habrá la madera propicia para una casa provisional y un muelle de 45 metros con su escalera. Añade: “Con la torre, el plano focal del faro estará en 28 metros de altura desde el nivel medio del mar, la tangente será de 21.325 metros, o sea el horizonte a 11½ millas. Con la altura de un buque, la luz se verá a 15 millas “minimum.” Las medidas preliminares de las torres que dio el francés en este informe variaron considerablemente en la ejecución de las obras. El 4 de febrero entraron a Punta Española, donde fueron recibidos por el Sr. Game, Cónsul de los EE. UU. de Norte América. El 5, en compañía del Sr. Game, reconoce la Punta Española y determina que es un lugar ideal para establecer un faro. Sugiere al Gobernador que se ordene de inmediato a Francia el faro para este punto, y hace una argumentación que lo ubicaría entre los mejores vendedores de Barbier & Fenestre: “Ahora bien, llamaré la mayor atención de V.S.H. sobre el particular: Los faros nuevos que se van a colocar 101 tienen un carácter particular de buen gusto, de lindeza y de fuerza. El faro de Punta Española es de todos el más espuesto á la vista, los buques de todas clases pasan al pies de la punta, vengo a suplicar a V.S. hacer el cargo de la linterna en Francia, cuestará la mitad que mandarla hacer aquí, los cristales vienen en una sola pieza, la cúpula también es de una pieza con su bola, su pararrayos con cadena de 25 metros y sus puntos cardinales con sus flechas giratorias a todos los vientos. Todo es de bronce pulimentado por dentro y por fuera, el grueso de los cristales es de 0,008 mm. (Aquí un dibujo). (¡Que lamentablemente no está!). El precio del todo es de 700 $ siete-cientos pesos, tomado en París. Se encierra en 4 bultos solamente y mide 5 metros cúbicos. Si se hace la linterna aquí, los cristales solamente, son 96 a 10 pesos costarán más que 960 $ pues los hierros la cúpula toda no saldrá la linterna a menos de 1.500 pesos. Si se hace el encargo para el 1° vapor con la fecha 5 de mayo próximo venidero la linterna será á Guayaquil. Suplico a V.S. tomar á bien mi proposición, en el interés del país y para el adorno que merecen los faros. Repito a V.S. que no costará la mitad del precio, y luego para armar la linterna no se necesitará que unas horas, todo siendo hecho por piezas enteras.” ¡El tipo era un muy buen vendedor! Según los registros de Barbier & Fenestre, la luz se pidió y fabricó en 1872, luego de la aprobación que diera el Ministro Eguiguren el 17 de febrero de ese año, según oficio N°25. Pero como veremos más adelante, luego de informe favorable del Capitán del Puerto, el Gobierno la aprobó nuevamente en octubre de 1873, más de un año y ocho meses después. Si bien los registros de Barbier & Fenestre la consideran fabricada en 1872, es posible que no haya sido pagada y por lo tanto no se la haya entregado hasta 1873. 136 136 Para finalizar su informe de los faros presenta un derrotero: “Quando un buque entrará por el puerto de Guayaquil. La luz de Santa Clara se verá a 24 millas al minimum. Una vez el buque pasado á Sta. Clara, a medio camino de Punta Arenas, verá á la vez las dos luces; pasando Punta Arenas y a medio de Punta Española se verá las dos luces también a la vez y doblando la Punta Española se verá la luz de Punta Mandinga al lado de Puná.” ¡Sin duda que ese tramo de la entrada a Guayaquil quedaría muy bien iluminado! 102 En cuanto a las boyas, informa lo siguiente: “Por lo que hay de las boyas, se pondrán según como están marcados en los puntos de la mapa, salvo lo que disponga el Gobierno Superior. Me dice el Sr. P. Game que: por frente de la Isla Verde existen dos bajos que el canal es muy estrecho y casi en el medio un banco que no tiene una braza, lo que verificó, siendo muy exacto. Sería un buen lugar á poner una boya. Es lo que tengo el honor de poner en el Superior conocimiento de V.S.H. en cumplimiento de la misión que tuvo V.S. á bien ordenarme hacer.” Muy interesantemente, este párrafo tiene una afirmación que se corrobora con la carta resultante de la expedición de la H.M.S. Sulphur, de 1836. Esa carta, impresa al concluir la expedición, tiene el faro y las boyas que se instalarían en 1841 en Santa Clara y los Bajos de Mala. Parece que la comisión determinó los puntos más necesarios para poner el faro y las boyas, y con la palabra del Presidente de la República, éstos quedaron ubicados en la carta náutica a publicarse. Eran los tiempos en que la palabra de una persona valía lo que el oro. El mecánico era un hombre ordenado y metódico, por lo que sus informes y correspondencia eran numerados, de tal manera que nos dejó un muy ordenado y proficuo relato de sus actividades entre 1872 y fines de 1873. Parece que el Ingeniero Dioudonnat hablaba y escribía el Español, seguramente aprendido durante su trabajo en España. La letra y sintáxis de sus informes nos indican que fueron escritos por él, y a esto se deben ciertas peculiaridades idiomáticas. El informe es muy completo y prolijo y da la pauta de lo que el mecánico francés haría durante los próximos dos años. De ese informe surgió el plan de instalación de los equipos, el cual se ejecutaría sin variantes a pesar de los escollos en el trabajo y de las presiones que se ejercerían sobre el Gobernador de Guayaquil y el mecánico durante los próximos meses. Este plan quedaba resumido así: 1. Se instalará el Faro de Santa Clara. 2. Se reubicará el antiguo Faro de Santa Clara en Punta Mandinga, sobre una nueva torre. 3. Se instalarán las 4 boyas. 4. Se instalara la luz de puerto de Manta. 5. Se instalará la luz de puerto de Esmeraldas. 103 6. Se instalará el Faro de Punta Arenas, el más complejo por su ubicación. No se estableció un cronograma de tiempo, pero se estimaba que tomaría todo 1872 y parte de 1873. El día 31 de enero se publicó en “El Nacional” el texto del contrato del francés, pero conteniendo errores que causaron la desesperación del mecánico al detectarlos a su regreso a Guayaquil. En efecto, hay una contradicción entre los artículos 2° y 5°, a más de que el segundo párrafo del artículo 5° ha cambiado el sentido en la traducción. El mecánico escribe al Gobernador inmediatamente luego de su regreso a Guayaquil: "... En el "Nacional" los artículos 2° y 5° están en contradicción uno con otro. Pero; leiendo el original escrito en Francés y a mi desesperación es bien escrito <<desde el día de su desembarque>>..." El Nacional decía "desde el día de su embarque." Esto no era un problema mayor, pues el Gobernador tenía copia del original, pero al francés le preocupaba por cuanto alguien podía pensar que quería estafar al Gobierno. 35 38 Este detalle de precisión y preocupación impresionó al Gobernador Santistevan, quien mencionó esto en carta enviada al Ministro de Hacienda el 10 de febrero. En la carta cita el texto de la comunicación del mecánico y hace esta acotación al final: "Lo que tengo el honor de comunicar a VS. H. en prueba de la buena fé del empleado público oficiante, para los fines consiguientes..." 39 El 17 de febrero de 1872 el Ministro Eguiguren comunica que S. E. el Presidente leyó el informe del Ingeniero mecánico de faros y éste "ha merecido la aprobación suprema en todas sus partes." Insiste el Ministro que "...para la colocación de las boyas debe pedirse informe al Capitán del puerto, quien con los conocimientos que tiene podrá señalar los lugares que más necesiten de aquella precaución..." Añade luego: "Para la adquisición de la linterna necesaria para el faro que no la tiene, puede VS. dirigirse pidiéndola al Sr. Cónsul general de la República en Paris á quien se le escribe por este Despacho interesándole sobre el particular..." La linterna para Punta Española fue pedida de inmediato y fabricada, pero no fue pagada y entregada hasta más de dos años después. 40 El Gobernador Santistevan no se había quedado tranquilo con el asunto de la llamada al servicio activo del Sr. Aurelio Ballén y sus gestiones surtieron el efecto deseado. El 17 de febrero escribía el Ministro Eguiguren: “Con 274 104 fecha 13 del presente, me dice el H. Señor Ministro de Guerra lo siguiente: ‘En oficio fecha 24 del mes próximo pasado, número 35, tuve el honor de comunicar á VS. H. el llamamiento al servicio activo hecho al Teniente de Fragata de la armada nacional Aurelio Ballen, con el objeto de que marchara con el Ingeniero á colocar los Faros en los lugares designados i quedar hecho cargo del trabajo de la construcción de las torres. Mas habiéndose escusado dicho oficial por el mal estado de su salud, S.E. el Presidente de la República ha tenido á bien diferir á ella...” Y así se solucionó ese potencial problema. Previa la llegada de los equipos, se había establecido un área para el armado de las piezas en un colegio que estaba al pie de la ría. Llegan los Aparatos. El 4 de marzo de 1872, a bordo de la barca francesa "Perseverant," llegaron a Guayaquil los faros y las boyas. Según consta en los registros de la firma Barbier & Fenestre, el pedido consistía de los siguientes aparatos: Un aparato de 3° orden, luz giratoria blanca, destellos cada 30" en 30" (segundos). Para Isla Santa Clara. Un aparato de 4° orden, luz giratoria, destellos rojos de ' en ' (minuto en minuto). Para Punta Arenas (Puná). Dos aparatos de 6° orden, dióptricos, cobertura de 270°, cabina de fierro. Para Esmeraldas y Manta. Cuatro boyas con campana. En total, cuatro faros y cuatro boyas. El 7 de marzo, el mecánico inspeccionó los cajones a bordo. Parece que le pidieron armar las boyas en el mismo barco para botarlas armadas al agua, pero el técnico explicó que su peso aumentaría de 1.800 Kgs. desarmadas (la unidad flotante) a 3.835 Kgs. armadas, lo que dificultaría su desembarque. Sugirió al Gobernador que sería más fácil que se desembarque la parte del flotador de las boyas y se las lleve a remolque hasta el colegio en marea llena, de tal forma que se puedan armar las otras piezas en las mareas bajas, ahorrando así gastos extras. Pidió también que se le manden tres alumnos que le servirían de operarios y "será la mejor escuela para ellos..." Realizó un inventario, con el fin de que se ordenen las partes en los almacenes y así facilitar el armado y economizar en "jornales de peones." El inventario fue el siguiente: 105 "El aparato de "Sta. Clara" El aparato "Pta. Arenas" Luz de Puerto 1ª Luz de Puerto 2ª Boya A Boya B Boya C Boya D está encajado ------- id ------------ id ------------ id ------------ id ------------ id ------------ id ------------ id ------ N° 1 - 44 N° 45 - 57 N° 58 - 63 N° 64 - 69 N° 70 - 83 N° 84 - 97 N° 98 - 111 N° 112 - 125 Las ocho separaciones distintas se hacen en cumplimiento del orden y economías." 41 Como el espacio cedido en el colegio no era adecuado para el almacenamiento de las cajas, Dioudonnat informa al Gobernador el 12 de marzo que se ha tomado una bodega para "guardar herramientas y demás piezas para la construcción de las torres." Indica al Gobernador que el dueño de la bodega "pide su alquiler desde el 1° del corriente a razón de Cuatro Pesos mensuales." 42 El 14 de marzo las cajas seguían a bordo de la "Perseverant" y se había dispuesto sean desembarcadas al pie del colegio. El mecánico pasa una comunicación urgente al Gobernador informándole: "Los bultos para faros y boyas pesan mucho porque llevan cantidad de piezas en un solo cajón. Sería casi imposible hacer el desembarque en el río al piés del Colegio. Para obviar ese inconveniente vengo a pedir a V.S. su aprobación superior para abrir los bultos en uno de los almacenes de la Capitanía del Puerto, ó cualquiera otro. Luego teniendo las piezas sueltas no llevará ninguna dificultad. Deseo que V.S. me entreguese una orden para que según convenga la exigencia el Guarda Almacén de la Aduana no ponga oposición para sacar las cajas á proporción que me necesitarán." 43 El día 16 de marzo el Gobernador pone en conocimiento del Ministro que se están encontrando "estorbos" en el desembarque de los bultos, en especial de las boyas. Resulta que el Capitán de la "Perseverant" quería que se le pague 400 pesos fuertes extra por desembarcar la boyas, pues eran muy pesadas y el buque no tenía medios propios para desembarcarlas. Hubo cruce de cartas con los agentes de la nave y el asunto llegó al punto que casi se va la barca con las boyas a bordo, pues no se ponían de acuerdo. El Gobernador hizo una contraoferta de 250 pesos, pero el Capitán no la 106 aceptó. Finalmente, aunque muy disgustado, el Gobernador accedió a pagar los 400 pesos para lograr el desembarque. 410 El mismo 16 de marzo el Ministro de Hacienda pone en conocimiento del Gobernador la respuesta del Presidente a un pedido formulado por el Capitán del Puerto: "...ha ordenado que se someta a Junta de Hacienda de esa provincia la petición del aumento de medio real á las raciones de cada uno de los empleados del Faro, en la isla de Santa Clara, para que lo acuerde, siempre que á su juicio, sea indispensable este aumento." Vemos un súbito interés por el bienestar del personal, cuando se está en un momento de transición, y esto nos demuestra que el faro antiguo debe haber estado funcionando. 44 También el 16 de marzo, con N° 29, el Gobernador transcribe al Ministro el informe de ese fecha del mecánico, en que lo pone al tanto de los progresos de los trabajos de carpintería que se están realizando en las torres de Punta Española y Santa Clara. 411 Parece que ese día 16 de marzo fue de extraordinaria actividad para el Gobernador, pues escribe al Ministro otro oficio, con N° 30, en que dice que, debido a la necesidad, el mecánico contrató una bodega desde el día 12 del presente, a razón de cuatro pesos mensuales. 412 Para terminar ese ocupado día, el Gobernador envía el oficio N°31 en el cual cita al mecánico en su insistencia sobre el almacén y 4 hombres en calidad de alumnos. 413 El mecánico ya estaba desesperándose por la lentitud burocrática. El haber contratado la bodega sin la autorización previa del Ministro podía haberle traído problemas. Afortunadamente para él, el Ministro aprobó el contrato. El 18 de marzo el mecánico insiste que: "Se me necesita un cuarto bastante grande para servir de Almacén en el Colegio, si se puede, por ser próximo á la fábrica, y que sea muy seguro." El armado de las torres ya estaba en proceso, y no queriendo distraer al personal que estaba realizando esos trabajos, pide 4 hombres más para el armado de los aparatos "...en qualidad de Alumnos para Faros; es la mejor instrucción que pueden recibir y á las veces, me servirán de peones." 45 107 El Ministro de Hacienda contestó el día 22 de marzo al pedido del Gobernador del 12 de marzo, con la aprobación presidencial para el arriendo de la bodega y el destino de una pieza del colegio para almacén de la obra. En cuanto al pedido de cuatro personas, autoriza al Gobernador para que: "...señale los ciudadanos que quieran dedicarse a este aprendizaje i los destine inmediatamente á tal objeto con la oferta de que serán colocados i obtendrán un sueldo correspondiente á su trabajo, llegado el caso de poner en practica sus conocimientos. A mas de los cuatro mencionados, es obligatorio al Ayudante de la Capitanía del puerto el aprendizaje de armar las torres, montar los faros i saber manejarlos; de modo que en cualquiera eventualidad sea este empleado quien dirija aquellas operaciones. Por tanto US. cuidará que dicho ayudante cumpla exactamente este deber." Esto no se cumplió y el “ayudante” nunca acompañó al francés. 46 Con fecha 23 de marzo el mecánico pasó al Gobernador una propuesta del Sr. Cónsul de Francia, Eduardo Poudavigne, para vender 2 anclas. Como al Gobernador le pareció que estaban muy caras, pidió al Ministro la autorización para pedirlas al Callao. La oferta del Sr. Poudavigne estaba contenida en el Informe N° 20 del mecánico. 414 y 415 Capítulo 13.- Se Instalan el Faro de Santa Clara y las Boyas 1872 - 1873 Armado y Preparación de los Aparatos. El resto de marzo y todo el mes de abril se dedicaron a la construcción de las partes de las torres y al armado parcial de los faros. Las torres serían llevadas en partes y armadas en los puntos de ubicación. En la construcción se incluyó la torre del Faro de Punta Mandinga, que sería de características adecuadas para el tamaño, pues albergaría la linterna que sería retirada de Santa Clara. Las partes de los dos faros fueron armadas parcialmente, tomando en cuenta que tendrían que ser desembarcadas en balsas y luego transportadas a mano hasta el lugar donde serían instaladas. El Comandante General de Marina recibió del Presidente García Moreno instrucciones para que el Faro de Santa Clara sea probado, y el día 30 de abril notificaba al Gobernador que: "Tengo instrucciones recibidas de S. E. el 108 Presidente de la República para que, como Comandante General de Marina, haga ensayar el faro destinado á la isla de Sta. Clara mandándolo encender el día de mañana 1° del mes entrante. En consecuencia, espero que V.S. con su acreditado patriotismo se servirá cooperar á tan laudable objeto. fmdo. Fco. J. Salazar." El faro fue probado el 1° de mayo, a pesar de que implicó armar el tambor lenticular, el que luego debió ser desarmado nuevamente para el transporte, con el consecuente peligro para los delicados lentes. ¿Por qué fue necesario hacer esa prueba? Si fuera un instrumento fácil de armar parecería lógico probarlo por la novedad, pero armar y desarmar nuevamente un aparato tan complejo solo para ver si prendía parece un poco ilógico. A fin de cuentas, si de prender algo se trataba, bastaba con prender una de las lámparas Degrand, que sería la fuente de luz. Armar y desarmar el tambor lenticular, tan delicado, solo podía ser un capricho que consumiría tiempo y dinero, aunque sí sería un buen ejercicio para los "alumnos." 47 El 3 de junio el Gobernador recibió una carta en Inglés del Sr. Horatio Battle, Capitán del S.S. San Carlos, en la cual decía lo siguiente, según el traductor de la época: “...Suplico á VS. me permita la libertad de indicar que una de las boyas de fierro construidas últimamente, i que flotan ahora cerca de la Capitanía, sea colocada como una señal del Arrecife de Atacames cerca de Esmeraldas. Este arrecife es mas temible que cualquiera otro en la Costa del Ecuador, pues siendo de Coral i á siete millas náuticas de la tierra, la menor profundidad sobre él es de seis pies en la baja marea, í la mar rompe solamente sobre él en muy mal tiempo. No hai paso del lado de adentro del arrecife para buques grandes, i es ciertamente mui importante que una de las Boyas sea colocada alli. He dado al Sr. Capitán del Puerto una ecselente Carta del Arrecife para su cuidadoso examen, í él piensa que una de las Boyas debe colocarse allí...” El Capitán del Puerto de Guayaquil respaldó la sugerencia del Capt. Battle. 275 y 276 El Gobernador, mediante oficio N° 476 del 5 de junio, puso al tanto de ese peligro y el pedido correspondiente al Ministro de Hacienda y pedía la compra de otra boya, pues las cuatro que llegaron ya estaban destinadas para colocarse dentro del Canal de Jambelí. Sin embargo, esta comunicación tuvo el efecto de cambiar el destino de una de ellas. El punto original sería cubierto luego con una boya de balsa, fabricada localmente. El Capitán Battle fue autorizado para instalar la boya. 416 109 En su informe N° 35, del 17 de junio de 1872, el mecánico informaba al Gobernador: "Señor:= Cumpliendo la órden de US. N° 663, fha 21 de Mayo proscimo pasado, me embarqué á bordo de la goleta 'Mercedes,' el 23 á la siete de la noche; los viveres no habiendo sido surtidos fué la causa de atrazar la salida hasta el otro dia á las 10 de la mañana. Se embarcaron abordo, el maestro carpintero José F. Sanches, los carpinteros Balvino Sanches, Ignacio Herrera, i Manuel Jaramillo, los alumnos Benigno Marques, Alejandro Cruz, Salvador Cuesta i los peones Diego Morla, Eriberto Guevara, José Magallan, José Ordoñes, Pedro Olmo, Juan Pispira, José Velasco.= Hemos desembarcado el sabado 25 del mismo á las diez de la mañana. Desde luego, con toda la gente i la tripulacion de abordo, se armaron dos balsas. Antes de la una de la tarde, todos los viveres, los bultos de equipaje, cajas de herramientas, algunos de maquinaria estubieron en tierra en la casita. Se desembarcaron tambien dos balsadas de madera; toda la jente colaboro en el trabajo que duro hasta las siete de la noche para dejar las maderas..." Continúa el informe con detalles del desembarque de otros materiales y el transporte de éstos y herramientas hasta el pié de la torre del antiguo faro. Dice que entregó los inventarios de piezas y herramientas "al encargado del faro que alumbra." Luego de dejar organizado el trabajo, regresó a Guayaquil a embarcar más madera y recibió "las cajas que contienen la linterna del faro punta 'Española'" (lo que debe ser un error, según veremos más adelante). Un peón de la carcel, Pedro Olmo, se enfermó y fue reemplazado por Diego Diario. Una vez a bordo la carga, regresó a Santa Clara y al llegar, en la madrugada del 11 de junio, "Fué mucho mi placer al ver que el esqueleto de la torre estaba ya armado." Añade: "...mi primer cuidado, ha sido ir á ver á los operarios, i la obra que llamo toda mi satisfaccion por el trabajo hecho en 10 dias á pesar de las dificultades que se encuentran para subir las maderas pesadas á la meseta del monte.= ...tan luego como desembarqué en Santa Clara, principié á armar el faro." Este informe es valioso por contener los nombres de los "alumnos," algunos de los cuales serían el núcleo del personal del Servicio de Faros. 417 Durante su breve estadía en Guayaquil, entre viajes a Santa Clara, el Gobernador había entregado al mecánico la factura de los faros y boyas, enviada por el Cónsul Fourquet, para que la revise. Dioudonnat había regresado a la isla sin devolversela al Gobernador y éste comunica al Ministro que le enviará el documento tan pronto regrese el mecánico. 418 110 Se Instala el Faro de Santa Clara. El trabajo de preparación y armado continuó sin mayor contratiempo y el 30 de junio de 1872, en informe N° 36, el Ing. Dioudonnat comunicaba al Gobernador, desde la isla de Santa Clara, que desde el 12 al 28 de ese mes se había progresado en la construcción de la torre, y fuera de las horas de trabajo, se había compuesto la casa provisional de los trabajadores de la obra. También informa que se desembarcaron 2 cajas de madera con piezas, 2 del aparato, 2 de la linterna, 1 para los víveres y los barriles de agua. En el desembarque y subida a la meseta donde está ubicada la torre colaboraron el personal de trabajadores y el personal de a bordo. Reporta también que las olas mojaron las cajas y las piezas del faro fueron sacadas en la orilla para limpiarlas y así evitar la oxidación. Informa también que: "Siempre se activan los trabajos i con la buena inteligencia entre el maestro é yo. Será preciso que en el próximo viaje se vaya a esa el Maestro D. José F. Sánchez para surtir el último pedido y demás útiles aun á Guayaquil para la conclusión de la obra. También se me necesitará un buen hojalatero para soldar y estagar (estañar ) las 81 piezas que componen la cúpula y los 70 pernos de cobre para que no filtre el agua." autor 48 y 419 El día 30 de Junio el mecánico nuevamente informa al Gobernador, en su reporte N°42, que al desembarcar las piezas del faro en las balsas, las olas pasaban por encima, por lo que era necesario hacer una limpieza prolija de los componentes. Para ello pide le envíen urgentemente "4 peones que pueden ser de la cárcel" y un listado de materiales para la limpieza de los componentes mojados. 49 y 420 El reporte N°43 del mismo día demuestra el grado de control que mantenía el Gobernador y el Gobierno sobre la obra, ya que a través de ellos se tenían que tramitar asuntos tan domésticos como un pedido de víveres: "Señor Gobernador: Vengo á poner á la superior aprobación de V.S. el pedido aquí adjunto de víveres para los trabajadores del faro en construcción en la Isla de 'Santa Clara.' En el almacén la existencia basta por el nuevo viaje ó sean 20 días, ida y vuelta." Pero éste era apenas el primer paso, pues lo que el mecánico pedía al Gobernador, éste a su vez lo sometía al Ministro para que gestione la aprobación del Presidente. El proceso de la compra de algo tan básico 50 y 421 111 como víveres tomaba aproximadamente 18 días, como veremos poco más adelante. Ahora bien, el tiempo que estaba tomando la ejecución de la obra en Santa Clara se estaba prolongando. El Ministro Eguiguren le escribe impacientemente al Gobernador indicando que le ha sido "...prevenido decirle que exija la pronta conclusión de la obra." 51 El pedido de víveres y materiales urgentes formulado por el mecánico al Gobernador el día 30 de junio fue notificado por éste al Ministro de Hacienda, quien recabó la autorización del Gobierno y escribe el día 13 de julio, trece días después de formulado, con la respuesta. Tomando en cuenta el tiempo que demoraba el correo, la autorización llegó a Guayaquil, en el mejor de los casos, el día 17 de julio. ¡No hay mejor muestra de una administración centralizada! Estas demoras, sumadas a la dificultad en conseguir naves para transportar los materiales a la isla, son las mayores causas de la demora en la conclusión de la obra. Felizmente, en algunos asuntos, el Gobernador no esperaba respuesta sino que ejecutaba, dando por hecho que la respuesta sería positiva; y esto es lo que dio un cierto grado de agilidad a la obra que, de llevarse con la parsimonia de la burocracia, tal vez tomaba años en completarse. 52 El 19 de julio el mecánico francés reportaba al Gobernador, mediante informe N° 54, lo siguiente: "Ahora que se va á concluir de armar el faro que debe alumbrar, se necesita el personal de tres torreros. No veo hasta ahora mas que dos de ellos. El señor Fernando Nuñez y el alumno Alejandro Cruz: este jóven es trabajador y formal, y deseo que US. le dé el nombramiento de torrero que lo merece bajo todos conceptos. Por fin, el tercer empleado puede ser el muchacho peon de Nuñez, Juan José Gómez, sabe leer y escribir y parece bastante apto." El Gobernador Santistevan envió este oficio al Ministro el 24 de julio con esta observación: "...creo conforme este pedido, y por lo mismo pueden aprobarse tales nombramientos de Torreros en la forma y modo que conceptuare mas conveniente S. E. el Jefe de la Nacion..." 392 y 423 392 Los trabajos avanzaban y el Gobernador comunica al Ministro el día 24 de julio, mediante oficio N° 79, que el 1° de agosto entraría a funcionar el faro. En esa misma comunicación informaba al Ministro de los gastos que había autorizado, entre ellos la compra de aceite para el primer mes de trabajo. 422 112 El 31 de julio contestaba el Ministro Eguiguren al Gobernador: "En contestación al oficio de US. núm. 80, me es grato decir á US. que el Gobierno conviene en que US. nombre á los señores Fernando Núñez, Alejandro Cruz y Juan José Gómez, para el cuidado de las torres y conservación de los faros de la Isla de Santa Clara; y como no se han designado los sueldos que pudiera abonárseles á estos por sus servicios, autorizo á US. para que les designe y dé cuenta al Gobierno para su aprobación, sin que esto obste para que entren en el desempeño de su cometido..." El francés no lo sabía, pero esta decisión sería fatídica para su trabajo. El Sr. Núñez y su peón habían estado al servicio de la Capitanía del Puerto de Guayaquil y hasta ese momento eran empleados dependientes de ella. 392 El Ministro insistía en el envío a Quito de la factura de los faros y boyas, pero el Gobernador le informa el día 31 de julio en oficio N° 91, que el mecánico aún no lo revisa, y que tan pronto lo haga enviará el documento a Quito. 424 El proceso de armado de la torre, el aparato y su colocación, tomó hasta fines de julio. Los informes del mecánico daban cuenta de cada paso, por lo que el Gobierno estaba muy al tanto de la situación y, previendo el comienzo del funcionamiento del faro a principios de agosto, el Presidente resolvió "arreglar" el cobro del Derecho de Faro, para lo cual emitió el siguiente Decreto Ejecutivo: 53 y 54 Arreglando el cobro del derecho de faros. Gabriel García Moreno Presidente de la República del Ecuador Por cuanto: 1° En la base 6° del artículo 1° del decreto legislativo de 28 de agosto de 1869 se manda cobrar el derecho de faros en los puertos en que se establezcan y que solo se perciba en Guayaquil, cuando se cambie el que entonces existía: 2° En el artículo 15 de la ley adicional y reformatoria de la de aduanas está determinada la cuota que debe cobrarse á los buques que entren á los puertos donde se establezcan faros; y 3° Que en el mes de agosto próximo empezará á alumbrar el nuevo faro establecido en Santa Clara. 113 DECRETA: Art. 1° Desde que empiece el alumbrado del nuevo faro de Santa Clara, la Aduana de Guayaquil cobrará á los buques de vela que fondeen el la ría, seis y un cuarto centavos de peso sencillo por cada tonelada de registro; y á los vapores la mitad de este derecho. Art. 2° El señor Gobernador de la provincia del Guayas queda encargado de la ejecución de este decreto, y de dirigirse al cuerpo consular anunciándole la fecha desde la cual empezarán á pagar este derecho los buques que arriben al puerto. Dado en Quito, á 31 de Julio de 1872. f. G. García Moreno. El Ministro de Hacienda, José Javier Eguiguren Con oficio 648 de ese mismo día el Ministro enviaba el decreto al Gobernador Santistevan, con la indicación de que sea publicado y observado en la Provincia del Guayas. 56 La noche del primero de agosto de 1872 se encendió por primera vez, para su trabajo de rutina, el faro nuevo de Santa Clara, y desde esa noche iluminó el golfo y la entrada al Puerto de Guayaquil. A diferencia de la inauguración del primer faro, cuando se inauguró éste no hubo una ceremonia formal con autoridades. Simplemente se encendió y entró en funcionamiento. 114 115 Fue una enorme satisfacción para el Ing. Dioudonnat, el personal que colaboró en la instalación y para el Gobernador Santistevan, pues se había 116 culminado con éxito la primera etapa de las varias necesarias para establecer el primer sistema de faros de la República. Durante los meses siguientes, el mecánico mantuvo un control regular de este faro mientras se instalaban los demás y, cumpliendo con su contrato, entrenó personal para el correcto manejo y mantenimiento de los equipos. Para el mecánico francés la satisfacción de culminar esta instalación fue agridulce, pues el proceso estuvo plagado de problemas que no había tratado en sus informes por delicadeza y porque pensaba que eran pasajeros y que, cuando sus detractores vieran el primero de los faros en funcionamiento, cesarían. Pero no fue así. El 4 de agosto de 1872, se veía obligado a escribir al Gobernador en su informe N° 56: "Señor: Hoy domingo á las 5h. ¼ de la tarde me manda decir el Sr. Comandante Chávez (el Cmdte. del pailebot de guerra 'Mercedes') que se va por esa á noche. Deseaba marcharme á fin de informar a V.S. la malísima conducta del torrero encargado Sr. Fernando Nuñez - pues; Señor nunca no quiso hacer nada con la obra nueva por que no podía atender á dos ocupaciones á la vez. Pues me dice que no le tengo que mandar - etc. - etc. Por fin hoy, no quiso hacer nada i hace lo que puede por que los otros empleados no trabajen. no puedo ni enseñarlo por que se va á la mañana á la casa á la playa á la cinco ½ vuelve al faro. Deseo que V.S. pidiese informaciones al maestro ó á cualquiera de su gente." 57 Núñez y por extensión Gómez no le hacían caso porque, aunque ahora ya eran empleados del Servicio de Faros y Dioudonnat era su jefe, habían mantenido su lealtad al Capitán del Puerto. Esto evidencia la tirantez que existía entre el francés, que trabajaba para el Gobernador, y el Capitán del Puerto que era el encargado del antiguo faro y por tanto consideraba que debía serlo del nuevo, pero no lo era, según indican los documentos. Núñez, allegado al Capitán, fue un instrumento de esa tirantez, que se iría haciendo más grave con el paso del tiempo. El que esa situación no se haya resuelto con el acostumbrado autoritarismo de la época, es un misterio que no se ha podido resolver por cuanto los documentos lo tratan solo de manera tangencial. Si al Gobernador no le 117 simpatizaba el Capitán del Puerto, lo podía haber hecho reemplazar, pero no lo hizo. Por otro lado, mucha tensión se habría evitado si no le hubiera dado al francés el grado de autoridad que le dio, que era independiente y sin subordinación a la del Capitán del Puerto, y por tanto las dos autoridades chocaban con frecuencia. Puede ser, aunque no hay sustento documentado para esta aseveración, que el problema básico haya sido entre el Gobernador y el Comandante General del Distrito y Marina. Esto sustentado solamente por el hecho de que la correspondencia entre el Gobernador y este funcionario era muy escasa, cuando la correspondencia con otras autoridades era abundante. En ese caso, tanto el Capitán del Puerto como el francés no habrían sido más que peones en el juego de intereses superiores. El hecho de que el Gobernador autorizara al francés para usar el membrete de "Servicio de Faros," y el que lo usara en todas sus comunicaciones, probablemente irritaba al Capitán del Puerto, quien no tenía ni había tenido membrete propio para el manejo del faro. La misma autoridad para el manejo del faro no estaba definida. El francés lo manejaba, chequeaba su operación, lo visitaba y pedía cuentas a los torreros. El Capitán del Puerto, principalmente a través de subalternos, hacía inspecciones al faro, daba órdenes y pedía informes, por lo que el personal no sabía a quién obedecer y aprovechaban la oportunidad para poner a los dos en contrapunto. El problema con el Capitán del Puerto aumentó con la instalación de los demás faros, pero el de Santa Clara continuó siendo el problema mayor por la presencia y luego la influencia del Sr. Fernando Núñez. Ninguna de las autoridades superiores tomó medidas para resolver la situación. Lamentablemente, no existen sino pocos informes del Capitán del Puerto, mientras que el francés era prolífico para informar; por lo tanto, tenemos documentada solo una parte de la historia y vemos mas que nada el punto de vista del mecánico francés. Pero, ¿por qué se dio ese conflicto? Hay que tomar en cuenta que el Faro de Santa Clara probablemente había estado a cargo de la Capitanía del Puerto de Guayaquil desde hacía mucho tiempo, y su capacidad de atención al faro se había visto disminuida, desde agosto de 1869, por el decreto de modificación de la tarifa de aduana. El desconocimiento oficial de la existencia del faro debe haber sido un duro golpe para el Capitán del Puerto, pues lo más probable es que el descuido del faro se haya debido a problemas financieros que estaban fuera de su control. Con la llegada del 118 mecánico y la atención que empezó a acaparar éste de las principales autoridades, el golpe al Capitán del Puerto debe haberse hecho más contundente. Esto explicaría la obstrucción que presentaría el Capitán al francés, lo que se agravaría aún más por cuanto el Gobernador le daba cada vez más atribuciones al extranjero recién llegado, atribuciones que probablemente y por costumbre, le correspondían al Capitán del Puerto, pero que el Gobernador tácitamente desconocía. Conviene aquí conocer al Capitán del Puerto. El Oficial a cargo de la Capitanía del Puerto de Guayaquil en 1872 era el Capitán de Fragata Lucas de Rojas, el mismo oficial que, cuando Teniente de Navío y Comandante de la goleta de guerra “Diligencia,” colaboró en la instalación del primer faro, en 1841. Lucas de Rojas había nacido en Santo Domingo (actual República Dominicana) por 1810. Inició sus estudios navales en la Escuela Náutica de Cartagena, el 29 de marzo de 1824. El 8 de febrero de 1830 arribó a Guayaquil a bordo de la fragata "Colombia," en su calidad de Alférez de Fragata. Ese buque había sido enviado por Bolívar con motivo de la guerra con Perú. El 1° de abril fue ascendido a Alférez de Navío, quedándose definitivamente en Guayaquil, donde continuó su carrera naval. En 1839 consta como Teniente de Navío y de Comandante de la goleta de guerra "Diligencia." En 1851 ostenta el grado de Capitán de Fragata y ejerce el cargo de Capitán del Puerto de Guayaquil. Así también figura desde 1855 a 1856, años en que estaba a cargo del faro de Santa Clara. En 1857 comanda el vapor de guerra "Guayas." En 1859 combate contra las fuerzas peruanas que invadían Guayaquil. Después de ocupar algunos cargos, en 1865 es nombrado, con el mismo grado, Ministro Juez Marcial de la Corte Superior de Guayaquil. En 1871, se desempeña nuevamente como Capitán del Puerto de Guayaquil; en 1873 continúa en el cargo y en Julio de 1874 firma también como "Inspector de faros." En 1876, como Capitán de Navío graduado, pasa de la Capitanía del Puerto de Guayaquil a Jefe de la Batería de las Cruces y mantiene el puesto de Inspector de Faros. En 1878 figura nuevamente como Inspector de Faros y Capitán del Puerto. En 1882 figura nuevamente como Inspector General de Faros. En 1883 figura como Coronel en la Marina del Gobierno de Guayas y presta servicios también en el Gobierno de Manabí y Esmeraldas. En 1887 figura nuevamente como Capitán del Puerto de Guayaquil. 263 119 Falleció en Guayaquil el 1° de julio de 1890 y fue inhumado al siguiente día en el Cementerio General de Guayaquil. Lucas de Rojas tuvo una larga e ilustre carrera en la Marina de Guerra Nacional, habiendo servido activamente por más de cincuenta y siete años. Durante la mayor parte de su carrera estuvo ligado a los faros. Ahora regresamos al hilo de nuestra historia. El 6 de agosto de 1872, el Administrador de Aduana recibió oficio del Gobernador con el texto del decreto que arreglaba el cobro del derecho de faros. El día 9 de agosto escribió al Gobernador lo siguiente: "He recibido el oficio de US. fecha 6 del presente incluyéndome copia del decreto ejecutivo dado el 31 del pasado mes, disponiendo y reglamentando la cuota que deben pagar los buques tanto de vapor como de vela por los faros. La ley de Aduana de 27 de febrero de 1868, que es la vigente en todo lo que no se oponga á la nueva tarifa, dispone en el capítulo 7° antículo 62, que todo buque que entre á los puertos mayores de la República pagará por derecho de puerto por toneladas, faro, anclage, limpia y valiza. Estos derechos fueron suspendidos por decreto ejecutivo de 1869, y se dejó de cobrar desde el 1° de octubre, hasta tanto se establecieran los faros. Mas como la nueva tarifa al puntualizar lo que debe cobrarse por derecho de faro, no ha espresado si debe ó no cobrarse los otros tres derechos de tonelada, anclage, limpia y valiza, ni tampoco se ha restablecido el cobro por decreto ejecutivo del 31 del pasado mes; el Administrador tiene á bien consultar al Supremo Gobierno si debe cobrar los espresados derechos de toneladas, anclage, limpia y valiza al cobrar los de faro, ó solo debe cobrar de faro, y en caso de que deba proceder al cobro de los tres derechos espresados, se debe tambien cobrarse á todos los vapores ó si quedan esceptuados los paquetes de la línea inglesa.- Dios guarde á US.- José T. Noboa" El Gobernador envió la comunicación al Ministro el 10 de agosto y el Ministro contestó el 17 del mismo mes: "El decreto ejecutivo de 15 de setiembre de 1869 derogó la disposicion de la ley de aduanas que imponia los derechos denominados de puerto, como son los de toneladas, anclage, limpia y valiza, y suspendió el de faro hasta que cambie el que existia en Santa Clara; de modo que llenada la condicion que hizo suspender este derecho, se lo ha restablecido; quedando en lo demas existente la derogatoria aludida..." La preocupación del Administrador de Aduana tenía fundamento, pues el decreto no era totalmente claro y él podía haber incurrido en delito si aplicaba el decreto equivocadamente. 393 60 y 392 120 El 7 de agosto el Gobernador envió al Ministro Eguiguren un oficio sobre la remuneración de los Torreros: "Para la justa y debida retribución al trabajo y gran responsabilidad que asumen los empleados encargados de la conservacion y servicio del faro que ha principiado ya á funcionar en la isla Santa Clara, seria conveniente que US. H. se sirva recabar la designacion suprema del sueldo mensual de cincuenta pesos al Jefe principal, de cuarenta al segundo y de treinta al tercer empleado..." 395 El mismo 7 de agosto, mediante oficio N° 103, el Gobernador informaba al Ministro sobre pedido de Lucas Rojas: "El Capitán de este Puerto con fha. de ayer me dice lo siguiente.-- 'Señor: Como hacen dias debia salir de este puerto con las cuatro bollas para colocarlas en los bajos designados; y no habiendolo verificado hasta hoy con motivo de la descomposicion del vapor Nacional Guayas; mas hoy se encuentra listo; me dirijo á S.S.a con el objeto de que por su respetable organo, solicite de los Señores Gerentes de la Compañia de vapores de esta ria; que el mencionado buque se prepare á su regreso de Babahoyo para emprender viaje con el fin indicado.= Dios gue. á US.= Lucas Rojas.=' En esta virtud, he contestado á la autoridad oficiante: que si bien no es conveniente remitir el espresado vapor por los gastos que el Gobo. tuviere que arogar, conduciendo las referidas boyas, he dispuesto que en su lugar salga el Pailebot de guerra 'Mercedes' a desempeñar esta comision, cuando i como fuere mas conveniente..." 425 El 7 de agosto, en oficio N° 104, el Gobernador plantea al Ministro la retribución para los empleados del faro, sugiriendo los sueldos mensuales de cincuenta pesos para el jefe, cuarenta para el segundo torrero y treinta para el tercero. El 14 de agosto de 1872, el Gobierno aprueba el escalafón de sueldos para el jefe y los empleados encargados de la conservación y servicio del Faro de Santa Clara, agregando que también se les abone veinte y cinco pesos mensuales a cada uno para víveres y agua potable, corriendo el Tesoro con el costo del transporte a la isla. 426 58 y 395 El 14 de agosto el Gobernador del Guayas oficia al Ministro de Hacienda: "Como los agentes de la Compañía de vapores ingleses en el Pacífico se resisten al pago del derecho de faro establecido por una ley de la República y ordenado por el decreto ejecutivo de fecha 31 del pasado, alegando que gozan de este privilegio por el art. 1° del contrato de 13 de julio pasado, cuando el solo habla de la exencion de todo derecho de puerto del de Capitanía para la limpieza y baliza &a: creyendo que en tal exencion no se comprende el justo derecho de faro, tengo el honor de 121 acompañar á US. H. la cuenta que ha pasado esta Aduana á los Ajentes espresados, para que se sirva US. H. recabar de S. E. el Presidente de la República la resolucion consiguiente..." El 21 de agosto contestó el Ministro en los siguientes términos: "Terminante es la exoneracion de pagar derechos de farola, contenida en la parte final del contrato postal de 13 de julio del año corriente; por tanto, la Compañía de vapores en el Pacífico está en su derecho al resistirse á pagar este impuesto, y US. en consonancia y cumplimiento de aquel compromiso solemne ordenará á la Administracion de Aduana que no exija á dicha Compañía derechos de faro por los vapores que arriben á este puerto..." La misma compañía se hizo un daño, pues teniendo un muy alto porcentaje del tonelaje que ingresaba a los puertos ecuatorianos, el derecho no cubría el costo de operación de los faros, que fue el propósito de su creación. 395 395 El mismo día 14 de agosto se da por enterado el Gobierno del avance de la obra de Santa Clara, según lo ha informado el mecánico en los informes que ha transcrito el Gobernador. 59 "El Nacional" había publicado la aprobación del escalafón de los torreros, pero con un error grave, pues el sueldo para el jefe figuraba como de 500 pesos, en vez de los 50 que eran. Mediante oficio N° 114 del 21 de agosto, el Gobernador se da por enterado de que es un error del amanuense y que el sueldo es de 50 pesos. 428 Una vez concluida la instalación de la torre y el aparato, el Ingeniero Dioudonnat hizo formal entrega del faro a su cuidador principal, Sr. Fernando Núñez. Para el efecto, se realizó un prolijo inventario que cubría la torre, la linterna, el aparato óptico, el aparato rotatorio, la lámpara, los materiales de repuesto para los varios equipos, las herramientas y hasta los materiales domésticos. Este inventario, junto con su habitual informe general de actividades, fue entregado al Sr. Gobernador, quien a su vez lo mandó al Ministro de Hacienda acompañado del oficio N° 119 del 24 de agosto. El día 31 de agosto el Ministro acusa recibo de la documentación. Veremos parte del inventario más adelante, pero es digno mencionar que el material publicado por "El Nacional" del 11 de septiembre de 1872 es una copia fiel del manuscrito del Ing. Dioudonnat, incluyendo la primera parte, titulada "Noticias generales sobre Faros." Los inventarios de los demás faros serían igual de prolijos. 429 61 430 122 El 31 de agosto el Gobernador escribía al Ministro Eguiguren en oficio N° 124: "Tengo la satisfacción de dar parte á US. H. para conocimiento del Supremo Gobo., que se han concluido yá los trabajos del faro de la Isla de Santa Clara cuya luz es esplendida y satisfactoria para los navegantes segun los informes recibidos. Con esta virtud he ordenado al Mecanico de faros que el dia lunes proscimo salga con todo el material, viveres y operarios convenientes, y colocar el faro de sesta orden en la punta de 'Sentinela' al Norte de la Isla de Puná; para cuyo fin he autorizado á esta Tesoreria para que siga haciendo los gastos consiguientes." El mecánico fue directo a Punta Mandinga, como estaba programado, donde se comenzó a trabajar en ese faro. No fue a Punta Centinela. Esta carta confirma que el faro en Punta Mandinga, ex del Muerto, era de 6° orden. 431 El día 4 de septiembre de 1872, en oficio N° 130, por fin puede el Gobernador confirmar haber recibido del mecánico la factura de los faros y boyas, y el envío de la misma al Ministro Eguiguren. 432 "El Nacional," en su edición del 4 de septiembre de 1872 publica dos cartas cursadas entre el Gobernador del Guayas y el Ministro de Hacienda y obras públicas: El Gobernador transcribe el informe N° 57 del mecánico, fechado 4 de agosto, en que indica que: "El maestro don José Félix Sánchez vuelve á esa con los últimos 5 trabajadores. Queda la torre concluida y pintada, todo en buen estado. Ahora, si á US. le parece conveniente, puede US. mandarlo á Punta Española para principiar la elevación de la torre que está medio hecha en Guayaquil. En el término de algunos días estará el faro concluido; para el efecto se lleva de Santa Clara todas las herramientas, cuerdas, y demás útiles que servirán allá..." El Ministro acusa recibo del informe, con fecha 14 de agosto. Estas cartas y la información previa sobre el faro de Punta Española, incluyendo la entrega al mecánico del aparato, nos crea un misterio, pues súbitamente desaparece toda mención sobre ese faro y se traslada el esfuerzo a Punta Mandinga, donde se instaló el antiguo faro de Santa Clara. Más adelante se lo menciona nuevamente, pero para la compra de un faro nuevo y la armada de una torre. Supuestamente, la torre ya se había estado trabajando. Lamentablemente, no hemos encontrado documentación que nos aclare este misterio, que más adelante se complica. 62 427 Curiosamente, el 6 de septiembre de 1872 el Ministro de Guerra y Marina escribe al Cmdte. del Distrito del Guayas la siguiente nota: 123 "Con satisfacción se ha impuesto el Gobierno del oficio de la Comandancia, dando parte que el 1° del mes anterior se ha encendido el nuevo faro establecido en la I. Sta. Clara o el Amortajado, que es giratorio y la luz fija se ve a 18 millas; los destello que son de 30 en 30 segundos a 24 millas y que todos los capitanes de los buques que han entrado en ese puerto en el mes transcurrido, aseguran que es magnífica la luz y que se ve a mucha distancia, por todo el horizonte." Después de revisar prolijamente los varios archivos y fuentes consultadas, esta es la única comunicación que conocemos en que las dos autoridades se comunican sobre el faro. 63 El Ministro de Hacienda escribe el 7 de septiembre al Gobernador: "Se complace vivamente el Gobierno al saber, por el estimable oficio de US. n° 124, que el faro de Santa Clara estaba ya funcionando, i de que los navegantes reciben de su expléndida luz los beneficios de evitar los escollos que les amenaza al visitar nuestra costa con dirección á Guayaquil. Quiera el Cielo proteger igualmente los trabajos que deben practicarse para montar el fanal en la Punta de Sentinelas lo cual se prometa de las eficaces providencias que dictará US. para que se efectúe pronto y bien tan interesante obra..." Lo cierto es que el mecánico estaba trabajando en Punta Mandinga, no en Centinela. En todo caso, el programa de instalación continuaba invariable y para cuando se escribió este oficio, la torre de Punta Mandinga ya estaba en proceso de armado. 64 Se Instalan las Primeras 3 Boyas con Campana. Mientras Dioudonnat se preocupaba de armar e instalar los faros, las boyas con campana se encontraban armadas y flotando en la ría, al pie de la Capitanía del Puerto, en espera de su instalación. El 5, 12 y 18 de septiembre de 1872 se instalaron 3 de ellas en los Bajos de Mala. Esa instalación estuvo a cargo de la goleta de guerra "Mercedes," y no se tiene pormenores de la operación de colocación. La colocación de la primera, el día 5, se la hizo bajo la supervisión del Ing. Dioudonnat. 124 Como mencionamos anteriormente, el Gobernador Santistevan estaba encantado con el trabajo del mecánico francés y en los primeros días de septiembre lo convenció de que fijara su residencia en Guayaquil durante al menos diez años, con el fin de que continuara prestando sus servicios. El 9 de septiembre la Junta de Hacienda del Guayas, de común acuerdo con el interesado, reforma el contrato con el mecánico. En el contrato reformado se dan los siguientes cambios: • "El Ingeniero Mecánico de Faros se obliga á servir al Gobierno de la República en todo lo concerniente á su profesión, con solo el recibir de una orden del Sr. Gobernador de la Provincia, por el término forzoso de diez años. • En todo este término estará á la orden del Señor Gobernador, prestando todos sus servicios profesionales, vigilando los faros i boyas establecidas i que estableciesen, é informando oportunamente sobre el estado de progreso i decadencia de tales obras, así como lo mas conveniente á los intereses de la República, para proveer lo que mas se crea justo i necesario. Finalmente queda estipulado que en cuanto á los presentes las cláusulas del contrato mencionado en el artículo 1°. • El Gobierno de la República se compromete por su parte á entregar al Mecánico de Faros, mensualmente la suma de 200 pesos moneda del país, remuneración de su trabajo personal. • Así mismo se compromete á costear el viaje desde París á este Puerto i como pasajera de 2° á la Sra. Edmeé Virginia Marie Sericola Esposa legítima del Contratante Dioudonnat i así como a su hija Charlotte Dioudonnat : entendiéndose que el regreso a Europa será de cuenta del Mecánico, el que solo derecho de ser costeado por el Gobierno de la República con arreglo al Contrato hecho en París. • Que con el hecho de la aprobación del Supremo Gobierno de este nuevo contrato, se considerará sin valor ni efecto la subvención de sesenta pesos mensuales que el Gobierno otorgó equitativamente a favor del Mecánico, quedando en todo su valor i fuerza el presente Contrato. En fe de lo cual se firman dos de un tenor en Guayaquil á 9 de Setiembre de 1872." 65 ¿Por qué aceptó esto el mecánico? Parece que había caído bajo el embrujo de las delicias de Guayaquil y su gente hospitalaria. Además, obviamente, don Vicente de Santistevan era un muy buen negociante. Debe haber sido muy ingenuo el francés, pues al cambiar del Franco al Peso había aceptado cambiar a una moneda más débil y sujeta a mayor devaluación. Había recibido un aumento al equivalente de 133 dólares, de los 125 que ganaba, pero el aumento duraría poco; También lo habían 319 125 subordinado a un cargo político de libre remoción, y más específicamente, a la persona del Gobernador Santistevan, que probablemente sin conocimiento del mecánico, era su protector, con todo lo que ello implicaba; y, no le habían dado un cargo con título claro que estableciera su nivel de rango, autoridad y responsabilidad. En poco tiempo empezaría a pagar las consecuencias de su ingenuidad y buena fe. Una vez tomada la decisión de quedarse, el mecánico pidió a su esposa que venga al Ecuador. El 11 de septiembre de 1872, en oficio N° 139, el Gobernador Santistevan escribía al Ministro de Hacienda: "De órden de S. E. el Presidente de la República oficio por el vapor de hoy al señor Cónsul de la República, en Paris, señor B. Fourquet, para que en cumplimiento de la contrata que he celebrado con el mecánico de faros á nombre del Gobierno de la República autorice el gasto de pasaje de segunda clase á su esposa legítima é hija Charlotte, para que puedan venir á la República por cuenta del Tesoro nacional..." El Ministro contestaba el día 18 de septiembre con la aprobación sobre los pasajes. 383 y 433 "El Nacional," en su edición del 11 de Setiembre de 1872, presenta un extenso reportaje con motivo de la instalación del Faro de Santa Clara. El reportaje, que es el texto completo del informe del mecánico, elaborado con motivo de la entrega-recepción del faro, es muy detallado e incluye la descripción de la torre, el aparato, la linterna y el inventario de lo que entregó el mecánico al Sr. Fernando Núñez. También incluye un inventario de lo que, según el periódico, había llegado en el pedido y, al comienzo, una parte denominada "Noticias Generales de los Faros:" “Los faros son los siguientes: 1. Santa Clara, aparato de tercer orden, luz fija blanca, variada con destellos de 30" en 30"; 2. Punta Arenas, aparato de cuarto orden, luz colorada, giratoria, con destellos de ' en ' (minuto en minuto); 3. Punta Centinela, aparato de sexto orden, de luz fija blanca; 4. Manta, luz de puerto fija blanca; 5. Esmeraldas, id. id. La orden también incluía cuatro boyas de primer orden con sus campanillas respectivas. Las luces de puerto vinieron con sus respectivas armaduras.” 66 Si bien hay una discrepancia entre el pedido y lo que indica "El Nacional" en cuanto al aparato para Punta Centinela, la lectura anterior nos ha 126 aclarado que ese faro extra era el antiguo de Santa Clara, que fue instalado en Punta Mandinga y que tal vez, por interés político, se lo incluye como si fuera nuevo. La descripción de los componentes es muy interesante e ilustrativa, y fue básica para identificar la foto de este Faro de Santa Clara, que por muchos años se había identificado erróneamente como del Faro de Santa Elena. 66 La Torre. "Su forma es una pirámide truncada de ocho faces, de 2 metros 70 centímetros en su base, y de 2 metros 20 centímetros en su parte superior; tiene 6 metros 85 centímetros de altura, sobre 8 metros 50 de base, y su parte superior lleva 6 metros 10 cent. Se ha nivelado el terreno en su radio de 6 metros. La primera capa es de guano, otra de arena, una de piedras prietas de mucha resistencia y por fin piedras grandes sobre las cuales se han levantado los cuatro calces haciendo el alma de la torre; Lleva cada uno sus respectivos empalmes, por consiguiente es de fuerte resistencia, el todo está pintado de dos manos de alquitrán, y llevan dos metros de profundidad. Ocho puntales se han elevado en los ángulos del octógono, haciendo el contorno del edificio, y se consolidan con los cuatro calces por tirantes y pernos. A la altura de 2 metros 75 centímetros se encuentra el primer piso, el segundo lleva 2 metros 85 centímetros de alto, concluye la torre haciendo su plataforma la base para armar la linterna y el aparato así como para afirmar la varandilla de fierro. Cada piso lleva su escalera respectiva. Una puerta de dos hojas hace la entrada de la torre; una serie de óvalos con sus cristales respectivos permiten entrar suficiente luz. Sirve este piso de almacen de efectos de reserva y enseres del aparato, así como de alojamiento para un torrero. El segundo piso lleva tres ventanas, sirve de cuarto de depósito y de alojamiento para dos torreros. En la parte que mas convenia se ha perforado el piso para el paso del peso motor de la máquina de rotación. La torre es pintada de blanco por fuera y las ventanas de verde." 127 Es una descripción magníficamente clara que no deja duda de la forma del edificio, el que corresponde a la imagen de la página anterior. El conjunto de la linterna fue construido en París, Francia, en 1871, por la compañía Barbier & Fenestre. El conjunto comprende el cuarto de la linterna, el Lente Fresnel, la lámpara y el mecanismo de rotación. Está construida con materiales adecuados para el ambiente salino en que funciona, pero aún así requiere mantenimiento constante. El "Luz Aparato de 3° Orden. fija blanca, variada con destellos de 30" en 30" alumbrando todo el horizonte. Una revolución entera en seis minutos. Períodos de treinta segundos, presentando sucesivamente: Un destello. Duración 4 segundos. Intensidad máxima 750 mecheros carcel. Un eclipse parcial. Duración 26 segundos. Intensidad 35 mecheros carcel. Altura del plano focal, desde el nivel medio del mar 78 metros. Alcance de la luz fija: 18 millas. Alcance de los destellos: 24 millas (Con el horizonte despejado). El "Aparato Luminoso," el Lente Fresnel de 3° orden, está compuesto por 12 paneles de destello, de cristales dióptricos, que forman el tambor lenticular giratorio. La corona o parte superior del lente tiene 5 paneles de 11 anillos prismáticos catadióptricos en escalones y la base o falda 4 paneles de 4 anillos de prismas catadióptricos sobrepuestos, con un espacio vacío para poder atender la lámpara. La corona y la falda son fijos. Este orden de lente es el menor de los utilizados para faros costeros, siendo el de 1° orden más poderoso. "El brillo tanto de las lentes como de los prismas, necesitan una conservación continua, la menor mancha de aceite, ó el polvo 128 interceptan la refracción de la luz, se sacude el polvo con plumero y el aceite con espíritu de vino." La "Se Las La Lámpara. llama la lámpara empleada en el faro Moderada. lámparas de esta clase inventadas por Mr. Degrand, Ingeniero inspector, se componen de..." Viene un detalle muy extenso de la lámpara y sus partes. luz se iluminaba inicialmente con una lámpara Argand mejorada, diseñada por Monsieur Degrand, la cual tenía tres mechas y su combustible era el aceite de oliva. El Ing. Dioudonnat la cambió, en abril de 1873, con una nueva diseñada por el Capitán Doty, pues el combustible de queroseno que usaba esta última costaba la mitad. La Máquina de Rotación. "Está colocada la máquina de rotación en la base del aparato, haciendo una caja circular provista de sus cuatro puertas circulares, con sus cristales para vigilar su marcha, así como para enaceitar los goznes y partes de fricción." El mecanismo de rotación era regulado por pesas que bajaban por el centro de la torre y la cuerda se daba con manivela. Continúa un detalle muy extenso de la máquina de rotación y sus componentes. La Linterna. "La armazón de la linterna es de fierro forjado cubierto de bronce, en todas sus superficies esteriores que están puestas á la acción del aire del mar, los montantes verticales recubiertos esteriormente con barriles de bronce soldados con estaño, se asujetan ademas con tornillos. La cúpula tambien es de cobre rojo laminado. Las riostras que unen los montantes entre sí son tambien de bronce. Se considera, ademas, como haciendo parte de la linterna las galerías de servicio, una puerta en el interior para permitir hacer el aseo de los cristales y del aparato, y para poder limpiar y vigilar de noche su marcha; la otra esterior para limpiar los cristales de la parte por fuera. Una escalera de fundicion esta puesta en el interior, y por afuera se emplea otra de mano con ganchos. 129 Debajo de la linterna y con los mismos montantes existe el cuarto de servicio, formado con soleras, riostras planchas de fierro, y se afirman dichos montantes con las cuerdas del piso de la torre por medio de arandelas y pernos fuertes. La torrecita (cuarto de servicio) y la linterna hacen un prisma regular decágono de 2 metros 80 centímetros de diámetro de ángulo á ángulo y de 0 metros, 80 centímetros de lado, haciendo puerta para la entrada del cuarto de servicio." En la parte "Diez cuervos de los arcos y 1.- Diez galerías cúpula; 2.- Diez cabezas 3.- Diez canales de la cúpula y que superior de la linterna hay: bronce (elementos de construcción) á caballo sobre fijados sobre la solera, sirven para recibir: de cobre laminado haciendo base de la corniza de la de leon, de bronce fundido; de cobre estañados que recojen las aguas interiores las vierten al esterior por diez tubos de cobre salen de la boca del leon. En la solera se apoya con cuervos de bronce, una cubierta de cobre, de forma esférica, la cual enlaza con los montantes cuervos por medio de tirantes, de pendolones y de riostras; está coronada de un pié con su bola que sirve de chimenea y ventilador, permitiendo que se establezca la corriente de aire necesaria para alimentar la combistuion de la lámpara. A la misma solera se une un canal de cobre, para recibir el agua que cae en la cúpula y por medio de pequeños atenores vierte al esterior. El enlace de unas piezas con otras se hace por medio de tornillos y pernos, la cúpula está soldada. La linterna concluye con un pararayos de 2 metros 40 centímetros de cobre rojo, terminado en una punta de platina, está provisto de sus cuatro puntos cardinales y flechas que indican la dirección de los vientos. El conductor metálico del para-rayos lleva en uno de sus estremos, un anillo que se sujeta á la barra anterior por medio de un alambre arrollado, y continúa hasta la cornisa ó coronación de la linterna, y desde allí desciende á lo largo de la torre hasta el pozo que le pone en comunicación con la tierra. En el cuarto de servicio hay diez ventiladores de cobre, movibles á la mano, se servirán del lado por donde viene el viento. Toda la cúpula está soldada de estaño." 130 Y luego de esta descripción bastante detallada de la linterna y la óptica de 3° orden y sus partes, regresamos al relato de la historia. En Santa Clara habían quedado unos palos de madera sobrantes de la obra y el mecánico pide al Gobernador, el día 14 de septiembre, que autorice su transporte a Punta Mandinga, para ser usadas en esa torre. También le pide se autorice realizar el calafateado de la torre de Santa Clara para evitar filtraciones de agua durante el invierno que se aproxima, pues hay peligro de que se dañen los repuestos. Aparentemente el Presidente había ordenado a Dioudonnat, de manera directa, que se construyera un muelle en Santa Clara para facilitar el desembarco, y por tanto pide al Gobernador autorice su salida a esa isla con el fin de hacer la inspección para el muelle y al mismo tiempo inspeccionar el faro. El Gobernador debía dar la orden para que el Cmdte. del pailebot "Mercedes" lo admita abordo para el transporte. 67 Una de las obligaciones del mecánico francés era elaborar el "Aviso a los Navegantes," que era una descripción del faro, sus características de iluminación y su ubicación geográfica en latitud y longitud. Este informe 131 era publicado en "El Nacional," como periódico oficial del país, y luego el informe era enviado a los responsables de elaborar el "World Lights List" o "Lista Mundial de Faros." También se hacía llegar la información a las dos organizaciones principales encargadas de elaborar cartas náuticas: El "Hydrographic Office" de la Marina de los EE. UU. y el "United Kingdom Hydrographic Office" del Almirantazgo Británico. Entre la primera publicación del "Aviso a los Navegantes" y su publicación en las cartas náuticas o listados de faros corregidos, podían pasar años. Sin embargo, las autoridades locales tenían cuidado de que las compañías navieras con frecuencias a los puertos afectados por los cambios, recibieran los avisos oportunamente. Los detalles que vemos aquí y en el resto de esta Parte son de la Carta 586 de 1873. 545 Isla de Santa Clara e islotes vecinos 132 Faro de la Isla de Santa Clara, circa 1885 133 Capítulo 14.- Se Instala el Faro de Punta Mandinga El mismo día 14 de septiembre de 1872, en informe N° 72, el Ingeniero Dioudonnat presentaba al Gobernador el presupuesto de jornales de los peones de Puná para el trabajo del Faro de Punta Mandinga: "Adjunto á V.S. tengo el honor de acompañar para su aprobación superior el presupuesto de los jornales de los peones de Puná, empleados á desmontar las lomas para el libre pase de la luz del faro de 6° orden que se establece en 'Punta Mandinga.' El Sr. Jefe Político de Puná hará la paga á los interesados, mandará á V.S. los recibos para la justificación de los gastos i para salvar mi responsabilidad..." El mayor interés de este oficio está en la definición del faro como de "6° orden," pues siendo el antiguo de Santa Clara, al definirlo así confirmaría que el antiguo faro Lewis de sistema catóptrico ya había sido cambiado. Esto confirmaría que, para 1872, habrían existido ya dos faros en Santa Clara, por lo tanto el lenticular de 3° orden habría sido el tercero. Pero como no tenemos documentación clara, no contaremos ese posible y probable cambio. 68 El 14 de septiembre el Gobernador enviaba al Ministro de Hacienda informe del mecánico de esa misma fecha: "El 3 del presente tuve el honor de embarcarme abordo del pailebot de guerra "Mercedes, á las diez de la mañana, en asocio del maestro José F. Sanchez y ocho trabajadores, ademas el torrero Benigno Márquez, al cual US. por sus buenos antecedentes pidió su nombramiento, para ser el torrero único que se necesita para cuidar y vigilar el faro que se establece de órden suprema en Punta Mandinga. Despues de haber fondeado la boya en el lugar ordenado, el señor Comandante don H. José Cháves, nos desembarcó el 6 por la tarde en una playa inmediata situada al pié del faro. Segun ordenes, me apersoné con los señores Pedro Pérez y Juan Piedra de Puná; los cuales me condujeron al lugar determinado por la comisión al efecto. El desmonte ya estaba hecho.-- En todo el dia del sábado 7 se han subido todas las maderas con aparejos, se ha hecho un camino para sacar los trastos y herramientas, se principiaron en el acto los agujeros de los calces, los peones de Puná siguiendo el desmonte segun las ordenes de las autoridades y capitanes formando la comision. Me embarqué el mismo dia á las tres y media de la tarde, para asuntos del servicio. Salí de esa el martes 10 de noche. El juéves 12, los estantes de la torre estaban colocados así como puesto el piso superior. El 13 se armó la varandilla de madera superior, se establecieron los 134 barrotes del piso intermedio, así como la escalera del primero. Se principió a hacer la torresita para recibir la linterna. En el dia de hoy los peones de Puná acabarán de desmontar las lomas. Por tales razones tengo el honor de asegurar á US. que sin falta inauguraré este nuevo faro, el glorioso dia 9 de octubre venidero, en recuerdo de la independencia de este pueblo; poniendo de mi parte este contingente aun á trueque de fatigas redobladas. Acompaño á US. el aviso correspondiente para noticia de los navegantes..." 394 y 434 El Ministro de Hacienda contestaba este oficio con fecha 21 de septiembre de 1872: "Impuesto S.E. el Encargado del Poder Ejecutivo del informe del Señor mecánico de faros, transcrito en el oficio de US. n° 147, aplaude como es debido, la solicitud i actividad del Sr. Dioudonnat en el desempeño de la importante obra que está á su cargo." 69 El Presidente García Moreno estaba en Guayaquil y personalmente se había ocupado de visitar el Faro de Santa Clara y conocer la situación de los faros y boyas por instalarse. El Gobernador Santistevan ofició al Ministro de Hacienda el día 14 de septiembre con la siguiente información: "El Excmo. señor Presidente de la República y General en Jefe del ejército, con fecha 12 de este mes, me oficia lo siguiente: 'Inclusa hallará US. la lista por duplicado de los faros y boyas colocadas y por colocarse en las costas de la República para facilitar y asegurar la navegacion en sus aguas. Ha sido formada por mi órden y segun las importantes indicaciones de Mr. Battle, capitan del vapor ingles 'Guayaquil,' despues del viaje reciente que hice con él hasta la isla de Santa Clara. Por ella verá US. que hay que construir 9 boyas, á mas de las 4 de campana que han venido de Europa; y que se necesitan 9 anclas de 7 á 8 quintales con 10 brazas de cadena cada una y sus grilletes respectivos. La boyas las hará construir US. con Mr. Legate, ingeniero de las dragas, sin perjuicio del arreglo y servicio de estas, con las planchas de hierro de las antiguas calderas del 'Bolívar,' cedidas generosamente por el señor doctor Carbo, Secretario de US, y si esto no basta hará US. construirlas de palos de balsa en la forma de una pequeña balsilla de 10 pies de longitud ó latitud, fuertemente amarrada y asegurada con varillas de hierro, en la cual irá en forma cónica y de doce pies de altura la parte vertical de madera, fabricada á imitación de la que tienen las boyas de campana. US. cuidará, ademas, de hacerlas colocar á medida que se construyan, dando aviso al Gobierno, y de remitir oportunamente á Manta y Esmeraldas las que se destinan á esos puertos, asi como las luces que han venido para ellos, debiendo ir á colocarlos el ingeniero de los faros cuando US. se lo ordene, despues de colocado el faro de Punta Mandinga. 135 Para la colocación de los faros de Punta Arena en Puná y de Isla Verde, hay que construir en la extremidad del bajo respectivo una armazon de puntales sólidamente clavados y de maderas incorruptibles, segun el modelo que he entregado á US. y formó el injeniero de los faros Mr. Deoudonat; pero estas obras no podrán hacerse sino cuando llegue la época de las calmas. Para todo queda US. ampliamente autorizado á fin de que se haga todo con la prontitud, perfeccion y economía posibles. Sirvase US. dirigir al Ministerio de obras publicas copia de la presente comunicacion y el duplicado de la lista de los faros y boyas incluso.-- Dios guarde á US. G. García Moreno.' Todo lo que me es satisfactorio participar á US. H. acompañando la copia mencionada para los fines consiguientes, habiendo en el acto oficiado al Tesorero de hacienda para la legalizacion de los gastos varios que comprende el oficio inserto. Dios guarde á US. H.-- Vicente de Santistevan." El Ministro contestó: “S.E. el Encargado del Poder se ha servido aprobar la autorización que el Exmo. Sor. Presidente de la Repúba ha dado a US. Para la construcción de boyas i todos los demás trabajos indispensables en la colocación de estas, i de los faros de Punta-Arenas, en Puná é Isla Verde. Dejo asi contestado el oficio de US. N°144, al que vino adjunta la lista de los faros i boyas colocadas i por colocarse...” Esta contestación es de los más interesante al mostrar cómo funcionaba el poder ejecutivo en ausencia del titular. Recordemos que el Presidente García Moreno estaba en Guayaquil y había quedado en Quito un encargado del poder. Si bien el Presidente había dado una orden, esta tuvo que ser aprobada por el Encargado del Poder, sin duda en cumplimiento de procedimientos legales de la época. 394 277 Listado de Faros y Boyas Instalados y por Instalar. La lista de los faros y boyas está a continuación: "Lista de los faros y boyas que se necesitan para salvar los escollos que presenta la navegacion de la ria de Guayaquil y puertos de la Ballenita, Manta y Esmeraldas. 1 Faro de Santa Elena (es una equivocación y se refiere a Santa Clara).-- Está colocado. 1 Id. de Punta Arena.-- Por colocarse. 1 Id. de Punta Mandinga.-- Está colocandose. 1 Id. Isla Verde.-- Está por colocarse. 4 Suman cuatro faros. -----------------------136 1 Boya fondeada por la cabeza del bajo de Mala á la parte del Sur, pintada de rojo de campana. Está conduciéndose á su lugar por la goleta de guerra "Mercedes." 1 Id. fondeada en el centro del bajo de Mala, pintada de blanco y rojo de campana. Va á colocarse. 1 Id. fondeada por la punta Norte del bajo Mala, pintada de blanco de campana. Está colocada. 1 Id. fondeada en el bajo de Mondragon á la punta del Sur, pintada de blanco la una mitad y negro la otra. Por colocarse. 1 Id. fondeada por el centro del bajo de Isla Verde, pintado de colorado. Por colocarse. 1 Id. fondeada por el Este del bajo Mogote, pintado de negro. Por colocarse. 1 Id. fondeada en la Piedra, entre Punta de Piedra y Monte-alto, pintada de blanco. Por colocarse. 1 Id. fondeada en la angostura frente á Sono, pintada de negro. Por colocarse. 1 Id. fondeada en el bajo de la Adela, frente á Punta Mandinga, pintado de negro y blanco. Por colocarse. 9 Suman nueve boyas en todo. ----------------------- 6 Anclas de siete y medio quintales ingleses con diez brazas de cadena cada una con sus correspondientes grilletes, para completar las seis boyas que faltan en la ria de Guayaquil. BALLENITA 1 Boya encima del bajo en dos brazos. 1 Ancla de siete y medio quintales ingleses con diez brazos de cadena y su correspondiente grillete. MANTA 2 Boyas en la entrada de dicho puerto, Norte y Sur. 2 Anclas de siete y medio quintales ingleses con diez brazos de cadena cada uno con sus correspondientes grilletes. 