Factores económicos, políticos y sociales de Francia

Anuncio
Factores económicos, políticos y sociales
de Francia que favorecieron el surgimiento
y posterior evolución del Partido
Frente Nacional
El proceso de globalización de las relaciones
económicas y políticas internacionales
La dinámica de desarrollo de la economía francesa,
a partir de 1945, se corresponde, en sentido general, con la seguida por el sistema de producción capitalista en los países altamente desarrollados. De
1945 a 1975, la economía gala gozó de un espectacular e ininterrumpido período de crecimiento.92
Como en la mayoría de los países euroccidentales, la política económica aplicada por las autoridades galas a partir de 1945 se sustentó en la teoría
económica burguesa del capitalismo regulado. Durante el período de aplicación de este modelo de
desarrollo económico, la esfera de los servicios igualó y superó en importancia a su predecesora la industria. El mercado laboral se caracterizaba por la
existencia del pleno empleo.
En cambio, a partir de las crisis estructurales del
sistema capitalista de producción, verificadas entre
1973 y 1975 (shock petrolero), la realidad francesa
sufre cambios importantes.
Como puede apreciarse en el tríptico estadístico
que recogen los gráficos 4, 5 y 6, el año 1974, marca
92 En este período, el producto interno bruto francés creció
como promedio 4,2 % anual. En la historiografía tradicional francesa el período de crecimiento económico que abarcó los años 1945-1975, se conoce con el nombre de “los
treinta gloriosos, los tiempos del milagro económico”. Ver
L’Histoire no. 192, París, 1995, pp. 22-42.
94
el inicio de la desaceleración de una economía francesa, que muestra algunos indicadores macroeconómicos deteriorados (desempleo e inflación),
denotando que las formas de hacer en el capitalismo
debían cambiar. En este caldo de cultivo comienza a
dar sus primeros pininos el Frente Nacional, aprovechando los costos sociales de la crisis económica.
Es decir, la economía francesa responde a los imperativos de la globalización de las relaciones capitalistas de producción por lo que, a nivel nacional, se
traducen en la instrumentación de un proceso de
redimensionamiento total de la economía.
Al cambiar el paradigma tecnológico y el de eficiencia —a niveles macro y micro— la economía
gala se rigió, desde entonces, por criterios políticos
y modelos de desarrollo económicos sustentados en
la filosofía neoliberales93 aplicadas a escala global.
Este ajuste estructural, asistido por la Revolución
Científico-Técnica, se caracterizó, por una parte, por
el déficit en la generación de empleos y, por otra,
por la rápida devaluación, condicionada por las altas tasas de innovación tecnológica, de grandes sectores de trabajadores industriales. Paralelamente, se
verifica el empobrecimiento de los pequeños industriales surgidos durante el período de “los treinta gloriosos”. Entre 1975 y 1988, el 18 % de las 36 000
comunas francesas han visto desaparecer los tradicionales pequeños negocios —panaderías, carnice93 Resulta interesante conocer que independientemente de la
tendencia de los partidos que gobiernan Francia en los períodos (1974-1981) y (1981-1995), en rigor, desde 1976,
la política económica aplicada se fue nutriendo gradualmente de los postulados de la escuela neoliberal. Ver “Les
délices du libéral-socialisme”, en revista L’Histoire,
no. 143, 1991, p. 38.
95
rías, farmacias, zapaterías, etcétera— ante el empuje de los grandes super e hipermercados. Los reajustes que exigieron a la economía francesa, los
imperativos de eficiencia y la Revolución Científico-Técnica, determinaron que al finalizar, en 1988,
el primer mandato de Mitterrand, desaparecieran un
millón de puestos de trabajo.94
La realidad económica francesa ha generado una
situación en la que los obreros y pequeños propietarios, perdedores con los cambios estructurales que
impone el proceso de globalización, son atraídos por
un discurso Lepenista (ver gráfico 7) que critica fuertemente la gestión de gobierno de los partidos políGRÁFICO 4
CRECIMIENTO DEL PRODUCTO INTERNO
BRUTO EN FRANCIA
1990
19
199
19
19
196
19
19
191
19
190
190
1960
190
%
F UENTE: G. Mermet, Francoscopie, Larousse, París, 1986, p. 212;
J. Becker: “Le socialisme a-t-il changé la vie?”, en L’Histoire,
no. 143, 1991, p. 23
94 J. Becker: ob. cit., p. 24.
96
GRÁFICO 5
TASA DE DESEMPLEO DE LA POBLACIÓN
ACTIVA
12,0
10,
10,
10,0
,0
,
10,2
,1
10,0
,
,1
,
,0
,0
,0
,
1,
1990
19
199
19
196
19
19
19
19
19
19
190
2,0
1960
2,0
2,0
FUENTE: J. Becker: ob. cit.; A. Le baubei: “Le Chômage est devenu un
outil de gestion”, en L’Etat de la France, 1992, p. 39;
J. Marseille: “Autopsie des annés de croissance”, en L’Histoire,
no. 192, 1995, p. 28.
GRÁFICO 6
INFLACIÓN DESDE LOS AÑOS 70 HASTA
LOS 90 EN FRANCIA
1992
199
19
19
19
192
19
197
197
197
1972
%
FUENTE: J. Becker: ob. cit.
97
ticos galos. Por esta situación no es casual que el
Frente Nacional sea el partido francés que más obreros tiene entre su clientela electoral.95
Se piensa que las circunscripciones electorales que
coinciden con la ubicación geográfica de los sectores obreros y pequeños propietarios —departamentos de Rhin, Isère, Jura, Marne, Vosges, Aube,
Mayenne, Eure, Somme, Pas-de Calais, SeinneMaritime, Vendée—, afectados por la reconversión
industrial, ha sido y continuará siendo potencialmente una oportunidad política para el Lepenismo.
