El Tribunal Superior de Justicia de Madrid considera procedente el despido de un consejero delegado que modificó los resultados financieros para cobrar el bonus. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid dicta sentencia en la que modifica el criterio seguido hasta ahora y concluye que es procedente el despido de un consejero delegado que ordenó alterar los resultados financieros de la sociedad para incrementar el EBIT y, como consecuencia, obtuvo además una ventaja patrimonial al recibir un bonus superior al que le correspondía. El Tribunal llega a esta conclusión argumentando que “el Estatuto de los Trabajadores recuerda que la suspensión del contrato de trabajo exonera de las obligaciones recíprocas de trabajar y remunerar el trabajo, pero no de otras responsabilidades”, y si es posible el despido en estas circunstancias por competencia desleal, sería absurdo que no lo sea cuando el cese del consejero delegado tiene su origen en una conducta dolosa.