1 Faro ó luz de puerto. (Hay que llevarlo de Guayaquil donde está). ESMERALDAS 1 Farola de puerto en la Punta de Arena á la mano derecha de la entrada. (Hay que llevarla de Guayaquil). ATACAMES 137 1 Boya de primera clase con campana. (La llevará el vapor "Guayaquil"el 3 de octubre próximo.) Guayaquil, setiembre 11 de 1872. El capitan de Fragata, Lúcas Rojas. El capitan de Corbeta graduado, Francisco Mora." 394 El francés estaba decidido a quedarse a vivir en Guayaquil y había pedido al Gobernador que gestionara del Gobierno la liberación de derechos para la importación de sus muebles. Don Vicente de Santistevan escribe a José Javier Eguiguren el 21 de Septiembre diciendo: "El Mecánico de Faros, al ordenar que venga su Esposa de París, de conformidad con el contrato que recientemente he celebrado con él, á nombre del Supremo Gobierno, pide á VS.H. por mi órgano, se sirva recabar del Supremo Gobierno, la libertad de derechos de introducción de sus muebles de uso, que ha ordenado traer á su Esposa, y que llevan 25 años de servicio." El 28 de septiembre el Ministro contestaba que: "Para resolver la solicitud que ha hecho el mecánico de faros respecto á que se permita desembarcar libres de derechos los muebles de uso que ha pedido á Europa y que llevan veinticinco años de servicio, es necesario que previamente los reconozca el Administrador de Aduana y oir su informe acerca del estado de dichos muebles..." La comunicación sobre los muebles y la respuesta fueron publicadas en "El Nacional" del 27 de noviembre de 1872, haciendo público un asunto doméstico. 70 382 Se Instala la 4° Boya con Campana. El Capitán del Puerto de Guayaquil informó al Cmdte. Gral. del Distrito de Guayaquil que El Sr. Capitán Horacio Battle, del vapor inglés "Guayaquil," a su vez le había informado que el 8 del mes de octubre había colocado una de las boyas en la punta nor-oeste de los bajos de Atacames, situados entre Esmeraldas y Punta Galera. El Ministro del Interior encargado del Despacho de Guerra, Francisco Javier León, agradece al Cmdte. Gral. del Distrito por el informe, indicándole que S.E. el Presidente de la República había sido informado. El 4 de noviembre se informaba oficialmente que había sido instalada la última de las boyas con campana llegadas de Francia. 82 El 11 de octubre de 1872, estaba prácticamente concluida la construcción de la torre del Faro de Punta Mandinga, por lo tanto el mecánico salió para 138 Santa Clara con el fin de aprovechar el personal y calafatear la torre de ese faro. El trabajo importó 16 pesos y se evitó hacer el gasto de un viaje especial para ello. 71, 436 y 437 Si bien la torre se terminó totalmente el día 12, según orden del Gobernador el faro fue inaugurado el día 9 de octubre, y el aparato luminoso fue reinaugurado, pues no olvidemos que se trataba de la linterna del antiguo faro, que había estado ubicado en la isla Santa Clara. Más adelante se menciona que el faro alumbraba 270°, lo cual es lógico, pues no tenía objeto iluminar la tierra, por lo tanto se deben haber tapado algunas ventanas del cuarto de la linterna. 72 Al llegar a Santa Clara el día 11, el mecánico se encuentra con la hostilidad de Fernando Núñez, el encargado del faro, quien desautoriza al mecánico. Dioudonnat informa indignado al Gobernador: "Cuando fue a 'Sta. Clara' para construir el nuevo faro, el Sr. Fernando Núñez que era el encargado del viejo faro no quiso nunca ocuparse ni trabajar, alejándose de no poder servir dos cosas á la vez. Mi libro diario hace fé de lo que he sufrido de su mal comportamiento hasta con migo. Hoy el asunto es peor, en este último viaje me dice á mis preguntas: <<Yo soy el único que mando aquí>> y; con espresiones aun mas duras se negó á recibir el alumno Sr. Francisco Saens García que por mando de V.S. llevó conmigo al espresado faro para su instrucción." El francés continúa su informe indicando que hay desaseo en la torre, que se bota basura por las ventanas del primer piso y por eso está manchada la fachada. Añade que tienen dos gallos en la planta baja y que están ensuciando el almacén. También había un mechero de lámpara botado sobre la cubierta, el que se había dañado por ese descuido. Había reventado el problema que tenía el trasfondo ya discutido, pues Núñez no tenía razón personal para despreciar al mecánico, quien como hemos visto poco más atrás, recomendó a Núñez para recibir el nombramiento de primer torrero y a Gómez, su peón, para el de tercero. El Gobernador Santistevan se enfureció y envió mensaje urgente al Ministro de Hacienda, quien contesta el día 19 de octubre: "Instruido S.E. el Presidente de la República del informe del Sr. Mecánico de Faros, inserto en el oficio de US. n°164, acerca de la mala conducta del Sr. Fernando Núñez, 73 y 435 139 encargado del faro de Santa Clara, he tenido á bien disponer que se destituya inmediatamente á dicho empleado, pues US. debió haberlo hecho en el acto que tuvo conocimiento de semejante conducta, dando parte inmediata al Supremo Gobierno; i que al efectuar dicha destitución se sirva mandar US. que se le retenga el sueldo hasta que entregue por inventario los útiles del faro i cuantos efectos hayan estado á su cargo." La fulminante decisión presidencial llevaba una llamada de atención al Gobernador por no haber actuado directamente, lo que debe haber disgustado mucho a don Vicente de Santistevan. A pesar de la orden presidencial, Núñez no dejó el cargo, y pronto buscaría cómo desquitarse del francés, hacia quien no demostró la más mínima gratitud. Se hace difícil aceptar que Núñez tenía tal grado de influencia que la orden directa del Presidente no surtiría efecto. 74 El 19 de octubre de 1872, el Ministro escribió al Gobernador, expresando la satisfacción del Presidente porque se haya inaugurado el Faro de Punta Mandinga el día 9 de octubre. El mismo día 19 de octubre, con oficio 151, el Ministro aprobaba el informe del mecánico sobre la inauguración del faro en Punta Mandinga, el fin de los trabajos y el calafateo de la torre de Santa Clara. 278 75 En la parte práctica del funcionamiento de los faros, el Ing. Dioudonnat había determinado, desde su primer informe, que era necesario el implantar un reglamento con el fin de regularizar las operaciones de los aparatos, y los cargos y sueldos del personal. En una de sus primeras comunicaciones, la de “los 9 puntos,” había tratado este asunto. Para el efecto, escribía al Gobernador el día 19 de octubre, bajo informe N° 84: "...creo oportuno, según el Reglamento de Faros que tubo el honor entregar a V.S. (párrafo 2) se sirva V.S. á bien, abonar mensualmente al referido Benigno Márquez la cantidad de Cuarenta Pesos, que corresponde al torrero de 2a clase con la asignación de 25 Pesos por víveres." Y a continuación algo interesante: "Y, por el bien del servicio; que se sirva V.S. á bien ordenar hacer los oficios oportunos á los Señores Tesorero de Hacienda de la Provincia y Capitán del Puerto para los fines que corresponden i satisfacción de los empleados de faros." El mecánico quería evitar tropiezos con las demás autoridades. Este oficio nos indica que el mecánico estaba trabajando en base al reglamento propuesto. 76 Para la operación del Faro de Punta Mandinga y debido al relativamente poco trabajo que habría, se determinó que su operador, Benigno Márquez, 140 sea nombrado torrero de 2°, con un sueldo mensual de 40 pesos y la asignación de 25 pesos para víveres. Esto lo pide el Gobernador mediante oficio N° 172 del 19 de octubre. 438 Capítulo 15.- Se Instalan las Luces de Puerto Se Instala la Luz de Puerto de Manta. El 23 de octubre de 1872, don Vicente de Santistevan ordenaba se proceda a la instalación de la Luz de Puerto de Manta. Como el Faro de Punta Mandinga fue inaugurado en octubre, el Presidente García Moreno decreta el 26 de octubre que: "Desde el 1° de noviembre próximo venidero la aduana de Guayaquil cobrará á los buques de vela que fondeen en la ría, por cada tonelada de registro, seis y un cuarto centavos de peso sencillo por derecho de faro, á mas de los seis y un cuarto que se cobra por la luz del faro de Santa Clara." Este derecho era para financiar el Faro de Punta Mandinga. El Decreto fue enviado al Gobernador el día 26, con la disposición de que se preocupe de publicarlo y hacerlo cumplir. 77 - 78 279 El 25 de octubre se embarcó en el pailebot de guerra "Mercedes" todo el material de la luz de puerto para Manta, mas abastecimientos para los dos faros. Salieron del puerto a las tres de la madrugada y, las ocho de la noche del 26, fondearon en la playa al pie del Faro de Punta Mandinga. Se entregó al encargado dos cajas de queroseno, pues ya no le quedaba más que para una noche, así como pintura y piezas para reparaciones menores. Se aprovechó para embarcar madera negra para la torre de la luz de Manta, así como clavos de cobre y otros sobrantes de la instalación de la torre de Punta Mandinga. De la inspección al faro, el mecánico indica que: "El empleado cumple bien con su deber, todo está bien entretenido y con aseo. La luz es buena." Añade: "Llamaré otra vez la superior atención de V.S. sobre las dos lámparas que faltan, á donde están? Hemos levantado la ancla el domingo 27 á las 2 de la tarde." 79 La falta de cuidado del personal por las lámparas y, en especial, de las delicadas chimeneas, sería un problema sin solución, a pesar de los esfuerzos que haría el francés por entrenar al personal sobre la forma de cuidarlas adecuadamente. 141 Se Insiste en el Reglamento. De Punta Mandinga pasaron a Santa Clara, donde fondearon a las seis de la tarde del 29 de octubre. Inmediatamente desembarcaron planchas de zinc para la cubierta de la torre y se inspeccionó el faro. El Sr. Sáenz informó al mecánico que el Sr. Núñez, encargado del faro, desarmó piezas de la linterna y cambió el registro de la lámpara, causando la ruptura de cinco chimeneas en una sola noche. Esto lo motiva a que en ese mismo informe N°95 diga lo siguiente al Gobernador: "Para evitar cualquiera falta en los Faros, vengo á pedir á V.S. se digne á bien dar el curso que merece el Reglamento de Faros que tubo el honor de poner á la Superior aprobación de V. S." El reglamento presentado por Dioudonnat, nunca fue aprobado oficialmente y por ello el mecánico lo aplicó de manera extraoficial, con el fin de darle un poco de orden al Servicio. 80 El Gobernador Santistevan había escrito directamente al Gobernador de Manabí, el 23 de octubre, advirtiéndole del viaje del mecánico para instalar la luz de puerto en Manta y la necesidad de que "...se le preste la debida cooperación i los auxilios que al efecto necesite i para que, una vez establecida dicha luz, se dote un empleado á que la maneje i conserve en buen estado después de la ausencia del Sr. Dioudonnat, quien deberá dejar con este fin las instrucciones convenientes." Añadía: "Si algun tropieso hubiese, espero que US. me lo comunique para dar providencias y disponer el viaje del Mecanico, llamado por contrato con el Gobierno á ser el inspector de los faros..." Esta comunicación mereció la aprobación del Supremo Gobierno y es necesario recalcar lo que dice el Gobernador sobre que el mecánico era “inspector de los faros.” 439 81 El 11 de noviembre informaba Dioudonnat que había concluido la instalación de la luz de puerto de Manta. Como ya era costumbre, el informe iba acompañado de un prolijo inventario manuscrito y las instrucciones de operación del aparato. Citamos partes de su informe N° 98: "Aparato dióptrico de 0 , 30 de diámetro, alumbrando 270° del horizonte. Elevación del plano focal, desde el nivel medio del mar, 25 metros, desde el terreno, 8 metros. Alcance de la luz nueve millas. Se halla establecida la luz de puerto en la loma, en la entrada del puerto, á proximidad de la primera casa al N. El 31 de Octubre, llegué al medio día á fondear en el Pailebote de guerra 'Mercedes' en ese Puerto; después de haber elejido por la Junta de los Empleados de este Puerto, i en concurrencia del Sr. Comandante D. H. J. Chavez, el lugar mas 83 m 142 cm conveniente para establecer la luz de Puerto; se principió á descargar con una canoa, todas las piezas que componen la Luz de Puerto." Más adelante da las instrucciones: "El servicio es muy sensilio: Se pone el aparato sobre la plata-forma, se hace girar á la mano en todos sentidos, para su limpieza i para encenderlo. Se habren las puertas de la casita del fundo se hace correr el fanal por el carril por á fuera poniendo sus guías en las barrillas de fierro, se engancha el estremo de la cuerda en la asa; se hace subir por medio del molinete el fanal hasta arriba. Se cierra la puerta del aparato i luego del edificio." Describe también "La casita de fierro lleva 1 m, 40 cm X 0 m ,90 cm X 2 m de alto." El inventario está debidamente firmado, el 11 de noviembre de 1872, por el mecánico haciendo la entrega y el encargado, Juan Chávez, recibiéndolo. El 20 de noviembre, acompañado de oficio N° 188, enviaba el Gobernador la copia del inventario, para conocimiento del Sr. Ministro. 440 El 12 de noviembre enviaba desde Manta sus informes acumulados al Gobernador Santistevan. Indicaba al Gobernador que "La instalación de la luz ha sido económica. se gastaron 58 pesos en jornales y peones." No hay que olvidar la previsión del francés al recoger la madera sobrante de la torre de Punta Mandinga y los demás materiales sobrantes de la torre de Santa Clara, cuando se considera el costo. Añade: "Suplico a V.S. ordenar lo más pronto posible mi salida para establecer la luz de Puerto en Esmeralda, en primer lugar para llevar los víveres á los empleados en el faro de Sta. Clara, en segundo lugar para tener yo la esperanza de estar á Guayaquil para recibir á mi familia el 3 de enero próximo venidero." La madera sobrante de Punta Mandinga había sido suficiente para armar la torre de Manta y preparar la de Esmeraldas e informa al Gobernador: "La base de madera en la cual se debe armar la casita de fierro de la Luz de Puerto está hecha, puedo asegurar á V.S. que el 15 de Diciembre entrante se podrá inaugurar la Luz de Esmeralda. Por consiguiente, antes del fin del año la República del Ecuador tendrá dos faros y dos luces de Puerto establecidas." El 20 de noviembre, con oficio N° 192, el Gobernador enviaba al Ministro Eguiguren la transcripción de los informes. 84 441 El 14 de noviembre de 1872, el Gobernador de Manabí escribió al Ministro de Hacienda informándole de la instalación del faro. Se le abonaría mensualmente la renta de cincuenta y cinco pesos al torrero Juan Bautista Chávez, para sueldo y mantenimiento del aparato. 385 143 El 20 de noviembre, el Presidente García Moreno expedía un nuevo decreto ejecutivo haciendo extensivo el decreto del 25 de octubre de ese mismo año a los buques que arribaran al Puerto de Manta. Entró en vigencia a partir del 1° de diciembre, con la misma tarifa. Algo interesante de este decreto es que exonera del derecho a los buques de la Compañía de Navegación a Vapor del Pacífico, por el tiempo que dure su contrata. 85 Una preocupación que tuvo el francés desde sus primeros días en Guayaquil fue que el aceite de oliva, combustible que usaban las lámparas de los faros lenticulares, tenía un alto costo en comparación con el queroseno, que era el combustible que usaba el antiguo Faro de Santa Clara. El aceite de oliva se importaba de Europa, mientras que el queroseno se lo importaba de los EE. UU. Dioudonnat estudió el problema y el 21 de noviembre de 1872 presentaba al Gobernador subrogante, Antonio J. Sucre, un completo informe al respecto: "El aceite de oliva, cuesta el qq. en termino medio: $32 El aceite de Kerosene ----------------- " ----------------$15 Diferencia $17 por qq. o sean como 50 % de economía. Para el consumo de aceite en los Faros de esta República se necesitarán anualmente la cantidad de 3.300 Kilos, siendo de aceite de oliva importarán $2.112, y de Kerosene $990. Diferencia a favor del fisco: $1.122. Si a esa cantidad se añade los derechos de aduana á razón de $0,06 C/qq. representa $198. Economía anual: $1.320. Por consiguiente, las economías de gasto de aceite cubrirán desde el primer año los gastos de lámparas nuevas. En consecuencia: á V.S. tengo el honor de acompañar un presupuesto para la compra á Francia de lámparas nuevas, del sistema del Capitán Doty para el consumo de Kerosene, en los faros de la República. También las chimeneas en el faro de 'Sta. Clara' se van acabar, no sé porque se rompen así existe un defecto que tendré que corregir tan luego como podré irme allá." En la primera parte del informe había indicado que la compra de tres lámparas de 3° orden importaría 470 pesos y se acompañaba al informe el listado de las lámparas y las piezas necesarias. El Gobernador envió toda esta documentación al Ministro de Hacienda mediante oficio N° 193 del 20 de noviembre. 86 442 144 En el pailebot de guerra "Mercedes" habían quedado los maderos de la torre de la luz de puerto de Esmeraldas y era necesario desembarcarlos, por lo cual pide al Gobernador intervenga ante la Capitanía para que se le facilite una canoa para desembarcarlos aprovechando la marea. La necesidad de molestar al Gobernador para una pequeñez como esta es una muestra de la poca colaboración que tenía el mecánico por parte de la Capitanía. El problema entre el francés y el Capitán del Puerto detonaría pocos días después. 87 El día 23 de noviembre de 1872 el mecánico, exasperado, escribe una extensa carta al Gobernador encargado, explicando su problema: "Señor: Hace tres días que llegué a Guayaquil. El día de mi llegada fui á preguntar al Sr. Capitán del Puerto la fecha que saldrá una chata para Sta. Clara, á llevar los víveres de los torreros, por que tenía que entregar varios objetos para el faro. Me contestó dicho señor que sería el 26 del presente. Esta mañana, siendo ocupado á hacer los embases; me hace decir, por conducto de uno de mis alumnos; el Señor D. Lucas Rojas que: si no mando ahora mismo unos clavos para Sta. Clara, dará parte al Señor Gobernador, es decir: á V.S. mi Jefe inmediato. Bajo ningún concepto no meresco amenaza, í nó lo puedo endurar. No sé me necesitan justificaciones para el desempeño de mi servicio. Pues, señor; á hora suplico á V.S. se digne á bien hacer saber al Sr. Capitán del Puerto, que bajo el mando inmediato de V.S. estoy contratado como Director de los Faros, í que tenga la bondad de no mesclarse mas en mis atribuciones, salvo el mejor parecer de V.S. por que las reparaciones en los faros son asuntos mios. Por fin, me es penible poner en el superior conocimiento de V.S. que no viene un práctico de Puná, sin pedirle el Sr. D. Lucas Rojas, si no estoy metido todo el dia en pueblo á tomar mallorca (popular trago de la época). Todos los prácticos me lo han dicho, í deseo que por el conducto superior de V.S. hacer saber al Sr. Capitán de Puerto que nó se ocupe tanto de mi humilde persona. Gracias que espero merecer de la recta i conocida justicia de V.S. que..." Con este informe al Gobernador quedó en campo abierto la disputa entre las dos personas que tenían que ver con los faros. Sin embargo, la autoridad optó por la salida fácil de no tomar medidas correctivas y permitir que el conflicto continúe, con los efectos previsibles sobre el personal del servicio y el mantenimiento de los aparatos. 88 145 Con oficio N° 195 del 23 de noviembre de 1872, el Gobernador enviaba al Ministro el inventario del Faro de Punta Mandinga, así como el aviso general para los navegantes, sobre los faros y boyas, para ser publicados estos últimos en "EL Nacional." 443 El 27 de noviembre, con oficio N° 200, el Gobernador encargado, Antonio J Sucre, enviaba nuevamente al Ministro de Hacienda el aviso general para los navegantes, sobre los faros y boyas. Indicaba que estaban instalados dos faros, una luz de puerto y cuatro boyas con campana. Agrega: "No dudo que, para la colocación del resto de faros i boyas, habrá igual actividad como hasta el presente, i podamos dentro de poco tener nuestras costas i puertos balizados y alumbrados lo mas conveniente; haciendo de esta manera cómodo i sin riesgo el comercio marítimo con los puertos de la Nación." 444 El Ministro de Hacienda notificaba, el 28 de noviembre, al Gobernador encargado que el Presidente estaba satisfecho con el establecimiento de la luz de Manta y aprobaba el gasto de 58 pesos en su instalación. 89 En informe N° 115, de los últimos días de noviembre, el Ingeniero Dioudonnat comunicaba al Gobernador que el Capt. Battle, del vapor "Guayaquil," le había hecho entrega del rumbo exacto de la situación de la boya del Bajo de Atacames. Le entrega con el informe el “Aviso a los Navegantes” para la respectiva publicación en "El Nacional." 90 El 30 de noviembre, el Ministro acusaba recibo del inventario del Faro de Punta Mandinga y del aviso general sobre la situación geográfica de los faros y boyas existentes. Indicaba que esto sería publicado oportunamente en "El Nacional." Era parte de la responsabilidad del francés el establecer las posiciones geográficas de las ayudas a la navegación, las que sin duda reportaba a Barbier & Fenestre, su ex-empleador, para su notificación a la World Lights List, pues no bastaba con que sean publicadas en el periódico oficial del país. 91 El informe del mecánico sobre la conveniencia del cambio de las lámparas de aceite de oliva a lámparas de queroseno fue aprobado por el Gobierno el 30 de noviembre. El pedido ya había sido enviado al Sr. Fourquet por parte del Gobernador del Guayas. 92 146 Se Instala la Luz de Puerto de Esmeraldas. El 10 de diciembre estaban listos para embarcarse las piezas e implementos de la luz de puerto de Esmeraldas. Para el efecto, el mecánico pide al Gobernador se disponga de una balsa y se de el aviso a la Capitanía del Puerto. 93 El 11 de diciembre de 1872, con oficio N° 210, el Gobernador encargado, Antonio J. Sucre, comunica al Ministro de Hacienda: "Tengo el honor de acompañar á US. H. el cuadro sinóptico que demuestra el estado en que encuentran alumbradas las costas de nuestra República; así como la colocación de las Boyas, que el inteligente cuanto entusiasta Mecanico de faros Sor Fernando Dioudonat, se ha dignado entregarme para que sea sometido á la aprobación de S.E. el Presidente de la República." 445 El 13 de diciembre en la noche, salió del puerto de Guayaquil el pailebot de guerra "Mercedes" con rumbo a Esmeraldas y escala en los faros que están en el camino. El Gobernador encargado notifica el zarpe al Ministro de Hacienda, en oficio N° 212 del 14 de diciembre. 446 El día 14 llegaba el pailebot "Mercedes" a Punta Mandinga, donde realizaron una inspección, determinando que el "Aparato, la linterna y las habitaciones están con el aseo que corresponde." Informa que el domingo presenció la entrega del faro, de Benigno Márquez a Lino Bonilla, y todo estaba bien. Se realizó un nuevo inventario, el que fue enviado al Gobernador. Durante la inspección se encuentra que el anterior abastecimiento de combustible a ese faro había sido de aceite de oliva, cuando ese faro usaba queroseno. Esas botijas correspondían al Faro de Santa Clara. Pide al Gobernador en su informe numerado 133: "Suplico á V.S. informar al Señor Tesorero de Hacienda de la Provincia del particular, i que se digne á bien aprobar ningún pedido para faros, sin mi firma, si no, me será imposible sacar un estado exacto de los gastos." 94 y 447 95 Asalto al Faro de Santa Clara. A continuación, un episodio de lo más curioso, que tiene visos de un montaje hecho con el fin de causar caos en el funcionamiento del faro y hacer quedar mal al francés. Este episodio ocurría en vísperas de la salida de Núñez como 1° Torrero del Faro de Santa Clara. 147 Dioudonnat había embarcado a bordo del pailebot de guerra "Mercedes" con el fin de ir a Esmeraldas a instalar la luz de puerto. Como ya era costumbre, aprovechó para pasar inspeccionando los faros, como ya vimos antes. El día 16 de diciembre de 1872, a la 1½ de la madrugada (según una versión) el Faro de Santa Clara fue asaltado. Cuando llegó a él Dioudonnat, el día 18, se encontró con una revuelta general. El torrero Juan José Gómez decía que no quería quedarse en el faro y que quería marcharse con el Sr. Fernando Núñez (quien había continuado en el faro a pesar de la destitución presidencial, pero que ahora sería reemplazado por Márquez, el ex 2° Torrero de Punta Mandinga) y que no haría nada hasta ser relevado. Dioudonnat informa al Gobernador que ha dispuesto al encargado (Núñez hasta el 18 y luego Márquez) impedir la salida de Gómez, pues se podrían ocasionar faltas en el servicio. 96 El francés tomó las declaraciones de los empleados, iniciando el reporte con su propia declaración: "Vino á las 10 de la mañana (del 18) á bordo del Pailebote de guerra 'Mercedes', el torrero de 2° clase Sr. Alejandro Cruz, diciéndome que la noche anterior (del 17 al 18 - esta es una inconsistencia, pues decían que había sido el 16 observación del autor ), el faro había sido asaltado, i que por poco se consume. Y á quí las deposiciones: Siendo Alejandro Cruz de guardia dentro del cuarto de servicio del aparato, de media noche hasta las 3 de la mañana; á la 1h.½ subió un hombre por el conducto del para-rayos hasta la cubierta de la torre, pasó por encima de la baranda; abrió la puerta levadisa; bajó la escalera del primer piso, cerrando la puerta. En ese piso heran dormidos los Srs. Fernando Nuñez y Juan Jose Gomez; bajó al piso inferior; habrió la puerta de salida para dos otros malhechores; forsaron el baúl del Sr. Al. Cruz le robaron la cantidad de Ciento sesenta pesos ($160) pusieron el colchón de Cruz, así como su frazada por debajo de la escalera i vaciaron encima un frasco de aguarrás; pusieron fuego á dos lados opuestos, subieron al primer piso para matar al Sr. Núñez, cual se dispierto al sentir el calor de la mano que lo buscaba: brincó de su cama, se armó de su cuchillo puesto al lado opuesto del cuarto en una mesita: se defendió de los golpes de puñales con una levita, que lleva tres de puñaladas; eran dos que le asaltaban; llamó á sus compañeros, se huyerán los criminales. Al llamar á sus compañeros el Sr. Cruz no pudo abrir la puerta, retenida por un malhechor, fue á buscar el fanal de guardia de servicio en el cuarto; abrió la puerta, bajó hasta á fuera de la torre sin haber visto á nadie, nadamas que hoyendo la bulla. 97 148 Los tres Empleados apajarán el principio del incendio, poniendo el colchón á fuera de la torre. Al subir al primer piso, se registró que en la almohada del Sr. Núñez, habia segnales de dos puñaladas. Es la declaración exacta de los Empleados. En el faro de Sta. Clara a Dicbre. 19/872 El Ing. mecánico de faros F. Dioudonnat" Era clarísimo que todo había sido un montaje para hostigar al torrero Cruz, alumno de Dioudonnat y por tanto del "otro bando." ¿Cómo fue que Cruz, estando en el cuarto de guardia, en la parte baja de la linterna, no escuchó cuando el malhechor pasó al lado de él para abrir la puerta de la cubierta? ¿Cómo fue que Núñez y Gómez, que estaban en el mismo cuarto del primer piso alto, no sintieron cuando pasó el ladrón al lado de ellos para bajar a la planta baja? ¿Cómo no se percataron del incendio inmediatamente y cómo es que, habiendo prendido fuego en la planta baja, el ladrón pone en riesgo su vida y sube a tratar de asesinar a Núñez, quien, milagrosamente, no sufrió un solo rasguño a pesar de su heróica lucha con el malhechor? Lo único que sufrió Núñez fue el daño de su almohada con dos puñaladas y su levita con rasgos de tres puñaladas. ¿Cómo fue que, mientras un ladrón forcejeaba con Núñez, el otro se preocupaba de sostener la puerta de la cubierta para que no pueda bajar Cruz, mientras el otro ladrón y Gómez aparentemente no hacían absolutamente nada? Y cuando Cruz pudo abrir la puerta y bajar, no vio absolutamente nada dentro del edificio, solo escuchó bulla afuera. Como dice Dioudonnat que lo registrado son las declaraciones de los empleados, queda poca duda que esto fue obra de Núñez y Gómez. Del primero por su antipatía por el francés y del segundo porque quería salir del faro junto con su tío y protector, Sr. Núñez. El robo a Cruz debe haber sido un bono extra. Cruz perdió su dinero, su colchón y frazada. Debe haber pasado unos días muy incómodos hasta reponerlos. Lo más grave es que el faro casi se quema. Tal vez no fue esa la intención, si no la de asustar. O tal vez Cruz dañó el plan del incendio al poder abrir la puerta de la cubierta, bajar y apagar el fuego, pues dentro del edificio solo quedaba él. Nunca sabremos con certeza la verdad, pero por la mala voluntad que existía contra el francés por parte de algunos empleados, hay espacio para pensar que podía haber sido un trabajo interno y de mala fe. 149 Esto nos hace reflexionar nuevamente sobre la indolencia de las autoridades superiores para resolver esta situación de división de autoridad. En los faros había personal que respondía a dos jefes antagónicos: Aquellos que como Núñez y Gómez respondían ante la Capitanía a pesar de ser empleados de los faros, y aquellos que, como Cruz, respondían solo ante el francés. Tener situaciones de tirantez donde de por sí se tiene condiciones de trabajo duras, era buscar problemas como el que hemos visto. En pocos días la situación empeoraría. El día 20 de diciembre el francés enviaba las declaraciones en un informe al Gobernador, solicitándole disponer lo conveniente mientras continuaba su viaje a Esmeraldas. 98 Afortunadamente, aunque no duraría mucho, la destitución de Núñez se había hecho efectiva y Benigno Márquez se hizo cargo del Faro de Santa Clara a partir del 18 de diciembre de 1872. Luego de atendidos los problemas derivados del asalto, el mecánico realizó el inventario con entrega recepción entre Núñez y Márquez, interviniendo él como testigo. 448 El día 25 de diciembre, el Ministro Eguiguren comunicaba al Gobernador que: "... se ha informado con satisfacción S.E. el Presidente de la República que el 13 del presente se embarcó el mecánico de Faros, Sr. F. Dioudonnat, con destino a Esmeraldas, con el objeto de establecer la luz del puerto en ese lugar, i que, para el efecto ha oficiado VS. al Sr. Gobor. de aquella provincia." 99 Gómez, el tercer torrero, ofició al Gobernador el día 30 de diciembre para decirle que no podía seguir en el faro por una enfermedad. Le pedía que mande al Capitán del Puerto lo releve y ratificaba su renuncia al cargo de tercer torrero. 100 El 4 de enero de 1873 el Capitán del Puerto enviaba una comunicación al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina, con el siguiente tenor: Señor: El maquinista componedor de Faros, no quiere entenderse con esta Capitania, asegurando que solo tiene que dar cuenta á la Gobernacion de la Prova; i como por el Trato 5° Tito 7° de las ordenanzas navales que nos rijen, el Arto 81 dice: Si hubiere linterna estará inmediatamente bajo la inspeccion del Capitan del Puerto, en cuanto á su buen estado i servicio, para oficiar así sobre cual quier defecto que note en éste de mal alumbrado, horas de falta, ó descuidos de atizar, como para reparos del farol ó lámparas, sin mesclarse en lo ecónomico donde no le 150 este espresamente cometida su intervencion: i cuando no fueren atendidos sus oficios, dara cuenta al Capitan Gral, representando lo necesitado de remedio. ---Cumpliendo con este deber, mandé un oficial el 27 del ppdo, á la Isla de Santa Clara, con el objeto de inspeccionar el faro, i ayer que regresó á este puerto, me dá parte de haber encontrado dicho faro en completo desaseo, i que en la noche del 30 estuvo apagado por dos horas. Creo que esta falta será en razón á que el nuevo empleado de ese establecimiento, no tiene los conocimientos necesarios para desempeñar el cargo que se le ha confiado, cuando con el saliente Señor Fernando Nuñez, sucedia todo lo contrario. --- Lo que tengo el honor de poner en conocimiento de US, para salvar mi responsabilidad; por el mal desempeño de los empleados destinados á solicitud del maquinista, para el servicio de los faros. --Tambien adjunto a qui el parte orijinal que he recibido sobre la tentativa de un Crimen en la mencionada Isla Santa Clara, el 15 del ppdo, i US. apreciando su mérito resolverá lo que juzgue conveniente...” Esta comunicación del Capitán del Puerto no deja duda de cual era la situación entre él y el mecánico, y nos muestra la posible situación de conflicto entre el Cmdte. Gral. del Distrito y Marina y el Gobernador. 337 El Comandante del pailebot de guerra “Mercedes,” José Hermeregildo Chávez, envió desde Manta, el 15 de enero de 1873, un oficio al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina informándole del trabajo que había realizado con el mecánico en la instalación del Faro de Esmeraldas y le comunicaba que la demora en regresar a Guayaquil se debía a la calma del viento y que estaba atracado en ese puerto esperando regresar lo más pronto posible. Informó que el Faro de Esmeraldas quedó colocado y alumbrando desde la noche del 1° de enero. Luego trata asuntos domésticos del pailebot y su tripulación. Aparentemente, en ese envío de correspondencia el mecánico había enviado su informe al Gobernador, pues éste oficia al Ministro de Hacienda con fecha 22 de enero y número 7, con el informe de la instalación del Faro de Esmeraldas, detallando su ubicación y características. 338 449 Con la demora en el regreso, el mecánico no estuvo en Guayaquil para recibir a su esposa e hija, que llegaron los primeros días de enero desde Francia vía Panamá, a bordo de un buque a vapor. El Cónsul Fourquet había aprovechado el viaje de la Sra. de Dioudonnat para enviar con ella una caja de timbres. Esto fue objeto de dos oficios del 151 Gobernador al Ministro, los días 8 y 15 de enero de 1872, informando de la recepción en Guayaquil y la remisión de esas especies a Quito. 538 Había pasado más de un año desde que la familia Dioudonnat estuvo unida. Luego de unos pocos días con su familia, que quedó acomodada en la pensión, Dioudonnat reinició sus labores. El 22 de enero, a las 6 de la mañana, desembarcaba en Santa Clara, a donde había acudido a bordo del pailebot de guerra "Mercedes." Como de costumbre, lo primero que hizo fue inspeccionar el aparato, el cuarto de la linterna y la torre, encontrando todo en orden. Pero cuando entró en conversación con el personal, empezaron a aparecer los problemas, que en informe reportó al Gobernador: "... Ahora bien; no puedo quedar en silencio lo que se pasó en este faro; me dicen los empleados que, con fecha 29 del mes ppo. vino á qui el Sr. D. Antonio Mora, Guardia Marina con misión del Sr. Capitán de Puerto para ver si el faro era bien entretenido, i; dicho Señor propuso á los Señores Alejandro Cruz i Juan Jose Gomez hacer sus dimisiones por no tener que mandar otro el faro que el Sr. Fernando Nuñez. El Sr. Alejandro Cruz rehuso i firmo su dimision el Sr. Juan J. Gomez. Estas insinuaciones deben de ponerse por el conducto de V.S. hasta el alcance de S.E. Sr. Presidente de la República. Favor que espero merecer de V.S. que por fé de lo escrito firman con migo los cuatro empleados del faro de Sta. Clara." En efecto, firman a continuación del mecánico, el Torrero 1° Benigno Márquez, el 2° Alejandro Cruz, el 3° Juan José Gómez y el 4° Juan Sáenz. 101 El día 23 de enero el mecánico hacía un informe más detallado para enviar al Gobernador. "Señor: Hemos fondeado á las 7 de la noche (del 21 de enero ) en el Puerto de Sta. Clara. A las 3 de la madrugada me llamó el Sr. Comandante D. Hermeregildo J. Chavez para enseñarme que la luz del faro andaba á prisa i sin dar el efecto que corresponde, giraba la revolución en 4 minutos en lugar de 6. El miércoles 22 de enero fuí á la 6 de la mañana a enregistrar el aparato, la linterna i el establecimiento, siendo todo en muy buen estado de conservación i de limpieza. Puse el aparato en marcha, i giro bien exactamente en el tiempo de 6 minutos su revolución entera. Era el Sr. Juan J. Gomez de último turno, el cual se encierra en el cuarto de servicio. autor 152 El encargado Sr. Benigno Marquez me dice que dicho empleado no quiere hacer nada, que: En la noche del 29 al 30 de Diciembre ppdo. (La noche que salió el Sr. Antonio Mora de su Inspección, mandado por el Capitán del Puerto según me le han dicho); se apagó la luz á las 11h.½ de la noche, siendo el Sr. Gomez de guardia; al preguntar el Encargado por qué no encendía la luz siendo apagada, contestó: Por que no me da la gana! Esta escrito en el libro diario del faro; i me confesó el Sr. Gomez que era la verdad. Lo que da por entender que se ha hecho á proposito para que informa el Sr. Mora que no alumbró el faro en un tiempo dado, lo que coincide con una carta que hace el objeto de otro oficio. Por fin, como á cada vez que se encuentra de servicio el Sr. Gomez hace perturbaciones, es indocile e insubordinado, he mandado que hasta la separación ordenada por V.S. no haga servicio alguno. Por tal efecto, i conociendo lo que pudiera succeder he tenido á bien quedar en el faro de Sta. Clara el alumno Francisco Saens para que V.S. se digne á bien nombrarlo de 3° en relevo del Sr. Gomez. Es de mi parecer que el Sr. Juan Gomez ha maldades á proposito para hacer conocer (segun la carta ya mencionada) que sin la presencia del Sr. Nuñez, que es su tio, no puede bien alumbrar el faro. Espero que V.S. tendrá á bien mandar hacer la sumaria que corresponde por haber el Sr. Juan Jose Gomez apajado la luz, ó no haber querido volver á encender, i; pido a V.S. todo el rigor de la ley por dicho delito, así como dar el curso que merece aclarar el asalto i el robo hecho á perjuicio del Sr. Alejandro Cruz en la noche del 16 de Diciembre ppdo. Todo lo que tengo que poner en el superior conocimiento de V.S. á fin de esclarecer á este respecto." 102 Parecería que el francés por fin estaba atando cabos y dándose cuenta de cual era la situación de fondo. El mismo día 23 de enero de 1873 hace otro informe extenso, que lo numera como N° 12 de ese año, al Gobernador. Informa la situación con más detalle: "Señor: Me dicen los empleados del faro de 'Sta. Clara,' que el Sr. Fernando Nuñez, hizo firmar una carta dirijida directamente á S.E. el Señor Presidente de la República, i en pruebas me han remitido una á qui adjunta que parece haber sido el borrador, la escritura es del Sr. Juan Gomez, sobrino del Sr. Nuñez. 153 No puedo pasar sobre calomnias tan viles como malhonestas que atacan á mi honradez, i suplico á V.S. que la presente declaración, así como las piezas que la acompañan siguen el curso que merecen para hacerme justicia. Si hubiese sido insuportable en el mes de Agosto i Julio por que no le divulgó el Sr. Nuñez, i por que me dice su subrino que la carta es una venganza. Justamente los Señores Benigno Marquez, 1° Alejandro Cruz 2° i Juan J. Gomez 3°, hoy empleados en el faro, son los mismos que han trabajado conmigo para su instalación, atestan que no recibí ni una sola clase de bebida, así como el Sr. Comte. Hermeregildo Chavez el Maestro carpintero D. J. Felix Sanchez i demas. La aserción de los tubos rotos no tienen fundamento. una noche la pasó entera en el faro para probar al Sr. Nuñez i otros que todo era bueno. sobre las 3 de la madrugada al abrir la puerta, se rompió uno por la corriente de aire, i para el deseo de poner el de repuesto en su lugar lo rompió contra un montante de fierro. Son los dos que se me han rompidos. En lo que dice la carta sobre el buen comportamiento del Sr. Nuñez, tengo mi libro diario, i por temor de molestar la superior atención de V.S. no entrego la copia. Basta decir que el Sr. Capitan del Puerto, Padrino del Sr. Nuñez, ha recibido dos veces de mi parte cartas de las cuales llevo copia i entre otras cosas le desia que me vere en la obligacion de escribir directamente á S.E. el Señor Presidente de la República de las miserias que me era haciendo su ahijado; tambien he escrito dos cartas en el mismo sentido á la Gobernación del digno mando de V.S. Como en la letra se dice que ninguna empleado quedará en los Faros siendo yo en la cabeza, me complasco á dar á V.S. la lista del personal i las relaciones que nos unen entre todos. Sta. Clara. 1° Sr. Benigno Marquez. Muy amigo mio. 2° Alejandro Cruz. Ha sido engañado para firmar la carta á qui adjunta. el Sr. Nuñez decia otras palabras que las escritas. Lo tenia por un amigo; es el que me dio parte que el Sr. Mora pedia su demision. 3° Juan J. Gomez, hoy, me dice que no me ha obedecido por mando especial de su tio; que el Sr. Mora pidio su demision. 4° Francisco Saens, alumno es el que por indignacion se emparó de la carta para remitirmela. Punta Mandinga. Sr. Benito Bonilla, amigo mio me hizo escribir su gratitud por conducto de su hermano. Manta. Sr. Juan Chavez, amigo intimo. Esmeraldas. 154 Sr. Francisco Balanzatiegui, amigo i muy agradecido. Por consiguiente menos el Sr. Nuñez. no veo que en la República de Ecuador no faltarán nunca de empleados. Hoy, en los pocos momento que estubo á Puná he solicitado los certificados de los Sres. Cura i Teniente politico á qui adjuntos. Suplico á V.S. pedir las informaciones respectivas á las Autoridades de Manta, así como á Esmeraldas á los Señores Gobernadores, Administradores de la aduana Capitanes de Partido, Tenientes politicos, Sres. de importancia, al Sr. Reinaldo Flores, que tubo la bondad de brindarme su casa, en una palabra á todos si no he tenido la conducta irreprensible que conviene á mi persona i á la dignidad de mi empleo. Es lo que tengo el honor de poner en el superior conocimiento de V.S. para que se ponen medidas serias sobre este asunto." Pero como ya hemos visto, lo que menos se hizo fue resolver los problemas de fondo entre el francés y el Capitán del Puerto. Esta defensa presentada por el francés fue bastante completa, pero los estragos de la situación ya minaban su entusiasmo. Tiene que haber sido humillante el andar pidiendo certificados de buena conducta. 103 Francisco Sáenz, alumno de Dioudonnat y aprendiz en el Faro de Santa Clara, indignado por lo acontecido, había guardado el borrador de la carta al Presidente de la República que el Sr. Mora, ayudante del Capitán del Puerto, había pedido firmen los torreros. Se la entregó al francés y la reproducimos íntegramente, pues nos da una idea de la imagen del francés que querían proyectar sus detractores. El original de esta carta fue cortésmente conducido a Guayaquil por el Sr. Mora, enviado del Capitán del Puerto, para ser enviada expeditamente al Presidente: "Señor Dor Don Gabriel G. Moreno, Presidente de la República del Ecuador - Quito Escmo. Señor, Habiendo esperimentado el pesar de saver que el Sr. Fernando Dioudonnat, Mecanico de Faros ha dado á V.E. malos informes de la conducta del Señor Fernando Nuñez encargado del Faro de Sta. Clara. Tenemos el honor Escmo. Señor, de dirijirle á V.E. la presente, con el objeto de vindicar á el Señor Nuñez y decirle á V.E. la mas pura verdad para que V.E. no de credito á las temerarias imputaciones que el Señor Mecanico de Faros ha hecho del Señor Nuñez. Escmo. Señor, el Señor Fernando Nuñez es un hombre que cumple estrictamente con sus obligaciones, que se comporta con nosotros con ...midad de un caballero y 155 la onrrades de un hombre de honor; hes una persona que no se distingue en nada, hase cuanto hasemos nosotros y trabaja higual con todos sinembargo deser el encargado ó director del Faro. Enfin Escmo. Señor, tenemos la onrra de deponer en consimiento de V.E. que es el Señor Nuñez el unico capas para desempeñar el servicio de este Faro, pues ninguna otra persona llegará comprender el mecanismo de la maquina como el. ni sera tan asiduo en vijilar la buena Luz, lodas las noches y a todas horas, hasi como el buen orden y aseo en todas las cosas que estan bajo su dependencia. Si el Sr. Mecanico de Faros ha escrito á V.E. diciendole que sean roto muchos tubos, en cuatro meses culpa no es de nosotros, Escmo. Señor, pues deve recordar el Sr. Mecanico que en diez i ocho dias que estubo el alumbrando rompio veinte y dos tubos; y que anosotros en 122 dias solo se nos han roto cuarenta y ocho. E.S. concluimos la presente por desir á V.E. que si el Señor Mecanico de Faros de la República sigue de inspector general, no habran empleados que quieran estar á las ordenes de él, pues es un Señor que veve mucho licor y que cuando esta Ebrio sepone insoportable; nos in sulta á todos sin motivos y nos llama brutos. Por lo espuesto vera V.E. que la conducta del Sr. Nuñez es irreprensible y que nos seria de maciado sensible, Escmo. Señor, que por las calumnias del Sr. Mecanico; se quitase al Señor Nuñez del destino que tan dignamente desempeña." Lo curioso es que esta carta se rehusaron firmar los demás empleados, siendo el único firmante Cruz, ¡a quien Núñez le hacía la contra! El mecánico adjuntó esta copia a su informe al Gobernador, pues consideraba necesario que su jefe conozca los pormenores del problema. No hay registro de que esta carta haya sido recibida por el Presidente de la República y, como solo fue firmada por un torrero, es posible que ni siquiera haya sido enviada. 104 Y en su informe N° 12 mencionaba los certificados de buena conducta del Cura y del Teniente Político de Puná, los que encontramos a continuación: 105 y 106 "Sr. Cura D. Ramon Martines. Señor: Teniendo que probar mi conducta como empleado del Gobierno, i siendo Ud. un testigo de ella en el tiempo que estado en el trabajo del Faro de Puná 'Punta Mandinga' suplico a Ud. se sirva decir al piés de esta lo que hoy por conveniente. De Ud. ...” Y la contestación: “Apreciado Sr. 156 En contestación a la de U. y en obsequio á la verdad, certifico que su conducta como empleado ha sido sin tacha siempre lo he visto ocupado en el trabajo y en los dias de fiesta asistir con su jente á misa. Como particular en la poblacion siempre moderado y atento dando á conocer en buena educación y buen ejemplo. Es cuanto me consta y lo digo como sacerdote. De U. atento amigo y Capellan q.m.b. Ramon Martinez." Y el certificado del Teniente Político: "El Señor Mecanico del Faro Fernando Dioudonnat, me pide conocimiento de su conducta en tiempo que ha pasado en 'Punta Mandinga' para armar el faro. Como me dise que lo han acusado de tomar licores; certifico: que nunca en el tiempo que estuvo aqui en el trabajo del faro que he surtido viveres para la jente y nunca lo he visto comprar licores y que su conducta hasido intachable, estodo lo que puedo desir en obsequio de la berdad. El Teniente Politico Suplente. Ancelmo Santos." Como vemos arriba en los documentos transcritos literalmente, la situación era muy clara: Había una campaña implacable por desprestigiar al mecánico ante su jefe, el Gobernador, y ante el Presidente. El único que tenía algo que ganar (o, en este caso, recuperar) al acabar con el francés era el Capitán del Puerto, quien había perdido el control absoluto que tuvo sobre el faro y que lo quería recuperar en su totalidad ahora que habían varios. Lastimosamente, vemos que en ese afán se cometieron actos imperdonables dentro de un servicio de faros, como son los de apagar intencionalmente una luz, y en este caso la principal luz del país. No queremos aceptar que un oficial de servicios distinguidos a la Patria, como lo fue don Lucas de Rojas, podía rebajarse a ese nivel solo para satisfacer ambiciones personales o institucionales. Lastimosamente, mientras el mecánico era prolífico en sus informes, del Capitán del Puerto, en cuanto al servicio de faros en esa época, tenemos muy pocos. La historia se basa en documentos que sustenten los hechos, y los que tenemos han sido expuestos a su conocimiento. Depende de cada uno de los lectores el juzgar los hechos. Nosotros hemos tratado de mantener una visión objetiva sustentada en los documentos con que contamos. Y continuamos con el hilo de la historia. 157 Se Presenta un Segundo Reglamento. Parece que durante el viaje a Esmeraldas, y siguiendo una orden del Gobernador, el francés aprovechó para redactar un proyecto de "Reglamento é Instrucción para la inteligencia y cumplimiento de lo dispuesto acerca del mejor servicio en los Faros de la República del Ecuador," y ni bien llegó a Guayaquil el día 24 de enero, lo presentó al Gobernador como su informe N° 11 de ese año. Este proyecto era un complemento al Reglamento de los Faros ya presentado anteriormente en dos ocasiones y tenía que ver directamente con el personal de empleados. Si bien no citaremos el texto del Reglamento y la Instrucción, que cuentan con 41 páginas tamaño oficio, manuscritas, sí citaremos el texto de la carta del informe N° 11 y el esquema de las dos partes del reglamento, contenidas en el documento: "Señor: Tengo el honor de entregar á U.S. un Reglamento de Faros i la Instrucción de le acompaña. Espero así haber cumplido con la Orden del Sp o. Gobo. fecha En los 37 artículos que formulan el Reglamento, V.S. verá lo que haya á bien añadir ó quitar los que le paresca. V.S. tendrá á bien de conocer la importancia que merece la Instruccion que le acompaña. Allí esta consignado el deber de hacer, en artículos que formulan un precepto; pero son muchos los que ademas requieren una explicacion, de la manera como se ha de proceder para darles cumplimiento, es decir el modo de hacer que forma casi una profesion para la que son precisas reglas de aprendizaje.- Este es el fin que en la presente Instruccion se trata de llenar, presentando la exposicion metódica de las principales ocupaciones i operaciones que constituyen el servicio de Faros. En el caso que V.S. se digne á bien aprobar el Reglamento, creo oportuno dar á cada empleado un ejemplar, por que es de mi convixion que sin Reglamento, no podrán tan poco disculparse lo torreros por falta de ignoranza. Dios gue á V.S..." 450 El esquema del "Reglamento para la organizacion y servicio de los Torreros en los Faros de la República del Ecuador" es: "Capítulo primero. Organizacion de los Torreros." Consta de 6 artículos. "Capítulo segundo. De las obligaciones y servicios de los Torreros." Consta de 22 artículos. "Capítulo tercero. De los salarios, premios y castigos." Consta de 9 artículos. El Esquema de la "Instruccion para la mejor inteligencia y cumplimiento de lo dispuesto en el Reglamento de Faros" es: "Título I. De las Escuelas practicas para la enseñanza de los Torreros." Consta de 15 artículos. 158 "Título II. Del edificio en general y sus partes y accesorios." Consta de 9 articulos muy detallados. "Título III. De la linterna, su limpieza y conservacion." Consta de 5 artículos. "Título IV. De los aparatos de alumbrado." Consta de 11 artículos. "Título V. De las lámparas, su manejo, limpieza y conservacion." Consta de 23 artículos. Las lámparas eran el mecanismo más complicado de los faros. "Título VI. De los acopios, herramientas i enseres de repuesto." Consta de 15 artículos. "Título VII. De las visitas de inspeccion." Consta de 11 artículos. Y concluye con un capítulo sin número, referente a los "Depósitos de reserva para el surtido de los Faros." El texto del Reglamento y la Instrucción es magnífico y colmado de información útil e importante. Realmente, al ser aplicado, aseguraría el correcto funcionamiento del Servicio de Faros. Pero no fue aplicado, y como el intento anterior de establecer un reglamento, quedó en el olvido. Esto debe haber sido frustrante e incomprensible para la mente analítica y clara del francés, pues era obvio que la falta de un reglamento hacía daño al Servicio. Para rematar enero, una vez retirado Núñez del faro y encargado Benigno Márquez, el día 31 este último reporta al Capitán del Puerto que el Sr. Francisco Sáenz se había portado muy mal, desobedeciendo órdenes y rehusándose a trabajar debidamente; había insultado a todos y hasta había amenazado con agredir físicamente a sus compañeros. El Sr. Capitán del Puerto cumple con informarle al Sr. Gobernador de esta situación, enviando copia del informe del Sr. Márquez. Es posible que los rigores del servicio afectaron a Sáenz, aunque no sabemos por qué Márquez reportó esto a la Capitanía en vez de al mecánico. Sáenz había sido uno de los alumnos más prometedores del francés. 311 312 159 Capítulo 16.- Se Instala el Faro de Punta Arenas Esos días de enero de 1873 fueron de lo más ocupados para el francés, pues aparte de los problemas que tenía que enfrentar con el personal de los faros, y el constante escrutinio crítico de la Capitanía del Puerto, estaba preocupado por obtener la madera necesaria para la torre del Faro de Punta Arenas. Había puesto algunas órdenes en Puná, y durante los siguientes tres meses se buscaba la madera adecuada, tanto en calidad como en dimensiones. La torre sería muy alta y se ubicaría en un lugar peligroso, por lo que su estructura tenía que ser adecuada. En repetidas ocasiones le quisieron entregar madera inadecuada, pero la rechazaba, ante lo cual los proveedores pedían la intercesión del Gobernador, quien no intervino ante el mecánico. 286 a 289 Con las indicaciones del Sr. Cope sobre la importancia de Isla Verde para el tráfico de naves por el canal nor-oeste de la Isla Puná, Dioudonnat había realizado la respectiva inspección el 7 de febrero de 1873 y pasó al Gobernador el presupuesto para adquirir en Francia, a Barbier & Fenestre, un fanal de 6° orden para esa isla. El costo estimado en fábrica era de $505 (francos franceses), incluyendo piezas de repuesto y herramientas. 107 y 108 El 13 de febrero se reportaba listo para movilizarse a Punta Mandinga y Santa Clara, para lo cual pedía, al Gobernador, raciones para 14 días por persona. El viaje lo haría con el Sr. Alcides Baca, quien reemplazaría a Juan José Gómez en el Faro de Santa Clara, y el alumno hojalatero, Sr. Pastor García, quien iría a componer las cubiertas de las torres. 109 Don Beltran Fourquet, Cónsul del Ecuador en París, notificaba al Gobernador del Guayas, el 19 de febrero de 1873, que había embarcado a bordo del "Vapor Martinique," cuatro cajas con piezas pedidas para los faros, entre lo que estaba: Chimeneas para lámparas de 3° y 4° orden, puertas de cristal y cristales. 323 La luz de puerto de Esmeraldas estaba a cargo de un operario muy consciente de su función, y el 21 de febrero envía al francés un informe en el que le plantea tres problemas y pide soluciones. Primero le informa que el cambio de combustible de aceite de oliva a queroseno no funcionó bien, con el resultado de que se originó un incendio 110 160 que envolvió a todo el aparato, pero lo pudo controlar sin daños más que a la lámpara del depósito. El segundo problema es que el Gobernador de Esmeraldas no le provee de aceite de oliva, por lo que ha tenido que usar aceite de tiburón arponeado por él mismo. Sin embargo, este aceite no funciona bien y la lámpara se apaga frecuentemente. Pide le envíe aceite. El tercer problema, más grave que los anteriores, es que el Gobernador le ha ordenado apagar la luz, pues debido a una enfermedad que hay, “ningún buque que venga de avajo pueda atracar en ningún punto del Ecuador.” Según el Gobernador, esta es una orden del Supremo Gobierno. El operario, sin embargo, se rehusa apagar la luz por cuanto no se lo ha ordenado su jefe (el mecánico). Informa que el Gobernador le dijo que “aquí el único jefe era él.” A pesar de la autoridad del Sr. Gobernador, el operario le pidió la orden por escrito, para acatarla. A comienzos de 1873 se reactivaron las diferencias de opinión sobre la ubicación del Faro de Punta Mandinga. Alguien inidentificado era de la opinión que era conveniente colocar un faro en Punta Centinela, pero como no se lo había previsto, pedía que se reubique allí el de Punta Mandinga o que se ubique el de Punta Española, que aún no se instalaba. Un nuevo esfuerzo de quien tenía esa opinión lo realizó a través del Ministro del Interior, Sr. Francisco Javier León, quien cursó la siguiente comunicación al Gobernador del Guayas, el 28 de febrero de 1873: “Con vista del informe que el H. Señor Ministro de Francia ha embiado á este Ministerio sobre la posicion de los faros de ‘PuntaArena’, ‘Santa Clara’ y ‘Punta Mandinga,’ S.E. el Presidente de la República me ha ordenado dirijirme á VS. previnéndole que, con respecto á la colocación mas conveniente de este último, consulte la opinion del Capitán de ese puerto y del agente de la Compañía de vapores del Pacífico; pues el Sor. Lamothe Fenet, Comandante de la fragata francesa “La Resuelta,” autor del mencionado informe, cree que habría sido mas á propósito la Punta-‘Centinela,’ en atención a que dicho faro, en su actual posición, no aclara 111 y 112 161 sino de Oeste á Sur, pasando por el Norte, sin utilidad ninguna para las naves que deceen pasar por el Oeste del Banco de Mala.---Dígolo á VS. para su conocimiento, y para que prévia la preindicada consulta, se acuerde la mejor colocación de dicho faro...” Por cierto que el argumento de “pasar al Oeste del Banco de Mala” no afectaba ni al Faro de Punta Mandinga ni al deseado de Punta Centinela, pues desde ese canal no se divisa la primera y apenas la segunda, mientras que viniendo del río Guayas, Punta Centinela no se ve tan claramente como Punta Mandinga. Las puntas que sirven de señales para ese canal "al Oeste del Banco" son las de Punta Arenas y Punta Española. Parecería que el informe del capitán francés tenía alguna influencia local que se quería aprovechar del desconocimiento del extranjero y de los funcionarios en Quito. Por cierto que no sabemos si el Capitán del Puerto dio o no apoyo a esta propuesta, pero la idea no prosperó. Meses después, se haría un nuevo esfuerzo de colocar un faro en Punta Centinela, basado en el mismo informe. El Faro de Punta Mandinga se mantuvo en su posición. A pesar de la situación tirante con el Capitán del Puerto, el francés no dejaba de contactarlo cuando era necesario, guardando las cortesías de rigor: "Sr. Comandante D. L. Rojas. Muy Sor. Mio i de toda mi consideración: Con fecha de ayer 8 de Marzo de 1873, tubo el honor de entregar á Ud. una cajita pa su remision en el Faro de 'Sta. Clara'; dicha caja contiene los efectos siguientes: 1 Lámpara pa aceite de kerosene, 5 Metros de mechas, 10 chimeneas de cristal. Tambien tubo el honor de pedir á Ud. un pedido de dos latas de Kerosene. Lo que dijo á Ud. pa su conocimiento i efectos qe corresponden, quedando de Ud. S. seguro S.Q.B.S.M. Guayaquil 9 de Marzo 1873 F. Dioudonnat." 113 El trabajo en los faros era muy exigente y estricto, bajo el minucioso control del Gobernador. El Sr. Benito Bonilla, empleado del Faro de Punta Mandinga, necesitó permiso de ocho días para resolver un asunto familiar, pero no se pudo mover del puesto hasta que el Gobernador lo aprobó. Más aún, el reemplazo fue pagado por el mismo Sr. Bonilla. 114 La posición del Faro de Punta Arenas seguía siendo un problema para el francés, tanto por la extensión y conformación material del bajo fuera de la 162 punta, como por la influencia de la ubicación en las características de construcción de la torre. El 10 de marzo había perdido la paciencia con los proveedores de madera de Puná y, luego de mostrársele madera que no cumplía sus especificaciones, se embarcó sin dar dimensiones nuevas al proveedor, Sr. Genaro Santos. Este Sr. escribe al Gobernador lamentándose y justificando que la madera que le tenían al mecánico era "...palos de seis i siete varas de largo i de cuatro i media á cinco palmos de grueso que es la misma madera que pidió al juez de Puná cuando formó el faro de Puná." Y esto último nos explica la exasperación del francés, pues los palos para Punta Arenas no tenían nada que ver con los usados en Punta Mandinga, ya que las torres eran distintas en todo sentido. El 13 de marzo de 1873 presentaba al Gobernador su informe N°25 de ese año: “Al ordenarme V.S. principiar la fábrica del Faro que se debe de establecer en ‘Punta Arenas,’ deseo que una Comisión señala la posición geográfica exacta del lugar; por que habiendo hecho el estudio en dos ocasiones.- 1° En el mes de Febrero del año ppdo.; 2° i á hora en este último viaje; hemos visto el Comandante de la goleta de guerra ‘Mercedes,’ Sor. Hermeregildo J. Chavez i el que suscribe, qe se han formado bajos qe aparecen á la marea vacia, los cuales no figurán en ninguna mapa de la ría de Guayaquil. Hemos creido á bien, el Sor. Comte é yo manifestar á V.S. el particular á fin de que si se puede conseguir hacer formar una Comision de Oficiales de Marina ó Navegantes para significarme lo que tengo la honra de pedir á V.S. = la posicion exacta del Faro. A hora bien, creo oportuno hacer la torre á como 2 millas de la costa, en un medio de unos bajos, i pa mejorconocimiento de V.S. tengo el honor entregar á V.S. dos borradores de dibujos que señalan la posicion en lo posible exacta del terreno. Por fin á V.S. tengo el honor de poner á su aprobación superior los pedidos á qui adjuntos pa compra de maderas, herrerias i demas efectos pa el efecto...” El emplazamiento de este faro traería constantes problemas en el futuro por razón de los movimientos de los bancos de arena, habiendo sido necesario reforzar el terreno en algunas ocasiones. 289 115 Seguidamente en la documentación, fechada 17 de marzo, tenemos una carta que es curiosa porque no sabemos qué cargo ocupaba el destinatario. Es interesante que se encuentre con la documentación de la Gobernación del Guayas y tiene la misma fecha de otra comunicación, con un tenor esencialmente igual, que el mecánico envía al Gobernador. Dice así: "Sor. José Marín. Muy apreciado señor y amigo: 163 Tengo el honor entregar á V.S. un oficio i un Presupuesto urgente pa Francia.--(por duplicado). Una carta del encargado de Esmeraldas, á donde vera Ud. que allá el Sor. Gobernador quiere: apagar la luz. Pide 1$ por una botella de aceite de oliva i demas. --Deseo saber si Ud. mando el encargo de la luz de Puerto para Isla Verde. Por fin mañana saldrá el vapor qe llevará la correspondencia. En dos meses el gasto de la compra de las lámparas que pidó hoy será cubierto con la diferencia del precio de los aceites i la intensidad mayor. Dispense Ud. mis notitas y crea U. que siempre quedaré de Ud. suyo S.S. y amigo F. Dioudonnat." En carta de la misma fecha al Gobernador, el mecánico le dice que las lámparas de queroseno que se están pidiendo según presupuesto adjunto, llegarían a tiempo para ser usadas en la inauguración del Faro de Punta Arenas. Le reitera el ahorro que se tendrá por la diferencia del precio del combustible. Informa también al gobernador que: "...i poniendo á la vez en su conocimiento de V.S. que en el mes de Enero ppdo. se Decreto en Francia la reformacion en todos los faros de las lámparas que usaban aceite de colza por las de aceite mineral, siendo así el servicio mas sensilio, sin necesidad de despabilar de noche." 116 117 El presupuesto incluía piezas para todos los faros instalados, menos el de Santa Clara que, como vimos anteriormente, ya habían sido pedidas. Las lámparas del Faro de Punta Mandinga también se cambiaron por ser las nuevas de un sistema mejorado y de mayor eficiencia. Es este Presupuesto el que nos aclara más el tipo de equipo del Faro de Punta Mandinga, ex de Santa Clara. Al pedirse solo dos lámparas, debe haber sido, en efecto, un aparato de 6° orden, parecido en capacidad lumínica a los recientemente adquiridos a Barbier & Fenestre. Este presupuesto también nos aclaró la forma en que le daban el color rojo a la luz del Faro de Punta Arenas, pues como hemos visto hay varias maneras de hacerlo. En este caso, el color rojo lo daba el cristal de la chimenea de la lámpara, que era de ese color. 118 En Esmeraldas seguían los inconvenientes con el faro, pues por alguna razón les habían mandado queroseno en vez de aceite de oliva. El 20 de marzo el Gobernador José Zambrano pedía al Gobernador del Guayas le remitiera el aceite adecuado. Ya vimos antes que el operador había tenido problemas al tratar de usar queroseno en la lámpara. No sabemos por qué 164 razón se insistía en remitirles un combustible inadecuado para la lámpara, lo que representaba un gran peligro de incendio. El Gobernador de Esmeraldas pide al Gobernador de Guayas: "...suplicar á USa se sirva hacer comprar en esa ciudad, con previo acuerdo del Señor Mecánico de faros..." 290 El 22 de marzo, con oficio N° 48, el Gobernador hace conocer al Ministro de Hacienda un pedido de lámparas de queroseno, repuestos e implementos, que hacía el francés para los faros. 451 El Capitán de Puerto de Guayaquil, siempre preocupado de mantener informado a su jefe inmediato, el Cmdte. Gral. del Distrito y Marina, le reporta el 22 de marzo de 1873 lo siguiente: “Señor: El Capitán del vapor Ingles “Guayaquil” Dn Horatio Battle, con fecha 9 del pte, me ha comunicado por escrito en carta particular, que su buque estubo á punto de perderse en el puerto de Manta por cáusa del faro que, segun datos estubo tres dias apagado por falta de aceite; manifestandome, que bajo la confianza que inspira el periodico oficial de esta República, en el que se ha publicado la instalación del faro mencionado, avanzó con su buque hasta muy cerca de la Costa esperando ver la luz que debia servirle de Norte en su entrada á dicho puerto. --Como este acontecimiento compromete la honra i dignidad de la Nación, aunque no está ese faro bajo la inmediata inspeccion de esta Capitania, me apresuro á ponerlo en conocimiento de US. para que intelijenciado de lo ocurrido juzgue lo que á su juicio US. creyere conveniente.---“ 339 El 29 de marzo de 1873, el Gobierno autorizaba el pedido de las lámparas de queroseno para el Faro de Punta Arenas y luces de puerto de Esmeraldas y Manta. 291 Una vez determinado el punto exacto de colocación del Faro de Punta Arenas, el mecánico pasó al Gobernador, el 31 de marzo, un detallado informe de la ubicación, construcción y detalles de la torre. El informe iba acompañado de un plano detallado de la estructura. Esta torre era sumamente compleja, pues en su base tenía dos partes asimétricas: una octogonal exterior para afirmar a la otra, cuadrangular interior, que era la torre propiamente dicha donde se ubicó la linterna de 4° orden. La altura llegaría a los 23 metros, 5 menos de los 28 originalmente planificados, y tendría 4 pisos para distintos usos. Su base era un muelle de 24 metros de largo por 12 de ancho que tendría dos "casitas," una en cada extremo, y la torre del faro en su parte central. Decía el francés: "En cada estremo del 165 muelle, se harán las casitas pa cosina, comedor, almacen de agua i escusado." La descripción de esta torre concuerda con la de la foto tomada por 1885, por lo tanto, cualquier arreglo o cambio que se pudo haber realizado entre 1873 y 1885, fecha de la foto que tenemos, respetó la forma básica de la estructura. El 2 de abril, acompañada de oficio N° 61, se envió al Ministro Eguiguren la transcripción del informe y los planos originales en un tubo de lata. 119 452 El mismo día y con oficio N° 62, el Gobernador informaba haber recibido comunicación del Cónsul Fourquet, notificándole del embarque del pedido de chimeneas y otros implementos para los faros. 453 El 4 de abril, el Sr. Genaro Santos notificaba al Gobernador que estaba listo un pedido de madera pero que el precio era "en el puerto" y le dice que el llevarla a Punta Arenas tendrá un costo, pues no se puede llevar en balsa "por que los mares son mui fuerte i debe ir enbarcada en chata para que valla segura." 292 El transporte de las chimeneas que se pedían para las lámparas era un constante problema por las roturas que sufrían. El francés informaba el 9 de abril que el problema de "dichas roturas provienen del modo como los peones de la Aduana tomban los bultos" y cree oportuno "hacer decir á la casa constructora en París... ...que no mandan bultos pesados, i qe cada hilera de cristal sean divididas con tablas." 120 El problema de la entrega y procesamiento de la madera continuaba. Parece que el francés pidió que la madera ordenada en Puná sea transportada a Guayaquil para labrarla, lo que motivó una comunicación del Sr. Genaro Santos al Gobernador, el día 10 de abril, indicándole el aumento del costo y sugiriendo se la transporte en una balsa tirada por una embarcación grande. Justifica el aumento del costo por cuanto su contrato era para entregarla en el puerto, e indica que otros como el Sr. Anselmo Santos la venden en iguales condiciones. Termina diciéndole al Gobernador que "V.S. se servirá decirme si le conviene o no la madera, para en el último caso disponer de ella." 293 El informe del mecánico sobre la instalación del Faro de Punta Arenas fue recibido por el Ministro de Hacienda, quien comunica, el día 12 de abril, que ha merecido la aprobación del Supremo Gobierno. Indica que no llegó 166 con la comunicación el tubo de lata con los planos, pero que se proceda con la construcción del faro, conforme a lo comunicado en oficio del 5 de ese mes. 294 Genaro Santos comunica al Gobernador, el día 18 de abril, que entrega diez y ocho riostras que complementan una entrega anterior, e informa que se perdieron algunos palos por "la mucha mares" cuando se transportaban a Puná. Dice que los está haciendo buscar e indica al Gobernador que "US. pagara el transporte de esa madera que regularmente deben ser á peso palo..." 295 El 19 de abril, en Guayaquil, el mecánico informaba al Gobernador del trabajo de carpintería que se estaba realizando en los patios del colegio. Se estaban labrando piezas y armando parcialmente partes para llevarlas semi ensambladas. También informa que se han forjado 422 pernos de varios tamaños y se han cortado varillas de fierro para barandillas. Con satisfacción informaba que se habían probado las nuevas lámparas de queroseno para los faros de Santa Clara y Punta Arenas y pedía autorización para ir a Santa Clara en la chata de abastecimiento de víveres, el día 26, con el fin de colocar la nueva lámpara y dar una mano de pintura a la torre. 121 El problema de abastecer de aceite de oliva al Faro de Manta continuaba y permaneció apagado algunos días, hasta que pasó un buque caletero y su capitán se quejó ante el Cmdte. Gral. de Distrito en Guayaquil. Ésto generó una comunicación del Ministro de Hacienda, tanto al Gobernador de Manabí como al del Guayas. Este último estaba involucrado por cuando el Gobernador de Manabí le había hecho el pedido de aceite de oliva, pero si bien había la nota de remisión, el aceite no había llegado. Dice el Gobernador de Manabí: "... i á consecuencia de que el aceite de oliva es muy escaso y caro en esta provincia, me dirigí al Sr. Gobernador de Guáyas para que se sirviese remitir dos quintales de ese artículo..." Continúa: "...Esta nueva falta me ha hecho disponer con esta fecha, que se compren en Montecristi, al precio que se pueda, veinte litros... ...á fin de que el servicio de la luz se haga con rigurosa exactitud, i no se comprometa en esto el honor i dignidad de la Nación." El Ministro concluye la carta pidiéndole al Gobernador del Guayas "la remisión del aceite sin pérdida de tiempo." Desafortunadamente, este problema de falta de combustible no se solucionaría ni con el cambio a lámparas de queroseno, pues el problema 296 167 no estaba en los combustibles, sino en la tramitología burocrática necesaria para la adquisición de ellos. Como la denuncia había sido al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina, éste pidió explicaciones al Capitán del Puerto de Manta, quien contestó el 22 de abril de 1873 que, como él era nuevo en el cargo, no se había enterado de la falta de luz. 368 El 7 de mayo de 1873, el francés hacía un nuevo pedido a Francia, que incluía chimeneas y otros materiales para el Faro de Santa Clara y para las luces de puerto de Esmeraldas y Manta. En el pedido se incluía el lente para la nueva luz de puerto para Isla Verde, pero se la pidió solo con los efectos que corresponden a la luz propiamente dicha, pues el armarín o cuarto de linterna sería construido localmente. El pedido estaba acompañado de plantillas dibujadas por el francés, tanto del lente para Isla Verde, como de la base de la chimenea de la lámpara del Faro de Santa Clara. 122 123 y 124 A mediados de mayo estaba lista, para su envío a Punta Arenas, parte de la madera trabajada, detallándose en informe el tipo, la medida y el uso que se le daría en la construcción del muelle, las casitas y la torre. 125 Habían llegado al estero, al pie del colegio, el día 15 de mayo, unas maderas de guachapelí que el mecánico, asesorado por el maestro carpintero, consideró ideales para la construcción de las torres y aconsejó al Gobernador comprarlas "por lo barato que se venden." 126 El 20 de mayo, el Gobernador oficiaba al Cmdte. Gral. del Distrito con el fin de que el pailebot de guerra "Mercedes" conduzca la madera a Punta Arenas el día 26 de ese mes. Paralelamente, el Gobernador notificaba al Ministro de Hacienda sobre el programa de trabajo y éste contestó el día 28, dos días después de la salida del buque, con la aprobación del Supremo Gobierno a las "disposiciones convenientes para que los trabajos se ejecuten de la mejor manera posible." 297 454 298 Don Beltran Fourquet acusa recibo del pedido de las lámparas para el Faro de Punta Arenas y las luces de puerto de Manta y Esmeraldas, el que fuera enviado el 8 de abril del mismo año, y comunica que se ha dado aviso inmediato a los fabricantes para que "los habiliten todo a la mayor brevedad". 324 168 El 20 de junio del mismo año el Sr. Fourquet pasaba una nota de débito al Gobierno, detallando las órdenes despachadas y sus costos. El importe total era de 3,435.oo francos. En esta nota se incluyen las lámparas de queroseno. El Cónsul Fourquet actuaba como agente comprador del Gobierno. 325 Superados los problemas del aprovisionamiento de la madera y su transporte, el trabajo continuó ininterrumpidamente durante el mes de junio y comienzos de julio. Por informe enviado por el Gobernador al Ministro de Hacienda, fechado 28 de junio y con oficio N° 114, sabemos que la ubicación de la torre fue cambiada a última hora, del bajo en mar abierto a la playa al pie de la costa. Esto representó un considerable ahorro y, sin planearlo, evitó la pérdida del faro, lo que habría ocurrido si se lo ubicaba afuera. Aún así, el lugar sufría por el continuo embate de las marejadas. 455 El 6 de julio de 1873, el torrero Alejandro Cruz comunicaba al Gobernador que: "Con fecha 27 del pasado he tenido el honor de recibir mi nombramiento de Encargado del faro de Pta. Arena, por lo que me doy por nombrado; y á US. le quedará la satisfacción mas tarde de decir q se an acendido por su escala y que cumplen con su deber." A continuación le comunica que: "con fecha 6 del presente recebi orden oficial del Sor. Mecanico de faros; que me concerbe siempre con mi puesto asta el regreso del Sor. Nuñez por creerlo asi para la buena conserbacion de la luz..." Se refería a que quedaría a cargo del Faro de Santa Clara hasta el regreso del encargado. El Núñez al que se refería era nada más y nada menos que el mismo Fernando Núñez que tanto problema había causado, y que regresaba al faro más importante. Ese retorno sería muy perjudicial. 