CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 El DIRECTOR DE ESCUELA DE PRÁCTICA COMO SUPERVISOR. AUTONOMIA Y COMPROMISO ÉTICO 1 - ¿Cómo manejar las tensiones que surgen entre la idealidad y la realidad? ¿Qué debe supervisar un Director de Escuela? ¿Y si es de Práctica? Se supervisará lo que se va a organizar para el mejor funcionamiento institucional. No podemos hablar de organización, si no se han precisado claramente los objetivos que se pretenden lograr. No sólo se deberán tener claro los “qué” sino “cómo” podremos llegar a ellos. Para ello, se deberán establecer los programas de acción que convertirán los objetivos en una realidad factible. Ello implica la mirada del extranjero como dice Graciela Frigerio, pues se debe interrogar, preguntar o preocupar por los significados de la prácticas, solicita y busca fundamentaciones y avanza en consecuencia, en el diseño de nuevas prospectivas, de futuros deseables y además, posibles. Las interrogaciones deben realizarse contemplando a todos los actores de la Institución Educativa: alumnos, maestros y practicantes. En el campo institucional de los Centros Educativos, se pueden distinguir 4 dimensiones, las cuales son de responsabilidad del Director: 1. La dimensión organizacional. Ella determina el estilo de funcionamiento: organigrama, distribución de tareas, uso del tiempo y de los espacios, etc. 2. La dimensión administrativa. Es la planificación de lo relacionado con los recursos humanos y financieros. En general se rigen por una normativa: documentación oficial 3. La dimensión pedagógica – didáctica. Comprende el concepto de educación que se comparte en la Institución, así como las modalidades de enseñanza y aprendizaje que subyacen a las prácticas docentes. 4. La dimensión comunitaria. Todo lo relacionado con el entorno. Estas dimensiones, en la práctica están entrelazadas, pero en particular, el Director de una Escuela de práctica, además de considerar en su planificación anual, cómo las va a organizar, deberá prever y plasmar en el mismo, la Práctica Docente: a) ¿Cómo la va a organizar? b) ¿Cómo va a generar los puentes entre Practicantes – Maestros Adscriptores y Dirección? c) ¿Cómo va a distribuir los tiempos y el espacio?. El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 1 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 d) ¿Cuáles son las tareas que él o ella sólo puede llevar a cabo y cuáles va a delegar?. e) ¿Cómo va a propiciar el buen relacionamiento que posibilite la pertenencia y la pertinencia, teniendo en cuenta que debe considerar a tres destinatarios: alumnos – docentes – practicantes. El propiciar las buenas relaciones humanas como base del trabajo cooperativo, debe ser eje transversal del hacer y el ser docente. 2 – f) Cuando se hacen las primeras reuniones docentes a principio de año se debe dar a conocer cómo se va a trabajar con los practicantes, pautas de planificación, devolución de informes, que no apuesten sólo a lo conductual sino a lo didáctico, dando posibilidades a la superación y corrección de errores. g) ¿Cómo hacer los talleres? Manejo de bibliografía. Ver distintas entradas y recortes.En éstas instancias, además de la solvencia técnica, es imprescindible su ejecución con ética profesional. El taller es una forma alternativa de abordar la enseñanza aprendizaje, que posibilita la integración teórica - práctico; sintetiza el pensar, el hacer y el sentir; permite la reflexión y el intercambio; posibilita la conceptualización de lo aprendido. El docente, sin bien goza de autonomía para ejercer su función, no puede trabajar aislado, debe compartir y discutir con otros. Recordemos que sabemos lo que sabemos con otro, al igual que somos lo que somos con otro. Lo más importante de una sociedad de conocimiento es: trabajar con otros en forma colectiva; explicitar nuestros conocimientos para compartirlos con otros; entender que es lo que se necesita. Todo acto educativo debe ser planificado a fin de que a partir del proceso de enseñanza y aprendizaje, se logren satisfacer los objetivos que como docentes deseamos alcanzar. No es posible conocer nada a no ser que se sustantive y se vuelva objeto para ser conocido, o se vuelva contenido. Sin teoría nos perdemos en medio del camino, sin práctica nos perdemos en el aire. Sólo podemos reencontrarnos en la relación dialéctica