Empleo de doramectina por vía subcutánea tratamiento de la demodeccia en caninos en el Sorribas C.*, Schiaffino L., Pirles M., Bin L., Rivera M., Carapas G. Docentes de la Cátedra de Clínica de Animales de Compañía de la Facultad de Ciencias Veterinarias de Casilda. UNR Demodeccia es una enfermedad parasitaria inflamatoria, no estacional, no contagiosa, no pruriginosa, ligada a una patología hereditaria de disminución de la inmunidad que afecta a los perros, principalmente perros jóvenes. Puede afectar también a perros adultos inmunosuprimidos, por causa de patologías hormonales, patologías tumorales o tratamientos oncológicos. El agente etiológico es el Demodex canis, ectoparásito que vive dentro del folículo piloso de los huéspedes. El objetivo de este trabajo es evaluar la administración de uno de los derivados de la avermectina, la doramectina en el tratamiento de esta patología. Fueron tratados 30 perros de distintas razas y edades, diagnosticados por su sintomatología clínica y raspados cutáneos profundos, como pacientes con demodicosis generalizada. No entraron en el estudio ejemplares de raza collie o sus cruzas. En todos los casos se uso únicamente doramectina, para poder evaluar en forma total a la droga y en aquellos casos con complicación infecciosa de la ectoparasitosis, se emplearon baños con clorhexidina cada 4 días. La doramectina es una avermectina antiparasitaria de acción parasiticida formulada para grandes animales, no está autorizada para su empleo en pequeños animales, así que su uso debe tener el consentimiento por escrito del propietario del paciente. La doramectina se aplicó en todos los casos por vía subcutánea, a una dosis de 600 microgramos por Kg. de peso, una aplicación cada 5 días. El comienzo de crecimiento de pelo comienza a los 25-30 días del inicio del tratamiento, y la recuperación total se produce a los 60 días del tratamiento, la dosis de la doramectina se siguió aplicando hasta 4 semanas después de que el raspado cutáneo resultó negativo. La curación de los animales fue total, solamente en uno de los casos una perra de raza Vizla de 3 años de edad tuvo una recidiva a los 6 meses del tratamiento que se resolvió con un nuevo tratamiento. En ninguno de los 30 casos tratados se observaron manifestaciones tóxicas por el uso de la doramectina.