327 169 El mecánico, por cortesía, había comunicado al Capitán del Puerto sobre la instalación del Faro de Punta Arenas y éste se apresuró en comunicarlo a su vez al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina, de la siguiente forma: “Señor: Con esta fha me dice el Señor Mecanico de Faros lo que á SSa copio -‘Desde el 5 de julio del presente mes, quedó inaugurado el Faro nuevo en Punta Arena.” = Aparato de 4° orden giratorio. = Luz roja. = Destellos prolongados de ‘ en ‘ sobre toda la altura. = Una revolución entera en seis minutos. = Periodos de cada minuto, representando sucesivamente: Un destello...... Duracion...16” Intensidad maxima 375 lamparas carcel: Un Eclipse total.... Duracion 44”.... Intensidad... 0.... = Elevacion del Plano focal desde el nivel medio del mar 20m. Alcance de la 12 millas. = Se supone el observador puesto sobre la cubierta de un gran buque. = Situación Geografica Lat.- 3°01’52”. = Long 80°05’35” meridiano Grenich = La torre se halla situada en la misma Punta á 10 metros de la orilla del mar, es cuadrada, portando cuatro pisos, el segundo lleva su balcon á todo el rededor de la torre. = Se desmontó 4200. Metros cuadrados de mangles, quedando el Faro enteramente aislado. = Abordo del Pailebot de guerra “Mercedes”. = El Injeniero mecanico de Faros = F. Dioudonnat.' --- Lo que tengo el honor de poner en conocimiento de SSa para los fines convenientes...” Este documento sirvió para que se enviara la comunicación que sigue. El 9 de julio, el Cmdte. Gral. del Distrito se anticipó al Gobernador en anunciar al Gobierno el inicio de la operación del Faro de Punta Arenas. El Ministro del Interior, encargado del Despacho de Guerra y Marina, le contestó el día 16 acusando recibo de la comunicación. 340 299 A fines del mes de julio, los cónsules radicados en Guayaquil notificaron al Gobernador el conocimiento del derecho por el Faro de Punta Arenas. 326 En este punto daremos una descripción del lente y cuarto de linterna del Faro de Punta Arenas. Como ya sabemos, el fabricante del aparato completo fue la casa Barbier & Fenestre de París, Francia. El lente de 4° orden está compuesto por seis paneles de destello que forman el tambor 170 lenticular y contienen, cada uno, los prismas dióptricos y catadióptricos alrededor de un lente central de ojo de buey. Los cristales están montados en una estructura de bronce y ésta a su vez reposaba sobre el plato de rotación. El mecanismo de rotación era a base de cuerda que se daba con manivela y la rotación era regulada por pesas que descendían de la maquinaria por el centro de la torre. Inicialmente el faro vino con lámparas Degrand que funcionaban en base a aceite de oliva, pero antes de operar ya contaba con lámparas nuevas, diseñadas por el Capitán Doty, que funcionaban en base a queroseno. Este faro daba luz roja y el color se lograba con chimeneas de ese color que se colocaban en la lámpara, en vez de chimeneas de cristal claro. El faro daba una rotación cada seis minutos; su destello era cada minuto y duraba 16 segundos. El eclipse duraba 44 segundos. La Carta # 586 del UKHO, corregida hasta 1873, nos muestra el Faro de Punta Arenas con sus características y la extensión del bajo a esa época. Hay una boya roja y blanca marcada (RW), pero no hay referencias de ella. 545 Capítulo 17.- Actividades Post-Instalación El 9 de agosto de 1873 el Gobernador del Guayas notificaba al Ministro de Hacienda, mediante oficio N° 613, que se habían despachado de la aduana, libres de derecho, siete bultos conteniendo útiles para los faros. 456 Informes al Congreso. El 10 de Agosto de 1873, tanto el Presidente de la República como el Ministro de Hacienda informaban al Congreso Constitucional sobre los faros. 171 El Presidente Informó: "Tres faros y dos luces de puerto alumbran ya nuestras costas, en las cuales se han colocado cuatro boyas de campana para indicar los bajos peligrosos de Mala y Atacames; y al mismo tiempo dos dragas, una de las cuales está en servicio, destruirán los obstáculos acumulados en el Guáyas por la acción de la corriente y la incuria de los hombres. Para la mayor seguridad de la navegacion y fomento del comercio conviene aumentar el número de faros y boyas, y trasladar el inseguro fondeadero, de Esmeraldas á la rada inmediata de Coquito, para lo cual es indispensable establecer en ella un muelle y unirlo con la población por medio de un corto ferrocarril de sangre. Si acojeis estas indicaciones, os dignareis señalar en el presupuesto la suma necesaria." 128 El Ministro de Hacienda Informó: "Desde el 30 de diciembre de 1872, se encuentran las costas de la República alumbradas por dos faros y dos luces de puerto colocados respectivamente en el Muerto, Manta, Esmeraldas y Puntamandinga; y señalan los bajos de Mala y Atacames cuatro boyas de primera clase con campanas. Desde el 5 de julio del presente año se levantó, ademas, una luz de puerto en Puntarenas; con la cual se ha asegurado inmensamente la navegación por nuestras costas. Este beneficio debe estenderse á otros puntos de la costa, y con tal motivo el Gobierno ha dispuesto aumentar el número de faros y boyas. Los cinco faros y cuatro boyas de fierro con campanas importaron $16,326,39 centavos. Los fletes de mar, la compra de cuatro anclas para las boyas y los gastos en la construcción de las torres, pasaje y sueldo del mecánico contratado para este objeto y mas gastos para el establecimiento de los faros importan $10,812,=. En el personal, destinado al servicio de los faros, inclusive el ingeniero se gastan $815,83 mensuales, y el material para el alumbrado $165." Añadía más adelante: "A mas de esto, encontrareis tambien en el cuadro señalado con la letra Z la demostración de distancias á que alumbran los faros y luces de puerto, y últimamente bajo la letra X la razon por menor de los contratos celebrados por el Gobierno para las obras públicas." En el anexo "Y" del informe, en el detalle de gastos por provincia, en Guayas se detalla el gasto por los faros en el bienio 1871-1872, que da un total de $27,138.41 pesos. En el anexo "Z" del Informe se detalla la situación de los faros y boyas, anexo que se reproduce en imagen como Anexo "A" de este libro. 127 172 En el anexo “Z” el uso del término "holofotal" al referirse al Faro de Punta Mandinga es curioso, pues lo mismo podría decirse de los demás. Ese término no existe en Castellano y es un término en Inglés y Francés. En Inglés, el significado es el de "Un aparato óptico para recolectar y dirigir una gran cantidad de la luz de una fuente, en una dirección deseada por medio de lentes o reflectores, tal como la lámpara de un faro." ¡Según esta descripción, todos los faros de la lista son "holofotales"! El “holophote” era un artefacto luminoso que reflejaba la luz, el cual estaba de moda en esa época. Empieza a Decaer la Estrella del Mecánico Francés. El 16 de agosto, el Ministro de Hacienda aprobaba el despacho, libre de derechos, de los bultos que contenían los implementos pedidos en mayo. Para la época, había sido una importación muy rápida que había tomado apenas tres meses. El mecánico recibió los bultos e inmediatamente realizó un inventario que comunicó al Gobernador, quien a su vez lo transcribió en oficio N° 155 de esa fecha al Ministro de Hacienda. 300 El 20 de agosto de 1873, el mecánico pidió al Gobernador autorización para embarcarse en una chata, por ser más barato que movilizar el pailebot "Mercedes." Era necesario llevar agua para el personal de Punta Arenas y carpinteros para continuar trabajando en algunos detalles de la obra. También visitaría todos los demás faros, llevaría los repuestos recién llegados y revisaría las boyas. Es interesante anotar que las chatas navegaban hasta la Puntilla de Sta. Elena, pero normalmente no salían a mar abierto, como pedía el francés, pues el viaje hasta Esmeraldas requería alejarse un tanto de la costa. 458 Parece que el Gobernador no le autorizó el viaje largo que había planificado sino uno corto hasta Santa Clara y Punta Arenas. El 23 de Agosto informaba lo siguiente: "...Mi visita al Faro de Santa Clara ha sido para mí un placer de ver el bueno entretenimiento; bueno tanto del aparato como de la linterna i maquina de rotacion.= Como lo pensaba, los cristales de la linterna no tienen averias naturales por efectos del sol, sí no por que el encargado (Márquez) en contra de mí órden i por capricho suyo, ha deshecho piezas que nunca no debia desarmar, i á volverlas á armar; cuatro cristales tuvieron fisuras en los angulos de la parte de abajo por haber apretado demaciado con tornillos los marcos de bronce sobre los cristales.- En lo que concierne el efecto de la luz no puede ser mejor..." Añadía: Punta Arenas.- Los trabajos para la conclusion de la obra adelantan á la vista. Espero entregar el faro el 15 del mes entrante.- Quisiera la visita de mas 173 autoridades, es un viaje tan facil en el rio, á la vez un paseo..." Ese mismo día, el Gobernador envió al Ministro la transcripción del informe, en oficio N° 173. 459 Parece que el mecánico volvió a salir a los faros, pues el 3 de septiembre el Gobernador comunica al Ministro de Hacienda, mediante oficio N° 176, que el Tesorero de Hacienda de la Provincia le ha enviado al mecánico pintura blanca y espíritu de vino en el pailebot "Mercedes." 460 Las relaciones del mecánico con el Capitán del Puerto seguían distantes, sino hostiles, pero en un momento dado el francés necesitó que el Capitán hiciera una inspección. Para lograrlo, fue necesario que se lo pida al Gobernador y éste al Ministro de Hacienda, quien consultó con el Presidente, quien a su vez dio su autorización para que el Gobernador lo ordene. El día 6 de septiembre, mediante oficio N°174, el Ministro Eguiguren le notifica al Gobernador que: "...autoriza a US. para que disponga que el Señor Capitán del Puerto haga la visita que desea el citado ingeniero." Y el Capitán del Puerto, a su vez, informa al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina: “Señor: Con fecha de ayer me transcribe el Señor Gobernador de la Prova, lo que a SSa copio.--- ‘El H. Señor Mitro de Hacienda i Obras públicas con fecha 6 del pte i bajo el N° 174 me dice lo que sigue. = Instruido SE. el Presidente de la República del contenido de la comunicacion del Señor Ingeniero de Faros, transcrita en el oficio de US. N°173, ha tenido á bien aprobar el que US. halla dado las ordenes para que se le envie lo que pide, y autoriza á US. para que disponga que el Señor Capitán del Puerto haga la visita que desea el citado ingeniero. Lo digo á US. contestando su oficio citado. = Dios gde á US. = J. J. Eguiguren. = Lo que transcribo á U. para su intelijencia y que lleve á efecto la visita ordenada. = Dios gde á U. = Visente de Santistevan.’ --- Lo que tengo el honor de poner en conosimiento de SSa para que se sirba ordenar lo que estime conveniente. --- Dios gde á SSa. Lucas Rojas.” ¡Qué tramitología por más de una visita de inspección! 301 341 En informe N°151 del 17 de septiembre, desde Punta Arenas, el mecánico hace un pedido para dar los toques finales a las obras complementarias del faro. Entre el pedido se encuentra "agua filtrada de los tanques á Guayaquil, no del río." Cada barril de esta agua costaba 3 reales, mientras que ir a buscar el agua en Puná significaba la movilización de 5 hombres durante un día, dando un costo de 2 pesos por barril. 174 El Gobernador ordenó al Tesorero de Hacienda "para que inmediatamente proporcione los útiles que pide el Señor Ingeniero." 129 El día 19 de septiembre el mecánico respondía al Gobernador por el último intento por hacer instalar una luz en Punta Centinela, con la siguiente nota sin numerar: "Deseo que Ud. tenga á bien hacer conocer al Supremo Gobierno que sí quiere poner una luz provisional en la 'Punta Sentinela' la única á que sirbe un Faro, tengo en mi poder en el almacen general de Faros, todo lo necesario para poner una 'luz provisional' blanca fija que alcansará de 8 á 10 millas. Se me necesitará como un mez la construcción de la casa, cual quedará definitiva. Lo digo á UD. pa prueba del interés que llevo en beneficio de la Navegación en general i de la Nacion en particular; á mi concepto el buen alumbrado de las costas llamarán en las aguas de la República mas buques i por consiguiente mas comercio. Esperando que Ud. hará lo conveniente al efecto. Doy por esto á Ud. las mas expresivas gracias, quedando. Su mas respetuoso y atento subordinado. F. Dioudonnat." Y como al fin cedió el francés a las presiones, no se volvió a insistir sobre el asunto. Solo faltaba el resultado de una encuesta de la PSNC al respecto. 328 El 20 de septiembre, el empleado del Faro de Punta Mandinga envía al Gobernador una comunicación de lo más curiosa que, por no existir el oficio al que se refiere, nos deja una incógnita. La carta dice así: "Señor: Tengo el honor de poner en conocimiento de US. que en este momento acaba de llegar un oficio del Sor. Mecanico de faros, y como el me esplica que es urjente he tratado aser un propio lo cual no he conseguido, y lo hago por conducto del practico Patricio Santos por no conseguir quien se baya mas pronto. Dios Guarde á USa Lino Bonilla." ¿Significa que hubo algún problema en la visita del Capitán del Puerto o en la operación del faro? ¿Surgió otro problema inesperado? Solo podemos lamentar el no tener la información completa para conocer el por qué de la urgencia. 130 Durante el mes de septiembre continuó el problema sobre la ubicación del Faro de Punta Centinela y el Agente de la PSNC, conocida para mayor facilidad como la Compañía de Vapores Británicos, realizó una especie de encuesta con los capitanes de buques. El resultado fue que tres de cuatro concordaron en que los faros de Pta. Española y Pta. Mandinga eran los adecuados para ayudar a la navegación. Solo uno opinó que se los debía reemplazar por el de Punta Centinela. El Agente notificó, el 1° de octubre, 175 al Gobernador sobre el resultado, adjuntándole las cartas de los capitanes. El Gobernador notificó al Ministro y el 8 de octubre el Ministro Eguiguren comunicaba al Gobernador del Guayas que "Queda en conocimiento de S.E. el Presidente el informe de los Sres. Agentes de la Compañia de Vapores Británicos, sobre la colocación del faro de Punta Mandinga, que vino a este Despacho con el atento oficio de US. número 203." Éste fue el fin de esa necedad y la luz de Punta Centinela nunca se instaló. 461 302 La entrega-recepción del inventario del Faro de Punta Arenas se realizó el 30 de septiembre de 1873. Entregó el faro el Ing. Dioudonnat y lo recibió Alejandro Cruz, quien sería el encragado del mismo. El trabajo se había iniciado el 31 de mayo del mismo año y había concluido ese día, por lo que la construcción duró cuatro meses. El documento de entrega-recepción e inventario es prolijo y detallado, como acostumbraba hacerlos el mecánico. 463 El 14 de octubre, el Capitán de Puerto escribe al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina: “Sor: Tengo el honor de poner en conocimiento de SSa que de conformidad con la órden Suprema, he recibido el Pailebot de grra ‘Mercedes’ para ir á P. Arena a inspeccionar el faro acompañado del Ingeniero...” 342 El 21 de octubre, el Capitán de Puerto reporta al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina: “...En la vicita practicada al faro de Punta Arenas, he observado que está perfectamente cituado en la lejítima punta, encontrandose los destellos del faro de Santa Clara tanjente; i divisandose la luz á 14 millas de distancia. La obra toda es de la mejor madera del pais i en figura de un cuadrado de cuatro cuerpos inscrito dentro de un circulo con diez y nueve metros de altura sobre el nivel del mar. --Seria muy conveniente una luz de puerto en Punta Española, asegurandome el Señor Ingeniero que está lista para colocarse, i lo tiene ya puesto en conocimiento del Señor Gobernador de la Prova para que lo resuelva. Con esta estará completamente alumbrada nuestra noble i hermosa ria por la parte del Sur: advirtiendo a SSa que nuestras chatas que son en número considerable i cargan sal para la Nación, hacen su navegacion por la boca de Posorja i seria mui combeniente un faro en el farallon ó en la Punta Arenas del Morro.” Continua el informe tratando sobre el velamen, que estaba “enteramente podrido,” y el casco “que está en buen estado,” del pailebot “Mercedes.” Añade que “...es un buquesito 176 de primera marcha i mui útil para el correo de los faros si se le dá á su Comandante la lona necesaria para un nuevo velamen...” La previsión del mecánico francés al lograr que su detractor inspeccionara el faro y recorriera la costa sur-este de Puná aseguró dos cosas: Primero, para la posteridad y en vista de futuras declaraciones, la certificación de que las maderas usadas en el faro fueron las mejores; y, segundo, para beneficio inmediato de la nevegación, que el Capitán de Puerto se convenciera de la necesidad de la luz de puerto para Punta Española, una necesidad postergada de manera incomprensible. 343 Interesantemente, el Capitán emite un informe con la misma fecha, pero por separado, al Gobernador, citando al Ing. Dioudonnat, informe que éste envía al Ministro con oficio N° 229 del 25 de octubre. El texto de este oficio lo veremos poco más adelante, por las circunstancias que se crearon debido al texto del mismo. 462 Concluida la instalación del Faro de Punta Arenas, el francés emitió su informe, el que fue enviado por el Gobernador al Ministro de Hacienda, quien indica el día 22 de octubre que: "Queda en este Despacho el oficio de US. n°220, con el informe del Sr. Dioudonnat, sobre la construcción del faro de Punta Arenas." El 29 de octubre le enviaba, en un tubo de lata, el plano del Faro de Punta Arenas. 303 464 El Faro de Punta Española. El 29 de Octubre de 1873, el Ministro de Hacienda escribe al Gobernador del Guayas un oficio muy interesante sobre el Faro de Punta Española (que ya había sido pedido en 1872). Este oficio lo transcribimos parcialmente: "El H. Sor. Ministro de Guerra con esta fha. me dice lo siguiente: Por las indicaciones que por conducto de la Comandancia gral del Distrito de Guayaquil hace el Capitán de aquel puerto, se ha persuadido el Gbno. que será mui conveniente establecer una luz de puerto en Punta Española pa qe esté completamente alumbrada la ria por la parte del Sur i dispone S.E. el Presidente de la República que por el negociado de su cargo se dicten las ordenes convenientes a fin de que se abonen los gastos que sean necesarios pa llevar a cabo tan útil obra pa la qe se dan las ordenes convenientes a dicha autoridad." En ese oficio también se autoriza a reemplazar el velamen del pailebot de guerra "Mercedes." No sabemos lo que pasó con la autorización anterior para la compra del faro para Punta Española, pero el aparato ya había sido fabricado en 1872, como lo demuestran los registros de Barbier & Fenestre (ver pág. 84). 136 177 Como dijimos antes, puede ser que no se lo haya pagado, por lo tanto no fue entregado en ese año. El mismo 29 de octubre el Ministro de Guerra y Marina encargado, Francisco Javier León, escribe al Cmdte. Gral. del Distrito de Guayaquil lo siguiente: "Por el estimable oficio de US. fha 22 del presente N°532, en que transcribe el dirijido por el Sor. Capitán de ese puerto, se ha impuesto el Supremo Gobierno de que dicho jefe ha cumplido con la orden de visitar los faros; y acepta la indicacion de establecer una luz de puerto en Punta Española, y la de reparar el velamen..." Es desconcertante que, habiéndose autorizado la compra el 17 de febrero de 1872 y estando el faro ya fabricado en Francia, un año y ocho meses después "descubra" el Capitán del Puerto que sí era necesario el faro en esa punta. No olvidemos que el mecánico había reportado al Gobernador, el 8 de febrero de 1872, que "El faro de Punta Española es de todos el más espuesto á la vista, los buques de todas clases pasan al pies de la punta." Bien podemos decir que "así son las cosas," si no tomamos en cuenta los antecedentes de problemas entre el mecánico y el Capitán del Puerto, y el hecho de que no colocar una luz de navegación cuando ha estado lista, es aceptar una terrible responsabilidad sobre la seguridad de las naves que podrían beneficiarse de ella para evitar un percance. 305 36 Fernando Núñez, ahijado del Capitán del Puerto y enemigo declarado del francés, está de regreso en Santa Clara, y el 2 de noviembre escribe al mecánico: "Muy respetado Sor; El objeto de esta es despues de saludar a Ud.; decirle que por acá no hay novedades y que el Señor Alcides Baca, ba enfermo segun el medise á serse curar. Lo que comunico á Ud; para su intelijencia. Conservese Ud. bien y mande como guste á A. SS. Fernando Nuñez." 131 El 5 de noviembre notificaba el Ministro de Hacienda que había recibido el plano del Faro de Punta Arenas. 306 Y, como era de esperar, con la presencia de Núñez comenzaron otra vez los problemas en el Faro de Santa Clara. El mecánico informa el 7 de noviembre: "Sor. Gobernador: 178 El 2° Torrero empleado del Faro de Santa Clara, Sor. Alcides Baca me dice que se huyo de su destino por questiones graves con el Encargado que es Fernando Nuñez. De otra parte, el Encargado me escribe que no hay novedad i que viene el 2° por ser enfermo. Comó me es preciso hacer mi visita en los tres Faros de la Ria del Guayas, me parece que V.S. tendrá á bien órdenar mi salida segun como lo convenga mejor para el servicio de mi empleo, siendo siempre á las ordenes de V. S... – F. Dioudonnat" 132 El 10 de noviembre, el Gobernador encargado Antonio J. Sucre, dice lo siguiente al mecánico: "En virtud de las órdenes del Supremo Gobierno para que se coloque una luz de puerto en Punta Española, autorizo a U. para que contrate las maderas que necesite poniendo en la planilla el Vo Bo á fin de que esta Gobernacion disponga su pago." Esta madera es para la torre. 465 La campaña contra el francés se estaba reanudando con fuerza, como veremos en la comunicación que sigue, dirigida por el Ministro de hacienda al Gobernador del Guayas: "Con fecha 25 de octubre ppdo. en oficio n°229, transcribió esa Gobernación la nota que el Sr. Ingeniero de faros dirigió al Sr. Capitán del Puerto, la cual, entre otras cosas, dice así: 'en el almacen de faros de mi cargo existen todos los elementos para establecer una luz, sea en Punta Española o Centinela, cuyo alcance será por la altura del terreno de diez millas, sin necesidad de fabricar una torre.' En esta virtud el Gobierno dispuso el establecimiento de la luz en Punta Española, conviniendo en que se pidan algunos accesorios que pudieran necesitarse. Mas ahora por el presupuesto que el Señor Dioudonnat ha presentado para que se pida á Francia, se observa una nota de inconsecuencia con la que comunicó a la Capitanía del Puerto. ----- Un descuido en la Administración de correos de esa, ha hecho que haya venido a este Despacho el oficio de esa Gobernación que contiene el pedido del faro referido, dirigido al Sr. Cónsul General de la República en Paris, el cual queda retenido aquí, mientras sepa el Gobierno los motivos que el Sr. Dioudonnat tubo para asegurar que existian los elementos para establecer una luz, viéndose ahora por ser pedido que tales elementos no existen. ---- Lo digo a Us. pa los fines consiguientes... 307 Adon. Recuerda S.E. el Presidente que en una época que estuvo él en esa ciudad, se hizo el pedido de una luz de Puerto por conducto del Sr. Eduardo Poudavigne, y al 179 asegurar el Sr. Dioudonnat que existían los elementos para establecer una luz, habia creido S.E. que se refería sin duda a ese faro que debe axistir allí. US. pues, se servirá indagar todo lo concerniente a este particular." Esta era una acusación gravísima contra el francés, pues si era cierta estaría estafando al fisco. Sin embargo, como la base de la acusación es la supuesta carta enviada por el francés al Capitán del Puerto, démosle lectura a continuación: "Capitanía del Puerto - Guayaquil a 21 de Octubre de 1873 Al Sor. Gobernador de la Prova Señor: Con fha 19 del pte me dice el Señor Ingeniero Mecanico de Faros, lo que á US. copio.-----------'Con fha de hoi US. verificó el faro situado en 'Punta Arenas', así como presenció la entrega formal del inventario que hizo al Encargado Sr. Alejandro Cruz, haciendo US. las anotaciones i observaciones que corresponden. = Pués, por conducto de US. deseo que la copia del inventario sea remitida adjunto con su informe al Señor Gobernador de la Provincia. = US. con migo ha reconosido la urjencia de que sea dotado este faro situado en un lugar aislado con tres empleados, há que no le corresponde su órden, sinó en caso de enfermedad de uno de ellos, lo que hoi existe. = Por consiguiente: espero merecer de US. se servirá á bien confirmar al Señor Gobernador el oficio que se le dirije sobre el particular. = Por fin recordaré a US. lo dicho entre ambos, que en el almacen de Faros de mi cargo existen todos los elementos para establecer una luz, sea en 'Punta Española, ó Centinela', cual alcanse será por la altura del terreno de 10 millas, sin necesidad de fabricar una torre. = No obstante US. dispondrá lo que juzgue por mas conveniente. = Dios gde á US. F. Dioudonnat.' Lo que tengo el honor de transcribir á US. i manifestarle que en la vicita practicada al faro de 'Punta Arenas,' he observado que está perfectamente situado en la lejitima punta: la obra toda es de la mejor madera del pais i en figura de un cuadrado de cuatro cuerpos inscrito dentro de un circulo con dies i nueve metros de altura sobre el nivel del mar. ------La luz que indica el Señor Ingeniero en Punta Española, seria mui conveniente, una vez que asegura tener todo preparado para ese objeto; lo mismo que el aumento de un empleado en el faro de Punta Arenas. El Sor. Alejandro Cruz encargado de dicho faro, lo ha recibido de conformidad con el inventario adjunto. --Dios gde á US. Lúcas Rojas." 313 180 Esta carta es muy interesante por cuanto tiene una mezcla sutil de verdad e invento, y con los antecedentes ya conocidos, se detecta enseguida el afán de hacerle daño al francés. Observaremos que lo más probable es que la supuesta comunicación del Francés sea apócrifa, por las siguientes razones: 1. El francés nunca informó al Capitán del Puerto sino al Gobernador, su "jefe inmediato." Como cortesía en algunas ocasiones hizo conocer de su trabajo al Capitán, pero como simples comunicaciones, no como informes a un superior. 2. El francés no pediría al Capt. del Puerto que sea conducto verbal de un informe al Gobernador, pues estaría estableciendo una intermediación que debía percibir como peligrosa para su función. Aparte de esta carta no hay un solo documento que contenga referencias a esa situación. 3. Aunque hubiera sido deshonesto el francés, no sería tan tonto para decirle al Capt. del Puerto, su principal detractor, que tiene los elementos para construir un faro y luego pedirlos al Gobierno a través de su jefe, el Gobernador. Él había dicho claramente que tenía elementos para instalar “una luz provisional,” que era una lámpara sin la óptica Fresnel, colocada en un armarín. 4. El francés jamás instalaría una luz de puerto sin torre, pues por más altura que tuviera el punto geográfico, era necesario separarla de la tierra para protegerla de los animales y elevarla de la vegetación. Tenemos como guía las luces de Manta y Esmeraldas. Si tomamos en cuenta que esta luz era de 5° orden, o sea de mayor tamaño que las anteriores, la torre era imprescindible. El pedido de material para las torres, supuestamente innecesarias, traería dudas sobre su honestidad. 5. La supuesta mención por parte del francés de una luz para Punta Centinela, como iniciativa de él mismo, daría razón para dudar de su cordura, luego de haber resistido las presiones ejercidas para que se instalara esa luz innecesaria. Como ya vimos, cuando el francés cedió a las presiones y aceptó instalar esa luz, ya nadie se interesó por ella, por lo que no se gestionó la compra del aparato. Esta presión y luego desinterés nos esclarece un poco más los actos de los interesados. Por otro lado, lo que recuerda el Presidente según la cita de la carta del Ministro es, precisamente, el pedido de la luz que fue autorizada el 17 de febrero de 1872, que no se concretó en la entrega. Interesantemente, este faro ya apareció en la carta náutica # 586 del Almirantazgo Inglés, de 1873. 181 Nos adelantamos un poco ya que está fresca la materia, para citar el siguiente oficio del Ministro de Hacienda al Gobernador, fechado 29 de noviembre: "Conformándose S.E. con las explicaciones del Señor Dioudonnat sobre el establecimiento del faro de Punta Española, dispone que prosigan los trabajos que US. mando á suspender y que se efectúe el pedido a Francia de los útiles para dicho faro. En esta virtud, me dirijo hoy al Sr. Cónsul General de la República en Paris, remitiéndole el pedido y recomendándole su pronto despacho." 309 La explicación de Dioudonnat había sido entregada al Gobernador el día 22 de noviembre en su informe 183. La explicación es larga y hace un recuento de sus informes previos, y aclara que lo que tiene es lámparas para aceite de oliva, retiradas de los faros que ya usan queroseno. No lo dice el Francés en palabras explícitas, pero sí hace conocer que no hay los cristales Fresnel necesarios para la luz. Él ha mencionado cristales, pero son para las puertas del armarín o linterna de la luz. La “luz provisional” a instalarse sería una lámpara desnuda dentro de un armarín de construcción local, lo que habría dado satisfacción a los interesados en el Faro de Punta Centinela. Adicionalmente, el Francés hace el siguiente comentario: "...en consecuencia he creido por conveniente establecer la dicha luz de Puerto en 'Punta Española' i no quedarla á cuenta de la casa constructora." Dioudonnat está recalcando que esa luz ya está lista en la fábrica. 329 Con la explicación y la aceptación de ésta por el Presidente, había quedado aparentemente resuelto el problema, pero para el francés, este intento de desprestigiarlo fue un duro golpe contra su ánimo y espíritu de trabajo. El 19 de noviembre el Gobernador encargado, Sr. Antonio J. Sucre, oficia al Cmdte. Gral. del Distrito pidiéndole disponer lo conveniente para que el pailebot "Mercedes" transporte a Punta Española "...las maderas, útiles, herramientas, así como veinte operarios, carpinteros hacheros y peones..." No debemos olvidar que el sitio ya había sido reconocido a comienzos de 1872 con el Sr. Game, Cónsul de los EE.UU. 308 El 25 de noviembre de 1873, el mecánico hacía cambios en el personal de los faros de Santa Clara y Punta Arenas, ascendiendo a unos y transfiriendo a otros. A Baca lo cambió de Santa Clara a Punta Arenas y a los hermanos Juan y Domingo Sánchez los cambió de faro, ascendiendo a Juan de torrero 182 de 3° en Punta Arenas a torrero de 2° en Santa Clara, y destinando a Domingo como torrero en el mismo nivel, en el otro faro. Esto, sin duda, se debía a la influencia perniciosa del Sr. Núñez sobre los empleados. El francés trataba desesperadamente de neutralizar esa mala influencia, que afectaba el buen servicio. 133 El 10 de diciembre, el francés informaba al Gobernador lo siguiente: "Tengo el honor de participar a V.S. qe en 'Punta Española', a donde se va establecer una luz de puerto, el Sor. P. Game, dueño del terreno, cede jenerosamente, sin remuneración alguna toda la madera negra pa calces i estantes, asi como los laurales pa el tejado i cuerdas. Deseo qe V.S. se digne á bien dar conocimiento al Supremo Gobierno de dicha disposición. Dios gue a V.S. El Ingeniero de Faros F. Dioudonnat." El Gobernador encargado transcribió el texto de este informe al Ministro de Hacienda, en oficio N° 268 del 13 de diciembre de 1873. 134 466 El 20 de diciembre, el Ministro Eguiguren pide al Gobernador que participe al Sr. Game el agradecimiento del Gobierno por las maderas generosamente cedidas. El faro estaría a la vista de la casa del Sr. Game. 310 Como algo curioso, contamos en la documentación con una factura de la Botica y Droguería de Julio Gault, fechada diciembre 27 de 1873, por la compra de varias medicinas para el personal de los faros. La lista es muy interesante y los nombres de algunos productos ya no los escuchamos: Pintura de Arnica / Ayuarte Alcanforado / Agua sedativa / Hilos ingleses / Siolitz / Vomitivos / Esparadrapo / Cerado simple / Pomada alcanforada / Ungüento medicinal / Harina de linazas / Linazas / Flores pectorales / Flores de camomila / Pinol / Eter / Laudano / Sarzaparrilla / Hojas de naranja. Al entrar 1874, el número de informes del mecánico y la información general sobre faros bajó considerablemente. Una razón puede ser el hecho de que se había concluido la instalación de los faros y el trabajo sería menos intenso. Otra puede ser que el mecánico estaba decepcionado con la forma de trabajar en el medio, pues algo tan lógico como la vigencia legal de un reglamento para los faros se venía postergando inexplicablemente. Y, otra razón más puede ser la continua pero solapada oposición del Capitán del 183 Puerto, que se manifestaba en intentos de desprestigiar al mecánico y en detalles que afectaban la operación armoniosa de los faros. No sabemos la razón exacta, pero sí sabemos, por acontecimientos posteriores, que la situación llegó a niveles desesperantes para el francés. Con fecha 5 de febrero, el mecánico pagó al Sr. Game por madera que se empleaba para la torre del Faro de Punta Española y el Sr. Game firmaba también por un señor Pedro Fluencio que no sabía firmar. El mecánico también entregó al Sr. Game dinero a cuenta para más madera. Esto lo reportó al Tesorero de hacienda y eventualmente el documento llegó a manos del Ministro. Es necesario acotar que, si bien el Sr. Game había cedido generosamente madera en la etapa inicial de la obra, luego hizo que le pagaran por la madera usada, como consta en los recibos. 468 El 13 de Mayo de 1874, el Ministro de Hacienda oficia al Gobernador del Guayas para que reciba los accesorios de la luz de puerto para Punta Española. El día 6 de junio de 1874, el Gobierno negaba un pedido de la Junta de Hacienda del Guayas para reparar una "chalupa de zinc" de la Capitanía del Puerto, "porque el Gobierno desconoce que la nacion posee una chalupa con este nombre..." ¿Ignorancia sobre algo moderno, o mala fe? 266 267 Nuevamente había problemas con la Luz de Puerto de Esmeraldas. El 6 de junio informaba el mecánico al Gobernador que el cambio de lugar de la luz que pedía el Tesorero de Hacienda de esa provincia no era factible, pues "A mi concepto, es errado cambiar la luz del lugar que hoy ocupa, pues, como Luz de Puerto, no puede ocupar otro sitio mas elevado, ni hay otro á donde colocarla; no es un faro, sinó un fanal. La colocacion de un simple fanal á una mayor altura hará perder enteramente la luz. Dicho fanal alumbra 280° del horizonte y tiene un alcance de 9 millas, lo que es muy suficiente; mas, si el Supremo Gobierno resuelve la colocación de una luz encima del cerro Coquito, será menester cambiar la luz de puerto actual con un faro de 6° orden alumbrando todo el horizonte, con su torre respectiva i será preciso hacer una casa para el encargado (á mi concepto el unico motivo que se busca) = Acabaré diciendo que la posicion ocupada por la luz de puerto de Esmeraldas ha sido escojida por una comisión especial (Diciembre 28, 1872) á saber: El Señor Gobernador de la Provincia el Sor. Capitán del Puerto y el Sor Comandante D. José H. Chávez, y con la aprobacion del Capitan S. Horacio Battle, Comandante del Vapor Ingles 'Guayaquil' y ademas acaba de merecer la aprobacion de una persona muy competente el Almirante Ingles Sor Lord Cochrane 184 como le consta á US. A hora bien, con el cambio de las lámparas que existen en el fanal con las que tengo para Kerosin el efecto de la luz vá aumentar como en los otros fanales..." 472 Y ese mismo día ocurrió algo muy curioso que demuestra la honestidad del francés y las dudas que siempre estaban sobre él, a pesar de haber dado repetidas muestras de su honestidad, como lo hemos visto anteriormente. El Gobernador le había reclamado el día 2 de junio porque pensaba que el mecánico se había equivocado en la factura de la madera de balsa para las boyas que se iban a instalar. El reclamo era porque el monto de la factura era demasiado bajo. El mecánico contesta confirmando el precio pagado: "Mi oficio N° 85 es muy exacto, los 25 palos de balsa de 25 metros de largo sobre 7 y 8 palmas de grueso no han costado mas que cincuenta y seis Pesos por todo. Las tiras de fierro que atraviesan la base de las balsas, todos los pernos que arman las piezas entre si provienen de los sobrantes de los faros de Sta. Clara y Puntarenas. El Sor. Coronel, Comandante de la Capitania del Puerto y US. en persona han visto las tres boyas lla concluidas. Asi es que con trecientos cincuenta pesos haré concluir cinco boyas resultando para el fisco una economia incontestable y al mismo tiempo un gran servicio á los navegantes completando de esto mas el n° de boyas necesarias en el golfo y ria de Guayaquil..." El Gobernador envió la transcripción del informe en oficio N°39 del 6 de junio, con la nota lacónica: "Para conocimiento de S.E. el Presidente de la República." Las dudas sobre su honestidad, cuando hacía lo posible por ahorrarle centavos al fisco, debe haber minado aún más el espíritu del francés. 473 El 2 de julio de 1874 el Inspector General de Faros, Lucas Rojas, solicitaba al Gobernador se pida una gruesa de tubos de chimenea para el Faro de Punta Arenas, según la muestra que adjuntaba. El Inspector General indicaba que a esa fecha solo quedaba una docena de tubos, suficiente para tres meses de operación. Esto quiere decir que se rompía un promedio de cuatro chimeneas al mes, lo que no estaba mal para el estandard del personal. Estos tubos eran de color rojo, para dar ese color a la luz del faro. Esta comunicación es la primera en que figura Lucas Rojas como Inspector General de Faros y, estando presente el Ing. Dioudonnat, esto quiere decir que se habían definido niveles de autoridad. Al figurar el Capitán Rojas como Inspector General, esto le daba, al menos, la autoridad oficial de crítica sobre el Servicio de Faros. No está clara la línea de mando que se estableció, pero indudablemente se creaba un ambiente difícil. Por la 344 185 situación que había habido entre los dos funcionarios durante dos años, la posición del francés debe haberse tornado muy incómoda. El 11 de julio de 1874, mediante oficio N° 61, el Gobernador comunicaba al Ministro de hacienda: "El Sor Capitan del Puerto con fecha de ayer, me dice lo que tengo el honor de copiar á VS. H.-- 'Tengo la honra de contestar á su apreciable nota n° 1038 por la que quedo impuesto de que las boyas de palo de balsa construidas por el Sor. ingeniero de Faros estan concluidas i en estado de botarse al agua. Me permitiré manifestar á US. que se necesitan cinco anclas, de cinco á seis quintales cada una i diez brazas de cadena para cada ancla, lo que se deberá encargar al Perú o en otra parte, pues aqui no las hay, si tan luego como esten listos estos útiles se botarán i colocarán dichas boyas en los lugares correspondientes.-' Lo que tengo á honra transmitir á US. H. afin de que se digne recabar la autorizacion respectiva, para poder llenar el pedido que solicita el Sor. Capitan del Puerto." Estas boyas de palo de balsa tendrían una muy corta duración, pues requerían de un constante mantenimiento que el personal del Servicio de Faros no podía prestar por falta de medios. La colocación de estas boyas, si bien necesarias para la seguridad de la navegación, seguramente se debía a presión urgente por parte de alguna compañía naviera, pues no estaban marcadas en las cartas de navegación de la época. Bien se podía haber esperado la importación o fabricación local de boyas más duraderas. 469 El 1° de agosto el mecánico presentó el "Aviso á los Navegantes" correspondiente a la Luz de Puerto de Punta Española, que comenzaría a iluminar a partir del 1° de septiembre, con el fin de que sea publicada en "El 186 Nacional." El Gobernador enviaba copia del Aviso al Ministro Eguiguren, con oficio del 5 de agosto, numerado 74. 470 471 Los faros ya instalados requerían mantenimiento. El 5 de agosto el Gobernador informaba al Ministro Eguiguren que se dispuso "se paguen por Tesoreria 28 pesos 75 centavos invertidos en tablas para el faro de punta Mandinga." 474 Durante agosto el mecánico se debía dedicar a las boyas y el día 10 presentó un informe sobre el estado de las boyas instaladas. La boya N° 1, pintada de blanco y ubicada en la cabeza del sur del Banco de Mala estaba sin novedad. La boya N° 2 pintada de "colorado" y ubicada en la mitad del banco, había perdido su parte triangular superior. La boya N° 3, pintada de blanco y ubicada en la cabeza norte del banco, había sufrido daños a causa de un buque que se amarró a ella. Tienen que realizarse las reparaciones en el sitio, pues sería muy costoso levantar el ancla que ya está muy enterrada. El 12 de agosto el Gobernador transcribió el informe del mecánico al Ministro de Hacienda, en oficio N° 79. Durante la revisión de las boyas, la chata que hacía el flete perdió el ancla y su armador reclamó al gobierno el pago. El Gobernador comunicó esto al Ministro de Hacienda el 26 de agosto, en oficio N° 579. 475 477 El 19 de agosto, en oficio N° 84, el Gobernador transcribe al Ministro Eguiguren una comunicación entregada a él por el Cónsul de Francia, conteniendo un informe elaborado por el Comandante de la corbeta francesa "Infernet." En su informe el Capitán decía que "Al 22 de Julio de 1874 las tres Boyas del Banco de Mala, estaban en las posiciones siguientes..." y pasa a dar las ubicaciones geográficas. Considera que solo la boya del norte está en su lugar y las otras están fuera de él. El Comandante de la "Infernet" considera que las boyas fuera de lugar son un peligro para los navegantes y que mejor se estaría sin ellas. Cree necesario que se las reubique de inmediato en la posición marcada en las cartas de navegación. Como vimos en el informe del mecánico entregado al Gobernador el día 10 de agosto, las boyas estaban bien ancladas, por lo que no habían sido movidas. Es posible que el movimiento del banco las haya trasladado, lo cual haría necesario chequear su ubicación geográfica cada cierto tiempo, para compensar el movimiento del banco. Curiosamente, el informe del Comandante de la "Infernet" no menciona los daños a las boyas. 476 187 Ahora bien, como el mecánico no había reportado estos cambios, es probable que se le haya atribuido la responsabilidad por ello y por posibles percances a los buques. El 31 de agosto de ese mismo año el pailebot "Mercedes" sufre avería en su velamen estando a diez millas de Santa Clara. El Cmdte. General del Distrito notifica esto al Gobernador de la Provincia el 5 de septiembre. 314 La luz de puerto de Punta Española comenzó a funcionar el 1° de septiembre de 1874. Ese día el Ing. Dioudonnat hace entrega del faro a su cuidador, Benigno Márquez, con su usual y prolijo documento. El 5 de septiembre, el Gobernador comunicaba la nueva al Ministro de Hacienda, mediante oficio N° 93, al cual adjuntaba el original del inventario y entrega-recepción. 478 El informe del Capitán de la "Infernet" había causado revuelo y el Ministro de Hacienda había reclamado directamente al Capitán del Puerto de Guayaquil por la diferencia reportada. El 12 de septiembre, el Capitán hace un extenso informe que el Gobernador del Guayas transcribe de inmediato al Ministro, en oficio N° 94 de esa misma fecha. El Capitán Rojas es enérgico en aclarar la situación, estableciendo los siguientes puntos: • La ubicación había sido comprobada como correcta en abril de ese año por el Comandante de la goleta de guerra "Mercedes." • Las boyas tienen dos años de establecidas y están sujetas con dos anclas, las que deben estar muy enterradas, lo que haría necesaria la goleta "Mercedes" para poder moverlas, pero esa nave aún no estaba reparada. • Las cartas de navegación francesas adolecían de fallas, pues las boyas estaban conformes con la carta inglesa. • Los bancos de arena en el golfo se movían considerablemente y arrastraban todo lo que estaba en su fondo, incluyendo anclas. 188 • Por último, las naves inglesas y americanas entraban sin problemas a Guayaquil, usando las cartas y boyas como estaban colocadas. El Capitán del Puerto se declaraba listo a cumplir la orden ministerial, si lo estimaba conveniente el señor ministro. Una Mala e Inesperada Nueva. El 10 de octubre de 1874, en oficio N° 100, el Gobernador del Guayas informa apesadumbrado al Ministro Eguiguren: "Tengo el sentimiento de anunciar á VS. H. que en la madrugada del dia de ayer se suicidó el Ingeniero de Faros Sr. Fernando Dioudonnat, tomando una cantidad de arsénico y dándose una herida en el cuello. Por fortuna el efecto del veneno í la herida no ocasionaron la muerte instantánea, y el infeliz Dioudonnat pudo reconocer el delito que había cometido, arrepentirse de él y purificar su espíritu con una santa confesión, ántes de exhalar el último suspiro. No se conoce fijamente la causa de tal suicidio; pero á mi juicio no ha sido otra que un ataque de delirium tremens ocasionado por el abuso de los licores alcohólicos. Dígnese VS. H. transmitir tan sensible nueva á SE. el P. de la R. ..." El oficio anterior parece haber sido escrito por el puño y letra del Gobernador Santistevan, pues la letra es distinta a la de los escribanos de la Gobernación y la ortografía es mucho mejor que la de uso común. Es posible que lo dicho por el Gobernador sea correcto en cuanto al abuso de los "licores alcohólicos," pues ya se había acusado al mecánico de gustar de tomar "mallorca." Por otro lado, también es posible que haya sufrido una fuerte depresión por causa de la frustración que sentía al no poder asegurar la continuidad de su obra, pues sus reglamentos no eran aprobados y su trabajo, lejos de obtener para él reconocimientos y honores, como los había obtenido en España y Grecia, le traían solo críticas y envidia. La enemistad del Capitán del Puerto y su nombramiento como Inspector General de Faros, estableciendo una jerarquía en la que su detractor sería su superior o al menos su crítico oficial, probablemente fue un agravante. Al sentirse frustrado, se debe haber encontrado desesperado, pues había cometido el error de trasladar su vida a Guayaquil al pedir que vengan su esposa e hija, con todos sus muebles. No había posibilidad de regresar a Francia, pues su sueldo no le alcazaba, y el Golfo de Guayaquil había perdido su encanto... 189 Aquí culmina una etapa en la existencia de los faros de la República en que se contó con abundante y detallada información de las actividades que se realizaban en relación a ellos. Nunca antes, ni después, se ha contado con una información tan completa, aunque algunos encargados posteriores se esforzaron por informar de sus actividades a las autoridades superiores. El período de dos años diez meses que tomó la instalación del primer sistema de faros, nos ha enriquecido con mucha información técnica; con el nombre del fabricante de los faros, que por mucho tiempo fue un misterio; con información operativa de como funcionaban los órganos del Estado y las líneas de mando; con pormenores de la operación de los faros; y, también, con las fortalezas y debilidades del carácter humano. A fin de cuentas, el Ing. Dioudonnat cumplió con su contrato original para instalar los faros, y de nada valió la revisión del mismo que comprometía su servicio por diez años. Por el desarrollo posterior de acontecimientos relacionados con los faros, podemos destacar la visión del Gobernador Santistevan al pretender que el mecánico se quedara aquí al menos por diez años. Con la muerte del francés, los faros entraron en deterioro casi de inmediato, como veremos más adelante. La falta del Ingeniero Dioudonnat se haría sentir. Ahora pasamos a la etapa del funcionamiento diario y regular de los faros, sin el cuidado casi paternal del mecánico francés. Más adelante conoceremos sobre la instalación de algunos faros más y el reemplazo de algunos deteriorados. 190 Parte 5.- Los Faros en Servicio 1874 - 1921 191 192 Capítulo 18.- El Servicio de Rutina Una vez concluida la instalación y retirado de la escena el mecánico francés, los faros, luces de puerto y boyas entraron en su trabajo rutinario bajo el mando operativo y administrativo de la Capitanía del Puerto de Guayaquil. Sin embargo, el término “rutinario,” en materia de trabajo en faros, tiene una dimensión muy distinta a lo que se considera rutinario en tierra firme. Esto era cierto especialmente en los faros aislados como el de Santa Clara y, en menor grado, el de Punta Arenas. El aislamiento requiere de personas con un temple especial en su carácter, particularmente cuando hay que ver las mismas otras dos caras todos los días. La soledad, aunque sea en conjunto, que encontraba este personal era muy severa, por lo que no duraban mucho tiempo en sus puestos. Esto se agravaba con la irregularidad en el abastecimiento de combustible y provisiones, pues no se contaba siempre con una nave que diera el servicio de manera regular, sino que por lo general éste debía ser autorizado especialmente, para ser prestado por una nave de la Armada o ser contratado a una de las chatas o balandras que prestaban servicio en el golfo. Esto producía frecuentes demoras, con la consiguiente desesperación de los empleados. Se dieron casos en que los faros no se encendieron por falta de combustible y otros en que los empleados se embarcaron en la primera nave que pasó por allí y luego no quisieron regresar a sus puestos de trabajo. El servicio de faros contó con naves propias en algunos años, pero éstas se deterioraban rápidamente o se destinaban a otro servicio, por lo que era necesario recurrir nuevamente al flete de chatas o balandras. El 31 de octubre de 1874 el Gobernador encargado, Antonio J. Sucre, envía al Ministro Eguiguren el siguiente oficio, numerado 107: "El Sor Cap. de este Puerto me dice lo sigte 'Tengo el honor de contestar el estimable oficio del H. S. Min de Est. en el Desp de Hda. i Obras Públicas signado con el N° 148 que VS. se sirve transcribirme con fha 27 del corriente relativo a que informe sobre el estado en que se hallan los faros de la República, y cumpliendo con esta disposicion diré á VS. que todos los Faros del Golfo se encuentran en buen estado; respecto al de Manta i Esmeraldas por los buques que hacen el cabotaje á esos puertos está informado que se hallan de igual modo. En esta virtud cree el infrascrito que si el Sup. Gobno no dispone la colocación de nuevos faros, por ahora es innecesario pedir á Europa otro Injeniero, salvo el mejor parecer de VS. Dios gde. a VS.= Lucas Rojas' Yo no puedo juzgar innecesario, í sí por el contrario, necesarísimo, 193 que el Sup Gobno. provea cuanto ántes ese servicio de un empleado superior, intelijente que llene el vacio dejado por el Sr. Dioudonnat, pues de otro modo los faros quedan en completo abandono y los empleados inferiores sin tener quien los vigile cometeran mil abusos y faltas. El servicio de faros es por otra parte laboriosísimo y solo puede ser bien atendido por un empleado especial, que no tenga absolutamente otra ocupación..." Eventos futuros probarían que el Capitán Lucas Rojas estaba muy equivocado y que el Gobernador encargado, Antonio J. Sucre, tenía toda la razón y que su apreciación había sido muy acertada. Lamentablemente, el Gobernador titular, don Vicente de Santistevan, tuvo su parte de responsabilidad en la pérdida del francés, al no haberlo apoyado resolviendo equitativamente el conflicto de autoridad entre el "Servicio de Faros" y el Capitán del Puerto. También le faltó dar el apoyo para la aprobación y aplicación de los reglamentos en que tanto se afanaba el francés y que una vez desaparecido él, podían haber asegurado la continuidad en el buen mantenimiento y operación de los equipos. El deterioro de los faros comenzó de inmediato y su durabilidad en condiciones adversas se debe solo a la alta calidad de los equipos. 481 La luz de puerto de Isla Verde no se instaló hasta muchos años después, sin saberse el destino del aparato que fue fabricado para ese punto por Barbier & Fenestre, o si se lo importó. Éste último puede ser el que, en la década de 1880, se instaló en Jambelí. El mar estaba azotando y afectando las bases del Faro de Punta Arenas y el Capitán Rojas informó al Gobernador encargado de la situación. Éste resolvió enviar al Ingeniero Nicolás Gruenerval, quien estaba en Guayaquil por cuenta del Gobierno, esperando una plaza en la construcción del ferrocarril, a realizar una inspección. El 4 de noviembre notifica de esta comisión al Ministro de Hacienda, mediante oficio N° 108. 482 Ese mismo día el Cónsul de Francia en Guayaquil, Sr. Eduardo Poudavigne, inició un reclamo al Gobierno, a nombre de la viuda del Ing. Dioudonnat, por concepto de dinero que el Gobierno debía al difunto según contrato y gastos efectuados en los faros. Este reclamo se dilataría por muchos meses, como veremos más adelante. 483 El Ing. Gruenerval había cumplido su misión de inmediato y presentó su informe, el 13 de noviembre, al Gobernador encargado. El día 14, con oficio 194 N° 112, el Gobernador envió al Ministro el original del informe para su atención. El informe del Ing. Gruenerval dice que la base del faro está siendo afectada por la erosión de la arena donde están enterrados los palos que hacen la base de la torre. Cree que es fácil arreglarlo rellenando lo erosionado e impidiendo el flujo de agua hacia el interior de la base, lo que evitaría una nueva erosión. La forma de impedir el flujo de agua es colocar estacas protectoras, una al lado de otra, frente a los palos de las bases y rellenar el espacio con ramas y piedras que ayudarán a acumular arena y fortalecer la base. Esta propuesta muy razonable no fue ejecutada y la base del faro continuó deteriorándose. 484 El 5 de diciembre, con ofico N° 121, el Gobernador encargado envía al Ministro de Hacienda la transcripción de una comunicación del agente de la PSNC referente a la posición de las boyas del Banco de Mala. También se envía el original de informe del Capitán George Chambers, del vapor "Arequipa." El Agente respalda el informe del Capitán Chambers. En su informe, el Capitán George Chambers dice que las boyas, excepto la N° 3 de la cabeza norte del Banco de Mala, que está desplazada 4 o 5 millas hacia el norte, están de acuerdo con lo que dice la carta # 586 del Almirantazgo Británico. La N° 3 estaba ya cerca de la punta de los bajos de Mondragón. Este informe no coincide y mas bien se contradice con el del Capitán de la corbeta francesa "Infernet." Ciertamente, en esa época el determinar la posición geográfica, especialmente la longitud, era un verdadero arte, y no todos eran muy buenos para esa delicada función. De hecho, más adelante veremos que se determina que una carta del U.S. Hydrographical Office está errada. De todas las cartas de la época, las más exactas eran las inglesas. 485 El Capitán de Puerto e Inspector General de los Faros tenía problemas para enviar el agua y los víveres a los faros, pues las chatas de flete estaban ocupadas y las que estaban disponibles habían aumentado el costo del flete a Santa Clara a 30 pesos. Como ese valor era mayor que el autorizado, emite un informe al Gobernador, quien a su vez lo somete al Ministro de Hacienda en oficio N° 801 del 12 de diciembre de 1874. Mientras tanto, el personal en los faros esperaba el abastecimiento... 486 El 23 de diciembre el Cónsul Poudavigne insiste en el pago de los valores pendientes a la viuda de Dioudonnat. Hace una relación detallada de los valores. Lo que se reclamaba era 270 pesos con 62 centavos, 200 del sueldo 195 y el resto de compras realizadas por el francés, de medicinas para el personal de los faros y maderas para reparaciones. Le dice al Gobernador que con el gasto del entierro de su marido, la viuda quedó pobre y sin recursos para regresar a Francia. Insiste que lo reclamado es justo y que está de acuerdo con los términos de los contratos, pues el del 9 de septiembre de 1872 no modificó ciertas partes del firmado en noviembre 15 de 1871. El Gobierno recibió el reclamo y mantuvo su indiferencia. 487 El 19 de diciembre de 1874 tenemos un indicio de que las cosas no marchaban muy bien, pues el Ministro Eguiguren escribe al Gobernador: “No es justo ní económico que teniendo el Gbno un bote de vapor que pueda ocuparse de la traslacion de víveres, agua y mas útiles para el servicio de los faros, se busquen para este objeto embarcaciones particulares y se costee asi los fletes que por ellas piden los dueños. Disponga, pues, US. que dicho bote traslade cada vez que sea necesario los víveres indicados y que a la vez recorra la Costa para precaver el contrabando. Lo digo a US. en contestación a su oficio n°801, para su conocimiento...” 345 Parece que el Gobernador insistió en que no era posible usar el bote, por lo que el 9 de enero de 1875 el Ministro de Hacienda le responde con una comunicación muy dura: "S.E. el Presidente de la República conoce el bote de vapor correspondiente al resguardo y no encuentra razón para suponer que no pueda surcar las aguas del golfo para conducir los víveres y útiles para la farola de Santa Clara, siendo su poder mayor que el de las chatas y canoas que hacen ese viaje cotidianamente. Por tanto, insiste en que se cumpla con la orden que comunique a US. bajo el n°734. Lo digo a US. por órden Suprema en contestación a su oficio n°4." 280 Éste debe haber sido un período de transición en que el Gobernador se desentendió del manejo de los faros y se alejó del estricto control que había ejercido. El Capitán del Puerto de Guayaquil e Inspector General de Faros iría asumiendo la responsabilidad operativa bajo la línea de mando de la Comandancia del Distrito y Marina. Ese mismo 9 de enero, el Ministro de Hacienda escribía al Gobernador en relación a reclamo formulado por la Sra. Dioudonnat: "He dado cuenta a S.E. el Presidente de la República con la insistencia con que el Cónsul Frances pretende que se reconozca y pague a la Señora de Dioudonnat doscientos setenta pesos sesenta y dos centavos que asegura se adeudan al expresado Dioudonnat por las 196 medicinas, maderas, útiles destinados a la colocacion de los faros y el sueldo correspondiente al último mes de su servicio. El Gobno reconsiderando el asunto encuentra aceptable el reclamo del sueldo correspondiente al último mes del servicio en conformidad con el arto. 6° del contrato hecho en Paris en 15 de nov. de 1871; pero no como lo cree el Cónsul reclamante, en la suma de doscientos pesos sino en la de quinientos francos o su equivalente en moneda del país abonándole el premio respectivo; porque este pago se hace en conformidad con el contrato primitivo subsitente en esta parte, que no está anulado por el segundo reformatorio de 1872, el mismo Sr. Cónsul frances lo manifiesta en su reclamo..." Sin embargo, se rehusó el pago de las medicinas compradas para el personal de los faros, lo que tal vez no fue justo, y los materiales para los faros, pues indica el Ministro, con razón, que esos gastos debían haber sido cubiertos oportunamente por la tesorería provincial, luego de ser previamente aprobados. El Ministro cuidó los intereses del Erario, sin considerar el aspecto humano. 346 El Cmdte. del Resguardo de Guayaquil había elaborado una explicación muy clara del porqué no era posible utilizar el vapor "Centinela" para el servicio de los faros y el Gobernador Santistevan envió esta misiva al Ministro Eguiguren. El 23 de enero responde que quedó convencido por las observaciones del Cmdte. y que el Presidente autoriza que se continúe con el transporte "...por las mismas embarcaciones, y abonando los mismos fletes que la costumbre lo había establecido..." 347 En Esmeraldas, fuertes aguajes en el mes de mayo habían puesto en riesgo el faro que, aparentemente, estaba colocado en un sitio muy bajo. El 15 de mayo escribió el Ministro de Hacienda al Gobernador del Guayas, poniéndolo al tanto de la situación. El Gobernador de Esmeraldas, con la ayuda del Capitán George Chambers del Vapor "Arequipa" de la PSNC, retiraron el faro de su lugar primitvo y lo iban a traladar a la falda del cerro "Coquito," donde quedaría permanentemente. El problema estaba en que ese traslado tomaría cierto tiempo, en el que el Puerto de Esmeraldas permanecería sin faro. Esta carta reviste el interés de que el Ministro pide al Gobernador del Guayas varias cosas que estaban fuera de su ámbito jurisdiccional: 1°.- Que ordene la publicación de la información respectiva en "El Nacional." 2°.Que comunique al cuerpo consular de la novedad. 3°.- Que de publicidad por todos los medios al hecho de que Esmeraldas permanecería sin faro por 197 un tiempo, y que no se cobre el derecho de faro, y que si se lo hace, se lo devuelva. Esta es una demostración muy clara del lugar que ocupaba el Gobernador del Guayas dentro del esquema de la República. 348 Posterior a la instalación de las cuatro boyas venidas de Francia, se había resuelto la instalación de otras, fabricadas localmente de palo de balsa. El 2 de junio de 1875, el Ministro Eguiguren escribía al Gobernador Santistevan: "Con el contenido del estimable oficio de US n°21, queda entendido el Gbno. de la colocación de las tres boyas, una en la cabeza del bajo de Mondragon, otra al centro de dicho bajo y la otra en la cabeza Sur del bajo de Isla Verde." 349 El 3 de Julio de 1875 el Gobernador transcribía, en oficio N° 31, comunicación del Capitán del Puerto en que informaba que el empleado del Faro de Santa Clara pedía útiles para el faro, los cuales debían ser encargados a Francia. 489 La barca alemana "Victoria" había sufrido un percance y esta había arribado a Puná en condiciones precarias. El 3 de julio el Gobernador Santistevan comunicaba al Gobierno del caso, informaba que había enviado un vaporcito y tres lanchas para alijerar la nave que hacía mucha agua y pedía instrucciones sobre si cobrarle el derecho de faro o nó. El Ministro le dispuso lo siguiente al Gobernador del Guayas, el 10 de julio de 1875: "Habiendo hecho arribada forzosa a nuestras costas la Barca alemana "Victoria," no sería justo cobrarle el derecho de farola; los sentimientos de la humanidad exigen, en casos como el presente, no agravar sus contratiempos; si, mejorarlos y favorecerlos..." 488 350 El 6 de agosto de 1875 fue asesinado el Presidente García Moreno, terminando así con un período de estabilidad política que permitió el crecimiento sostenido de la República. El Presidente García Moreno fue iniciador del mayor avance técnico del Ecuador en la segunda mitad del Siglo XIX, tanto durante su primer período como en el segundo. Es necesario enfatizar que, en su segundo período presidencial, se inició la construcción del ferrocarril de Guayaquil a Quito, se adquirieron dragas para limpiar el cauce de los ríos y se instaló el primer telégrafo, entre otros notables avances técnicos. Al cambiar el Gobierno cambiarían, aunque no inmediatamente, los servidores en los puestos de libre remoción, entre ellos 198 el Gobernador del Guayas y el Ministro de Hacienda. La estabilidad que había mantenido el Gobierno de García Moreno no era común. El 7 de agosto de 1875, el Gobernador envía al Ministro de Hacienda un grueso documento con información del reclamo de la Sra. Dioudonnat. El Tesorero de Hacienda del Guayas hace una extensa explicación de la forma en que se trabaja en la práctica con los funcionarios, lo que no siempre está apegado estrictamente a los reglamentos. Esta explicación se debía al hecho de que, a pesar de estar prohibido, decía haber hecho un anticipo de 100 pesos al Ing. Dioudonnat antes de su muerte. Esto estaba complicando el cruce de cuentas con lo reclamado por la viuda. Adicionalmente, según el Tesorero, el Sr. Antonio Mora, guardiamarina en el pailebot "Mercedes," por encargo verbal del mecánico unos días antes de su muerte, había pedido el sueldo del francés para entregárselo a la Sra. Dioudonnat, pero ahora ella negaba haberlo recibido. Esto significaba que, lejos de recibir los 270 pesos con 62 centavos, la Sra. Dioudonnat terminaba debiendo 29 pesos con 38 centavos del sueldo y los 100 pesos adelantados. 490 El 2 de octubre el Cónsul francés presentó al Gobernador una comunicación muy fuerte en que prácticamente acusa de que los documentos que se presentan de los 100 pesos de adelanto y los 200 del sueldo anticipado son recibos que el mecánico nunca retiró y corresponden a fechas anteriores. Esto lo dice el Cónsul en base a un exámen del diario del mecánico, donde constan esos dineros recibidos y justificados en fechas específicas y anteriores a lo dicho actualmente. El Cónsul se manifiesta incrédulo de que se pretenda perjudicar de esa manera a la viuda de un "fiel i leal empleado cómo lo ha sido siempre el S. Dioudonnat, con gran provecho para el Gobierno del Ecuador..." El Gobernador Santistevan envía la comunicación al Ministro y pide que el asunto se resuelva lo más pronto por parte de S. E. el Encargado del Poder. 491 El 20 de octubre, nueve meses después de formulado el reclamo, el Ministro reacciona ante la comunicación del Cónsul francés e instruye al Gobernador: "Con vista de la comunicación que ha pasado á US. el Consul de la República Francesa, con fha. dos de los corrientes, el Gobno. ha reconsiderado la disposicion comunicada á US. bajo el N°6 en 9 de enero del año en curso i los contratos de 1871 i 1872 celebrados con el mecánico de Faros Sor. Fernando Dioudonnat, i encontrando que en efecto se ha deslizado una equivocación se apresura á correjirla, por que el decoro del Gobno. le impone este deber. En esta 199 virtud, como el primitivo contrato está modificado en cuanto á la remuneración que ganaba dicho mecanico pues por el último se convino en asignarle el sueldo de doscientos pesos por mes, ordena S.E. el Encargado del Ejecutivo que se pague esta asignación por el último mes que devengó el Sor. Diondonat; i como el Gobno. reiteradas ocasiones ha prohibido que los Tesoreros dén buenas cuentas á los empleados, si el de esa prov. contraviniendo estas prohibiciones, ha dado la buena cuenta de cien pesos al Sor. Diondonat, será de su cuenta este adelanto que él lo ha hecho, i por las gestiones convenientes para cobrarlo. En cuanto á los $70 con 2 cts. usados en la compra de medicinas, maderas í útiles para los servicios de los faros, que también reclama el Sor. Consul Frances, dispone S.E. que estos gastos se comprueben legalmente ante la Junta de Hcda. i que se dé cuenta á este Mtrio, para ordenar el pago..." ¡Otra vez la burocracia en su mejor forma! 351 Hasta fines de octubre de 1875, la viuda de Dioudonnat no había podido cobrar lo reclamado en noviembre de 1874. Se le había reclamado al Tesorero de Hacienda del Guayas que pague los 200 pesos demandados por el Cónsul francés y al mismo tiempo se le exigía que cobre los 100 pesos debidos por el difunto, lo que estaba reacio a hacer en consideración de la situación de indigencia de la viuda. El 13 de noviembre de 1875, el Gobernador de Guayas escribe al Ministro de Hacienda transcribiendo una comunicación del Tesorero, en que éste dice lo siguiente, entre otras cosas: "Ayer pagué los mencionados doscientos pesos al Sor. Cónsul francés en obedecimiento á la citada órden..." Más adelante añade: "US. sabe muy bien que para justificar esos $100 costarán de gastos $200 mas que solo un necio puede hacerlo, y he aqui el resultado de la cuestion, pues he tomado el partido de abandonarlo, mandando regalar á la Sra. del Sor. Dioudonnat el recibo en cuestion, y tomando en el presente mes esos $100 menos de mi sueldo, con lo que quedará satisfecho el Fisco de su valor, tan solo por una orden que no se ha meditado en justicia..." El Tesorero añadía que los anticipos eran una práctica necesaria para que pueda funcionar bien el Gobierno, pero que él no tendría problema en dar cumplimiento estricto a la orden de no dar esos anticipos, eso si, salvando su responsabilidad por cualquier paralización en los servicios públicos. En ese momento el Gobernador era don Francisco P. Icaza, quien no hace más comentario que el de saludo final ante el contenido de lo transcrito. Sin embargo, creemos necesario recalcar que el gesto de asumir la deuda por parte del Tesorero de Hacienda del Guayas fue uno que lo enalteció, al tiempo que criticó sin palabras lo despiadado 352 200 del Gobierno, al que calificó de injusto. Esos cien pesos probablemente representaban una parte importante del sueldo de ese funcionario. Si revisamos el contrato original del francés con el Gobierno, veremos que sí da espacio para indemnizarlo en casos especiales. Sin embargo, eso no se tomó en cuenta al momento de saldar cuentas con su viuda, sino que se optó por la vía de la mayor economía. Poco humano, pero se cumplió el deber del funcionario público de proteger fríamente los intereses del Estado. Luego de conocer el detallado interés por proteger los intereses del Erario Nacional, buscando la forma de pagar lo menos posible a la viuda de Dioudonnat, retrocederemos en el tiempo a septiembre de 1873, cuando fue necesario trabajar ciertos materiales para el Faro de Punta Arenas. El Lente Fresnel es, como vimos antes, un instrumento delicado que requiere protección del sol para que no se manchen los prismas. En los faros se colocaban cortinas durante el día, para evitar que el sol afecte al lente, y en algunos casos se le construía al lente mismo un forro que aumentaba la protección. ¿Quién hacía las cortinas y los forros, así como los trapos para limpieza? Veamos lo que dice el mecánico al Gobernador en oficio N°151 del 17 de septiembre de 1873: "6 Barras de lienzo de hilo fino pa la óptica. (Mandarlas á mi mujer pa que haga los doblecillos i que sean revocados; urgente.) Si el francés tenía una actitud paternal para con los aparatos, Madame Dioudonnat cumplía la función maternal. 129 Pero donde el Estado se mostraba despiadado por su naturaleza impersonal, la bondad abundaba en esos momentos de dificultad para la viuda y su hija. El Gobernador Icaza, en unión de otros funcionarios caritativos, habían gestionado, sin romper la ley o la moral pública, un cargo de profesora para Charlotte Dioudonnat, hija del mecánico. El Sr. Icaza comunicaba, el 29 de noviembre de 1875, del éxito de esta gestión al Jefe Político, quien aparentemente también había sido partícipe: "Los Señores Inspectores de Escuelas con fecha 5 de Octubre me disen lo siguiente: La escuela de niñas del Sagrario dirijida por la Sta. Virginia Salvador, se encuentra en el caso del inciso 2° del artlo 9 de la ley de instruccion pública; en su virtud tiene derecho á que se nombre una ayudante mas, y nos es honroso proponer á US. para el desempeño de este cargo á la Sta. Carlota Dioudonnat, con la dotación de cuarenta pesos mensuales que señala la citada ley..." Luego continúa: "...la Sta. Dioudonnat aparte de reunir los requisitos legales, ofrece la ventaja de enseñar algunos otros ramos, como el francés, trabajo de flores artificiales y de cartas 201 geográficas, con lo cual compensará debidamente las horas de trabajo que no le será posible estar en la escuela, pues por sus compromisos particulares de enseñanza solo podrá asistir de doce del día á tres de la tarde..." Charlotte obtuvo el puesto desde el 13 de octubre (antes de escrita esta carta). Los Inspectores del colegio que dieron su informe favorable fueron Ignacio C. Roca y José M. Moncayo. Por el horario que cita la carta, se ve que la joven estaba trabajando muy duro para mantener a su madre y a si misma. 353 Aquí haremos un paréntesis en el relato para conocer que en ese año de 1875, falleció en París don Beltran Fourquet, Cónsul General del Ecuador. El fallecimiento de un funcionario del servicio exterior del País no justificaría mención en este libro por estar fuera de su campo, pero éste es un caso especial, pues el Sr. Fourquet merece el agradecimiento del País al haberse preocupado por que la Nación siempre recibiera productos de la mejor calidad y al mejor precio. Él fue instrumento esencial en la creación del primer sistema de faros y la adquisición de los mejores equipos que se podía encontrar en el mercado. No olvidemos que él se preocupó de comprar los faros adecuados para las necesidades del país, cuando estaban autorizados equipos mayores, lo que significó un importante ahorro y es una demostración de honestidad. Capítulo 19.- La Inspección General de Faros Lucas de Rojas es Inspector General de Faros. Desde julio de 1874 el Capitán del Puerto de Guayaquil tenía también el título de Inspector General de Faros. No hay datos de algún reglamento o decreto que sustente la creación de este puesto y es probable que haya sido impuesto arbitrariamente, al igual que lo fue el anterior de “Servicio de Faros” y "Director de Faros" cuando Dioudonnat comenzó su trabajo. Con fecha 29 de diciembre de 1875 y número 58, el Sr. Francisco P. Icaza, Gobernador del Guayas, comunica al Ministro de Hacienda que envía adjunta copia de "nota que el Encargado del Faro del Puerto de Esmeraldas ha dirijido al Capitán de este Puerto pidiendo los auxilios que necesita para continuar sirviendo aquella luz; í teniendo en consideración que el servicio indicado no puede sufrir retardos, por los peligros que podrian resultar í aun la responsabilidad de 202 que ha sido oficialmente anunciada al comercio estranjero, he dispuesto que en primera ocasion se remitan á Esmeraldas los auxilios solicitados para ese faro cuya aprobacion espero - sin perjuicio de las medidas que el Supremo Gobierno crea oportuno tomar para lo sucesivo.." 