E t u m o t en et final de este itinerario que. cubriendo un siglo de historia, nos ha llevado • confiderar las púneosles exposiciones que »e han producido en esta postguerra. En lo que respecta a tos requisitos de las instalacanes expositivas hemos visto que hasta el ultimo cuarto de siglo pasado se construían sobre todo grandes pabellones unitarios, en 10» que t e experimentaban nuevas técnicas confiructivas de carácter industrial y la aplicaran de las nuevas tecnologías del hierro Con W Exposición de París de 1678 las ms lalaciones expositivas se articulan a escala urbana y sirven para oneniar y disponer según una determinada retícula viana el desarrollo de la ciudad en determinados sectores de expansión, o bien, aunque no Irecuen témeme para reestructurar ciertas zonas refute no periféricas. Se pasa en consecuencia de una tecnología constructiva a una tecnología de escala urbana que experimenta nuevas estructuras y dispositivos de trático y determna nuevas relaciones funcionales entre partes vteías y nuevas de la ciudad Se desarrolla en estas ocasiones un esfuerzo de prevtSKV) y de prefiguración de la ciudad neoiécruca con la aplicación previa de los i' «uttu. Sana ara» « a a* tn MOMO. «ñau». va e ni ! ""*r U M » iMXMnmca í*«* irurMn. «MtttmiMM M i i * «eero m •> urnpo cto la» ama «paraflav m *.** .rfta vbtt Hmnánti ptrungamtí» a la da wa con VwwiMa fart r OtOwei m m can*» da M N medios materiales de control de su desarro^ tísico y de los electos de su creciente mttuencía territorial. Pero en estas exposiciones se materializa también un estuerzo de amplia representación de! sistema económico vigente, de su naturaleza internacional y moncooSística. y de superación, en la tase mas reciente, de los aspectos más externos de 'as pugnas políticas entre bloques En estas manifestacíones se dan los momentos de mayor mcidencia propagandística, contrapuesta a »a ev¡denc*a de las contraindicaciones mantés tadas en las luchas de ios países del tercer mundo, que reivindican un desarrollo de c]is tinta naturaleza, no suieto al dominio económico y político de los llamados países del caoitalismo maduro La ciencia y la tecnología, que representan objetivamente factores fundamentales de desarrollo de las tuerzas productivas, se subliman en sus contenidos ideológicos, siendo utilizadas como elementos para reproducir, convalidar y perpetuar el sistema existente; es decir, desarrollan las funciones que hemos reconocido como características del «desgaste moral» en lo que respecta a los medios ' \ ( M hará* o qu* d*m un MAnckaWnann moda*n> >'«n a a un ^*^ftff *f> clMftO'* ^oducio a^i^aAo. baao^ dv ^o*r*ia '# cxc«3a. da « * * manao y • vacat da*c«do '-••ata »w >»••« B * * J * i m « i t t * f g o . H M t o i maaaifa da t* Dabais umiKtat. paro parí 4 M aaa torwpt«n*do nacvMa ejutt ai :<mcm y • ) cftaamaiti raaMcan an * fnwno* una lianafc»nta • « * qua « a n ataja da wanarcao v « M por un UnOmanu 0» ~' ' aot<* la vnapj>nac<6ri, alcanc«n a ntioOucfa* «n consecuencia ^n p<oceso óe "novaco^ ;ec lotocica O"* r>o se deriva o* i r¡rcei<Hú * • utilizar de modo óptimo ia estructura ÍMOOU-C uva. smo Oe >moor.er una ¡asa 3c d e s a i r o ^ subordinada a los benéficos y a a reproouc ción dei caprtai La mtenoón de esta resena tostonea es lundamentalmente dusuattva. sin embargo, e* haber tratado este «maraño ha servido para demostrar el significado r e * de asta t o o de manifestaciones qué pretenden ofrecer un balance de nuestra •cMKiacióm (consaderando además que loa balances globales resultan noy mucho más contradictoras de cuanto poonan resultar ai tmaluat el ngtopasado) Ai cinismo político se ha afladxlo noy de hecho el cinismo cultural en las manifestaciones de la ciencia y, a pesar de ios enormes estuarios propagandísticos, .os símbolos do ia era atómica y espacial evocan en la mente de las masas más la progresiva degeneración que un postóle desarrollo del sistema vigente EMILIO BATTISTI t* an «« coneunno como un moaan» w KM wniaftíoi Dan^uta*at y aapi " J S Bou»da*« y O J A ümwud, i . Paiacsodat Tior.adavoTqu>«tu»damaMaiw«conM<M'«t|M u t o da Oaatat íi ao«toc oua «aatMa a v *j cefwcucoñn <iawnar»>ntae da <a t»pe»*t«n urw*«r«ai da * » " * da '«7» «ana naturajmanw « J ' u e k * • A &aa« da - w w «o^ CU&«*M a * a a «a aapatK*on « w i arta * <nd***v>a * owa aa pwad» I «fiv* «a * M a " " B*NÍVOiO S O Í - J da# #.%ft*MWvt» <« i p Tf&) ' - '.-rebata) * a» ^*ndaa*«a» qua han «rMdo artot an m tongo m »a baaqua*. an at pfadata*, an«"tíacompaAui »i» aw tuad conocido wtva todo tx> u i i M * i i ú n d > t* Gatvta da M * L*em*fon W**tmlm •• fajatara Masan»* Li*1a»tOfon (D^qnMUÍ t « Uftam nana* « * « » »«14» «tu* c 3 « 0 Q e * « » «r« «i f « t M «a* a*ja> w » . Franc* y tunapa aacá» cowaf •j»-'Oa «at a/anoM tetaon t a M l a ntwi ( t a i Jnaarpaf * » * t nt aan •ri>trtar M.i«vac>anpúaa**««>«n*wptdB maK*natpaaodaia par Wfcdxnd' g'MimtmwMi am a> tat^xi da « M * O » r * * « W u O t f M *mm