ANTICUERPOS MONOCLONALES EN TRATAMIENTO DEL CANCER Los Anticuerpos son proteínas que produce el sistema inmulógico de los seres vivos, para defenderse de elementos extraños, que llamamos antígenos. Los anticuerpos pueden ser policlonales, si derivan de la activación de varios clones de linfocitos B por el antígeno ó monoclonales si derivan de un solo clon de linfocitos B. En 1975 Kholer y Milstein fusionaron un lifocito B de bazo de un ratón inmunizado con eritrocitos de oveja que producía anticuerpos contra los mismos y células de mieloma de ratón, obteniendo un híbrido que era capaz de segregar inmunoglobulinas; a esta célula le llamaron Hibridoma. Por ese descubrimiento recibieron el premio Nobel de Medicina en 1984 y se abrió el camino para la obtención de Anticuerpos Monoclonales. En este momento, hemos conseguido seleccionar anticuerpos concretos, activando los linfocitos B con un antigeno previamente seleccionado. Sabemos que las células neoplásicas de muchos tumores, actúan como antígenos y por lo tanto podrían ser bloqueadas por los anticuerpos correspondientes, que nosotros hayamos obtenido previamente. Cada anticuerpo monoclonal reconoce al antígeno como objetivo y blanco. Se pueden utilizar solos o en combinación con quimioterapia o unidos como portadores a sustancias toxicas para las células neoplásicas o con elementos radiactivos, destruyendo las células tumorales o estimulando el sistema inmunológico. Estos anticuerpos se obtienen de los animales, concretamente del ratón y para no tener problemas de rechazo, nefrotoxidad o anafilaxia, tienen que ser humanizados a través de manipulaciones con ingeniería genética en fagos y bacterias. Un problema que tenemos con los anticuerpos monoclonales, es su alto peso molecular que hace su difusión dificultosa, por lo que hay que repetir con frecuencia su administración. Con lo que acabo de decir se abre un nuevo capitulo en la terapia biológica del cáncer a la que llamanos terapia pasiva, a añadir a las otras dos opciones llamadas activa y adoptiva. Con estos tratamientos se mejora la capacidad del huésped, para que a través de mecanismos inmunitarios, rechace y elimine las células neoplásicas. En la 2ª diapositiva como ejemplo vean ustedes como es la amplificación en una célula neoplásica del antígeno HER2 y como en sus numerosas zonas receptoras podremos bloquearlo con el anticuerpo correspondiente, en este caso el Trastuzumab (Herceptin) utilizado hasta ahora en los casos avanzados de cáncer de mama, y que este año se ha aprobado para el tratamiento adyuvante, en mujeres que expresen el antígeno HER2. A continuación vean ustedes en la siguiente diapositiva los anticuerpos monoclonales ya disponibles con sus correspondientes autorizaciones, indicaciones, donde actúan y el año en que han sido aprobados. Por el momento estas medicaciones, generalmente asociadas a tratamientos convencionales de quimioterapia, han producido alargamientos sustanciales en cuanto al tiempo de supervivencia, intervalo libre de enfermedad y por lo tanto retraso notable en la recaída. Espero que estos parámetros se vayan incrementando cada vez más a medida que conozcamos mejor las verdaderas utilidades y el manejo de estos fármacos. Herceptin: (20%): en mama avanzado aumento global de respuestas en 20% de las mujeres, con 6 a 8 meses de media. En Adyuvancia 50% de incremento en intervalo libre de enfermedad. Avastin: (80%): supervivencia global de 30%, pasando de 15 a 20 meses, el intervalo libre de progresión se incrementa en 71% pasando de 7 a 10 meses. Erbitux: incremento de 4 meses de supervivencia media Glivec: En GIST: estabilización y regresión en el 50% de los cuales el 50% sobreviven 5 años. Mabthera: Incremento del 20% a la respuesta a la quimioterapia. Zevalin: En pacientes refractarios a Rituximab (80% de respuestas). En las siguientes diapositivas vean los numerosísimos anticuerpos monoclonales en ensayo en el tratamiento del cáncer. Es conveniente señalar que esta lista es enorme, si le añadimos los que se están usando y ensayando para evitar el rechazo de órganos, colagenosis, psoriasis y otra multitud de enfermedades de base inmunológica o genética. En este momento los anticuerpos monoclonales, que hay que utilizar con sensatez, abren enormes esperanzas en la curación del cáncer. En el futuro creo que tendrán un papel todavía mayor, porque además de su utilización como medicamentos aislados, podrá unírseles otros medicamentos o sustancias que le añadan potencialidad contra las células neoplásicas, destruyéndolas o también interiorizando dichos elementos en las células activando proteínas internas. En esta línea se está trabajando con la activación de la Caspasa 3 o la p53. Estamos pues entrando ya en lo que podríamos denominar terapia génica. Para sintetizar lo que acabo de decir, vean ustedes la última diapositiva FUTURO DE A.M. • Radioisotopos + A.M. (Itrio 90 + Zevalin (AntiCD20)) (I 131 ó Bismuto 230) • Inmunotoxinas ( Pseudomonas, Ricina, etc.) • Agentes Citotóxicos ( Doxorubicina) • Encimas activadotas de drogas. • A.M. Fotosensibilizantes. • Transportador de elementos intracelulares ( Caspasa 3 ó p53) TERAPIA GENICA ¿?