492 El 25 de diciembre de 1875, el encargado de la luz de puerto de Esmeraldas escribió al Capitán del Puerto de Guayaquil pidiéndole ayuda para la operación de esa luz de puerto. Entre otras cosas decía lo siguiente: "...Siendo de suma necesidad el cuidado del faro que hoy está a mi cargo, tengo a bien dirijirme á US. con el fin de ver si se consigue por mano de US el arreglar este servicio..." "...calculando que hoy no tenemos un mecanico como antes a quien podiamos dar cuenta mensualmente de los acontecimientos que oportunamente hubiesen..." "...nuestro jefes son los SS. Gobernadores de la provincia que esten mas inmediato y Señores Capitanes de Puerto, mas aqui donde hay tanto descuido tanto por una parte como por otra tengo a bien dirijirme á US. para que por medio de esa Tesoreria se me remitan..." "...todo esto he pedido al Gobernador y despues al Sor Capitan de este puerto y Tesorero de Hacienda mas ninguno se dá por entendido..." "...el aceite de olivo se compra por cajas ó botellas para alumbrar solo las noches de vapor, y las demas noches ordinarias se alumbra con una lamparita muy pequeña de querosina que esta no alcanza á alumbrar tres millas..." "Sirvase US consultar con el Señor Gobernador de esa Provincia y hacerme la remision de los pedidos que le haga y cargarselos en cuenta á esta Tesorería por ser gastos hechos en el servicio de este faro..." Ya se hacía notar la falta del Ing. Dioudonnat. El encargado de la luz de Esmeraldas estaba desesperado y buscaba el amparo del Capitán del Puerto de Guayaquil e Inspector General de Faros. 492 Entre noviembre de 1875 y enero de 1876, varios pedidos del Capitán Rojas para limpieza y reparación en los faros pasaron por Junta de Hacienda del Guayas para su aprobación. Curiosamente, antes los gastos de los faros no pasaban regularmente por junta de hacienda y ésta, de comienzos de enero de 1876, es la primera acta de esa época en que se trata sobre faros. 493 El 12 de enero de 1876, mediante oficio N° 23, el Gobernador del Guayas comunica al Ministro de Hacienda los gastos realizados para la conservación del Faro de Esmeraldas. Se había enviado una persona desde Guayaquil para "hacerse cargo del faro." 494 203 En enero 12 de 1876, con membrete de la Capitanía del Puerto de Guayaquil, Lucas Rojas comunica al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina novedades sobre los faros: De acuerdo al permiso concedido, envió al Cmdte. de la Goleta "Mercedes" a realizar una inspección al Faro de Santa Clara, en respuesta a un queja por falta de luz presentada por el capitán de la barca inglesa "Glemafton." Informa que la falta de luz se debió a dos razones: 1° Que una lata de combustible contenía aguarras en vez de queroseno y, 2° Que uno de los empleados se duerme en su guardia. Informa además que habían filtraciones de agua lluvia en los faros de Punta Arenas y Punta Mandinga, por lo que era necesario reparar las cubiertas. Termina el informe: "Por las razones espuestas comprenderá S.S. lo útil que és que la Nacion cuente siempre con un buque disponible para éstos y otros casos que puedan sobrevenir, habiendo cumplido el Sr. Comte. de la Goleta de grra 'Mercedes' con las instrucciones que le comuniqué de órden de SS..." 354 La muerte del Cónsul Fourquet había dejado inconcluso un pedido de partes para los faros. Preocupado por la situación, el Capitán del Puerto pide al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina, el 24 de enero de 1876, que el "pailebot de grra 'Mercedes'salga inmediatamente para la Isla de Santa Clara, a obtener del encargado de ese faro, una lista de pedido, de todo lo que falta para la conservación del referido faro, pues que hacen yá cuatro años que está en uso constante, i varias piezas se encuentran gastadas..." 355 El Ministro de Guerra y Marina oficia al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina el 2 de febrero de 1876, indicándole que: "S.E. el Presidente de la República dispone que US. llame al servicio activo al Capitán de Fragata graduado Francisco Pacheco para que se haga cargo dela Capitania de ese puerto, en cuyo destino debe ser dado de baja el Capitan de Navio graduado Lucas Rojas..." 356 El 7 de febrero regresó de su viaje de inspección el pailebot "Mercedes" y Lucas Rojas reportó al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina que "las luzes de los Faros están en perfecto estado i buen condición, aunque los edificios necesitan una pronta reparación..." Dice el Capt. Rojas que el Cmdte. del pailebot cumplió "con su comisión con estrictez" pero no se menciona el listado de partes de los faros, que era el propósito principal del viaje. El 9 de febrero de 1876, el Gobernador comunica al Ministro de Hacienda haber recibido del Coronel Capitán del Puerto una "nota fechada 8 del actual" en la cual le dice: "Con fha. 26 del pasado Enero, me dice el Señor 357 204 Comandte General del Distrito i Marina que: Con fha 19 del mismo mes el H. Señor Ministro de Estado en el Despacho de Guerra i Marina ha ordenado el reparo de los edificios de los faros, el cual oficio. Creo que lo habrán transmitido á US.= En esta virtud hago hoy un pedido para el faro de 'Santa Clara' que no dudo aceptará US. por ser de urjente necesidad, y como para conducir estos útiles se necesita prontamente de embarcacion espresa, se ha conseguido una que valla al faro de 'Santa Clara' por ocho pesos segun verá US. en el referido pedido.= Dios gue. á US.= Lucas Rojas." En síntesis, lo que pide es 8 pesos para pagar la nave y para ello se realiza esta tramitología. Más aún, el Gobernador informa que, como no se ha podido reunir la Junta de Hacienda, él está autorizando el gasto y espera sea aprobado por el Ministro. ¡Todo por ocho pesos! Esto nos demuestra que, si bien los faros habían pasado al control de la Armada, económicamente seguían dependiendo de la Gobernación y la Tesorería de Hacienda del Guayas. 495 Ese mismo 9 de febrero, con N° 69, el Gobernador comunica al Ministro de Hacienda que el Capitán del Puerto, en nota del 7 de ese mes le dice: "Hoy tengo el placer de dirijirme á US., acompañando la nota de pedido que el S. Guarda faros de Santa - Elena (en ese entonces no existía faro en Santa Elena y debe ser un error autor), hace para el buen servicio, i conservacion de sus luces.= Bien sabe US. que estos pedidos se hicieron anteriormente i que no los llenaron en Paris por el fallecimiento del S. Consul Gral del Ecuador en Paris, pero estando todas las naciones avisadas de que nuestros faros estan alumbrados como he dicho a US. en mis anteriores, no desearia que por falta por pequeña que sea hayan reclamaciones... ...Los que me es honroso transcribir á US. H. adjuntandole el pedido orijinal, el que se servirá devolverme, comunicandome lo que S.E. el Presidente de la República, tenga abien resolver sobre el particular." 496 En varias reuniones de la Junta de Hacienda del Guayas, durante enero y febrero de 1876, se habían tratado asuntos de los faros, principalmente gastos de pintura, reparación de lámparas, compra de útiles y varios. En todas el peticionario responsable es el Coronel Lucas Rojas. Muchos de los gastos que se detallan en estas Juntas habían sido atendidos por los empleados como parte de sus funciones, por lo que ahora que se contrataban obreros para esos trabajos, deben haber subido los gastos del Erario en los faros. 497 El 11 y 12 de febrero de 1876 se realizó el cambio de mando en la Capitanía del Puerto de Guayaquil. 358 al 360 205 El 16 de febrero de 1876, el Ministro de Guerra y Marina oficiaba al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina: "Supuesto el Supremo Gobierno del estimable oficio de US. de 9 de los corrientes señalado con el N°112, dando cuenta de haber llamado al servicio activo al Señor Capitán de Navio graduado Lucas Rojas para Jefe de la Bateria de las Cruzes, atenta su honradez i sus conocimientos en el arma de artillería; el Exmo. Señor Presidente de la República ha tenido á bien aprobar dicha medida, i nombrarle ademas inspector de los faros establecidos en las aguas de la República..." 361 Este nombramiento como inspector de faros en toda la República es el primero que se tiene por escrito, pero se realizó sin el amparo de un decreto o reglamento que defina las funciones y responsabilidades del cargo. El Coronel Rojas creyó justo que se le pague un sobresueldo y por ese motivo había presentado un reclamo. El 24 de marzo el Gobernador Icaza escribía al Ministro de Hacienda: "El Sr. Tesorero de Hacienda, con ésta fecha me dice:- 'El Coronel Lucas Rojas se ha presentado reclamando un sobre sueldo de cincuenta pesos como oficial de Marina en servicio por estar nombrado por el Supremo Gobierno de Inspector de Faros, a la par que de Jefe de la Bateria de las Cruces = Como ésta Tesoreria no tiene conocimiento de tales nombramientos, ni menos si el primero debia imprimirle el caracter de oficial de marina, embarcado, espera que US. se sirva pedir al H. Sr. Ministro en el Despacho de Hacienda el parte de este nombramiento i la designacion precisa que le corresponda = Dios gue a US - Vicente A Carbó' Lo que tengo la honra de transcribir a US H. para que se sirva recabar la resolucion de SE el Jefe del Estado." 498 La siguiente comunicación, fechada 7 de abril de 1876, es la segunda que tenemos en la cual figura el membrete de Inspección de Faros (la primera es de 1874, cuando aún estaba activo el mecánico francés). Esta comunicación la firma Lucas Rojas y va dirigida al Cmdte. Gral. del Distrito: "Señor: Cumpliendo con el deber que me impone el puesto que ocupo, me embarqué el 26 del ppdo, en la Goleta de guerra 'Mercedes' con el objeto de inspeccionar los faros de nuestro golfo, los que he encontrado perfectamente bien, notando sí, que en Punta Arenas, es de urgente necesidad mandar unos diez cargamentos de piedras en el mencionado buque, para defender el edificio que es mui abatido por el mar, i conservar estos establecimientos, que són el lujo de la costa del Pacífico. Como he observado la estricta disciplina que hai abordo del espresado buque, i atendiendo al mérito actividad i buena conducta de su Comandante el Señor 206 Capitán de Corbeta graduado Francisco Mora, me tomo la livertad de proponerle á U.S. se digne solicitar del Supremo Gobierno la efectividad de su grado, por creerlo así de estricta justicia, i tener mas de siete años con dicho grado..." No debemos olvidar que el Sr. Mora fue quien actuó como enviado del mismo Lucas Rojas cuando ocurrió el episodio de la inspección al Faro de Santa Clara, en que se quiso demostrar incompetencia del Ing. Dioudonnat. Leeremos más sobre los cargamentos de piedras para el Faro de Punta Arenas. 138 La organización administrativa de los faros se había complicado con el cambio de responsabilidad al Capitán Rojas, pues él dependía de una organización para la parte operativa y de otra para la parte económica. La dificultad que esto representaba para el servicio de faros queda demostrada en el siguiente oficio N° 228 del 19 de abril de 1876: "Al H. Señor Mtro. de Estado en el Despacho de Hacienda. / El Sor. Comte Grale del Distrito en nota fecha 7 del presente, me dice--- 'El Sor. Capitan de navio graduado Lucas Rojas, Inspector de Faros, con esta fecha, me dice lo que sigue= 'Señor = Cumpliendo con el deber que me impone el puesto que ocupo, me embarqué el 26 del ppdo. en la Goleta de Guerra 'Mercedes,' con el objeto de inspeccionar los faros de nuestro golfo, los que he encontrado perfectamente bien notando si, que en Punta Arenas, es de urjente necesidad mandar unos diez cargamentos de piedras en el mensionado buque, para defender el edificio que es mui abatido por el mar, i conservar éstos establecimientos, que son el lujo de la costa del Pacífico' == Lo que transcribo a US. afin de que se sirva mandar proveer el cargamento de piedras que se solicita, indicado en el inserto oficio.'-- Lo que transcribo a US H. para conocimiento de SE. el Presidente de la República. Dios gue a USH F P Icaza" Lo interesante de esto es que el Capt. Rojas no menciona el informe del Ing. Gruenerval de fines de 1874, en que decía lo que había que hacer para proteger el Faro de Punta Arenas. No era cuestión de simplemente echar piedras alrededor, sino que había que hacer un trabajo metódico. Lamentablemente, no se hizo lo necesario y este no fue el único cargamento de piedras echado al pie del faro, lo que era echar dinero al río, pues las mareas se llevaban las piedras en poco tiempo. 499 Luego de la comunicación anterior, tenemos muy pocas en los meses y años subsiguientes. Entre la muerte del Presidente García Moreno y septiembre de 1876, se habían sucedido algunos encargados del Poder Ejecutivo, que trataban de mantener el gobierno conservador. Con el cambio de gobierno a la Jefatura Suprema de Ignacio de Veintemilla, de corte liberal, cambió la 207 estructura ministerial, creándose un Ministerio General, bajo el cual se crearon las Secciones de Hacienda y Fomento. Si bien el Inspector de faros ya no reportaba al Gobernador en la parte operativa, sino al Cmdte. Gral. del Distrito y Marina, eventualmente era necesaria la intervención del ejecutivo provincial para asuntos administrativos y económicos. El 16 de noviembre de 1876, en oficio N° 90, el Gobernador José María Plácido Caamaño escribe al Ministro General: "El Sr. Inspector de Faros, en nota fcha de hoy me dice lo que copio: 'Tengo el honor de remitir a US. el presupuesto y planillas por el valor de lo que se necesita para defender la torre del Faro de 'Punta Mandinga' en la proxima estacion del invierno que esta cerca, y faltaria á mi deber sino le acompañase el pte presupuesto de indispensable necesidad para poner dicha torre en buen estado, y salvar de este modo mi responsabilidad; al mismo tiempo pongo en conocimiento de US. que el faro de 'Punta Arenas' necesita defenderse de la fuerte marejada que choca contra la torre, para esto hay de necesidad de diez cargamentos de piedras para formar un tajamar que lo defienda, pues de lo contrario se caerá la torre; todo esto se puede conseguir con la goleta de guerra 'Mercedes' para este servicio tan importante en la conservacion de estos faros que cuestan muchos miles de pesos á la nacion; tan bien puede la misma goleta llevar los viveres y aguada y todos los útiles necesarios que se le mandan todos los meses á estos establecimientos, pues son de suma utilidad al comercio maritimo, pues desde que se han establecido se han impedido las perdidas de buques en los bajos y escollos que hai en la entrada de este golfo: yo espero del patriotismo de US. se digne recavar la resolucion satisfactoria de esta nota, pues la goleta debe salir el 26 del pte sinó habria que contratar la chata que se fleta todos los meses. Dios y Libertad = Lucas Rojas.' Lo que transcribo á VS.H. para que se digne someterlo al conocimiento de S.E. el Jefe Supremo para que resuelva lo que estime por conveniente..." Recordemos que en abril de ese mismo año ya se habían echado diez cargas de piedras al pie del Faro de Punta Arenas. Nuevamente no hay mención de las recomendaciones del Ing. Gruenerval, que habrían dado una solución más duradera al problema de esa torre. 500 A fines de 1876, ya sea en noviembre o diciembre, el Inspector pedía al Gobernador la compra de un mechero para el Faro de Santa Clara, pues solo quedaban dos de los originales. El repuesto lo tenía la casa Stagg y Cia. pero no lo entregaban hasta que se les pague. En oficio sin número o fecha, el Gobernador del Guayas pide al encargado del Despacho de Hacienda el pago de esa factura. 501 208 El 28 de febrero de 1877 escribía el Ministro General, Sección de Hacienda, don Pedro Carbo, al Gobernador del Guayas: "Puesto el despacho del Jefe Supremo de la República, su oficio marcado con el N°56 y fechado el 21 del presente, donde US. solicita la correspondiente autorización para ordenar la refaccion de los faros que constan en nuestra costa, con exepcion del situado en Punta Mandinga y refaccionado en Noviembre del año que espiró; S E me ordena decírle que: á la brevedad posíble dísponga US. que peritos practicos en la materia, formen un presupuesto de los gastos que deban ocasionarse en la refaccion de dichos faros, para que con aprobacion de la Junta de Hacienda de esa Provincia, se proceda inmediatamente á dicha refaccion recomendando á US la mas estricta economía..." 362 En abril de 1877, el Inspector de faros había tratado de contactar directamente al Ministro General, Sección de Hacienda, pero éste envió al Gobernador del Guayas, el 21 de abril, la comunicación recibida: "De orden Suprema, devuelvo á US. la peticion que hace el Sor Lucas Rojas Inspector de faros, para que US. informe lo necesario á este respecto..." 363 El 12 de mayo de 1877 el Ministro General comunica al Gobernador del Guayas que "Dispone SE. el Jefe de la República que US. se sirva ordenar para que á la brevedad posible se remitan á la Gobernación de la Provincia de Manabí, los utiles de repuestos para faros marítimos, que dicho Señor Gobernador solicite á US., advirtiendole que esta remeza se hará en caso de que exista un deposito de estos utiles en esa ciudad i que sea de propiedad del Gobierno..." Esta comunicación es de lo más curiosa, pues demuestra un desorden en el manejo de los faros. No olvidemos que la designación de Lucas Rojas fue como Inspector de los faros de toda la República, por lo que era la persona indicada para manejar este asunto, no el Gobernador del Guayas. Por otro lado, la carta del Ministro es imprecisa en cuanto a donde debía estar el depósito, si en la ciudad de origen, o sea Guayaquil, o la de destino, o sea Portoviejo. No nos sorprendería que los repuestos nunca le hayan llegado al Gobernador de Manabí. 364 El Inspector aún dependía del Gobernador para su apoyo en el cumplimiento de su función. Había solicitado dinero para hacer un viaje de inspección y el Gobernador informó de ese gasto al Ministerio General, quien le contesta así: "Quito á 4 de Agosto de 1877 ...S.E. el Jefe Supremo de la República ha tenido a bien aprobar el gasto de cuarenta pesos que US. ha decretado, 209 para que el inspector de faros, Sr. Coronel Lucas Rojas, pueda emprender con la mayor brevedad un viaje á la costa, con el objeto de visitar los que estan á su cargo, segun US. lo comunica por su oficio n°311..." De esa inspección deben haber surgido algunas recomendaciones, pero de la única que tenemos noticia es la siguiente, contenida en oficio fechado 12 de diciembre de 1877, del Ministro General al Gobernador del Guayas: "S.E. el Jefe Supremo de la República, entusiasta por el bien público, aprueba el presupuesto que, el Sor Coronel Lucas Rójas ha presentado á este Despacho, manifestando la cantidad que se necesita para construir la cocina del faro de Punta Arenas..." 365 366 El informe del Ministro de Hacienda para el año 1877 daba los siguientes resultados económicos para los faros, desde el 1° de enero al 30 de septiembre: "Ingresos: 37 pesos con 97 centavos. Egresos: 7.720 pesos con 35 centavos. Saldo en contra: 7.682 pesos con 38 centavos." ¿Por qué no se recaudaban los derechos de faros? No hay explicación. 502 El 22 de enero de 1878, el Inspector de Faros, Lucas Rojas, escribe al Gobernador de la Provincia: "Tuve el honor de recibir en el acto contestación de US. á la nota que le dirijí con fecha de ayer, referente á las cuarenta planchas de zinq que le pedí en ella para la cubierta de la cosina de los empleados del Faro de Punta Arenas. Ayer mismo he recibido dicho material del Sor. Coronel Guarda Parque de Artillería, por lo que es mi deber dar á US. las respectivas gracias y como amante del progreso..." El membrete del papel había cambiado de Inspección de Faros al de Inspección General de Faros. 139 210 El 1° de marzo, el membrete había cambiado del de Inspección General de Faros a Servicio de Faros y Lucas Rojas firma como Inspector General. En oficio de esa fecha, el Inspector General presenta un presupuesto de materiales para refaccionar la casa del Faro de Santa Clara (no la torre), y pide jornales para 12 días, para cuatro personas. El pedido lo firma Fernando Núñez como "Director del Faro." 140 La comunicación siguiente, fechada 5 de marzo de 1878, tiene otra vez el membrete de Inspección Gral. de faros. Estos cambios de título en el membrete nos hacen deducir que no había un organización claramente establecida y que Lucas Rojas estaba buscando establecer un cargo de manera más formal, lo que era muy necesario para dar estabilidad al Servicio. El Servicio estaba sujeto a los caprichos de la política. Citamos partes de esa comunicación al Gobernador de la provincia: "Señor: Tengo la alta honra de poner en conocimiento de S.Sa que hoi he recibido los partes de los Faros, remitidos por sus directores en que me avisan, que no tienen novedad alguna, con mui buena luz i mucho aséo en cada uno de esos establecimientos..." Esa comunicación nos hace conocer una decisión que traería problemas al Servicio en poco tiempo y se manifestaría en el deterioro de los faros, pues la inspección por parte de un funcionario superior era imprescindible para asegurar la calidad del trabajo. El Inspector delegó, a los mismos empleados, que reporten su situación de funcionamiento y el estado del faro. Como leímos, los torreros 1° se habían convertido en directores de los faros, título que, en la práctica, no cambiaba nada, pero que, aparentemente, dio al Inspector General un falso sentido de seguridad en la delegación de su función de inspección. La comunicación continúa reportando que: "la casita del barranco de la isla de 'Sta. Clara' me anuncia el director que no resistió veinte días por el gran flujo del mar i los aguaceros, pues, el muro de piedra i palos que dejamos trabajados con el Comandante de la Goleta de Grra. 'Mercedes' Sor. Don Francisco Mora i el que suscribe no ha sido suficiente para contener el fuerte impulso del flujo del mar y segun nota del mismo director..." Esta parte tiene que ver con el presupuesto para reparación, citado anteriormente, y pide la pronta adquisición de lo necesario para que: "...salga en la chata que sale todos los días 26 de cada mes con viveres i aguada para todos los faros referidos..." 141 211 Esta última cita nos demuestra que el Inspector había establecido un servicio regular de atención a los faros, algo que era muy necesario para el bien del Servicio y la tranquilidad de los empleados. En junio 25 de 1878, el Inspector General respondía al Gobernador una denuncia: "Tengo la honra de contestar la nota de US fecha de ayer N°821 transcribiendome la que le ha dirijido el Agente General de la Compañía de Vapores Ingleses en el Callao, relativa á comunicar que el Sr. Capitán del Vapor "Colombia" le habia hecho saber que el 24 del pasado que entró a este puerto vino a distinguir la luz del faro de Santa Clara a las 4.15. am. Es la misma queja que el mencionado Capitán puso a esta Capitanía del Puerto y de la cual tengo ya dada respuesta satisfactoria a US. con la nota que me hubo pasado el Señor Comandante de la Corbeta Chilena 'Chacabuco'. En cumplimiento de mi deber por honra del pais y en bien del comercio maritimo volveré a dirijirme al cuidador del faro de Santa Clara, para que cumpla puntualmente con su deber. (Ahora no lo llama “Director del Faro”). Escusado es patentizar la importancia de los faros, e interesado en que estos se sostengan lo mejor posible se me ocurre con esta ocasion indicar á US. que habiendo fenecido el contrato celebrado con la nación y la compañia inglesa, en el nuevo que se haga debe imponersele que pague el derecho de faros, aunque no por todas las toneladas que miden los vapores si quiera una parte, y producirá una renta mensual de mil pesos, que podrían invertirse en el sostenimiento de los faros y el erario economizar esta suma. Cuantiosas sumas ha ganado dicha compañia solamente en los puertos de la República y justo es que paguen el impuesto de faros. El beneficio de la luz la reciben mas los vapores que entran constantemente á este puerto y solo ellos gozan de la gracia de no pagar el impuesto mencionado, lo que no lo creo justo. Sirvase US. transcribir esta al Supremo Gobierno á fin de que vea si acepta mi patriotica indicacion. Dios y libertad, Lucas Rojas" 142 En este oficio, Lucas Rojas está representando sus dos cargos, el de Capitán del Puerto y el de Inspector General de Faros. En la primera parte, como Inspector General de Faros, ya se está demostrando los efectos de su excesiva confianza en los empleados de los faros. Son dos las quejas presentadas por capitanes de dos buques distintos, aunque no sabemos si se refieren a la falta de luz en un mismo día. 212 En la segunda parte, como Capitán del Puerto, está defendiendo los intereses de la nación, pues considera que no hay justificación para dar preferencias a una empresa naviera. Sin embargo, recordemos que la exención a la Compañía de Navegación a Vapor del Pacífico (CNVP o PSNC) fue parte del Decreto Ejecutivo que reformó el derecho de faros el 20 de noviembre de 1872, por lo tanto debe haber obedecido a intereses político-económicos. Si lo que dice el Capitán Rojas sobre el potencial ingreso de un mil pesos mensuales fuera correcto, entonces prácticamente todos los buques que entraban a los puertos de la República eran de esa compañía, pues el ingreso total en 1878, por concepto de derechos de todos los faros de la república, fue de 3,295.12 pesos. Con los ingresos de los buques de la CNVP se habría tenido un total de 15,295.12 pesos, lo que quiere decir que, del tonelaje total de ingreso a todos los puertos, el 78% correspondían a esa compañía. Esto nos hace ver que, por más patriótica que haya sido la observación del Capitán Rojas, estaba muy alejada de la realidad política y económica, pues cualquier compañía que tuviera semejante proporción del tonelaje naviero que servía al país, prácticamente tenía un monopolio y por lo tanto podía dictar sus condiciones de servicio. 144 Por otro lado, la preocupación del Capitán Rojas era comprensible, pues los faros representaron un egreso de 8,904.29 pesos el año 1878, dando un déficit de 5,609.17 pesos que debía cubrir el Erario Nacional. Ese déficit debe haber causado problemas para la Capitanía del Puerto y la Inspección General de Faros, pues debía obtener recursos del presupuesto del Ministerio de Guerra y Marina, que siempre estaba ajustado. El año 1879 la situación fue peor, pues se tuvo un ingreso de 4,886.10 pesos mientras que los egresos fueron 11,314.01 pesos, con un déficit de 6,427.91 pesos. 143 a 149 Capítulo 20.- Se Instalan Faros en Jambelí y Santa Elena Nuevamente hay poca información entre 1881 y 1882, pero por el tenor de las pocas comunicaciones que tenemos de esos años, se puede ver que la Inspección de Faros había estado activa, colocando al menos un faro en Jambelí y otro en Santa Elena. 213 Con fecha 29 de enero de 1881, en oficio N° 75, el Gobernador del Guayas se dirige al Ministro de Hacienda con el fin de pedir rectificación de los montos aprobados en Junta de Hacienda del mes de noviembre de 1880, para reparar la torre del Faro de Punta Española. El amanuense había omitido un número, lo que causaba que el acta contenga una cifra erronea, de tal manera que el monto aprobado no era suficiente para cubrir el costo. 503 El 16 de marzo se insiste en lo mismo y se advierte que "la casa sigue destruyendose" (se refiere a la torre del faro). 504 Esmeraldas seguía con problemas para el abastecimiento de repuestos y útiles para el faro, y el Gobernador de esa Provincia recurrió al Inspector de Faros para obtener lo necesario. Con fecha 25 de junio de 1881 y oficio N° 397, el Gobernador del Guayas pone la información en conocimiento del Ministro de Hacienda: "El Sr. Inspector de Faros con fha 6 del pte me dice: 'Tengo el honor de transcribir á S.Sa. del Sr. Gral Gbr de la provincia de Esmeraldas fha 23 del mes ppdo, en la que pide varios artículos, segun la lista adjunta, para el faro del puerto de esa provincia. US. se servira ordenar, si lo juzga conveniente, se dé por quien corresponda, advirtiendo que varios artículos habrá que encargarlos á Europa, porque en el depósito de mi cargo no los hay = Aqui la nota = Ecuador = Gobernacion de la prova. = Esmeraldas Mayo 23 de 1881 = Sr. Inspector de faros = Con esta fha me dice el Sr. Tesorero de Hcda de esta prova. lo que sigue: Siendo indispensables varios útiles para el servicio del faro de este puerto, incumbe á US. solicitarlos del Sr Inspector de faros residente en Guayaquil, para que los remita lo mas pronto posible. Si alguno de los útiles puntualizados en la lista adjunta no se encuentran en los depósitos nacionales S.S. los hará pedir por quien corresponda á E.E.U.U. ó Europa, á fin de que el faro de este puerto no carezca de luz por falta de lámparas ó tubos que por ahora no los tiene de repuesto = Dios y Libertad = Pedro C. Drouet = Lo que me es grato transcribir á U. adjuntandoles la lista de los útiles que se necesitan á fin de que se sirva enviarlos á la mayor brevedad = Dios y Libertad = José Sotomayor y Nadal = Es cuanto me honro poner en conocimiento de US. para los fines consiguientes. = Dios y Libertad = Lucas Rojas.' Lo que me es honroso transcribir á US. adjuntandole la lista, para los fines consiguientes. Dios y Libertad. J. Sanchez Rubio." 505 La Puntilla de Santa Elena, siendo el punto más saliente del Ecuador continental en el Pacífico, había sido constantemente postergada en cuanto a la instalación de un faro. La importancia de los Puertos de Ballenita para 214 pasajeros y mercadería, y Salinas para la explotación de las salinas, había sido relegada ante las necesidades inmediatas de otros puertos. Hemos visto muchos deslices en que se menciona "el faro de Santa Elena," cuando éste no existía, aunque después del de Santa Clara, y tal vez sobre él, era y es un punto de mucha importancia para la navegación marítima. La Puntilla justificaba, como aún lo justifica, la instalación de un faro de recalada, esto es de 2° orden o superior, pues es punto de arribo a la costa, de buques de alta mar. Sin embargo, la realidad económica primaría sobre la técnica y se colocaría allí un faro de 4° orden. El Inspector de Faros, Capitán de Navío Lucas Rojas, estaba consciente de esa necesidad y, en junio de 1881, había realizado gestiones para la adquisición de ese aparato. El 2 de julio de ese año se presentó en la Junta de Hacienda del Guayas la documentación para la adquisición de un faro de 4° orden para la Puntilla de Santa Elena. Veamos el proceso: El 2 de julio el Gobernador José Sánchez oficia al Ministro de Hacienda: "Tengo la honra de adjuntar á US. H. á la presente, copia legalizada del acta de la Junta de Hacienda, que tuvo lugar en la sesion de esta fecha, á fin de que US. H. la ponga al Despacho de S.E. el Presidente de la República, para su superior aprobacion..." A continuación texto del acta: "Junta de Hacienda / Sesion del 2 de Julio de 1881 Abierta con los Señores Gobernador de la Provincia José Sanchez Rubio, Comandante General José Vicente Maldonado por tratarse de asuntos militares, Tesorero de Hacienda Dn. Simon Amador, Ministro Fiscal Manuel Carrion y el infrascrito Secretario.= La Junta tomó en consideracion el siguiente presupuesto que presenta el Señor Coronel Lucas Rojas Inspector General de Faros, para la compra de un faro de 4° Orden que es indispensable colocar en la Punta de Santa Elena, cuyo presupuesto es como sigue.= Presio del faro en Europa Francos 10.570.Colocacion del mismo " 1.500.a Construccion de la torre p colocarlo " 5.000.Total Francos 17.070.ó sean 3.414.pesos fuertes sin el cambio Conduccion del faro a Santa Elena Pesos fuertes 100.Suma total Pesos fuertes 3.514.Guayaquil Julio 1° de 1881.= Lucas Rojas506 215 La Junta teniendo en consideracion la necesidad de colocar en la Punta de Santa Elena el faro de 4° Orden que se solicita por el Señor Inspector de Faros para que la navegacion á este puerto se haga con entera libertad, y tambien por que dicho Cabo es el mas avanzado que hay en toda la Costa occidental de Sur America, aprobó la compra del espresado faro, y dispuso que previa aprobacion del Supremo Gobierno de la República se pida á Europa el referido faro.-" La Junta trata otro asunto y luego vuelve a los faros para atender un pedido de lámparas, útiles y vidrios para las linternas. 506 Otra comunicación relacionada con los faros, en 1881, es indirecta y viene del Tesorero de Hacienda del Guayas. Está fechada 24 de octubre de 1881: "Sr. Gobernador de la Provincia. En dias pasado dió aviso á esta Tesoreria el Sr. Crnl. Lucas Rojas inspector de faros que el eje pricipal del faro de Sta. Clara se habia dañado y para regresarlo compuesto se hizo necesario fletar una chata en veinte pesos para que lo condujese -- por ser de urjente necesidad, de todo lo cual ha pasado hoy el parte por escrito que aboné como es justo los referidos veinte pesos previo recibo, considerando será aprobado por la junta de Hcda en calidad de urjente..." El 9 de noviembre de 1881 el Inspector solicitó autorización y dinero para realizar una inspección de los faros, ante lo cual el Gobernador oficia al Ministro de Hacienda: "El Señor Inspector General de Faros en nota de esta fecha, me dice.- 'Señor:= Teniendo necesidad imperiosa de pasarle revista á los faros del Golfo y no teniendo los recursos necesarios para el viaje indicado, se digne SS. solicitar del Supremo Gobierno, la necesaria para los gastos indispensables, de vapor y mantencion durante los dias que se gaste en la espedicion. Y como estoy penetrado del patriotismo que le caracteriza, para la conservacion de estos establecimientos que son de tanta utilidad al comercio marítimo de la República.= Dios y Libertad = Lucas Rojas = Lo que tengo á honra transcribir á USH para conocimiento de S.E. el Presidente de la República, manifestando que es conveniente se decrete el gasto que solicita el Señor Inspector de Faros por ser necesaria esa visita para el mejor servicio de los faros.Dios y Libertad J Sanchez Rubio. 367 507 La única comunicación de 1882 dice lo siguiente: "Inspección General de Faros Guayaquil, Febrero 11/882 216 Al Señor Geral. Gobernador de la provincia Señor: Ayer á las cuatro recibí la preciable nota de SSa marcada con el N°1214 en que se sirve transcribirme la del H. Señor Ministro de Hcda. contraida á que informe sobre la luz de Puerto establecida al Norte de la isla de Jambelí. Para cumplir con lo mandado con la exactitud dela situacion topográfica dela latitud y longitud en que se halla y si reune las cualidades marítimas de los demas faros que se encuentran en la parte Occidental del Golfo. El faro de Santa Rosa está colocado dentro dela ensenada de Jambelí y fuera de la linea de la general navegación del golfo. Los buques que entran y salen, sea cualquiera el viento, no buscan la costa de sotavento para empeñarse en los bajos dela Hombrera y Pallana. Este faro se ha creado con el único fin de proteger la navegación de chatas q' trafican á Santa Rosa, para que puedan distinguir la entrada de Jambelí en noches oscuras y lluviosas; porque las costa es muy baja y no ha sido el objeto de su creación proteger la navegación de buques mayores; pues estos jamás buscan la costa baja del Oriente, pero si el Supremo Gobierno, quiere que marche al referido lugar, hay necesidad que se me proporcione los fondos indispensables para el viaje; que con mucha satisfacción lo haré. Por informe de un empleado de Puntarenas, sé que la luz de Jambelí no se distingue; mientras que la del Muerto con la de Punta arenas y Pta. Española se cruzan y esta es una delas cualidades que requieren en los faros maritimos. Es lo que puedo informar inmediatamente; cuando pase a comprobar la colocación de ese faro, lo haré saber con mas exactitud..." 150 Esta comunicación muestra un revés en la opinión del Capitán Rojas, pues años atrás, en 1872, cuando ejercía el cargo de Capitán del Puerto de Guayaquil, había obstaculizado el primer intento de instalación del Faro de Punta Española, y había apoyado, al no informar oportunamente como sí lo hizo en otra ocasión, la instalación innecesaria de un faro en Punta Centinela, que habría sido útil principalmente si los buques grandes usaban "...la costa baja de Oriente," "que estos jamás buscan..." como dice el mismo Capt. Rojas con sus propias palabras. Ahora alababa a lo que una vez se opuso. Positivo para el servicio de faros en 1882, dentro del período dictatorial de Ignacio de Veintemilla, fue la instalación del Faro de Santa Elena. El Faro Veintemilla, como fue denominado el de Santa Elena, nombre que no pegó ni duró, fue inaugurado el 10 de agosto de 1882 y de él, a diferencia de los faros anteriores, hay poca información del proceso de construcción e 217 instalación, aunque tenemos el Hacienda en el cual se aprobó su valor. La única señal de que el edificio se había construido es un pedido de tejas para terminar la casa, como veremos más adelante. Por la falta de información no sabemos el origen, ni el fabricante, ni sus características técnicas (las de iluminación sí hay en los informes). Parecería que alguna autoridad superior no estuvo de acuerdo con la instalación del Faro de Jambelí pues éste aparentemente fue retirado, ya que no se lo vuelve a mencionar hasta años después. El Faro de Jambelí había sido colocado con el apoyo económico de los machalenses quienes, motivados por el agente de la PSNC, tomaron en 1879 la iniciativa de instalarlo. acta de Junta su compra y se da de 548 Capítulo 21.- Se Reglamenta el Servicio El siguiente oficio es de un año después, febrero 24 de 1883. La situación política estaba en deterioro y habían problemas para el mantenimiento de los faros. El dictador Veintemilla estaba en Guayaquil mientras en Quito se había constituido un pentavirato. Las fuerzas de oposición a Veintemilla estaban ganando terreno y prácticamente estaba aislado. Aún así, el servicio de faros debía seguir en funcionamiento, y tenemos una comunicación del Inspector General de Faros al Gral. Gobernador de la Provincia, que dice: "Guayaquil, Febrero 24 de 1883. Señor: Teniendo imperiosa necesidad de mandar los víveres, aguada, Kerosin; para los faros del Golfo; porque no ha venido la Goletita del Señor Dn Francisco Javier Galvez, que tiene las pipas, y barriles de la aguada, porque la tienen detenida en Machala: y estando el presente mes al concluirse espero que SSa se digne ordenar á los Señores Comandantes de los vapores de guerra 'Guacho' y 'Santa Lucia' me faciliten diez cuarterolas en calidad de prestadas, hasta que regrese la chata del 'Muerto' y 'Punta Arenas' Y así mismo al Señor Capitán del Puerto para que tenga la bondad de poner una chata á mi disposición, para que conduzca los referidos artículos á los puntos 218 señalados, y recivirá el flete que se tiene señalado por el Gobierno para estos viajes; no dudo que SSa dará las ordenes convenientes al caso, para que dicha embarcación salga el lúnes lo mas tarde pues ya deben de carecer de víveres." 151 El 10 de julio de 1883 se posesionaba como Jefe Supremo de la Provincia del Guayas el Sr. Pedro Carbo Noboa. El Ecuador se dividió. Lucas Rojas permaneció como encargado de los faros. El 21 de julio, el Inspector General pedía al Jefe Civil y Militar de la Provincia que le ponga a disposición el vapor "Sucre" para realizar una visita a los faros del Gobierno. 180 En muchas comunicaciones Lucas Rojas figura como Coronel. Esto se debe a que en esa época los rangos superiores de la Marina y del Ejército eran usados por los oficiales navales. El Primer Reglamento de Faros - 1883. A los dos meses dos días de posesionado, el Jefe Supremo del Guayas emitía un decreto "ORGANIZANDO EL SERVICIO DE LOS FAROS ESTABLECIDOS I QUE SE ESTABLEZCAN EN LA COSTA DE LA PROVINCIA DEL GUÁYAS." El texto de este decreto, que constituye el primer reglamento para el servicio de los faros emitido legalmente en el país, está completo en el Anexo "B." 265 Interesantemente, el artículo 2° de este reglamento trata el mismo punto, el de sueldos, que contenía el punto correspondiente del primer reglamento que propuso el Ing. Dioudonnat en 1872. Podemos asumir, sin mucho peligro de equivocarnos, que el autor principal del texto fue el Inspector de Faros Lucas Rojas, pues era la persona más entendida con que contaba el País (la Provincia), en cuanto a los faros. Sin embargo, era imposible evitar que aquellos con el poder incluyeran sus ideas propias en el texto, y esto traería problemas al Inspector, pues se ejercería el derecho de nombrar los empleados sin consultarle, lo que le traería problemas, ya que perdería empleados con experiencia y a cambio tendría bajo su mando a neófitos en la materia. 219 A pesar de ese inconveniente, el contar con este reglamento fue un avance extraordinario en la estabilidad del Servicio y un logro para el Capitán de Navío o Coronel Lucas Rojas, Inspector de Faros. El decreto no indicaba de quién dependía el Inspector. Una vez en efecto el Decreto, el Inspector pasó a estar bajo el Jefe Civil y Militar de Guayaquil. El logro de contar con este reglamento sería de corto efecto, pues el plazo de vida del Gobierno de la Provincia del Guayas fenecería el 10 de octubre, en menos de un mes. Sin embargo, parece que este reglamento se mantuvo en vigencia hasta que se aprobó uno nuevo en 1884. El Inspector Tolera la Política. La situación en el nuevo gobierno debe haber sido delicada para funcionarios que habían servido en gobiernos anteriores y por esto debían manejarse muy políticamente. El día 12 de septiembre de 1883, el Inspector de Faros escribía al Coronel, Jefe Civil y Militar de la Provincia: "Señor: Tengo el honor de poner en conocimiento de SSa: Que los pilotos de las Chatas que navegan en el golfo, me han hecho presente, que si van en Comision á los faros conduciendo la aguada, viveres i kerosina por veinticinco pesos de flete, es por que se les obliga á hacer ese servicio con gravámen de sus intereses; i por lo tanto, creo justo que SSa considerando ser cierto lo que se reclama, recabará de SEa el Jefe Supremo de la Provincia la providencia necesaria para mejorar el reclamo que se me ha hecho. Dios i Patria Lúcas Rojas." El día 18 de septiembre escribía una nueva comunicación al mismo funcionario: "Tuve la honra de recibir el estimable oficio de US. en que se sirve trasladarme el del H. Sr. Srio Gral del Gobierno del Guayas con fha 14 del mes en curso; i en contestacion digo á US.: -- Que si hasta hoi no conosco sinó al antiguo primer gda faro de 'Sta. Elena' Manuel Villena que es competente, á los dos nuevos nombrados, Bernardino Villao i David Ordoñes, no puedo dar razón si sean ó no competentes para el desempeño de sus destinos, por que no sé quienes sean estos Sres, ni hasta hoi se me hayan presentado, que ya hacen cuatro dias.- US. me dirá lo que se determine. Paso á otro asunto. Con respecto á los establecimientos de faros, la torre del de 'Sta. Elena' está inconclusa por los desordenes de la memorable crisis que la dictaduria nos ha orijinado; i es de importancia concluirla.- Los otros cuatro, de 'Santa Clara' - 'Pta. 220 Arena', 'Pta. Española' i principalmente el de 'Puná ó Pta. Mandinga' necesitan de un pronto reparo en sus torres tambien, por que la construccion es de malas maderas, i mas tarde orijinarian mayores gastos.En atención á los informes que emito á US. se dignará dictar las providencias convenientes..." Es interesante la observación sobre la construcción de malas maderas, pues el 21 de octubre de 1873 el Capitán Rojas decía lo siguiente, al menos sobre la torre de Punta Arenas: "...la obra toda es de la mejor madera del pais..." 343 153 El 10 de octubre de 1883, el Ministro de lo Interior y Relaciones Exteriores del Gobierno de Manabí y Esmeraldas presentaba, dentro del texto de su informe, un acápite dedicado a los faros, el que dice lo siguiente: "No tenemos mas que uno en toda la extensa y rica costa de esta Provincia (se olvidó del de Esmeraldas ya que el Gobierno era de Manabí y Esmeraldas autor ), i es el que existe en el puerto de Manta; bien que propiamente no es otra cosa que luz de puerto, el que colocado por un ingeniero, salió de una de las mejores fábricas de Paris, construido para ser usado con aceite de olivo, siendo su luz clara, é intensa, pues algunos capitanes aseguran haberla divisado á 14 millas; vino á quedar reducida á la mitad por la economía que el Señor Coronel D. Lúcas Rójas quiso hacerle á la Nacion, cambiando el aceite de olivo por el de kerosine, para lo cual hizo destruir á cincel las lámparas adheridas al faro. Dada la importancia del puerto de Manta, i tomado en cuenta el deterioro qua ha sufrido el aparato, pues su intensidad ha disminuido un 50 %, con lo ordenado por el citado Señor Coronel Lúcas Rójas, me parece indispensable colocar allí una luz que llene las necesidades de los marinos, i tanto mas justo cuanto que todos los buques pagan en ese puerto el derecho, que se denomina farola, de seis i cuatro centavos, por cada tonelada de registro." Después de este informe, más comentarios sobrarían. 154 El 26 de septiembre de 1883 se realizaron elecciones para la Convención Nacional y 10 de octubre se reunió dicha Convención. El 11 de octubre la Convención eligió como Presidente a José María Plácido Caamaño y la República del Ecuador se reunificó. El 30 de octubre continuaba en funciones el Capitán Rojas y ese día informaba al Coronel Gobernador de la Provincia que había quedado inconcluso el edificio del "magnifico faro de la Punta de 'Santa Elena' por haberse mandado á suspender todos los trabajos públicos" e indicaba que era necesario terminarlo por la cercanía del invierno. Para ello era necesario 221 comprar 400 tejas para la cubierta, con un costo de 8 pesos. En la comunicación presenta un presupuesto para concluir el edificio, así como expone que "...todas las torres de los faros necesitan de reparo, lo mismo que el terreno de 'Punta Arena'... ...que se halla atacado por el flujo i reflujo de las aguas del golfo..." Por información posterior sabemos que no se realizó ninguna de las obras sugeridas. 155 Para el 29 de noviembre el Inspector escribía al Crnel. Gobernador, haciéndole conocer que hasta esa fecha no se había despachado la embarcación con la aguada, víveres y queroseno para el personal y los faros. Le hace saber que el último envío había sido hacía más de un mes y que, para ese momento, ya no tendrían abastos. Apela al Gobernador: "S. Sria. como buen Marítimo sabe de cuanta utilidad son estos Establecimientos al Comercio marítimo de nuestra noble y hermosa Ría..." Luego advierte al Coronel que "...salvo mi responsabilidad, si por la necesidad se ven los Empleados obligados ha avandonar esos Establecimientos." 156 El 3 de diciembre escribe al Gobernador por cuanto se ha dado la orden de suprimir a su ayudante, y pide se nombre de urgencia a otro ayudante que sea "..Jóven escribiente, que és de buena conducta, sin vicios, con buena letra y regular ortografía..." y propone un nombre para ocupar el cargo. 157 El 6 de diciembre no le habían nombrado el ayudante “escribiente,” pues la letra de la comunicación que pasa al Gobernador es la misma de la anterior. El portero de la Gobernación le había entregado al Inspector una comunicación, en la que se le reclamaba por la falta de luz en el Faro de Punta Arenas el día 17 de noviembre, y se le notificaba la destitución del empleado del faro por ese motivo. El Inspector lo justificó por cuanto ocurrió un daño al desoldarse la lámpara y le explicó detalladamente al Gobernador lo que implicó la reparación y el tiempo que tomó el trabajo. Como estaba teniendo problemas por cuanto el reglamento permitía al Gobernador nombrar los empleados sin consultarle, le dice lo siguiente: "...las grandes dificultades que se presentan en estos Faros modernos de máquina de Rotación que necesitan de mucho esmero y atención de los empleados... ...Esto ignoran muchos que aspiran á colocarse en estos Establecimientos." Sin duda quería que el Gobernador estuviera consciente de que no podía nombrar a cualquier persona a los cargos en los faros. 222 Esta buena defensa de los empleados experimentados ante el Gobernador eleva sus bonos como Inspector de Faros; sin embargo, lo que se cita a continuación, de la misma carta, nos vuelve a hacer dudar de su capacidad y conocimientos. Dice lo siguiente: "...y como estos Faros tienen ya once años de servicio continuos, no es extraño que deje, alguna vez, de verse la luz por corto tiempo." ¡Nadie puede estar más equivocado! La edad del aparato no es justificación para que se apague una luz, y once años no es nada para el tiempo de vida de un faro. No sabemos si la defensa del Guardafaro fue efectiva o si su destitución se mantuvo. 158 Para este año de 1883, Lucas Rojas ya tenía aproximadamente 73 años de edad y 53 años de servicio activo en la Marina Nacional, pero si bien la comunicación anterior es la última en que figura como Inspector de Faros, aún aparecerá más adelante en nuestro relato. Capítulo 22.- Trabajo Reglamentado Francisco Pacheco es el Inspector General de Faros. Nació en Guayaquil en 1827. En 1840 fue Guardiamarina en la goleta de guerra "Diligencia," a órdenes del entonces Capitán de Corbeta Lucas Rojas. En 1860 tiene el grado de Capitán de Fragata graduado. Fue Capitán del Puerto de Guayaquil. Se hizo cargo de la Inspección General de Faros en 1883, cargo que mantuvo hasta 1888. 260 y 390 Se Emite un Nuevo Reglamento para los Faros - 1884. El 20 de mayo de 1884, el Presidente Caamaño emitió un nuevo reglamento para los faros lenticulares y fanales de la costa. El reglamento lo encontrará entero en el Anexo “C.” Este reglamento era diferente al anterior en el sentido de que estaba clara la responsabilidad y línea de mando dependiente del Gobernador de la Provincia del Guayas, y establecía que los empleados lo eran de la aduana. La descripción de los servicios diurno y nocturno buscaba acabar con la falta de luz, estableciendo una clara responsabilidad. En cuanto al nombramiento de los empleados por parte del Ejecutivo, se repetía el mismo vicio de dar empleo por razones de padrinazgo, antes que por capacidad o conocimientos, y seguiría trayendo problemas. 159 223 Un problema que no se consideró fue la situación de los faros fuera de la Provincia del Guayas. El Inspector General dependía del Gobernador del Guayas, pero los faros de otras provincias estaban bajo la jurisdicción de los gobernadores de ellas. Esto haría difícil el mantenimiento regular y la reparación de esos faros, pues intervenían en las decisiones dos gobernadores y ninguno se quería hacer cargo de los gastos, aunque supuestamente el derecho de faro que se pagaba en el puerto debía servir para el mantenimiento del aparato específico. Sin embargo, parece que ese ingreso ya se había centralizado. Este reglamento, a diferencia del decretado por Pedro Carbo que cubría solo a Guayas, tenía vigor sobre toda la costa. El 2 de agosto de 1884, el Sr. Carlos A. Villena renunciaba al puesto de 1° Guardafaro del Faro de Punta Arenas, “Con el que fue honrado por el Supremo Gobierno” y el Inspector General, al informar al Gobernador, no perdía la oportunidad de enfatizar que: “Como para llenar la vacante que hai es necesario que el agraciado tenga las cualidades necesarias para el desempeño de ese destino, aprovecho esta oportunidad para proponer á US. Que el segundo empleado en el referido faro, Sr. Pablo Pacheco Vera, ascienda a 1° i el tercero, Sr. Delfin Sánchez á segundo.” Esta era una propuesta razonable, pues le estaba diciendo al Ejecutivo que se pusiera en los puestos de mayor responsabilidad a los que tenían experiencia. Por información posterior, parece que la sugerencia sí fue acogida. Por si acaso el Ejecutivo no tuviera alguien ya destinado, el Inspector General sugería un nombre para 3° Guardafaro, con la mayor delicadeza posible, para que el Ejecutivo no sienta lesionada su prerrogativa. Esta comunicación es la primera que tenemos firmada por Francisco Pacheco como Inspector General de Faros. 160 El nuevo Inspector General estaba preocupado por el estado de los edificios y, el 6 de noviembre de 1884, pasaba al Gobernador un informe en el cual presenta un presupuesto de reparación para la torre y la casa de empleados de Santa Clara, así como pide se termine el edificio de Santa Elena y mas que sea, como urgencia, que se tape el techo con planchas de zinc. 161 El Inspector de Faros presentó un pedido de $44.20 sucres a la Junta de Hacienda, en mayo de 1886, por la compra de útiles para un juego de velas para la balandra "Santa Clara." 508 224 En su informe de 1886 al Congreso, el Ministro del Interior dice lo siguiente: "En Noviembre del año próximo pasado el Excmo. Señor Presidente tuvo por bien disponer que en la extremidad oriental de la isla Chatam se colocase, para beneficio de los navegantes, una luz de puerto semejante á la que tenemos en Punta Mandinga; y los Cónsules de la República en Norte-América y Europa han publicado la disposición en muchos periódicos, á fin de provocar un concurso de empresarios. No se han recibido aún proposiciones para la realización de esa providencia." ¡Ni se recibirían! Y peor con los antecedentes que ya se estaba forjando la República por la mala atención que se daba a los faros. 509 El Personal de Guardafaros, Problemas Permanentes. En 1887 el Inspector General pasa un informe que nos da luces sobre los continuos problemas con el personal y la alta rotación en el personal de los faros. Era el 7 de enero de 1887 cuando informaba que el 2° Guardafaro de Santa Clara, Ignacio Mora, había abandonado su puesto cuando estaba con licencia el 3° empleado, por lo que quedó en el faro solamente el 1° Guardafaro. Mora se había puesto violento y había amenazado de muerte a sus compañeros. El Guardafaros 1° era Delfín Sánchez, quién en 1884 era Guardafaro 3° en Punta Arenas. Esto quiere decir que, en 3 años, había ascendido del último puesto en uno de los faros de 4° orden, al primer puesto en el faro de 3° orden, el más importante del país. De él el Inspector General tuvo esto que decir: “En cuanto á la conducta del 1° gda Faro Delfin Sanchez puedo responder, pues es el empleado mas antiguo y entendido que tenemos...” Esta alta rotación de personal hacía muy difícil el manejo de los faros. Aún así, aunque los guardafaros duraban poco, la duración de los Inspectores en el puesto era relativamente alta, lo que daba un cierto grado de estabilidad y continuidad al servicio. 162 Llegan y se Instalan Faros Nuevos y Refaccionados. La siguiente comunicación nos da información sobre los faros que se adquirieron en 1887, con el fin de reemplazar algunos que estaban deteriorados, e instalar nuevos. Francisco Pacheco comunica al Gobernador el 4 de mayo de 1887: “Tengo el honor de dirijirme á VS., poniendo en su conocimiento que los faros pedidos á Europa por conducto de los Sres. Stagg y Cia en 5 de Noviembre del año 225 próximo pasado por órden de VS. han llegado á este Pto, los que me han sido entregados por los dichos Sres Stagg segun factura que tengo en mi poder. Como con ecepcion del aparato luminatorio que ha venido para cambiarlo con el que existe en mal estado en Pta. Española; ignoro en donde deben ser situados los otros dos faros. Espero que VS. se sirva indicármelo, para proceder á su colocación, si lo estima por conveniente. Aprovecho de esta oportunidad para manifestar á VS. lo conveniente que seria establecer una luz de Pto en el punto denominado Data (costa de Posorja), para que les sirva de punto de demarcación á las embarcaciones menores que trafican en gran número por ese canal para la costa del norte; exponiéndose á graves siniestros por la falta de una luz en ese lugar, como ya ha sucedido en varias ocasiones. Para el efecto, el aparato luminatorio que se va á cambiar en Pta Española puede mui bien servir para colocarlo en el expresado Data á poca costa; pues esta Inspeccion gral de faros dispone hoy de todos los enseres necesarios para la concervacion de esta nueva lúz, que á mi juicio es de suma importancia...” Continúa la comunicación sugiriendo el establecimiento de un gravamen a las embarcaciones que se beneficien de esa nueva luz, para pagar su mantenimiento. El tenor de la comunicación nos indica que se pidieron y llegaron tres faros. Por comunicaciones posteriores se sabe que eran de 6° orden pero no es posible determinar el fabricante o el país de origen. 163 El 7 de junio de 1887, el Sr. Pacheco comunicaba al Gobernador que desde el día 1° de junio estaba funcionando el nuevo Faro de Punta Española “que sin duda es mui superior al anterior aparato; pues la lúz que éste despide no deja nada que desear en su clase que es de 6a órden.” Esto parecería un poco raro pues el aparato anterior era de 5° orden, según el pedido al fabricante. 164 El faro de 6° orden de Esmeraldas se encontraba en mal estado y los capitanes de buques que llegaban a ese puerto se quejaban constantemente de la pobreza de la luz o la falta de ella. Por esto, el Inspector General informa el 29 de junio al Gobernador y pide la autorización al Gobierno para pedir uno equivalente a Europa. En esa misma comunicación pide mechas y chimeneas para los faros de rotación. No sabemos por qué no se lo reemplazó con uno de los nuevos o por qué no se lo refaccionó. 165 El día 4 de julio de 1887 el Inspector General de Faros acusa recibo de oficio N°877, del 18 de junio, en que el Gobernador le comunica que el “Supremo Gobierno” ha aprobado la instalación del Faro de Data y él presupuesta el 226 costo “en estado de encenderse” en 250 sucres. También se da por enterado de la integración de la comisión que determinará la ubicación de los dos faros restantes. Esa comisión estaba conformada por Lucas Rojas, Capitán del Puerto de Guayaquil, los comandantes de los buques de guerra nacionales y el agente de la Compañía Inglesa de Vapores. Esta fue la última actuación registrada del CPNV Lucas Rojas. El faro que se instaló en Data era uno refaccionado y no uno de los nuevos. 166 El Ministro de lo Interior reportaba al Congreso de 1887 que: “Se ha reemplazado con uno de excelentes condiciones el de Punta Española, y ordenado la colocación de otros tres en los lugares convenientes de la costa ecuatoriana; con lo que el servicio de este ramo nada dejará que desear para seguridad del comercio interior y extranjero.” 167 En la Isla de Santa Clara, desde el 1° faro instalado en 1841, se construyó una casa al pie del lugar donde se acostumbraba desembarcar. Esa casa servía como sitio de alojamiento para el personal durante el día y para guardar los productos que se desembarcaban, y que luego se transportaban poco a poco hasta el faro. Ocasionalmente el mar dañaba esta construcción y el personal pedía su reparación. El 11 de agosto, Delfín Sánchez, 1° Guardafaro de Santa Clara pedía la reparación en el sitio de la playa, o la reconstrucción cerca de la torre del faro, usando los mismo materiales. Lo más lógico habría sido construir una bodeguita cerca de la playa y la casacocina al pie del faro. Recordemos que la torre del 2° faro se construyó para que el personal se alojara en ella y, de hecho, lo hicieron por algún tiempo. 168 De los tres faros importados, luego de instalado el nuevo en Punta Española, quedaban dos, pero con la refacción del viejo, habían tres. Entre agosto y septiembre de 1887 se cursaron varias comunicaciones en relación a la instalación de los nuevos faros. El 22 de agosto, el Inspector General informaba que la comisión había llegado a un acuerdo sobre los puntos de instalación (no los detalla). El 1° de septiembre, pedía se le facilite uno de los buques de guerra para la instalación, con el fin de economizar gastos; el 30 de septiembre, reportaba como instalados el de Data, que era el recientemente retirado de Punta Española, refaccionado, y el de Manta, que era el de Punta mandinga, refaccionado, sin mencionárselo aunque tenía mucho que ver en esto por lo que veremos más adelante. 227 El “nuevo” Faro de Manta empezó a funcionar el 20 de septiembre y el de Data el 8 de octubre. 169 al 172 El Primer Faro la Puerto A faro de las Islas Galápagos. Uno de los faros nuevos fue instalado en Chatham (San Cristóbal), en Chico. Éste fue el primer faro instalado en las Islas Galápagos. Isla los pocos días de instalado el nuevo en Punta Española, su cuidador renunció por razones de salud, eso sí ofreciendo sus “humildes servicios cuantas veces el Gobierno los necesite.” En otras palabras, no pudo soportar la rigurosidad del servicio, y esto es en un faro que estaba al pie de una población. Y resulta que la renuncia precedió el informe del Inspector General al Gobernador, en que informa que el Guardafaro había abandonado el puesto y que había puesto en peligro al vapor inglés “Manabí,” que estuvo en peligro de encallar. El Inspector General sugirió una persona de su confianza y residente en Puná, para llenar la vacante que se produjo. 173 174 En el Faro de Data encontraron que el encargado necesitaba una habitación para mantenerse durante la guardia, y el Inspector General pide al Gobernador, el 10 de diciembre de 1887, se provea esa necesidad. 175 A fines de 1887, se había determinado que la torre del Faro de Punta Mandinga necesitaba reconstruirse y el Inspector General Pacheco pidió al Gobernador la autorización. El 18 de enero de 1888 reportaba que la reconstrucción se había concluido y solicitaba la inspección por parte de una comisión de carpinteros, para que determinen “...si la obra de dicho faro esta bien ó mal construida, y si las maderas empleadas en ella son ó no incorruptibles.” La reconstrucción de esa torre costó 2.014,20 sucres. El 176 228 aparato del faro fue cambiado previa la reconstrucción, usándose para ello uno de los faros nuevos llegados en 1887. El aparato retirado de este faro fue refaccionado e instalado en Manta, como vimos más atrás. El 26 de enero renunciaba el 3° Guardafaro de Santa Clara, y otra vez el Inspector General propone una persona conocida por él, con la esperanza de que no se den los nombramientos a personas inadecuadas. 177 El Guardafaro de Data, Manuel Yépez, enfermó y tuvo que trasladarse a Guayaquil, dejando a cargo del faro una persona que él pensó lo sustituiría debidamente. Sin embargo, la persona no cumplió su cometido y la falta de luz generó quejas que llegaron de inmediato al Gobernador, quien escribió inmediatamente al Inspector General pidiendo cuentas. El Inspector General informa al Gobernador explicando la situación y justificando al Sr. Yépez. También hace saber al Gobernador que el principal denunciante, un celador a quién él conoce, quiere que se nombre en el puesto a un amigo suyo, que “...según informes que tengo, es tan beodo como el celador.” Insiste ante el Gobernador que “Convencido como estoi de la falsa imputación que se le hase á Yépez, i que solo se juega una intriga para conseguir el objeto que se proponen; ruego á Us. sostenga en su empleo al referido Yépez.” 178 El Faro de Santa Elena y su personal daban muy poco problema a pesar de haber quedado inconclusa la construcción de la casa, y recién en mayo de 1888 tenemos la primera comunicación que consta en los archivos. El 3° Guardafaro escribe al Gobernador el día 17 para reclamar que no le han pagado su sueldo por dos meses. 179 Informe de 1888. El informe del Ministro de Guerra y Marina ante el Congreso de 1888 incluía en anexo el presentado por el Jefe de la Armada Nacional, CPNV Nicolás Bayona Ors: Faros.- “Con los que últimamente ha decretado el Supremo Gobierno, tenemos: el de Santa Clara, el de Punta Arenas, el de Punta Española, el de Punta Puná (Mandinga autor) y el de Data en el canal del Morro en el Golfo de Guayaquil; al norte tenemos el de Chatan en la isla de Galápagos, el de Santa Elena, el del puerto de Manta y el del puerto de Esmeraldas, todos muy bien montados, menos el último que se reemplazará muy pronto con uno nuevo; así como se establecerá el de la isla de La Plata y el de Cabo Pasado; faltando sólo para que quede la costa bien 229 alumbrada un faro en Cabo San Francisco y una luz fija en la isla Sombrera de los bajos de Payana extremo sur de este golfo. Estos faros, para que sean bien cuidados deben destinarse de guardianes de ellos individuos que conozcan la importancia y utilidad de una buena luz para los navegantes; y, como esa importancia, nadie la conoce mejor que los marinos inválidos ó que tienen prestados algunos servicios á la nación; y teniendo el país tanta necesidad de marinos, fomentando ese cuerpo, debe el Supremo Gobierno dotar los faros que existan con los marinos que no tengan colocación en la Escuadra ni en las dependencias de la Comandancia General de Marina, sin reconocerles otro haber que el que les corresponde á sus clases, lo que daría por resultado alguna economía, estar mejor cuidados los faros y tener siempre pronto al servicio á los marinos destinados en ellos, cuando el Supremo Gobierno los necesitase. Estando estos marinos, como es natural, al corriente de las señales con banderas y demás del Plan Universal, bien se pueden establecer más tarde en los faros, estaciones semafóricas y evitar descuidos continuos que pueden traer malas consecuencias á la Nación.” 181 El informe no es exacto, pues crea la impresión errónea de que se estaban instalando solo faros nuevos, cuando se estaban reinstalando también equipos refaccionados. Este informe fue el comienzo de un esfuerzo que se continuó durante muchos años, para colocar marinos retirados, inválidos o sin destino, en los faros. Esta intención, aunque loable, tenía fallas básicas en su concepción. Si se trataba de inválidos o retirados por edad o invalidez, ¿cómo se podría esperar que cumplan con el riguroso servicio de los faros? Si se trataba de marinos sin destino en la Escuadra o la Comandancia, como sugiere el Ministro, ¿qué pasaba cuando esos marinos eran requeridos en puestos activos durante un conflicto bélico? ¿Se apagaban los faros mientras los marinos-guardafaros iban a la guerra? El informe del Jefe de la Armada, a su vez, estaba basado en el informe del Inspector General de Faros, Francisco Pacheco, quien dice lo siguiente al Cmdte. Gral. de Distrito y Marina: “En el año de 1883 que me hice cargo de la Inspección General de Faros por disposición del Supremo Gobierno no existían sino los de Santa Clara, Punta Arenas, Punta Mandinga, Punta Española, Esmeraldas y Santa Elena. De éstos los tres primeros en completo estado de abandono y destrucción, por cuyo motivo 230 ha habido necesidad de redificarlos totalmente. En el de Punta Española se han hecho las refacciones para evitar su deterioro. En el de Santa Elena se han concluido completamente las fábricas que se hallaban paralizadas; y, en tanto, el faro como el edificio, están en el mejor estado de conservación. Sólo el faro de Esmeraldas se encuentra en mal estado y hay que atender a su completa refacción; con este fin está listo el aparato iluminatorio (nuevo), que debe colocarse allí, en reemplazo del que existe. Merced a la decidida cooperación que el Excmo. Presidente de la República ha prestado y presta a todo cuanto tiende a la mejora material de la Nación; y al adelanto de su comercio y navegación, se han llevado a cabo estas obras y, además se han establecido tres faros nuevos, uno en Manta, otro en Data y otro en la Isla Chatam del Archipiélago de Galápagos También están listos a establecerse dos fanales más, de luz fija, en la isla de La Plata y en Cabo Pasado, lo que se efectuará tan luego como su Señoría ponga a disposición de esta Inspección General, cualquiera de los buques de la Escuadra, para conducirlos a los puntos designados. El estado actual de los faros existentes hoy en las costas de la República, con expresión de sus nombres, clases, posición topográfica, altura en la que se hallan, distancia del puerto de Guayaquil y número de empleados que los sirven es el siguiente:...” A continuación una muy completa lista de los faros, pero que contiene muchas fallas técnicas como esta: En el reporte sobre el fanal de Punta Española informa que “(la distancia) la que se alcanza a ver su luz es de 15 a 20 (millas)." Un fanal de 5° o 6° orden jamás llega a tal distancia. Si comparamos lo que dice para el Faro de Punta Arenas, que es una faro de 4° orden, “alcanzándose a ver su luz a una distancia de 15 a 20 millas,” podemos ver el error. Repite el mismo alcance de 15 a 20 millas para el Faro de Santa Elena, de 4° orden, e igual alcance para el fanal de Data, de 6° orden. Una confusión total que nos indica que, si bien es un informe muy completo, adolece de graves fallas técnicas que nos hacen dudar de los conocimientos del Inspector General sobre los aparatos a su cargo. 262 El 30 de agosto el Inspector General de faros informó al Gobernador accidental del Guayas: "Tengo la satisfacción de poner en conocimiento de U.S. que estoy de regreso de la isla de 'La Plata', en donde dejo colocado el faro que está destinado a dicha isla; después de vencer fuertes obstáculos por lo quebrado de su terreno y la gran distancia y altura en que está el punto designado para su colocación. Gracias a la buena voluntad del Señor Coronel Nicolás Bajaña y demás Jefes y Oficiales que tripulan el Crucero Naval de Guerra 'Cotopaxi', se ha podido 231 conducir con su tripulación, a la cima del cerro todo el aparato y material en el corto tiempo de tres días.- Después de la exploración de la isla para determinar el punto donde debiera colocarse el faro, se determinó la parte del norte, que es la más elevada, la que se calcula a mil pies de altura, poco más o menos, sobre el nivel del mar.- Como la altura que tiene el aparato del faro no es sino nueve metros, y según cálculos hechos por la comisión, se necesita aumentarle cinco metros más para que pueda verse la luz por parte del sur. Con este motivo hubo necesidad de acudir al puerto de Manta por la madera necesaria para formar la plataforma en la elevación de los cinco metros que eran necesarios, y como es natural, hubo aumento de gastos para su instalación.- Tan luego como tenga aviso esta Inspección por el guarda-faro que está encargado de la armada del expresado faro, lo pondré en conocimiento de U.S. para que se sirva comunicarlo a los cónsules residentes en este puerto, y a la vez al Supremo Gobierno, para que disponga el pago del derecho a que están obligados por la ley, todos los buques que entren al puerto de Manta." El Gobernador Drouet transcribió esta comunicación al Ministro de lo Interior y Obras Públicas. El 3 de octubre el Gobernador comunicaba al Ministro de lo Interior y OO. PP., que el Inspector General de Faros le había informado lo siguiente, mediante oficio del mismo día: "Tengo la satisfacción de comunicar a U.S., que, habiendo dispuesto el Supremo Gobierno la instalación de un nuevo faro en la isla de 'La Plata', éste está ya funcionando, desde el 20 del mes próximo pasado, siendo su luz roja, y cuya situación geográfica es la siguiente: Latitud 1°17' S. y Longitud 80°57' O.- Lo que me es honroso participar a U.S. para que lo ponga en conocimiento de quien corresponda. F. Pacheco" 390 390 Francisco Lecaro es el Inspector General de Faros. Francisco Lecaro no era marino, siendo el primer civil en hacerse cargo del Servicio de Faros desde el Ing. Fernando Dioudonnat. No sabemos si fue asimilado en la Armada o permaneció en calidad de civil, pero usaba el membrete de la Inspección General de Faros y se reportaba al Gobernador de la Provincia del Guayas. Por una comunicación sabemos que en esa época el cargo de Inspector de Faros estaba separado del de Capitán del Puerto de Guayaquil. Aparentemente, el Faro de Chatham, Galápagos, había sido instalado en un punto que resultó inconveniente y había generado algunas protestas. El Gobernador de la provincia del Guayas le había ordenado al Inspector General que realice el cambio a un lugar más adecuado. El Inspector Lecaro informa el 23 de febrero de 1889 que se puso de acuerdo con el Capitán de Puerto y el Sr. Manuel J. Cobos, quienes se 232 encontraban por casualidad en Guayaquil. El Capitán suministró buenos datos y se ofreció para encargarse del trabajo. En el informe adjuntó un presupuesto de gastos para la obra. El Sr. Cobos era un personaje controvertido que tenía mucha influencia en Chatham, y sus empresas agroindustriales eran importantes. Sus buques eran los más beneficiados por el faro. 182 Los Faros y los Desastres Naturales. Los faros, como el resto del país, no estaban exentos de los efectos de los desastres naturales. Hemos visto cómo las marejadas afectaban la construcción de apoyo del Faro de Santa Clara y cómo afectaban a todo el Faro de Punta Arenas. En marzo de 1889 ocurrieron varios movimientos sísmicos que afectaron al Golfo de Guayaquil y los dos faros principales. El Inspector General informaba al Gobernador el día 16 de ese mes: “Por parte oficial recibido con fecha 6 del pte. del guarda-faro del de Sta. Clara, me apresuro a poner en conocimiento de U.S. que la torre de fierro donde se halla colocado el aparato luminatorio, se han abierto las junturas de dicha torre a consecuencia de los fuertes temblores que hemos esperimentado en estos últimos días y se han roto algunos vidrios; así mismo en el faro de Punta Arenas se ha derrumbado mas el muro que lo guarda de las corrientes venciéndose éste un poco al Norte, como de igual modo la cocina de uso de sus empleados. En cuya virtud esta Inspección Gral de Faros, espera que U.S. en vista de lo expuesto ordene su pronta reparación por ser de urgente necesidad...” 183 La Balandra “Santa Clara.” En este período y probablemente desde que se aprobó el Reglamento de los Faros en 1884, el Servicio de Faros contaba con una balandra, denominada “Santa Clara,” para el abastecimiento de aguada, víveres, combustible y repuestos. El 16 de marzo de 1889 el Inspector General informaba al Gobernador lo siguiente: “Tengo el honor de poner en conocimiento de U.S. que la Balandra del Gobierno “Santa Clara,” que salió de este puerto el 28 del ppdo conduciendo los víveres, aguada y demas enseres para el servicio de los faros del golfo, ha sufrido algunas averías en el fondo del casco a consecuencia de haberse varado por motivo de la oscuridad de la noche, a la salida del estero de la isla de Puná donde fue a dejar kerosene y útiles para ese faro; y como ésta necesita sea recorrida á la mayor brevedad posible, puesto que mensualmente vá a los faros: espero que U.S. se sirva autorizarme para su pronta reparación.” 