Historia del Rosacrucismo XIIIsuper!

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Historia del Rosacrucismo
Desde sus orígenes hasta nuestros días
Por Christian Rebisse
Revista El Rosacruz A.M.O.R.C.
Parte XIII
En búsqueda de la Psique
A partir del siglo XVIII y durante el XIX, la magia se seculariza a través del magnetismo.
La vía abierta por Mesmer y Puységur da nacimiento al espiritismo e incita a los
investigadores a formar institutos de investigaciones psíquicas para intentar
comprender los temas secretos de la vida del alma. H. Spencer Lewis (1883-1939)
presidirá, él mismo una organización de ese tipo algunos años antes de fundar la
Antigua y Mística Orden de la Rosa-Cruz (A.M.O.R.C.) De una manera general, todos los
ocultistas de la Bella Época (1890-1914) y particularmente aquéllos que se van a lanzar
en tentativas de resurgimiento o de creación de órdenes iniciáticas, haran de sus
primeras armas el magnetismo o el espiritismo.
La hipnosis
Después de la tormenta revolucionaria, el magnetismo conoce un retoño o renadío de
interés. Penetra en las cortes europeas y se le acoge favorablemente en Rusia,
Dinamarea y Prusia. En Alemania, no sólo es de interés para los médicos, sino también
para los filósofos de la naturaleza del novelismo, como Justinus Kerner (1786-1862).
En Francia, el magnetismo es utilizado con éxito en los hospitales del Val-de-Gracia, del
Hotel -Dios y en la Salitrería, sin embargo, es mucha la controversia y en 1826, una
nueva comisión científica es creada para examinar su validez. A pesar de un informe
muy positivo realizado en junio de 1831 por Husson, médico-jefe del Hotel-Dios, el
magnetismo es oficialmente rechazado por la Academia en 1842, luego de acciones
repetidas realizadas por algunos científicos positivistas. Jaime Braid, un adversario del
magnetismo, cree encontrar la causa del sueño magnético en la "neurohipnologia", que
se luego será la hipnosis (1843).
El magnetismo no tardará en regresar con fuerza después de haber viajado al Nuevo
Mundo. En efecto, en la misma época, alrededor de 1836, un discípulo de Puységur,
Carlos Poyan, introduce el mesmerismo en los Estados Unidos (1). Dicta conferencias y
en Belfast, Maine, Phineas Parkhurst Quimby (1802-1866) se muestra muy interesado
y se convierte pronto en un médium fuera de serie. Él será el precursor de un vasto
movimiento sobre el cual volveremos en una próxima sección, el New Thought (El
Nuevo Pensamiento) de donde también se deriva la Christian Science (La Ciencia
Cristiana).
El espiritismo
Entre los alumnos de Carlos Poyan se encuentra una personalidad deslumbrante,
Andrew Jackson Davis (1826-1910) (2). Él es considerado como el profeta de los
espiritistas anglo-americanos. En los Estados Unidos, el magnetismo da un giro
particular como consecuencia de los acontecimientos ocurridos en Hydesville, cerca de
New York. Ahí, una noche de Diciembre de 1847, dos pequeñas niñas, Margaret y Katie
Fox, escuchan golpes extraños "dados" contra los muros. Las puertas se abren solas, los
muebles y los objetos se mueven, como empujados por manos invisibles. Lejos de
aterrorizarse, las dos niñas lo toman como un juego y terminan por establecer un
código para dialogar con "el espíritu golpeador". Al cabo de varios diálogos, el espíritu
revela su nombre: Carlos Rosna, y da detalles importantes sobre su existencia, cuya
exactitud será luego reconocida. Pronto centenares de curiosos llegan para presenciar
el fenómeno (3). Estos acontecimientos marcan el inicio del Espiritismo, un
movimiento que rápidamente adquirirá un tamaño considerable. En los Estados
Unidos, de pronto se cuenta con tres millones de adeptos y cerca de diez mil médiums
ejercen sus talentos. Desde 1852, los espiritistas realizan un congreso en Cleveland.