Una de las implicaciones del proceso de globalización de las relaciones económicas y políticas internacionales lo constituye la gradual desaparición
del Estado-Nación. En este contexto, los estados
europeos ceden parcelas de soberanía a instituciones de alcance supranacional. Francia no está ajena
a los cambios que impone la Unión Europea al Estado. Las implicaciones de la integración europea con
la existencia de la moneda única conllevan a la armonización de la políticas financiera, presupuestaria y fiscal francesas con la de la Unión, es decir,
cambios en los impuestos y tasas, protección social,
política salarial, de empleo, del mercado laboral,
etcétera.
Lo anteriormente expuesto adquiere mucha importancia para comprender la realidad francesa, si se
sabe que las dimensiones alcanzadas por el Estado
galo durante la Quinta República han sido, sin dudas, mayor que las del resto de los países europeos
occidentales. Hoy, este Estado se rediseña constan95 No debe olvidarse que el sector secundario representa el
29 % del PIB de Francia (año 1994), ver Nathan: ob. cit.,
p. 80.
98
temente, lo que implica que se despoje de algunas
funciones y asuma otras en un contexto neoliberal
inmerso en un acelerado proceso de integración continental, lo cual genera, a nuestro juicio, un marcado vacío de identidad nacional.
Los debates en el seno de la sociedad francesa tienen, en el concepto “identidad nacional”, un lugar
preponderante. Este concepto se vincula con lo “verdaderamente francés” y la inmigración no europea.
Hoy los franceses reconocen que su país no es la
gran nación que fue antaño. En el campo de las relaciones políticas internacionales, la diplomacia francesa, aunque lo intenta, no se caracteriza por
desempeñar un papel notable, la lengua francesa pierde cada vez más espacio en la vida científica, cultural e intelectual ante la hegemonía de la lengua
99
inglesa. La soberanía nacional, para muchos, está
afectada por el proceso de integración europeo porque muchas de las más graves y trascendentales decisiones no se toman en el hotel Matignon o en el
palacio del Eliseo, sino en los pasillos de Bruselas.96
Tres encuestas electorales del CEVIPOF,97 llevadas
a cabo en 1978, 1988 y 1995, demuestran cómo se
ha ido creando, en torno al concepto vacío de identidad nacional, las condiciones propicias para el avance del Partido Político Frontista.
Los resultados más importantes que arrojan las
investigaciones son los siguientes:
• Tanto en 1988, como en el 1978, el orgullo de ser
francés es un sentimiento que de forma generalizada manifiesta la población francesa. En 1978,
habían 10 puntos de diferencias entre los simpatizantes de Le Pen y los partidarios de la UDF y el
RPR, en lo que respecta al reconocimiento del
papel del Estado. En cambio, el año 1988, muestra que los seguidores del Lepenismo no están ni
más ni menos orgullosos de ser francés que los
votantes de Jacques Chirac. Lo que los distingue
96 Para un estudio más profundo acerca del debate sobre la
“identidad nacional” francesa ver M. Wieviorka: “Montée
du Populisme xenophobe et crise de l'identité nationale”,
en L'Etat de la France, 1992, Editorial La Decouverte,
1992. Ver también J. Chirac: “Mes priorités diplomatique”,
en Politique International, no. 77, Automme, 1997, p. 9.
97 Las encuestas fueron aplicadas durante las elecciones legislativas de 1978 y las presidenciales de 1988 y 1995, a
una muestra representativa de la población total francesa
(n = 4 507, 4 032 y 4 097). Los cuestionarios fueron diseñados para determinar el sentimiento de orgullo de ser francés, en tanto variable que en su trasfondo comportamental,
está vinculado con la actuación del Estado y la identidad
nacional.
100
radicalmente, no es tanto la valorización del grupo de referencia o nacionalismo positivo, como el
temor de los lepenistas, por diversas razones de
tipo económicas, políticas y sociales, a lo diferente (no nacional) o nacionalismo negativo.
• Durante el segundo mandato de François
Mitterrand (1988-1995) y como resultado del proceso de globalización, la integración de Europa occidental ganó en importancia. Con el referéndum
para la aprobación del tratado de Maastricht, se
suscitó un profundo debate acerca de las ventajas
e inconvenientes de la Unión Europea.
En este contexto, la encuesta de CEVIPOF (cuadro 11 ) permite evaluar la fuerza relativa del sentimiento nacional y del sentimiento europeo.98
Como se muestra en el cuadro 11 constituye una
ínfima minoría la que se define como más europea
que francesa. La respuesta más frecuente (36 %)
implica la doble pertenencia, en una situación de
igualdad. La mayoría de los encuestados (58 %) se
define como francés más que ciudadano de Europa
y de ellos la mitad como exclusivamente francés
(29 %), siendo su actuación coherente en todos los
otros indicadores concernientes a Europa.
Los politólogos y sociólogos del CEVIPOF aseguran que muchos de los encuestados que se definen como más francés que europeo y como
98 Antes de la firma del tratado de Maastricht, en la sociedad
francesa no existía contradicción entre ser francés y ser
europeo. Es solamente después de 1992, con la concretización del proceso de integración europeo, que se desarrolla
en algunos sectores de Francia un europesimismo, que
enfrenta el sentimiento de pertenencia nacional y el de pertenencia a Europa.