184 233 Para el 2 de abril el Inspector General reportaba que se había concluido la reparación de la balandra “Santa Clara” y quedaba “En perfectas condiciones para el servicio de los faros del golfo.” Aparentemente la reparación no fue muy buena, pues poco tiempo después se la reportaba como deteriorada, según veremos más adelante. 185 Los Problemas con el Personal de Guardafaros Continúan. La correspondencia del Inspector con el Gobernador durante los próximos dos años está dominada por los problemas de cambios y poca duración del personal, así como problemas por embriaguez, peleas entre los guardafaros, robo entre ellos y a los bienes del Estado, y hasta una muerte. 186 al 190, 192, 194, 195, 198, 201, 202 y 208 El Presidente Flores-Jijón Informa. En agosto de 1889, el Presidente Antonio Flores Jijón informaba lo siguiente al Congreso: “Colocado que sea el faro de Cabo Pasado en Manabí ... nuestra costa, hoy mismo la mejor iluminada de Sud-América, merced a los Presidentes García Moreno y Caamaño, ofrecerá cuantas facilidades son necesarias para la navegación.” El Presidente Flores decía una verdad muy grande, pues los dos presidentes mencionados habían hecho por la iluminación de la costa ecuatoriana lo que ningún otro. 251 234 Gabriel García Moreno en su primer período (1861), al refaccionar el antiguo faro; y, en su segundo período, al pedir los aparatos que conformaron el primer sistema de faros y otros adicionales. José María Plácido Caamaño al dictar el segundo reglamento de faros, concluir la instalación del Faro de Santa Elena, refaccionar algunos aparatos deteriorados y pedir varios aparatos, algunos de los cuales fueron instalados en el período de Flores Jijón. El 21 de septiembre del mismo año, a pocos meses de haberse reportado como reparada y “En perfectas condiciones para el servicio de los faros del golfo,” el Inspector reportaba al Gobernador que: “Habiendo hecho un viaje en días pasados á los faros de Punta Arenas y el Muerto, en la Balandra ‘Sta. Clara’ he tenido motivo de observar, que dicha embarcación se encuentra en muy mal estado y para salvar mi responsabilidad como tambien la vida de los tripulantes, creo de mi deber, poner este hecho en conocimiento de S.S. para que S.S. ordene al Sor Capitán del Puerto, que proceda á nombrar, los peritos que exige la ley, para que ellos practiquen un prolijo reconocimiento de la mencionada embarcación.” No sabemos si esta inspección se debía al mal trabajo realizado, pero obviamente éste había sido puramente cosmético y el Inspector había caído en un engaño. El día 7 de octubre reforzaba la comunicación anterior con un pedido urgente al Gobernador: “Incluyo a V.S. un pedido que es de urgente necesidad para la inmediata reparación del Faro de la Isla de la Plata y la Balandra Snta. Clara de propiedad del Gobierno y dedicada al servicio de esta Inspección. En el pedido solicito 4 trozos de alambre para vientos del referido faro cuyo alambre se haya en el Castillo de las Cruces á cargo del Jefe de la Escuadra. Sirvase U.S. recabar de la Comandancia General la orden para que dicho Jefe haga la entrega de dicho articulo. Como el pedido que hago a U.S. es de inmediata necesidad espero su pronto despacho...” 191 193 El Faro de Cabo Pasado se había planificado desde hacía algunos años, pero hasta 1890 no había sido instalado. El Ministro del Interior reclamó al Gobernador del Guayas mediante telegrama y éste se lo transmitió al Inspector General de Faros pidiéndole una explicación. El Inspector contestó al Gobernador el día 8 de marzo de 1890, en los siguientes terminos: “En contestación al atto. Oficio de US. Fha 5 del pte, N°339, en el cual se sirve transcribirme el telegrama N°13 fha. 12 de Fbro del H Sr Mtro. del Interior, relativo á pedir informe acerca de los motivos que yo 235 halla tenido para no haber colocado todabía el Faro del Cabo Pasado, me es grato decir á U.S. que, mi antecesor el Sr. Francisco Pacheco, me informó verbalmente de que, el Supremo Gobno. había ordenado, que el faro que se cambió en Punta Mandinga fuera puesto en Manta, í el de este, fuera colocado en el Cabo Pasado; mas, como el Supremo Gobno. no ha ordenado á un Ingeniero para que estudie el lugar en donde debe ser colocado y arregle el presupuesto de los gastos que deben emplearse en la colocación de dicho faro, he esperado la resolución de U.S. á este respecto para principiar la obra en referencia...” Añade al final que: “el faro se encuentra listo en Manta” Esta comunicación nos transmite información importante, pues nos indica que el Sr. Lecaro, a pesar de ser Inspector General de Faros, no estaba en capacidad para determinar el punto de colocación de un faro, y también nos indica que no tomaba absolutamente ninguna iniciativa, sino que esperaba que ésta sea tomada siempre por sus superiores. Ésto también nos aclara algo que no había sido indicado en el momento oportuno, y es que uno de los faros llegados en 1887 sirvió para la reconstrucción del Faro de Punta Mandinga en 1888, y el faro retirado, probablemente refaccionado, fue el que se instaló en Manta como si fuera nuevo. A su vez, ese faro retirado de Manta se debe haber refaccionado y es el que estaba listo para instalarse en Cabo Pasado. 196 Ahora bien, es necesario conocer que el alma del faro, que es el Lente Fresnel, puede durar muchos años si se cuida adecuadamente. Lo que se deteriora en los faros son los componentes metálicos y de madera, como las lámparas, los mecanismos de rotación, cuando los hay; el cuarto de la linterna, también conocido como armarín o armadura; las torres y otros componentes. De tal forma que, si el lente está en buen estado, se puede reconstruir el faro con los materiales adecuados y eso es, aparentemente, lo que se había hecho en algunos casos. La Jurisdicción del Inspector General y los Gobernadores. La Inspección General de Faros dependía del Gobernador de la Provincia del Guayas. Esta organización ponía a todos los faros de la República bajo el control efectivo del gobernador de una provincia, mientras que estos estaban repartidos en cuatro de ellas más el Territorio Insular. Una comunicación que trata de alguna manera esta situación le enviaba el Inspector General al Gobernador del Guayas el día 31 de marzo de 1890: “Tengo el honor de dirigir á U.S. la presente, refiriendome al contenido de una de 236 Esmeraldas, en que se me pone al corriente del mal estado del faro de ese Puerto, o sea de la casa cuyo edificio se encuentra bien deteriorado. Como entre otras cosas relativas á la refaccion de dicho edificio, se me pide enseres ó materiales para el servicio de dicho faro, asegurandome que no hay en esa Provincia para hacerlos comprar; creo de mi deber comunicar á U.S. este particular con el objeto de que de acuerdo con la lista adjunta si U.S. tiene abien ordenar se compre í se le remita por organo de la Gobernacion de dicha Provincia, al guarda faro respectivo para que mantenga en buen servicio el faro referido. Cuanto á la reparación del edificio, siendo como es tan pequeño, opino por que U.S. se sirva disponer que la Gobernación de Esmeraldas ordene su reparación por ser í estar aquel faro vajo su inmediata dirención, salvo el mas acertado dictamen de U.S.” Como se puede ver, la situación era confusa, pues en la práctica era el Gobernador del Guayas quien decidía, pero querían pasarle algo de la responsabilidad, especialmente la económica, al Gobernador de Esmeraldas. Es muy posible que el derecho por ese faro no lo recibiera esa gobernación, aunque se cobraba a los buques que entraban a ese puerto, por lo que es muy probable que no tuviera los recursos para costear el mantenimiento del faro. Posiblemente lo mismo le pasaba al Gobernador del Guayas y por ello no estaba dispuesto a correr con los gastos de otra jurisdicción administrativa. 197 Torre de Punta Arenas Deteriorada. La torre del Faro de Punta Arenas se había deteriorado mucho y en septiembre de 1889 se había aprobado su reconstrucción. El 16 de abril de 1890 el Inspector General informaba al Gobernador: “Muy grato me es participar á U.S. que habiendo principiado los trabajos en la construcción del Faro de Punta Arenas el 21 de Sete de 1889, estos han quedado terminados el 5 de abril ppdo. He inspeccionado muy cuidadosamente los trabajos aludidos, afin de que ya que la Nación siempre tiene que hacer fuertes desembolsos en la reparación de los faros, la obra de este sea eterna; y me es satisfactorio decir á U.S. que mis deseos se han cumplido, pues la obra que se ha hecho es solida y su construcción magnifica. Los gastos que se han hecho en maderas, jornales y útiles ascienden á $5460.- y soy de parecer que aun debía hacer que se le arrojen al rededor del muro, unas diez chatadas de piedra para que la obra quede completa; i ademas falta que pintar toda la torre.” Quien decía que la obra sería eterna y que era magnífica era el mismo Inspector General que había alabado el trabajo de reparación de la balandra 199 237 “Santa Clara,” para que pocos meses después se declarara que el trabajo no había servido. Desgraciadamente veremos, pocos años después, cómo se consideraba al Faro de Punta Arenas como en ruinas. Algo interesante de observar en esta comunicación es el comentario de las diez “chatadas” de piedra. Las chatas eran las embarcaciones más flexibles para el trabajo fluvial, y servían para todo tipo de transporte. Por otro lado, no se aprendía de la experiencia anterior, pues echar piedras sueltas alrededor del faro no servía de mucho, ni por mucho tiempo, pues la marea se las llevaba y desaparecían en cuestión de días. Como aparentemente no se había atendido el pedido del Guardafaro de Esmeraldas, el Administrador de Aduana hizo la siguiente gestión ante el Inspector General, y éste informaba al respecto al Gobernador del Guayas, el día 8 de mayo de 1890. El Administrador pedía se le remita a la Capitanía “una cantidad considerable de mechas y un par de lámparas para el faro ó fanal de este puerto.” 200 El 4 de junio, el Inspector General remitía presupuestos y pedía al Gobernador Caamaño solicite autorización al Supremo Gobierno para concluir la reparación del Faro de Punta Arenas y del de Santa Clara. Como las “chatadas” de piedras costaban 40 sucres, lo que se consideraba muy caro, proponía se manden “quince ó veinte valsadas, pues el muro con eso quedará perfectamente.” Desde fines de 1884 el Sucre ya era la moneda Nacional. 203 Incendio en Santa Clara. La casa de servicio del Faro de Santa Clara se incendió y se perdieron todos los enseres y útiles del rancho. El 10 de junio de 1890 el Inspector General informaba al Gobernador y pedía se “ordene el pago por Tesorería para la compra de dichos objetos, efectuándose en los mas necesarios para de este modo despachar inmediatamente la Balandra, inclusive los empleados, pues no puede permanecer sin servicio un faro de tanta importancia...” Esto quiere decir que el faro permaneció apagado por algunos días. 204 La balandra “Santa Clara” seguía prestando servicio, pero su estado no era bueno. El 23 de junio de 1890 el Inspector informaba al Gobernador haciéndole un recuento de lo hecho anteriormente e incluyendo el dictamen de la comisión que la había inspeccionado, que había sido terminante al declararla como “inútil y que no servía para nada.” Continúa: “...sinembargo de 238 ésto la mandé para ‘Punta Arenas’ y el ‘Muerto’ porque las embarcaciones que el Gobernador me dijo buscáse para que llevasen los víveres y el kerosine para los faros, pedían cuarenta sucres por cada viaje, y á la ‘Isla de la Plata’ sesenta; así es que habiendo regresado del viaje que la mandé sin novedad ninguna, le dije al Gobernador que era una lástima dejarla perder, pues con poco gasto se podía ir componiendo y de este modo dejarla en buén estado de servicio; creo muy bién, que en las composturas que se le han hecho hasta la fecha, no se han gastado ni ciento cincuenta pesos, con un ahorro para el Gobierno; de mas de ochocientos; en diez y seis viajes que ha hecho á la ‘Isla de la Plata’ y al ‘Muerto,’ desde la fecha que U.S. se fué hasta hoy: soy pues del parecer, que lo poco que falta que recorrer á la Balandra se haga mensualmente para que de este modo, no sienta el Gobierno el pequeño gasto que se hará, hasta dejarla en perfecto estado...” El informe del Inspector tiende a confundir al referirse al Gobernador y es que estaba informando al titular, Sr. Caamaño, y refiriéndose a gestiones realizadas durante un encargo temporal de la Gobernación por parte del Sr. Gómez. Los informes optimistas del Inspector Lecaro eran preocupantes, pues esto es lo último que sabemos de la balandra “Santa Clara.” 205 En julio le habían reclamado nuevamente al Inspector sobre la instalación del Faro de Cabo Pasado. El 13 de julio de 1890 le informaba al Gobernador que: “...el faro del Cabo Pasado aun no está colocado, porque habiéndose hecho la licitación en Manabi pa su colocación, tocaba á esa autoridad haberlo hecho fijar cuanto antes, ignorando los motivos de este retardo...” Luego añadía: “Este faro quedó depositado en Manta en las bodegas de los Sres. Rodrigo Cordova & Ca recomendado al Socio Gerente Sr. Pedro A Moreira actual Gobor de Manabi.” 207 Faro de Santa Elena Continúa con Problemas de Techado. El Faro de Santa Elena continuaba con los problemas en su techado. Recordemos que el Inspector había pedido planchas de zinc en 1884 para cubrirlo de manera temporal, hasta poder colocar el techado permanente. El 1° de octubre de 1890 el Inspector General informaba al Gobernador que, con fecha 18 de julio, el 1° Guardafaro le había escrito: “Hace más de dos años que cuando llega la época del invierno los empleados de este faro no tenemos donde guarecernos á consecuencia que el zinc que cubre el piso del torreón está todo picado y el agua filtra é inunda completamente toda la parte que habitamos. Esto á mas de que perjudica á nuestra salud, por otra parte deteriora y arruina el edificio, lo cual me parece que es un perjuicio para el Gobno. El techo de la cocina de esta casa también hace algún tiempo que no tiene teja ni nada...” 209 239 El Inspector pidió planchas de zinc para hacer la reparación del torreón y cubrir la cocina. El empleado también le pedía al Inspector una lámpara, pues la única con que contaban estaba dañada. El tenor de esta comunicación nos indica que el Gobierno, como de costumbre, estaba en penuria fiscal; pero de interés para el Servicio de Faros, es el hecho de que no se tenían los repuestos básicos en los faros, como era necesario para la continuidad del servicio, y al menos que se quejara un empleado, no se tomaban medidas necesarias para su bienestar y el buen cuidado de los establecimientos. Informe Ministerial de 1890. Con el fin de preparar su informe al Congreso de 1890, el Ministro de Guerra y Marina pidió al Inspector General de Faros, en abril de ese año, un informe sobre el estado de los faros. El Inspector le respondió el 26 de abril con un informe escueto, el que el Ministro presentó al Congreso. En el informe, el Inspector General indicaba que existían diez faros en la República: Punta Mandinga, Punta Española, Punta Arenas, Santa Clara, Data, Santa Elena, Isla de la Plata, Chatham, Manta, Esmeraldas, y, como número once, pero fuera del conteo, Cabo Pasado, que aún no estaba instalado. Según el Inspector todos, menos los que comentaremos abajo, estaban en buen estado. Faro de Punta Española: Necesita algunas refacciones. Faro de Punta Arenas: Falta pintarse y “echarle unas balzadas de piedra.” Faro de Santa Clara: Faltan ciertas refacciones de poco gasto, pero es necesario “hacer destruir el antiguo faro que amenaza venirse encima del nuevo.” Esta es la torre construida en 1841 por el Maestro Mayor de carpinteros de ribera, don Juan María Martínez y Coello. Faro de Esmeraldas: La torre necesita algunas refacciones. Algo curioso en el informe es que el Inspector, al describir los faros, se refiere a ellos por el número de “focos” que supuestamente tiene. En ningún manual de faros se refiere a la luminaria de ellos como “focos.” Como ejemplo citamos el informe de un faro: “Punta Mandinga. Con luz fija de dos focos y servido por un Guarda-faro con la dotación de $528 anuales; en buen estado.” 210 En este momento histórico cambió el Gobierno de Antonio Flores Jijón al de Luis Cordero Crespo. 240 Informe Ministerial de 1892. En el informe al Congreso de 1892, el Ministro informa en base al informe del Inspector General, fechado 1° de abril de 1892. Seguían los mismos diez faros más el décimo primero, de Cabo Pasado, que seguía sin instalarse. Reporta las siguientes novedades: Faro de Punta Mandinga: Hay suma necesidad de pintarlo para su buena conservación. Faro de Punta Española: Necesita algunas refacciones. Faro de Punta Arenas: “...falta que echarle unas pocas balzadas de piedra, pintar la torre y reparar la maquinaria. A pesar de la buena construcción del muro, el fuerte invierno y las grandes crecientes lo han desquisiado y se hace necesario una pronta reparación: le falta lámpara nueva.” Faro de Santa Clara: “También se hace necesario algunas refacciones en la maquinaria, además ha habido un fuerte derrumbe en el cerro, el cual ha destruido parte de la casa, dejando bastante maltratado el tanque de fierro; sólo falta pintar la torre y colocarle lámpara nueva.” La casa era la de servicio que estaba cerca del nivel del mar y el tanque era el de almacenamiento de agua. Faro de Santa Elena: “Sólo falta pintar la torre.” Faro de Chatham: “Le falta lámpara nueva.” Faro de Manta: “Este faro es uno de los mejores con que cuenta la República y se halla en muy buenas condiciones.” Este faro es el antiguo de Punta Mandinga, refaccionado, lo que lo convierte en el faro que estuvo instalado en Santa Clara, probablemente desde 1861. Como explicamos antes, si el alma del faro, que es el Lente Fresnel, está en buen estado, el resto es secundario. Faro de Esmeraldas: “Necesita lámpara nueva, y el edificio y la torre exije algunas refacciones.” Faro de Cabo Pasado: “Este faro se encuentra listo y próximo a ser colocado.” El Inspector General finaliza el informe indicando que es del parecer que “se deben de pedir unas 15 lámparas para reemplazarlas, á fin de que no se interrumpa el servicio, por falta de estas.” 211 Carta # 1391, Approaches to Guayaquil. La Hydrographical Office de la Marina de los EE. UU. publicó la carta de navegación #1391, actualizada hasta el año 1893. Esta carta cubre la zona de entrada a Guayaquil, y muestra varios detalles interesantes sobre los faros. Veremos detalles de la carta, de norte a sur. 546 241 Esta parte nos muestra la Punta Mandinga con la estación de los prácticos ubicada en Puná. Este faro era el primero que divisaban los barcos que salían de Guayaquil. ← “Luz fija blanca a 124 pies de altura, 10 millas de visibilidad.” Los bajos fuera de Punta Española se estaban extendiendo y así lo reporta esta carta. En la "Cabeza Norte" del Banco de Mala se haya marcada una boya con campana, sin indicar su color. Esta boya era una de las que no estaban físicamente en su lugar. → "Cabeza Sur" del Banco de Mala o Bajo de Afuera. Esta es la boya instalada en 1873, que aún existía. ← En Punta Arenas se contaba con otra estación de prácticos. Hay una boya de campana marcada, pero que no estaba colocada. Nótese las líneas de derrote marcadas desde el faro. Esta carta fue una de uso práctico. → El Faro de Jambelí, ubicado en la Boca del mismo nombre. Este faro tuvo oposición inicialmente por cuanto se creía que podría confundir a los navegantes en su ruta a Guayaquil. Cuando se demostró que no afectaba y pudo funcionar de manera rutinaria, ayudó mucho a la navegación interior hacia Santa Rosa. ← 242 El Faro de Santa Clara estaba marcado con sus características originales a peasar de su actual condición. Este era otro punto, el principal, para marcar el derrotero de los buques que entraban hacia los puertos del Canal de Jambelí y el río Guayas. Su posición lo convertía en puerta de entrada a Guayaquil. → Una Polémica por la Prensa – Santa Clara Apagado. En su edición del 14 de enero de 1894, el periódico “El Tiempo” de Guayaquil, publicó una carta en la cual el Capitán del vapor “Mapocho” se queja por la falta de luz del Faro de Santa Clara. La carta en sí es un relato de la experiencia vivida por el “Mapocho” debido a la falta de luz, lo que demoró su entrada al puerto de Guayaquil, ya que tuvieron que venir realizando sondajes cada cierto tiempo. El Capitán MacDougal no pudo poner su queja ante el Capitán del Puerto por encontrarse ausente, de tal manera que la presentó al Gobernador, sin hacerle comentario previo alguno al Inspector General de Faros. La queja llegó a manos de un reportero de “El Tiempo” y lo duro fueron los comentarios del reportero, que ponían en mal predicamento al Servicio de Faros y al Gobierno. Decía el reportero: “Grave, muy grave es la falta, y esperamos que el señor Gobernador de la Provincia impondrá un severo castigo á los negligentes empleados del faro de Santa Clara, que así exponen á los navegantes á conflictos desastrosos. ¿Quién sería responsable hoy de la pérdida del ‘Mapocho’, por ejemplo, que en busca del faro para orientar su rumbo hubiera ido á escorar contra la Isla, sí su previsivo capitán no contiene el andar del buque y se amanece en el puente hasta evitar el peligro? De gran trascendencia es la falta cometida y el señor Inspector General de faros debe ser muy escrupuloso en el nombramiento de sus empleados subalternos, á fin de que en adelante no haya lugar á quejas como la que nos ocupa. El Gobierno, por su parte, debe rentar muy bien á los empleados de faros. 268 243 Éste fue un reportaje de lo más injusto para con el Servicio de Faros, pues el periodista no se había informado bien de las circunstancias, ni conocía las realidades del servicio, pues como ya sabemos, los empleados eran nombrados por el ejecutivo, sin consultar al Inspector General, y hemos visto sus tribulaciones con personal inadecuado que él no había contratado. El Inspector no se quedó callado y envió de inmediato una aclaración al periódico, la que fue publicada el día 18 de enero. Ante esta aclaración, el reportero escribía: “Servicio de faros.- Mucho hubiéramos deplorado que una punible negligencia del señor Inspector general de faros fuera la causa de lo ocurrido con el Faro de ‘Santa Clara’, y teníamos inclinación á creerlo así, en vista de los datos que se nos han suministrado y que nos dieron tema para el suelto que sobre el particular publicamos ayer (fue el día 14 autor); pero informados como hemos sido en la tarde de ayer de que la embarcación con agua, víveres y kerosine había sido despachada en tiempo oportuno y que sino había arribado á la Isla, antes del día 10, fué por falta de viento favorable, cumplimos con el deber de retirar los cargo que habíamos hecho, puesto que de lo acaecido no tiene culpa alguna el señor Inspector, desde que no ha habido negligencia ni atraso de parte de él en el envío de la embarcación destinada á la provisión de los faros...” Más adelante el periodista dice: “Todo se debe á la falta de viento, y de esto debe tomar nota el Gobierno, para disponer que la provisión á los faros de Santa Clara y la Plata, se haga por embarcaciones á vapor, á fin de que no se repitan accidentes como este último.” Se publica también la carta que pasó el Inspector al Gobernador, explicándole lo ocurrido, que sintetizamos así: En efecto, la embarcación con aguada, víveres y combustible no llegó a tiempo al faro por falta de viento, lo que causó la desesperación de los empleados. El Sr. Valens, 1° Guardafaro, había salido a buscar ayuda y había desaparecido. El día 11 había salido el 3° Guardafaro porque “estaba pereciendo.” En ese momento no había 2° Guardafaro, de tal forma que el faro quedó abandonado. La chata “Zoila Mercedes,” con las provisiones, había salido el día 6 de Guayaquil, pero hasta el 11 no había arribado. El Inspector le repitió por escrito al Gobernador algo que le venía diciendo: “Verbalmente he manifestado á U.S. la conveniencia de que dicho servicio sea hecho por el crucero ‘Cotopaxi’ ó la cañonera ‘Tungurahua’ y hoy en vista del fracaso sensible que deploro, me permito, suplicarle á fin de q’ disponga para que en lo sucesivo, sea llevado á cabo por uno de los buques á vapor de la Armada Nacional.” Aquí no debemos olvidar la carta que enviara el Presidente García Moreno en 1875, a través del Ministro de Hacienda, al Gobernador del Guayas, 269 244 insistiendo en el uso de un “bote de vapor” para el abastecimiento de la farola de Santa Clara. El hecho de que se continuaba contratando chatas demostraba que no se había aprendido de la experiencia y que el Servicio de Faros sufría las penurias del fisco, sin tomar en cuenta que el “Derecho de Faros” debería proporcionar los recursos para su mantenimiento. 280 El día 15 había aparecido el Sr. Valens, 1° Guardafaro, quien relató la odisea que había pasado en la balsa en que pretendió llegar a tierra firme. Había sufrido la misma falta de viento que había aquejado a la chata de abastecimiento y había sido rescatado por un buque. 270 En 1894 el Ministro de Guerra y Marina reportaba al Congreso: “El informe emitido por el Sr. Inspector de faros es muy circunstanciado y da perfecto conocimiento de los diez con que cuenta nuestra Costa. Estos tienen la denominación de los lugares en donde se hallan colocados, y son los siguientes: De Santa Clara.- De Punta Arenas.- De Punta Española.- De Punta Mandinga.De Santa Elena.- De data.- De Chatam.- De la Isla de la Plata.- Del Puerto de Manta.- Del Puerto de Esmeraldas. Todos se hallan en buen estado de servicio y bien montados. Además tenemos el de Cabo Pasado que no se coloca aún, sin embargo de que todo está listo, hace tiempo, para el objeto, según el decir del mismo Sr. Inspector. Pero se han dado ya al Sr. Gobernador de Manabí ordenes precisas, y no dudo que bien pronto será una realidad esta mejora, para el servicio de la navegación en nuestras costas.” Sin embargo, en el Anexo H de este informe, el Inspector da cuenta de algunas novedades: Faro de Santa Clara: “...es indispensable reconstruir la casa que se halla en completa ruina á causa de un desplome del cerro.” Esto es repetición del informe de 1892, lo que quiere decir que, en dos años, no se habían realizado los arreglos. Faro de Punta Arenas: “Se encuentra recién compuesta su maquinaria, y el faro en su mejor estado de conservación y solidez...” Esto lo hacemos notar por lo que, en un año, dirá otro Inspector al respecto. Faro de Santa Elena: “Este faro necesita reparar su máquinaria que hace más de 14 años que trabaja y hay algunas piezas que necesitan refacción, su edificio se halla en buen estado.” Faro de la Isla de la Plata: “...este faro necesita repararse formalmente por estar en muy mal estado de conservación...” 245 Faro de Cabo Pasado: “La Gobernación de Manabí se ha encargado de orden del Supremo Gobierno de convocar licitadores para su colocación, ignoro la razón que haya para no haberse puesto aún, á pesar de estar concluida la casa que servirá de habitación al guarda-faro que le custodie. El faro existe depositado en las bodegas de Aduana en Manta.” Nos abstendremos de comentar este informe, pues ya hemos comentado los anteriores del mismo Inspector General, y en realidad no hay mayores cambios en su forma de administrar el Servicio de Faros. 212 Fernando Pareja es, por breve tiempo, Inspector General. El Sr. Fernando Pareja fue otro civil que se hizo cargo de la Inspección General de faros. De él no tenemos mayor información, salvo la correspondencia del Servicio. Recordando el comentario de aquel reportero que criticó severamente al Inspector y al Gobierno, en el sentido de que “el Gobierno, por su parte, debe rentar muy bien á los empleados de faros,” conoceremos la siguiente comunicación. El H. Concejo Cantonal había resuelto proveer gratuitamente de agua potable a los buques de la Armada. El Inspector General, Sr. Pareja, pedía al Gobernador el 16 de enero de 1895, que gestione para que esa orden se haga extensiva a los empleados de los faros de Santa Clara, Punta Arenas y La Plata, “...ya que las circunstancias especiales en que se hallan y lo exiguo del sueldo que perciben los hacen á mi juicio acreedores á esa gracia.” 213 El Ecuador en Chicago, 1894. Como memoria de la Exposición Mundial realizada en Chicago, Illinois, EE. UU. se publicó, en 1894, un libro sobre el país, que contenía una enorme cantidad de fotografías, de lo mejor del Ecuador. La página 56, reproducida a continuación, contenía servicios públicos ubicados en el Cantón de Santa Elena. Esta página tiene dos errores: La foto que consta como del Faro de Santa Elena, es del Faro de Santa Clara. Este error fue la causa de que, por muchos años, se confundiera el Faro de Santa Clara por el de Santa Elena. Algunos historiadores hasta lo consideraron "el primer faro de Santa Elena," pero el único que había existido hasta entonces era "el segundo." Éste fue, probablemente, un error involuntario, que sin embargo causó siempre confusión a quienes investigaban la historia marítima. Era raro que existieran dos fotos del Faro de Santa Elena y ninguna del Faro de Santa Clara, hasta entonces el más importante del país. El segundo error es que los dos faros no están en el cantón Sta. Elena. 246 Capítulo 23.- La Etapa Liberal El año de 1895 fue de mucha agitación política. El 5 de junio triunfaba la revolución liberal y se desmontaba la estructura del antiguo Estado. El Reglamento de los Faros, emitido por Caamaño en 1884, quedó insubsistente pero sin reemplazo formal, por lo que, en cuanto no se opusiera a los designios liberales, se trabajaba con él. Francisco Fernández de la Madrid Bello es Inspector General. Nació en Quito en 1846. El año de 1862 sentó plaza en la Armada con la jerarquía de Guardia Marina. En 1863 consta como Alférez de Fragata a bordo de la goleta de guerra "Salado," cuando contaba 17 años de edad. 247 Desde 1864 "Salado" Al Puerto consta como Segundo Comandante de la misma goleta con el grado de Alférez de Navío. En el mes de septiembre es trasbordado al vapor "Guayas" como oficial de cargo, permaneciendo en ese destino hasta junio de 1865. En 1871, consta como Teniente de Fragata y con letras de retiro y asignación anual de 400 sucres, en el distrito de Quito. En 1894 lo encontramos en el escalafón con el mismo grado. producirse la transformación liberal el año de 1895, fue nombrado Capitán del de Guayaquil, con el grado de Capitán de Navío, cargo que ocupó hasta 1908. Ocupó también el cargo de Inspector General de Faros durante ese período. Pasó al retiro efectivo en 1911, pero gozó de beneficio de retiro desde el 4 de junio de 1910. Falleció en Quito, donde fue sepultado. 230 y 391 El Capitán del Puerto de Guayaquil se hizo cargo de la Inspección General de Faros y en el mes de noviembre presentó un informe al Comandante de Armas y Marina. “Señor General: Encargado de la inspección de faros he procurado que el buen servicio corresponda á los deseos del Supremo Gobierno y a las conveniencias y seguridades de la navegación de nuestra costa y golfo; por los informes que constantemente pido á los señores capitanes de los vapores y veleros que arriban á este puerto, creo haber conseguido mejorar tan importante servicio, sin demandar gastos al Erario, y debido solo al esmero y puntualidad de los señores guarda faros; mas siendo notorio que nuestros faros han estado muy desatendidos durante una larga y aciaga época, en consecuencia están muy deteriorados y demandan urgentes é imprescindibles reparaciones ya para evitar su ruina, ya para ponerlos en el buen pié de la conservación que corresponde á su importancia; vengo á pedir á U que se sirva recabar del señor Ministro de Fomento y Obras Públicas que se digne disponer lo conveniente para que se realicen las obras siguientes:” A continuación detalla reparaciones que deben realizarse en los faros de Punta Mandinga, Punta 271 248 Española, Punta Arenas*, Santa Clara, Santa Elena, La Plata y Data. Este informe fue publicado en “El Nacional,” el 16 de noviembre de 1895. * Esto contradice el último informe del Inspector Lecaro, que decía, en 1894, que el Faro de Punta Arenas quedaba en buen estado. En el lapso de un año no ocurría el deterioro reportado por el nuevo Inspector General. En su informe a la Convención Nacional en 1896, el Ministro de Hacienda reportaba el siguiente gasto para los faros entre junio de 1895 y julio de 1896: $17.049,73. El Ministro de Guerra y Marina informaba con el texto del informe del Capitán del Puerto de Guayaquil: "El Ecuador puede ufanarse de que su costa, y especialmente el Golfo de Guayaquil, están bien servidos en este importante ramo: ha establecido y tiene en buen servicio los siguientes faros:" Continúa con el listado y descripción de cada uno, dando información erronea y antojadiza en cada uno. Como ejemplo, el primero, de Santa Clara, se clasifica como de 2° orden y visible a 28 millas, un alcance que jamás tuvo. La altura es, supuestamente, de 132½ pies, lo que es totalmente equivocado. La lista continúa y lo único positivo del informe es el pedido de reparaciones para todos los aparatos, que estaban en estado de abandono a pesar de contar con la dotación de Guardafaros. Se advierte la ruina del de Punta Arenas por la erosión de las bases y se sugiere su traslado a "un lugar inmediato y bien elegido." También se critica fuertemente la concesión del Faro de Santa Elena pues "...este faro ha estado servido por contrata y tan mal, que no solo hubo frecuentes quejas por falta de luz, sino que terminado el contrato en Setiembre 30, se ha recibido con notables desperfectos en su maquinaria, y en el edificio." El listado de los faros es el siguiente: Santa Clara, Punta Arenas, Santa Elena; y, fanales de: La Plata, San Cristóbal, Data, Punta Española, Punta Mandinga. No se mencionan Manta y Esmeraldas y se sugiere instalar otras luces en Punta Salinas (Puná), Isla Verde, Punta de Piedra y Sono. En cuanto a las boyas, solo existían tres de campana, reparadas. Las de balsa, colocadas en 1874, por razones obvias de durabilidad, habían desaparecido hacía mucho tiempo. La boya de campana de Atacames no se menciona. El Capitán del Puerto sugiere la colocación de algunas boyas adicionales. Es interesante anotar que, a pesar del informe del Capitán y del Ministro, el Faro de Santa Elena se volvió a concesionar, con resultados parecidos. 510 511 Para 1897 la organización del Gobierno liberal seguía en proceso de desarrollo y la Asamblea Nacional dictó dos leyes y un decreto que tenían 249 relación con los faros. Estas leyes y el decreto se emitieron sin tomar en cuenta la existencia del Reglamento de Faros de 1884. Leyes que Afectaban a los Faros. Ley de Presupuesto. El 4 de junio de 1897 se emitió un Decreto Legislativo con la Ley de Presupuesto para 1897 y 1898, que fue publicado en los Registros Oficiales números 392, 393, 394 y 395, del 19 de junio. Los faros están bajo la Sección correspondiente al Ministerio de Hacienda, en el Capítulo V de Aduanas. En los ingresos se presupuesta $10.000,oo por concepto de derechos de faros por cada año del bienio. En los egresos consta el rubro de Faros, de la siguiente manera: 315 FAROS Art. 92. Un Inspector General de Faros 4 Guarda-Faros de 1a c/u 8 id. id. de 2 a c/u 8 id. id. de 3 a c/u 8 id. id. de 4 a c/u Sostenimiento y servicio de los Faros existentes Para la instalación de cinco fanales en Punta Salma, Isla Verde, Sono, Punta de Piedra y Cabo Pasado Para un Faro en el Cabo de San Francisco Para un Faro en la Punta de Jambelí $100 $100 $80 $60 $50 $500 Total $1.200 $4.800 $7.680 $5.760 $4.800 $6.000 $4.000 $4.000 $4.000 $42.240 Como vemos, había un déficit considerable en la operación anual de los faros. Este presupuesto es particularmente interesante por la definición de nuevos puntos para instalar faros y fanales (luces de puerto), tal cual consta en el cuadro, y la reiteración de la instalación del Faro de Cabo Pasado, que hasta ese momento no había sido instalado, a pesar de haber estado listo para serlo durante algunos años. En otros artículos de esa ley no se mencionan los faros, ni siquiera en la Sección X que corresponde a Guerra y Marina, bajo el Capítulo de las Capitanías de Puerto. Algunos historiadores han escrito que en 1897 se decretó la instalación de varios faros pero en los decretos emitidos ese año no existe uno con ese tenor, siendo la única mención de esos faros la contenida en esta ley. 250 Ley de Aduana. La Ley de Aduanas fue decretada el 24 de junio de 1897 por la Asamblea Nacional y publicada en los Registros Oficiales números 397 al 400 del 26 de junio de 1897. Solo hay dos menciones a los faros. El Artículo 153 dice: “Todo buque de vela que entre a los puertos de la República, pagará por cada tonelada de registro, el impuestos de cinco centavos de sucre por cada luz ó faro de los que se hallan establecidos en los puertos donde entraren. Y el Artículo 154 dice: Los buques de vapor pagarán la mitad del impuesto anterior. Lo interesante es que los empleados de los faros constaban en la Ley de Presupuesto como empleados de la aduana, pero en todo el articulado de esta Ley de Aduana, las anteriores son las dos únicas menciones sobre faros, y no se detallan funciones a pesar de que sí se lo hace con las funciones de otros cargos en las aduanas. Esto nos demuestra una falta de coordinación interna en la elaboración de las leyes. En el caso específico de los faros, creó confusión y ayudó al deterioro del servicio. 316 Decreto Elimina la Inspección General de Faros. Dicen algunos historiadores que la Asamblea Nacional decretó la eliminación del puesto de Inspector General de Faros en 1897 y encargó ese puesto al Capitán del Puerto de Guayaquil. Si bien no hemos encontrado tal decreto en la revisión realizada a los decretos de ese año, fue un hecho que se dio en la práctica. Este acto anuló automáticamente el Reglamento de los Faros que dictó José María Plácido Caamaño en 1884; sin embargo, la Asamblea no reemplazó el reglamento que quedaba insubsistente, por lo que el servicio quedó sin una reglamentación clara para su operación. Si bien no hay información específica de como se manejaron los faros luego de expedidas las dos leyes y el posible decreto anteriormente expuestos, estos siguieron operando a cargo del Capitán del Puerto. La situación no debe haber sido buena, pues a pesar de la experiencia negativa, remataron la operación del Faro de Santa Elena. El Capitán del Puerto de Guayaquil, Francisco Fernández de la Madrid, escribe al Gobernador del Guayas el 26 de febrero de 1898: 251 “Tengo el honor de comunicar á U. que: en ésta fecha comisiono al señor Capitán del Puerto de Ballenita para que presida los inventarios de la entrega del Faro de la Punta de Santa Elena, que debe hacerse, el 1° del próximo mes de Marzo, al señor Dn. Franco J. Landin, en virtud del contrato celebrado por el Supremo Gobierno, para el servicio de ese faro. Desde el 1° de Marzo quedará ése Faro á cargo del Contratista, y aunque relevado de toda responsabilidad, vigilaré su servicio, y comunicaré á Ud, todos los informes que reciba de los Capitanes que pasen al alcanse de su lúz, y muy especialmente los del señor Ayudante de ésta Capitanía, que actualmente inspecciona el servicio de los faros...” Por esta comunicación sabemos entonces que el Capitán del Puerto de Guayaquil había delegado el cargo de los faros en un ayudante, para el cual no se había contemplado un sueldo en el escalafón o responsabilidad formal, a más de lo que debe haberle delegado su jefe inmediato. 214 El 1° de marzo, de acuerdo al encargo delegado, el Capitán del Puerto de Ballenita, Sr. Lázaro L. Gómez, entregó a Francisco J. Landín el Faro de Santa Elena mediante un detallado informe. De interés en el informe es el hecho de que el techo seguía siendo un problema, pues filtraba el agua a los pisos inferiores. Desafortunadamente, el inventario no nos da mayores detalles sobre el aparato del faro, a más de una descripción muy general y del número de lámparas, mechas y otros suministros. Informes de 1898. Del Ministro de Hacienda: Comenzaba su informe indicando que: "La situación fiscal de la República está, como bien lo sabéis, muy lejos de ser desahogada." En cuanto a los faros específicamente, reportaba: "Su producción de 1897 ha subido á $14.966,37. El gasto que este servicio causa no está tampoco en relación con sus rendimientos; y como se hace preciso, además adquirir nuevos Faros y Boyas que hagan nuestra costa de más fácil navegación, os indico la conveniencia de elevar á 7½ centavos por tenelada el impuesto vigente." 512 Del Ministro de Guerra y Marina: Un Inventario muy completo, pero con fallas importantes: Para el Informe que el Ministro de Guerra y Marina dirigió al Congreso de 1898, el Capitán del Puerto de Guayaquil presentó un prolijo inventario de 252 los faros instalados y un proyecto de faros y boyas a instalar. Sin embargo este informe, en cuanto a los faros de rotación, tiene fallas graves y preocupantes por ser presentadas por un marino y Capitán de Puerto. A continuación citamos algunas partes de ese informe y hacemos notar las fallas: Faro de Santa Clara: “Este árido y estéril islote de 2 kilómetros de largo por 1/10 de ancho, y 225 pies en su mayor alto, situado casi en el centro del hermoso golfo de Guayaquil, es el más importante punto de marcación para las naves que han de internarse á la ría del mismo nombre, y por esto, y porque está rodeado de escollos, el faro que le corona es el más importante y útil que tiene la República.” Sigue: “...Es de segunda orden, giratorio, con luz blanca; hace su revolución en cuatro minutos, y centellea cada veinte segundos, visible á...” Continúa más adelante: “Su presupuesto de... ...y fletes de embarcación que conduce las provisiones y agua cada mes...” Y agrega: “Para habitación de los Guardas se construyó en 1896, una casa con tres departamentos, y una cocina á sotavento; pero por escacés del Erario, no se completaron las reparaciones que demandan su maquinaria y su torre según presupuesto N°1; en que recomiendo el pedido de los 20 cristales planos, que son de necesidad inaplazable y la construcción del estanque para la provición de agua potable.” Las fallas graves del informe están en la luz, que es el objeto del faro. El informe dice: “...hace su revolución en cuatro minutos, y centellea cada veinte segundos...” Si esto era verdad en ese momento, el faro no estaba iluminando de acuerdo a su diseño, ni a lo registrado en la Lista Mundial de Faros, ni a lo especificado en las cartas de navegación, pues la característica del faro era de una revolución cada seis minutos y un destello cada 30 segundos, con eclipse parcial entre destellos. Esta era una diferencia muy grave y nos sorprende que el Inspector lo reportara como algo normal. Una señal de desconocimiento técnico de la Capitanía es que se describe al faro como de ”segunda orden,” cuando se sabía muy bien que era de tercer orden. El pedido de los 20 cristales por “necesidad inaplazable” nos indica que el cuarto de la linterna estaba sin los cristales protectores del lente, por lo que éste estaba a la intemperie, por lo que se debe haber afectado su funcionamiento y requerido frecuente limpieza. Esta es una buena razón para la rotura de las chimeneas de cristal, pues la corriente de aire tiene que ser bien controlada, y una corriente fuerte rompe las chimeneas por la diferencia térmica. 220 253 La declaración de que por escasez del Erario no se habían completado las reparaciones que demandaban su maquinaria y su torre, nos hace pensar en el último informe del Inspector, en 1895, en que declaró prácticamente lo mismo, por lo que era obvia la falta de recursos que aquejaba al Servicio. También es de importancia la mención del presupuesto para fletes, pues se continuaba con el problema de no contar con una nave propia para el Servicio. Faro de Punta Arenas: “...es un faro de tercera orden de luz roja, giratorio, con eclipses de cuarenta y cuatro segundos en cada minuto...” Sigue: “Esta torre está en eminente peligro de desplomarse...” Continúa: “...y como las maderas del que existe poco ó nada servirán para la nueva, recomiendo que en vez de hacerla de madera, se pida á... ...una torre de fierro.” Este faro, como sabemos, era de cuarto orden, no de tercero. El ciclo está bien, pero no menciona el destello de 16 segundos. En cuanto a la torre, se trata de la obra que, hace apenas ocho años, en 1890, había sido calificada por el Inspector General Francisco Lecaro como “eterna, sólida y su construcción magnífica.” 199 Faro de Santa Elena: “...sobre una torre cuadrada, en que están inconclusos los pisos interiores; su luz blanca, con eclipses de tres segundos, seguidos de focos de lus brillante de cinco segundos, cada medio minuto...” Estas características son ligeramente distintas a las que consta en la Lista Mundial de Faros, lo suficiente para poder causar una confusión fatal. La Lista dice: “Luz fija de 50”, eclipse de 3”, destello de 4” y eclipse de 3.” Sin embargo, la Lista lo clasifica como un faro de comportamiento irregular. Luego continúa con dos párrafos en que trata el asunto del contrato de mantenimiento de este faro: “Como que el edificio y maquinaria tienen 16 años (esto está equivocado, pues son apenas diez años) menos que los otros, están mejor conservados; y muy conveniente sería hacerles algunas reparaciones, y concluir el tablado de los pisos interiores...” “Respecto al servicio por contrata, sin que tenga ninguna queja del actual contratista, seame permitido manifestar que no conviene, por regla general, que servicios que demanden esmero y vigilancia se confíen á una sola persona, que prevalida de un contrato y contando con que la rescición demanda pruebas judiciales imposibles en unos casos y difíciles en otros, se procura el mayor lucro, con perjuicio del buen servicio. En el caso actual el faro estuvo servido por tres empleados: 2° 3° 4° y cuyas asignaciones integras importaban $190: estos que sabían que una falta se castigaría 254 con la destitución sin necesidad de pruebas judiciales, por interes de conservar sus puestos, se interesaban en servirlos bien: el contratista no tiene empleados; sirve el faro solo, con la ayuda de un niño; no puedo acusarle de mal servido, porque como contratista me exigiría las pruebas judiciales, pero tengo la certidumbre que la vigilancia de uno no puede ser la de tres que se alternan durante todas las noches del año, cada cuatro horas. Fanal de la Isla de la Plata: “La plataforma que sostiene el faro y la casa habitación están en mal estado; sus estantes, riostras, barrotes y cuerdas podridas ó apolilladas, y las paredes destruidas...” “Si se ha de reedificar es preferible trasladar el fanal al Cabo San Lorenzo...” Este faro había sido calificado como en buenas condiciones en 1892. Fanal de Punta Española: “El edificio es de pésima madera, y se encuentra en mal estado; demanda reparaciones urgentes...” Este faro había sido reconstruido en 1887. Fanal de Punta Mandinga: “...refaccionado en 1887; pero la mala calidad de las maderas empleadas, hace necesaria una formal reparación, principalmente en sus pisos bajo y alto y en la cúpula que están podridas” Sigue: “Este fanal lo mismo que el de Punta Española, están situados sobre terreno de propiedad privada, lo que frecuentemente da lugar á disputas entre los propietarios y los Guarda-faros: es muy conveniente votar la cantidad de $300 y ordenar la expropiación de las respectivas areas de terreno, ocupadas por los referidos faros.” La referencia a la “cúpula” nos indica que aún existía el cuarto de linterna del faro original de 1841, y que el faro de 6° orden se lo alojaba dentro de ella. La nueva alusión a la mala calidad de las maderas pone en predicamento la integridad del Inspector Francisco Lecaro, pues él había asegurado que en las reparaciones realizadas entre 1887 y 1888 se habían usado las mejores maderas incorruptibles. Fanal de Data: “La plataforma que sostiene á la columna de fierro y sus calces, lo mismo que la pequeña casita en que vive el Guarda, demandan reparaciones; cuyo costo no excederá de $500.” Faros de Manta y Esmeraldas: “Están bajo la inspección de los Srs. Capitanes de esos Puertos; por informes de las naves procedentes de manta, sé que ese faro está bien servido, respecto al de Esmeraldas, se me ha dicho que de algunos meses no se 255 enciende la luz.” Aquí hay que observar que, si bien el Capitán indica que esos faros están bajo la inspección de los capitanes de puerto respectivos, no olvidemos que no había una norma clara vigente para el manejo de faros en cada jurisdicción territorial. Otros ejemplos contradictorios son: El faro en San Cristóbal, Galápagos estaba bajo la jurisdicción de Guayaquil, como también lo estaba el de la Isla de la Plata, que pertenece a Manabí. No había una aplicación sistemática de una norma, sino mas bien de acuerdo a zonas de influencia. Añade el Capitán del Puerto de Guayaquil en el informe: “La Convención Nacional, á petición del infrascrito, asignó en el presupuesto algunas partidas para reparar los faros existentes y para aumentar los siguientes: Punta de Jambelí, Cabo de San Francisco, Cabo Pasado, Punta Salinas, Isla Verde, Punta de Piedra y Sono. La escacez del Erario no ha permitido llevar á cabo estas obras; pero como son útiles y necesarias, repito mi solicitud y pido que se mantengan esos créditos en el presupuesto...” A esta parte del informe hacemos cuatro acotaciones: 1°.- La luz de Isla Verde sería instalada, por fin, después de conocerse su utilidad y necesidad desde 1872 (pero a la final no fue instalada ese año); 2°.- Es una lástima que, habiendo conseguido la inclusión en el presupuesto, dentro de la aduana, no haya logrado ubicar el Servicio correctamente dentro de la Capitanía, su ubicación adecuada para ese entonces; 3°.- Es la primera vez que un encargado de los faros insistía en la instalación de luces que consideraba necesarias. Los anteriores aceptaban la negativa de los superiores y guardaban silencio; y, 4°.- Se vuelve a hablar de la luz de Cabo Pasado, como nueva, como veremos a continuación: Faro de Cabo Pasado: “...en 1890 se edificó la torre de madera, destinada para el objeto; felizmente está bien conservada, gracias á los cuidados del Sr. José A. Plaza, que reside á cuatro leguas de distancia y que patrioticamente aceptó el encargo de cuidar de ella, se le han dado los materiales necesarios para que la pinte exterior é interiormente: y tan pronto como el faro ó fanal se adquiera será instalado...” ¿Y qué pasó con el faro que estaba listo en la bodega de la Aduana de Manta? ¡Nunca se volvió a saber de él! A pesar de que en el Glosario están las definiciones de Faro y Fanal, debemos reiterar aquí que en el contexto del Servicio de Faros, fanal se refiere a un faro pequeño, del 5° o 6° orden, a los que también se conocen como luz de puerto. 256 Para concluir su informe, el Capitán hace una especie de sumario y al final menciona las boyas, lo que nos trae una sorpresa: “La República sostiene tres faros y seis fanales, cuyo costo anual monta á $14.500 por valor de sueldos, materiales y reparaciones. –La supresión del Sub-inspector de Faros representa $1,200 sucres anuales de economía, y con esta cantidad podría cubrirse el presupuesto de gastos de los siete fanales que pido se instalen á la mayor brevedad. La supresión del Sub-inspector de faros no perjudicaría al buen servicio y disiplina de sus empleados, siempre que el Ayudante de la Capitanía del Puerto de Guayaquil sea, como actualmente un oficial de marina competente para verificar dos veces al mes la inspección de faros y boyas. El personal y sueldo de los Guarda-Faros no es posible, ni sería provechosa ninguna reducción. Los faros de rotación demandan constante vigilancia durante todas las noches del año, y para esto, y por la contingencia de enfermedad de un empleado, son indispensables tres; en este caso se encuentran los faros de Santa Clara, Punta Arena y Santa Elena, este último está servido por contrato. El fanal de la Isla Plata, demanda dos empleados, porque está muy distante, en una isla árida y mal sana, y las frecuentes neblinas y lloviznas hacen necesaria la vigilancia de toda la noche... ...A la presente la República solo posee una Boya situada en el extremo Sur del Banco de Mala...” Y esta es la sorpresa, pues se trata de una de las boyas con campana llegadas e instaladas en 1872, hacía 26 años, ¡la cual había sobrevivido con el mínimo mantenimiento! Continúa: “Es urgentemente necesario, y aún obligatorio á la República, reponer las boyas perdidas ó destruidas, en el Banco de Atacames, en los Bancos de Payana, en el Banco de Punta Arena, en el medio y en el extremo Norte del Banco de Mala; estas boyas que existían hasta ha pocos años están marcadas en todas las cartas hidrograficas, y todos los siniestros que puede ocasionar su falta, pueden comprometer la responsabilidad internacional de la República. Las doce nuevas boyas que solicito son igualmente necesarias; y su instalación sería de gran utilidad y honra para la República; pues cuantas mayores seguridades y facilidades se ofrezcan á la navegación en nuestras costas y puertos, mayores ventajas reportarán al Comercio y á la agricultura, que son los factores principales de la prosperidad y engrandecimiento que anhelamos para nuestra adorada Patria.” En terminos generales, dejando a un lado las fallas técnicas que ya mencionamos, se trata de un excelente informe que demuestra un genuino interés por hacer bien el trabajo asignado. 257 El Capitán Fernández de la Madrid era muy prolijo y llevaba un control permanente del personal, registrando al personal en un Escalafón de Guardafaros dependientes de la Capitanía del Puerto de Guayaquil. En él también se incluía al Sr. Francisco Landín, constando como contratado, sin clase, para el Faro de Santa Elena. 219 La lista Mundial de Faros del año 1899 contiene diez faros registrados para Ecuador, incluyendo, sin características pero sí con ubicación, el de Cabo Pasado. No consta en la lista el Faro de Data. Esa lista es la que usaban los navegantes, junto con las cartas náuticas, para orientarse, navegar e ingresar a los puertos. Es con esta lista que tiene diferencias técnicas el informe de 1898 que presentó el Capitán del Puerto de Guayaquil. 221 Informe de 1899 - Algo Insólito. El Informe del Ministro de Guerra y Marina para 1899, elaborado nuevamente en base al informe del Capitán del Puerto de Guayaquil, repite las mismas fallas técnicas del Informe de 1898 y añade mayor información en cuanto a las necesidades de reparaciones y mantenimiento, y es sobre estas que comentaremos. 222 El informe sobre el Faro de Santa Clara contiene algo insólito que veremos a continuación: Faro de Santa Clara: “...Las necesidades más urgentes de este faro son las siguientes: reparación general y perfecta nivelación de la máquina de rotación; y repuesto de algunas piezas rotas ó gastadas por el tiempo. Reparación del edificio, que demanda reforzar calces y riostras reponer el forro de tablas exterior, remendar y soldar las cubiertas metálicas de las galerías y cúpula, y una reparación general de escaleras, pisos y accesorios interiores. Macillar y pintar exteriormente el edificio en todas sus partes de hierro y madera para preservarle de la destructora influencia del aire salado del mar. Reparación del para-rayo y su conductor. Construcción y conducción de un estanque de hierro de mil galones de capacidad, para reemplazar al muy deteriorado que há veintinueve años sirve de depósito al agua-potable que se lleva mensualmente para el consumo de los Guardas. Pedir á la Fábrica de F. Barbier & Ca Constructeurs París veinte cristales planos de 91 ½ x 80 ½ centímetros de superficie y ¾ centímetros de grueso para cubrir la cúpula en que está montado el faro y preservar sus lentes prismas, y óptica de la humedad atmosférica, de la lluvia y del acceso de las aves marinas atraidos por la luz. Actualmente hay vidrios planos ordinarios que por su naturaleza debilitan la 258 luz, y que habiéndose resguardado de los pájaros que los destrozaban, con una reja de hierro está interceptada la luz y produce reflejos extraños en los focos luminosos. Por antiguos Guardas de Santa Clara he sido informado de que cierto oficial que tuvo á su orden un vapor del Gobierno, se entretuvo haciendo disparos de cañón y de rifle sobre la torre que tomó como blanco; felizmente no la tocó con sus balas de cañón, pero sí con muchas de rifle, con las que destrozó los cristales, que hasta la presente no han sido repuestos.” ¡Insólito! Lastimosamente no nos dicen quién fue, para darle el lugar que se merece en la historia. De interés es la mención de la fábrica F. Barbier & Cie, sucesores de Barbier & Fenestre, constructores de los faros originales. En cuanto al Faro de Punta Arenas, todos los esfuerzos realizados para proteger la obra de los embates del mar, que hasta 1896 habían dado frutos a costa de un gran empeño y gasto, quedaron anulados en ese año por el fuertísimo invierno, que destruyó parte de la empalizada y desapareció la playa de arena. La torre estaba tambaleante y el Capitán sugirió su demolición para trasladarla de lugar o, preferiblemente, transferir la luz a una embarcación a ser anclada fuera del bajo. Esa luz ya no podría ser rotativa y tendría que cambiarse a una fija. Esto no se realizó y el faro continuó en su precaria situación por algún tiempo. En los informes el Capitán del Puerto enfatizaba: “...por lo que tengo manifestado, repito, como en otros informes, que este personal es indispensable y el buen servicio de los faros no permiten ninguna supresión.” Obviamente veía permanentemente amenazada la situación de los empleados, por las razones que él incluye en su informe, y que citamos a continuación: “...amagado constantemente por la revolución armada, agotando en defensa del orden Constitucional la mejor parte de las rentas, han escaseado los recursos del Tesoro, y no ha dispuesto de los fondos necesarios...” Los faros de Punta Española y La Plata seguían con el deterioro en sus torres, y al primero se lo consideraba “en completa ruina.” Sobre el Faro de Punta Mandinga dice: “...Fue instalado en 1873 y refaccionado en 1887; pero la mala calidad de las maderas empleadas en la refacción, demanda que sea reparado, principalmente sus pisos bajo y alto y la cúpula que están podridas, esta obra...” La cúpula, no olvidemos, era el cuarto de linterna del 1° faro de Santa Clara, que ya estaba llegando a su fin luego de 58 años de vida con poco cuidado. 259 Al final de este informe, el Capitán hace una interesante recopilación que citamos íntegra por su valor histórico: “Desde que se me honró con el cargo de Capitán del Puerto de Guayaquil, he manifestado ora en oficios dirigidos á las autoridades superiores, ora en mis informes anuales: la urgente necesidad de refaccionar la oficina de esta Capitanía y los edificios de los Faros que me están encomendados, desde que se suprimió el destino de Inspector General de Faros. Hasta la presente, no habiéndose efectuado las refacciones solicitadas, he sostenido los referidos edificios á fuerza de remiendos que por lo menos han evitado su completa destrucción; más ahora es inaplazable atender eficazmente á estas urgentes necesidades, pues postergarlas sería exponer los edificios á una completa destrucción; debiendo principiar por el de Punta Arenas, ya sea que se traslade al único punto en que puede situarse, ó que se instale un faro de luz fija á bordo de un buque. Los valores presupuestados para estas obras pueden adolecer de errores, pues no habiendo obtenido fondos, para que hubieran sido hechos por peritos del ramo, los ha calculado el suscrito...” De mayor interés es la información de que había sido suprimido el cargo de Inspector General de Faros y ese puesto se había encargado al Capitán del Puerto de Guayaquil, sin jurisdicción en Manta y Esmeraldas, pero sí en los otros faros, incluyendo el de Galápagos y La Plata. No era novedad la penuria fiscal, pero sí la desorganización del gobierno liberal, pues desarticulaba organizaciones sin dar alternativas más eficientes. Para finalizar su informe sobre faros, el Capitán insiste en los faros o fanales y boyas pedidos en el informe anterior, y añade otros, así como boyas adicionales. Y, ¡el Faro de Cabo Pasado seguía sin instalarse! El resto de este informe trata sobre su cargo como Capitán del Puerto y lamentamos que el alcance de este libro no nos permita citarlo íntegro, pues parecería escrito en 1999 en vez de 1899, debido a que entonces se vivían los mismos problemas con el puerto que vivimos ahora, especialmente los problemas de dragado, lo que demuestra que, lamentablemente, no aprendemos de la historia ni aprovechamos la experiencia. Informe de 1900. El Informe de 1900, al cerrar el Siglo 19, era básicamente el mismo en cuanto al listado de los aparatos. Hay dos partes que vamos a citar. 260 En la parte del informe del Ministro, éste dice lo siguiente: "En cuanto á las necesidades de nuestro principal Puerto, os recomiendo el informe del intelijente Capitán de Navío Sr. Francisco Fernández Madrid, cuyo patriotismo le hace digno de la confianza del Gobierno: sus conocimientos científicos y prácticos os darán alguna luz para que remediéis las necesidades que se notan en la administración, gobierno y vigilancia de los Puertos y Faros de la República. El egreso que en el ramo de Marina ha hecho el Erario nacional durante el año de 1899, en sueldos y demás gastos, es de $91.253,13." El Capitán Fernández Madrid dice, entre otras cosas, lo siguiente: "Es del caso hacer notar que la dotación de tres Guardas para este Faro (Punta Arenas) y el de Santa Clara, no admite ninguna supresión porque á más del servicio nocturno y el trabajo de Policía y reparaciones que hacen de día, es preciso tomar en cuenta las enfermedades que con frecuencia postran algunos empleados. Lo propio debe informar respecto de sueldos: los del presupuesto de 1897 y 1898 son justa remuneración para los servicios de esos Guardas, que principian por renunciar á la sociedad, para llevar una existencia aislada y devorar en la soledad todo género de privaciones; me consta que la subsistencia les cuesta muy cara, porque frecuentemente pierden una parte de las provisiones, que con su sueldo piden mensualmente; y las pierden unas veces por la braveza del mar que las moja y destruye en el desembarque y otras porque la temperatura las descompone." 513 Informe de 1901. Para 1901, el Ministro de Hacienda había presupuestado los siguientes montos para los faros: "Ingresos: $9.000,oo. Egresos: $29.040,oo." Se mantenía el fuerte déficit que, irrazonablemente, no se cerraba con la producción de los mismos faros. 514 Informe de 1902. El Ministro de Guerra y Marina informó en base al informe del Capitán del Puerto de Guayaquil. “Faros.- Por Decreto Legislativo de 1897, se suprimió el empleo de Inspector de Faros y se dispuso que el Capitán del Puerto de Guayaquil desempeñara ese cargo; el infrascrito ha procurado cumplir del mejor modo, y siendo virtualmente imposible que hiciera personalemte la frecuente inspección que demandan los faros, porque esto implicaría la acefalía de la Capitanía, se ha verificado esa inspección por su ayudante Capitán Luis Bonhoff, hasta Octubre del año pasado, en que el Ayudante fué destinado á otro servicio, y desde esa fecha por el Cabo de Matrícula Gregorio P. Pérez; últimamente el Sr. General Comandante General del Distrito y de Marina, ha nombrado una comisión para el efecto de inspeccionar los faros y dar 261 cuenta de sus necesidades; dicha comisión ha vuelto y seguramente habrá informado sobre su cometido; pero no obstante esto, jusgo conveniente reproducir ahora mi informe del año pasado, que más ó menos es lo mismo desde el año 1898 y los siguientes." En efecto, salvo por una mejora en el aspecto de los conocimientos técnicos de los faros mismos, el informe del Capitán es básicamente el mismo, con las mismas carencias y las mismas necesidades en los mismos faros. Solamente en la parte de lo que pide para ampliar el servicio, ha bajado sus aspiraciones en cuanto al número de faros y boyas nuevos, pero sí insiste en reemplazar las boyas que constan en las cartas de navegación. 223 Informe de 1903. En 1903 el Ministro de Hacienda tenía esto que decir sobre los faros: "Producto del año 1901: $8.869,50. Producto del año 1902: $7.642,38. Diferencia entre los dos años: $1.227,12 menos en 1902." El Ministro indica que presentará un proyecto que nivela el impuesto a los faros para que los buques de vela y a vapor paguen lo mismo, pues no ve razón para que haya diferencia. El déficit operativo de los faros en 1902 fue de $9.385,77. 515 Informe de 1904. El informe de 1904 era una repetición clamorosa de los anteriores. El deterioro continuaba y ya era grave. Como ejemplo citaremos partes del informe sobre el Faro de Santa Clara: “...es de tercera clase, giratorio, y de luz blanca; sus rotaciones duran un minuto, con tres centelleos luminosos cada 20 segundos...” Con esto basta para saber que la situación era gravísima, tanto en el aspecto técnico, como en el administrativo, pues recordemos que ya en 1898 decía el Informe que el faro daba una revolución cada cuatro minutos y centelleaba cada veinte segundos. Si revisamos las características del equipo, vemos que su tambor lenticular constaba de doce paneles de destello. Su ciclo era de un destello cada treinta segundos y una rotación cada seis minutos. En 1898 el faro ya estaba andando mal, pues al dar una rotación cada cuatro minutos y destellos cada 20 segundos, estaba trabajando aceleradamente y fuera de su especificación en la Lista Mundial de Faros y las cartas de navegación. El faro se reportaba ahora como dando una revolución en un minuto, lo que habría significado doce destellos en un minuto, o uno cada cinco segundos, pero indican que daba un destello cada 20 segundos, lo que lo ubicaría como lo especificaron en 1898. En todo caso, lo que sí es obvio es que la 224 262 persona que lo controlaba y reportaba sobre él (el ayudante del Capitán del Puerto) no lo estaba haciendo bien, y el faro no prestaba servicio de acuerdo a su especificación, lo que lo hacía peligroso para las naves que desconocieran esa alteración. Desde el punto de vista humano, el Capitán reportaba: “Si se consideran las privaciones que devoran en la soledad de ese árido islote, la monotonía de sus ocupaciones, los desvelos de todas las noches del año, las enfermedades á que están expuestos, sin ningún auxilio, y si se aprecia la importancia del servicio que hacen, se convendría en que sus dotaciones son exiguas y sería clamoroso reducirlas.” Esto nos indica que probablemente seguían las indagaciones para ver cómo se ahorraba en los sueldos de los Guardafaros. Desde el punto de vista técnico, el Capitán reportaba: “La torre y la máquina de rotación no han sido reparadas en muchos años, y demandan urgentes é importantes reparaciones.” Esto explicaría el desfase en la velocidad de rotación. La situación de los demás faros seguía igual, e igualmente se equivoca el ayudante del Capitán al reportar el aspecto técnico de los de rotación. El Faro de Santa Elena había cambiado de contratista. Ahora era el Sr. Pedro Infante, e igualmente se insiste en la inconveniencia de contratar ese servicio, pues lo seguía atendiendo una sola persona. El Faro de San Cristóbal (Chatham) estaba siendo reparado por personal del Crucero “Cotopaxi.” El 16 de junio de ese año el Jefe territorial de Galápagos puso en conocimiento del Gobernador del Guayas que el Comandante Marco A. Calderón, 1° Jefe del Crucero Cotopaxi, le entregó completamente reparado y en perfecto estado de servicio el Faro de San Cristóbal, del que se hizo cargo el Sr. Abelardo Vega, a quien había nombrado el Gobierno como 1° Guardafaro. Para 1904 ya había desaparecido la última boya sobreviviente, y el Capitán del Puerto insistía en la necesidad de reemplazar las que constaban en las cartas de navegación e instalar diez y siete más. En la lista de necesidades de la Capitanía, en cuanto a los faros, consideraba éstas como las más urgentes: “Reparaciones de las torres y maquinarias de rotación de todos los existentes, instalación de los nuevos faros decretados por la Convención Nacional.” 263 El Informe de 1904 es el primero que tenemos en que constan informes de los capitanes de los otros puertos. El Capitán de Puerto Bolívar reporta lo siguiente sobre el faro a su cargo: “En cuanto á faros, el único que se halla bajo mi jurisdicción es el de Jambelí, el que está á cargo del guarda José Robles, á quien se le remunera sus servicios con el sueldo mensual de cincuenta sucres. El edificio es una torrecilla de forma cuadrangular, de tres pisos y de quince metros de altura, es el mismo que se construyó hace más de cuatro años, pero necesita ya una reparación: pues debe sujetársele con puntales diagonales porque los tirantes que tiene se hallan en el aire, exponiéndose á que el edificio caiga al suelo. Para que el faro preste mayor servicio es conveniente se suspenda el techado, que se le provea de cristales para la circunvalación, lámparas y tubos de repuesto. Estimo igualmente la construcción de una casita ó garita para la habitación del guarda. El consumo de kerosine es de dos latas, insuficientes para los treinta días del mes, cuyo valor abona el fisco; y debe ordenarse también el pago del alcohol, tiza, fósforos, escoba y lienzo, que por hoy suple estos gastos dicho guarda. Creo mi deber hacer notar la urgente necesidad de una boya en condiciones buenas, la que debe ser colocada en la cabecera del bajo de las Salinas ó sea de ‘El Coco,’ como se le denomina hoy, cuya cabecera se encuentra al frente del Faro de Jambelí y á una milla de distancia, más que menos, de este puerto... ...Termino, señor General, suplicándole que por su digno órgano se atienda á todo lo solicitado para el buen servicio y mejor organización de la expresada, así como también que se provea de las leyes y reglamentos respectivos, que son de urgente necesidad por carecer de éstos en lo absoluto. El Capitán del Puerto, César E. Morla.” El Capitán del Puerto de Ballenita también clamaba por la instalación de boyas, “...indicando el canal para la entrada al puerto, evitando primero desastres marítimos, y por consiguiente pretexto de algunos Capitanes que se resisten entrar al fondeadero alegando protestar en caso de un siniestro y haciendo responsable á la Nación. El Capitán del Puerto, Miceno J. Drouet.” Nótese que no menciona el Faro de Santa Elena el que, técnicamente, estaba bajo su jurisdicción. Sin embargo, el Jefe Político de Santa Elena sí reportó al Gobernador del Guayas lo siguiente: “FAROS.- En el presente año ha recibido algunas refacciones este edificio, en virtud de las gestiones hechas por el Señor Ministro de Guerra y Marina; viniendo así oportunamente á evitar una catástrofe que no hubiera demorado, dado el mal estado en que aquel se encontraba. 264 La maquinaria también recibió pequeñas refacciones, que en nada han mejorado las condiciones anteriores. Muchos tornillos y piñones de la plataforma giratoria, se encuentran gastados, dando por consecuencia una rotación imperfecta, que dista mucho de la precisión matemática que se describe en las cartas hidrográficas. Tiene también algunas lunas rajadas la torre que le cubre, y no sería aventurado asegurar que el día menos pensado, sino se hacen las reparaciones, se interrumpirá el servicio. Así, pues, el Gobierno debe nombrar una comisión técnica, que á conciencia, dé un informe sobre el estado de este faro; informe que, desde ahora, auguramos será desconsolador. Las reparaciones deben hacerse cuanto antes, pues así, además de garantizar el servicio, le serían menos costosas al Gobierno. El Jefe Político, Alberto Panchana P.” Este señor habló muy claro y, sin decirlo, calificó como desastrosa la política de contratar el servicio del faro, pues los contratistas obviamente no invirtieron un centavo en su mantenimiento, lo que hubiera prevenido los daños que tuvieron que ser reparados a un alto costo para el Erario Nacional. Varios capitanes mencionan que están usando el Reglamento para el Puerto de Guayaquil, emitido en 1862, el que está desactualizado y no se aplica en algunos casos. El Capitán del Puerto de Esmeraldas reportaba esto: “Tenemos ya el torreón para este faro, y ojalá no pase con éste lo que con el de Cabo Pasado, que se destruyó después de algunos años sin la linterna, y por consiguiente sin servir para lo que fué construido. El Capitán del Puerto, Pástor del Pozo.” Este Capitán nos aclara dos cosas importantes: El Faro de Cabo Pasado nunca se instaló, y el de Esmeraldas tampoco estaba activo en ese momento. Curiosamente, no hay informe del Capitán del Puerto de Manta. Informe de 1905. El Informe del Ministro de Guerra y Marina para 1905 reporta un cambio radical en cuanto a los faros: “Este servicio tan importante ha sido atendido con preferencia y lo útiles necesarios para las reparaciones que habían menester algunos de los Faros de la República se 225 265 encargaron oportunamente al Exterior, de manera que en la actualidad funcionan con regularidad. La torre del Faro de Punta-Arenas, por la acción del tiempo se halla en estado ruinosos y habiéndose nombrado una comisión para que la examinase y diese cuenta de sus desperfectos, por el informe recibido se vino en conocimiento que era indispensable proceder á una reparación completa ó bien construir un edificio en otro sitio. Aceptada esta última indicación, el Gobierno ha dispuesto lo conveniente para que la obra se saque á licitación, votando al efecto la suma necesaria. El Faro de Esmeraldas, de reciente construcción, funcionando se halla y una relación prolija de los demás consta en los respectivos anexos.” En ese mismo informe, el Comandante General del Distrito del Guayas informa: “FAROS Y BOYAS.