teoría – práctica (Paulo Freire). La autoridad de un Director debe emanar de su ética profesional, de su capacitación y vinculación sustentada en las buenas relaciones humanas, y no como nos advierte Theodor Adorno, de “una personalidad engreída que sólo se cree importante cuando es confirmada por el rol que desempeña en organizaciones colectivas El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 2 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 que no son nada, pues existen meramente en nombre de su propia colectividad” 1 . El objetivo de la práctica es siempre mejorar la práctica y la reflexión sobre la misma debe ser la metodología por excelencia. La reflexión ha de entenderse como una dinámica conversacional, en donde se convocan múltiples voces a una conversación en busca de sentidos para la acción, o nuevas acciones que superen el sin sentido del hiato, denominado así por Caar y Kemmis, a la separación entre teoría y práctica. ¿Quiénes son los sujetos que concurren a la Escuela a hacer su práctica docente? Son sujetos que simplemente han sido alumnos y ello les ha dejado su primer tramo de formación, que según Davini, es el más sólido. Los maestros y los profesores que cada uno ha tenido a lo largo de su vida, y el alumno que uno ha sido constituyen las fuentes principales sobre las que se elabora un modelo teórico acerca de las enseñanza. Luego, la carrera docente hará sobre eso lo que sea posible, y la carrera profesional lo que queda por hacer. Los cambios son en definitiva una compulsión ética del sujeto por mejorar, y eso ni se enseña con la intención de que pueda ser aprendido ni mucho menos se decreta desde cualquier autoridad que no sea el sujeto mismo. Nadie forma en verdad a nadie, sino que la formación es en realidad una acción del sujeto sobre sí mismo, con las mediaciones que él mismo encuentra o que otros le facilitan. La didáctica y la acción de las Instituciones de formación docente, son sólo una parte en el tiempo y en el espacio de las mediaciones formativas, que el sujeto elige para darse una nueva forma y en definitiva una identidad, como persona y como profesional. Acompañar en un proceso de formación, es una tarea de gran responsabilidad, que por suerte, nunca es una tarea de uno solo. Pensar que como Directores de Escuela de Práctica van a lograr formar los mejores maestros es demencial, pero tienen que pensar que les brindarán la mejor oferta mediadora que el otro se merece. Y ello, requiere de ética profesional. La ética, es una construcción social que involucra personas en relación. Actuar éticamente significa hacerlo con honestidad, con responsabilidad sobre las consecuencias de sus actos, con respeto por la dignidad y la cultura de las personas, con compromiso y entrega. Es una actitud, que implica coherencia entre 3 - la palabra y la acción. En una de sus obras, Paulo Freire dice: “Exigente con la ética, considero que ella tiene que ver con la coherencia entre lo que se dice y lo que se hace” La ética se aprende en la práctica, en la vida, en las relaciones con otros, en momentos y hechos compartidos. No sólo se necesitan convicciones sino que se requieren 1 Del Libro Ideología – Slavoj Zizek – Ed. Fondo de Cultura económica (2005) Argentina El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 3 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 responsabilidades. La práctica muestra siempre, la coherencia o la incoherencia de los discursos. ¿Qué hacer?. ¿Qué puede y qué no puede hacer la escuela? Algunos autores hablan de la Escuela como “guardería”, otros como “galpones”. ¿Qué es en realidad hoy la escuela?. ¿Para que van los niños a la escuela?. ¿Para qué los estudiantes magisteriales realizan la práctica en algunas escuelas y no en cualquier escuela? Es necesario romper con la dinámica de descalificación del otro y trabajar por la cooperación, la corresponsabilidad y la búsqueda conjunta de respuestas. Ej.: escuelas comunes, escuelas de contextos (quiénes allí trabajan, tienen un mismo título) -¿Qué aprendizajes se pretende provocar en las nuevas generaciones de docentes a través de la Escuela de Práctica? ¿Qué es lo que realmente aprenden? ¿Cómo lograr que los conceptos que se elaboran en las teorías de las distintas disciplinas y que sirven para un análisis más riguroso de la realidad, se incorporen al