Correr en un clima caliente Los corredores que compiten en climas calurosos están expuestos a un déficit de su rendimiento. Esto pasa dado que la temperatura interna del cuerpo es de 41,6 ºC y al ejercitarse puede aumentar hasta más de 42,5 ºC. Para regular la temperatura nuestro cuerpo emplea el mecanismo del sudor, y es por ello que se debe tomar muy en cuenta la problemática de la deshidratación. Entre más calor, más sudarás y más tendrás que hidratarte. Aquí te daremos unos cuantos consejos para disminuir el calor de tu cuerpo y compensar esa pérdida de líquido a la hora de la competencia: • • • • • • • • Toma agua antes, durante y después de correr. Si te sobra agua, échatela en la cabeza y en las zonas que tengas más caliente. Usa ropa fresca y ligera, con tejidos traspirables, que puedas mojar y que se sequen rápido. La camiseta y gorra que uses deben ser de colores claros, eso hará que el cuerpo se caliente menos. Aumenta la ingesta de hidratos de carbono, ya que el cuerpo utilizará más glucógeno por el calor. Cubre las partes que sientas más calientes. Por ejemplo el cuello suele calentarse mucho porque está expuesto directamente al sol. Usa una corra con cola que cubra ese espacio. Si es posible manténgase siempre con una botella de agua para tener acceso a líquido en cualquier momento, incluso entre los puestos de hidratación que otorgue el organizador del evento. Come tabletas no energéticas con electrolitos -indispensables para evitar la deshidratación- y así reponer los electrolitos.