- Se han hecho muy buenas reparaciones en casi todos los faros de la República. En (Puerto Chico) San Cristóbal (Archipiélago de Colón) se construyó un edificio sólido y elegante para el Faro de este lugar; en el puerto de Esmeraldas funciona desde hace pocos meses el Faro que hace algún tiempo se destruyó, el que ha sido construido nuevamente con maderas incorruptibles, dándole la solidez necesaria... ...Respecto de las necesidades de los otros Faros las encontrará el Sr. Ministro, bien detalladas, en el luminoso Informe que sobre el particular presenta el Sr. Capitán de este Puerto; en dicho informe también se refiere á las boyas que deben mandarse colocar cuanto antes sea posible.” Sin embargo, y sin ser novedad por lo visto en reportes anteriores, en el reporte del Servicio de Faros se desmiente lo dicho por las dos autoridades. Citamos de la parte correspondiente al Faro de Santa Clara: "La torre y la máquina de rotación no han sido reparadas en muchos años, y demandan urgentes é importantes reparaciones. En la maquinaria es indispensable reponer algunas piezas rotas ó gastadas por el uso; en la torre, reforzar calces y riostras, reponer los forros esteriores, remendar y soldar las cubiertas metálicas de las galerías y cúpula, reparación general en los pisos y escaleras, interiores, macillar y pintar exteriormente el edificio, pintar en el interior, por lo menos la cúpula; reparar el 266 pararrayos y su conductor, reemplazar el viejo y deteriorado depósito de agua potable, con otro de mil galones de capacidad. Muchas veces se han presupuestado estas obras y aún se han dado ordenes para efectuarlas por licitación, pero nadie ha concurrido con sus propuestas. Lo práctico es que se verifiquen por administración bajo la activa é inteligente dirección del Sr. Comandante del Crucero 'Cotopaxi'." El Faro de Esmeraldas ni se lo menciona y el de San Cristóbal se lo menciona como "Este fue refaccionado en el año próximo pasado y se le construyó una pequeña habitación para el guarda...," lejos del "...edificio sólido y elegante para el Faro de este lugar..." que menciona el Cmdte. Gral. del Distrito de Guayaquil. Estas diferencias tan claras entre lo reportado por los jefes y los subalternos nos hacen pensar que había una terrible falta de comunicación entre los niveles jerárquicos. En 1905 se entregó nuevamente por contrato, al Sr. Pedro Infante, el servicio del Faro de Santa Elena. Reglamento de Policía Marítima Incluye a los Faros - 1906. En 1906, el Encargado del Mando Supremo de la República, Eloy Alfaro, decretó un Reglamento de Policía Marítima para los Puertos de la República del Ecuador. En ese reglamento se definían las funciones de los Capitanes de Puerto y se incluía sus funciones en relación a los faros. Esto llenaba un vacío por falta de reglamentación, que había aquejado al servicio de faros desde 1895 en que asumió el poder el liberalismo. Este reglamento era muy incompleto, pero era mejor que no tener reglamento alguno. El texto completo, en lo concerniente a faros, lo encontrará en el Anexo “D,” pero aquí comentaremos algunos puntos. En el Párrafo XXIV del Artículo 10 se comienza a tratar sobre los faros y se establece que los capitanes de puerto son los inspectores de los faros establecidos en los límites de su jurisdicción. Esto establecía una autoridad específica sobre el Servicio y resolvía el problema de interferencias jurisdiccionales. Aún así, en el siguiente Informe veremos que el Capitán del Puerto de Guayaquil seguía informando de algunos faros fuera de la jurisdicción de esa Capitanía. El Reglamento era muy genérico y debe haber traído muchos problemas, pues habían muchos detalles que quedaban en el aire. En realidad el Servicio no era más que un apéndice de las capitanías de los puertos, por lo que no cubría las necesidades de los faros. Uno de los errores mayores de 317 267 este reglamento fue el poner la inspección de los faros en manos de subalternos con un grado limitado de responsabilidad, como fue el caso del Cabo de Matrícula. Según el Párrafo XXVIII del Reglamento, el Cabo de Matrícula era el encargado de realizar la verificación mensual de los faros, pero veamos cuales eran sus funciones según el mismo Reglamento: “Cabo de Matrícula: Alternan las guardias y retenes de oficina, las rondas el fondeadero, desembarcaderos, muelles y playas, reciben las balijas á bordo y las entregan en la Administración de Correos, hacen todos los trabajos de escritorio, y desempeñan todas las comisiones del servicio, en el puerto ó fuera de él.” ¿En qué momento haría la inspección a los faros? Informe de 1906. En 1906, el Ministro de Guerra y Marina informa a la Asamblea Nacional: “FAROS Y BOYAS.- Tanto la Marina de Guerra, como la mercante que trafican nuestras costas, notan con agrado el especial servicio de Faros que mantiene la República. Pero, es menester que se vote nuevamente en el Presupuesto, la cantidad necesaria para la reparación de los que amenazan ruina. Este gasto, no sólo es urgente, sino que conviene para dar mayor facilidad á la navegación. Las siete boyas que se colocaron en los puntos más peligrosos del golfo de Guayaquil y en la roca de Atacames, han desaparecido; precisa reponerlas, no sólo en los lugares anotados en las cartas de navegación, más también en otros en donde ésta es peligrosa.” Y, como era de esperar, en su informe el Capitán del Puerto de Guayaquil dice que: “...preciso y urgente es restablecer la (dotación) que tuvo la Capitanía hasta el 31 de Diciembre de 1901, que fué cercenada, inconvenientemente, y con manifiesto perjuicio de algunos servicios públicos, y especialmente de la inspección de faros y boyas, que no ha sido posible verificarla, mensualmente, como lo prescribe el párrafo XXVIII del artículo 10 del Reglamento de Policía Marítima, por falta de un Cabo de Matrícula: en esta virtud, pido al señor General, que se sirva solicitar que sean restablecidos para el servicio de esta Capitanía: Un Cabo de Matrícula, un Guardián y cinco Marineros de Primera.” Es necesario anotar que la dotación de la Capitanía en ese año ya incluía tres cabos de matrícula, por lo tanto el adicional que pide era, presumiblemente, para los faros. 226 Ya en materia específica de los faros, el Capitán del Puerto de Guayaquil informa prácticamente lo mismo que había informado en 1904, con las mismas deficiencias técnicas y la misma situación de deterioro de los equipos y sus torres. El Informe del Ministro en 1905 había sido una 268 pantalla de falsedad, que escondió una crítica situación que no había sido resuelta, como pretendió demostrar en base a informes cosmetizados. Al concluir su informe, el Capitán reitera un pedido ya realizado por varios años: “Urgentes reparaciones de las torres y maquinarias de rotación de todos los faros existentes, urgente instalación de los nuevos faros decretados por la Convención Nacional de 1896 á 1897.” El Capitán del Puerto de Puerto Bolívar informa: “Tan ruinoso es el estado del edificio del Faro de Jambelí que, sino se lo repara lo más pronto, no será estraño que el dia menos pensado se desplome; esta refacción, ó más bien dicho reconstrucción costará, según cálculo aproximado, tres mil sucres.” El informe de los demás Capitanes sigue el mismo patrón de frustración, y solo citaremos el del Capitán del Puerto de Manta, pues no había constado en los dos informes anteriores, y mencionaremos el de Esmeraldas, por un error: Manta - “FARO.- El de este Puerto es de cuarta clase, fanal (gran error, pues era una luz de puerto de sexto orden, y un fanal jamás sería de 4° orden) que se halla situado en una eminencia y ya dentro de la población, por haberse ésta extendido bastante, por lo que durante las noches se confunde su luz con las del alumbrado público (como vimos en capítulo anterior, uno de los inconvenientes de las luces fijas), siendo difícil á las naves localizar su posición. Para obviar este inconveniente jusgo necesario ó levantar la base de la columna unos tres metros ó cambiar los vidrios blancos que tiene el farol por otros de color rojo. La lámpara que se usa es mala, proyecta una luz deficiente; debe proveersela de otra con quemador circular. Se halla bien atendido por el señor Ramón Miranda, que desempeña su puesto con regularidad.” El informe del Capitán de Puerto de Esmeraldas tiene una similitud de falla con el de Manta en cuanto al orden del faro, por lo que probablemente se copiaron, y los dos desconocían totalmente sobre las características de los faros que, si los tenían a su cargo, las debían conocer. Informe de 1907-1908. El Ministro de Hacienda reporta un déficit de $15.483,10 para el ejercicio económico de los faros en 1907. 369 El Capitán del Puerto de Guayaquil publicó por la prensa, durante varios días del mes de enero de 1908, el siguiente aviso: "FARO DE SANTA ELENA / Prevengo á los señores capitanes que este faro se iluminará con luz blanca brillante fija, en tanto se hagan reparaciones en su aparato giratorio. / Guayaquil, diciembre 15 de 1907 / Fco. Fernández Madrid." 541 269 El informe de 1908 copia los datos técnicos errados sobre los faros que contienen los informes desde 1902. Las necesidades de reparación son las mismas ya repetidas tantas veces. Pero fuera de eso, nos informa que el Faro de Santa Elena fue reparado "...en los talleres de La Filantrópica del Guayas y reformaron y colocaron los Ingenieros y Maquinistas chilenos del Cazatorpedero 'Libertador Bolívar', dejándolo en magnífico estado de servicio; los demás, todos están en ruinoso estado, y necesitan, no sólo reparación, sino nueva construcción de sus torres y el de Puntarenas, desde su base, trasladándolo á sitio más adecuado..." El Capitán del Puerto de Manta manifestaba la necesidad de reparar el faro que ya estaba ubicado dentro de la población. El Capitán de Puerto Bolívar indica que el edificio del faro de Jambelí se encuentra en reparación y manifiesta que "el flujo y reflujo de las aguas está formando un estero que si no se repara, dejará al Faro aislado y en riesgo de su completa destrucción." A fin de 1908 se dió una pequeña polémica por la prensa sobre el Faro de Santa Elena. "El Tiempo" de Guayaquil publicó, en su edición del 1° de diciembre de 1908, una carta enviada por el Guardafaro al Presidente Eloy Alfaro. Veamos lo que se reporta: "Señor General Eloy Alfaro, Presidente Constitucional de la República. Muy honroso me es informar á usted, á la mayor brevedad, el estado del Faro de la Puntilla de Santa Elena. Desde el primero de Agosto del año próximo pasado, fuí nombrado 1er Guarda-faro y tomé posesión de dicho puesto, á presencia del señor Jefe Político del Cantón, don Lázaro L Gómez y del ex Capitán del Puerto, don Diórodo Gómez, de manos del ex contratista Sr. Pedro Infante, por medio del Inventario respectivo que dicho sea de paso no consta de otra cosa, sino de la ruina del aparato y edificio como lo demuestran mis oficios pasados al respecto. Desde entonces me consagré con ahinco á hacer todo lo que estuviera á mi alcance para mejorar el servicio, lo cual lo he conseguido; mas con la estadía en Salinas del señor doctor don Alejandro Reves, actual Ministro de Estado, le hice presente en la visita que hizo á dicho Faro el estado ruinoso en que se encontraban el aparato y el edificio, y en vista de que él me dijo que hiciera un Memorándum ó Informe para influir con el Supremo Gobierno, á fin de conseguir la refacción y mejora, aunque nó en el edificio, como así sucedió. A pocos días vino la orden para refección de la máquina, la cual se mandó á hacer en los talleres de la Sociedad Filantrópica del Guayas cuyo trabajo no dio el resultado apetecido, como consta en oficio que al efecto envié á la Jefatura de esta 3° 270 Zona; hasta que llegó á invernar el Caza-torpedero "Libertador Bolívar" y telegrafié al señor General don Flavio E. Alfaro, que se encontraba al frente de esta Zona, para que durante la estadía de dicho buque, ordene se aprovechara de los conocimientos de sus mecánicos, como también de los útiles y materiales para el efecto. Y en dos meses se consiguió que dicho Faro, á que hago referencia, tenga su rotación como la Carta Marítima dispone. Con esta mejora, señor Presidente de la República, puede comprenderse la ambición despertada en individuos que, sin tener las aptitudes correspondientes, pretendan el puesto de 1er Guarda-faro; y ambiciono nueva contrata, permitiéndome al efecto, manifestar á usted, que entre los ambiciosos hay enemigos que se han aprovechado y se aprovecharán de un incidente particular, habido entre el 3er Guarda Faros, Manuel R González y el suscrito, por no haber tolerado que me faltara, embriagado, de palabras y aun de hecho. Han hecho de este hombre inconsciente, una especie de caballo de batalla, cohechándole para hacer un cerro de calumnias é infamias, en mi contra; porque informes parciales no los hay, una vez que el señor Capitán del Puerto é Inspector General de Faros, ha contestado á todos mis oficios--'que él no tiene que hacer nada con ese faro, por no ser de su incumbencia, sino del Capitán del Puerto de Ballenita é Inspector reglamentario de dicho Faro'. Este señor no ha podido informar, porque no ha sabido cumplir con su deber; puesto que, en cumplimiento de él, sólo una vez, en quince meses que estaba á mi cargo dicho edificio, fue únicamente cuando se le dió posesión al 2°, Plaza. Hoy que el citado Capitán del Puerto de Ballenita se encuentra en esta ciudad, lo emplazo para que ante las autoridades aclare ó compruebe los hechos denunciados por él. Con esta intriga y una mano oculta que hoy quieren hechar por tierra mis desvelos, la economía de más de $200 que le he hecho al Fisco en kerosene, muchos tubos, cuerdas y otros materiales que, siendo indispensables, han salido de mi peculio. Y que consta en el referido informe que pasé á la Jefatura de la Zona. Los informes respecto á lo que dejo expuesto y a mi conducta, seria largo enumerarlos, estando como están aquí presentes, los señores doctor Alejandro Reyes, Víctor M. Pastenes, Receptor de Sales, doctor José Payeze Gault, médico que era del "Libertador Bolívar", Vicente Villavicencio, Inspector de Sales, Víctor Soberón, la Oficialidad del "Libertador Bolívar" el Sr. Powel, Comandante del "Cotopaxi", á quien pasé en su último viaje á Salinas un oficio invitándolo como Subinspector General de Faros, a que pasara una visita ocular al de mi cargo, para que se cerciorara del orden, aseo y buen servicio reinantes en él y al señor Capitán don Rafael Andrade, comisionado por la Jefatura de Zona para una visita de 271 inspección, son las personas que, como presenciales, pueden certificar lo que dejo enumerado. Por lo demas, señor General, mi conciencia la tengo tranquila: mi lealtad política, mi hombría de bien, son conocidas por las mayoría de las gentes sensatas y de recto criterio; y en los 24 años que vengo acompañando á la causa radical, y á usted como á su inclito Caudillo, no ha habido infidencia ninguna y mis servicios han sido incondicionales. Es como en cumplimiento de mi deber honrado, tengo alta honra de informar á usted señor Presidente, ofreciéndole, como siempre, mi adhesión y pobre contingente á la causa. Espera justicia del señor General, su atento subalterno y correligionario. M. Sanchez G. Nota - El señor Capitán del Puerto, en su informe del Faro de la Puntilla de Santa Elena, no tiene conocimiento que Manuel B. González 3er Guarda faro no está desempeñando dicho puesto desde el 25 de Setiembre que abandonó en medio de una crápula espantosa que tenía, y que yo en vista de eso, tuve que llamar interinamente al señor Ambrosio Suárez como consta en mi oficio del 28 del mes citado y signado con el número 39, pasado á la Jefatura de la Zona, y últimamente por telegrama de 2do. Plaza fechado el 23 en que dice, que el dicho González no se ha presentado y el servicio de éste lo sigue desempeñando Ambrosio Suárez." 542 El señor Sánchez defendía un puesto que se lo había ganado y que otros, una vez realizadas las mejoras al faro, querían aprovechar. Al comenzar 1909 seguía el problema de disputa por el Faro de Santa Elena. El presupuesto del Estado contemplaba solamente $108 para cubrir la operación de ese faro, que correspondía al monto de la contrata con el Sr. Infante. Los sueldos de los tres guardafaros ascendían a mucho más, por lo que el Sr. Sánchez, 1er Guardafaro, pedía se revea esto. Por otro lado, parece que el Sr. Infante estaba interesado en tomar nuevamente la contrata, lo que generó una inmediata reacción del Sr. Sánchez, quien dice lo siguiente sobre el sueldo y la posibilidad que se vuelva a contratar el servicio: "...Por demás, señor General, y sería hasta irrisorio el que por medio de una nueva contrata con el mal ex-contratista, se le entregara y en buen estado, lo que él dejó arruinado; y por último verdad que sólo él, sería el único capaz de hacer dicha contrata por los $108, por que viviendo él en Santa Elena, como vive con tanta prerrogativa, no tendría más que poner á su peón Manuel R. González, pagandole 15 ó 20 sucres mensuales y poco le importa el servicio bueno, y al efecto, con el poco combustible que se le dé se arreglaría, aunque sea dando mala luz, 272 según el decir del mismo Manuel R. González..." Su argumento se basaba en los siguientes antecedentes: "...si el Supremo Gobierno se tarda un trimestre más en hacer su recepción, se hubiera encontrado el aparato enterrado en el cascajo: y no podía suceder de otro modo con un edificio sin servicio, todas sus puertas cerradas y habitado tan sólo por culebras y pájaros de altura y solamente bajo la custodia de un hombre ignorante que solo subía á las 6 de la tarde á encender el farol y luego se tendía á dormir y nada le importaba que la luz fuera buena ó mala; la lámpara, no bien limpia, funcionaba con una sola mecha y un tubo que no era de la lámpara sinó prestado en la oficina del Cable, razón por la cual siempre ha tenido un mal servicio y encontrarse el edificio en la ruina en que está, sin cerrojos; las chapas de las puertas y ventanas como sus bisagras, todas oxidadas por la falta de uso, sin una llave ni nada de seguridad; los pisos carcomidos y hechos pedazos, las cubiertas todo se llueve..." El edificio de ese faro, construido en 1882, no fue terminado, y aparentemente se había mantenido inconcluso todos estos años. De todos los faros de la costa, el de Santa Elena nunca tuvo la suerte de tener un buen servicio. El sistema de contrata siempre fue perjudicial para su funcionamiento, aunque pareciera ventajoso para el Erario. 543 Un Nuevo Reglamento para los Faros - 1909. En 1909, el Presidente Constitucional de la República, Eloy Alfaro, decretó un Reglamento para el Servicio de Faros. Este Reglamento, que constaba de 53 artículos, era bueno en el sentido de que se establecía claramente el orden jerárquico. Era muy detallado y prolijo en su cobertura de las funciones, obligaciones y responsabilidades del personal. Solo adolecía de una falla: No era claro e inequívoco en cuanto al financiamiento de la operación de los faros y el mantenimiento de las boyas, lo que restó efectividad a lo que, de otra manera, era un excelente reglamento, por lo cual las penurias económicas continuarían. Perdonables dentro del texto son los pequeños errores de orden técnico en cuanto a las descripciones de los faros lenticulares de rotación, pues esos errores eran entendibles dentro del contexto general del Servicio y los escasos conocimientos técnicos (de los aparatos) por parte del personal. 228 Informe de 1909. El Ministro de Guerra y Marina informaba sobre los faros, las boyas y el presupuesto para atenderlos: “FAROS.- Se han hecho algunas reparaciones en éllos, y se impone la necesidad de continuarlas especialmente en el de Punta Arenas, que se halla en completa 229 273 destrucción. Los HH: Legisladores no dudo que harán constar la correspondiente partida en la Ley de Presupuestos para las obras de reparación de los Faros existentes é instalación de otros en lugares convenientes. BOYAS.- Ninguna de las boyas que están marcadas en las Cartas Marinas de las Costas ecuatorianas existen en la actualidad y salta á la vista la necesidad de reponerlas cuanto antes y de mandar colocar ótras en los lugares más peligrosos para la navegación. PRESUPUESTO DE MARINA - FAROS: Art. _ _ Para el abone de sueldos á los Guarda-Faros, que se destinen por Decreto Ejecutivo, en la siguiente proporción: Guarda-Faro de primera $ 100 Guarda-Faro de segunda $ 80 Guarda-Faro de tercera $ 60 Guarda-Faro de cuarta $ 50 Se presume más ó menos $ 15.000 Art. _ _ Para alumbrado, víveres, reparaciones é instalaciones y más gastos que demande el servicio de Faros y Boyas: $ 30.000 Como podemos ver, la situación, a pesar del nuevo reglamento, no era muy prometedora para el servicio y se contaba con un presupuesto elaborado de la manera más informal. Informe de 1910. El Ministro de Hacienda reporta en 1910 que el Tesorero de Hacienda del Guayas reportó para los faros un ingreso de $ 8.913,94 y un egreso de $16.440,97 durante 1909, dando un déficit de $ 7.527,03 en la operación de los faros de Guayas. No se mencionan los otros faros de la República. 516 La Guía Comercial del Ecuador, 1910 En ese año se publicó la Guía Comercial, Agrícola e Industrial de la República del Ecuador. En ella es poco lo que se dice de los faros; sin emabargo, las dos fotos de faros que contiene nos permiten conocer el Faro de Punta Española, del cual no hay otra imagen, y ver el faro de la isla San Cristóbal, remodelado en 1905. 274 El Faro de Punta Española visto desde el pueblo. La torre del faro era cuadrangular y estaba ubicada muy cerca de la población, lo que hacía menos duro el trabajo del guardafaro. Foto de 1909. El Faro de Pto. Chico en 1909. Al fondo se ve el "...edificio sólido y elegante..." de 1905 Informe de 1911. En el Registro Oficial #1461 del 6 de febrero de 1911, el Ministro de Hacienda reporta las cifras de 1910: "Ingreso: $ 1.259,32. Egreso: $ 8.096,24. Déficit: $ 6.836,92." Es impresionante ver las diferencias entre un año y otro, lo que demostraría un caos en los procesos administrativos y operativos, y el consiguiente sufrimiento del personal. Para los meses de enero a marzo de 1911 se reportó solo egresos por $1.378,75. 517 518 275 Informe de 1912. Este informe sería prácticamente igual a los de anteriores años por cuanto las lamentaciones son las mismas. Lo que lo hace diferente es que los Capitanes de los puertos, en especial el de Guayaquil, hacen indicaciones que, el Ministro enfatiza, deben ser atendidas; pero como era de esperar, no lo fueron. El Informe comienza así: "La próxima apertura del Canal de Panamá, aumentando el tráfico en nuestras costas y puertos, como primera consecuencia, nos impone obligaciones que es conveniente considerar con la debida previsión." Poco más adelante añade: "El alumbrado de la costa es á la fecha deficiente y urge corregir este defecto á la brevedad posible. En general, casi todos los faros actuales reclaman reparaciones radicales, en varios de los cuales es menester reconstruir los edificios." Continúa más adelante: “El estado de los edificios de los faros es ruinoso y demanda la inmediata atención de los Poderes Públicos pues si el servicio de ellos se suspendiera, sin previo aviso á las demás Naciones, traería al país descrédito y responsabilidades. La acción del tiempo y la falta de cuidado para hacer oportunamente las reparaciones que exigían los edificios y la maquinaria anticuada de que disponemos para el servicio de Faros, requieren que se asigne en el Presupuesto Nacional una partida para construcción de torres y habitaciones nuevas y aparatos lumínicos para todos los Faros de la Costa...” Luego viene el listado de los 8 faros a cargo de la Capitanía de Guayaquil, pero no se mencionan los otros, a cargo de otras capitanías. Al final de esta parte del informe, el Ministro dice algo muy interesante: “El dragado del Puerto de Guayaquil se impone con la apertura del Canal de Panamá. El Gobierno del Ecuador contrató con la sociedad Sueca ‘Gas Acumulador,’ boyas luminosas y aparatos intermitentes, patente Dalen, con las cuales se marcarán los puntos difíciles de navegar en nuestras Costas. Los Escalafones de las Capitanías de Puertos y Guarda Faros los encontrará Ud. en los documentos anexos. Deben ser atendidas las indicaciones que hacen en sus respectivos informes los Sres. Capitanes de Puerto y, preferentemente, las que constan en el del Capitán de Navío asimilado Víctor E. Estrada, Jefe de la Oficina de este Puerto.” Cuando el Capitán del Puerto era un civil, se le otorgaba el rango asimilado de Capitán de Navío. Cuando era un oficial en servicio activo, mantenía su rango. 230 276 Es interesante anotar que la compañía sueca AGA había ganado el contrato para señalizar todo el Canal de Panamá, con sus novedosos equipos luminosos en base a gas acetileno. Informe de 1913. Este informe contiene muchas contradicciones. Mientras el Ministro habla de manera pesimista, uno de los capitanes de puerto lo hace con un optimismo que, si no hubiéramos conocido la realidad por los antecedentes, nos harían pensar que nuestro servicio de faros estaba en óptimas condiciones. Veamos lo que dice el Ministro: “CAPITANÍAS DE PUERTO.- Servicio importante al País, que dice de su adelanto y cultura, las Capitanías, quedaron descuidadas en el Presupuesto vigente, pues se rebajó su partida. Hoy se impone la necesidad de darles el personal necesario, personal que determinará el Presupuesto y que no dudo aprobará el Congreso. Las frecuentes desgracias acaecidas en los puertos de la República, impusieron al Gobierno la necesidad de escogitar los medios que garantizaran la vida de los ciudadanos. Se pidió al exterior dos botes salvavidas de gran capacidad, que en estos momentos marchan a los puertos de Bahía y Cayo y que muy pronto empezarán a prestar servicios. FAROS.- En todo tiempo fue motivo de elogio el servicio de alumbrado en nuestras costas, mas hoy, triste es confesarlo, no obstante los esfuerzos del personal, los faros ya no dejan satisfecho al espíritu de humanidad del pueblo ecuatoriano. Viejos ya, los faros se rinden a la acción del tiempo y no valen reparaciones, ni cuidados, ni bastan desvelos para que recuperen su antigua fama. Tiempo es ya que el país adquiera nuevas instalaciones, que siendo modernas nos darían una economía en el personal. Ojalá, es mi deseo ardiente, pudiera el país, adquirir los nuevos faros que el servicio reclama. La próxima apertura del Canal de Panamá, exige por otra parte que prestemos atención a tan importante servicio, pues a nadie se le oculta que el aumento de tráfico hará necesario mayores seguridades. Sería imperdonable no precaver desgracias, alumbrando nuestras costas, porque ello desdeciría de nuestro espíritu progresista y humanitario. J. F. Navarro.” 231 Geo Chambers Vivero es Inspector de Faros. Veamos lo que dice el Capitán del Puerto de Guayaquil e Inspector de Faros, en el mismo Informe de 1913: “...Al entrar a desempeñar las funciones de Inspector General de Faros, encontré que los faros marchaban en regular estado, pero mi mayor esmero fué el de que 277 éstos prestasen, en su más grado, los importantes que ellos están obligados a desempeñar; y hoy puedo manifestar con satisfacción, que este servicio no deja nada que desear, pues desde la fecha que vengo desempeñando este cargo, no ha habido queja alguna de parte de los Capitanes de Vapores que entran al puerto, antes se ha recibido con agrado de parte de los Capitanes, expresiones de complacencia por el buen servicio que desempeñan los faros; esto se debe tanto a las disposiciones terminantes impartidas por esta Inspección, así como por ser personal escogido y competente para desempeñar un cargo tan importante como delicado para la Marina , y que en toda parte del mundo es este servicio objeto de preferentes atenciones de los poderes públicos, ya que éste se enlaza con el buen nombre de todo país... ...Para terminar, manifestaré a Ud. que por lo pronto, el servicio de esta Capitanía, así como el de faros, se encuentran en buen estado, siendo sólo necesarias para la mejor administración, las reformas que dejo anotadas en el presente informe. Guayaquil, Junio 5 de 1913. El Capitán del Puerto e Inspector General de faros. Geo Chambers Vivero.” Luego del informe del Capitán del Puerto de Guayaquil e Inspector de Faros, es pertinente conocer también el del Capitán de Puerto Bolívar, pues servirá como referencia por futuras declaraciones: “Bajo la vigilancia de esta Capitanía, solo existe el Faro de Jambelí, situado en el estuario de esta Bahía, el que hace un servicio imperfecto, por lo deficiente del fanal, por la falta de previsión en la construcción de la torre en que está colocado éste y por estar ya fuera del radio preciso de su ubicación. Al respecto solicité la aprobación de un Presupuesto para construir una pequeña habitación en que pueda albergarse el Guarda Faro (pues éste tiene que vivir en ese mismo lugar) y otro alto servicios 278 para reparar el edificio de la torre; de los cuales sólo aprobaron este último, a fines del mes próximo pasado.” Podemos observar las diferencias radicales de los informes. Lejos de emitir juicios, dejaremos que sean los documentos que han leído y leerán más adelante, los que guíen su opinión sobre la historia. Don Geo Chambers usaba el título de “Inspector General de Faros” y si bien ese título no existía de acuerdo con el Reglamento vigente sino el de simple “Inspector,” nadie le reclamó al Sr. Chambers y él siguió usando el título expandido hasta hacerlo de uso común. El Sr. Chambers tenía el rango de Capitán de Navío asimilado, pero nos referimos a él por su título como Capitán del Puerto de Guayaquil. Informe de 1914. En este informe hay mejor coordinación de información entre el Ministro y el Capitán del Puerto de Guayaquil. Este informe es notable por su proyección hacia el futuro y la insistencia de completar algo empezado y dejado en suspenso. Dice el Ministro: “FAROS, BOYAS Y VALIZAS.- Con motivo de aproximarse la apertura del Canal de Panamá al tráfico mundial, estamos en el imperioso deber de alumbrar bien nuestras costas no sólo por el interés que representa para nosotros la visita de numerosos buques extranjeros, sino también por el prestigio del País y su adelanto, si se prepara a recibirlos, franqueando y aseando sus puertos. Para realizar este objeto, conviene designar cuanto antes una Comisión que informe sobre el estado de los faros existentes y determine las reparaciones requeridas, tanto por los edificios, como por los aparatos, señalando los sitios más convenientes para colocar otros faros, o bien valizas o boyas. La segunda providencia que debería tomarse inmediatamente es la de perfeccionar el contrato iniciado en Marzo de 1911, con la compañía zueca ‘Svensks aktiebo laget gas accumulator, stockholm’, sobre la provisión de aparatos y materiales luminosos para boyas, faros y valizas; esta Casa es recomendable por cuanto sus faros son de reconocida bondad y seguro funcionamiento y que, por ser automáticos, ahorran los gastos de personal. Por espacio de un año o nueve meses, debido a su mecanismo, alumbran sin interrupción durante las noches, desde la puesta hasta la salida del sol. Este sistema de iluminación de la Costa sería pues más económico. En la República de Chile el alumbrado del Estrecho de Magallanes y el avalizamiento de casi todos los peligros de la costa, se hizo con aparatos de esta clase y fábrica. 330 279 Esta obra se aunaría a la de dragar y avalizar el río Guayas, a fin de que no haya el menor recelo en navegarlo aún por la noche. El Ministerio, por su parte, no omitirá esfuerzo alguno con el objeto de que se practiquen estos trabajos, de vital importancia para el País, y, especialmente, para la ciudad de Guayaquil.” Y veamos lo que decía el Inspector General de faros: “Este servicio está en la actualidad regularmente servido mediante a las medidas dictadas al respecto, y la selección de los empleados que los sirven, quienes se desempeñan a satisfacción de los navegantes que visitan nuestras costas y Golfo de Guayaquil. Los faros existentes en la actualidad son: Data, Punta Mandinga, Punta Española, Punta Arenas, Santa Clara, Jambelí, Santa Elena, Isla de la Plata, Manta, Esmeraldas y San Cristóbal. Todos estos, son Faros y Fanales de tercer orden, y que por su sistema anticuado merecen, excepto Punta Española y Jambelí, cambiarse totalmente por un sistema más moderno ya que con la próxima inauguración del Canal interoceánico y la proximidad de nuestras costas a éste, están llamados a prestar importantes servicios a la navegación de los vapores que cruzan nuestros mares; mereciendo más especial atención los de Santa Elena y La Plata, que son los más necesarios para los navegantes al tomar su rumbo, sea al Norte o Sur. Las reparaciones no solamente se contraen a los Faros, sino también a los edificios en que habitan los empleados, los que, al menos, debe hacérseles una pronta y prolija reparación en su totalidad, por encontrarse en completo mal estado...” Al calificar el Inspector a todos los “Faros y Fanales de tercer orden,” nos indica que nunca los había visto ni, en dos años, tenía idea de como eran. Al excluir de los faros a cambiarse al de Puerto Bolívar, nos indica que ni siquiera conocía el informe del Capitán de ese Puerto. Parecería que el Capitán Chambers tenía mucho más optimismo que conciencia de la realidad de los faros. No por esto le restamos méritos, pues ocupó su puesto de Inspector General de Faros y Capitán del Puerto de Guayaquil por más de diez años. Adicionalmente, por la forma en que se manejaba el presupuesto y el escalafón, los faros eran una carga pesada para la Capitanía del Puerto de Guayaquil, que ni siquiera tenía suficiente personal para sus funciones específicas. 280 Informe de 1915. En 1915 no se reportó sobre los faros, pero sí se realizó una relación de los impuestos y rentas. "En Guayas tenemos como único impuesto de faros el de 10 ctvs. por tonelada, por cada luz establecida en los puertos donde entren los buques. Este impuesto es el contemplado en los arts. 73 y 74 del Arancel de Aduana vigente a la fecha." 519 La Carta de Navegación #586 del Almirantazgo Británico, en su edición publicada en 1914, traía novedades nada halagadoras sobre los faros ecuatorianos. Desde la expedición de la comisión especial para realizar el levantamiento de las costas de América del Sur, en 1836, a bordo de la H.M.S. "Sulphur," las cartas náuticas del Almirantazgo, revisadas periódicamente, habían sido las más precisas y las preferidas por los navegantes. Eran la autoridad sobre la navegación y los marinos dependían de ellas. La situación de nuestros faros era tal que el Almirantazgo los calificó como irregulares y que no se podía depender de ellos, lo cual demostraba la crisis en que se debatía el Servicio de Faros. Ni el mayor optimismo podía cambiar la situación real, que era de un lamentable deterioro. 547 A continuación vemos las partes de la Carta #586 del UKHO, edición de 1914, que corresponden a los faros del golfo (menos Jambelí), y una boya que ya no existía para cuando salió publicada la Carta. Bajo las características del Faro de Punta Mandinga se añadió la parabra inglesa "unreliable" que indica que no se puede depender de la luz. ← 281 Lo mismo dice bajo el Faro de Punta Española. → El Faro de Punta Arenas está calificado como "Irregular" en su funcionamiento. ← El Faro de Santa Clara, el más importante del país, también estaba calificado como "Irregular" en su funcionamiento. → Los mismos calificativos recibieron los faros de Santa Elena, Manta y Esmeraldas. No se sabe del de San Cristóbal. El único que se salvó de ser cambiado en su calificación fue el de Jambelí, que mantuvo sus características sin observaciones. Para este año, la única boya que quedaba en cartas era la de la cabeza norte del Banco de Mala, la que según los Informes, ya no existía físicamente. ← 282 Informes de 1916. En el informe de Guerra y Marina, fechado junio 1° de 1916, encontramos una joya del Comandante de la Tercera Zona Militar y Comandante General de Marina, Coronel Moisés Oliva, que ya había perdido la paciencia con la repetición de las mismas situaciones: "Sobre las reformas de estas Oficinas (las Capitanías de Puerto) y de los Faros que están bajo el control de la Capitanía de este Puerto, se ha hablado mucho en todos los informes anteriores, informes que no han merecido ninguna clase de atención, por cuyo motivo me excuso en el presente de decir lo mismo que tantas veces se ha dicho." Para ese año 1916 se adoptó la cómoda salida de aplicar el presupuesto de 1914 para Marina y Faros, lo que fue resuelto mediante Decreto Ejecutivo del 31 de diciembre de 1915. El 8 de febrero de 1916 se estableció el fanal de Isla Verde y se reformó la partida 24 del presupuesto, con el fin de asignar $1.880,oo anuales para el pago de la embarcación encargada de la provisión de víveres, combustible, etc. para los faros. También se suprimió la partida para el 2° Guardafaro de Santa Clara, una resolución inexplicable. La categoría del Guardafaro de Jambelí se rebajó de 2° a 3°. El informe del Ministro de Hacienda reportaba lo siguiente: "Ingreso total en 1915: $7.070,46." No se mencionan los egresos. 520 Informe de 1917. El Ministro de Guerra y Marina en 1917 era Rafael Pino Roca, quien reporta que: "De acuerdo con los datos suministrados por los funcionarios respectivos, este Departamento solicitará al Honorable Congreso de la República, al formular el Presupuesto de Guerra y Marina, señale los valores que deben dedicarse al arreglo de las Capitanías de Puerto, mejora y aumento de los Faros existentes, igualmente que a la colocación de Boyas e incremento de la Sección de Telegrafía Inalámbrica, servicios todos indispensables para el buen nombre del País y desarrollo de su comercio." 521 Informes de 1918 y 1919. Para 1918, la situación de los faros no había mejorado y mas bien era peor. Tal era la situación que, en los faros de rotación que requerían de tres Guardafaros, solo habían dos. El Faro de Manta quedó apagado al suprimirse el cargo de ese Guardafaro. En 1919 el Ministro dice que: "Se ha atendido normalmente a las reparaciones, consumos de los buques, balandra, lanchas, faros, Capitanías de Puerto, etc., etc." Adicionalmente se reporta que, finalmente, se reparó el 234 331 y 522 283 Faro de Jambelí. También se compró una torre de fierro para el Faro de Puná (Punta Mandinga) y, finalmente, ya en sus postrimerías, se hicieron las reparaciones necesarias en el Faro de Punta Arenas. La balandra "General Villamil" jugaría un importante papel en los faros dentro de pocos años. Veamos lo que reporta el Ministro sobre ella: "La Balandra <<General Villamil>> se ocupa en traer sal de las salinas respectivas y ha sido reparada en Mayo 19, en Julio 30 de 1919 (es 1918) y en Junio 23 del que decurre y se le ha dotado del cabo necesario, para sus diferentes servicios, así como de otros artículos, de menor importancia." En la parte siguiente veremos el cambio de los faros iluminados por queroseno y aceite de oliva a los iluminados por gas acetileno. Este cambio daba una mejor luz a un costo muchísimo menor de mantenimiento, a más de que reducía la dependencia física de las personas, ahorrándose así en personal y sus provisiones. ---------------------------------------------------------------------------------- A continuación una imagen de 1913, que marca el balizamiento AGA del Canal de Panamá. 284 Parte 6.- Los Faros AGA 1921 - 1941 285 286 Capítulo 24.- Los Faros AGA Antecedentes. Como vimos antes, en marzo de 1911, durante el Gobierno de Eloy Alfaro, se había resuelto la compra de los faros AGA para reemplazar los antiguos, pero no se había completado la contratación. A fines de 1920 y comienzos de 1921 se había reactivado el interés del Gobierno y se había resuelto contratar los faros que reemplazarían los ya muy deteriorados, así como se instalarían algunos nuevos. El proceso estaba ya avanzado y el contrato firmado cuando se encontraron con el escollo de que era necesario realizar un proceso de licitación. A más de eso, había una propuesta para la provisión de faros, de un Sr. P. Cudie, que daba al traste con los planes del Gobierno, aunque su propuesta no era tan ventajosa como lo era el contrato firmado directamente con el fabricante. Buscaron el mecanismo legal para obviar ese requisito de licitación y se determinó que era necesaria una resolución del Consejo de Estado, el cual entregó el estudio del asunto a una comisión de sus miembros, la cual emitió informe favorable para que se proceda con el "contrato ad-referendum." El 29 de marzo, mediante oficio N° 64, el Secretario del Consejo de Estado comunicaba al Ministro del Interior que "...el Consejo de Estado, en sesión celebrada el 22 del presente mes, aprobó el siguiente informe recaído en la solicitud de ese Departamento para omitir el requisito de licitación para la compra de diez y seis faros destinados a la Costa Ecuatoriana." El informe dice, en muchas palabras, lo que ya hemos dicho en pocas. Estaba abierto el camino para la adquisición de los faros AGA. 523 Resueltos los impedimentos legales y con la disponibilidad de los fondos necesarios, el Gobierno de la República del Ecuador, representado por el Gobernador del Guayas, Sr. Francisco Eleodoro Ferrusola Morlás, y el Sr. Otto Berg von Linde, representando a la Guayaquil Agencies Company, a su vez representante de la Compañía Anónima Svenska Aktiebolaget Gasaccumulator, de Estocolmo, Suecia, firmaron el respectivo contrato de fabricación y compra-venta de 16 faros automáticos sistema AGA. Poniendo a un lado toda la verbosería legal, el Gobierno del Ecuador compró a la Svenska Aktiebolaget Gasaccumulator lo siguiente: Diez y seis faros de las siguientes características: 524 287 1. Dos faros Santa equivalentes al cuarto orden, destinados para la Isla de Clara y la Puntilla de Santa Elena, con las siguientes especificaciones cada uno: Una linterna AGA LBFA 500, completa con ocho prismas de reflejo total, tambor dióptrico de cristal pulido, diámetro interior de 500 milímetros, abarcando un horizonte de 360°. El armazón de fierro y cobre amarillo. Peso 385 Kgs. Un aparato luminoso AGA KME 130, completo. Destellador K 130 para destellos simples. Portamechero con un quemador ZBFA 120, de 120 litros por hora y dos picos piloto EB 30. Intensidad de la llama libre, 180 H.C.P correspondiente a 2.300 H.C.P. por el lente. Alcance luminoso, 16 millas 6/10. Nueve acumuladores AGA AKB 50 completos y nueve de recarga. Una valvula solar AGA completa con soporte. El faro completo, de acuerdo con la especificación que precede, entregado CIF en el Puerto de Guayaquil, (sin impuesto de Aduana): 2.685 libras esterlinas. 2. Tres faros equivalentes al cuarto orden, destinados a Punta Española, Punta Arenas y Jambelí, con las siguientes especificaciones cada uno: Una linterna AGA LBFA 500, completa con ocho prismas de reflejo total, tambor dióptrico de cristal pulido, diámetro interior de 500 milímetros, abarcando un horizonte de 360°. El armazón de fierro y cobre amarillo. Peso 385 Kgs. Un aparato luminoso AGA KME 130, completo. Destellador K 130 para destellos simples. Portamechero con un quemador ZBFA 50, de 50 litros por hora y un pico piloto EB 30. Intensidad de la llama libre, 72 H.C.P correspondiente a 1.100 H.C.P. por el lente. Alcance luminoso, 14 millas 3/10. Cuatro acumuladores AGA AKB 50 completos y cuatro de recarga. Una valvula solar AGA completa con soporte. El faro completo, de acuerdo con la especificación que precede, entregado CIF en el Puerto de Guayaquil, (sin impuesto de Aduana): 1.829 libras esterlinas. NOTA: Estos tres faros tenían la misma linterna que los dos anteriores, pero cambiaba el quemador, que le daba la potencia lumínica. Los dos primeros tenían quemador de 120 litros y estos tres tenían quemador de 50 litros. 3. Once faros equivalentes al sexto orden, destinados a Punta de Piedra, Isla Verde, Punta Mandinga, Punta Galera, Puertos de: Esmeraldas, 288 • • • Manta, Manglaralto y Data; Cabos de: Pasado, San Lorenzo e Isla de la Plata, con las siguientes especificaciones cada uno: Una linterna AGA LBFA 200, completa con ocho prismas de reflejo total, tambor dióptrico de cristal pulido, diámetro interior de 200 milímetros, abarcando un horizonte de 360°. El armazón de fierro y cobre amarillo. Peso 67 Kgs. Un aparato luminoso AGA KME 130, completo. Destellador K 130 para destellos simples. Portamechero con un quemador ZBFA 15, de 15 litros por hora y un pico piloto EB 30. Intensidad de la llama libre, 16 H.C.P correspondiente a 130 H.C.P. por el lente. Alcance luminoso, 8 millas 5/10. Dos acumuladores AGA AKB 50 completos y Dos de recarga. El faro completo, de acuerdo con la especificación que precede, entregado CIF en el Puerto de Guayaquil, (sin impuesto de Aduana): 622 libras esterlinas. Total del contrato: 17.699 libras esterlinas CIF Guayaquil, sin impuestos aduaneros. La Sociedad Svenska Aktiebolaget Gasaccumulator enviará a Guayaquil, junto con los faros y los elementos necesarios para su instalación, un técnico notoriamente experto para dirigir y vigilar la colocación de los faros, el cual dirigirá los trabajos hasta su terminación, no debiendo exceder éste de tres meses, salvo fuerza mayor o caso fortuito. Después de terminada la colocación, dicho técnico permanecerá hasta completar seis meses desde su llegada a Guayaquil, dedicándose al cuidado de los faros, con la obligación de instruir en su manejo a las personas que designe el Gobierno. Éste pagará al técnico en referencia el sueldo de 75 libras esterlinas y el valor de pasajes del viaje de venida y regreso, a razón de 100 libras cada pasaje. La forma de pago fue 50% máximo a dos meses de poner la orden, 25% al llegar los faros y 25% 90 días después de terminada la instalación y comprobado su correcto funcionamiento. 524 Preparación para la Llegada de los Faros. Se había concretado la compra de los faros AGA y el Ministro de Guerra y Marina había dado una disposición sobre la preparación para la colocación de esos equipos. El Capitán del Puerto de Guayaquil escribió al respecto al 289 en los Cmdte. Gral. de Marina: “Cúmpleme avisar recibo de su muy atenta comunicación signada con el número 133 transcribiendo la orden del Sr. Ministro de Guerra y Marina sobre colocación de faros y, cumplimiento de la referida orden, acompaño una nota de los lugares donde se han de colocar los faros, su radio de visivilidad y destellos.” 237 Las palabras del Capitán del Puerto no fueron vacías, pues en base a información técnica que debe haber llegado oportunamente, se inició la construcción de las torres de acuerdo a las características de cada equipo y de su ubicación, de tal forma que, cuando estos llegaron, la mayoría de las torres ya estaban listas para recibir los aparatos. Informe de 1921. El 30 de junio de 1921, el Ministro de Guerra y Marina informaba a la Nación: “El señor Presidente de la República, por medio de la Gobernación de la Provincia del Guayas, celebró un contrato con la Svenska Antievelaget Gasacumulator de Stokolmo, para la provisión de 16 faros a luz de acetileno, para renovar y aumentar los existentes en las costas ecuatorianas. Los faros nuevos, según informaciones últimamente recibidas de la citada firma, han sido ya embarcados y estarán aquí dentro de muy breve tiempo. Mientras tanto, se procede con toda actividad a la colocación de las torres que han de soportarlos, de modo que no se produzca el menor retardo para asunto de tanta importancia. Con esta instalación, tan moderna como completa, las costas de nuestro país serán una de las mejores señaladas para la navegación de todo Sudamérica. Los Faros adquiridos por el Sr. Presidente de la República, para el servicio de nuestras costas, son del sistema automático ‘AGA’, universalmente reconocidos como el más moderno y práctico de todos los existentes. Funcionan sin manejo o cuidado durante largos períodos de tiempo, sin requerir, en consecuencia, atención o servicio especial, sino una o dos veces al año aproximadamente, trabajando todo el tiempo con una precisión y seguridad admirables. El combustible es acetileno disuelto en acetona. No ofrece peligro alguno y es sumamente económico. 290 Entre la serie de ventajas de estos faros, consta la de que los picos no se grafitan y los vidrios y lentes se mantienen limpios durante mucho tiempo, hechos que se explican con la presión constante del gas y la gran pureza de éste en los acumuladores. El aparato destellador ‘AGA’ da a la luz del faro la caracteristica especial que le corresponde. Se le ha construido de manera que funcione con absoluta seguridad, pudiéndose obtener con él destellos en grupos de uno por uno con intervalos regulares y de la duración que se desee, cerrándose automáticamente la entrada de gas durante el período de obscuridad y consumiéndose el gas únicamente durante los destellos. Otro aparato economizador de gas es el llamado ‘Válvula Solar’, que apaga automáticamente el faro a la luz del día para encenderlo de nuevo al obscurecer, funcionando, además, en tiempo de neblina y en dias nublados. El Inventor es el conocido Ingeniero Gustavo Dalén.” El informe del Ministro no podía ser más explicativo sobre los nuevos faros, pero lamentablemente no dice absolutamente nada sobre los aparatos que se retirarían. Además no reconoce que el contrato había sido firmado en 1911 por el Presidente Alfaro y que el Gobierno actual lo que había logrado era concluirlo. 332 Continúan los Preparativos para Recibir los Faros AGA. El Comandante accidental de la Marina le había ofrecido al Capitán del Puerto de Guayaquil su apoyo en la instalación de los equipos nuevos. El 3 de julio de 1921 el Capt. Chambers agradece la oferta mediante la siguiente comunicación: “...Tan pronto lleguen los Faros pasaré personalmente a su despacho para solicitar la ayuda necesaria para todo lo relacionado con la Instalación de esta grandísima mejora que en breve tiempo veremos convertida en Patriótica realidad...” 238 Los faros deben haber llegado ese mismo día o pocos días después, ya que el 8 de julio de 1921 se instaló, en el Fuerte de Punta de Piedra, el primer faro AGA. Mientras se esperaban los nuevos aparatos, los antiguos seguían funcionando y seguían requiriendo de abastecimientos. Como no se contaba con embarcación propia para ese servicio hasta fines de febrero de 1921, se había contratado la balandra “Luisa Diamantina” para ello. El 23 de agosto de 1921 el Capitán del Puerto escribía al Cmdte. General de Marina: “Manuel Quimí, Armador de la Balandra ‘Luisa Diamantina’, manifiesta 291 que la Tesorería de Hacienda de esta Provincia, hasta la fecha no le ha cubierto sus haberes que le corresponde por arriendo de la expresada Balandra ‘Luisa Diamantina’, por los meses de Enero y Febrero del presente año, segun contrato que tenia con el Supremo Gobierno, para llevar materiales y combustible a los Faros del Golfo y la Costa, por falta de orden de pago del Ministerio de Hacienda. Como creo justo dicho reclamo por haber efectuado el servicio en los meses expresados, pido a Ud. se digne solicitar del Señor Ministro de Guerra y Marina, recave del de Hacienda, la respectiva orden de pago, a fin de que dicho Quimí, sea cubierto de lo que justamente reclama...” 239 Antes de la llegada de los faros, específicamente en mayo de 1921, había llegado un técnico sueco, Mr. Ellwe, para supervisar la conclusión de los preparativos y realizar las primeras instalaciones en cuanto llegaran los aparatos. El Capitán del Puerto e Inspector General de Faros había solicitado el concurso del Ingeniero Antonio Capovilla en la instalación de los faros, lo que había sido concedido. Él era un ingenioso profesional y experimentador nacional que estaba al servicio de la Marina de Guerra. El Ing. Capovilla estuvo con Mr. Ellwe desde la primera instalación y ya en agosto habían solicitado su retorno a su puesto normal de trabajo. El Inspector General escribió el 30 de agosto de 1921 al Comandante General de Marina: “Solicito de Ud se sirva disponer que el Ingeniero Capovilla de la Armada Nacional siga viaje a la Instalacion de los Faros de Punta Española, Punta Arenas, Santa Clara y Jambelí, con el objeto de que haga una practica del manejo de estos Faros asi como de la forma de cambio de combustible de manera que, en cualquier momento pueda dicho Ingeniero hacer las revisiones del caso i la recarga de los tubos.” 240 292 Para el 14 de octubre el Inspector General informaba al Comandante General de Marina sobre el progreso de las instalaciones: “Cumpleme llevar al conocimiento de Ud, estan ya en funcionamiento los siguientes Faros: Punta de Piedra, Isla Verde, Puna, Punta Arenas y Jambeli. Acompaño un numero de impresos en que estan anotadas las caracteristicas de los Faros que se estan instalando y le ruego enviar algunas de estas al Ministerio de Guerra y Marina haciendo notar que esta es la forma en que quedaran cuando esten todos instalados.” 241 Las características de los faros AGA eran distintas a las de los antiguos faros. Estos nuevos ya no se clasificaban en órdenes sino de acuerdo a la capacidad de los quemadores Dalén, que daban la fuerza lumínica. La única forma de compararlos era con su alcance lumínico, lo que no hacía el cuadro que hemos visto. En Anexo “E” encontrará el cuadro completo con los alcances lumínicos y las fechas exactas de instalación de cada uno de los 293 aparatos AGA, Esta información aparece aquí cortesía de Lindegas A.G., actuales propietarios de AGA. El 19 de noviembre de 1921 el Armador de la “Luisa Diamantina” seguía tratando de cobrar su contrato. Escribe el Inspector General al Cmdte. General de Marina: “Reitero pedido de pago al Sr. Quimí, armador de la 'Luisa Diamantina' que prestó servicio (a los faros) hasta el 29 de febrero de 1921 en que, de orden del Supremo Gobierno entregó dicho servicio a la balandra ‘General Villamil.’" 242 El Ingeniero Capovilla estaba destinado al Caza Torpedero Libertador Bolívar y su comandante quería mantenerlo a su servicio. El 19 de noviembre de 1921 escribió al Cmdte. Gral. de Marina lo siguiente: “El Ing. De 1° Antonio Capovilla viene prestando servicio a la Marina Nacional desde el año 1910, casi sin interrupción; actualmente el S. Gobierno le ha confiado la comisión especial de instalar definitivamente los nuevos faros sistema AGA, que reemplazarán a los antiguos fanales de la costa...” Y pide su ascenso a Ing. de Corbeta. 243 El Fin de una Etapa... y Comienzo de Otra. El 12 de diciembre de 1921 el Comandante de la balandra “General Villamil” escribe al Cmdte. Gral. de Marina: “Tengo el honor de comunicar a Ud. que ayer a las 6-30 p.m. ancló la balandra a mi mando, de regreso de los faros del Golfo, conduciendo el personal que llevé para la instalación de los faros de Pta Española i Santa Clara.” Y con esta diligencia de la balandra “General Villamil” había concluido una etapa, la de los Faros Lenticulares, para continuar la ya iniciada de los Faros AGA. No dice el Cmdte. Cucalón qué hicieron con los faros antiguos, pero lo más probable es que, al menos el de Santa Clara, haya quedado temporalmente en la isla por su peso y tamaño, que lo hacían difícil de transportar. 244 A partir de ese trabajo en la instalación de los faros AGA, la balandra “General Villamil” quedó destinada al Servicio de Faros. Había sido incorporada a la Marina en 1917, con la siguiente dotación de personal: Un Oficial hasta Alférez de Navío, como Comandante; dos Marineros Primeros; dos Marineros Segundos; dos grumetes; y, un cocinero. Sin embargo, el primer Comandante de la nave fue el Teniente de Fragata 294 Enrique Cucalón Santos, quien permaneció al mando de esa nave hasta 1922, dejándola cuando ya tenía el rango de Capitán de Corbeta. Informe de 1922. En su informe a la Nación, el Ministro de Guerra y Marina dice: “FAROS.Con toda satisfacción puedo informar al país, que los propósitos del Gobierno, en orden a la sustitución de todos los Faros de nuestra Costa, que eran de sistema anticuado con otros modernos, como son los del tipo ‘AGA’, se han cumplido totalmente, pues los trabajos de instalación se han terminado y, así, el Gobierno se ha hecho acreedor a la felicitación y al aplauso de todas las Compañías de Navegación que surcan el Pacífico y que cuentan con una nueva y eficaz garantía para sus empresas comerciales. Indico, a continuación, el lugar en que están instalados los nuevos faros, sus condiciones de capacidad y otras que prueban las ventajas de una innovación que podemos presentar al país como un hecho ya producido y que se debe totalmente al actual Gobierno.” A continuación está inserto el cuadro que ya vimos anteriormente. No podemos dejar de observar aquí que el Sr. Ministro exageraba un poco al querer darle todo el crédito al gobierno actual, pues el proceso, como ya lo vimos, se había iniciado muchos años antes, en 1911. Continúa el informe: “Como se ve, estos faros están provistos con todos los últimos adelantos modernos, y su correcto funcionamiento es completamente satisfactorio, haciendo una economía al Fisco de $18.840.oo anuales. En la instalación de estos faros, han prestado importantes servicios los señores Ingenieros Antonio Capovilla y Elbert (Ellwe ), quienes, con todo empeño, han secundado el interés del Departamento de Guerra, a fin de que los trabajos se efectúen con la más perfecta economía y en las mejores condiciones.” autor 248 Trabajos Rutinarios. La Comandancia de la Marina había recibido un reclamo de la Oficina Hidrográfica de los EE. UU., pues se quejaban de que la ubicación del Faro de Jambelí no concordaba con la establecida en la carta #1391 de esa Oficina. El Cmdte. del Caza Torpedero Libertador Bolívar, CPFG Diógenes Fernández, recibe el encargo de determinar la exactitud de las coordenadas del faro e informar. Él realizó un prolijo trabajo que reportó en un extenso informe, en el cual detalla el proceso usado para hacer las mediciones y comprobaciones, pero del cual solo citaremos las conclusiones: “Se concluye después de investigar que las coordenadas son las mismas que constan en la carta #586 del Almirantazgo Inglés. Hay discrepancias en toda la 295 carta #1391 de la Oficina Hidrográfica de Washington con la #586, considerando que la americana está errada.” Carta # 586 U. K. Hydrographic Office Carta # 1391 U. S. Hydrographic Office Aprovechando ese viaje, el Cmdte. Fernández hace algunas observaciones sobre los faros: “El nuevo faro de Punta Arenas, del sistema AGA, ha sido trasmudado grandemente de la primitiva en la que todavía se encuentra la torre de madera del antiguo faro que funcionaba con kerosene. La diferencia es de 6/10 de milla. Las nuevas instalaciones de los faros de Isla Verde, Pta. Mandinga, Pta. Española y Pta. Arenas adolecen de defectos. Durante el día es prácticamente inútil pretender servirse de ellos para tomar marcaciones porque las torres en que se hayan instalados los fanales no se ven por estar en esqueleto (una estructura de ángulo muy delgado) y al tener follaje al fondo, no se ven. Sugiero forrarlas con tablas espaciadas, pintadas de blanco por lo que serían durante el día tan eficaces y oportunos como lo son durante la noche por la magnífica luz que produce el nuevo sistema de faros AGA de gas acetileno.” 247 296 El Relato de Mr. Ellwe. El “AGA Journal,” revista interna de información de la compañía, publicó en su edición de diciembre de 1922 un recuento de parte de las experiencias de Mr. Ellwe en la instalación de los faros en Ecuador. Este relato, y las fotos de Mr. Ellwe, los reproducimos íntegramente a continuación, por su valor histórico. “El sistema AGA ha sido introducido prácticamente en todo el mundo y es raro que tengamos la oportunidad de mencionar el nombre de algún estado que no haya aparecido antes en nuestras columnas. En cuanto concierne a AGA, la República Sudamericana de Ecuador era un vacío en el mapa del mundo. Ahora esa situación ha cambiado y Faros AGA centellean su advertencia a los buques que pasan o entran a puerto. Ecuador es una tierra que permite vastas posibilidades de desarrollo y la tarea de modernización está siendo perseguida con avidez en varias direcciones, con el objeto de incrementar la prosperidad de la tierra, obteniendo un mercado para sus productos naturales y fomentando el intercambio con otras naciones. El asunto de convertir los antiguos faros en esta tierra a un sistema moderno ha sido uno de los temas más prominentes que se han discutido. Esta comisión se encargó finalmente a la Guayaquil Agencies Co., quienes representan a AGA en Ecuador a través del Sr. Carlos de Staël. De la extensa cobertura que le dio el principal periódico “El Nacional,” es evidente que la conversión de las luces creó un gran interés y constituyó un tema importante en el esquema de modernización para el beneficio de la navegación y el comercio. Prácticamente una edición entera de ese periódico se dedicó a relatar el trabajo de conversión de 16 faros y se publicó una copia del contrato. En mayo del año pasado (1921), después que el material había sido enviado y todas las actividades preparatorias para erigir los aparatos se presumían completadas, AGA envió uno de sus expertos instaladores, el Sr. Ellwe, para ejecutar el montaje de las varias instalaciones. Cuando él regresó (en 1922) después de una tarea bien cumplida, el editor estaba naturalmente ansioso por preguntarle sobre su viaje. ¿Había traido a casa, en su baúl, algunas fotografías atractivas? ¿Tenía algún souvenir de sus aventuras en la tierra cercana al Ecuador? ¿Cómo evolucionó el montaje de los equipos? ¡Por supuesto! Tenía fotografías para reproducir y experiencias para relatar. El montaje había sido exitoso a pesar de las dificultades y penurias, y Mr. Ellwe se las había arreglado para mantener su buen humor. La primera instalación que fue montada fue la de Punta de Piedra, en la vecindad de Guayaquil. Cuando fue finalmente completada, probada y considerada 297 satisfactoria, se realizó un ceremonial para su inauguración, con la presencia del Ministro de Guerra y Marina, don Octavio G. Icaza; el Inspector General de Faros, Capitán Chambers, así como un número de personajes prominentes representando a las autoridades militares y civiles; el Sr. Carlos de Staël y Mr. Ellwe. La ceremonia fue seguida por una cena formal, durante la cual se expresó oficialmente gran satisfacción con el sistema AGA. El comienzo fue, por lo tanto, muy agradable. Pero cuando se montó la segunda instalación, Isla Verde, las dificultades comenzaron a hacerse evidentes. Isla Verde es un pequeño islote, situado en la entrada a Guayaquil. Aquí lo miembros de la expedición experimentaron grandes dificultades para defenderse de las plagas de mosquitos y se encontraron dificultades para desembarcar en esta isla de verdor. El lugar de desembarco consistía en un playón de lodo profundo. Unos cuantos troncos protuberando a través del fango es todo lo que quedaba del muelle que alguna vez existió allí. ¡Pero no había razón para angustiarse! Los asistentes nativos no dudaron en lanzarse al lodo que les llegaba hasta el pecho, entre miles de cangrejitos, molestando así su alegre existencia. Con el fin de transportar el material de la nave, las cajas de empaque tuvieron que ser desarmadas para usarlas como tablas para hacer un camino sobre el lodo. Estas no eran suficientes para extenderse todo el trecho, por lo que había que levantar las primeras para continuar el camino, por lo tanto el transporte del material procedió lentamente. Alertado por esta experiencia, Mr. Ellwe llevaba una cantidad de madera liviana cuando visitó la isla otra vez, evitándose así un baño de lodo. Después de este episodio, troncos de madera liviana siempre acompañaron a la expedición en sus viajes, de tal forma que uniéndolas para formar balsas, tanto el material como las personas podían ser desembarcadas a través de las olas para llegar al sitio de desembarco en la playa. A pesar del lodo y los mosquitos, el trabajo avanzó bastante bien. Este fue el caso en San Lorenzo, donde el sitio de montaje de la luz estaba en la cima de un roca 298 escarpada; fue fatigante y caluroso, y antes de que el material pudiera subirse, fue esencial labrar un camino en zig-zag en la roca. En más de una ocasión fue necesario cortar un camino a través de un denso bosque que se extendía desde el lugar de desembarco y el lugar de instalación, como por ejemplo en Punta Española y Cabo Pasado. Aquí fue necesario forzar un camino a través de profundidades oscuras, tumbando árboles, plantas y tupido follaje para abrir un camino. La vía que eventualmente se hizo formaba un túnel a través del cual se llevó el material. Hablando de dificultades, nos recuerda un episodio gracioso relatado por Mr. Ellwe, una experiencia que nos remonta el pensamiento al primer libro de aventuras de nuestra juventud, Robinson Crusoe, y sus aventuras en una isla deshabitada. La ocasión fue el montaje de la luz en la Isla de La Plata, una isla situada aproximadamente a 35 millas náuticas de Santa Elena. El pequeño velero con la expedición de montaje a bordo (la balandra ‘General Villamil’), continuó su misión por la costa, haciendo puerto donde había que hacer las instalaciones. Viento calma y corrientes adversas retardaron su progreso y, cuando al fin llegó a la Isla de La Plata, las provisiones escaseaban de manera alarmante. En la isla abundan los chivos salvajes, pero la expedición – de 15 hombres – solo tenía una arma y cuatro cartuchos entre todos. Pronto no hubo otra alternativa que idear la manera de capturar una presa de alguna otra forma y, de acuerdo con esto, se armó una expedición de caza. Entonces empezó la persecución sobre quebradas y piedras hasta que, usando astucia y sigilo, capturaron la presa con las manos. Antes de que fuera posible empezar el montaje de la luz, fue necesario transportar todo el material hasta el sitio donde sería armado, a no menos de 800 pies de altura. Esto fue trabajo árduo, teniendo que mover las cajas desde la playa, donde no fue fácil el desembarco, subiendo por senderos serpenteantes y resbalosos, al pie de profundos precipicios. Despues de montar varias instalaciones aquí y allá subiendo por la costa, llegamos al pequeño pueblo de Manta. Aquí se tenía que montar un faro AGA en una antigua estructura de hierro y cemento que estaba disponible, la cual estaba situada en un espacio abierto y mirando al mar, que era una paseo favorito en las 299 noches. Quienes lo disfrutaban protestaron por el nuevo aparato, pues en su opinión destellaba mucho; mas aún, ¡enviaba su luz hacia el mar, en vez de iluminar el paseo, como lo hacía la antigua luz! Mr. Ellwe solo tiene los más calurosos elogios para las autoridades y los individuos por toda la buena voluntad y ayuda prestadas a él, con lo cual participaron en ayudarlo en la difícil tarea que tenía que realizar bajo condiciones inusuales. Por cierto que en ocasiones era duro cuando surgían contingencias, pero los momentos oscuros fueron de naturaleza transitoria y eran sobrellevados con buen humor por los asistentes nativos, quienes reían y tomaban los problemas a la ligera, lo que hacía regresar al buen humor. Muchas de las anécdotas y aventuras que Mr. Ellwe tiene para relatar de esa lejana tierra; desembarcando en canoas a través de las rompientes; cazando lagartos; baños inesperados y rápidos en compañía de tiburones y otra compañía dudosa y demasiado cercana; visitas matinales de serpientes venenosas, sin mencionar las lavanderas negras en Esmeraldas, quienes lavaban ropa sentadas en la orilla del río, mientras fumaban grandes cigarros negros. La salud de Mr. Ellwe era algo precaria para cuando había concluido su misión. Malaria y desintería son malas compañeras, por lo tanto no es de asombrar que en la parte final de su visita, Mr. Ellwe sentía deseos de encontrase en un camarote a bordo de un barco que lo llevaría de regreso a Europa.” 333 300 Todas las fotos que acompañan el relato de Mr. Ellwe son parte de las que llevó de regreso a Suecia. En la próxima página veremos más. 301 El Fanal de Data y el Faro de Santa Elena fueron instalados por el Ingeniero Capovilla y el equipo de la Armada Nacional bajo la supervisión del Sr. Ellwe. Estos no entraron en su relato por cuanto su instalación no fue una aventura. Cuando se armó el Faro de Santa Elena, se lo hizo sobre la estructura del faro antiguo, quedando la linterna de éste dentro de la torre del nuevo, como vemos en la imagen a continuación: Sin embargo, esta decisión sería lamentada en poco tiempo debido al deterioro del antiguo edificio de madera que, como hemos visto en correspondencia anterior, estaba carcomido. La estructura de la torre del faro AGA estaba, al poco tiempo de ser instalada, en peligro de derrumbarse. 302 Informe de 1923. El Informe del Ministro de Guerra y Marina para 1923 tenía esta escueta información sobre los faros: “También se ha incrementado la escuadrilla de costa, con la adquisición del Yate Atahualpa y con la dotación del Aga, destinados a viajes al Archipiélago de Colón y a la costa, para las atenciones que requieren los faros. Los Faros continúan prestando con toda regularidad sus servicios, con un poder lumínico muy considerable y con una exactitud inalterable. La Costa del Ecuador puede considerarse por hoy como la mejor alumbrada de Sur América, gracias a la adquisición de los Faros sistema AGA, ya instalados en su totalidad y la mayor parte en torres nuevas o en las antiguas, pero muy bien reparadas.” Ese año 1923 se había incorporado al Servicio de Faros el buque AGA, que había sido construido en los talleres navales del Ferrocarril del Sur, en Durán. Ese buque comenzó su servicio con otro nombre, como remolcador de los lanchones de carga que pasaban de Durán a Guayaquil y viceversa. En poco tiempo cambió su función a la de buque de sanidad portuaria, encargado de fumigar, con una máquina marca Clayton, los buques provenientes del exterior que llegaban al Puerto de Guayaquil. Durante ese tiempo se lo conoció como el "Clayton." Luego de esto pasó al servicio de los faros y se lo denominó AGA, con la clasificación de “escampavía.” Como vimos en el Informe del Ministro, se había comprado un pequeño yate para el servicio del Resguardo de Aduana, al cual se lo denominó “Atahualpa.” No había pasado mucho tiempo cuando, el 5 de mayo de 1924, se expidió el siguiente Decreto Ejecutivo: “Destínase el yate ‘Atahualpa’ perteneciente al Resguardo de Aduana del Puerto de Guayaquil, al servicio de aprovisionamiento de los faros automáticos existentes en la costa de la República, con la denominación de yate ‘AGA’; debiendo pasar el Escampavía “AGA” al servicio del Resguardo de Aduana del mencionado Puerto, con el nombre de ‘Atahualpa’.” Entonces vemos que se intercambiaron buques y nombres entre los dos servicios. El yate “AGA” fue vendido, en diciembre de 1926, junto con la balandra “General Villamil.” El escampavía “Atahualpa” (original AGA) fue reincorporado al servicio naval desde el Resguardo de Aduana en 1927 y luego se cambió su clasificación al de “aviso.” En julio de 1941 se cubrió de gloria en el combate naval de Jambelí y, en septiembre de ese mismo año, regresó al modesto servicio de los faros de la costa a pesar de que su destino oficial fue otro. Su servicio terminó en el año de 1960, cuando “naufragó en los bajos próximos a 249 262 303 la isla Santa Clara, al intentar tomar el fondeadero para desembarcar al personal del Servico de Faros, durante un recorrido de inspección y reparación de faros y boyas.” 262 y 390 Luego de realizadas estas acotaciones importantes, regresamos al hilo cronológico de nuestra historia. Informe de 1924. El informe de 1924 era aún más escueto y solo ratificaba el orgullo del Gobierno de haber sido responsable de la sustitución de los faros. También repetía el mismo cuadro de los faros que ya había sido presentado en el informe de 1922. 250 En 1924 el mando de la balandra “General Villamil” pasó al Capitán de Corbeta Carlos Ibáñez, quien en abril de ese año informaba al Cmdte. Gral. de Marina: “La Balandra ‘General Villamil’, que actualmente cumple con el servicio de faros de la costa, viene desempeñando esta ardua tarea desde años pasados, pero posteriormente con mayor eficacia, con motivo de la nueva 304 instalación AGA, con toda la regularidad que ha sido posible a pesar de su sistema rudimentario (navegación a vela); sin embargo, después que esta nave ha devengado tanto por este desempeño, sólo en el año 1922 le ha egresado al Erario por reparaciones la pequeña cantidad de un mil novecientos tres sucres i centavos, más el costo de un velamen; estas reparaciones se han efectuado después de cuatro años de trabajo constante.- La nave de mi comando después de haber trabajado eficazmente ya con los viajes continuos de inspección y cambio de tubos de carga de los faros, como atendiendo a las necesidades de vida de los Guardianes (agua, víveres, etc.) desde Punta de Piedra hasta la isla de La Plata, justo era que sufriera su material, dadas su vida que tiene i especialmente por el duro trabajo a que está sometido en el embarque y desembarque de los referidos tubos, en los puertos ajitados. Es el caso, que actualmente hai que cambiar en el casco quince tablas y ocho en cubierta i que con poca cantidad se subsanaría, siempre que se le atienda inmediatamente.- Con motivo de que esta nave será reemplazada en el desempeño de sus comisiones a que está destinada, este comando no puede presentar ningún proyecto de mejora a su material u organización i solo está obligado a demostrar sus actuales condiciones, esperando que la superioridad disponga lo más conveniente...” La balandra “General Villamil” continuó prestando servicio a los faros hasta diciembre de 1926, mes en que fue vendida. Probablemente como resultado de la comunicación antes citada, la balandra fue reparada y se le instaló un pequeño motor como medio auxiliar de propulsión. 