POBLACIÓN. 27 XVIÍ. ESTADO DE LA INSTRUCCIÓN ELEMENTAL EN LAS CLASES BLANCA Y DE COLOR EN 1801. INDIVIDUOS. CLASES. SABIENDO NO SABIENDO I.EEB Y ESCRIBIR. f.EER NI ESCRIBIB. PROPORCIONES. TOTAI.ES. SABIENDO NO SABIENDO I.EEB Y ESCBIBIB. LEER NI ESCBIBIB. TOTALES. BLANCOS. 156.363 311.724 468.087 35,4 66,6 100 85.094 240.303 325.397 26,1 73,9 100 241.457 552.027 793.484 50,5 69,5 100 ' LIBRES DE COLOB. • 13.319 95.708 109.027 12,2 87,8 100 fil 13.461 103.355 116.816 11,5 88,5 26.780 199.063 225.843 11,8 88,2 ,t,(H (10 100 100 Vése pues que la instrucción elemental no comprende, en la clasa blanca, mas que 30,5 por 100 de ella, es decir menos del tercio, cuando el número de los ignorantes excede de los dos tercios. E l exa­ men de los sexos da, en los varones, un número mayor de individuos instruidos; algo mas de 7 por 100 ; ascendiendo, de consiguiente, el número de mujeres sin instrucción elemental alguna, á cerca de 74 en cada 100. Un estado semejante es realmente deplorable, y reclama la mas activa solicitud de parte del gobierno. Luego veremos que esta situación es aun mas deplorable cuando se la examina en las diversas jurisdicciones de la Isla. Enlaciase libre de color, la proporción de los individuos instruidos sube al 11,4 por 100 del total; y en cuanto á los sexos se observa el fenómeno curioso, que el número absoluto de mujeres instruidas excede en algo al de los hombres. Para apreciar con todo rigor las proporciones entre los individuos instruidos é ignorantes, que cada sexo ofrece en la lolalidad de la población en una clase, no sirven las deducciones que obtuvimos para formar el precedente estado. Lo que debe hacerse es hallar los números proporcionales con el total de la clase, suponiendo este igual á 100. Haciéndolo así hallamos : blancos instruidos — — ignorantes MUJERES blancas instruidas — — ignorantes. ; VARONES 19,8 59,2 .' — MUJERES — .10,7 50,5 TOTAI VARONES por100 libres de color instruidos — ignorantes libres de color instruidas.. — ignorantes TOTAI 100,0 5,9 por 100 42,5 6,0 45,8 100,0 De aquí se deduce, que el número real de hombres blancos conociendo la lectura y la escritura en la Isla de Cuba, no llega al quinto de la población blanca, y que el de mujeres, con igual grado de instruc­ ción, excede poco del décimo. En la clase libre ele color, los varones y las mujeres instruidos se hallan casi en la misma proporción de 6 por 100 en cada sexo. En resumen, resulla de menos de 20 por 100 el número de individuos instruidos en la clase blanca, y de menos de 12 por 100 el de la libre de color.