Allan Kardec
El espiritismo llega rápidamente a Europa. En Francia, el “Periódico de los Debates” del
13 mayo de 1853 habla del fenómeno de mesas cambiantes, que se mueven, el cual
ocupa entonces a todo París. Un lionés quien se interesa en el magnetismo. Hipólito
León Rivail (1804-1869), llamado Allan Kardec, es iniciado en esta práctica. Algún
tiempo más tarde, publica un texto que se convertirá en el manual de todos los
espiritistas: el Libro de los Espíritus (1857) (4). Esta obra explica no sólo cómo entrar
en contacto con el mundo de los espíritus, sino también presenta las teorías y la
filosofía del espiritismo. Especialmente expone el papel del periespíritu, una envoltura
fluída, o cuerpo Psíquico, situado entre el alma y el cuerpo físico, que permite
manifestarse a los seres desencarnados. Él populariza también la teoría de la
reencarnación, que es presentada como un camino necesario para la evolución del
alma, de donde la célebre máxima espiritista: "nacer, morir, renacer, progresar sin
cesar, tal es la ley". En 1858. Allan Kardec crea la “Revista Spirite”, funda la Sociedad
parisina de estudios espiritistas y publica obras que contribuyen a la difusión del
espiritismo en el mundo entero. Él es considerado como el "profeta" del espiritismo.
Por todas partes se pregunta por lo invisible, hacer aparecer a los espíritus. Se practica
la escritura automática, la telequinesia y la telepatía. Médiums como Daniel Douglas
Home, Eusapia Palladino, Mme. Piper, Florence Crook o Alexis Didier, reinan como
maestros y voltean tanto cabezas como mesas, pues las simulaciones y las
falsificaciones son numerosas.
Zanoni
En el momento en que se desvanece el espiritismo, el rosacrucismo lo pone
nuevamente en escena a través de una novela, “Zanoni” (1842) (5) que justo aparece
antes de las primeras tentativas del resurgimiento rosacruz del siglo XIX. Su autor, Sir
Edward Bulwer- Lytton (1803-1873), acababa de ganar reputación mundial gracias a
su novela histórica, “Los Últimos días de Pompeya” (1834). Su nueva Obra, “Zanoni”,
evoca la historia de dos Rosacruces del siglo XVIII, Zanoni y Mejnour, últimos
sobrevivientes de la augusta Fraternidad. La trama gira alrededor de la transmisión de
la iniciación de dos discípulos, Clarence Glyndon y Viola. El autor expone los tormentos
del alma en conquista de la iniciación. Si bien está llena de referencias al hermetismo,
de Paracelso, de Agrippa, de Cagliostro o de Mesmer, Zanoni es antes que todo una obra
novelesca y posee todas las características del género, sin embargo, sigue siendo una
de las novelas más célebres de la literatura esotérica.
Por la lectura de ese libro, cabe preguntarse acerca del el interés de Edward BulwerLytton por la Rosa-Cruz. Desde la infancia, mostró disposición por los fenómenos
paranormales y más tarde, se dedicó al estudio de las ciencias ocultas. En plena época
espiritista, doce años después de la publicación de Zanoni, Eliphas Lévi (1810-1875) va
a encontrarse con él en Londres. Ahí, se dedican a recordar al fantasma de Apolonio de
Tiana, no a la manera de los espiritistas, sino utilizando un ritual basado en la Magia
Filosófica (1573) de Franciscus Patricius. Esta extraña experiencia marcará al
renovador del ocultismo francés (6). William Wynn Westcott indica que Edward
Bulwer-Lytto no entró en contacto con los rosacruces de la logia Carlos a la Luz
naciente de Francfort-sur-Ie-Main. De hecho, esta logia, fundada en 1814 por Christian
Daniel von Mayer, se sitúa en la encrucijada de muchas órdenes iniciáticas del siglo
XIX: los Caballeros Bienhechores de la Ciudad Santa de Juan Bautista, Willermoz, la
Estricta Observancia Templaría del barón Karl von Hund y los Hermanos Iniciados de
Asia, una emanación de la Rosa-Cruz de oro de Antiguo Sistema. Estamos en presencia
de un movimiento rosacruz poco ortodoxo.
LA S.R.I.A.
A veces se pretende que Edward Bulwer- LLytton dirigió la Societas Rosicruciana In
Anglia (S.R.I.A.). En efecto, es cuando ella sale que fue nombrado presidente honorario
pero él rechaza categóricamente esta función. La S.R.LA., nace hacia 1866, en el seno de
la Francmasonería inglesa. Su fundador, Robert Wentworth Little (1840-1878), era el
tesorero de la Gran Logia Unida de Inglaterra. Pretendía haber sido iniciado por
Antonio O'Neal Haya, en el seno de una sociedad rosacruz escocesa de Edimburgo, pero
esta afirmación nunca pudo ser demostrada. Wynn Westcott precisará que.
inicialmente la sociedad era un grupo de francmasones, asociados para estudiar los
antiguos textos rosacruces y establecer los lazos existentes entre rosacrucismo y
Francmasonería. En un artículo escrito en 1880, él precisa que la S.R.I.A. no puede ser
considerada como heredera de los rosacruces del pasado.