262 Los equipos AGA eran muy confiables y precisos. Lo único que necesitaban era el reabastecimiento de acetileno en cilindros cada seis meses, limpieza cuando se los reabastecía y pequeños mantenimientos, cuando necesarios. Sin embargo, hasta que se instaló la primera planta de gas acetileno, éste debía ser importado en cilindros desde Panamá, y a pesar de requerirse este proceso solo dos veces por año, al menos en una ocasión hubo problemas con los faros por demoras en la importación. Aún el transporte local de los cilindros de gas encontró problemas en algunas ocasiones, especialmente cuando el servicio aún lo hacía la balandra “General Villamil,” causando apagones por pocos días. Pero, en general, el servicio de faros, al ser estos 305 automáticos, mejoró muchísimo al no depender de las debilidades humanas. Pero, como somos un país de paradojas, aún cuando los faros ya no requerían personal, ¡por algunos años más el escalafón de faros mantuvo personal de Guardafaros! Así, en 1925, la nómina de Guardafaros que tenía la Inspección General constaba de al menos 9 personas, repartidas en varios faros, no necesariamente aislados de la civilización. No hay documento que justifique el mantener Guardafaros para un sistema que no debía requerirlos. 262 Rafael Pino Roca es Inspector General de Faros. El Capitán de Navío asimilado Rafael Pino Roca había sido Capitán del Puerto de Guayaquil en 1911 y Ministro de Guerra y Marina de 1916 hasta 1920. Entre 1924 y 1925 se hizo cargo de la Capitanía del Puerto de Guayaquil y la Inspección General de Faros. Parece que él o su antecesor, el Capt. Chambers, habían logrado cambiar el destino del Ing. Antonio Capovilla Oliva, del de Ingeniero del Caza-Torpedero Libertador Bolívar, al de Subinspector de Faros. Él se hizo cargo efectivo de los faros en cuanto a operación y mantenimiento, así como la instalación de equipos nuevos. El inconveniente de recargar los cilindros de gas en Panamá generó, el 10 de mayo de 1925, una carta del Inspector General de Faros al Cmdte. Gral. de Marina: “Con vapor noruego Fort Morgan remití el 28 de febrero al Sr. Cónsul General de Panamá 40 tubos de los faros AGA, para ser recargados y devueltos para el Servicio de Faros, recomendándole ser devueltos a la brevedad posible, para atender el servicio público de los faros de la Costa; recibí aviso de la llegada y recomendación de pronto despacho por el Sr. Cónsul.- Y el 13 de abril recibí de Quito el siguiente parte: 'Vapor ‘Arana’ que salió 18 presente trae 24 tubos pedidos por Gobierno para los acumuladores de los faros.- Ministro de Guerra y Marina.-' En esta fecha llega vapor ‘Arana’, comunica que no ha traído los tubos. Como este servicio ha estado encomendado a la Compañía Inglesa de Vapores, quienes lo han hecho puntualmente, no hemos desconfiado de su puntualidad y hoy 306 que se presentan inconvenientes, tengo a bien informar al Sr. Coronel Comandante de Marina para su conocimiento y más fines...” Ciertamente que esto le causaba un grave problema al Servicio de Faros, pero no era solo asunto de la compañía naviera. Si analizamos la fecha de envío de los 40 cilindros a fin del mes de febrero, que recién embarquen parte de los cilindros recargados el 18 de abril, mes y medio después, nos demuestra participación burocrática. De paso, a pesar del anuncio de embarque de “24 tubos” ¡no se embarcó siquiera uno! 262 Se Establece, por Decreto, la Inspección de Faros. El 2 de noviembre de 1926, en Registro Oficial N° 173 de ese día, se publicó un decreto del Presidente Provisional de la República que tenía le siguiente tenor: "De acuerdo con lo dispuesto en el Art. 42 de la Ley Orgánica de Marina; Decreta: Art. 1° Establécese la Inspección de Faros, dependiente de la Dirección General de la Armada, la que funcionará en Guayaquil, con el mismo personal señalado en el Art. 42 de la citada Ley Orgánica de Marina, con la sola reforma de que el Inspector de Faros será hasta Capitán de Fragata y el 2° Ayudante, hasta Teniente de Fragata Ingeniero. Art. 2° El Inspector de Faros y el Ayudante Sub-inspector, dejarán de constar en el personal del comando de la Balandra "General Villamil", la que pasará a la inmediata dependencia de la Inspección de Faros con el resto del personal asignado para ella en el Art. 12, inciso h) del Presupuesto de la Armada Nacional, el cual queda reformado en este sentido. Art. 3° Los sueldos y más gastos del personal de la Inspección de Faros, serán abonados por la Tesorería Fiscal del Guayas, con aplicación a la Partida XIV. N° 73 del Presupuesto de la Armada Nacional Vigente. Art. 4° El presente Decreto regirá desde la presente fecha, quedando encargados de su ejecución los señores Ministros de Guerra y de Hacienda. Dado en Quito, en el Palacio Nacional, a veintidos de Octubre de mil novecientos veintiséis. / El Presidente Provisional de la República. (f.) Isidro AYORA. El Ministro de Guerra y Marina. (f.) Leonardo J. Palacios. / El Ministro de Hacienda. (f.) P. L. Núñez. / Es copia.- El Coronel Subsecretario, (f.) A. I. Chiriboga N." Lo interesante es que "se establece" el cargo como si nunca antes hubiera existido. 525 307 En 1927, poco antes de vender la balandra “General Villamil” y el yate “AGA,” que prestaban servicio a los faros, se incorporó a la Marina Nacional el motovelero “Ulba,” de 500 toneladas y bandera noruega. Se le cambió el nombre a “Patria” y se lo clasificó como motovelero, destinado al servicio de faros en reemplazo de los dos buques anteriores. La venta de los dos buques y la compra del nuevo se realizaron en respuesta al pedido del Capitán del Puerto e Inspector de Faros, quien había formulado su pedido al Cmdte. Gral. de Marina y éste, a su vez, había escrito al Ministro respectivo proponiendo la venta de los dos buques para que, con el producto de la venta, se compre “un buque que reúna las condiciones de seguridad y rapidez para hacer este servicio con oportunidad.” El motovelero “Patria,” si bien era un buque grande, no cumplía con lo que requería el Servicio de Faros en cuanto a rapidez. Ahora bien, para qué se requería rapidez, no lo explicó el Inspector de Faros. El motovelero "Patria" recibió su dotación de personal mediante Decreto Ejecutivo del 14 de enero de 1927, el que fue publicado en el Registro Oficial # 237 del 18 del mismo mes y año. Este buque serviría a los faros durante los próximos años. 262 526 El 22 de enero de 1927, se autorizaba las escrituras de venta de la balandra "General Villamil" y el yate "AGA," en el Registro Oficial #241 de ese mes y año. 527 Se determinó la necesidad de que el Inspector de Faros fuera un ingeniero en vez de un oficial de línea, por lo cual el Presidente Ayora modificó en abril de 1927 el decreto que establecía la Inspección de Faros, introduciendo el siguiente cambio: "Decreta: Artículo único.- Refórmase el Art. 1° del Decreto Supremo expedido el 22 de Octubre de 1926, en el sentido de que el Inspector de Faros será hasta Ingeniero de Fragata. 528 308 Se Establece un Nuevo Reglamento. El "establecimiento" de la Inspección de Faros se había realizado sin establecerse también un nuevo reglamento para el servicio. Esta omisión fue subsanada mediante la publicación del nuevo reglamento en el Registro Oficial # 310 del 13 de abril de 1927. El nuevo reglamento, que reemplazaba el de Eloy Alfaro de 1909, constaba de trece artículos. Este nuevo reglamento, mucho más compacto que su antecesor, estaba de acuerdo con la realidad del Servicio a ese momento, pues el reglamento de 1909 necesitaba ser extenso por la descripción de las responsabilidades y obligaciones de los Guardafaros, que ya no existían. En todo el articulado solo encontramos un acápite, del Art. 3°, en que se crea algo de confusión. Es el acápite 7°, de la atribuciones del Inspector, que dice: "Tomar información de los navegantes de nuestras costas sobre la existencia de las marcas en tierra, balizas, boyas, etc. establecidas para la navegación, y una vez reconocida la utilidad de marcar algún peligro, indicar a quien corresponda la clase de baliza que convenga colocar, según su costo y gasto de instalación." ¿Quería esto decir que cualquiera podía poner una baliza y que la Inspección de Faros tenía que indicarles las normas post-facto? O quiere decir esto que la Inspección de Faros no colocaba boyas y balizas sino que tenía que pedirlas a una organización separada? No está clara la situación. A diferencia del reglamento anterior, de 1909, éste sí trataba la parte económica, esencial para la operación del Servicio. Este reglamento estaría vigente hasta la incorporación del Servicio de Faros al Servicio Hidrográfico de la Armada, en 1939. 529 Si bien el Reglamento no contenía ya el cargo de Guardafaros, en el presupuesto de la Armada Nacional seguían constando. Con el fin de que el Servicio se pudiera beneficiar de esas partidas, se emitió un Decreto Ejecutivo el día 28 de septiembre de 1927, el que fue publicado en Registro Oficial # 451 del 30 de septiembre de 1927. Ese decreto modificaban los cargos y las partidas que, de otra forma, se perderían. 530 Informe de 1928. En 1928 se reconstruyó la torre del Faro de Santa Elena, eliminando la casa de madera y dejando solo una esbelta torre de ángulos de hierro. 370 309 Informe de 1930. En 1930 se reporta que se continúa haciendo instalaciones en la medida que permiten "...las posibilidades económicas del Erario..." Observa el Ministro que el incremento en el servicio requiere de mayor atención y se queja que el buque "Tarqui," destinado para ese efecto, es deficiente. Dos buques de la Armada estaban haciendo el servicio y las instalaciones, el "Tarqui" y el motovelero "Patria." Para 1930 habían instalados 24 faros, 5 balizas y 5 boyas, los cuales podemos ver en el Anexo “E.” En 1930 se publicó por primera vez el "Derrotero de la Costa de la República del Ecuador," basado en el "South America Pilot" del U.S. Hydrographic Office, el que contenía el listado de faros y boyas del país. 371 Informe de 1932. En 1932 se reportan en funcionamiento regular "veintiún faros, cinco boyas y cuatro balizas." Adicionalmente se reporta que "La renovación de los tubos de los faros la efectúan periódicamente los buques Patria y Tarqui; el primero en toda la costa y el segundo en el golfo y la ría de Guayaquil..." Se añade más adelante: "Si las circunstancias económicas del Erario lo permitiesen, deberíase votar en el Presupuesto una cantidad suficiente para la construcción de las torres de los faros, de cemento armado, cambio que se impone por la propia conveniencia económica del Tesoro; pues que así evitaríase el egreso de apreciables cantidades que se invierten en las reparaciones de las torres metálicas y aun en el cambio de ellas, ya que ofrecen una duración muy limitada, espuestas como están a la humedad y aires salinos que las corroen pronto..." 372 310 Esta es la sugerencia más sensata que se dio en los últimos informes. El Ministro informó, adicionalmente, “En este servicio (faros, boyas y balizas), indiscutiblemente el de más trascendental importancia en la Marina, me es placentero manifestar que se ha incrementado notablemente y que su funcionamiento nada deja que desear como lo han reconocido las representaciones de todas las compañías navieras extranjeras cuyos barcos trafican por nuestras costas; y sin que esto quiera decir, desde luego que no hagan falta aún algunos faros más, cuya instalación en ciertos lugares se hace necesaria, como por ejemplo en el Archipiélago de Colón, en donde no existe ninguno y debe instalarse por lo menos uno de recalada en la isla San Cristóbal.” Esta es la primera indicación concreta que tenemos de que el Faro de Puerto Chico (Pto. Baquerizo Moreno) ya no estaba funcionando. No especifican donde se debía ubicar el faro de recalada, pero probablemente se había pensado en una de las puntas hacia mar abierto. En 1932, específicamente el día 6 de febrero, se creó el Servicio Hidrográfico de la Armada, que eventualmente se haría cargo del servicio de faros. Hasta ese momento, los asuntos hidrográficos habían estado a cargo de una Sección, dependiente de la Dirección General de la Armada. 531 311 El 27 de agosto de 1932, se aprobó la Ley Orgánica de Marina mediante Decreto. Esta Ley, en su Título V, Art. 42, decía: "Independiente de éstas secciones (las del Art. 41) habrá una oficina que se llamará Inspección de Faros e Hidrografía y constará del siguiente personal: Un Inspector de Faros hasta Capitán de Corbeta; Un ayudante Sub-Inspector de faros, hasta Ingeniero de Corbeta; Un Segundo Ayudante, hasta Alférez de Navío Ingeniero; Un Amanuense hasta Cabo de Matrícula; Dos Ordenanzas (Marineros 2°); y Un Portero (Marinero 2°)." Esta Ley Orgánica daba al traste con todos los decretos emitidos desde 1927 hasta la fecha, incluyendo el Reglamento de Faros de 1927 y la creación del Servicio Hidrográfico en 1932. 532 El 29 de agosto de ese mismo año, en Registro Oficial # 262, apenas dos días después de publicada en el Registro Oficial la Ley Orgánica de la Marina, se publicaban reformas a la misma. En el Art. 41 se establecen las siguientes reformas: Entre otras secciones, se crea como la Tercera Sección, la Inspección General de Faros y Balizas y como la Quinta Sección, la Oficina Hidrográfica. No se menciona el Art. 42, pero presumiblemente quedaba anulado, pues ya se incorporó a los faros a las secciones del Art. 41. y se independizó la parte hidrográfica, aunque las reformas a la Ley no decían realmente nada sobre estas "secciones," dejándolas más bien al arbitrio del Director General, quien presumiblemente emitiría los reglamentos necesarios. Estos cambios erráticos ciertamente no conducían a un buen servicio. 533 Informe de 1933. Éste es el primer informe en que se reconoce la crítica situación económica mundial y su efecto en el país y sus faros. Se hacen muy sensatas (aunque algunas de ellas poco prácticas) sugerencias para ser adoptadas por los legisladores. 1. Que se cobren los derechos en oro. 2. Que se actualice el monto del derecho de faros para que guarde relación con los niveles vigentes en los demás paises sudamericanos. 3. Que se cambie la forma de calcular el derecho, de la actual por tonelada de carga a una nueva por tonelada de registro. 4. Se insiste en la construcción de las torres en cemento armado y, si se aumenta el "derecho de faro," la compra de una planta de gas acetileno para su producción local. 312 5. La compañía "Grace Line" hizo una propuesta para balizar el río Guayas, con el fin de facilitar el ingreso de buques de mayor calado. "Por lo demás, el servicio de faros se hace con perfecta regularidad y se halla atendido por el personal de marina con toda la actividad y diligencia que él requiere, en guarda de la seguridad de la navegación..." 373 El 15 de febrero de 1933 el Presidente Juan de Dios Martínez Mera decretó el establecimiento del Servicio Hidrográfico de la Marina, decreto que fue publicado en el Registro Oficial # 83 del 11 de marzo de 1933. Este segundo "establecimiento" fue definitivo. El SHM se estableció nuevamente como una sección de la Dirección General de la Armada. Informe de 1935. El informe Ministerial de este año reporta lo siguiente: 1. Se requiere urgentemente la adquisición de repuestos y cilindros acumuladores de gas para los faros y las boyas. 2. Se ha adquirido la planta de gas acetileno, que ya está empacada y lista para ser embarcada por el fabricante. 313 3. Se ha tratado en segunda discusión, por parte del congreso, el incremento del Derecho de Faro. 4. No hay noticias del contrato de balizamiento con la "Grace Line." 5. Se insiste en la construcción de las torres de concreto armado. Por lo demás, no hay variación del informe anterior. 374 El servicio continuó funcionando sin mayores novedades bajo la Capitanía del Puerto de Guayaquil. Informe de 1938. El Informe Ministerial de 1938 tenía esto que decir sobre los faros: "El servicio de faros, que tiene carácter internacional, ha sido debidamente atendido y funciona con toda regularidad; pues el Ministerio destinó una considerable suma para la adquisición de repuestos del material de faros que no había sido renovado durante muchos años. Previo un estudio comparativo de las tarifas que por impuesto de faros venían rigiendo en el País, con las análogas de otras Repúblicas Sudamericanas, el Ministerio recabó de la Jefatura Suprema de la República una reforma que contemplase un aumento justo y equitativo de ese impuesto; y, así, se obtuvo tal reforma que ha venido a incrementar en algunos millones de sucres las rentas ingresadas al Tesoro por este concepto." En este informe el Ministro admitió el abandono al que habían estado sujetos los faros "durante muchos años" Inequívocamente podemos decir que ese abandono fue resultado de políticas poco acertadas en la creación de leyes y decretos que armaban y desarmaban antojadizamente organismos de trascendencia para la vida nacional. Interesante es el incremento de las tarifas del impuesto de faros. ¡Lastimosamente, por la centralización de los ingresos, los faros no serían beneficiarios del incremento! 534 Informe de 1939. "Servicio de Faros - A pesar de que el material AGA funciona más de 15 años, los faros de la costa se mantienen en eficiencia. La Comandancia de Guayaquil solicitamente ha atendido a las reparaciones de dichos faros. Ojala se pudiera descentralizar las rentas que percibe el Estado por este concepto, para atender a la renovación del material de faros, el que, por su tiempo de servicio, necesita ser cambiado." Con el permiso del Señor Ministro, quince años no es nada para el tiempo de vida de un faro, ¡si está bien cuidado! 535 314 En este año se realizaron nuevos cambios en la Armada y el Servicio de Faros se anexó al Servicio Hidrográfico, que ya tenía seis años trabajando. Informe de 1940. Este informe nos hizo reir un poco por el lenguaje inusual utilizado en él: "FAROS - Este servicio, a partir de 1939, fue refundido en el Hidrográfico de la Marina, al que está adscrito desde entonces. Para la atención al servicio de faros, es indispensable una embarcación; con este objeto está haciéndose un trabajo de reconstrucción del aviso "Atahualpa" en el Arsenal de Marina. Una necesidad de carácter perentorio en este servicio, es la reposición de cilindros acumuladores para la carga de los faros, ya que muchos de los existentes se encuentran fuera de servicio por su largo y continuo uso. Sobre el Servicio Hidrográfico dice lo siguiente: "El Ministerio de Defensa ha sucrito un contrato con The Guayaquil Agencies Company, para la adquisición de equipos de boyas y material de faros destinados al avalizamiento del río Guayas..." 536 Informe de 1941. El Ministro de Defensa informaba ese año que "Este importantísimo Servicio, cuyo mantenimiento está al cuidado del personal de Marina y que por su naturaleza misma requiere permanente y cuidadosa atención, como que de él depende, en su mayor parte, la seguridad del tránsito marítimo, ha sido incrementado considerablemente, merced a la adquisición de dos equipos de boyas y material de faros con el fin de establecer un sistema completo de señales luminosas en el Golfo de Guayaquil, que ponga a las naves al margen de todo peligro en su ruta de entrada y salida del Puerto. Actualmente, el Servicio Hidrográfico, al cual está anexado el Servicio de Faros, lleva a cabo el estudio para dichas instalaciones y los cálculos para su ubicación e igual trabajo en los puertos de Manta y Bahía de Caraquez, habiéndose efectuado en el de esta última, un balizado provisional exigido por crecientes e inmediatos peligros, ocasionados por la braveza del mar, en el último y riguroso invierno. Con anterioridad se había manifestado la apremiante e imprescindible necesidad de atender a la reposición de los cilindros acumuladores de gas de este Servicio, muchos de los cuales se hallan inutilizados por su largo y permanente trabajo." 537 Con este informe optimista y al haber llegado a 1941, una centuria del Servicio de Faros, concluye esta historia, quedando pendiente la historia de los faros desde ese año hasta el presente. 315 Capítulo 25.- Preservando el Pasado Los Faros AGA, al igual que había ocurrido con sus antecesores, llegaron a la obsolescencia en la década de 1970. Con el advenimiento de los paneles solares y las baterías de larga duración, era más fácil y económico colocar faros automáticos que requerían aún menos mantenimiento que los de gas acetileno, que sólo lo requerían dos veces al año. Al cambiarse los equipos AGA, éstos pasaron a bodegas y eventualmente al dominio público a través de su venta como material obsoleto. Algunos faros AGA, pocos en realidad, adornan dependencias de la Marina Nacional. Otros forman parte de museos privados, y otros pocos aún funcionan y cumplen, sino la función de señalar puntos geográficos, sí la de adornar el medio donde se encuentran. Tal es el caso del segundo Faro de Santa Clara, que luego de ser desarmado en 1921 y separada la óptica del cuarto de linterna, pasó al Arsenal de Marina la óptica y al muelle fiscal de Guayaquil el cuarto de linterna, donde permanecieron hasta 1955. Luego de ser adquirido por el Guayaquil Yacht Club, fue colocado en su sede del Malecón Simón Bolívar, donde permaneció hasta los años 1970. Esa adquisición estaba, inconscientemente, asegurando la preservación de un aparato histórico que de otra forma se habría perdido o se habría descompletado, como su hermano de Punta Arenas. Este faro fue puesto en funcionamiento e iluminó el Río Guayas por algunos años, adornando así su entorno. Sin embargo, presiones modernizadoras obligaron la remodelación del local, quedando el faro desplazado, por lo que el Comodoro de entonces lo embodegó cuidadosamente. 316 Luego fue trasladado al Salinas Yacht Club, donde que es el centro de la Bahía de Salinas. El Faro de 3° orden funciona todas las noches e entrada de embarcaciones al Salinas Yacht Club. adorna el espigón ilumina la El Faro de Punta Arenas, que también se desarmó en 1921, debe haber corrido similar suerte, pero su linterna sí se perdió. Afortunadamente el Lente Fresnel se salvó y actualmente se encuentra en el Museo Naútico del Farallón Dillon, en Ballenita, Cantón Santa Elena. En ese Museo se encuentran, además, una linterna LBFA-500 y una LBFA-200, éstas del pedido original de Faros AGA en 1921, y una linterna LBSA-200 de un pedido posterior. 317 En el Instituto Oceanográfico de la Armada tienen varias linternas AGA. Aquí vemos una LBUA-500 y una LBSA-500 montada en boya, que deben haber llegado en un pedido de los años 1930 o 1940. 318 Epílogo El día 6 de diciembre de 1921 entra en funcionamiento el 3° faro de la Isla Santa Clara, del sistema AGA, y se apaga la linterna Barbier & Fenestre del 2° faro. El Comandante Enrique Cucalón, de la balandra "General Villamil," informa al Comandante General de Marina que "ayer [11 de diciembre de 1921] a las 6:30 p.m. ancló la balandra a mi mando, de regreso de los faros del Golfo, conduciendo el personal que llevé para la instalación de los faros de Punta Española y Santa Clara." No se sabe qué pasó con los faros lenticulares una vez instalados los aparatos AGA en su lugar, pero lo cierto es que en 1955 el faro de 3° orden de Barbier & Fenestre estaba embodegada su óptica en el Arsenal Naval y su cuarto de linterna en el muelle fiscal de Guayaquil. El Comodoro Juan Alfredo Wright Aguirre, del Guayaquil Yacht Club, fue informado de la existencia de este aparato y él, con otros socios del Club, gestionaron su compra a la Armada, por el valor simbólico de cinco mil sucres. Es así que en 1956, en la sede social del Guayaquil Yacht Club en el Río Guayas, se construye una pequeña torre en la cual se coloca el faro, el que es armado por el Ing. Nicolás Pecharich. Éste se adecúa de tal forma que se ilumina con un bombillo eléctrico y el mecanismo de rotación también se convierte a electricidad, estando a cargo de la instalación del motor el Secretario del Club, Sr. Ernesto Baquerizo Lince. El faro permanece en ese lugar hasta que, en los años 1970, se remodela el local del Club y el faro pasa a una bodega en espera de su instalación en la sede readecuada; sin embargo, por razones técnicas, la reinstalación no es posible. Se consideró también su reubicación en la nueva sede del Club en el Estero Salado, localizada en la urbanización Puerto Azul, pero esta opción también fue descartada. En 1992, el Comodoro de Salinas Yacht Club, Ab. Luis Eduardo Gómez Bejarano, propone al Comodoro del Guayaquil Yacht Club, Sr. Carlos Pino Plaza, que el faro sea prestado en comodato al primero, hasta que se lo reubique en la sede del segundo. Los directorios de los respectivos clubes aprueban un convenio de comodato y el faro es recuperado de la bodega e instalado en el espigón del Salinas Yacht Club. La luz de la linterna se prendió nuevamente el 3 de julio de 1993 en medio de una ceremonia 319 especial, imponiéndosele al faro el nombre del Comodoro Juan Alfredo Wright Aguirre. Con el desarrollo del Proyecto Malecón 2000 y el embellecimiento del área paralela al Río Guayas, la sede del Guayaquil Yacht Club en el Malecón Simón Bolívar será renovada y ampliada. Dentro del proyecto de ampliación consta la reinstalación de la linterna de Barbier & Fenestre en una torre adecuada, lo que dará al Malecón 2000 un adorno que no es solo una joya de la ingeniería y de la óptica, sino un faro histórico que iluminó el Golfo de Guayaquil por casi cincuenta años, desde 1872 hasta 1921. Los mecanismos y los lentes Fresnel para este tipo de faros no se han fabricado desde comienzos del Siglo XX, por lo que, los pocos que quedan completos y en estado de operación, son considerados tesoros de interés histórico y son irremplazables. El Faro de Punta Arenas debe haber corrido suerte parecida al de Santa Clara hasta ser depositado en el fuerte de Punta de Piedra, pero no encontró alguien interesado en su conjunto para rescatarlo completo. El Lente Fresnel de 4° orden, incompleto y sin el cuarto de linterna ni el mecanismo de rotación, fue comprado por el Capitán de Marina Mercante Alberto Dillon, y actualmente se encuentra en la Hostería y Museo Náutico “Farallón Dillon,” en Ballenita, Santa Elena. Del Faro de Santa Elena y los otros de 5° y 6° órdenes, no se conoce su paradero... Son parte de la historia, perdida por la indiferencia. Al concluir la redacción del texto de esta historia, mientras estoy sentado en mi puesto de trabajo, a la vista de la linterna Barbier & Fenestre del 2° faro de Santa Clara, actualmente ubicado en el espigón del Salinas Yacht Club, me siento agradecido por haber tenido el tiempo y los recursos bibliográficos para poder escribir una historia que aporta un grano de arena más al conocimiento real de nuestro pasado como Nación. Es mi ferviente deseo que las lecciones que contiene esta historia, que son 320 algunas, sean útiles para la formación íntegra de futuras generaciones de ecuatorianos, y en especial de aquellos allegados al mar. Eduardo Estrada Guzmán Salinas, 6 de enero de 2002 Sobre el Autor. Eduardo Estrada Guzmán nació en Guayaquil, Ecuador, el 20 de mayo de 1953. Aficionado a la escritura desde temprana edad, ha incursionado en la poesía, redacción de textos educativos para la protección civil, artículos informativos sobre radioafición y artículos de opinión para un diario local. En 1991 fue autor del "Manual de Emergencia del Radioaficionado Ecuatoriano," libro técnico sobre las comunicaciones de emergencia en situaciones de desastres. Ha realizado la diagramación y edición de algunas obras, incluyendo ésta. Procesa, restaura y prepara fotografías antiguas para su publicación. Proviene de una familia con cuatro generaciones de escritores: Emilio Estrada Carmona (política), Víctor Emilio Estrada Sciacaluga (economía, política y guerra), Emilio Estrada Ycaza (arqueología y finanzas) y Julio Estrada Ycaza (historia del Ecuador, Guayas y de Guayaquil). Es miembro correspondiente de la Academia Ecuatoriana de Historia Marítima. Este libro es su primera incursión en temas históricos y en la investigación necesaria para ese género de escritura. 321 Post Scriptum. Con el inexorable paso del tiempo, los actos de las personas tienden a ser demostrados como acertados o equivocados por sus efectos o su trascendencia. En 1970, cuando se realizó una vista a la isla de Santa Clara para reparar el faro eléctrico ubicado allí en ese entonces, aún se podía ver la estructura del 2° Faro de Santa Clara, construido en 1872. Esta estructura, que se deterioró durante su uso por el poco mantenimiento que recibía y, a partir de 1921, fue abandonada totalmente, había sido calificada por su constructor como de madera incorruptible, pero como de "maderas de mala calidad" por el entonces Capitán del Puerto y detractor de las obras del mecánico francés. El constructor fue el Maestro Carpintero don José Félix Sánchez, quien en su momento dijo que había seleccionado las mejores maderas incorruptibles para la obra. Aquí tenemos una prueba irrefutable de su calidad, pues vemos la antigua estructura de madera, aún parada, 98 años después de construida y 49 años después de abandonada, al lado de la nueva torre de hormigón armado. 322 Faro de Cordouan ANEXOS 323 324 Anexo A 325 Anexo B DECRETO ORGANIZANDO EL SERVICIO DE LOS FAROS ESTABLECIDOS I QUE SE ESTABLEZCAN EN LA COSTA DE LA PROVINCIA DEL GUÁYAS. El Jefe Supremo de la Provincia del Guáyas Considerando: Que es necesario dictar algunas disposiciones para organizar mejor el servicio de los faros, establecidos o que se establezcan en la costa de esta Provincia; Decreto: Art. 1° El servicio de los faros de la isla de Santa Clara, de Punta Arenas, Punta Española, Punta Mandinga i Santa Elena, i de los que en adelante se establezcan se hará por los empleados, que se denominarán Guarda-faros, bajo la superintendencia de otro empleado superior que llevará el título de Inspector de faros, i que tendrá también un Ayudante. Art. 2° Los sueldos de los empleados mencionados en el artículo anterior serán los siguientes: El de Inspector, mil doscientos pesos anuales. El de Ayudante, setecientos veinte. El de primer Guarda-faro de Santa Clara, novecientos; el del segundo, setecientos ochenta, i el del tercero seicientos sesenta. El de primer Guarda-faro de Punta Arenas, novecientos; el del segundo, setecientos ochenta, i el del tercero seicientos sesenta. El del único Guarda-faro de Punta Española, setecientos ochenta. El de único de Punta Mandinga, setecientos ochenta. El de primer Guarda-faro de Santa Elena, novecientos; el del segundo, setecientos ochenta, i el del tercero seicientos sesenta. 326 Si el nombrado para Inspector, Ayudante ó Guarda-faro fuese marino ó militar, gozará el sueldo íntegro de su clase, si este sueldo fuese mayor que aquel. Art. 3° El Inspector de faros será nombrado por el Poder Ejecutivo. El Ayudante i los Guarda-faros, lo serán por el Gobernador de la Provincia del Guáyas a propuesta del Inspector. Por esta vez todos los empleados serán nombrados por el Jefe Supremo de la Provincia. Art. 4° Se nombrarán dos Guarda-faros supernumerarios, con el sueldo de seicientos sesenta pesos anuales, para enviarlos al punto donde falte alguno por enfermedad o muerte. Art. 5° Habrá un almacen de depósito para los útiles i elementos necesarios para el mantenimiento de todos los faros, el cual estará a cargo del Ayudante. Art. 6° Los faros deberán estar provistos del aceite, mechas, i demás útiles que necesiten para el alumbrado durante un semestre i los pedimentos que al efecto se presenten a la Gobernación de la Provincia, se harán por los respectivos Guarda-faros, por conducto i visados por el Inspector. Art. 7° La Inspección tendrá un sello oficial con la siguiente inscripción: En la parte superior de la circunferencia. "Inspección de Faros". En la inferior, "República del Ecuador", i al centro la figura de un faro. Art. 8° Son deberes del Inspector: 1° Visitar los faros cada tres meses, o con mas frecuencia, segun lo determine el gobierno. 2° Ponerse al corriente ya por inspección personal, o por informe de los Guarda-faros, del estado de los edificios, máquinas, aparatos i demás útiles. 3° Proponer al Gobierno, por el conducto respectivo, las mejoras que á su juicio requieran los edificios, máquinas i aparatos. 327 4° Vijilar la conducta de los Guarda-faros i demas empleados del ramo, i atender a las quejas a que dé lugar el mal servicio de los faros, por negligencia de los Guarda-faros. Art. 9° Los gastos que causen las visitas del Inspector á los faros se harán por el Tesoro Público. Art. 10° Cuando se mande instalar un nuevo faro, el Inspector cuidará de hacer la propuesta del Guarda-faro que deba servirlo por lo menos tres meses ántes de que se concluya el edificio, para que miéntras tanto se instruya ese empleado en el manejo i servicio de dicho faro. Art. 11° El Inspector llevará los libros que sean necesarios, para dejar constancia de la correspondencia oficial, pedimentos, observaciones, consumo, &. Art. 12° Tanto de los faros establecidos, como de los que en adelante se establezcan, cuidará el Inspector tener en su oficina los correspondientes inventarios. Art. 13° Cada trimestre remitirá el Inspector al Gobierno, por el conducto respectivo, una razon de los gastos de aceite, &., i al fin de cada año un resúmen de estos mismos gastos i de la existencia en cada faro. Art. 14° Son deberes del Ayudante: Además de tener a su cargo el depósito de útiles i elementos, para el mantenimiento de los faros, ayudar al Inspector en todo lo que se refiera á los deberes i al ejercicio de las atribuciones que por este decreto tiene dicho Inspector. Art. 15° Son deberes de los Guarda-faros: 1° Permanecer constantemente en el lugar en que esté establecido el faro que le está encomendado, i desempeñar con celo el servicio de dicho faro. 2° Poner en conocimiento del Inspector todas las novedades que ocurran en el faro que le está encomendado, i proponer las medidas que el buen servicio público exija. 328 3° Mandar al Inspector al fin de cada mes una razon del consumo de aceite, mechas &., que hubiese habido en dicho tiempo 4° Examinar constantemente los aparatos, máquinas, lámparas, utensilios herramients concernientes al servicio del faro. 5° Llevar libros copiadores de la correspondencia relativa al servicio del faro con el Inspector. Art. 16° Los gastos que cause la compra de papel i de los libros de correspondencia i cuentas, que lleven el Inspector, el Ayudante i los Guarda-faros, serán costeados por el Tesoro público. El Secretario General queda encargado de la ejecución de este decreto. Dado en Guayaquil, a 12 de Setiembre de 1883 Pedro Carbo F. P. Icaza, Secretario Jeneral. 329 Anexo C JOSE MARIA PLACIDO CAAMAÑO, PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DEL ECUADOR, en uso de sus facultades constitucionales, decreta el siguiente REGLAMENTO DE LOS FAROS LENTICULARES Y FANALES DE LA COSTA DE LA REPUBLICA. CAPITULO lo. De los Faros Lenticulares y Fanales. Art. único. Son Faros Lenticulares y de máquinas de rotación los constituidos en la isla de "Santa Clara", "Punta de Santa Elena "y "Punta Arenas"; y fanales, los situados en: Esmeraldas, Manta, Punta Española y Punta Mandinga. CAPITULO 2o. De los empleados. Art. lo. Habrá un Inspector general de Faros, bajo cuya dependencia estarán los empleados colocados para el servicio de estos establecimientos. Art. 2o. Este Inspector estará sujeto al Gobernador de la provincia como Jefe superior de ella, pero tanto él como todos los demás empleados del ramo serán nombrados por el Ejecutivo. Art. 3o. En los Faros Lenticulares de "Santa Clara", "Santa Elena" y "Punta Arenas", que son de máquina de rotación, habrá en cada uno de ellos tres empleados, 1°, 2° y 3°. y en los fanales de "Punta Española", "Punta 330 Mandinga", Manta y Esmeraldas, habrá un empleado, denominándose, tanto éstos como los anteriores, "Guarda- faros". Art. 4o. Para los Faros Lenticulares o Fanales, que en adelante se construyan, se designarán también los empleados que corresponda. CAPITULO 3o. De los sueldos y obligaciones de los Guarda-faros. Art. lo. Los empleados en los Faros Lenticulares, tendrán la asignación mensual siguiente: El 1° S/72 El 2° S/63 y El 3° S/53, atendiendo el buen cuidado y esmero que deben adoptar para el aseo y buena conservación de las lámparas, mecheros, registros, tubos &. y lo más concerniente á los aparatos, según lo previene este Reglamento, con relación á esta clase de faros. Art. 2o. Los demás empleados de fanales, existentes en el día, y los que en adelante se constituyeren, gozarán de la pensión mensual de 62 pesos, y observarán las obligaciones que les son anexas, conforme la construcción y mecanismo del que tengan á su cargo. La Gobernación de la provincia, bajo cuya dependencia se encuentran estos establecimientos, ordenará los gastos concernientes á ellos. Art. 3o. Todos los empleados de los Faros, desde el Inspector hasta los Guarda-faros de 3a. clase, son reputados como empleados de la aduana y tienen, como tales, el deber de inspeccionar los contrabandos, dar partes a las autoridades inmediatamente, y aprehender á los que les sea posible, todo bajo las responsabilidades que la ley impone. Art. 4o. Las demás obligaciones de los "Guarda faros", irán descritas en el Servicio de día y de noche. CAPITULO 4o. 331 Obligaciones del Inspector. Art. lo. El Inspector de Faros estará subordinado al Gobernador de la provincia á que aquellos pertenezcan, en todo lo concerniente al servicio y ó los enseres que se necesiten. Art. 2o. Será uno de sus primeros deberes informarse por toda embarcación que entre á este puerto, si las luces se distinguen con claridad, ó se notare mal desempeño en los empleados; llevando un libro en el cual anotará los buenos ó malos informes que reciba. Art. 3o. Propondrá los empleados que sean competentes para el manejo de ellos, cuidando de hacer las propuestas en terna, y compuesta de personas de toda honradez y aptitudes, para que dichas ternas pasen al Ejecutivo. Art. 4o. Visitará mensualmente todos los Faros, desde el "Punta Mandinga" hasta el del "Muerto", y cada tres meses los de Manta y Esmeraldas; estas visitas se repetirán cuantas veces lo exija alguna novedad que ocurra en algún Faro, dando cuenta á la Gobernación para que ordene el pronto remedio: en las visitas se informará mui á menudo de la conducta de los empleados. Art. 5o. Mensualmente presentará á la Gobernación los presupuestos de gastos ordinarios para el servicio de los Faros, y una narración de su visita. Art. Único. En caso de necesitarse algún mecánico para reparar algún daño que ocurra en uno ó más Faros, el Inspector lo hará presente al Gobernador de la provincia, quien dispondrá lo conveniente al más pronto reparo. CAPITULO 5o. Del servicio y policía de los Faros. SERVICIO DE DIA. Art. lo. El servicio de día se hará principiando por limpiar los mecheros; quitando lo encarbonizado de las mechas, con las tijeras citrvas (que para el efecto tendrán todos los Faros Lenticulares y Fanales); aseando bien los intersticios del mechero, y cuidando de que las mechas queden a nivel de 332 éste; limpiando las lámparas, tubos, registros, chimeneas & y los demás enseres que con stituyen los aparatos de óptica y rotación; proveyendo del kerosine necesario a las lámparas ó depósitos, por manera que quede todo preparado para encender las luces á las seis de la tarde. Ar. 2o. Un cuarto de hora antes de las seis estarán limpias las linternas, quitadas las cortinas, y el polvo de la óptica, y con aceite dulce la máquina de rotación y el carro giratorio, á fin de que haga su evolución con más facilidad. Art. 3o. Se apagará la luz cuando ya esté claro el día y se puedan distinguir los objetos del golfo, para que ningún buque pueda quejarse por la faIta de luz, y se cubrirá la parte interior de la cámara de iluminación con sus cortinas, para evitar las manchas que pueden producir en los prismas los rayos del sol. SERVICIO DE NOCHE Art. lo. El servicio de noche principiará desde las seis de la tarde, en que se encenderán las luces de los Faros. Art. 2o. Una vez encendida la luz se pondrá en movimiento la máquina de rotación que de antemano debe estar con cuerda, observando el empleado que esté de guardia el tiempo que dure ésta, para que no falte la rotación. Art. 3o. Cada uno de los empleados, cuando estén de facción, cuidarán de observar la magnititd de la luz, su fortaleza ó debilidad, para que en caso de mucha fuerza en la luz no se rompan los tubos; ó en el de su debilidad, no se deje de ver por los buques que surcan cerca de nuestras costas. Cuidarán también de que no haya entorpecimiento del curso del kerosine en el tubo conductor ó alimentador del mechero; y si por casualidad lo hubiere, ó aconteciere algún incidente durante la noche, acudirán todos los empleados para su reparo. Art. 4o. La fatiga se dividirá en tres cuartos, principiando desde las seis de la tarde; y alternándose en los cuartos de facción los empleados, sucesivamente y por cl orden regular, para que el servicio sea igual, segun lo ordene el primer "Guarda-faro", quien debe vigilar estrictamente en el cumplimiento de su deberes y de los demás empleados. Además, todos tres 333 empleados deben conservar perfecta armonía; y el primero impedirá con amonestaciones todo desavenimiento entre el segundo y el tercero, y si reincidieren dará parte al Inspector; y éste, a su vez, al Gobernador Art. 5o. En todos los Faros Lenticulares y Fanales habrá mecheros, con mechas listas y lámparas y tubos de reserva; para en caso de notar alguna falta en la noche, remediarla sin perdida de tiempo. Art. 6o. El primer "Guarda-faro", observará la aplicación en el conocimiento del mecanismo, y en el cumplimiento de los deberes que tengan los demás empleados, y lo que vayan adquiriendo con la práctica, para tener siempre personas aptas para el desempeño de esos destinos. Tendrán también un libro en el que se registre el servicio de los empleados, para que en caso de falta de luz o algún incidente, saber en cuál de ellos está la falta y castigarlo. Este libro, ó su copia, lo remitirá mensualmente al Inspector; y éste á la Gobernación. Art. 7o. El empleado que dejare de cumplir debidamente Sus deberes, ó que sea negligente para el servicio, será castigado con una rebaja de un peso por cada falta, atendiendo á la cantidad de su sueldo. DISPOSICIONES COMUNES Art. lo. Para el embarque de víveres y aguada para los empleados de los Faros, y demás útiles para el servicio de éstos, pedirá el Inspector al Gobernador de la provincia la orden para que la Capitanía del puerto y Resguardo faciliten los bogas para estas operaciones. Art. 2o. Ningún empleado de los Faros podrá separarse de su puesto sin previo permiso del Inspector; y en caso de enfermedad ó algún acontecimiento grave bastará la orden del Director. Art. 3o. Cuando el Inspector recibiere alguna queja de los empleados, lo pondrá en conocimiento de la Gobernación, y no podrá castigar ni deponer de su destino a los empleados por sí solo. Art. 4o. Todos los primeros "Guarda-faros" pedirán por conducto del Inspector lo necesario para el buen servicio de los establecimientos. 334 Dado en el Palacio de Gobierno en Quito, á 20 de Mayo de 1884. JOSE MARIA PLACIDO CAAMAÑO. El Ministro de lo Interior, J. Modesto Espinosa. 335 Anexo D 1906 ELOY ALFARO ENGARGADO DEL MANDO SUPREMO DE LA REPUBLICA Reglamento de Policía Marítima para los Puertos de la República del Ecuador CAPITULO 1 Capitanes de Puerto Art. l°.- Los Capitanes de Puerto serán Jefes ú Oficiales de la Armada Nacional, nombrados por el Supremo Gobierno: los Capitanes de Puertos mayores serán Jefes, y los de Puertos menores y Caletas, serán Oficiales. Pasa al Art. 10° en el cual se tratan los faros. Art. 10°.- Se refiere a los Faros, entre otros temas. XXIV. Los Capitanes son los Inspectores de los faros establecidos en los límites de su jurisdicción; les corresponde proponer á la Comandancia General los nombramientos de Guarda-Faros para ciudadanos aptos, de buena conducta y buena salud; y cuidarán de que los Guarda-Faros permanezcan en sus puestos y cumplan sus deberes con puntualidad y consagración. XXV. Los Capitanes solicitarán mensualmente que se haga, por quien corresponda, el pago de los sueldos devengados por los Guarda-Faros y la respectiva provisión de combustibles y materiales de consumo para el servicio de los Faros; solicitarán a la Comandancia General, las mejoras y reparaciones necesarias para la buena conservación de las torres y máquinas de los Faros y habitaciones de los Guardas; también cuidarán los Capitanes de la provisión de agua potable, para el consumo de los GuardaFaros que lo necesiten. 336 XXVI. Los Capitanes corregirán y castigarán á los Guarda-Faros, con amonestaciones, arrestos y multas por sus errores, omisiones y faltas leves en el servicio; pero comprobada la falta de luz, la embriaguez, el abandono del puesto, pedirán á la Comandancia General la inmediata baja del responsable, proponiendo, á la vez, su reemplazo: con el mismo rigor procederán con los Guardas díscolos, irasibles y pendencieros, que alteren la tranquilidad y buena armonía que deben conservar los empleados de cada Faro. XXVII. Los Capitanes de Puerto tienen á su cargo la inspección de las Boyas situadas dentro de los limites de su jurisdicción; cuidarán de su estabilidad y buena conservación; pedirán á la Comandancia General el reemplazo de las Boyas inutilizadas por la acción del mar y del tiempo y de las que se fueren á pique ó al garete, por cualquier accidente y propondrán la situación de nuevas Boyas en los parajes peligrosos para la navegación. XXVIII. Los Capitanes mandarán inspeccionar mensualmente los Faros y Boyas de su cargo, á sus ayudantes ó Cabos de Matrícula, que les informarán del orden, servicio y necesidades de los Faros y de las Boyas; pero anualmente, y cada vez que fuere necesario, harán la inspección personalmente y darán cuenta á la Comandancia General; á los Capitanes, Ayudantes y Cabos de Matrícula, se les abonará por Tesorería de Hacienda el viático correspondiente, para sus viajes de inspección de Faros y Boyas. XXIX. Los Capitanes conocerán prácticamente los fondeaderos y canales de sus puertos, sus sondajes, vientos dominantes y eventuales, la fuerza y dirección de las corrientes y el nivel de las mareas, los bajeales, bancos y escollos y todos los obstáculos y peligros comprendidos dentro de los límites de su jurisdicción; levantarán los planos hidrográficos de los puertos y canales y anotarán todas las modificaciones que observen y puedan interesar á la seguridad de la navegación, especialmente después de la época de las lluvias y crecientes de los ríos. 337 Anexo E Faros AGA Instalados hasta 1930 Nombre del Faro o Ubicación Fecha de Instalación Posición Aproximada Características 2° 26' 4" S 2° 38' 5" S 2° 44' 5" S 3° 14' 1" S 3° 01' 7" S 2° 47' 5" S Visibili dad en millas 9 9 9 14 14 14 Punta de Piedra Isla Verde Punta Mandinga Jambelí Punta Arenas Punta Española 8 julio 1921 25 julio 1921 31 julio 1921 22 sept. 1921 8 oct. 1921 26 nov. 1921 Longitud Oeste 79° 49' 3" 79° 55' 5" 79° 53' 8" 80° 01' 0" 80° 06' 8" 79° 55' 5" Santa Clara Santa Elena 6 dic. 1921 2 febrero 1922 80° 25' 4" 81° 0' 0" 3° 10' 6" S 2° 11' 3" S 22 22 Isla de la Plata 18 febrero 1922 81° 06' 0" 1° 15' 0" S 9 Manglaralto Data Manta San Lorenzo 26 febrero 1922 29 marzo 1922 13 abril 1922 19 abril 1922 80° 43' 7" 80° 15' 4" 80° 43' 7" 80° 55' 9" 1° 50' 6" S 2° 44' 0" S 0° 56' 7" S 1° 03' 5" S 9 9 9 9 338 Latitud Destellos por seg. Destellos por minuto Altura en metros Luz Eclipse Total 0,3 1,5 0,4 0,5 0,4 0,3 0,3 0,6 0,5 0,5 0,7 0,7 0,7 0,6 0,5 0,9 0,5 0,5 0,5 2,7 13,5 3,6 4,5 3,6 1,2 4,2 5,4 1,5 7,5 3,0 3,0 17,0 5,4 4,5 8,1 1,0 1,0 11,5 3,0 15 4,0 5,0 4,0 6,0 1 en 4 1 en 15 1 en 4 1 en 5 1 en 4 2 en 6 20 4 15 12 15 20 14,63 12,19 53,05 17,98 15,24 39,94 6,0 10,0 1 en 6 2 en 10 10 12 78,03 105,72 25,1 3 en 25 8 190,20 6,0 5,0 9,0 15,0 1 en 6 1 en 5 1 en 9 3 en 15 10 12 7 12 47,24 12,19 28,04 130,46 Nombre del Faro o Ubicación Fecha de Instalación Posición Aproximada Latitud Características Visibili dad en millas 9 9 9 5 5 5 5 9 9 9 Cabo Pasado Punta Coquito Punta Galera Boya N° 1 (Punta Española) Boya N° 2 (Punta Arenas) Boya N° 3 (Manta) Boya N° 4 (Bahia) Machalilla Sitio Nuevo Mondragón 29 abril 1922 13 mayo 1922 17 mayo 1922 22 feb. 1927 25 feb. 1927 2 nov. 1927 4 nov. 1927 5 junio 1929 1 febrero 1930 22 febrero 1930 Longitud Oeste 80° 30' 5" 79° 42' 0" 80° 06' 1" 79° 53' 2" 80° 01' 5" 80° 44' 3" 80° 29' 6" 80° 45' 4" 79° 49' 3" 79° 33' 7" Barra de Puná (Baliza) Mosquiñaña (Baliza) Aguas Piedras (Baliza) Puerto Balzas Boya N° 5 (Punta Salinas) 13 ago. 1930 14 ago. 1930 24 ago. 1930 30 ago. 1930 8 sept. 1930 79° 55' 8" 80° 2' 2" 80° 6' 19" 79° 53' 5" 80° 20' 3" 2° 42' 1" S 2° 38' 7" S 2° 41' 10" S 2° 35' 0" S 3° 4' 3" S 5 5 Punta Bellaca 20 sept. 1930 80° 27' 4" 0° 36' 0" S 5 Piedra de Bahía (Baliza) 23 sept. 1930 80° 25' 5" 0° 34' 8" S 5 0° 22' 5" N 1° 0' 0" N 0° 50' 0" N 2° 48' 9" S 3° 01' 7" S 0° 55' 5" S 0° 34' 0" S 1° 27' 5" S 2° 17' 1" S 2° 33' 7" S 9 5 Destellos por seg. Destellos por minuto Altura en metros Luz Eclipse Total 1,2 1,1 1,0 0,3 0,3 0,3 0,3 0,3 1,0 0,3 0,3 0,2 0,2 0,5 0,6 0,5 0,5 0,5 0,5 0,2 10,8 10,9 9,0 2,7 2,7 2,7 2,7 2,7 3,0 2,4 5,0 2,0 3,3 1,0 6,2 2,0 7,0 2,0 7,0 1,8 12,0 12,0 10,0 3,0 3,0 3,0 3,0 3,0 4,0 8,0 1 en 12 1 en 12 1 en 10 1 en 3 1 en 3 1 en 3 1 en 3 1 en 3 1 en 4 2 en 8 5 5 6 20 20 20 20 20 15 15 83,82 14,93 29,26 3,96 3,96 3,96 3,96 50,40 12,19 12,19 2,2 3,5 1,5 6,8 10 2 en 11 2 en 7 1 en 1½ 5 en 34 2 en 10 27 17 40 9 12 3,05 3,05 12,19 12,19 4,27 10,0 2 en 10 12 30,79 2,0 1 en 2 30 4,50 339 Faro de Triagoz GLOSARIO De términos usados en este libro y relacionados con los Faros y sus definiciones en ese campo. 340 341 Acetileno También conocido como etileno o eteno, es un gas soluble e inflamable que puede usarse como combustible de un iluminante cuando se disuelve en acetona. Acetona Solvente líquido en el cual se puede liquificar el gas acetileno. AGA Sigla que se constituyó en acrónimo de la compañía Svenska Aktiebolaget Gasaccumulator, de Estocolmo, Suecia. Agamassan Una substancia, inventada por Nils Gustaf Dálen (1869-1937), que absorbe gas acetileno. Este invento originó las siglas AGA que usó la empresa como acrónimo. Ver AGA. Alférez Oficial naval de menor graduación, inmediatamente inferior al teniente. Alcance geográfico Es la distancia máxima a que se puede ver un faro en condiciones de un faro de perfecta visibilidad, limitada solamente por la curvatura de la tierra. Se expresa en millas náuticas. Alcance lumínico de Es la distancia máxima a la que se puede ver una luz en función de un faro la intensidad lumínica. Alcance nominal de Es la distancia máxina a la que puede ser vista una luz en tiempo un faro claro. Argand, lámpara Lámpara de aceite inventada por Ami Argand (Suizo), cuya diferencia consistía en una mecha concéntrica y chimenea de vidrio con el fin de proveer más oxigeno a la llama. Armarín o Armadura Cuarto de linterna pequeño para los lentes de 5° y 6° orden; por sus (cabanne) dimensiones, no cabe una persona dentro de él. Asimilado Rango militar que se otorga con carácter temporal a una persona civil, en virtud del ejercicio de un cargo dentro de un organismo militar. Automatizado, faro Faro que no requiere de guardafaro y que funciona sin supervisión. Bajío Bajo Bajo Lecho de un río o del mar que se encuentra a poca profundidad y representa un peligro para la navegación. Balandra Embarcación de cubierta, con un palo, vela cangreja y dos o más foques, usada para la navegación fluvial y costera. Baliza Balizamiento Balizar Banco 342 Señal que, en posición visible y fácil de distinguir, se pone en la costa próxima a la orilla o dentro del mar, de los grandes ríos y de los canales navegables para marcar la situación de puntos u objetos peligrosos o indicar la dirección que se debe seguir. Conjunto de todas las señales, fijas y flotantes, que sirven para indicar los peligros existentes y los límites de los canales practicables para la navegación. Colocar balizas. Acumulación de arena, grava y guijarros formada por la corriente en el lecho de un río o en el litoral (especialmente en los grandes estuarios). También usado para Bajo. Barandilla Antepecho compuesto de balaustres de madera, hierro u otro material, que circunda la galería de los faros. Barril, lente de Sistema de lentes que semejan esa forma y que contienen el iluminante en su eje focal. Por lo general un lente fijo. Base Parte fundamental de la construcción de la torre de un faro, sobre la cual se levanta la superestructura. Bivalvo Tambor lenticular de dos paneles opuestos. Boya Objeto flotante y claramente visible, anclado al fondo de un cuerpo de agua, usado para señalar tanto obstáculos como canales de navegación. Puede tener una luminaria, campana u otra señal auditiva o visual. Braza Unidad de longitud equivalente, en principio, a la distancia que media entre los extremos de los desdos cuando se tienen los brazos abiertos en cruz. La braza tiene una longitud variable, pero en la marina se usa una de dos medidas: 1,6718 m. o bien 1,8288 m. (braza inglesa o fathom). CALM Siglas del rango naval de Contralmirante. Candela Unidad de medida de la intensidad luminosa de un iluminante. Conocida originalmente como "candle power" por el poder o fuerza lumínica de una vela. Capitán Oficial de graduación inmediatamente superior al teniente e inmediatamente inferior al comandante, comodoro o contralmirante, dependiendo de la organización naval existente. Término usado, de acuerdo al contexto, para referirse a un Capitán de Puerto, Comandante de un buque o cualquiera de los tres rangos navales que usan ese término como parte del título. Capt. Abreviatura de Capitán. Característica (de la Las cualidades distintivas de iluminación, tales como el color y el luz de un faro) patrón de eclipses y destellos. Catóptrica Parte de la óptica que trata de la luz reflejada. Catóptrico, faro Sistema de iluminación en la cual el iluminante se coloca frente a un reflector. Chata Embarcación baja de fondo llano, de cubierta lisa y generalmente con bodega. Las chatas usan vela de cruz o remos para su locomoción, o son remolcadas. En la América del Sur se designaba con este nombre una embarcación de dos palos y velas de cuchillo, de un porte de 60 a 70 toneladas. Eran muy usadas en la navegación fluvial. Chimenea En la lámpara de los faros, el tubo de vidrio que proteje la llama del viento y al mismo tiempo conduce más oxigeno a ella a través del flujo vertical de aire. Cilíndrico, lente Ver Lente de barril. Circa o c. Fecha o época aproximada de un evento. Cmdte. Abreviatura del cargo de Comandante. 343 CNVP Colza, aceite de Comandante Compañía de Vapores Británicos Corona CPCB CPFG CPNV Crnel. Cristal óptico Crown, vidrio Cuarto de servicio Cúpula Dióptrica Dióptrico, faro Distancia focal EE. UU. Eje focal Escollo Espermaceti, aceite de Falda Fanal Faro Faro Catóptrico Faro Lenticular 344 Siglas de la Compañía de Navegación a Vapor del Pacífico (ver PSNC). Nombre en español de la PSNC. Aceite que se obtiene de la semilla de rapé, usado como combustible de las lámparas de faros en el siglo 19. Título que se le da a quién comanda un buque o un reparto militar. También se usa para los rangos de Capitán de Fragata o Capitán de Navío. Otro nombre para la PSNC o CNVP. Parte superior o alta del Lente Fresnel, que contiene cristales catadióptricos. Siglas del rango naval de Capitán de Corbeta. Siglas del rango naval de Capitán de Fragata. Siglas del rango naval de Capitán de Navío. Abreviatura del rango de Coronel. Vidrio cuya formulación y proceso de fundido le dan una refringencia adecuada para uso óptico. Tipo de vidrio óptico formulado para la fabricación de los lentes para faros franceses. Cuarto inmediatamente abajo de la linterna, que alberga la máquina de rotación y/u otros elementos mecánicos, combustible y útiles de repuesto para uso inmediato. Techo de la linterna, que contiene una chimenea disimulada para mantener el flujo de aire necesario para la combustión de las lámparas con llama abierta. También es la base del pararrayos. Parte de la física que trata de la acción que ejercen los medios sobre la luz que los atraviesa, por oposición a la catóptrica, que trata de la luz reflejada. Sistema de iluminación en el cual se coloca un lente de refracción frente al iluminante. La distancia entre el punto focal de un lente o reflector parabólico y el centro en la superficie del mismo. Abreviatura de los Estados Unidos de Norte América. En un faro equipado con Lente Fresnel fijo o rotatorio, el punto donde convergen los planos focales de los varios lentes. Es el punto donde debe estar ubicado el iluminante para que su luz se irradie en todas las direcciones, según el diseño del Lente. Obstáculo que se encuentra en el lecho de un río o del mar. Aceite animal obtenido de la grasa de la cabeza de las ballenas de esperma, usado como combustible para las lámparas de los faros en los siglos 18 y 19. Parte inferior o baja del Lente Fresnel, que contiene cristales catadióptricos. Ver Farol. También, faro lenticular de 5° o 6° orden. Ver página 21. Faro cuya óptica es uno o varios reflectores parabólicos. Faro cuya óptica es un Lente Fresnel. Farol Farola Flint, vidrio Galería General Goleta Gral. Guardafaro H.M.S. Iluminante Isofásica, luz Lámpara Lente Lente fijo Lente Fresnel Lente rotatorio Lentes, paneles de Lewis, lámpara Linterna Milla Náutica Mineral, aceite Especie de caja formada de vidrios o de otra materia transparente y con respiradero en la parte superior dentro de la cual se pone luz para que alumbre y no se apague con el aire. Farol de mayor tamaño que el ordinario. Nombre que antiguamente usaban los navegantes para designar un faro. Tipo de vidrio óptico formulado para la fabricación de los lentes para faros ingleses. Parte de la estructura de la torre de un faro, que rodea al cuarto de la linterna. Rango militar o parte de un título civil p. ej.: inspector general. Velero de dos o tres palos con velas cangrejas y casco de líneas más finas que otros veleros semejantes. En los primeros años de la Marina de Guerra ecuatorian se usaba también para designar al Pailebot o Pailebote. Abreviatura de General o del atributo del título civil.. Persona encargada de la operación y cuidado de un faro. His/Her Majesty’s Ship – Buque de Su Majestad. Aparato que genera una luz. Característica de una luz en la cual sus destellos y eclipses son de igual duración. La fuente de la luz de un faro. El iluminante del faro. Cristal o conjunto de cristales que refractan y reflejan los rayos de luz con el fin de dirigirlos en una o varias direcciones específicas. Óptica que no gira y emite una luz constante cuyas características no varían. Conjunto de lentes inventado por Agustín Jean Fresnel (Francia, 1788-1827), que consiste de prismas dióptricos que están ubicados sobre, abajo y a los lados de un lente convexo ubicado en el centro del conjunto. Su objeto es refractar la luz del iluminante colocado en el plano focal. Óptica que emite una luz de características variables por medio de la rotación del tambor lenticular. Ver paneles de destello. Óptica configurada por Winslow Lewis y utilizada en los faros de los EE. UU. de Norte América en la primera mitad del siglo 19. Cuarto cerrado con vidrios y con ventilación controlada, que alberga la óptica de un faro, y que está ubicado en la cúspide de la superestructura de la torre. Puede ser el cuarto solo o el conjunto de todas las partes que la integran. O nudo (knot) Unidad de medida que es equivalente a 1.85 kilómetros o 1.15 millas (terrestres), utilizada para medir el alcance de la luz de los faros. También conocido como queroseno. 345 Ocultación, luz de Ojo de buey Oliva, aceite de Óptica Orden, de lentes Fresnel Pailebot Panel de destello Parafina Plano focal PSNC Punto focal Queroseno Recalada, faro de Reflector Reflejo Refracción Refringencia Servicio Sonda Sondaje S.S. S.S. - SS Superestructura 346 Un iluminante que se apaga a intervalos regulares para dar a la luz una característica específica. Lente convexo en el centro del panel de destello. Aceite proveniente del fruto del olivo, usado como combustible en las lámparas de los faros, en los siglos 19 y 20. El aparato que emite la luz de un faro. Tamaño del lente basado en su distancia focal. Pequeña embarcación de líneas muy afinadas, del tipo de goleta, y que tiene de ordinario dos palos con velas cangrejas y foques. Se usaba también para designar a una Goleta. Conjunto de lentes que aumentan de manera temporal la potencia lumínica de la luz proveniente de un faro, cuando el punto de observación está alineado con el centro del lente. Aceite mineral, también conocido como queroseno. Un plano perpendicular que pasa a través del punto focal de un lente o reflector parabólico. Siglas de la Pacific Steam Navigation Company (ver CNVP). El punto de un lente o reflector parabólico en el cual convergen o divergen rayos de luz paralelos, siguiendo su reflección o refracción. También conocido como keroseno o kerosín. Aceite mineral utilizado como combustible en las lámparas de los faros, desde mediados del siglo 19 hasta entrado el siglo 20. También conocido como parafina. Faro de 2° orden o superior, que se ubica en las costas abiertas. Superficie plana o parabólica que refleja la luz. El rayo o la onda de proviene de una reflexión. El cambio de dirección de un rayo de luz causado por el medio a través del cual pasa. Cambio de dirección que experimentan los rayos luminosos al pasar de un medio a otro o, en el mismo medio, de una zona a otra de densidad diferente. Propiedad de los cuerpos que refractan la luz. El Servicio de Faros. Instrumento sencillo de medición consistente en una cuerda con nudos cada cierta distancia (normalmente 1 braza) y un peso que la lleva la fondo del mar. El acto de medir la profundidad del fondo del mar, río, estuario, etc. con una sonda. Steam Ship – Buque a vapor. Su señoría. La parte principal de la torre de un faro, que parte de su base. Tambor Lenticular Teniente TNFG TNNV Torrero U.S. U.S. – US Parte central del Lente Fresnel fijo y rotatorio que contiene los paneles y los mantiene equidistantes del eje focal. En el lente rotatorio, la parte que gira alrededor del iluminante y que contiene los paneles de destello. Oficial de graduación inmediatamente superior al alférez e inferior al capitán. Según la época, tenía de dos a tres rangos intermedios. Siglas del rango de Teniente de Fragata. Siglas del rango de Teniente de Navío. Nombre que se les daba inicialmente a los guardafaros del Ecuador. United States. Usted – Usía 347 Fanal en Hierro NOTAS – Fuentes Bibliográficas 348 Abreviaturas Usadas en las Notas AH/BMG = ABC = BAEP = ACN = AN = IHM = BN = Fonds Ancien = Jta. Benef. Gquil. = BMG = BMG/SR = BMG/SE = IHM-AH = IHM-RHM = IHM-HME = USLS = B/IHM = Reg. Of. = AHG/BCE = B/JuEY = UKHO = USHO = APR = GYE = Gobor = Min. = Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil Archivo del Banco Central del Ecuador Biblioteca Aurelio Espinoza Pólit Archivo del Congreso Nacional Archivo Nacional Instituto de Historia Marítima Biblioteca Nacional Bibliothéque de l'Ecole des Ponts et Chaussées, Francia Junta de Beneficencia de Guayaquil Biblioteca Municipal de Guayaquil Sala Rolando de la BMG Sala Ecuador de la BMG Instituto de Historia Marítima - Archivo Histórico Instituto de Historia Marítima - Revista de Historia Marítima Instituto de Historia Marítima - Tomos de Historia Marítima del Ecuador United States Lighthouse Society Biblioteca del Instituto de Historia Marítima Registro Oficial Archivo Histórico del Guayas - Banco Central del Ecuador Biblioteca de Julio Estrada Ycaza United Kingdom Hydrographic Office United States Hydrographic Office Archivo de la Presidencia de la República --------------------------------------------------------Guayaquil, Ecuador Insp. = Inspector de Faros Gobernador Hcda. = Hacienda Ministro OTRAS ABREVIATURAS EN EL GLOSARIO. 349 Nota Fecha Fuente de Información Tema 1 05/12/1841 AH/BMG "El Correo Informe Capt. Peacock del Vapor Chile, Semanal" instalación faro en Sta. Clara 2 06/12/1841 ABC/Fondo Jijón-63/-f.113 - 1841 Observaciones y Fuente Original "El Correo Semanal" Relación de implementos de la farola Diego Girdon a Gobor Guayas 3 06/12/1841 ABC/Fondo Jijón-63/33 Informe de Girdon al Gobernador del f.109 - 1841 Guayas Diego Girdon a Gobor Guayas 4 13/12/1841 ABC/Fondo Jijón-63/34 Se impone tasa para cubrir gastos faro Sta. f.115 - 1841 Clara Decreto Presidente J. J. Flores 5 16/12/1841 ABC/Fondo Jijón-63/35 Comunica expedición de decreto que f.117 - 1841 indemniza a Gobernación Gral. Mariano Miño a Gobor Guayas 6 18/12/1841 BAEP - Hemeroteca "Gaceta del Ecuador" Informe Capt. Peacock del Vapor Chile, instalación faro en Sta. Clara "Gaceta del Ecuador" 7 19/12/1841 AH/BMG "El Correo Semanal" Reportaje del acto de inauguración del faro en Sta. Clara "El Correo Semanal" 8 31/12/1841 BAEP/ Informes de Ministros Min. Interior y Rel Ext. al Congreso. Secc.7, Informes de Ministros pag.37 9 02/01/1842 BAEP - Hemeroteca "Gaceta del Ecuador" Reportaje del acto de inauguración del faro en Sta. Clara "Gaceta del Ecuador" 10 19/01/1842 Epistolario - Vicente Rocafuerte Visita de Gral. Santa Cruz y compañía a El Muerto a examinar farola V. Rocafuerte a J. J. Flores 11 12/03/1842 AH/BMG-332/DF/4 Disposición de buque para abastecer faro Sta. Clara Gobor Guayas a Gral. Cmdte. Distrito 12 10/08/1848 BAEP/ Informes de Ministros Inf. Contaduría Mayor del Distrito del Guayas Informes de Ministros 13 10/08/1848 BAEP/ Informes de Ministros Min. Hcda. - Aduanas - Ingresos exiguos, propone remate Informes de Ministros 14 10/08/1849 BAEP/ Informes de Ministros Informe Min. Hcda. - Documentos - Egresos Informes de Ministros 1849 15 10/08/1849 BAEP/ Informes de Ministros Informe Min. Hcda. - Documentos Ingresos 1/7/48 a 1/6/49 Informes de Ministros 16 19/07/1854 BAEP/ Informes de Ministros Informe Min. Hcda. - Documentos - Inf. Contaduría Dist. Guayas Informes de Ministros 17 10/08/1855 BAEP/ Informes de Ministros Min. Guerra y Marina Informes de Ministros 18 20/08/1856 BAEP/ Informes de Ministros Min. Guerra y Marina - Presupuesto de gastos para 1857 Informes de Ministros 19 01/01/1869 United States Lighthouse Society 1869 World Lights List Wayne Wheeler, U.S.L.S. 20 27/08/1869 ACN/Caja 45, Carpeta 2a 1° Proyecto de decreto sobre faros Archivo del Congreso Nacional 21 27/08/1869 ACN/Caja 45, Carpeta 2a 2° Proyecto de decreto sobre faros Archivo del Congreso Nacional 22 28/08/1869 Leyes y Decretos Se establece faro en Isla Sta. Clara Convención Nacional - Publicación 23 28/08/1869 Leyes y Decretos Autoriz. al Ejecutivo la Reforma de Tarifa Aduana Convención Nacional - Publicación 24 28/08/1869 ACN/Caja 45, Carpeta 1 Decreto sobre establecimiento de tres faros Archivo del Congreso Nacional 25 28/08/1869 ACN/Tomo 3 Pag.107 Actas de Sesiones Archivo del Congreso Nacional Acta de Sesión del 28 de agosto en que se recibe decreto sancionado 26 31/12/1869 ACN/Caja 45, Carpeta 2a Proyecto de Ley de Gastos para 1870-1871 Archivo del Congreso Nacional 27 10/08/1871 BAEP/ Informes de Ministros Informe Min. Hcda., Secc. OO. PP., pag. 44, Informes de Ministros párrafo 2° 28 19/11/1871 AN C.216 L.315 Original de contrato entre F. Dioudonnat y B. Fourquet Archivo de Min. Hcda. 29 22/12/1871 IHM- "El Nacional" Min. Hcda. Dispone a Gobor reciba faros y se coloquen Min. Hcda. A Gobor Guayas 30 17/01/1872 ABC/Fondo Jijón49/223 f.250 - 1872 Encarga a Gobor Guayas ejecución de contrata para colocar faros Min. Hacienda a Gobor Guayas 31 17/01/1872 ABC/Fondo Jijón49/224 f.251 - 1872 Designar sitios para ciertos faros Min. Guerra y Marina a Gobor Guayas 32 24/01/1872 ABC/Fondo Jijón49/225 f.252 - 1873 Pareceres sobre puntos de ubicación de los faros Min. Hacienda a Gobor Guayas 33 27/01/1872 AH/BMG-902 doc.020 Aprobación 9 puntos de mecánico de faros Min. Hacienda a Gobor Guayas 34 27/01/1872 AN C.216 L.315 Informa que sale mecánico a inspeccionar puntos de colocación Gobor Guayas a Min. Hcda. 35 31/01/1872 BN/ "El Nacional" Contrato del mecánico de faros publicado en "El Nacional" "El Nacional" 36 08/02/1872 ABC/Fondo Jijón49/231 f.259 - 1872 Informe sobre puntos de colocación de faros Dioudonnat a Gobor Guayas 37 08/02/1872 ABC/Fondo Jijón49/230 f.258 - 1872 Carta (s/n) sin recursos, torres no están armadas Dioudonnat a Gobor Guayas 38 09/02/1872 AH/BMG-904 doc.058 Sobre traducción de su contrato Dioudonnat a Gobor Guayas 39 10/02/1872 AN C.216 L.315 Observaciones del mecánico al texto de contrato en "El Nacional" Gobor Guayas a Min. Hcda. 40 17/02/1872 AH/BMG-902 doc.024 Aprobación informe y compra linterna faro Pta. Española Min. Hacienda a Gobor Guayas 41 07/03/1872 AH/BMG-904 doc.092 Boyas y cajas conteniendo piezas de faros y Dioudonnat a Gobor Guayas boyas 42 12/03/1872 AH/BMG-904 doc.077 Inf. #10. Bodega para armar y guardar. Dioudonnat a Gobor Guayas 43 14/03/1872 AH/BMG-904 doc.079 Inf. #11. Mucho peso para desembracar cajones Dioudonnat a Gobor Guayas 44 16/03/1872 AH/BMG-905 doc.031 - Se autoriza aumento en ración de personal 1872 faro Sta. Clara Min. Hcda. a Gobor Guayas 45 18/03/1872 AH/BMG-904 doc.078 Inf. #12. Cuarto grande en colegio y alumnos Dioudonnat a Gobor Guayas 46 22/03/1872 AH/BMG-902 doc.032 Pres. aprueba bodega y ayudantes del mecánico Min. Hacienda a Gobor Guayas 47 30/04/1872 ABC/Fondo Jijón49/234 f.263 - 1872 Orden de ensayo faro Sta. Clara Cmdte. Gen. Dist. A Gobor Guayas 48 30/06/1872 AH/BMG-904 doc.0102 Inf. #36. Avance instalación torre Sta. Clara Dioudonnat a Gobor Guayas 49 30/06/1872 AH/BMG-904 doc.0100 Inf. #42. Se mojaron piezas pero ya están bien Dioudonnat a Gobor Guayas 50 30/06/1872 AH/BMG-904 doc.056 Dioudonnat a Gobor Guayas Inf. #43. Pedido víveres 51 30/06/1872 AH/BMG-902 doc.036 Exija pronta conclusión de obra Min. Hacienda a Gobor Guayas 52 13/07/1872 AH/BMG-902 doc.069 Aprobando pedido del mecánico Min. Hacienda a Gobor Guayas 53 31/07/1872 Leyes y Decretos Decreto arreglando el cobro del derecho de faros Decreto Ejecutivo Pres. García Moreno 54 31/07/1872 ABC/Fondo Jijón49/237 f.266 - 1873 Decreto del 31 de julio que reforma decreto del 28 agosto Decreto Ejecutivo Pres. García Moreno 55 31/07/1872 IHM-s/r Decreto del 31 de julio que reforma decreto del 28 agosto (copia) Decreto Ejecutivo Pres. García Moreno 56 31/07/1872 ABC/Fondo Jijón49/236 f.265 - 1873 Visto oficio #79, se expidió decreto Min. Hacienda a Gobor Guayas 57 04/08/1872 AH/BMG-904 doc.097 Inf. #56. Mala conducta torrero Núñez Dioudonnat a Gobor Guayas 58 14/08/1872 AH/BMG-878 doc.0165 Gobierno conviene en valores para pago - 1872 mensual Serv. Faros Min. Hcda. a Gobor Guayas 59 14/08/1872 AH/BMG-902 doc.0118 Ha puesto en conocimiento de S.E. El J de E Min. Hacienda a Gobor Guayas avance de la obra 60 17/08/1872 AH/BMG-878 doc.0185 Se reimpone derecho de aduana denominado Min. Hcda. a Gobor Guayas - 1872 de faro 61 31/08/1872 AH/BMG-902 doc.0140 Recibido inventario entregado a Núñez Min. Hacienda a Gobor Guayas 62 04/09/1872 AH/BMG- El Nacional N°210 #16 Trabajos en torre para faro Reportaje 63 06/09/1872 ABC/Fondo Jijón49/240 f.269 - 1872 Parte anunciando funcionamiento faro Sta. Clara Min Guerra y Marina a Cmdte. Gen. Dist. 64 07/09/1872 AN C.217 L.316 Gobierno complacido de que el faro de Sta. Clara está funcionando Min. Hcda. A Gobor Guayas 65 09/09/1872 AN C.216 L.315 Acta de Jta. de Hacienda del Guayas. Modif. Acta de Junta de Hacienda Contrato Dioudonnat 66 11/09/1872 AH/BMG- El Nacional Inventario faro Sta. Clara El Nacional 67 14/09/1872 AH/BMG-904 doc.096 Inf. #71. Palos para Pta. Mandinga y calafate Sta. Clara Dioudonnat a Gobor Guayas 68 14/09/1872 AH/BMG-904 doc.0101 Inf. #72. Pide aprobación presupuesto jornales Dioudonnat a Gobor Guayas 69 21/09/1872 AH/BMG-902 doc.0169 S.E. El E.P.E. Aplaude solicitud y actividad Min. Hacienda a Gobor Guayas de Diou... 70 21/09/1872 AN C.217 L.316 Mecánico pide libertad de derechos para traer muebles Gobor Guayas a Min. Hcda. 71 11/10/1872 AH/BMG-904 doc.099 Inf. #79. Pta. Mandinga y calafate Sta. Clara Dioudonnat a Gobor Guayas 72 11/10/1872 ABC/Fondo Jijón49/245 f.274 - 1872 Inf. #80. Conclusión torre Pta. Mandinga Dioudonnat a Gobor Guayas 73 11/10/1872 AH/BMG-904 doc.062 Inf. #82. Problemas con torrero Núñez Dioudonnat a Gobor Guayas 74 19/10/1872 AH/BMG-902 doc.0204 Destitución Núñez Min. Hacienda a Gobor Guayas 75 19/10/1872 AH/BMG-902 doc.0212 Aprobación Suprema de informe mecánco Min. Hacienda a Gobor Guayas 76 19/10/1872 AH/BMG-904 doc.094 Inf. #84. Sueldo empleados y se refiere a REGLAMENTO de FAROS Dioudonnat a Gobor Guayas 77 26/10/1872 Leyes y Decretos Derecho adicional por faro de Pta. Mandinga Decreto Ejecutivo Pres. García Moreno 78 26/10/1872 IHM-s/r Aumentando monto de derecho. Faro de Pta. Decreto Ejecutivo Pres. García Moreno Mandinga 79 28/10/1872 AH/BMG-904 doc.080 Inf. #94. Abastecimiento faro Pta. Mandinga Dioudonnat a Gobor Guayas 80 30/10/1872 AH/BMG-904 doc.084 Inf. #95. Abastecimiento Sta. Clara - Insiste Dioudonnat a Gobor Guayas en Reglamento 81 30/10/1872 AH/BMG-902 doc.0224 Aprobado Ofic. a Gob. Manabí sobre faro Manta Min. Hacienda a Gobor Guayas 82 04/11/1872 ABC/Fondo Jijón49/247 f.276 - 1872 Boya en bajos de Atacames - Primer Sistema Min Guerra y Marina a Cmdte. Gen. de Faros Dist. 83 11/11/1872 AH/BMG-904 doc.082 Inf. #98. Inventario faro de Manta Dioudonnat - Ing. Mecánico de Faros 84 12/11/1872 AH/BMG-904 doc.086 Inf. #101. Informes Pta. Mandinga, Sta. Clara e inventario Manta Dioudonnat a Gobor Guayas 85 20/11/1872 Leyes y Decretos Haciendo extensivo el del 25 Oct. 1872. Luz Decreto Ejecutivo Pres. García Moreno de Pto. de Manta 86 21/11/1872 AH/BMG-904 doc.088 Inf. #105. Transformación de lámparas para Dioudonnat a Gobor Guayas consumo de kerosene 87 21/11/1872 AH/BMG-904 doc.063 Madera para Esmeraldas - Intervención ante Dioudonnat a Gobor Guayas Capt. Pto. GYE 88 23/11/1872 AH/BMG-904 doc.060 Problema con Capt. Pto. Guayaquil Dioudonnat a Gobor Guayas 89 27/11/1872 ABC/Fondo Jijón49/252 f.281 - 1873 S.E. El Pres. satisfecho con luz Manta Min. Hacienda a Gobor Guayas 90 27/11/1872 AH/BMG-904 doc.090 Inf. #115. Nota para aviso a navegantes boya bajo de Atacames Dioudonnat a Gobor Guayas 91 30/11/1872 AH/BMG-902 doc.0257 Queda en despacho inv. Faro Pta. Mandinga Min. Hacienda a Gobor Guayas 92 30/11/1872 AH/BMG-902 doc.0259 Aprueban pedido de implementos a Sr. Fourquet, París Min. Hacienda a Gobor Guayas 93 10/12/1872 AH/BMG-904 doc.067 Cargar piezas luz Pto. de Esmeraldas Dioudonnat a Gobor Guayas 94 15/12/1872 AH/BMG-904 doc.075 Faro Pta. Mandinga está bien. Manda inventario Dioudonnat a Gobor Guayas 95 15/12/1872 AH/BMG-904 doc.071 Inf. #133. Remisión de aceite equivocado Dioudonnat a Gobor Guayas 96 19/12/1872 AH/BMG-904 doc.069 Inf. #136. Faro Sta. Clara - Torrero no quiere seguir Dioudonnat a Gobor Guayas 97 19/12/1872 ABC/Fondo Jijón49/256 f.285 - 1872 Asalto al faro de Sta. Clara - Declaraciones de los empleados Dioudonnat a Gobor Guayas 98 20/12/1872 AH/BMG-904 doc.073 Inf. #137. Acompaña declaraciones de empleados sobre robo Dioudonnat a Gobor Guayas 99 25/12/1872 ABC/Fondo Jijón49/257 f.286 - 1872 S.E. Se ha informado que mecánico embarcó a Esmeraldas Min. Hacienda a Gobor Guayas Torrero Gómez pide relevo al Capt. Pto. y renuncia por salud Torrero 3° a Gobor Guayas 100 30/12/1872 AH/BMG-904 doc.065 101 22/01/1873 AH/BMG-944 doc. 0122 Informe que incluye problema con Capt. Pto. Dioudonnat a Gobor Guayas 102 23/01/1873 AH/BMG-944 doc. 0131 Relata problemas con personal faro de Sta. Clara Dioudonnat a Gobor Guayas 103 23/01/1873 AH/BMG-944 doc. 0123 Sobre carta al Presidente enviada por torreros Dioudonnat a Gobor Guayas 104 23/01/1873 AH/BMG-944 doc. 0124 Copia de carta de torreros al Presidente, defendiendo a Núñez Segundo Torrero al Pre. República 105 23/01/1873 AH/BMG-944 doc. 0125 Carta de buena conducta a favor de Dioudonnat Ramón Martínez (cura) a Dioudonnat 106 23/01/1873 AH/BMG-944 doc. 0126 Carta de buena conducta a favor de Dioudonnat Anselmo Santos (Tnte. Político Puná) 107 07/02/1873 AH/BMG-944 doc. 0133 Copia presupuesto para establecer faro en Isla Verde Dioudonnat 108 07/02/1873 AH/BMG-944 doc. 0132 Presupuesto para establecer faro en Isla Verde Dioudonnat 109 13/02/1873 AH/BMG-944 doc. 0135 Pedido de raciones para personal de faros Dioudonnat a Gobor Guayas 110 21/02/1873 AH/BMG-944 doc. 0136 Incendio en faro de Esmeraldas, combustible Guardafaro a Dioudonnat y autoridad 111 28/02/1873 ABC/Fondo Jijón49/271 f.301 - 1873 1873 - Creen habría sido mejor Pta. Centinela Min. Interior a Gobor Guayas 112 28/02/1873 IHM-s/r Observan ubicación de faro Pta. Mandinga Min. Interior a Gobor Guayas 113 09/03/1873 AH/BMG-944 doc. 0139 Encarga entregar material para Sta. Clara Dioudonnat a Cmdte. Lucas Rojas 114 10/03/1873 AH/BMG-944 doc. 0141 Guardafaro pide licencia Dioudonnat a Gobor Guayas 115 13/03/1873 AH/BMG-944 doc. 0142 Pide fijar nueva posición para faro Pta. Arenas Dioudonnat a Gobor Guayas 116 17/03/1873 AH/BMG-944 doc. 0137 Carta en la que manda presupuestos. Otros informes Dioudonnat a José Marín 117 17/03/1873 AH/BMG-944 doc. 0143 Pide hacer pedido de lámparas para faro Pta. Dioudonnat a Gobor Guayas Arenas - cambio lámps. 