pensamiento del alumno como poderosos instrumentos, herramientas de conocimiento y resolución de problemas, y no como meros adornos retóricos que se utilizan para pasar de año y olvidar después? Llamamos aprendizaje, a un proceso que interioriza interacciones, que adquieren significado en una experiencia cooperativa, consciente, en permanente reformulación y progresiva autonomía. Y sólo podemos enseñar, basándonos en el sujeto y en sus adquisiciones anteriores. La acción didáctica debe favorecer la articulación entre ambas. Los docentes, y en este caso los formadores, no deberían fiarse de las recetas. Ninguna escuela es igual a otra: hay variación de personal, entorno, formas de organización, modelo de gestión, etc. que hacen que cada organización tenga sus características propias, que las hacen diferentes de las otras e inimitables. Tampoco ninguna situación de aprendizaje es reproducible en su totalidad, ya que en ella intervienen individuos cuyas historias intelectuales no son únicas en todos sus aspectos. Pero, lo que sí debería compartirse, es ¿ qué es lo que queremos que los estudiantes aprendan en la Escuela de práctica? , ¿qué tareas serían imprescindibles para la consecución de los mismos?, ¿cómo organizar la escuela para poder alcanzar los objetivos propuestos y acordados para un mismo nivel de estudiantes? ¿qué priorizamos en 2° y qué en 3°?, ¿qué materiales y bibliografía básica vamos a utilizar?, El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 4 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 ¿Qué se podría priorizar para organizar una Escuela de Práctica? Potencializar el espacio Aula como lugar de transformación. De aprendizajes trasmitidos a aprendizajes construídos. Del Programa escrito a un programa activo. De interpretación del currículo para lograr una adecuada transposición didáctica y aprendizajes significativos. De un espacio físico a un espacio alfabetizador. Creo importante realizar una profunda reflexión acerca de que realmente vamos a cambiar el día que los docentes nos responsabilicemos de lo que los alumnos no entienden, y ello lo hago extensivo a los Directores y Maestros Adscriptores en relación a las nuevas generaciones docentes. Ej. Los mismos Directores que integran las Mesas de Concurso Práctico, critican los no saberes de las nuevas generaciones. Se debería reflexionar sobre las diferentes miradas, las diferentes perspectivas, en síntesis, no ser demagógicos. Poder transitar del paradigma de la simplicidad (visiones fragmentarias ) al paradigma de la complejidad. 4 - ¿Cuáles serían los saberes básicos?: Saber – Saber hacer – Querer hacer La tarea no es sencilla, se sitúa en una tensión entre el papel conservador perpetuador de una tradición, de una memoria, de una cultura, que merece ser resguardada y trasmitida de generación en generación; y el papel de impulsor y habilitador a la dimensión de lo inesperado, de lo enigmático, trasmitir la curiosidad. Inquietud de lo que puede ser y no es, de la promesa. Construir una lógica de lo posible, del quizás, de un conocer abierto y esperanzador. Posibilitan aprender: • Formular buenas preguntas y delimitar problemas. Preguntar significa “abrir”. La pregunta rompe con la confianza de la doxa y descoloca las respuestas estereotipada y convencionales. La pregunta señala la tensión entre nuestras expectativas y las opiniones dominantes. • Anticipar resultados y formular explicaciones provisorias, aunque aún no se haya abordado en la teoría didáctica. • Diseñar estrategias, indagar. • Interpretar información y elaborar nuevas explicaciones sobre la base de evidencias. • Comunicar resultados. Habrá que educar para una conciencia crítica y reflexiva, la única que permite la interpretación profunda y autónoma de los problemas de la realidad. El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 5 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 . Diremos que el “aula” es la caja de resonancia de lo que ocurre en la sociedad; es el punto de cruce de azares compartidos, el espacio donde se expresa el conflicto. Su complejidad se nos revela cuando arriesgamos, flexibilizamos, aventuramos nuestro mirar – pensar – actuar, creando el espacio para el encuentro con el otro. El visualizar lo que ocurre en un salón de clase desde su organización social , es fuente de conocimiento y