Tras cuatro cursos escolares trabajando en Tres Idiomas ha llegado el momento de volver a mi tierra. Me hubiera gustado poderme despedir tranquilamente, pues esperaba acabar el curso aquí, sin embargo me han llamado de la escuela infantil de España donde me van a contratar diciéndome que no podían esperar al próximo curso y que me necesitan ya. Estos cuatro años han sido unos años en los que he disfrutado de vuestra compañía, he visto crecer a mis niños (así es como siempre los llamo yo) he aprendido muchísimo, los niños me han alegrado esos momentos duros en los que echas de menos a tu familia, pues aunque me he encontrado como en casa… 3000 kilómetros son muchos. Ha sido una decisión difícil, porque me siento muy a gusto profesional y personalmente, pero la he tenido que tomar pues “el tren” no pasa dos veces. Sabéis que dejo aquí grandes amistades, un trocito de mí y espero no perder el contacto con esta maravillosa familia que es Tres Idiomas. Muchos besos y ya sabéis que en España tenéis una amiga Anabel