Parece que Robert Wentworth Little elaboró la S.R.I.A., a partir de rituales encontrados
en la biblioteca del Freemason's Hall. Él adopta la jerarquía de la Rosa-Cruz de oro del
Antiguo Sistema (Zelator, Theoricus , Practicus, Philosophus, Adeptus Menor, Adeptus
Major, Adeptus Exemptus, Magister Templi y Magus) y reserva el ingreso a su grupo a
los Maestros Masones cristianos. La Orden se expande en Escocia, Canadá y en los
Estados Unidos. Si bien sus orígenes causan sospecha, esta sociedad juega un papel
importante en la difusión del esoterismo. Entre los miembros influyentes de la S.R.I.A.,
hay que mencionar a William Woodman, Kenneth R. H. MacKenzie, Hardgrave Jennings,
el espiritista Stainton Moses y William Wynn Westcott (1848- 1925). Este último
participará en la creación de otra orden masónica rosacruz de la que hablaremos más
tarde, la Orden Hermética del Golden Dawn. Numerosos miembros de la S.R.I.A. se
unirán también a las filas de la naciente Sociedad Teosófica.
Elena Petrovna Blavatsky
La Sociedad Teosófica pone sus raíces bajo otros horizontes distintos a los que nos
interesan aquí. Debemos, sin embargo, citarlos brevemente pues esta sociedad
manifestó cierta afinidad con el rosacrucismo. Un hecho sorprendente se da en 1873
cuando Elena Petrovna Blavatsky (1831- 1891) aparece en la escena pública
frecuentando los círculos espiritistas de New York. Dotada con facultades
paranormales, participa como médium en varias experiencias. Es en ese marco que
encuentra a aquél quien va ser su compañero de viaje, el coronel Henry Steele Olcott
(1832- 1907), quien entonces se preguntaba sobre los fenómenos ligados al
espiritismo. Algún tiempo más tarde, propone la creación de una sociedad para el
estudio y esclarecimiento del ocultismo, de la Cábala... Cuando van a escoger el título de
su sociedad, dudan entre varios nombre, entre los cuales figura el de la Rosa-Cruz.
Finalmente escogen aquel de Sociedad Teosófica, en setiembre de 1875. La Sociedad
Teosófica se refiere poco al rosacrucismo: pregona un budismo esotérico. Estará, sin
embargo, al origen de dos movimientos que se reclaman el rosacrucismo.
El primero es la efímera Rosa-Cruz Esotérica, fundada en 1888 por Franz Hartmann
(1838-1912) médico, colaborador cercano y secretario de Elena Petrovna Blavatsky. Él
consagra muchas obras a la Rosa-Cruz, en particular una bella reedición de los
Símbolos secretos de los rosacruces de los siglos XVII y XVII (1888) (7). El segundo, la
Orden del Templo de la Rosa-Cruz, nace durante el confuso período que siguió a la
muerte del coronel Olcott. Es Annie Besant, quien le sucede a la cabeza de la Sociedad
Teosófica, en 1912. Esta Orden no sobrevivirá a la primera guerra mundial. Maria
Russak, una de sus fundadoras, se unirá a la Rosa-Cruz A.M.O.R.C. después de establecer
relación con Harvey Spencer Lewis en 1916.
La Hermetic Brotherhood of Luxor
Ciertos autores indican que Elena Petrovna Blavatsky y Henry Steele Olcott habrian
fundado la Sociedad Teosófica después de su exclusión de una orden misteriosa: la H. B.
of L., es decir, Hermetic Brotherhood of Luxor (Fraternidad Hermética de Luxor). La
leyenda dice que esta fraternidad toma sus orígenes de una orden fundada más de seis
mil años antes en "la isla del Oeste actualmente desaparecida" (la Atlántida), siendo
Tebas y Luxor sus centros de actividades. Esta orden estaría al origen de todos los
grandes movimientos iniciáticos como aquel de la Rosa-Cruz. Hacia 1870, la H. B. of L.,
abre un círculo externo para luchar contra los peligros que corría el Occidente por el
cientifismo. Esta fraternidad intenta restaurar el esoterismo occidental otorgándole un
aspecto científico. Además, desea detener la expansión de la Sociedad Teosófica, a la
que acusa de querer "viciar el espíritu del Occidente y situarlo bajo el dominio del
pensamiento oriental” (8), En este aspecto, esta orden se opone a la reencarnación.
El círculo externo de la Fraternidad Hermética de Luxor fue fundado por un polaco,
Louis Maximilian Bimstein (1847-1927), llamado Max Theón o Aia Aziz, personaje
singular dotado de facultades síquicas impresionantes (9). En 1870, se instala en
Inglaterra y escoge algunos miembros, especialmente a Peter Davidson y Tomás H.