101
exclusivamente francés, muestran cierta degradación
del valor “nacional”es decir, para muchos franceses
no se puede sentir orgullo de “un país que ellos perciben como cosmopolita, multinacional e invadido
por inmigrantes”.99
CUADRO 11
SENTIMIENTO DE PERTENENCIA
A FRANCIA Y A EUROPA (1995)
(en %)
Usted personalmente se siente:
Solamente francés
Más francés que europeo
Tan fránces como europeo
Solamente europeo
Ni francés ni europeo
Sin opinión
29
29
36
1
2
1
F UENTE: N. Mayer: “La fierté d’ être français, de l’independance
algérienne à Maastricht”, en L’année sociologique, vol. 46,
no. 1, 1996, p. 162.
• Una posición inferior en la estructura socioprofe-
sional y un cambio radical en las condiciones de
trabajo y de existencia, son factores generadores de
frustración y de angustia social. Por ello, ante la
incertidumbre que genera el proceso de integración
europeo —desempleo, mercado laboral exigente,
alza de impuestos, etcétera— y la evidente incapacidad del Estado para proteger a sus nacionales,
condicionan, en estos sectores poblacionales, una
erosión en el sentimiento de orgullo nacional.
El análisis de las encuestas del Centro de la Vida
Política de París permite comprender cómo el vacío de identidad nacional, existente en algunos sec99 N. Mayer: ob. cit., p. 155.
102
tores de la sociedad francesa, está estrechamente
vinculado con el proceso de integración europeo,
producto y negación de la globalización.
Ahora bien, es válido aclarar que en referida desvalorización del sentimiento de identidad nacional
en el país europeo, ha desempeñado un papel determinante la existencia del importante flujo de inmigrantes procedentes principalmente de las antiguas
colonias de Francia.
La existencia de estos y otros muchos factores
permiten comprender cómo en Francia, nación
monoestatal, se ha desarrollado un nacionalismo de
tipo cultural,100 presente en amplios sectores sociales del país galo. Esta realidad es aprovechada de
forma inteligente y oportunista por los ideólogos del
Partido Político Frente Nacional.
La agenda lepenista aborda los problemas más
acusiantes de los franceses de forma oportunista; por
lo que para ellos “Francia como nación está en peligro de muerte; la amenaza nos viene de Europa”.
Partiendo de ese mito, convocan a los obreros, jóvenes y desempleados a actuar consecuentemente con
la idea (mitologema) de ser “Francés primero”, porque el seno de la "Nación es el único refugio protector ante los males procedentes del exterior”.
Crisis del Sistema de Bienestar General
Se sabe que a partir de la aguda crisis económica del
sistema capitalista mundial (1973-1975), en la sociedad francesa ocurrieron cambios importantes. Su
100 Ejemplo de lo que se denomina “nacionalismo cultural”
es “el orgullo de ser francés”, justificándolo a partir de
valores como la cultura, la religión y la tradición.
103
economía y la teoría que sustentaba la política económica, aplicada hasta entonces, entraron en crisis.
Como resultado de las nuevas formas de hacer y
de la implementación de políticas económicas neoliberales que persiguen la eficiencia macroeconómica, en el contexto francés se fue verificando la
presencia creciente de fenómenos como el desempleo masivo, el empobrecimiento —relativo— de
amplios sectores sociales y el aumento de las exigencias del mercado laboral, cada vez más
internacionalizado que, lógicamente generan temor
e incertidumbre en la población afectada y en los
amenazados por los cambios que impone el proceso de globalización. Esta realidad, sin duda alguna,
abona el campo que alimenta al Lepenismo.
Las afectaciones al Sistema de Bienestar Social
francés está condicionado por la imposibilidad de
su economía para destinar, como antaño, el 53,4 %
del producto interno bruto al gasto público (ver
anexo 4). Los imperativos de la integración europea
y la competitividad internacional obligan a los gobernantes galos a reducir los beneficios recibidos
por seguridad social.
A finales del ejercicio económico de 1997, Francia contaba con el 12,4 % de la población laboralmente activa desempleada, es decir, 3 244 600
personas. De esa cifra, el 37 % se ha visto privada
del subsidio de desempleo inicial luego de más de
un año sin laborar, recibiendo una insuficiente ayuda por parte del Estado. Como consecuencia, un
millón de desempleados recibe una pensión que sitúa su nivel de vida por debajo del umbral de la
pobreza.
Los sistemas franceses de asistencia al desempleado, conocidos como Assedec y Unedic, surgidos a
104
fines de los años 50, son cuestionados fuertemente
por su ineficacia.
El cuadro 12 muestra que el desempleo afecta fuertemente a los jóvenes menores de 25 años. De suyo
se entiende por qué los jóvenes conforman parte de
la clientela electoral del Partido Frente Nacional.
Para este grupo sociodemográfico su período de inserción en la vida laboral se ha prolongado, conociendo una serie de experiencias de intentos laborales
inestables hasta lograr una inserción más segura.
Como consecuencia de lo anterior, muchos jóvenes
se sienten parias de la sociedad francesa y canalizan
su frustración con el consumo de drogas, delincuencia juvenil y la abulia política.
CUADRO 12
COMPOSICIÓN POR EDAD Y SEXO DE LA
MASA DESEMPLEADA EN FRANCIA
Desempleados
1975
1980
1990
Hombres
2,8
4,2
6,7
Mujeres
6,1
9,4
12,0
De 15 a 24 años
De 25 a 49 años
8,9
2,9
15,0
4,3
17,1
7,9
Más de 50 años
2,7
4,6
8,5
F UENTE: Ministère des Affaires Sociales et de l’emploie, Bulletin,
París, 1992.