reflexión. Mirar el devenir latente de la clase, les permite ser conscientes de la complejidad, del entramado en los que están inmersas todas sus manifestaciones. Considero, que tal vez son los miedos de algunos adultos, los que nos dificultan enfrentar el futuro que se aproxima, porque no nos sentimos capaces de resolver los conflictos que los jóvenes van a tener que asumir. Sostengo que no tenemos derecho a negarles a las nuevas generaciones, el conocimiento y la experiencia, ni las herramientas éticas que hemos recibido del pasado, pero ello no implica fabricar al otro. Sería importante, a la hora de organizar una Escuela, analizar su rol y el rol docente. Cuáles son los saberes que la sociedad y la cultura requieren. Hacernos cargo de lo que hemos construido. Recuperar la específicidad de las instituciones educativa: enseñar. Integración de la noción de diferente pues siempre existe la tentación de rechazar al que piensa diferente. Me parece interesante el aporte de un pedagógo argentino, Estanislao Antelo plasmado en un artículo titulado : “El oficio de educar “, en donde expresa: “Como educador, enseño. Yo creo que un educador es alguien que tiene algo para enseñar, pero además lo enseña. Hay mucha gente que tiene algo para enseñar pero vaya a saber por qué nosotros nos dedicamos a enseñarlo sistemáticamente, a hacer de eso un oficio. Si lo que hago con lo que estudio es pasarlo, en algún sentido soy un pasador. Aquello que estudio, lo paso, pero hago trampa cuando lo paso. De alguna manera decido qué cosas pasar y qué cosas no pasar. Pero ¿Qué es lo qué estudio?. Y lo que estudio es lo que otros me han pasado, lo que otros me han dado, es decir, lo que he heredado. Pero conviene destacar que heredar es un verbo y no algo que nos ha sido dado de una vez para siempre. ¿Qué es lo que somos?. Y, de alguna manera, somos lo que otros nos han dado. Eso que nos han dado lo pasamos. Y cuando lo pasamos hacemos trampa, cambiamos algunos ingredientes. Es como que lo sazonamos de manera diferente y el producto es siempre variable. Siempre operamos con variables, con variaciones. Otra característica es que procuro que eso que me han El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 6 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 pasado y que paso, se pase a la mayor cantidad posible. Es como si escribiera cartas. Yo pensaba en que los que tenemos este oficio, es como si perteneciéramos a una especie de loca reunión, una especie de gran seminario, en el que tenemos abierta la inscripción y en la que escribimos cartas. En ese seminario anotamos a aquellos que lo desean y a veces a los que no lo desean. Seminario que podríamos llamar del tiempo, de la memoria y de la herencia. Es como que abrimos la inscripción y ponemos a disposición lo que tenemos y lo que no tenemos. Es como que uno ofrece algún tipo de carta y una promesa. Y la otra característica que quería destacar de este oficio es que aquello que pasamos pareciera darle forma al otro, es como que fabricara al otro, es como que modelara al otro. Y me entero de esa forma, de esa modelación y de esa formación porque el otro en algún momento se resiste. Hay siempre alguien que por suerte se resiste. Pero, ¿qué hacer?, ¿qué es lo que tenemos que hacer? Yo voy entonces a terminar proponiendo cambiar esta pregunta, sustituirla y no preguntar ¿qué hacer? sino preguntar ¿qué es lo que estamos haciendo? Son tiempos difíciles. Cierto. Pero ¿cuales no lo son? ¿ cuales no lo han sido?. ¿Quien no escuchó a un adulto, maestro, padre, tutor decir no entender estos tiempos?. Frente a la incertidumbre no sirve ni temer ni esperar, sino ponerse de acuerdo en como enfrentarla. El futuro, lo porvenir, no es materia de adivinos. Hace rato que sabemos que ninguna ley divina o natural ordena las sociedades. Lo que tiene la forma del no ser aún, espera nuestras decisiones. Son estas decisiones nuestro punto de partida”. Posibilidades diferentes: Intercambiar con estudiantes de otras escuelas o especialidades (IPA) acerca de lo que se está haciendo Encuesta a Maestros recién recibidos para valorarar la Formación recibida: qué les sirvió – qué les faltó 5 - De las Prácticas que observan: qué se puede cambiar, qué se puede agregar? Criticar las teorías que no funcionan en la práctica. Pensar en alternativas a fin de despertar el