Burgoyne. El primero llegaría a ser el Gran Maestro de la H. B. of L.; Papus, quien fue
miembro de esta orden, consideraba a Peter Davidson como su "maestro en la
práctica". En Francia es F.- Ch. Barlet (Alberto Faucheux, 1838-1921), quien dirige la
orden. Hay que resaltar que la mayoría de los miembros fundadores de la Orden
Martinista eran miembros de la H. B. of L., la que en algún tiempo se constituirá en una
especie de círculo interno del Martinismo, círculo que pronto será reemplazado por la
Orden Cabalística de la RosaCruz. Entre 1885 y 1886, la H. B. of L. publica una revista,
“Occult Magazine”. Tomás H. Burgoyne y Peter Davidson escriben en ella utilizando los
pseudónimos de Zanoni y Mejnour, los dos Rosacruces de Zanoni. De igual forma, F.-Ch.
Barlet utiliza el sobrenombre de Glyndon, otro de esa novela, para firmar sus textos en
la revista “El AntiMaterialista”. LA H. B. of L., si bien sólo estuvo activa de 1870 a 1886 y
contó con un puñado de miembros, tuvo una gran influencia. A partir de 1886, Max
Theón se desinteresa de la H. B. of L., y deja Londres para instalarse en Tlemcen,
Argelia. Esta orden cae en el adormecimiento y Max Theón intenta instaurar el
Movimiento Cósmico, un grupo que será marginal. Es en Tlemcen que Max Theón
recibirá, entre 1904 y 1906, a aquella quien pronto será la asociada de Shri Aurobindo,
Mirra Alfassa, es decir, Madre (1878-1973) (10). Las ideas de Max Theón tendrán
alguna influencia sobre Shri Aurobindo.
Las investigaciones psíquicas
Hacia 1870, los "psiquistas" emergen de la corriente espiritista. En efecto, las
experiencias sobre el sonambulismo condujeron a muchos investigadores a
preguntarse acerca de las facultades paranormales del hombre. En Inglaterra, desde
1875, la elite intelectual del Trinity College of Cambridge, como el profesor de filosofía
Henry Sidgwick, se dedica a estudiar científicamente los fenómenos espiritistas. Es así
como nace en Londres, en 1882, la Society for Psychical Research, bajo el impulso del
profesor W. F. Barrett, Henry Sidgwick y del psicólogo Frederic William Henry Myers
(1843-1901). Realizan experiencias científicas para estudiar las facultades psíquicas de
los médiums.
Es en 1882 que la sociedad de investigaciones síquicas crea la palabra “telepatía". Elena
Petrovna Blavatsky, como todos los grandes médiums de la época, participa en estas
experiencias durante su estadía en Londres. Las investigaciones inglesas tienen
repercusión internacional y contribuyen a la creación de numerosos círculos, como la
American Society for Psychical Research, en Boston en 1884, con el gran psicólogo
estadunidense William James (1842-1910). En Francia, estas investigaciones, iniciadas
por el coronel de Rochas, están bajo la dirección del doctor Charles Richet (18501935), premio Nobel de fisiología en 1913. Son calificadas de "metafísicas" y se
organizan alrededor del Instituto Metafísico Internacional.
Durante todo el siglo XIX, se está en presencia de una multiplicación de publicaciones,
sea en revistas o en libros, que tratan temas relacionados con el magnetismo, el
espiritismo o los poderes del espíritu, (11). En 1887, Héctor Durville revive el
“Periódico del Magnetismo y del Psiquismo Experimental”, ya fundado por el barón del
Potet (publicado de 1845 a 1861). Esta revista es la de la Sociedad Magnética de
Francia. Entre los miembros fundadores de esta sociedad, se encuentran, además de
médicos, a Elena Petrovna Blavatsky y Stanislas de Guaita. Entre los miembros de
honor, están el coronel A. de Rochas, William Crookes, Papus, Francois Jollivet Castelot,
A-P. Sinnett y Josephin Peladan. Con Héctor Durville y sus hijos Gastón y Enrique, el
magnetismo va a conocer un desarrollo importante.
En el mundo entero son muchos los científicos que participan en las investigaciones
sobre el psiquismo, tales como el químico Mendeléiev, los físicos Pedro y María Curie,
Alfred Russel Wallace, coinventor de la teoría de la evolución, el célebre físico y
químico William Crookes, el astrónomo Camille Flammarion, el criminólogo Cesare
Lombroso, el escritor Víctor Hugo y otros. En 1897. durante una reunión de la Sociedad
de investigaciones psíquicas de Londres, William Crookes pronunció un discurso
importante sobre el magnetismo y las frecuencias vibratorias asociadas a los sonidos, a
la electricidad y a los rayos X. Propone entonces una tabla de las vibraciones que será
popularizada por Héctor Durville y en la que se inspirará H. Spencer Lewis (12).