Según autores franceses los indicadores de nivel
macrosocial de Francia permiten apreciar que se
conserva un bajo por ciento de participación juvenil en actividades sociales y económicas. Simultá105
neamente, ha podido constatarse, en estos últimos
años, el crecimiento de la pasividad en algunos sectores de la juventud, frente a tareas de naturaleza
social y política; se ha producido una marcada heterogeneidad en el área subjetiva, en particular, en
cuanto a expectativas, valores y cultura política, lo
que se expresa en una diversidad de posiciones ante
la participación política, que van desde el compromiso activo hasta la pasividad o el descompromiso.
Para aprovechar esta situación el Lepenismo
cuenta con el denominado “Frente Nacional Juvenil” (FNJ). La atención que presta el Lepenismo a
la captación y posterior formación de los jóvenes
franceses puede apreciarse en el proceso de iniciación del joven frontista que atravieza por las siguientes etapas:
• Cadetes de Francia y de Europa (niños de 8 a 12
años de edad )
En esta etapa se le enseña a la joven clase los fundamentos del milintantismo. Luego de haber prestado juramento, el cadete debe prepararse “para
ser jefe algún día” y para conservar un “ideal ligado a la tierra, a la familia y a la patria”.
• Aventura y tradición (jóvenes de 13 a 18 años de
edad)
Es oficialmente un movimiento de juventud deportiva que tiene como guía el pensamiento de
Julius Evola sobre “las virtudes del exceso y del
espíritu de cordialidad”.
• Frente nacional de la juventd (a partir de los 18
años de edad)
Fundado en 1973 por Le Pen para compensar la
partida de los militantes de la Nueva Orden. El
106
FNJ es la organización política juvenil francesa
de mayor membresía.101 En el Instituto de Formación Nacional y Escuela de Cuadros del FNJ, la
joven guardia lepenista es puesta en manos del
partido para constituir una cantera de candidatos
creíbles para las elecciones locales.
Ahora bien, los cambios que sufre el Sistema del
Bienestar General francés no solamente afecta al
desempleado. El redimensionamiento a que ha sido
sometida la economía conlleva a la reducción de los
fondos destinados a la salud pública,102 la familia,
la educación y la vejez.
Es decir, el francés medio de hoy observa en su
realidad cómo se reducen los fondos públicos de
ayuda a las familias de menores ingresos. Muchas
de estas familias, en correspondencia con los cambios sociodemográficos de la población, son, en su
mayor parte, monoparentales encabezadas por mujeres solas o jefas de familia.
El resultado de la afectación del Welfare State, a
nivel de percepción social, es una creciente inseguridad ciudadana que naturalmente es aprovechada
por el Partido Frente Nacional de Le Pen.
Ejemplo de ello, es que, cuando en 1994 Le Pen
propuso a los políticos de izquierda y de derecha “la
instauración de un verdadero salario femenino que
brinde a la mujer francesa la libertad de escoger entre el trabajo y su presencia en el hogar”,103 estaba
101 Los miembros del FNJ alcanzaban en 1997 la considerable cifra de 15 000 franceses.
102 Según expresa la Doctora Legún, de la Universidad ParisDauphine, en 1996, el 25 % de los franceses renunciaron
a curarse sus dolencias físicas por no contar con suficientes recursos pecuniarios. Ver Project no. 242, p. 93.
103 Ver Le Monde Diplomatique, París, 15 de mayo de 1998.
107
tratando de influir en las mujeres en situación especialmente difícil.
Hoy en Francia, aunque se acepta la necesidad de
la reforma del generoso sistema de seguridad social,
se debaten en amplios sectores gubernamentales y
académicos, los criterios a seguir en tan polémico
asunto.
El derrumbe del socialismo en Europa del este
y la crisis de la cultura política francesa
El derrumbe del socialismo en los PECO
y la emergencia del Frente Nacional
El fin del proyecto social socialista en los PECO se
reflejó de forma negativa en el estado político y
moral de sectores importantes de las fuerzas más
progresistas y revolucionarias de Europa occidental
que, permeadas de pesimismo y de abulia política,
se replegaron del escenario político. En este contexto, el avance de las fuerzas ultraderechistas se vio
favorecido. En tal sentido, la izquierda francesa no
constituye una excepción.104 El partido Lepenista fue
beneficiado por las afectaciones que en la Izquierda
gala provocó el derrumbe del socialismo en los
PECO.
Sin embargo, en el caso del Partido Comunista
Francés (PCF), hay que decir que su crisis solo se
profundiza con el derrumbe del socialismo esteuropeo, porque, en rigor, los comunistas franceses
104 Hay que decir que por el perfil ideológico, la izquierda
Euroccidental además de los partidos socialdemócratas y
comunistas, puede incluir a partidos como los ecologistas.
En este epígrafe se utilizará el término "izquierda" para referirnos al Partido Socialista y al Partido Comunista Francés.
108
venían sufriendo cierto desgaste desde mucho tiempo atrás. La posición asumida por el Partido comunista en los acontecimientos de mayo de 1968 y el
desprestigio ocasionado por su línea ideológica
eurocentrista, es ejemplo de ello. Otro factor
condicionante de la crisis del PCF lo constituye, sin
dudas, la coalición política con el Partido Socialista
que posibilitó el triunfo de François Mitterrand en
los comicios celebrados en 1981.
Durante el “decenio Mitterrand” se verificó el debilitamiento del Partido Comunista y el ascenso de
la extrema derecha (ver cuadro 13).
Se considera que la “coincidencia histórica” de estos dos fenómenos están estrechamente vinculadas con
las transformaciones políticas y sociales que han afectado a Francia desde mediados de los años 70.