entusiasmo por aprender. Imaginación para crear lo que aún no ha sido creado. Posibilitar que el otro se haga responsable Un educador no es alguien que está preocupado sino que está ocupado. Considerar la diversidad que se genera en clase y la diversidad de los conocimientos previos de los estudiantes. El docente debe empezar a construir su coherencia, disminuyendo la distancia entre el discurso y la práctica. El papel de las nuevas tecnologías. El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 7 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 Escuchar – hacer – hablar sobre lo que se hace. 6 - Al principio, las “culpas” van de afuera a adentro, cuando entro “adentro” busco cambiar mis prácticas. ¿Qué sabemos? ¿Qué ignoramos? De esta indagación realizada, me surgen nuevas interrogantes para seguir profundizando, como ser: ¿Cómo hacer para mejorar en este mundo de cultura tan compleja? ¿Se buscan soluciones conjuntas entre los docentes? ¿Qué oportunidad tienen los alumnos de crear conocimiento y de ser creativos? Tienen por delante una tarea fascinante, pero deben tener siempre presente, que trabajando solos, aislados, intuitivamente, desde el discurso hipotetico, sin una organización plasmada en un proyecto institucional compartido y acordado entre todos los involucrados, no ayudará a cambiar la sociedad. La esperanza no viene hecha, hay que construirla, y no se construye sin objetivos. “El gran poder mundial no ha encontrado aún la fórmula para destruir los sueños. Mientras no la encuentre, seguiremos soñando” BIBLIOGRAFÍA RECOMENDADA Las Instituciones educativas- Cara y Ceca – Frigerio – Poggi – Ed. TROQVEL. Desarrolla las dimensiones. Enfoca lo concerniente a la toma de decisiones, la delegación y la conducción de los equipos. El análisis de la Institución educativa. – Graciela Frigerio – Margarita Poggi – Ed. Santillana (1996 ) Aporte interesante sobre la mirada del “extranjero”. Laberinto pedagógico didáctico en las políticas educativas. Asteggiante – Lorenzo – Méndez - Ediciones IDEAS. (2007) Laberinto es el símbolo de la educación, es la imagen de la iniciación de la formación, del peregrinaje en el camino de la construcción de la profesión. La revolución contemporánea del saber y la complejidad social –Sotolongo – Delgado – Ed. Clacso (2006) Planteos interesantes en relación al Paradigma de la Complejidad, la Sociedad del conocimiento, y su incidencia en la Formación Docente. Aprender, sí. Pero ¿cómo? – Philippe Meirieu – Ed. Octaedro.(2002) Interesantes aporte sobre el camino didáctico, a partir del programa a desarrollar: El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 8 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 A – El primer procedimiento didáctico sería seleccionar las nociones esenciales a enseñar y cuál sería el umbral de comprensión de los alumnos. B –El segundo procedimiento sería transformar una noción núcleo en una situación problema y proporcionar a los alumnos materiales a manejar. C – El tercero, sería elaborar herramientas que permitan insertar en la dinámica de la situación problema, las adquisiciones necesarias en función de la dificultad encontrada. D – El cuarto sería identificar las adquisiciones mediante la reformulación, la transposición y la evaluación. Didáctica – Guadalupe Vadillo y Cynthia Klingler – Ed. Mc Graw Hill (2004) Reflexión acerca de qué tipo de práctica docente es la más adecuada. Reimers, argumenta que ella debería contribuir a desarrollar profesionales con capacidad de juicio crítico; con conocimientos del desarrollo intelectual, emocional y social de los niños; con buena comunicación con niños y familias, así como con sus compañeros de trabajo. Advierte del riesgo de que el practicante quede atrapado entre el maestro que lo supervisa (director) y el maestro del grupo a que fue asignado. Estrategias didáctica innovadoras – Saturnino de la Torre y Oscar Barrios – Ed. Octaedro – Estrategias a considerar en una organización educativa. Ediciones Novedades Educativas. Julio 2007 Repensando los bordes de la formación docente Miguel Ángel Duhalde - Magíster en Metodología de la Investigación Científica, docente de la provincia de Santa Fe ¿Será posible pensar en la construcción de un sujeto diferente al concebido en los últimos tiempos con relación a la formación de los docentes? La invitación