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EN BUSCA DE MAYOR TRANSPARENCIA
ANALISIS DE LA LEY DE ACCESO
A LA INFORMACIÓN PÚBLICA
Escribe: Dr. Diego Lamas*
Fruto de los avances en la promoción y desarrollo del acceso a la información
pública impulsados por varias organizaciones sociales y asociaciones
vinculadas a la defensa del derecho a la información, con fecha 17/10/08 fue
promulgada la Ley 18.381, denominada “Ley de acceso a la información
pública”.
A continuación analizaremos algunos de los aspectos fundamentales de la
norma:
1.
Objetivos de la Ley
Si bien ya existen instrumentos de derecho positivo que reconocen la
publicidad de los expedientes administrativos y judiciales, comúnmente se ha
cuestionado por gran parte de la opinión pública el accionar “secreto” de la
administración.
Frente a esta situación, el artículo 1º la Ley 18.381 apunta directamente a la
promoción de la transparencia de la actividad administrativa desarrollada por
las entidades públicas, sean estas estatales o no estatales (siendo ejemplo de
ello las cajas paraestatales, entre otras).
Es de destacar asimismo, que este primer artículo, conjuntamente el artículo 3º
de la Ley, marcan un importante reconocimiento al derecho al acceso a la
información pública de manera amplia, esto es, para todas las personas
(físicas, jurídicas, públicas, privadas, nacionales o extranjeras) sin requerir
ningún justificativo que acredite alguna vinculación con la información a
solicitar.
2.
La información pública y las excepciones que prevé la Ley
A efectos de la comprensión del alcance de la Ley, podemos definir la
información pública siguiendo el artículo 2º de la norma. En ese sentido, se
define la información pública como “toda la que emane o esté en posesión de
cualquier organismo público, sea o no estatal, salvo las excepciones o secretos
establecidos por ley, así como las informaciones reservadas o confidenciales”.
De modo general, el legislador prevé como pública toda la información que se
encuentre en poder de cualquier oficina pública, sea esta estatal o no estatal.
Esta información podrá provenir directamente del organismo, o haberse
recibido de parte de los particulares u otra administración.
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En ese sentido, amplía el artículo 4º de la Ley, prevé que “toda la información
producida, obtenida, en poder o bajo control de los sujetos obligados por la
presente ley…”.
Para el cumplimiento de los fines de la Ley, se prevé la implantación de
mecanismos de difusión permanente de información (a través de páginas web
por ejemplo), así como la presentación de informes ante el órgano de control
creado en la Ley.
Sin perjuicio de lo expresado, la Ley 18.381 prevé también la exceptuación del
ámbito de la publicidad de cierta información considerada como secreta,
reservada o confidencial.
El artículo 9º de la Ley define expresamente aquellas informaciones
consideradas reservadas por la Ley, mientras que el artículo 10º prevé las
informaciones que se catalogan como confidenciales.
La consecuencia fundamental de la categorización de información secreta,
reservada o confidencial radicará en que la misma quedará fuera del deber de
libre acceso al público.
3.
El procedimiento administrativo para la solicitud de información
A los efectos de la obtención de la información pública, el interesado deberá
presentar nota por escrito ante el organismo público que posee la información.
En la nota, se deberá detallar nombre, domicilio y soporte sobre el cual se
desea la información; así como descripción de la información requerida, y
cualquier dato que facilite la ubicación de la misma.
El artículo 14º de la Ley prevé que el organismo público no estará obligado a
brindar aquella información que no posea, debiendo comunicar por escrito al
interesado la denegación de la misma por las razones expuestas.
En este sentido, a los efectos de brindar la información, o denegar la misma, el
organismo tendrá un plazo de 20 días hábiles, prorrogable por otros 20 días
más por razones fundadas; debiendo dictarse resolución por el jerarca máximo
del organismo. Es dable destacar asimismo que la Ley prevé el efecto positivo
del silencio, esto es, si el organismo no se expide en los plazos, se considera
que accede al pedido de información cursado.
4.
La acción de acceso a la información pública
Sin perjuicio del procedimiento administrativo, todo interesado podrá interponer
acción ante el Poder Judicial a efectos de la obtención de información pública.
La acción procederá siempre que el organismo denegare una solicitud, o no se
expidiese en los plazos previstos, sin posibilitar el acceso a la información.
Serán competentes para resolver esta acción en Montevideo los Juzgados
Letrados de lo Contencioso Administrativo, si se trata de una persona estatal la
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demandada, o los Juzgados Civiles, si la demandada es una persona pública
no estatal. Por su parte, en el interior serán competentes los Juzgados
Letrados.
En referencia al procedimiento, se prevé un proceso sumario, similar al previsto
en materia de amparo. En ese sentido el actor interpondrá demanda, citándose
a audiencia en el plazo de 3 días. En la misma se oirá al demandado, se
diligenciarán los medios probatorios y las partes realizarán las alegaciones
pertinentes, debiendo dictarse sentencia en la misma audiencia, o a más tardar
en el plazo de 3 días de la misma, pudiendo ser apelable la misma.
5.
Normas complementarias de la Ley
A los efectos del correcto cumplimiento de los deberes impuestos en la norma,
la Ley prevé la creación de un órgano de contralor, creado en la órbita del
Poder Ejecutivo (como órgano desconcentrado de la AGESIC).
Este órgano de control tendrá amplia autonomía técnica para el cumplimiento
de sus objetivos, los cuales apuntan al asesoramiento en materia normativa,
contralor del cumplimiento de la Ley, coordinación de políticas en materia de
acceso a la información, promoción y capacitación en materia de acceso a la
información pública y denuncia de conductas violatorias a la Ley, entre otros.
De la mano con ello, es dable destacar que la Ley prevé, en su artículo 31 la
responsabilidad administrativa de aquellos funcionarios que denegaren el
acceso a información no reservada o confidencia, omitan de manera negligente
o dolosa el acceso cabal a la información solicitada, permitan acceso a
información reservada o confidencial o alteren sustraigan o modifiquen
indebidamente información que se encuentra bajo su custodia.
Como conclusión de lo expresado, cabe concluir que si bien la norma aún no
ha sido reglamentada, y despierta dudas sobre algunos aspectos que deberán
ser interpretados, entendemos que la Ley 18.381 implica un importante avance
a los efectos de ampliar la transparencia de la actuación estatal, así como el
libre acceso a la información pública para todos las personas.
* Integrante del Staff jurídico de Rueda, Abadi & Pereira
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