CUADRO 13
RESULTADOS ELECTORALES DEL PARTIDO
COMUNISTA Y DEL FRENTE NACIONAL
Elecciones/año
en % de sufragios
expresados
Partido Comunista
Legislativas 1978
20,6
Presidenciales 1981
15,5
-
Legislativas 1981
16,1
9,3
Europeas 1984
11,2
11,1
9,7
6,9
9,9
14,6
11,2
9,9
Legislativas 1986
Presidenciales 1988
Legislativas 1988
Europeas 1989
Legislativas 1992
Frente
Nacional
0,8
7,8
11,8
10,0
15,7
F UENTE: C. Ysmal, “Comunistes et Lepenistes: Le chassé Croisé”, en
L’Histoire, no. 143, 1991, p. 52.
109
Las encuestas electorales del CEVIPOF, comentadas en otro momento, reflejan cómo, si en 1978 la
percepción de un vacío de identidad nacional era
exclusivamente manifestado por los electores de
derecha; 10 años más tarde, el vacío de identidad
nacional es percibido también por los votantes del
Partido Comunista y del Frente Nacional 36 y 48 %
respectivamente.105
Con el impacto negativo del derrumbe del socialismo en los PECO y la crisis del la cultura política
francesa, el Partido Comunista Francés fue tributando electores desorientados y desmoralizados, al Partido Frente Nacional, que les vende un discurso
político pseudorrealista a los obreros, antigua clientela electoral de los comunistas. El Partido Socialista no puede ocupar el espacio político liberado por
la reorganización del PCF. Es en ese sentido, que el
derrumbe del socialismo en los PECO y la emergencia del Frente Nacional, sin responder al principio
de los vasos comunicantes, guardan relación.
La Crisis de la Cultura Política
Contemporánea francesa y la Emergencia
del Partido Frente Nacional
La referida crisis de la cultura política francesa afecta
simultáneamente a los electores, al Estado y a los
políticos. Las manifestaciones de la crisis existente
en la cultura política francesa son múltiples, pudiéndose apuntar desde, el crecimiento del abstencionismo electoral, la desindicalización de los asalariados,
hasta la vertiginosa degradación de la imagen de la
clase y de las organizaciones políticas.
105 N. Mayer: ob. cit.
110
La tríada componente de la crisis de la cultura
política contemporánea se manifiesta en todo el sistema de relaciones de la sociedad francesa en la:
1. Crisis de identidad que afecta a los actores políticos franceses —ver anexo 6, principalmente aquellos que han ejercido un mayor protagonismo
histórico como UDF, RPR, PS y PCF— que
desfasados, no satisfacen las demandas y expectativas de las actuales masas electorales.
El modelo organizacional que prevalece todavía
en muchos de los partidos políticos es antiguo, data
de fines del siglo XIX. Es por ello que, como actores
políticos son portadores de modelos de participación
característicos de la vieja política: participación electoral regular y militantismo tradicional.
Como se refleja en la señalada encuesta del
CEVIPOF, el 33 % de los franceses encuestados, no
encuentran diferencias entre la izquierda y la derecha, evidenciándose una despersonalización de los
partidos políticos que, a nuestro juicio, está estrechamente vinculada a la imagen corporativa que los
franceses perciben en los programas políticos. En
los cuadros 14, 15 y 16 se realiza un análisis comparativo de la izquierda y la derecha galas.
El análisis de los cuadros 14, 15 y 16 permite comprender cuán difícil se hace definir qué es izquierda
o derecha en el escenario político francés, porque
las diferencias entre el Partido Socialista y la
UDF- RPR no son grandes, sobre todo en el ejercicio del poder. El Partido Socialista en su retórica
electoral, utiliza un discurso que aboga por la aplicación de medidas de beneficios sociales que, dadas
las circunstancias económicas, son inviables y provocan su desgaste ante las masas electorales. En el
111
orden económico, la izquierda y la derecha francesas se rigen por los postulados de la escuela económica neoliberal en boga.106
Lo anteriormente expuesto, genera la crisis de identidad que presentan los actores políticos franceses
con sus bases electorales. Esta crisis es aprovechada a su favor por el Partido Político Frente Nacional
que, no desgastado por el ejercicio del poder, utiliza
un programa —discurso integrado por mitos—
mitologemas que reflejan la realidad de Francia.
Sobre la base de su:
•
•
•
•
Posición antinmigrante.
Descalificación de la Unión Europea.
Crítica al status quo político.
Liberalismo económico hacia el interior de
Francia.
El programa lepenista, basado en los temas anteriormente relacionados —y con la correspondiente
actualización que impone la realidad objetiva—,
se refiere a:
• Lograr políticamente que se derogue la legislación
francesa que condena el racismo, la discriminación y el odio racial.
• Seguridad en las escuelas.
106 Al respecto, Chantal Mouffe considera que “La distinción
entre la izquierda y la derecha ya no tiene razón de ser, por
cuanto estaba anclada en una bipolaridad social que ha
desaparecido. El deslavazado consenso en torno al centro
ha generado un vacío político, responsable en parte del
fortalecimiento de la extrema derecha”. Ver Ch. Mouffe:
ob. cit., p. 25.
112
• Reformar la constitución para incluir en su articu-
•
•
•
•
•
•
lado el concepto de “preferencia nacional”, es decir, la prioridad de los franceses en materia de
empleo, subsidios familiares o cualquier otra ayuda social, con excepción de la asistencia médica.
Salida de Francia de los extranjeros en situación
ilegal.
Regulación a la entrada de inmigrantes.
Nacionalizar a los niños nacidos de parejas en las
que al menos uno de los padres sea francés. La
naturalización estará condicionada a factores como
el conocimiento suficiente de la lengua francesa y
las instituciones de la República, entre otras.
Creación de un salario mínimo, además de un salario materno o en caso extremo paterno.
Restablecimiento de la pena de muerte.