es a cambiar el eje, proponer una pedagogía verdaderamente crítica, pensando en un sujeto ni oprimido ni opresor, en un hombre nuevo liberándose permanentemente, enseñando y aprendiendo al enseñar. Lo que le queda entre los dedos a un maestro viejo Alfredo Gadino uruguayo, maestro, especialista en didáctica de la matemática, fundador de la editorial Aula y editor de la revista La educación del pueblo. El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 9 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 El esconder las dudas con respecto a la profesión que vivimos, o el repetirnos palabras que enmascaran la realidad, no nos va a ayudar. Sin desesperación, pero también sin liviandad, nos preguntamos: ¿es poco lo qué podemos los maestros? ¿Está bien lo qué hacemos? ¿Cómo saber qué va a quedar en nuestras manos si aún estamos con ellas abiertas, esperando? ¿Qué seres querían formar los maestros de la década del 40 y en qué se habían transformado sus alumnos treinta años después? ¿Qué seres queríamos formar los maestros de 1980 y a qué distancia están los jóvenes de hoy de aquel sueño? Respirar, suspirar y transpirar la escuela. Ruth Harf – Licenciada en Ciencias de la Educación y en Psicología (UBA). Soñar con lo utópico no es delirio, es tener horizontes que dan una dirección y permiten ver dónde estamos y hacia donde podríamos dirigirnos. Hablamos de lo que sigue siendo preocupante porque ése es justamente nuestro mayor mérito: nos damos cuenta de lo que hicimos y hacemos, estamos decididos a mantener y a cambiar, adelantamos y siempre hay más para hacer. No sólo construimos un conocimiento de la realidad educativa, sino que construimos la misma realidad educativa. No sólo estamos en la zona de desarrollo potencial de nuestra propuesta educativa, sino que tratamos de ampliar cada vez más la zona de desarrollo real de la realidad educativa. No sólo consideramos que la realidad educativa es importante, sino que tratamos de que sea cada vez más significativa para nosotros y la sociedad entera. - Aprendizajes escolares – Nora Emilce Elichiry Ed. Manantial Concepto de institución – Una palabra, muchos significados. La institución educativa y su compromiso con la sociedad. Revista Conversación – N° 3 – Julio 2003 . Artículo: Didáctica, Investigación práctica y formación docente.. Prof. de Historia Ana Zavala. Interesante aporte sobre la formación de docentes. Artículo: Contenidos y formas de estudio de “lo didáctico” Prof. y Maestra Elba Bertoni . Revista Conversación – N° 19 – Julio 2007 . Artículo De la subversión del dogmatismo al desarrollo del pensamiento complejo Gloria Fariñas León. Licenciada en Psicología – Cuba - En la educación ha reinado por bastante tiempo el paradigma de la simplificación., que comprende visiones fragmentarias, y fundamenta la necesidad de una epistemología de la complejidad, dada la naturaleza compleja de la realidad. También advierte de los riesgos de las generalizaciones y del desprestigio docente como profesional. El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 10 CÁTEDRA YOLANDA VALLARINO – 2007 El Grito Manso – Paulo Freire – Ed. Siglo XXI (2006) Interesante semblanza del autor en su última visita a la Universidad de la Patagonia “Hablar en difícil o en negativo es otra forma de exclusión” Introducirse en los laberintos del conocimiento ensancha el horizonte del mundo, permite recuperar la dignidad y construir la esperanza. Necesito de los otros, por eso puedo entender que los otros necesiten de mí. La curiosidad, es junto a la noción del inacabamiento, el motor esencial del conocimiento. No es posible andar sin la esperanza de llegar. La tarea fundamental de los educadores y las educadoras, es vivir e éticamente, practicándola diariamente. No hay inmovilismos en la historia, siempre hay algo que podemos hacer y rehacer. En palabras sencillas, la tarea del educador es enseñar y la del alumno es aprender. “quien enseña, aprende al enseñar y quien aprende, enseña al aprender” Cambiar es difícil pero es posible. Enseñar no es transferir contenidos de la cabeza del profesor a la cabeza del alumno, sino que es posibilitar que los alumnos, desarrollando su curiosidad y siendo críticos, construyan su conocimiento. Nuria Pérez Maestra Psicóloga Social El director de Escuela de Práctica como supervisor Nuria Pérez Página Nº 11