118 17/03/1873 AH/BMG-944 doc. 0144 Presupuesto de lámpara a pedir a Francia (de Dioudonnat queroseno) 119 31/03/1873 AH/BMG-944 doc. 0145 Definición lugar para faro Pta. Arenas y detalles de construcción Dioudonnat a Gobor Guayas 120 09/04/1873 AH/BMG-944 doc. 0146 Recibidos 9 bultos con chimeneas de cristal, Dioudonnat a Gobor Guayas 31% de ellas rotas 121 19/04/1873 AH/BMG-944 doc. 0147 Armada de torre Pta. Arenas Dioudonnat a Gobor Guayas 122 07/05/1873 AH/BMG-944 doc. 0148 Nuevo pedido de chimeneas a Francia Dioudonnat 123 07/05/1873 AH/BMG-944 doc. 0151 Dibujo y detalles de empaque de chimeneas Dioudonnat 124 07/05/1873 AH/BMG-944 doc. 0152 Detalle de base para luz de puerto Dioudonnat 125 07/05/1873 AH/BMG-944 doc. 0149 Detalle de madera para torre Pta. Arenas Dioudonnat 126 15/05/1873 AH/BMG-944 doc. 0154 Propone comprar madera a buen precio Dioudonnat a Gobor Guayas 127 10/08/1873 BMG/SE Situación de faros y boyas en las costas de la Exposición del Ministro de Hacienda República 128 10/08/1873 ACN/MIM - 1873 - I Mensaje del Presidente a las Cámaras Legislativas Archivo del Congreso Nacional 129 17/09/1873 AH/BMG-944 doc. 0155 Pide material para concluir pintura e instalación faro Pta. Arenas Dioudonnat a Gobor Guayas 130 20/09/1873 AH/BMG-944 doc. 0156 Informa sobre envío de oficio urgente de Dioudonnat Lino Bonilla a Gobor Guayas 131 02/11/1873 AH/BMG-944 doc. 0158 Informe sin novedades, Sr. Baca enfermo y se va a hacer curar Fernando Núñez a Dioudonnat 132 07/11/1873 AH/BMG-944 doc. 0157 Baca dice que huyó por problemas con Núñez Dioudonnat a Gobor Guayas 133 25/11/1873 AH/BMG-944 doc. 0161 Informe personal de faros y sueldos Dioudonnat a Gobor Guayas 134 10/12/1873 AH/BMG-944 doc. 0162 P. Game dona madera para faro Pta. Española en su propiedad Dioudonnat a Gobor Guayas 135 31/12/1873 AH/BMG 1873 Cantidades invertidas en faros 1871-1872 Exp. Min. Hacienda 136 31/12/1874 Fonds Ancien Listado de faros lenticulares - Barbier & Fenestre Inventario de la compañía 137 31/12/1874 AH/BMG 1874 Leyes N°5 Decretos Legislativos y Ejecutivos 1869 a 1874 Imprenta Nacional 138 07/04/1876 AH/BMG-1001 doc.0195 Informe faros, todos bien, piedras Pta. Arenas - Lucas Rojas Insp. Faros a Cmdte. Gral. de dist. y Marina 139 22/01/1878 AH/BMG-1048 doc.0206 Planchas de zinc para faro Pta. Arenas Lucas Rojas Insp. Gen Faros a Gral. Gobor Guayas 140 01/03/1878 AH/BMG-1048 doc.0207 Presupuesto refacción casa Sta. Clara Insp. Gen Faros a Gobor Guayas 141 05/03/1878 AH/BMG-1048 doc.0208 Faros sin novedad salvo casita Sta. Clara. Servicio regular de chata Insp. Gen Faros a Gral. Gobor Guayas 142 25/06/1878 AH/BMG-1048 doc.0209 Justifica por qué luz Sta. Clara prendió tarde Insp. Gen Faros a Gobor Guayas 143 10/08/1880 BAEP/ Informes de Ministros Min Hcda. Cuadro de egresos de 1878 Informes de Ministros 144 10/08/1880 BAEP/ Informes de Ministros Min Hcda. Cuadro de ingresos de 1878 Informes de Ministros 145 10/08/1880 BAEP/ Informes de Ministros Min Hcda. Demostración de ingresos 1878 y Informes de Ministros 1879. Egresos sin detalle 146 10/08/1880 BAEP/ Informes de Ministros Min Hcda. Balance de comprobación, caja desde 1/1/78 a 31/12/79 Informes de Ministros 147 10/08/1880 BAEP/ Informes de Ministros Min Hcda. Balance de cuentas correspondiente a 1879 Informes de Ministros 148 10/08/1880 BAEP/ Informes de Ministros Min Hcda. Cuadro de egresos de 1879 Informes de Ministros 149 10/08/1880 BAEP/ Informes de Ministros Min Hcda. Balance de comprobación, operaciones de caja en 1878 Informes de Ministros 150 11/02/1882 AH/BMG-1115 doc.0131 Faros Jambelí - Lucas Rojas Dir. Gen. Faros a Gobor Guayas 151 24/02/1883 AH/BMG-1141 doc.0216 Abastecimiento faros, pide apoyo a marina Insp. Gen Faros a Gral. Gobor Guayas 152 12/09/1883 AH/BMG-1141 doc.0219 Costo flete de chatas para abastecer faros Insp. Gen. Faros a Crnel. Jefe Civ. y Mil. Gquil 153 18/09/1883 AH/BMG-1141 doc.0221 Estado de faros, incluyendo Sta. Elena que falta acabar torre Insp. Gen. Faros a Crnel. Jefe Civ. y Mil. Gquil 154 10/10/1883 BAEP/ Informes de Ministros Min. Interior y Rel. Ext. de Gob. de Manabí Informe de Ministro a la Convención y Esmeraldas 155 30/10/1883 AH/BMG-1141 doc.0223 Faro Sta. Elena, concluir casa, 400 tejas. Otros faros Insp. Gen. Faros a Crnel. Gobor Guayas 156 29/11/1883 AH/BMG-1141 doc.0225 No se despacha abastecimientos faros Insp. Gen. Faros a Crnel. Gobor Guayas 157 03/12/1883 AH/BMG-1141 doc.0227 Ayudantía de Insp. Gen. Faros vacante Insp. Gen. Faros a Crnel. Gobor Guayas 158 06/12/1883 AH/BMG-1141 doc.0228 Falta de luz en Pta. Arenas - Lucas Rojas justifica al empleado Insp. Gen Faros a Gobor Guayas 159 20/05/1884 Decretos y leyes Reglamento Faros - Caamaño Decretos y leyes 160 02/08/1884 AH/BMG-1166 doc. s/n Renuncia guradafaro y recomendación Insp. de Faros a Gral. Gobor Guayas 161 06/11/1884 AH/BMG-1166 doc.0200 Necesidad de reparar torres y preparar para el invierno Insp. de Faros a Gral. Gobor Guayas 162 07/01/1887 AH/BMG-1237 doc.0142 Guardafaro abandonó puesto Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 163 04/05/1887 AH/BMG-1237 doc.0143 Faros pedidos a Europa p. conducto de Stagg y Cia. Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 164 07/06/1887 AH/BMG-1237 doc.0144 En funcionamiento nuevo aparato venido de Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas Europa 165 29/06/1887 AH/BMG-1237 doc.0145 No se distingue faro al sur de río Esmeraldas Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 166 04/07/1887 AH/BMG-1237 doc.0146 Colocación faro Data - pedido de acuerdo de Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas lugar a colocar 167 10/08/1887 ACN/MIM - 1887 - I C.3 Informe del Ministro del Interior, pag.13, faros Archivo del Congreso Nacional 168 11/08/1887 AH/BMG-1237 doc.0147 Mal estado de casa por efecto de las olas Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 169 22/08/1887 AH/BMG-1237 doc.0148 Determinados puntos colocación nuevos faros Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 170 01/09/1887 AH/BMG-1237 doc.0149 Necesita recursos para instalar nuevos faros Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 171 30/09/1887 AH/BMG-1237 doc.0150 Nuevo faro Manta en funcionamiento - Data Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas colocado 172 19/10/1887 AH/BMG-1237 doc.0151 Guardafaro Manta informa gastos Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 173 07/11/1887 AH/BMG-1237 doc.0154 Guardafaro Pta. Española renuncia Guardafaro Pta. Esp. a Insp. Gral. de Faros 174 10/11/1887 AH/BMG-1237 doc.0152 Guardafaro Pta. Española abandonó puesto Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 175 10/12/1887 AH/BMG-1237 doc.0155 Proveer habitación guardafaro de Data Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 176 18/01/1888 AH/BMG-1250 doc.0409 Terminada reconstrucción faro Pta. Mandinga - Pide inspección Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 177 26/01/1888 AH/BMG-1250 doc.0407 Renuncia 3° guardafaro Sta. Clara Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 178 23/02/1888 AH/BMG-1250 doc.0406 Denuncia contra guardafaro Data Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 179 17/05/1888 AH/BMG-1250 doc.0408 3° guardafaro Sta. Elena reclama sueldo 3° guardafaro a Gobor Guayas 180 21/07/1883 AH/BMG-1141 doc.0217 Necesita inspeccionar faros y suplica se dé orden Insp. Gen. Faros a Crnel. Jefe Civ. y Mil. Gquil 181 10/08/1888 AH/BMG Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Min. Guerra y Marina 1888 182 23/02/1889 AH/BMG-1276 doc.002 Traslación faro Chatam a otro lugar mejor Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 183 16/03/1889 AH/BMG-1276 doc.003 Cuarto de linterna Sta. Clara afectado por temblores Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 184 16/03/1889 AH/BMG-1276 doc.004 Balandra Sta. Clara de abastecimiento sufre Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas averías en casco 185 02/04/1889 AH/BMG-1276 doc.005 Reparación Balandra Sta. Clara Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 186 02/04/1889 AH/BMG-1276 doc.006 Aumentar empleado faro Pta. Arenas Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 187 30/04/1889 AH/BMG-1276 doc.007 Cambio 3° guardafaro Sta. Clara Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 188 12/08/1889 AH/BMG-1276 doc.008 Nombramiento 3° guardafaro Sta. Clara Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 189 07/09/1889 AH/BMG-1276 doc.009 Problema servicio faro Data por bajo sueldo Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 190 18/09/1889 AH/BMG-1276 doc.010 Baja guardafaro Data y nombramiento nuevo guardafaro Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 191 21/09/1889 AH/BMG-1276 doc.011 Balandra Sta. Clara en muy mal estado pide orden para Capt. Pto. Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 192 04/10/1889 AH/BMG-1276 doc.014 Queja de guardafaros Pta. Arenas contra guardafaros 1° 2° y 3° guardafaro a Gobor Guayas 193 07/10/1889 AH/BMG-1276 doc.012 Pide material para reparaciones Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 194 29/10/1889 AH/BMG-1276 doc.013 Sobre queja guardafaros Pta. Arenas Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 195 08/02/1890 AH/BMG-1308 doc.0166 Cambio personal faro Pta. Arenas Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 196 08/03/1890 AH/BMG-1308 doc.0168 Instalación faro en Cabo Pasado Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 197 31/03/1890 AH/BMG-1308 doc.0170 Mal estado de faro de Esmeraldas Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 198 15/04/1890 AH/BMG-1308 doc.0172 Separación y cambio de personal faro Sta. Elena Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 199 16/04/1890 AH/BMG-1308 doc.0174 Terminada construcción faro Pta. Arenas. "La obra será eterna" Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 200 08/05/1890 AH/BMG-1308 doc.0176 Faro de Esmeraldas - piden mechas Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 201 04/06/1890 AH/BMG-1308 doc.0180 Cambio personal faro Sta. Clara Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 202 04/06/1890 AH/BMG-1308 doc.0179 Cambio guardafaro Data Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 203 04/06/1890 AH/BMG-1308 doc.0177 Presupuestos conclusión trabajos faros Pta. Arenas y Sta. Clara Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 204 10/06/1890 AH/BMG-1308 doc.0181 Pérdida de enseres y útiles faro Sta. Clara por incendio en el rancho Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 205 23/06/1890 AH/BMG-1308 doc.0183 Balandra está inutil, sin embargo fue a abastecer a los faros Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 206 02/07/1890 Jta. Benef. Gquil. Certificado de inhumación de Lucas Rojas Estadística, Cementerio General 207 13/07/1890 AH/BMG-1308 doc.0185 Faro Cabo Pasado Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 208 01/10/1890 AH/BMG-1308 doc.0188 Cambio personal faro Isla de la Plata Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 209 01/10/1890 AH/BMG-1308 doc.0186 Techo de zinc de torre Sta. Elena está picado Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 210 31/12/1890 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1890 211 31/12/1892 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1892 212 31/12/1894 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1894 213 16/01/1895 AH/BMG-1435 doc.0206 Abastecimiento gratis de agua Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 214 26/02/1898 AH/BMG-1502 doc.0131 Entrega faro Sta. Elena a contratista para servicio Insp. Gral. de Faros a Gobor Guayas 215 01/03/1898 AH/BMG-1502 doc.0132 Acta de entrega de faro Sta. Elena al contratista Firma entre las partes 216 30/06/1898 AH/BMG-1502 doc.0143 Presupuesto arreglo faro Sta. Clara Insp. Gral. de Faros 217 30/06/1898 AH/BMG-1502 doc.0144 Presupuesto mensual de empleados y útiles - Insp. Gral. de Faros faro Sta. Clara 218 30/06/1898 AH/BMG-1502 doc.0134 Informe sobre los faros Capt. Pto. Guayaquil 219 31/12/1898 AH/BMG-1502 doc.0226 - 1898 Escalafón de Guardafaros Capt. Pto. de Guayaquil Capt. Pto. Guayaquil 220 31/12/1898 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1898 221 01/01/1899 United States Lighthouse Society 1899 World Lights List 222 31/12/1899 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1899 223 31/12/1902 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1902 224 31/12/1904 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1904 225 31/12/1905 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1905 Wayne Wheeler, U.S.L.S. 226 31/12/1906 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1906 227 31/08/1908 AH-BMG/ Revista Patria, ene-ago 1908 Artículo sobre PAILEBOT Revista Patria 228 19/04/1909 BAEP/Reglamento de Faros Decreto del Presidente Eloy Alfaro que regula el Servicio de Faros Decreto Presidente Alfaro 229 31/12/1909 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1909 230 31/12/1912 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1912 231 31/12/1913 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1913 232 01/04/1916 BMG - Boletín. Tomo III El Faro de Santa Clara N°56 Camilo Destruge y Juan Alminate 233 01/05/1917 BMG - Boletín. Tomo III El Primer Vapor Ecuatoriano N°64 Camilo Destruge y Juan Alminate 234 31/12/1918 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1918 235 27/01/1921 IHM-AH-50-315 Nombramientos de guardafaros Capt. Pto. Guayaquil a Cmdte. Gral. Marina 236 10/03/1921 IHM-AH-50-339 Disposición de que guardafaro venga a esta ciudad Capt. Pto. Guayaquil a Cmdte. Gral. Marina 237 17/06/1921 IHM-AH-50-375 Sobre disposición de Min. Guerra y Marina sobre colocación de faros Capt. Pto. Guayaquil a Cmdte. Gral. Marina 238 02/07/1921 IHM-AH-50-389 Agradece oferta de ayuda para instalación de Capt. Pto. Guayaquil a Cdte. Acctal. nuevos faros Marina 239 23/08/1921 IHM-AH-50-357 Armador balandra pide haberes por arriendo Capt. Pto. Guayaquil a Cdte. Gral. Marina 240 30/08/1921 IHM-AH-50-s/n Solicita al Ing. Capovilla para instalar faros nuevos Capt. Pto. Guayaquil a Cdte. Gral. Marina 241 14/10/1921 IHM-AH-50-391 Informe de faros en funcionamiento. Capt. Pto. Guayaquil a Cdte. Gral. Marina 242 19/11/1921 IHM-AH-50-407 Pago a armador del "Luisa Diamantina" Capt. Pto. Guayaquil a Cmdte. Gral. Marina 243 19/11/1921 IHM-AH-50 Pide ascenso para Ing. Capovilla Cmdte. CT Libertador Bolivar a CGM 244 12/12/1921 IHM-AH-51-266 Informa balandra Gral. Villamil en puerto luego de instalar faros Cmdte. b. Gral. Villamil a Cdte. Gral. Marina 245 24/08/1922 IHM-AH-53 Pasa dejando guardafaro por Isla Verde Cmdte. b. Gral. Villamil a Cdte. Gral. Marina 246 10/10/1922 IHM-AH-53 Sobre envío de pintura Capt. Pto. Guayaquil a Cmdte. Gral. Marina 247 03/11/1922 IHM-AH-53 Sobre coordenadas de faros en cartas de navegación Cmdte. CT Libertador Bolivar 248 30/06/1922 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1922 249 31/12/1923 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1923 250 31/12/1924 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina al Congreso - Informes 1924 251 01/04/1973 El Puerto de Guayaquil 2 P. 129 - Información sobre los faros Julio Estrada Ycaza 252 30/06/1987 IHM - RHM, año II, N°2 Faros y Fanales del Siglo XIX - Informe de 1898 Capt. Francisco Fernández de la Madrid 253 01/01/1991 IHM- Buques y Personajes PP. 45, 149, 248 - sobre Balandra General Villamil y Lucas Rojas CPCB-UN Mariano Sánchez Bravo 254 01/01/1992 El Siglo de los Vapores Fluviales: 1840-1940 P. 146 - Comentario sobre los faros. Julio Estrada Ycaza y Clemente Yerovi I. 255 31/12/1992 IHM - RHM, año VII, N°13 Nuestro Primer Faro Rodrigo Chavez González 256 31/12/1995 El Rey de la Noche p. 231 Rocafuerte ayuda en el establecimiento de faro Mark Van Aken 257 31/12/1997 IHM - HME - Tomo VI Varios Capítulos CALM Carlos Monteverde Granados 258 01/04/2000 USLS American The Jewel in the Sand Lighthouse Spring 2000 Thomas A. Tag 259 31/07/2000 IHM - RHM, año XV, N°27 El Faro de la Isla Sta. Clara CPFG (SP) Mariano Sánchez Bravo 260 31/07/2000 IHM - RHM, año XV, N°27 CPNV Fracisco Pacheco y los Acontecimientos Navales de su Época CPFG (SP) Mariano Sánchez Bravo 261 30/12/2000 IHM - HME - Tomo IX Capítulo IV, Acontecimientos Portuarios y Marítimos - 1861-1883 CPFG (SP) Mariano Sánchez Bravo 262 31/12/2000 IHM - HME - Tomo X Capítulo IX, La Armada Nacional, Principal CALM Carlos Monteverde Granados Protagonista ... 263 23/10/2001 IHM - CPNV Lucas Rojas Sinópsis de vida de Lucas de Rojas CPFG (SP) Mariano Sánchez Bravo 264 17/07/1579 Leyes de Indias Título 43. De los Puertos Ley ix. Que ningún Navio entre, ni salga de noche en Puerto D. Felipe Segundo, Rey de España 265 10/08/1883 AH/BMG - Mensaje Jefe Reglamento de Faros en Mensaje a la Supremo Convención Nacional D. Pedro Carbo, Jefe Supremo 266 13/05/1874 AH/BMG-961- doc.037 Llegan piezas Faro Pta. Española Min Hcda. a Gobor Guayas 267 06/06/1874 AH/BMG-961doc.0122 Jta. Hcda. no aprueba reparación de chalupa Min. Hcda. a Gobor Guayas Capt. Pto. 268 14/01/1894 AH/BMG - El Tiempo (Gquil) Carta Capt. Mac Dougal sobre faro Sta. Clara apagado Reportaje 269 18/01/1894 AH/BMG - El Tiempo (Gquil) Comentario y carta Francisco Lecaro Reportaje 270 20/01/1894 AH/BMG - El Tiempo (Gquil) Parte de 1° Guardafaro Pablo L. Valens Reportaje 271 16/11/1895 AH/BMG - El Tiempo (Gquil) Reporte Insp. de Faros Fco. F. Madrid Reportaje 272 24/01/1872 AH/BMG-893- doc.031 Se dispone llamar al svcio. activo a TNFG Aurelio Ballén Min. Hcda. a Gobor Guayas 273 24/01/1872 AH/BMG-803- doc.072 Se dispone llamar al svcio. activo a TNFG Aurelio Ballén Min. Int. a Cmdte. Gen. Dist. Guayaquil 274 17/02/1872 AH/BMG-893- doc.033 Se difiere llamamiento del Sr. Ballén Min. Hcda. a Gobor Guayas 275 03/06/1872 AH/BMG-893doc.0105 Capt. Battle to Guayas Governor Requesting placement of buoy in Atacames Reef 276 03/06/1872 AH/BMG-893doc.0106 Traducción del anterior, pidiendo se coloque Capt. Battle a Gobor Guayas boya 277 21/09/1872 AH/BMG-893- doc.058 Se autoriza construcción y otros trabajos en Puná e Isla Verde Min. Hcda. a Gobor Guayas 278 19/10/1872 AH/BMG-893- doc.059 Presidente satisfecho con inauguración de faro Pta. Mandinga Min. Hcda. a Gobor Guayas 279 26/10/1872 AH/BMG-893- doc.062 Se envía decreto y se encarga publicación y cumplimiento Min. Hcda. a Gobor Guayas 280 09/01/1875 AH/BMG-979- doc.047 No acepta excusa para no dar servicio a faros Min. Hcda. a Gobor Guayas 281 31/12/1905 BMG/SR-Las Islas Encantadas - 1905 Pgs. 66, 67, 139 y 140 - Faro de Pto. Chico, José A. Bognoly y José A. Espinosa Chatham 282 03/08/1872 AH/BMG-893- doc.050 Carbón en la Península no es de buena calidad Min. Hcda. a Gobor Guayas 283 31/12/1956 B/IHM 986.635 9 ECU h T.2 Nuestro Primer Faro - Historia de la Marina Rodrigo Chávez González Nacional Ecuatoriana 284 ¿Siglo VIII La Ilíada a.C.? Los últimos días del asedio de troya (Ilium) Homero 285 30/01/1861 BAEP - Periódico "Unión Colombiana" Reportaje Informe Gobor Guayas 286 23/01/1873 AH/BMG-935- doc.001 Tiene listos palos de madera negra Genaro Santos a Gobor Guayas 287 04/03/1873 AH/BMG-935- doc.022 Mecánico dice que madera no es suficiente Genaro Santos a Gobor Guayas 288 06/03/1873 AH/BMG-935- doc.024 Mecánico dice que 20 palos no alcanzan para obra Ancelmo Santos a Gobor Guayas 289 10/03/1873 AH/BMG-935- doc.027 Madera no es de las dimensiones necesarias Genaro Santos a Gobor Guayas 290 20/03/1873 AH/BMG-931- doc.029 Queroseno es combustible equivocado, mandar aceite de oliva Gobor Manabí a Gobor Guayas 291 29/03/1871 AH/BMG-925doc.0179 Min. Hcda. a Gobor Guayas Se autoriza pedir lámparas para queroseno según nota de pedido 292 04/04/1873 AH/BMG-935- doc.075 Gobor pide se remita madera a Pta. Arenas Genaro Santos a Gobor Guayas 293 10/04/1873 AH/BMG-935- doc.079 Madera está en puerto de acuerdo a convenio Genaro Santos a Gobor Guayas 294 12/04/1873 AH/BMG-925doc.0120 Min. Hcda. a Gobor Guayas Queda en Despacho comunicación sobre faro Pta. Arenas 295 18/04/1873 AH/BMG-935- doc.087 Entrega palos pero pierde algunos Genaro Santos a Gobor Guayas 296 30/04/1873 AH/BMG-918doc.0170 Min. Hcda. a Gobor Guayas Faro de Manta sin combustible. Nave reportó peligro 297 20/05/1873 AH/BMG-930- doc.084 Pide pailebot Mercedes para conducir materiales a faro Pta. Arenas Gobor Guayas a Cndt. Gen. Distrito 298 28/05/1873 AH/BMG-925- doc.090 Informado Sup. Gbno. que continúan trabajos Pta. Arenas Min. Hcda. a Gobor Guayas 299 06/07/1873 AH/BMG-923- doc.076 Comunicación relativa a colocación faro Pta. Arenas Min. Guerra y Marina a Cmdte. Gen Dist. 300 16/08/1873 AH/BMG-926- doc.081 Se aprueba despacho libre de derechos de útiles para faros Min. Hcda. a Gobor Guayas 301 06/09/1873 AH/BMG-926doc.0117 Se aprueba comunicación Ing. Faros; que Capt. Pto. inspeccione Min. Hcda. a Gobor Guayas 302 08/10/1873 AH/BMG-926doc.0175 Pres. conoció inf. agentes Vapores Británicos sobre Pta. Mandinga Min. Hcda. a Gobor Guayas 303 22/10/1873 AH/BMG-926doc.0209 Queda en Dpcho. inf. del mecánico cont. en Min. Hcda. a Gobor Guayas ofc. n°220 304 29/10/1873 AH/BMG-920- doc.071 Se aprueba luz en Pta. Española y arreglo pailebot Mercedes Min. Hcda. a Gobor Guayas 305 29/10/1873 AH/BMG-924- doc.060 Capt. Pto. acepta colocación de faro en Pta. Esp. y arreglo pailebot Min. Guerra y Marina a Cmdte. Gen. Dist 306 05/11/1873 AH/BMG-926doc.0221 Recibió plano del faro de Pta. Arenas Min. Hcda. a Gobor Guayas 307 15/11/1873 AH/BMG-926doc.0237 Confusión por informe mecánico, no se pida Min. Hcda. a Gobor Guayas faro para Pta. Española. 308 19/11/1873 AH/BMG-930doc.0164 Mecánico pide movilización para colocar torre Pta. Española 309 29/11/1873 AH/BMG-926doc.0252 Aceptan explicaciones, se autoriza pedido y Min. Hcda. a Gobor Guayas trabajos faro Pta. Española 310 20/12/1873 AH/BMG-926doc.0292 Se agradezca a Sr. Game por ceder maderas para Pta. Española Gobor Guayas a Cndt. Gen. Distrito Min. Hcda. a Gobor Guayas 311 30/01/1873 AH/BMG-940- doc.005 Encargado faro Sta. Clara informa de mal comportamiento torrero Benigno Marquez a Capt. Pto. Gquil. 312 04/02/1873 AH/BMG-940- doc.004 Capt. Pto. envía informe sobre problema en faro a Gobor Capt. Pto. Gquil. a Gobor Guayas 313 21/10/1873 AH/BMG-940- doc.014 Capt. Pto. copia a Gobor Guayas lo que le dice mecánico de faros (ver N°462) Capt. Pto. Gquil. a Gobor Guayas 314 05/09/1874 AH/BMG-967- doc.052 Pailebot sufre daño en mástil de vela mayor, Cmdte. Gen. Dist. a Gobor Guayas insp. Crnel. Capt. Pto. 315 04/06/1897 Reg. Of. 392 al 395 19/06/1897 Ley de Presupuesto para los años 1897 1898 Asamblea Nacional 316 24/06/1897 Reg. Of. 397 al 400 26/06/1897 Ley de Aduanas Asamblea Nacional 317 10/04/1906 AH/BMG-348.02 - 1906 Reglamento de Policía Marítima para los pp. 118, 123 y 124 Puertos de la República Eloy Alfaro 318 23/07/1841 AH/BMG-307 f.062 Se autoriza colocar la farola Min. Hcda. a Gobor Guayas 319 17/12/2001 Nota personal Tasa de cambio en 1872 y 1835 Guillermo Arosemena A. 320 31/12/1932 AH/BMG -MIN-270 Historia Documentada de la Prov. del Guayas, Tomo III José Antonio Campos M. 321 31/12/1932 AH/BMG-MIN-276 Historia Documentada de la Prov. del Guayas, Tomo V José Antonio Campos M. 322 31/12/1991 Biblioteca Rubira Ramos La Gran Bretaña en el desarrollo económico Guillermo Arosemena A. del Ecuador 1820-1930 323 19/02/1873 AH/BMG-945- doc.010 Lista de empaque de partes para faros B. Fourquet a Gobor Guayas 324 01/06/1873 AH/BMG-945- doc.033 Aviso de embarque de piezas para faros B. Fourquet a Gobor Guayas 325 20/06/1873 AH/BMG-945- doc.042 Nota de débito por partes compradas al 044 B. Fourquet a Gobor Guayas 326 24/07/1873 AH/BMG-945- doc.040 Acuse recibo de notificación cobro derechos A. Destruge a Gobor Guayas de faro Pta. Arenas 327 06/07/1873 AH/BMG-945doc.0225 Da por recibido nombramiento y permanece A. Cruz a Gobor Guayas en faro 328 19/09/1873 AH/BMG-945doc.0248 Informe s/n sobre luz para Pta. Centinela F. Dioudonnat a Gobor Guayas 329 22/11/1873 AH/BMG-946doc.0126 Inf. #183 Explicación sobre carta Min. Hcda. F. Dioudonnat a Gobor Guayas 330 10/08/1914 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina a la Nación - Informes 1914 331 10/08/1919 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina a la Nación - Informes 1919 332 30/06/1921 BMG/SE Informe Min. Guerra y Marina a la Nación - Informes 1921 333 31/12/1922 LINDEGAS AG Relato de las experiencias del técnico de AGA en Ecuador - Con fotos. Mr. Ellwe 334 30/06/1927 LINDEGAS AG Descripción de Faros AGA con sistema Dalén AGA Gassaccumulator N°351 - 1927 335 31/12/1934 LINDEGAS AG Listado de equipos AGA instalados en Ecuador hasta 1930 AGA Installations - Ecuador 336 20/01/1872 BN/"El Nacional" 19-2- Los 9 puntos del mecánico 1872 N°139, #12 Publicación oficial 337 04/01/1873 AH/BMG-947doc.0275 Presenta queja sobre el mecánico francés Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 338 15/01/1873 AH/BMG-947doc.0240 Informe del Cmdte. del pailebot de guerra "Mercedes" Cmdte. Chávez a Cmdte. Gral Dist. y Marina 339 22/03/1873 AH/BMG-947doc.0277 Faro Manta apagado - Carta Capt. Battle Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 340 09/07/1873 AH/BMG-947doc.0283 Pone en conocimiento lo comunicado sobre faro Pta. Arenas Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 341 13/09/1873 AH/BMG-947doc.0289 Comunica orden del Gobernador Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 342 14/10/1873 AH/BMG-947doc.0293 Recibio mando de pailebot para inspeccionar Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 343 21/10/1873 AH/BMG-947doc.0295 Informe de visita a faro Pta. Arenas Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 344 02/07/1874 AH/BMG-963doc.0262 Pide chimeneas para Pta. Arenas Insp. Gen. faros a Gobor Guayas 345 19/12/1874 AH/BMG-962doc.0178 Que usen vapor para atención a faros Min. Hcda. A Gobor Guayas 346 09/01/1875 AH/BMG-989- doc.008 Reclamo de Cónsul francés por Sra. Dioudonnat Min. Hcda. A Gobor Guayas 347 23/01/1875 AH/BMG-979doc.0123 Min. Hcda. A Gobor Guayas Min. Hcda. Acepta explicación de Cmdte. del Resguardo 348 15/05/1875 AH/BMG-991- doc.032 Faro de Esmeraldas apagado Min. Hcda. A Gobor Guayas 349 02/06/1875 AH/BMG-991- doc.035 Colocación de 3 boyas con campana Min. Hcda. A Gobor Guayas 350 10/07/1875 AH/BMG-981- doc.033 Arribo de barca alemana "Victoria" - Se exime de derecho de faros Min. Hcda. A Gobor Guayas 351 20/10/1875 AH/BMG-991- doc.061 Se revisa lo resuelto en enero de 1875 Min. Hcda. A Gobor Guayas 352 13/11/1875 AH/BMG-989doc.0139 Tesorero de Hcda. informa pago y cobro Gobor Guayas a Min. Hcda. 353 29/11/1875 AH/BMG-992doc.0163 Informe sobre empleo para Charlotte Dioudonnat Gobor Guayas a Jefe Polit. Guayaquil 354 12/01/1876 AH/BMG-1000doc.0170 Informe sobre faros Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 355 24/01/1876 AH/BMG-1000doc.0172 Pide autorización para viaje con fin de obtener listado de partes Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 356 02/02/1876 AH/BMG-1010doc.026 Baja de Lucas Rojas y llamado a Fco. Pacheco - Capt. Pto. Min. Guerra a Cmdte. Gral Dist. y Marina 357 07/02/1876 AH/BMG-1010doc.0174 Regresa pailebot de comisión Capt. Pto. GYE a Cmdte. Gral Dist. y Marina 358 11/02/1876 AH/BMG-1010doc.0354 Da por recibido nombramiento Capt. Pto. GYE Fco. Pacheco a Cmdte. Gral Dist. y Marina 359 12/02/1876 AH/BMG-1000doc.0178 Recibe Capitanía Capt. entrante a Cmdte. Gral Dist. y Marina 360 12/02/1876 AH/BMG-1010doc.0337 Entrega Capitanía Capt. saliente a Cmdte. Gral Dist. y Marina 361 16/02/1876 AH/BMG-1010doc.038 Se designa a Lucas Rojas como Cmdte. Castillo Cruces e Insp. faros Min. Guerra a Cmdte. Gral Dist. y Marina 362 28/02/1877 AH/BMG-1021doc.0190 Se autoriza refacción de faros Min. Gral. y Hcda. a Gobor Guayas 363 21/04/1877 AH/BMG-1021doc.0396 Devuelve pedido del Inspector de faros Min. Gral. y Hcda. a Gobor Guayas 364 12/05/1877 AH/BMG-1021doc.0451 Remitir repuestos a Manabí Min. Gral. y Hcda. a Gobor Guayas 365 04/08/1877 AH/BMG-1022doc.093 Se autoriza viaje de inspección Min. Gral. y Hcda. a Gobor Guayas 366 12/12/1877 AH/BMG-1022doc.0488 Se autoriza reconstrucción cocina en Pta. Arenas Min. Gral. y Hcda. a Gobor Guayas 367 24/10/1881 AH/BMG-1098doc.0140 Pagó 20 pesos por flete Tes. Hcda. Guayas a Gobor Guayas 368 22/04/1873 AH/BMG-947doc.0301 No hubo luz en Faro de Manta Cmdte. Gral Dist. y Marina a Capt. Pto. Manta 369 15/06/1908 BMG/SE Informes Informe de 1907-1908 Min. Guerra y Marina 370 10/08/1928 BMG/SE Informes Informe de 1928 Min. Guerra, Marina y Aviación 371 10/08/1931 BMG/SE Informes Informe de 1930-1931 Min. Guerra, Marina y Aviación 372 10/08/1932 BMG/SE Informes Informe de 1932 Min. Guerra, Marina y Aviación 373 10/08/1933 BMG/SE Informes Informe de 1933 Min. Guerra, Marina y Aviación 374 10/08/1935 BMG/SE Informes Informe de 1935 Min. Guerra, Marina y Aviación 375 17/07/1861 BMG/SR "La Unión Colombiana" Presupuesto de Marina Reportaje oficial 376 04/09/1862 BMG/SR "La Unión Colombiana" El Guarda Faro (Canción) Reportaje 377 14/02/1872 B/JuEY "El Nacional" N°137 #14 Corresp. sobre viaje de inspección Min. Hcda. a Gobor Guayas 378 29/07/1872 B/JuEY "El Nacional" N°197 #17 Inf. # 36 del mecánico francés Gobor Guayas a Min. Hcda. 379 29/07/1872 B/JuEY "El Nacional" N°197 #18 Inf. # 42 del mecánico francés Gobor Guayas a Min. Hcda. 380 18/11/1872 B/JuEY "El Nacional" N°225 #10 Publicación decreto derecho Pta. Mandinga Reportaje oficial 381 22/11/1872 B/JuEY "El Nacional" N°227 #13 Inf. # 42 del mecánico francés y contestación Reportaje oficial 382 27/11/1872 B/JuEY "El Nacional" N°229 #4 Pedido y respuesta sobre muebles del mecánico Reportaje oficial 383 29/11/1872 B/JuEY "El Nacional" N°230 #11 Pasaje Sra. Dioudonnat e hija Reportaje oficial 384 09/12/1872 B/JuEY "El Nacional" N°234 #17 Cita carta Capt. Battle sobre boya Atacames Reportaje oficial 385 13/12/1872 B/JuEY "El Nacional" N°236 #16 Informe de gastos Faro de Manta Reportaje oficial 386 31/12/1938 B/JuEY "Derrotero de la Edición 1838 Costa" Servicio Hidrográfico de la Armada 387 31/12/1938 B/JuEY "Derrotero de la Carta con ubicación de los faros Costa" Servicio Hidrográfico de la Armada 388 31/12/1930 AHG/BCE "Derrotero de Primera edición, tomada del South America Min. Guerra, Marina y Aviación la Costa" Pilot U.S. Hydrographic Off. 389 31/12/1870 B/JuEY - "Marveilles de Capítulos sobre Maravillas de la Ciencia y la Science" Faros - L'Art de L'Eclairage Louis Figuier 390 20/09/1888 IHM - RHM Año XV N° El Aviso Atahualpa y El Faro de la Isla de 28 La Plata Artículos 391 07/02/2002 IHM-s/r Sinópsis de la vida de Francisco Fernández de la Madrid (Padre) CPFG (sp) Mariano Sánchez Bravo 392 28/08/1872 BN- "El Nacional" N° 208 #6 Inf. #54 - Concluyendo trabajos - torreros Dioudonnat a Gobor Guayas 393 28/08/1872 BN- "El Nacional" N° 208 #14 Sobre el cobro del derecho de faro y otros Adm. Aduana, Gobor Guayas y Min Hcda. 394 11/10/1872 BN- "El Nacional" N° 218 #7 Remuneración torreros y pago de la PSNC Min Hcda. y Gobor Guayas 395 13/11/1872 BN- "El Nacional" N° 223 #12 Varios oficios sobre instalación de faros y boyas Pre. Rep., Gobor Guayas, Min Hcda. Dioudonnat 396 04/08/1841 AN/Caja 196 - Libro 290 Queda impuesto de acuerdo y resolución Gobor Guayas a Min Hcda. 397 10/08/1843 BAEP - Inf. Min. Hcda. Informa sobre derecho de farola entre otros. 1843 Min. Hcda. 398 10/08/1846 BAEP - Inf. Min. Guerra Informa de gastos en personal, entre otros, y Marina, 1846 de la farola Min. Guerra y Marina 399 10/08/1846 BAEP - Inf. Min Hcda. - Cuadro de gastos, entre ellos el de sueldos y Min. Hcda. 1846 gastos de la farola 400 10/08/1847 BAEP - Inf. Min. Hcda. Informe del Contador Mayor del Distrito de - 1847 Guayaquil al Ministro Cont. Myr. Dist. Guay. a Min. Hcda. 401 26/01/1849 BAEP - "El Nacional" N° 215 Decreto prescribiendo modo de dar cumplimiento a Decr. de 5-12-1848 402 10/08/1863 BAEP - Inf. Min. Hcda. Producto de derechos en los años 1861 y - 1863 1862 Despacho de Hacienda - Pre. República Adm. Aduana a Min. Hcda. 403 10/08/1867 BAEP - Inf. Min. Hcda. Administrador de aduanas sugiere aumentar Adm. Aduana a Min. Hcda. - 1867 derecho de faro. 404 18/10/1871 AN/ C.215 L.314 #835 Informa de estado del pedido de faros B. Fourquet, Gobor Guayas y Min. Hcda. 405 07/01/1872 AN/ C.218 L.317 #8 Comunica embarque del mecánico de faros y su llegada B. Fourquet, Gobor Guayas y Min. Hcda. 406 07/01/1872 AN/ C.218 L.317 #9 Da antecedentes del mecánico e iniciará trabajos lo más pronto B. Fourquet, Gobor Guayas y Min. Hcda. 407 20/01/1872 AN/ C.218 L.317 #12 Los 9 puntos del mecánico Gobor Guayas a Min. Hcda. 408 10/02/1872 AN/ C.218 L.317 #20 Informe del mecánico sobre viaje de inspección Gobor Guayas a Min. Hcda. 409 10/02/1873 AN/ C.218 L.317 #22 Sobre carta del mecánico referente a costo de vivir "en población" Gobor Guayas a Min. Hcda. 410 16/03/1872 AN/ C.218 L.317 #28 Gobernador comunica "estorbos" para desembarcar bultos de boyas Gobor Guayas a Min. Hcda. 411 16/03/1872 AN/ C.218 L.317 #29 Informa sobre trabajos de carpintería - torres Gobor Guayas a Min. Hcda. de Pta. Española y Sta. Clara 412 16/03/1872 AN/ C.218 L.317 #30 Informa que mecánico contrató bodega Gobor Guayas a Min. Hcda. 413 16/03/1872 AN/ C.218 L.317 #31 Mecánico insiste en almacén y personal adicional Gobor Guayas a Min. Hcda. 414 23/03/1872 AN/ C.218 L.317 #37 Mecánico solicita anclas para las boyas Gobor Guayas a Min. Hcda. 415 23/03/1872 AN/ C.218 L.317 #37 anexo Inf. # 20 del mecánico, conteniendo propuesta de anclas Gobor Guayas a Min. Hcda. 416 05/06/1872 AN/ C.218 L.317 #476 Informa sobre arrecife de Atacames según Capt. Battle Gobor Guayas a Min. Hcda. 417 19/06/1872 AN/ C.218 L.317 #56 Inf. # 35 del mecánico, sobre armado torre Sta. Clara Dioudonnat a Gobor y este a Min. Hcda. 418 29/06/1872 AN/ C.218 L.317 #61 Sobre factura de los faros enviada por Cónsul Fourquet Gobor Guayas a Min. Hcda. 419 06/07/1872 AN/ C.218 L.317 #66 Sobre inf. # 36 del mecánico, sobre avances Gobor Guayas a Min. Hcda. en la obra de Sta. Clara 420 06/07/1872 AN/ C.218 L.317 #67 Sobre inf. # 42 del mecánico, sobre avances Gobor Guayas a Min. Hcda. en la obra de Sta. Clara 421 06/07/1872 AN/ C.218 L.317 #68 Sobre inf. # 43 del mecánico, sobre avances Gobor Guayas a Min. Hcda. en la obra de Sta. Clara 422 24/07/1872 AN/ C.218 L.317 #79 Informa de gastos y fecha de inicio de la iluminación de faro 423 24/07/1872 AN/ C.218 L.317 #80 Sobre inf. # 54 del mecánico, sobre personal Gobor Guayas a Min. Hcda. de Sta. Clara 424 31/07/1872 AN/ C.218 L.317 #91 Respuesta a insistencia de envío de factura de los faros y boyas Gobor Guayas a Min. Hcda. 425 07/08/1872 AN/ C.218 L.317 #103 Pedido Capt. Rojas para instalar boyas Gobor Guayas a Min. Hcda. Gobor Guayas a Min. Hcda. 426 07/08/1872 AN/ C.218 L.317 #104 Envía sugerencia de sueldos para empleados Gobor Guayas a Min. Hcda. del faro 427 07/08/1872 AN/ C.218 L.317 #105 Sobre inf. # 57 del mecánico, sobre conclusión de trabajo en Sta. Clara Gobor Guayas a Min. Hcda. 428 21/08/1872 AN/ C.218 L.317 #114 Sobre error en publicación sobre sueldo del jefe de torreros Gobor Guayas a Min. Hcda. 429 24/08/1872 AN/ C.218 L.317 #119 Envía inventario de Sta. Clara Gobor Guayas a Min. Hcda. 430 18/08/1872 AN/ C.218 L.317 s/n Inventario del Faro de Santa Clara Dioudonnat a Gobor Guayas 431 31/08/1872 AN/ C.218 L.317 #124 Notifica conclusión trabajos Sta. Clara y comienzo Pta. Centinela Gobor Guayas a Min. Hcda. 432 04/09/1872 AN/ C.218 L.317 #130 Recibió factura del mecánico y la envía Gobor Guayas a Min. Hcda. 433 11/09/1872 AN/ C.218 L.317 #139 Sobre pasaje de la Sra. Dioudonnat y su hija Gobor Guayas a Min. Hcda. 434 14/09/1872 AN/ C.218 L.317 #147 Informe de trabajos en Pta. Mandinga Gobor Guayas a Min. Hcda. 435 12/10/1872 AN/ C.218 L.317 #164 Inf. # 82 del mecánico sobre mal comportamiento de torrero Núñez Gobor Guayas a Min. Hcda. 436 12/10/1872 AN/ C.218 L.317 #166 Conclusión de trabajo Pta. Mandinga, recoger carpinteros Gobor Guayas a Min. Hcda. 437 12/10/1872 AN/ C.218 L.317 #167 Trasladarse a Sta. Clara Gobor Guayas a Min. Hcda. 438 19/10/1872 AN/ C.218 L.317 #172 Designación de torrero y su sueldo, para Pta. Gobor Guayas a Min. Hcda. Mandinga 439 23/10/1872 AN/ C.218 L.317 #173 Comunicación al Gobor de manabí Gobor Guayas a Min. Hcda. 440 20/11/1872 AN/ C.218 L.317 #188 Informe de la instalación e inventario del Faro de Manta Gobor Guayas a Min. Hcda. 441 20/11/1872 AN/ C.218 L.317 #192 Se envia transcripción de varios informes Gobor Guayas a Min. Hcda. 442 23/11/1872 AN/ C.218 L.317 #193 Informe comparativo aceite de oliva vs. queroseno. Presupuesto lámparas Gobor Guayas a Min. Hcda. 443 23/11/1872 AN/ C.218 L.317 #195 Inventario Pta. Mandinga y avisos a los navegantes Gobor Guayas a Min. Hcda. 444 27/11/1872 AN/ C.218 L.317 #200 Se reenvía aviso general y comentarios sobre Gobor enc. Guayas a Min. Hcda. comercio 445 11/12/1872 AN/ C.218 L.317 #210 Envía cuadro sinóptico y ubicación de boyas Gobor enc. Guayas a Min. Hcda. 446 14/12/1872 AN/ C.218 L.317 #212 Informa que salió mecánico hacia Esmeraldas Gobor enc. Guayas a Min. Hcda. 447 15/12/1872 AN/ C.218 L.317 s/n Inventario de Faro de Punta Mandinga Cambio de torrero Gobor enc. Guayas a Min. Hcda. 448 18/12/1872 AN/ C.218 L.317 s/n Inventario de Faro de Santa Clara - Cambio de torrero Gobor enc. Guayas a Min. Hcda. 449 22/01/1873 AN/ C.218 L.317 #7 Informe de instalación de Faro de Esmeraldas Gobor Guayas a Min. Hcda. 450 24/01/1873 AN/ C.218 L.317 #11 Informe # 11 y Reglamento e Instrucción para los faros Dioudonnat a Gobor Guayas - Min. Hcda. 451 22/03/1873 AN/ C.218 L.317 #48 Informa de pedido de lámparas de queroseno, piezas y repuestos Gobor Guayas a Min. Hcda. 452 02/04/1873 AN/ C.218 L.317 #61 Comunica informe del mecánico sobre Pta. Arenas y envía planos Gobor Guayas a Min. Hcda. 453 02/04/1873 AN/ C.218 L.317 #62 Informa sobre carta de Cónsul Fourquet sobre envío de chimeneas y otros. Gobor Guayas a Min. Hcda. 454 21/05/1873 AN/ C.218 L.317 #95 Informa sobre madera y trabajo en Faro de Pta. Arenas Gobor Guayas a Min. Hcda. 455 28/05/1873 AN/ C.218 L.317 #114 Informa progreso de construcción y reubicación de la torre de Pta. Arenas Gobor Guayas a Min. Hcda. 456 09/08/1873 AN/ C.218 L.317 #613 Informa que se han despachado de la aduana, útiles para los faros Gobor Guayas a Min. Hcda. 457 16/08/1873 AN/ C.218 L.317 #155 Inventario de bultos de implementos llegados de Francia Gobor Guayas a Min. Hcda. 458 20/08/1873 AN/ C.218 L.317 #162 Mecánico solicita embarcarse en chata e ir a Gobor Guayas a Min. Hcda. los faros y boyas. 459 30/08/1873 AN/ C.218 L.317 #173 Mecánico informa de corto viaje a faros Gobor Guayas a Min. Hcda. 460 03/09/1873 AN/ C.218 L.317 #176 Tesorero de Hcda. del Guayas comunica envío de materiales Gobor Guayas a Min. Hcda. 461 01/10/1873 AN/ C.218 L.317 s/n Agente de la PSNC informa de opiniones sobre Pta. Centinela Agte. PSNC a Gobor Guayas 462 25/10/1873 AN/ C.218 L.317 #229 Informa sobre oficio del Capt. del Puerto (ver N°313) Agte. PSNC a Gobor Guayas 463 30/09/1873 AN/ C.218 L.317 s/n Inventario y entrega-recepción del Faro de Pta. Arenas Dioudonnat y Alejandro Cruz 464 29/10/1873 AN/ C.218 L.317 #230 Notifica envío por separado del plano del Faro de Pta. Arenas Gobor Guayas a Min. Hcda. 465 10/11/1873 AN/ C.220 L.320 #1710 Se autoriza compra de madera para Faro de Punta Española Gobor encgdo. a Dioudonnat 466 13/12/1873 AN/ C.218 L.317 #268 Transcribe informe #197 del mecánico Gobor encgdo. a Min. Hcda 467 27/12/1873 AN/ C.220 L.320 s/n Recibo de botica Gault Gobor encgdo. a Min. Hcda 468 05/02/1874 AN/ C.220 L.320 s/n Recibos por compra de madera para Pta. Española Dioudonnat a Tesorero Hcda. Guayas 469 11/07/1874 AN/ C.220 L.320 #61 Transcribe solicitud del capitán del Puerto sobre anclas para boyas Gobor Guayas a Min. Hcda. 470 01/08/1874 AN/ C.220 L.320 #131 Inf. # 131 del mecánico con Aviso a los Navegantes - Pta. Española Dioudonnat 471 05/08/1874 AN/ C.220 L.320 #74 Se envía Aviso a los Navegantes para luz de Gobor Guayas a Min. Hcda. Pta. Española 472 06/06/1874 AN/ C.220 L.320 #38 Sobre cambio de lugar de luz de pto. de Esmeraldas Gobor Guayas a Min. Hcda. 473 06/06/1874 AN/ C.220 L.320 #39 Sobre costo de boyas - explicación del mecánico Gobor Guayas a Min. Hcda. 474 05/08/1874 AN/ C.220 L.320 #549 Compra de madera para reparación en Pta. Mandinga Gobor Guayas a Min. Hcda. 475 12/08/1874 AN/ C.220 L.320 #79 Informe sobre el estado de las boyas con campana. Gobor Guayas a Min. Hcda. 476 19/08/1874 AN/ C.220 L.320 #82 Informe de Cmdte. de corbeta "Infernet" sobe boyas Gobor Guayas a Min. Hcda. 477 26/08/1874 AN/ C.220 L.320 #579 Informa perdida de ancla de chata fletera en Gobor Guayas a Min. Hcda. colocación de boyas 478 05/09/1874 AN/ C.220 L.320 #93 Entrega-recepción e inventario de faro de Pta. Española 479 12/09/1874 AN/ C.220 L.320 #94 Informe del Capt. Pto. sobre observación de Gobor Guayas a Min. Hcda. Capt. francés. 480 10/10/1874 AN/ C.220 L.320 #100 Informa sobre suicidio del mecánico francés Gobor Guayas a Min. Hcda. 481 31/10/1874 AN/ C.220 L.320 #107 Sobre reemplazo de Dioudonnat Capt. Pto. y Gobor Guayas a Min. Hcda. 482 04/11/1874 AN/ C.220 L.320 #108 Comunica envío de Ing. Gruenerval a Pta. Arenas, a inspeccionar terreno Gobor encgdo. Guayas a Min. Hcda. 483 04/11/1874 AN/ C.220 L.320 #110 Informa sobre inicio de reclamo de la viuda de Dioudonnat Gobor encgdo. Guayas a Min. Hcda. 484 14/11/1874 AN/ C.220 L.320 #112 Se adjunta informe del Ing. Gruenerval Gobor encgdo. Guayas a Min. Hcda. 485 05/12/1874 AN/ C.220 L.320 #121 Se envía informe del Capt. del vapor "Arequipa" sobre las boyas Gobor encgdo. Guayas a Min. Hcda. 486 12/12/1874 AN/ C.220 L.320 #801 Se envía informe sobre flete de chatas para los faros Gobor encgdo. Guayas a Min. Hcda. 487 23/12/1874 AN/ C.220 L.320 #130 Cónsul francés insiste en reclamo de la viuda de Dioudonnat Gobor Guayas a Min. Hcda. 488 03/07/1875 AN/ C.221 L.321 #404 Informa que entró barca "Victoria" con averías Gobor Guayas a Min. Hcda. 489 03/07/1875 AN/ C.221 L.321 #31 Capt . Pto. informa que empleado pide útiles Gobor Guayas a Min. Hcda. para faro de Sta. Clara 490 07/08/1875 AN/ C.221 L.321 s/n Tesorero de Hacienda informa sobre pago a Sra. Dioudonnat Gobor Guayas a Min. Hcda. 491 13/10/1875 AN/ C.221 L.321 #48 Transcribe nueva carta de reclamo del Cónsul francés Gobor Guayas a Min. Hcda. 492 29/12/1875 AN/ C.221 L.321 #58 Envía copia de pedido del Guardafaro de Esmeraldas Gobor Guayas a Min. Hcda. 493 05/01/1876 AN/ C.223 L.323 s/n Junta de hacienda que trata sobre faros, entre otros Gobor Guayas a Min. Hcda. 494 12/01/1876 AN/ C.223 L.323 #23 Envía gastos de Tesorería de Hacienda para faro de Esmeraldas Gobor Guayas a Min. Hcda. 495 09/02/1876 AN/ C.223 L.323 #2 Capt. Pto. pide 8 pesos para nave que va a Sta. Clara Gobor Guayas a Min. Hcda. 496 09/02/1876 AN/ C.223 L.323 #64 Informa de pedido de piezas para los faros Gobor Guayas a Min. Hcda. 497 08/02/1876 AN/ C.223 L.323 s/n Varias reuniones de la Junta de Hacda. del Guayas Gobor Guayas a Min. Hcda. 498 24/03/1876 AN/ C.223 L.323 #173 Comunica pedido Tes. Hcda. sobre reclamo Gobor Guayas a Min. Hcda. sobresueldo de Crnel. Rojas 499 19/04/1876 AN/ C.223 L.323 #228 Transcribe informe del Capt. Rojas sobre el estado de los faros Gobor Guayas a Min. Hcda. 500 16/11/1876 AN/ C.223 L.323 #90 Transcribe pedido del Capt. Rojas para proteger faros Gobor Guayas a Min. Hcda. Gobor Guayas a Min. Hcda. 501 30/11/1876 AN/ C.223 L.323 s/n Insp. de Faros pide mechero para Sta. Clara - Pago a Stagg y Cia. Gobor Guayas a Min. Hcda. encgdo. 502 31/12/1877 BAEP - Inf. Min. Hcda. Cuadro N° 5 movimiento rentístico del 1-1- Min. Hcda. 1877 al 30-9-1877 503 29/01/1881 AN/ C.227 L.328 #75 Pide rectificación de monto en acta de Junta Gobor Guayas a Min. Hcda. de Hacienda 504 16/03/1881 AN/ C.227 L.328 #184 Insiste en rectificación. Casa del faro se destruye. Gobor Guayas a Min. Hcda. 505 25/06/1881 AN/ C.227 L.328 #397 Envía pedido de artículos para Faro de Esmeraldas Gobor Guayas a Min. Hcda. 506 02/07/1881 AN/ C.227 L.329 #411 Acta de Jta. de Hcda. del Guayas. Pedido de Gobor Guayas a Min. Hcda. Faro de Sta. Elena 507 09/11/1881 AN/ C.227 L.329 s/n Inspector pide autorización y dinero para inspección de los faros Gobor Guayas a Min. Hcda. 508 31/05/1886 AN/ C.231 L.333 s/n Inspector de Faros pide dinero para arreglar velas de balandra Sta. Clara Gobor Guayas a Min. Hcda. 509 10/08/1886 BAEP - Inf. Min. Interior 1886 Informa que faro en Chatham aún no se coloca a pesar de avisos Min. Interior 510 10/08/1896 BAEP - Inf. Min. Hacienda 1896 Informe de Egresos entre 6-1895 y 7-1896 Min. Hcda. 511 10/08/1896 BAEP - Inf. Min. Guerra Informe sobre los faros y su estado y Marina 1896 recomendaciones Min. Guerra y Marina 512 10/08/1898 BAEP - Inf. Min. Hacienda 1898 Min. Hcda. Informe general y sobre los faros. 513 10/08/1900 BAEP - Inf. Min. Guerra Informe sobre los faros y su estado y Marina 1900 recomendaciones Min. Guerra y Marina 514 10/08/1901 BAEP - Inf. Min. Hacienda 1901 En iforme general, presupuestos, rubro de faros Min. Hcda. 515 10/08/1903 BAEP - Inf. Min. Hacienda 1902 Informe de los faros en los varios acápites Min. Hcda. 516 10/08/1910 BAEP - Inf. Min. Hacienda 1910 Balance de los faros del Guayas Min. Hcda. 517 06/02/1911 APR y BAEP - R.O. #1461 de 6-2-1911 Balance de los faros en 1910 Min. Hcda. 518 27/11/1911 APR - R.O. #70 de 2711-1911 Balance de cuentas de enero a marzo de 1911 Min. Hcda. 519 10/08/1915 BAEP - Inf. Min Hcda. 1915 Relación de impuestos - Guayas Min. Hcda. 520 10/08/1916 BAEP Infms. Mtros Hcda. y Gue. y Mar. Informes de los dos ministros y Decretos Ejecutivos dictados Min. Hcda. y Min. Guerra y Marina 521 15/06/1917 BAEP - Inf. Min. Guerra Palabras del Ministro sobre Capitanías, y Marina 1917 Faros y Boyas Min. Guerra y Marina 522 10/08/1919 BAEP - Inf. Min. Guerra Palabras del Ministro sobre Capitanías, y Marina 1919 Faros y otros Min. Guerra y Marina 523 31/03/1921 BAEP y APR - R.O. #165 del 31-3-1921 Resolución del Consejo de Estado liberando Registro Oficial del requisito de licitación 524 28/05/1921 APR - R.O. #212 del 28- Escritura de ratificación de contrato con 5-1921 AGA 525 02/11/1926 APR - R.O. #173 del 211-1926 Registro Oficial Decreto - Establécese la Inspección de Faros Presidente Provisional de la República 526 18/01/1927 APR - R.O. #237 del 18- Se establece la dotación del m/v Patria 1-1927 Presidente Provisional de la República 527 22/01/1927 APR - R.O. #241 del 22- Se autorizan las escrituras de venta de la B. 1-1927 General Villamil y Y. AGA Presidente Provisional de la República 528 12/04/1927 APR - R.O. #309 del 12- Se modifica Decreto del 22 de octubre de 4-1927 1926 - Insp. hasta Capt. Fg. Presidente Provisional de la República 529 13/04/1927 APR - R.O. #310 del 13- Se decreta el Reglamento para el servicio de Presidente Provisional de la República 4-1927 Faros 530 30/09/1927 APR - R.O. #451 del 30- Se suprimen cargos de Guardafaros 9-1927 (Presupuesto de la Armada) Presidente Provisional de la República 531 06/02/1932 APR - R.O. #94 del 6-2- Créase el Servicio Hidrográfico en la 1932 Armada Nacional Encgdo. del Poder Ejecutivo 532 27/08/1932 APR - R.O. #261 del 27- Ley Orgánica de Marina 8-1932 Encgdo. del Poder Ejecutivo 533 29/08/1932 APR - R.O. #262 del 29- Reformas a la Ley Orgánica de Marina 8-1932 Encgdo. del Poder Ejecutivo 534 10/08/1938 BAEP - Inf. Min. Defensa 1938 Informe de la Armada Nacional Min. Defensa 535 10/08/1939 BAEP - Inf. Min. Defensa 1939 Informe de la Armada Nacional Min. Defensa 536 10/08/1940 BAEP - Inf. Min. Defensa 1940 Informe de la Armada Nacional Min. Defensa 537 10/08/1941 BAEP - Inf. Min. Defensa 1941 Informe de la Armada Nacional Min. Defensa 538 08/01/1872 AN - C.219 L.318 N°s 36 y 58 Remisión de timbres fiscales traidos por Sra. Gobor Guayas a Min. Hcda. Dioudonnat 539 08/01/1853 AH/BMG Periódico "La Artículo sobre faro bien iluminado, no se Rebusca" desatienda de mi Guardafaro a Capt. Pto. Guayaquil 540 15/10/1856 AH/BMG Periódico "El Elogio al cuidador del faro Progreso" Aurelio Ballén a Capt. Pto. Guayaquil 541 05/01/1908 AH/BMG Periódico "El Aviso de cambio de luz temporal del Faro Grito del Pueblo" de Sta. Elena Capt. Pto. Guayaquil a navegantes 542 01/12/1908 AH/BMG Periódico "El Estado del Faro de Sta. Elena, recibido del Tiempo" pags. 1 y 2 contratista, sueldos. Capt. Pto. Guayaquil a Presidente Eloy Alfaro 543 16/02/1909 AH/BMG Periódico "El Problemas con sueldo del personal del Faro Tiempo" pags. 2 y 3 de Sta. Elena. Capt. Pto. Guayaquil a Medardo Alfaro, Jefe de la III Zona Militar 544 1836 UKHO Carta # 586 Carta naútica # 586 resultante de la expedición del H.M.S. "Sulphur" United Kingdom Hydrographic Office 545 1873 UKHO Carta # 586 Carta # 586 con modificaciones hasta 1873 United Kingdom Hydrographic Office 546 1893 USHO Carta # 1391 en BAEP Carta # 1391 con modificaciones hasta 1893 United States Hydrographic Office Ejemplar en el Museo de la BAEP 547 1914 UKHO Carta # 586 Carta # 586 con modificaciones hasta 1914 548 02/03/1879 AHG/BCE "La Nación" Vecinos del Cantón Machala desean 2-3-1879 establecer faro en la Boca de Jambelí United Kingdom Hydrographic Office Reportaje Los Informes Ministeriales, salvo aquellos claramente fechados, tienen como fecha el 10 de agosto del año correspondiente, como fecha tradicional en que el Presidente presentaba su Informe a la Nación. Fanal en Mampostería ÍNDICE DE IMÁGENES Fuente y páginas del libro en que están ubicadas las imágenes fotográficas, artísticas, e impresas. Colección fotográfica del Autor.26, 27, 35, 37, 39, 128, 129, 130, 132, 170, 286, 317, 318, 321, Contraportada Biblioteca y Museo Aurelio Espinoza Pólit.89, 97, 242, 243, 296. Biblioteca Municipal de Guayaquil - Archivo Histórico.57, 85, 86, 133, 159, 169, 186, 188, 210, 218, 247, 293, 325. Biblioteca Municipal de Guayaquil - Sala Rolando.228, 266 (Bognoly y Espinoza - 281). Biblioteca de Julio Estrada Ycaza El Puerto de Guayaquil, 3 volúmenes.47, 48, 216. Marveilles de la Science - Louis Figuier.28, 31, 32, 34, 35, 36, 42, 43, 45, 129, 191, 323, 341, 349, 373, 377. El Ferrocarril del Sur – Roberto Crespo Ordóñez.93. Galería de Presidentes, Palacio Nacional.54. Guayaquil Yacht Club.316, 320. Instituto de Historia Marítima (INHIMA).50, 248, 280, 292, 296, 304, 306, 308. Instituto Oceanográfico de la Armada (INOCAR).52, 322. Lindegas A. G.21, 284, 285, 286, 288, 289, 290, 298, 299, 300, 301, 302, 305, 310, 311, 313. National Museum of American Art. Washington, D.C.27. Ochoa Litardo, Alfredo, Arquitecto. Artes bajo contrato del Autor.Portada, 1, 24, 25, 30, 31, 32, 40, 49, 51, 65, 66, 83, 115, 116, 127. Fonds Ancien, Bibliothéque, Ecole National des Ponts et Chaussées.41, 84. United Kingdom Hydrographic Office.63, 64, 65, 124, 132, 139, 161, 171, 281, 282, 296. United States Hydrographic Office Carta # 1391 en Biblioteca Aurelio Espinoza Polit.97, 242, 243, 296. Vicente de Santistevan Arosemena.93. Guía Comercial, Agrícola e Industrial del Ecuador - 1910 234, 275. Faro de Pontaillac ÍNDICE ALFABÉTICO Personajes, lugares, faros y naves A Adela, bajo de la, 137 Africa, 38, Aga, yate, 303, 308 Aga, linterna, 318 Agustín, 32, Alejandría, ciudad, 25, Alejandría, faro de, 24, 25, Alemania, 38, Alfaro, Eloy, general, 267, 270, 273, 287, 291, Alfaro, Flavio E., general, 271, Amador, Simón, 215, América, 38, 40, 281, Andersson, Anders, 18, 20, Andrade Lalama, Rafael, capitán, 272, Andradade Stacey, Alicia, 19, Angélica, 19, Animas, cerro, 64, Arago, Francoise, 32, Arana, vapor, 306, Arboleda, Francisco A., 95 Arequipa, vapor, 195, 197, Argánd, lámpara de, faro de, 32, 33, 40, 42, 129, Argand, Ami, científico, 31, Arosemena Arosemena, Guillermo, 20, 55, 68, Asia, 38, Atacames, arrecife, 109, 137, 138, 146, 172, 250, 258, 268, Atahualpa, aviso, 14, 303, 304, 315, Ayora, Isidro, presidente, 307 B Baca, Alcides, 160, 178, 179, 183, Bahía de Caráquez, puerto de, 277, 315, Bajaña, Nicolás, coronel, 232, Balnazátegui, Francisco, 155, Balao, río, 62, Ballén, Aurelio, 76, 81, 82, 97, 98, 105, Balleneros de los, río, 55, Ballenita, puerto de la, 136, 137, 215, 252, 265, 271, 317, 320, Baltimore, 58, 70, Baquerizo Lince, Ernesto, 319, Barbier, 38, 95, 97, 102, 105, 128, 146, 160, 164, 171, 178, 194, 259, 319, 320, Battle, Horatio, capitán, 99, 109, 110, 135, 138, 146, 165, 185, Bayona Ors, Nicolás, capitán de navío, 230, Bénard, 38, Birmingham, 38, Bolívar, 53, 119, 272, Bolívar, buque, 135, Bonhoff, Luis. Capitán, 262, Bonilla, Benito, 154, 162, Bonilla, Lino, 147, 175, Borda, 32, Bósforo, estrecho de, 25 Boston, Massachusetts, 70, Boyacá, monte, 100 Brehat, Francia, faro, 42, Buffon, Georges Leclerk de, 34, Burdeos, 90, 93, Bustamante de, A., 92 C Caamaño, José María Plácido, 208, 222, 224, 235, 239, 247, 252, Cabo de San Francisco, faro, 13, 230, 250, 256, Cabo de San Lorenzo, faro, fanal, 255, 289, 293, 299, Cabo Pasado, fanal, faro, 13, 230, 231, 235, 236, 237, 241, 242, 246, 250, 251, 256, 257, 258, 261, 265, 266, 289, 293, 299, 301, Calderón, cañonero, 14 Calderón, Marco A., 263, Calígula, emperador, 27, Callao, puerto, 108, 212, Campos, José Antonio, 47, 55, 56, Capovilla Olivo, Antonio, ingeniero, 292, 294, 295, 301, 302, 306, Carbo Noboa, Pedro. 53, 135, 209, 219, 224, Carbo, Vicente A., 206, Carcel, Bertrand, 32, 42, Caribe, mar, 38, Carolina, barco francés, 93, Carrión, Manuel, 215, Cartagena, 119, Centinela, vapor, 197, Centumcellae, faro, 27, Chacabuco, corbeta chilena, 212, Chambers Vivero, Geo, capitán de navío, 70, 71, 195, 196, 197, 278, 279, 280, 291, 298, 306, Chance, James Timmins, 41, Chancebrother, lente, 37, 38, 41, Chatam, isla, faro de, 225, 228, 230, 231, 233, 241, 242, 245, 263, Chávez González, Rodrigo, 47, 70, 71, Chávez, José Hermeregildo, comandante, 99, 117, 134, 142, 151, 152, 153, 154, 163, 185, Chicago, 247, Chile, buque de vapor, 57, 60, 61, 94, China, 38, Chiriboga, N. A. Y., 307, Chupador, isleta, 63, Chupadores, isla, 63, Claudio, emperador, 27, Clayton, buque, 303, Cliperton, pirata, 47, Cobos, Manuel de J., 233, Cochrane, Lord, 185, Colombia, fragata, 60, 119, 212, Colombo, bergantín genovés, 53, Columbo, Antonio, guardafaro, 27, Condorcet, Antoine de, 34, Cookson, 38, Cope, Walter, 61, 64, 71, 160, Coquito, cerro, 184, 197, Cordero Crespo, Luis, 241, Córdova, Rodrigo, 240, Cordouan, faro de, 34, 36, Corning, 38, Coruña, España, ciudad, 26, Cotopaxi, crucero de guera, 232, 245, 263, 267, 272, Cristóforo, 27, Crusoe, Robinson, 299, Cruz, Alejandro, 110, 113, 148, 149, 152, 153, 154, 156, 169, 176, 180, 181, Cruces, batería de las, 119, 206, 236, Cucalón, Enrique, comandante, teniente de fragata, 294, 295, 319, Cudie, P., 287, Cuesta, Salvador, 110 D Dallén, Gustavo, quemador, 291, 294, Daphane, 26, Data, puerto de, fanal de, 13, 226, 227, 228, 229, 230, 231, 232, 241, 245, 249, 250, 256, 258, 280, 289, 293, 302, Dávila, José, 74, De Rubira Orellana, Guillermo, 20, Degrand, Dr., 32, 109, 129, 171, Destruge, Camilo, 59, 68, 72, Diario, Diego, 110, Diligencia, goleta de guerra, 62, 64, 67, 69, 119, 223, Dillon, Alberto, captitán de Marina Mercante, farallón, 20, 23, 317, 318, 320, Dioudonnat, Charlotte, 125, 126, 151, 201, 202, Dioudonnat, Ferdinand, ingeniero mecánico, 5, 90, 91, 92, 93, 94, 96, 98, 103, 106, 111, 117, 122, 123, 124, 129, 131, 134, 135, 136, 139, 140, 142, 144, 146, 147, 148, 149, 150, 152, 155, 157, 160, 162, 164, 170, 175, 176, 177, 179, 180, 182, 183, 186, 188, 189, 190, 194, 200, 202, 203, 207, 220, 233, Dioudonnat, Vda. de, 196, 197, 199, 200, 201, Doty, capitán, 32, 129, 144, 171, Dover, Inglaterra, 27, Doyle, comandante, 61, 64, 69, Drouet, Miceno J., capitán del puerto, 265, Drouet, Peedro C., 214, 232, Durán, 303 E Ecuador, república, 12, 36, 55, 56, 59, 62, 67, 84, 89, 90, 92, 93, 110, 114, 143, 155, 158, 160, 161, 198, 202, 205, 214, 215, 219, 222, 247, 249, 258, 267, 275, 287, 297, 303, 321, Eguiguren, José Javier, 89, 92, 98, 99, 102, 104, 105, 112, 113, 114, 121, 138, 143, 150, 166, 173, 174, 176, 183, 187, 189, 193, 196, 197, 198, El Coco, bajo, 264, Elbert, ingeniero, 295, Ellwe, Mr., 18, 292, 295, 297, 298, 299, 300, 301, 302, Endara Peñaherrera, César, alférez, 15, Esmeraldas, faro de, puerto, 13, 84, 89, 97, 104, 105, 120, 126, 135, 136, 137, 138, 143, 144, 147, 148, 150, 151, 154, 158, 160, 161, 164, 165, 168, 169, 172, 173, 181, 184, 185, 193, 197, 198, 203, 204, 214, 221, 227, 230, 231, 237, 238, 241, 242, 245, 250, 256, 260, 265, 266, 267, 269, 270, 280, 282, 289, 293, 301, España, 94, 103, 190, Espronceda, 78, Estados Unidos, 33, 38, 40, 41, 42, 58, 70, 75, 77, 132, 183, 214, 242, 247, 295, Estocolmo, ciudad, 18, 287, 290, Estrada Carmona, Emilio, 321, Estrada Guzmán, Eduardo, 14, 321, Estrada Ycaza, Julio, 19, 55, 87, 321, Estrada Sciacaluga, Víctor Emilio, 277, 321, Estrada Solá, Cecilia, 19, Europa, 28, 48, 53, 54, 125, 135, 138, 214, 215, 216, 225, 227, 301 F Fenet, Lamothe, 161, Fenestre, Barbier &, 95, 97, 102, 105, 128, 146, 160, 164, 171, 178, 194, 259, 319, 320, Fernández Ampuero, Diógenes, capitán de fragata, 295, 296, Fernández de la Madrid Bello, Francisco, 248, 252, 258, 261, 270, Ferrusola Morlás, Francisco Eleodoro, 287, Flores Jijón, Antonio, Dr., 235, 241, Flores, Juan José, general, 53, 54, 55, 56, 60, 67, 71, Flores, Reinaldo, general, 155, Fluencio, Pedro, 184, Fort Morgan, vapor noruego, 306, Fourquet, Beltrán, 89, 90, 91, 92, 93, 94, 99, 111, 126, 146, 151, 160, 166, 168, 202, 204, Francia, 27, 32, 34, 38, 39, 41, 77, 86, 89, 92, 102, 108, 128, 138, 144, 151, 160, 161, 164, 169, 171, 178, 179, 182, 187, 190, 194,196, 198, Fresnel, Agustín Jean, 34, 37, 38, 41, Fresnel, faro, lente, 34, 35, 37, 39, 41, 42, 43, 75, 77, 128, 131, 181, 182, 201, 237, 242, 317, 320, Fresnel, Léonor, 32, 38 G Galápagos, Archipiélago de Colón, islas, faro de, 13, 228, 230, 231, 233, 256, 260, 266, 303, 311, Galvez, Francisco Javier, 219, Game, P., 102, 103, 183, 184, Garay Arellano, Ezio, 2, 19, García Moreno, Gabriel, 77, 89, 109, 114, 135, 136, 141, 144, 155, 198, 199, 208, 235, 245, García, Pastor, 160, Gault, Julio, 183, General Villamil, balandra, 234, 284, 294, 299, 303, 304, 305, 306, 307, 308, 319, Génova, Italia, 27, Girdon, Diego, 58, 59, 60, 61, 63, 64, 68, 75, Glemafton, barca inglesa, 204, Gómez Bejarano, Luis Eduardo, abogado, 319, Gómez, Diódoro, 271, Gómez Iturralde, José Antonio, 19, 76, Gómez, Juan José, 113, 117, 139, 148, 149, 150, 152, 153, 154, 160, 239, Gómez, Lázaro L., guardafaro, 252, 271, González, Manuel R., guardafaros, 271, 272, 273, Gran Colombia, 49, 53, Granja Asanza, Honorio, 19, Grecia, 94, 190, Gruenerval, Nicolás, Ing., 194, 195, 207, 208, Guacho, vapor de guerra, 219, Guayaquil Yacht Club, faro de, 17, 316, Guayaquil, golfo de, faros de, ría, 11, 12, 14, 15, 55, 60, 76, 82, 88, 89, 98, 101, 102, 104, 136, 137, 163, 185, 190, 230, 233, 249, 253, 268, 280, 310, 315, 320, Guayaquil, puerto, provincia de, 12, 14, 47, 48, 49, 53, 54, 55, 56, 57, 58, 59, 64, 67, 68, 72, 74, 76, 77, 81, 87, 91, 92, 93, 99, 103, 105, 110, 111, 112, 113, 114, 118, 120, 123, 124, 125, 135, 136, 137, 138, 141, 143, 144, 145, 151, 152, 155, 158, 162, 165, 167, 175, 188, 189, 190, 193, 194, 196, 197, 198, 199, 202, 203, 204, 209, 214, 216, 217, 218, 219, 220, 223, 224, 227, 229, 232, 233, 242, 243, 244, 245, 248,249, 252, 253, 256, 289, 291, 293, 298, 303, 306, 307, 314, 319, 320, 321, Guayas, río, provincia, 48, 55, 56, 60, 68, 69, 72, 92, 93, 99, 114, 119, 123, 125, 160, 161, 162, 163, 165, 167, 168, 172, 176, 177, 179, 184, 188, 197, 198, 200, 201, 203, 209, 210, 214, 215, 216, 219, 220, 221, 224, 232, 233, 236, 237, 238, 243, 252, 263, 274, 275, 280, 281, 287, 290, 307, 313, 315, 316, 319, 320, Guayas, vapor, 61, 69, 70, 71, 119, 121, 135, 138, 146, 165, 185, 248, Guevara, Eriberto, 110, Guinand, Pierre Louis, 34, 39 H Harlé, 38, Helesponto, faro de, 25, Hércules, faro de, 26, Herrera, Ignacio, 110, Hidalgo, Carol, 20, Hidalgo, Eddie, 20, Hombrera, la, bajo, 217, Homero, 24 I Ibáñez, Carlos, capitán de corbeta, 304, Icaza, Octavio G., Ministro de guerra y marina, 298, Illinois, 247, India, 38, Infante, Pedro, 263, 267, 271, 273, Infernet, corbeta francesa, 187, 188, 195, Inglaterra, 37, 38, 53, Isla de La Plata, fanal de, 12, 13, 230, 231, 232, 233, 236, 239, 241, 245, 246, 247, 249, 250, 255, 256, 257, 260, 280, 289, 293, 299, 305, Isla Sombrera, faro, 230 J Jambelí, isla, canal, faro de, golfo, 14, 48, 49, 110, 194, 214, 217, 218, 243, 250, 264, 269, 270, 279, 280, 281, 282, 283, 284, 288, 292, 293, 295, Japón, 38, Jaramillo, Manuel, 110 L La Lanterna, faro de, 27, La Resuelta, fragata, 162, Landín, Franco J., 252, 258, Lavoisier, Antoine, científico, 32, Lecaro, Francisco, 233, 236, 249, 254, 256, Legate, Ing., 135, León, Francisco Javier, 138, 161, 178, Lepaute, Henry, 38, Leptismagna, faro de, 27, Leschés, 24, Leticia, 19, Letourneau, 38, Lewis, lámpara, faro de, 40, 134, Lewis, Winslow, 33, 34, 40, 42, 70, Libertador Bolívar, cazatorpedero, 270, 271, 294, 295, 306, Lidingo, Suecia, ciudad, 18, Lima, ciudad, 48, Lucero, S.J., Iván, reverendo, 19, Luisa Diamantina, balandra, 291, 292, 294, Luque, Gabriel J., 90, Luzárraga, Manuel Antonio, capitán de fragata, 49 M MacDougal, capitán, 244, Machala, ciudad, vapor de guerra, 76, 219, Magallán, José, 110, Magallanes, estrecho, 280, Mala, bajo de, cerro de, 61, 62, 63, 64, 89, 97, 103, 124, 137, 162, 172, 187, 194, 242, 243, 257, 282, Maldonado, José Vicente, 215, Malecón Simón Bolívar, 316, 320, Manabí, ciudad, vapor inglés, 120, 142, 143, 167, 209, 221, 229, 235, 240, 246, 256, 301, Manglaralto, puerto de, 289, 293, Manta, faro de, puerto, 13, 35, 89, 97, 104, 105, 126, 135, 136, 137, 141, 142, 143, 144, 146, 151, 155, 165, 167, 168, 169, 172, 181, 193, 221, 228, 229, 230, 231, 232, 236, 237, 240, 241, 242, 245, 246, 250, 256, 257, 260, 265, 269, 270, 280, 282, 283, 289, 293, 300, 315, Mapocho, vapor, 243, Maryland, Estados Unidos, 70, Marín, José, 164, Maris, 33, 40, Márquez, Benigno, 110, 134, 140, 147, 148, 150, 152, 153, 154, 159, 173, 174, 188, Martínez, Ramón, 156, 157, Martínez y Coello, Juan María, 64, 69, 241, Martínez Mera, Juan de Dios, presidente, 313, Martinique, vapor, 160, Masteau, Katherine, 20, Matamoros Trujillo, Carlos, Dr., 20, Mediterráneo, mar, 38, Meloria, faro de, 27, Menten, Juan, S.J., sacerdote, 69, Mercedes, goleta de guerra, pailebot, 99, 110, 117, 121, 124, 132, 134, 137, 141, 142, 144, 147, 148, 151, 152, 163, 168, 170, 173, 174, 176, 177, 178, 182, 188, 189, 199, 204, 206, 207, 208, 211, Messina, faro, 27, México, 53, Miranda, Ramón, 269, Mireya, 19, Moderada, lámpara, faro, 129, Mogote, bajo, 137, Moncayo, José M., 202, Mondragón, isla, 64, 137, 195, 198, Monte Alto, 137, Montecristi, 167, Monteverde Granados, Carlos, contralmirante, 15, 18, 19, 56, Montfaucon, 24, Mora, Antonio, guardiamarina, 152, 153, 154, 155, 199, Mora, Francisco, capitán de corbeta, 138, 207, 211, Mora, Ignacio, guardafaro, 225, Moreira, Pedro A., 240, Morla, César E., capitán del puerto, 264, Morla, Diego, 110, Morro, canal del, faro, 177, 230, Munich, Alemania, 18, Muñoz Mera, Lorena, 2, 20, N Navarro, J.F., 278, Newcastle, 38, Nilo, río, 25, Noboa, Jaime, 19, Noboa, José T., 120, Norma, goleta, 76, Norte América, 53, 54, 225, Núñez, Fernando, 113, 117, 118, 122, 126, 139, 140, 142, 147, 148, 149, 150, 151, 152, 153, 154, 155, 156, 159, 170, 178, 179, 183, 211, Núñez, P. L., 307 O Oceanía, 38, Ochoa, Alfredo, 19, Ochoa, Marianita, 19, Oliva, Moisés, coronel, 283, Olmo, Pedro, 110, Oramas, Agustín, capitán de navío, 81, Ordóñeez, David, 221, Ordoñez, José, 110, Ostia, faro de, 27 P Pacheco, Francisco, capitán de fragata graduado, 204, 223, 225, 226, 227, 229, 231, 233, 236, Pacheco Vera, Pablo, 224, Pacífico, océano, 87, 122, 161, 207, 215, Palacios, Antonieta, 19, 77, Palacios J., Leonardo, 307, Panamá, canal, 151, 276, 277, 279, 284, 305, 306, Panchana P., Alberto, 265, Pareja, Fernando, 246, París, 38, 89, 90, 91, 92, 93, 102, 105, 125, 126, 128, 138, 160, 166, 171, 179, 182, 197, 202, 205, 221, 259, Pástenes, Víctor M., 272, Patria, motovelero, 308, 310, Patricia, 19 Payana, bajo de, 61, 63, 217, 230, 258, Payeze Gault, José, Dr., 272, Peacock, George, comandante, 57, 59, 60, 61, 63, 64, 67, 68, 69, 75, Pecharich, Nicolás, Ing., 319, Peñaherrera, Oswaldo, 19, Pérez, Pedro, 74, 134, Pérez P., Gregorio, 262, Perseverant, barca, 105, 106, 107, Perú, 49, 57, 71, 119, 186, Pharos, isla, 25, Piedra, Juan, 134, Pino Plaza, Carlos, 319, Pino Roca, Rafael, capitán de navío, 283, 306, Pireo, faro de leña, 25, Pisa, faro, 27, Pispira, Juan, 110, Plaza, José A., 257, Ponce de León, corregidor, 48, Portoviejo, 209, Poudavigne, Eduardo, 108, 180, 194, 196, Powel, comandante, 272, Pozo, Pastor del, capitán del puerto, 266, Promontorio de Sigé, faro de leña, 24, Ptolomeo II, faraón, 25, Puerto Baquerizo Moreno, 311, Puerto Bolívar, 264, 269, 270, 279, 280, Puerto Cayo, 277, Puerto Chico, faro de, 228, 266, 275, 311, Puná, isla, punta, faro, 47, 48, 49, 53, 58, 60, 61, 62, 64, 69, 71, 84, 103, 105, 123, 134, 135, 136, 145, 155, 156, 160, 163, 166, 167, 175, 198, 221, 229, 230, 234, 242, 250, 284, 293, 310, Punta Ahogada, (Sunken Rock), 62 Punta Arenas, bajo de, boya de, faro de, 13, 62, 63, 64, 71, 87, 89, 90, 92, 96, 101, 103, 104, 105, 106, 126, 136, 137, 160, 161, 162, 163, 164, 165, 166, 167, 168, 169, 170, 171, 173, 174, 175, 176, 177, 178, 180, 181, 183, 185, 193, 194, 201, 204, 206, 207, 208, 210, 217, 219, 221, 222, 223, 224, 226, 230, 231, 232, 233, 234, 235, 238, 239, 241, 243, 245, 246, 247, 249, 250, 254, 257, 258, 259, 260, 261, 266, 270, 274, 280, 282, 284, 288, 292, 293, 296, 316, 317, 320, Punta Centinela, 97, 123, 124, 126, 127, 161, 162, 175, 176, 179, 180, 181, 182, 217, Punta de Jambelí, faro de, 13, 256, Punta de Piedra, fanal de, fuerte de, 13, 62, 137, 250, 256, 289, 291, 293, 298, 305, 316, 319, 320, Punta de Tembleque, 63, Punta Española, faro de, fanal de, 13, 61, 62, 64, 84, 92, 96, 97, 102, 103, 105, 107, 110, 123, 161, 162, 176, 177, 178, 179, 180, 182, 183, 184, 187, 188, 214, 217, 221, 226, 227, 228, 230, 231, 232, 241, 242, 245, 249, 250, 255, 260, 275, 280, 282, 288, 292, 293, 294, 296, 299, 319, Punta Galera, 138, 289, 293, Punta Mandinga, fanal de, isla, 13, 62, 63, 64, 70, 77, 87, 90, 97, 99, 100, 101, 103, 104, 109, 123, 124, 127, 131, 134, 135, 136, 137, 138, 140, 141, 142, 143, 146, 147, 154, 156, 157, 160, 161, 162, 163, 164, 172, 173, 175, 176, 187, 204, 208, 209, 221, 225, 228, 229, 230, 231, 236, 241, 242, 245, 249, 250, 255, 260, 280, 281, 284, 289, 293, 296, Punta Salinas, bahía de, fanal de, 13, 215, 250, 256, 264, 271, 272, 310, 317, 319, 321, Punta Salma, 250 Q Quimí, Manuel, 291, 294, Quito, ciudad, 19, 69, 92, 113, 114, 136, 152, 155, 162, 198, 210, 247, 306, 307 R Ravena, faro de, 27, República Dominicana, 119, Reyes, Alejandro, Dr., 272, Robinson, George, 33 Reves, Alejandro, Dr., 271, Robles, José, 264, Robles, Francisco, presidente, 58, 71, Roca, Ignacio C., 202, Rocafuerte y Bejarano, Vicente, presidente, 53, 54, 55, 56, 57, 58, 59, 60, 61, 64, 67, 68, 71, 75, 89, Rodas, coloso, 26, Rogers, Thomas, 33, Rojas, Lucas, capitán de navío, 5, 60, 61, 64, 69, 74, 76, 119, 120, 121, 138, 145, 157, 162, 173, 175, 181, 185, 186, 189, 193, 219, 220, 221, 222, 223, 227, Roma, ciudad, 27, Ruiz Estrada, 47, Rusia, 38 S Sáenz García, Francisco, 139, 142, 153, 155, 159, Sáenz, Juan, 152, Salado, estero, goleta de guerra, 248, 319, Salazar, Francisco J., 109, 154, Salvador, Virginia, 201, San Carlos, vapor, 99, 109, San Cristóbal, Galápagos, faro, fanal de, isla, 13, 228, 250, 256, 263, 264, 266, 267, 275, 280, 282, 311, San Petersburgo, Rusia, 38, San Vicente, buque de vapor, 57, 70, Sánchez, Balvino, 110, Sánchez Bravo, Mariano, capitán de fragata, 18, 19, Sánchez, Delfín, 224, 226, 227, Sánchez, Domingo, 183, Sánchez G., M., 272, 273, Sánchez, Juan, guardafaros, 183, 273, Sánchez Rubio, José Félix, 110, 111, 123, 134, 154, 215, 216, 322, Santa Clara, balandra, 225, 234, 235, 238, 239, 240, Santa Clara, El Muerto, El Amortajado, isla, faro, fanal, 74, 75, 76, 77, 78, 81, 82, 83, 84, 85, 86, 87, 88, 89, 90, 92, 96, 100, 101, 103, 104, 105, 106, 107, 109, 111, 112, 113, 114, 115, 116, 118, 119, 120, 121, 122, 123, 124, 126, 127, 131, 132, 133, 134, 135, 136, 139, 140, 141, 142, 143, 144, 145, 147, 148, 149, 150, 151, 152, 153, 154, 155, 160, 161, 162, 164, 167, 168, 170, 172, 173, 174, 176, 178, 179, 183, 185, 188, 193, 195, 196, 198, 204, 205, 207, 209, 211, 212, 215, 217, 219, 221, 225, 227, 229, 230, 231, 233, 235, 236, 239, 241, 242, 243, 244, 245, 246, 247, 249, 250, 253, 257, 258, 259, 260, 261. 262, 267, 280, 282, 283, 288, 292, 293, 294, 304, 316, 319, 320, 322, Santa Cruz, general, 71, Santa Cruz, isla, 48, Santa Elena, península de, punta de, faro de, 13, 69, 71, 87, 127, 136, 173, 205, 214, 215, 216, 218, 221, 222, 225, 230, 231, 232, 235, 240, 241, 242, 245, 246, 247, 249, 250, 252, 254, 257, 258, 263, 265, 267, 270, 272, 273, 280, 282, 288, 293, 299, 302, 310, 317, 320, Santa Lucía, vapor de guerra, 219, Santa Rosa, ciudad, faro, 217, 243, Santistevan de, Vicente, 89, 93, 94, 95, 96, 104, 105, 114, 117, 125, 126, 135, 136, 138, 139, 140, 141, 142, 143, 173, 174, 189, 190, 194, 197, 198, 199, Santo Domingo, 119, Santos, Anselmo, 157, 166, Santos, Genaro, 163, 166, 167, Santos, Patricio, 175, Sautter, 38, Sedlenieks, Maris, 18, 20, 32, 33, 40, Sericola, Edmeé Virginia Marie, 125, Sevius Lupus, Gaius, 26, Soberón, Víctor, 272, Soleil, Francoise, 37, 38, Soleil, Jr., 38 Sono, (La Angostura), fanal de, 13, 137, 250, 256, Sostrato de Cnido, 25, 26, Sotomayor y Nadal, José, 214, Sría, S., general, 221, 222, St. Gobain, París, Francia, 35, 37, St. Nazaire, puerto, vapor, 92, 93, Stagg, Leonardo, general, 54, 226, Stael, Carlos de, 297, 298, Stevenson Alan, 41, Stevenson, Thomas, 33, Suárez, Ambrosio, 272, Sucre, Antonio José de, 144, 146, 147, 179, 182, 193, 194, Sudamérica, 54, 67, 216, 235, 290, 303, Suecia, 287, 301, Sulphur, H M. S., fragata inglesa, 54, 103, 281 T Takman, Anders, 18, 20, Tarqui, buque, 310, Thompson, Franchot, 32, Timea, torre de, 25 Tracia, ciudad, 25, Triana, Rodrigo de, 47, 48, 70, 71, Troya, ciudad, 25, Tumbes, 55 Tungurahua, cañonera, 245, U Ulba, motovelero, 308, Urbina Ortiz, José, 20, Urvina Viteri, José María, general, 71, 75, Urvina, Gabriel, 75, V Valens, guardafaros, 245, Vasco de Escudero, Grecia, 19, Vega, Abelardo, guardafaro, 264, Veintemilla, faro, 218, Veintemilla, Ignacio de, general, 208, 218, Velasco, José, 110, Verde, isla, punta, fanal de, 13, 48, 84, 103, 136, 137, 160, 164, 168, 194, 198, 250, 256, 283, 289, 293, 296, 298, Victoria, barca alemana, 198, Villao, Bernardino, 221, Villavicencio, Vicente, 272, Villena, Carlos A., 224, Villena, Manuel, guardafaros, 221, Vinueza, María Victoria, 20, Vinueza, Sergio, 20, Vizancio, Dionisio de, 25, Von Linde, Otto Berg, 287 W Washington, 296, Wheeler, Wayne, 19, Wheelwright, Guillermo, 56, 60, Wright Aguirre, Juan Alfredo, 319, 320, Wright, Carlos, general, 57 Y Ycaza, Francisco de P., 200, 201, 202, 206, 207, Yépez, Manuel, guardafaro, 229 Z Zambrano, José, 164, Zoila Mercedes, chata, 245,