Oposición al tratado de Maastricht, supresión del
impuesto sobre la renta y la creación de tasas aduaneras para frenar las importaciones.
Así, el Frente Nacional se presenta como “la gran
alternativa” frente a los partidos tradicionales. Llamamos la atención sobre cómo el programa del Partido Frente Nacional ha sido despojado de aquellas
ideas, palabras y elementos semánticos extremistas
de otrora como: “repatriación forzada de los inmigrantes” o “luchar por la rehabilitación política del
general Pétain”. Es decir, el programa Lepenista
está más en correspondencia con los requerimientos de las masas electorales, pudiendo lograr con
ello el mejoramiento de la imagen social percibida
de los ultraderechistas.
No obstante, la simple lectura de los contenidos
del programa permite apreciar que está conformado
por objetivos contradictorios entre sí.
113
CUADRO 14
IDENTIDAD CORPORATIVA DE LA IZQUIERDA
FRANCESA
Actor político
Caracterización
Partido Comunista
Francés
(PCF)
Fundado en 1920. Su liderazgo actual
lo encabeza Robert Hue. Organización
marginada políticamente y con una imagen corporativa negativa, que se trata de
mejorar transformándose de forma gradual en un actor político más moderno
y menos radicalizado en su posición política e ideológica
Programa político: aboga por medidas
de corte social, critica el neoliberalismo.
Partido Socialista
(PS)
Fundado en 1975 (Epinay). Adscripto a
la Internacional Socialista, partido paradigmático de la denominada “izquierda gala”. Protagonista de la política
francesa en los últimos 20 años. Conformado por empresarios, políticos tradicionales, que llevan años en la
dirección del Partido Socialista, grupos
de profesionales, membresía heterogénea.
Programa político: Estrategia económica neoliberal que lo desgasta en el ejercicio de gobierno. Aboga por políticas
sociales que minimizen el impacto de la
política económica neoliberal.
Ecologista
Organización de reciente creación. Gradualmente ha ido ganando espacio político. Conformado básicamente por
profesionales, trabaja en la actualidad en
el fortalecimiento de la cultura ecológica
de los franceses. Programa político: Aboga por la aplicación de medidas de beneficio social. Su papel en el escenario
político francés, está determinado por las
alianzas que pueden establecerse en la segunda vuelta de las elecciones.
114
CUADRO 15
IDENTIDAD CORPORATIVA
DE LA DERECHA FRANCESA
Actor político
Caracterización
Unión para
la democracia
Francesa
(UDF)
Representa a la llamada “derecha tradicional”. Vinculado estrechamente al
ex-presidente francés V.G. D’Estaing.
Definición Ideológica: durante los últimos 25 años ha unido sus fuerzas con
el RPR. Actualmente es un partido desgastado que necesita renovación.
Programa político: neoliberalismo en
el área económica, lucha contra la inseguridad y el desempleo.
Reagrupamiento para
la República
(RPR)
Fundado en 1976 por J. Chirac, político tradicional que recuerda al general
De Gaulle.
Programa político: Neoliberalismo en
el área económica, lucha contra el desempleo. Utiliza un discurso populista,
la diferencia básica con UDF, no es en
la identidad corporativa que presentan
sino en la geografía electoral.
Conformado por: empresarios, jóvenes,
profesionales.
2. Crisis de representatividad, que las masas electorales francesas tienen con los mecanismos del
sistema de poder, condicionados por el desgaste
de los partidos políticos tradicionales y por los
importantes cambios que se han sucedido en la
estructura socioclasista francesa.
En realidad, ¿cuál de los partidos políticos tradicionales de Francia representa a los obreros industriales que conforman el 20 % de la población
laboralmente activa?
115
CUADRO 16
COMPARACIÓN ENTRE LA IZQUIERDA
Y LA DERECHA FRANCESAS
Semejanzas
• Diseño organizacional
Diferencias
• Retórica electoral
• Marketing electoral
• clientela electoral
• Praxis política: aplicación de
políticas de corte neoliberal
• Desgaste político por escándalos
• Oportunismo político
• Partidarios de la Unión Europea
¿Qué político u organización política ofrece soluciones a los jóvenes en edad de inserción laboral
que el exigente mercado de trabajo no recibe?
¿Qué partido político plantea cerrar las fronteras
económicas francesas (barreras a la importación)
para conjurar la amenaza exterior que pende sobre
el importante campesinado francés?
Estos grupos y sectores sociales de Francia no se
ven representados políticamente, por lo que constituyen el campo abonado para una política lepenista
que ofrece soluciones simplistas a sus problemas y,
como se sabe, el elector medio francés no vota por
un partido u otro, sino por aquel que ofrece soluciones a sus problemas aunque sea a nivel de discurso.
3. Crisis de legitimidad y de institucionalidad de los
sistemas políticos y electorales franceses.
116
Como parte de la crisis de la cultura política francesa, se debate la “legitimidad” de un sistema electoral diseñado a fines de los años 50, para perpetuar
en el poder la figura del general Charles De
Gaulle.107 En este contexto jurídico es realmente
difícil que algún partido pequeño acceda al poder.
Lo inadecuado del sistema electoral francés ante los
cambios acaecidos en la sociedad contemporánea se
pueden analizar a partir de dos situaciones, reflejo
de la crisis de legitimidad y de institucionalidad:
• Comportamiento oportunista de los líderes de los
partidos tradicionales franceses que con la intención manifiesta de frenar el avance electoral del
Frente Nacional, los líderes del Partido Socialista y del Partido Reagrupamiento para la República proponen la modificación de la constitución,
o, con las miras puestas en llegar al electorado
lepenista, líderes de la UDF y de RPR, proponen
pactos y/o alianzas estratégicas con el Frente
Nacional.
