EL LIDERAZGO CREATIVO DE JESÚS Por Raúl García Castro Los gobernantes de este mundo (el liderazgo de este mundo) se enseñorean sobre sus seguidores y súbditos; en cambio el liderazgo según Jesús, es servir a los demás, es atenderlos, es animarlos para que alcancen sus objetivos según el plan de Dios para sus vidas. LOS LÍDERES HACEN QUE LAS COSAS PASEN Piensa por un instante: Si no hubiera existido Abraham Lincoln, probablemente todavía existiera la esclavitud en Estados Unidos. Si no existieras tú, probablemente aún no existiera un compañerismo cristiano en tu casa, en tu empresa, en tu país. LIDERAZGO: Es influencia, la capacidad de conseguir seguidores para hacer realidad una visión. Liderazgo no es una posición, el liderazgo es influencia. PROPÓSITO DEL LIDERAZGO Hacer que las cosas pasen Las cosas o las actividades no pasan por si solas, es el líder, la persona que hace que pasen. Cuando Jesús nos dice en Mateo 7:7-12 “Pidan, busquen, llamen” nos está diciendo que somos responsables de iniciar el mover de Dios en nuestro ministerio. Él quiere darnos, quiere abrir la puerta, pero somos nosotros los responsables de buscar, llamar, pedir. Las cosas no pasan por sí solas, las personas hacen que las cosas pasen y Dios respalda la fe de sus hijos. Hacer que las cosas pasen por medio de los demás El líder que sólo suma seguidores, está equivocado. Un líder forma nuevos líderes, hace crecer su ministerio y al cumplirse todo esto, fortalece y organiza adecuadamente su grupo. Un líder convierte, discipula, capacita a cada uno de los miembros de su congregación, para que estos a su vez, conviertan, discipulen y capaciten a otros. Nuestro objetivo debe ser convertirnos en líderes de líderes, pues sólo así cumpliremos la gran comisión (Mateo 28:19-20). Jesús fue un líder que hizo que las cosas pasaran, pero luego hizo que las cosas pasaran por medio de los demás: sus discípulos. En Mateo 9:38 Jesús se da cuenta que la mies es mucha y los obreros pocos, entonces delegó autoridad y comisionó a sus discípulos para que echaran fuera demonios, sanaran enfermos y predicaran. Jesús fue un líder, pero también hizo de sus seguidores nuevos líderes. Nuestra meta en este ministerio debe ser convertirnos en líderes de líderes. El liderazgo que busca Dios Es totalmente diferente al mundo secular; no es en cuanto a la función sino en cuanto a la actitud. Mateo 20:20-28 nos muestra la actitud que debe prevalecer en el líder: El que quiera hacerse grande, deberá ser servidor. El que quiera ser el primero deberá ser esclavo de los demás. Jesús es nuestro ejemplo por excelencia. La vida personal y espiritual del líder debe cumplir con los requisitos establecidos en 1 Timoteo 3:1-7. Sin santidad es imposible agradar a Dios. Es precisamente la santidad que nos separa del liderazgo secular. El líder es aquel que no busca cumplir con su agenda, sino con la agenda de Dios: la gran comisión. El líder que busca a Dios es el que lucha por engrandecer su reino y no engrandecerse a sí mismo. Es el que lucha por darle la gloria a Dios y no recibe gloria del hombre. ¡Qué cuando Dios nos llame a su presencia seamos líderes que fuimos útiles en las manos de Dios dejándonos guiar por su Santo Espíritu! Reproducido del libro “Liderazgo creativo de Jesús”, por el Lic. Raúl García Castro, MBA. Tomado del boletín “El Misionero Bíblico” de la Convención Evangélica de Cuba “Los Pinos Nuevos” Usado con permiso ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.