La magia del Renacimiento había puesto en evidencia a las energías sutiles que unen
los distintos planos de la creación y propuso métodos apropiados para utilizar estas
correspondencias. A partir de la segunda mitad del siglo XVIII, estos métodos sufrieron
el impacto del magnetismo que deseaba demostrar científicamente la existencia de
tales energías. Se quiere entonces demostrar que el hombre posee facultades que le
permiten entrar en contacto con el mundo invisible. Ese movimiento da nacimiento a
un nuevo género de grupos, espiritistas y sociedades de magnetizadores. Como hemos
podido ver, en la misma época, el rosal de la Tradición deja crecer nuevas ramas.
Cierto, no todas estas ramas darán frutos y algunas rosas vivirán solo una mañana,
pero pronto nacerán nuevas flores en la Rosaleda de los Magos.
Notas:
1. Ver, de Horatio W. Dresser, Health and Inner life, New York y Londres. 1906, G P.
Putman 's Sons, p. 24.
2. A propósito de Davis, ver. de Canan Doyle, History 01 Spiritualism, 1926, capítulo I1I,
(traducido al francés bajo el título Historia del espiritismo, por Claude Gilbert, París,
1981, ed. del Rocher).
3. León Denis da numerosos detalles sobre ese asunto, en su libro En lo Invisible,
Espiritismo y Médiumnidad, nueva edición corregida y aumentada, Librería de las
ciencias síquicas, París, 1922, p. 205-210.
4. Allan Kardec, Libro de los Espíritus, contiene los principios de la doctrina espiritista,
sobre la naturaleza de los Espíritus, su manifestación y sus relaciones con los hombres,
las leyes morales, la vida presente, la vida futura y el avenir de la humanidad. Escrito
bajo el dictado y publicado por orden de espíritus superiores. Paris. 1857. Dentu.
5. En 1858. Piedra Lorrain publicó una traducción francesa de Zanoni en Hachette : Cie.
En 1924. Émile Nourry publicó otra más completa con ilustraciones de Roben Lanz.
Esta versión fue reeditada por Diffusion Rosacruciene en abril del 2001.
6. Este acontecimiento es relatado por Eliphas Lévi en Dogma l Ritual de la Alta magia.
París. 1856. Gerrner Bailliere, capítulo XIII. : comentado por Pablo Chacornac en
Eliphas Levi, Renovador del Ocultismo en Francia (1511)- ¡er5J. París. 1926. Chacornac
Hermanos. capo X.
7. Secret Simbols of the Rosicrucians sixteenth and seventeenth centuries, Bastan,
1888. ed. Occult Publishing Company. Ese libro fue publicado directamente en Francés
bajo el nombre de Simbolos secretos de Los Rosacruces de los Siglos XVI y XVII, editado
por Difusión Rosacruz. El Trernblay, 1997
8. Estos elementos son tomados del texto de Peter Davidson. .. Orígenes) objeto de la H.
B. of L ". publicado en H B. ofL: textos y documentos secretos de la Hermetic
Brotherhood ot Luxar. Paris-Milan. 1988. Arché. Sobre esta extraña orden. ver
el libro de Jocelyn Godwin, Christian Chanel y John P. Deveney, The Hermetic
Brotherhood o) Luxor - lnitíatic and historicai documentos o) an Order o) Pratica!
Occultism, 1995. York Bcach. Samuel Weiser. (trad. francaise La Fraternidad Hermética
de Lux or (H B. O) L.), rituales y instrucciones de ocultismo práctico. París, 2000,
Dervy),
9. Sobre ese punto. ver. de Satprem, Mere, El Materialismo Divino, París. 1976, Robert
Laffont. capo VIII y IX.
10. Ver. de Satprem. op. cit., capo VIII y IX, y de Sujata Nahar, Les Chroniques de Mere,
tomo lII, París, 2000. Bucheti Chastel 2000. p. 43.
11. Ver la impresionante bibliografía dada por Bertrand Méheust. en el tomo 2 de
Sonambulismo y mediumnidad. París, 1999. Institut Synthélabo, collection,les
Empécheurs de penser en rond ". El Plessis-Robinson, p. 523-577.
12. Ver. de Hector Durville, Teorías y procedimientos del magnetismo. París. 1903,
Librería del Magnetismo, p. 15-18.
(Continuará)
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