Se considera que ese proceso de “acercamiento” de la derecha francesa al partido Frente Nacional (1997) estuvo estrechamente vinculado con
107 En rigor, el actual sistema electoral francés data del año
1951 cuando se reemplazó el principio de la representación proporcional, por el sistema mayoritario a dos vueltas. Con este sistema, el partido o bloques de partidos por
el cual votan más de la mitad de los electores recibe todos
los mandatos del distrito dado. Si ningún partido alcanza
la mayoría absoluta, se realiza una segunda vuelta en la
cual se considera vencedor al candidato que reciba el mayor número de votos. En este contexto, los partidos que en
la primera vuelta actúan como adversarios entre sí, en la
segunda vuelta pueden unirse para alcanzar más votos y
aumentar las posibilidades de formar gobierno.
117
la figura del señor Bruno Mégret, entonces delegado general del Partido Frente Nacional (fue
militante del RPR hasta principios de los años 80,
doctorado en la Universidad de Berkeley, los Estados Unidos). El año 1999 fue testigo de la exacerbación de las contradicciones en el liderazgo
del partido frontista que dio como resultado la
separación (por qué no exclusión) de Mégret del
Frente Nacional y el desprendimiento de la facción “menos conservadora”.
• Comportamiento de las masas electorales: por la
crisis de representatividad, que sufren las masas
electorales, se observa un crecimiento de las cifras de abstencionismo y de abulia política.
En resumen, esta compleja situación ha favorecido el avance del Partido de Jean-Marie Le Pen. En
los comicios legislativos celebrados en 1997 hubo,
por primera vez, un real acercamiento entre la derecha (UDF) y el Lepenismo. Es decir, el Frente Nacional, es un actor político que se ha legitimado en
las urnas. Por eso se coincide con Chantal Mouffe,
cuando, refiriéndose al éxito del Partido Frontista,
considera que “continuar creyendo que no representa sino al voluble voto de protesta y que carece de
una base sólida es incurrir en una falta de visión
política que cada vez se hace más patente. No se
trata además de una tendencia política que puede
frenarse mediante condenas judiciales ni denuncias
morales. Sin atacar las raíces del descontento popular, nadie podrá invertir esa tendencia”.108
El cuadro 17 muestra que la inmigración y la
seguridad constituyen los temas más importantes que
movilizan a los electores del Frente Nacional (67 %
108 Ch. Mouffe: ob. cit., p. 28.
118
y 65 %, respectivamente) en los comicios legislativos
celebrados en 1997. El programa político del
Lepenismo, siempre “ha tenido entre el 40 % y el
60 % de su contenido estructurado en torno a la inmigración”.109 Se piensa que esa reiteración no es
fortuita, todo lo contrario, esta es reflejo de que el
debate en el seno de la sociedad francesa se ha
transformado.
CUADRO 17
MOTIVACIONES DE VOTO
DEL ELECTORADO DEL FRENTE NACIONAL
EN 1997
Motivación del voto
Por ciento
Inmigración
Seguridad
Empleo, desempleo
Desigualdades sociales
Protección social
Crisis de la cultura política
Educación
Proceso de integración europeo
Crecimiento de la economia
Medio ambiente
Asuntos feministas
67,9
65,0
60,0
26,0
26,0
26,0
21,0
15,0
11,0
9,0
8,0
6,0
Lucha contra el racismo
F UENTE: N. Mayer: “Du vote Lepeniste au vote frontiste, en Revue
Française de Science Politique, Presses de Sciences PO,
vol. 47, nos. 3-4, París, 1997.
109 R. Rosso: “Le Marketing du Front National” en L'Express,
13 de diciembre de 1997.
119
En un primer tiempo, en Francia los conflictos
sociales siempre giraban alrededor de una figura
central: el movimiento obrero. Durante los “Treinta
Gloriosos” la mano de obra extranjera contribuyó a
la reestructuración y al crecimiento económico del
país galo. No obstante, con los cambios tecnológicos y socioclasistas, asociados a la Revolución Científico-Técnica, a partir de la segunda mitad de los
años 70, la realidad francesa se transformó, no requiriendo, al parecer, la mano de obra extranjera.110
Como consecuencia del fin de la guerra fría, de las
implicaciones del proceso de globalización de las relaciones económicas y políticas internacionales y de
los problemas autóctonos de Francia, los debates en
esta sociedad tienen en la inmigración el tema central.
Desde entonces, la inmigración ha sido percibida
no sólo en términos de trabajo y de posición inferior
en los asuntos sociales, sino en términos de identidad nacional.
Como puede apreciarse en el cuadro 18 el 60 % de
la inmigración de Francia proviene de países europeos. Este numeroso grupo de inmigrantes de origen portugués, italiano, español, polaco, y yugoslavo,
es “tolerado y aceptado” por la sociedad francesa,
considerando su capacidad y posibilidad de “asimilación” a la cultura y sociedad gala.
110 Aún está por demostrar la importancia que tiene la presencia extranjera en el sistema productivo francés, que
estructuralmente consta de un estratégico y poderoso agro,
el cual demanda un alto componente de mano de obra.
Otro elemento de análisis lo puede constituir la relación
entre el bajo crecimiento natural de la población gala y el
desarrollo económico del país. Como se conoce, el crecimiento de la población francesa no está vinculado con la
natalidad, sino con el envejecimiento de la población y
con la entrada de inmigrantes.
