Estudio Comparativo del Concepto de Regalías Contenido en los Modelos de Convenio para Evitar la Doble Imposición y su Alcance en Materia de Propiedad Intelectual José Miguel Ceballos Delgado Abstract El artículo de “Estudio comparativo del concepto de regalías contenido en los modelos de convenio para evitar la doble imposición y su alcance en materia de propiedad intelectual” de el Dr. José Miguel Ceballos Delgado pretende establecer un análisis dinámico sobre la exclusión de gravámenes tributarios que recaen sobre un mismo contribuyente por parte de dos o más Estados desde la perspectiva de las rentas o regalías percibidas por la explotación de derechos de propiedad intelectual. En esta medida, el escrito estudia la imposición en los bienes intangibles protegidos por las normas de propiedad intelectual, pues aquellos dan origen a negocios jurídicos que generan una utilidad susceptible de ser excluida de una doble imposición. Para tal fin, se analizarán las diferentes definiciones que ofrecen los modelos de convenios sobre doble imposión de Naciones Unidas, Estados Unidos y la OCDE, con el propósito de evaluar el efecto que tienen sobre la calificación de la renta producida por bienes intagibles. Enseguida se determinarán cuáles son los elementos que se integran a la defición de regalía en los tratados de doble imposición y cuáles son los criterios para calificar una renta o utilidad como regalia a partir de lo establecido en el tratado. Finalmente, se calificará con base en los elementos y criterios analizados el caso del Sofware, el de Derechos a la imagen de los Artístas y Deportistas, y la calificación de la renta derivada de contratos donde se trasfiere el Know How y en los contratos de prestaciones mixtas. Consideraciones Preliminares El concepto de doble imposición hace referencia al gravamen tributario que recae sobre un bien o una renta en más de un Estado durante un mismo periodo tributario o de imposición. Este concepto ha sido acuñado desde mediados del siglo XX para evitar que una persona deba incurrir en un doble pago de impuestos en dos Estados diferentes por la misma actividad o explotaciòn de los derechos que es titular. Esta exclusión tributaria dependerá del convenio internacional para evitar la doble imposición celebrado por los Estados interesados, pues será dicho instrumento el que defina si determinada actividad o bien es beneficiario de la excepción de doble erogación tributaria o si , por el contrario, es objeto de la misma. Esta figura al estar consagrada en un instrumento internacional, como lo son los tratados o convenciones, le son aplicables los principios de Derecho Internacional Público en materia de interpretación, resolución, contenido y demás aspectos que rigen el derecho de los tratados internacionales. Esto implica que el analisis de las obligaciones contenidas en el tratado se sujetan al contenido mismo del instrumento y de forma suplementaria a la Covención de Viena de 1969 sobre el Derecho de los Tratados. Estos convenios internacionales si bien nacen de la libre voluntad de los Estados de limitar su soberanía fiscal en favor de los nacionales o residentes, también acojen modelos internacionales como el de la OECD, Estados Unidos y Naciones Unidas, que en terminos generales están encaminados al mismo propósito guardando algunas difertencias sutiles de suma importancia. Si bien la figura de doble imposición no es de reciente creaciòn, actualmente sí es posible afirmar que cobrá mayor vigencia debido a la apertura econòmica y al comercio electrónico, fenómenos que facilitan el flujo de bienes intangibles entre países y por ende generan una controversia sobre las cargas tributarias que debe cumplir el titular de este tipo de bienes. En efecto, cuando un inversionista quiere incursionar en el mercado de otro país con su bien o servicio debe establecer cuáles son los gravamenes que recaeran sobre su utilidad o renta en aras de minimizar su riesgo, debiendo para ello evaluar previamente la interacción de los sistemas tributarios del Estado donde reside (Estado Residente) y del Estado donde se realiza el acto jurídico que genera las utilidades (Estado Fuente). Las medidas para evitar la doble imposición sólo operarán cuando: el Estado Residente (del cual proviene el inversor) ha celebrado un tratado internacional que se encuentre en vigor con el Estado Fuente (donde se realiza la actividad que genera la renta o utilidad) y, por otro lado, cuando la utilidad que produce una actividad comercial se enmarca en la definición de regalía del tratado, de lo contrario se entenderá que lo percibido es un “beneficio empresarial” y por lo tanto no estaría cubierto por la excepción de doble imposición, debiendo así correr con los gastos derivados de un doble cobro tributario. El debate sobre la existencia de una renta susceptible de calificarse como regalia o como beneficio empresarial es importante en los nuevos modelos de negocios jurìdicos, como son los casos del software, las utilidades de artistas y deportitas, y la renta derivada del Know How y contratos con prestaciones mixtas. En el primer caso, se argumentará que una renta proveniente de una operacion realizada por un software podrá ser considerada como regalía siempre y cuando: (i) la renta se percibida por el beneficiario efectivo a causa de una licencia de uso y no una cesión; (ii) la forma de pago es indiferente siempre y cuando provenga de un contrato de licencia de uso; (iii) no se trate de un un software libre sino software propietario. En el segundo caso, se sostendrá que las utilidades de los contratos publicitarios sobre la imagen de una figura reconocida (artísta o deportitas, entre otros) deberán entenderse como regalias y cánones (art. 12 del Convenio Modelon de la OECD) y no como beneficio empresarial(art.17), pues al hacer de la imagen un signo distintivo suceptible de licenciarse, la renta percibida podrá entenderse como una utilidad ligada directamente a la explotación de este derecho y no como derivada del mismo. Finalmente, en el caso del Know How se establece la necesidad de licenciar aquel saber que trasfiere conocimiento e información no divulgada para que la renta obtenida sea entendida como regalía, y en el caso de los contratos de prestaciones mixtas será necesario, a nuestro juicio, identificar si se pretendío enajenar los bienes intagibles o si sólo se concedió el uso, pues en el primer supuesto no se excluiria de la imposición mientras que en el segundo sí. La evaluación sobre estos componentes arrojará dos grandes conclusiones en esta materia: en primer lugar, para calificar la renta obtenida por el titular de los derechos sobre los intangibles la administración deberá tener presente el acto o negocio jurídico que ha dado origen a la operación, y a partir de allí entrar a determinar la verdadera finalidad pretendida por la partes involucradas; y en segundo lugar, que para indentificar si un beneficio puede ser enmarcado dentro de la catergoría de regalía según el tratado internacional, es necesario determinar si la renta obtenida es producto de una licencia de uso o de una conceción, ya que en el primer caso se entiende formalmente como regalía y en el segundo caso como “beneficio empresarial”.