120
Bien diferente es la óptica de los franceses respecto de la inmigración que proviene de sus antiguas colonias.111 El 30 % de la inmigración proviene
de la región del Magreb y se percibe como portadora del Islam, religión y cultura que en el contexto
francés se considera como anticultura y fanatismo
vulgar. Se considera que la criminalidad y el sentimiento de inseguridad en Francia está estrechamente vinculado con los inmigrantes, en tanto, son los
portadores de todos los males sociales, incluyendo
la destrucción de la cultura nacional.112
Por otra parte, el sistema político e institucional
ha reforzado el referido debate, sobre la identidad
nacional francesa, al trasmitir por doquier la nostalgia chovinista por la época en la que Francia era una
potencia hegemónica, que imponía sus paradigmas
por el mundo.113
111 En 1990 la población inmigrante no europea (2 225 000)
de Francia presentaba una tasa de desempleo dos veces
más alta que la de los franceses. El 70 % de los inmigrantes están caregorizados como oberos. Desde el punto de
vista sociodemográfico, el 56 % son hombres y, del total,
el 55 % no rebasan los 40 años de edad. El 68 % de esa
población no es portador de titulación que acredite nivel
superior al de la enseñanza media. Ver M. Wieviorka, “Être
emigré”, en L’Etat de la France, Editora la Découverte,
1992, p. 122.
112 El estudio realizado por IPOF/Le Monde el 20-21 de septiembre de 1994, en una muestra representativa de la población francesa mayor de 18 años de edad (n= 936) arrojó
que el 67 % de la población asimila al Islam como fanatismo, el 51 % como contrario a los valores occidentales y el
36 % portador de violencia. Ver N. Mayer: ob. cit, p. 157.
Se considera oportuno recordar cómo el Partido de Le Pen
aprovechó a su favor la serie de atentados en el “otoño
caliente” de 1995 achacados a los fundamentalistas
islámicos.
113 J. Chirac: ob. cit., p. 9.
121
CUADRO 18
ORIGEN DE LA POBLACIÓN INMIGRANTE DE
FRANCIA (1969)
País o zona
geográfica
de origen
Población
% respecto al
total de inmigrantes
Portugal
657 000
16,7
Italia
España
Polonia
Yugoslavia
250 000
200 000
640 000
503 700
6,2
5,0
13,0
12,6
Total europeos
2 160 700
54,1
Argelia
Marruecos
Túnez
620 000
400 000
170 000
15,5
10,0
4,2
Total magrebinos
1 090 000
29,7
142 000
3,6
40 000
1,0
Indochios
101 000
2,5
Otros
366 300
9,2
Total
4 000 000
África Subsahariana
Turquía
FUENTE: C.Ysmal: ob. cit.
En este fértil contexto, emerge triunfadora, la figura de Jean-Marie Le Pen y su Partido Frente Nacional, que, codificando el mito de que Francia y
sus habitantes peligran ante la invasión de elementos ajenos como los inmigrantes y la Unión Europea
(implica inmigrantes) avanza electoralmente, en los
departamentos y regiones metropolitanas donde hay
una mayor concentración de inmigrantes, como:
122
Languedoc-Rousillon, Rhône Alpes, Alsacia y
PACA —en esta región del sureste de Francia está
ubicado el departamento de Var donde fue electo
como diputado (invalidado) del Frente Nacional el
señor Jean-Marie Chevalier—.
MATRIZ DAFO 2
EL PARTIDO POLÍTICO FRENTE NACIONAL
DE FRANCIA
La situación que se presenta a continuación se refiere a los elementos favorables y desfavorables del
Partido Frente Nacional en el contexto sociopolítico francés.
ENTORNO INTERNO
DEL FRENTE NACIONAL
PRINCIPALES FORTALEZAS
F1: Programas políticos oportunistas diseñado para
satisfacer las necesidades políticas de los sectores sociales de Francia, fenómenos afectados
como: el Proceso de Integración Europeo, el
“desmantelamiento” del Welfare State, la crisis
de la cultura política gala y de otros.
F2: Carisma y liderazgo de Jean-Marie Le Pen.
F3: Estructura organizacional del Frente Nacional
que le permite “ajustarse” a los cambios que le
impone el entorno político.
123
PRINCIPALES DEBILIDADES
D1: Programas políticos oportunistas que, por su contenido semántico, provocan rechazo en algunos
sectores de la población francesa.
D2: Reconocimiento público de las debilidades del Partido Frente Nacional con la salida de B. Mégret.
ENTORNO EXTERNO
PRINCIPALES OPORTUNIDADES
O1: Proceso de globalización de las relaciones económicas y políticas internacionales y su incidencia en Francia.
O2: Avance del proceso de integración europeo
(Unión Europea) con su déficit democrático.
O3: Afectación al Sistema de Bienestar General.
O4: Desempleo.
O5: La crisis de la cultura política francesa.
O6: Inmigración extracomunitaria (fundamentalmente la de origen Magrebino y Sudsahariana).
O: Desarrollo alcanzado por los partidos de
ultraderecha de Europa occidental.
PRINCIPALES AMENAZAS
A1: Contexto Jurídico que regula el comportamiento político de las fuerzas de extrema derecha.
A2: Percepción social negativa.
A: Fraccionamiento del electorado que tradicionalmente vota por la ultraderecha.
Tras la identificación de los elementos DAFO, se
procede a elaborar la matriz con el objetivo de analizar las conexiones y derivar los lineamientos concluyentes del trabajo.
124
N
TER
NO
MATRIZ DAFO 2
EL PARTIDO FRENTE NACIONAL DE FRANCIA
EN
TOR
NO
ENTORNO EXTERNO
O
O1
1
1
1
O1
O
1
O2
O
1
O
O
1
O
O5
1
2
O
O
O
1
1
1
1
2
2
2
T
125
Descargar