¿Por qué Somos Católicos? Confesión

¿POR QUÉ SOMOS CATÓLICOS?
Arzobispo Michael J. Sheehan
¿POR QUÉ LOS CATÓLICOS CONFIESAN SUS PECADOS A UN SACERDOTE?
Una de las críticas más fuertes que los protestantes hacen en contra de la Iglesia Católica es nuestra práctica de confesión sacramental. “¿Por
qué confiesan sus pecados a un sacerdote cuando pueden ir directamente a Dios?" ellos preguntan. ¿Nuestra respuesta?
Porque este sacramento es una de las bendiciones más grandes que los católicos tienen. Un sacramento que ninguna otra iglesia tiene:
absolución de pecado por medio de reconciliación o confesión. EI maravilloso sacramento Católico a través de los cuales nos arrepentimos y
somos asegurados del perdón del Señor, por uno de los representantes especiales de Dios, nuestros sacerdotes.
'ALGUIEN CON PIEL'
Me recuerda del niño que Ie tenía miedo a los truenos y los relámpagos. Una noche, cuando dormía, una tormenta violenta abría los cielos. EI
despertó aterrorizado y corría a la recámara de sus padres llorando. Su madre trató de calmarlo. "Jaime, te dije que Dios te ama y siempre está
contigo. Nunca tengas miedo. Nunca estás solo." Jaime contestó, "Yo lo sé, Mamá, que Dios me ama y escucha mis oraciones! Pero algunas
veces necesito a alguien con piel!"
Todos necesitamos a "alguien con piel". Cuando hemos pecado, ofendiendo a Dios y a su pueblo, la Iglesia, necesitamos abrir nuestros
corazones a otra persona... "a alguien con piel". Para los Católicos, ese "alguien con piel" es el sacerdote, ordenado por la Iglesia para
representar a Jesús y a la Iglesia misma. "Alguien con piel" de quien podemos pedir perdón a Dios. Y oír que esto ha sido concedido.
FUNDAMENTO DE LAS ESCRITURAS
¿Dónde en la Biblia da Jesús a los sacerdotes el poder de perdonar los pecados? En Juan 20:21-23, Jesús dice a los discípulos, "Así como el
Padre me envió a mí así los envío a ustedes... reciban el Espíritu Santo. A quienes ustedes perdonen sus pecados queden perdonados, y a
quienes no Iibren de sus pecados, queden atados." Jesús claramente esperaba que los sucesores de los discípulos, los obispos y sacerdotes a
través de los siglos, continuaran su trabajo... predicando, orando... y perdonando los pecados de los que sinceramente están arrepentidos de sus
faltas.
EI Nuevo Testamento les dice a los primeros cristianos, "Confiésense unos a otros sus pecados y oren los unos por los otros para que sean
sanos" (Santiago 5: 16).
REPRESENT ANTE DE DIOS
Los católicos no confiesan sus pecados a un sacerdote en vez que a Dios. Confesamos a un sacerdote representando a Dios. La oración de
absolución que ora el sacerdote cuando administra el sacramento dice, "Te absuelvo de tus pecados en el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo." Es en el Nombre de Dios que el sacerdote perdona, no en su mismo nombre.
Cuando un católico recibe el sacramento de reconciliación, él o ella tiene la oportunidad no solo de ser perdonado sino también de recibir
consejos del sacerdote. Consejos sabios sobre cómo vivir mejor en el futuro, viviendo la vida cristiana.
RELACIONES QUE SANAN
EI pecado ofende no sólo a Dios sino también a otros.
EI Cuerpo de Cristo, la Iglesia, es herida cuando pecamos. (EI adulterio, enojo, el racismo son ejemplos obvios.)
Cuando el sacerdote dice las palabras de absolución, somos perdonados por la Iglesia igualmente que por Dios. Somos reconciliados. Nuestras
relaciones son sanadas.
EI sacerdote también nos puede aconsejar, ofreciendo modos en que podemos compensar hasta cierto punto, las ofensas contras otros.
Una celebración pública del sacramento da una rica oportunidad para sentir la naturaleza social del pecado y del perdón. Al mismo tiempo, los
penitentes en estos servicios confiesan sus pecados y reciben absolución en privado, así protegiendo la confidencialidad del sacramento.
CONFIANZA SAGRADA
Amigos protestantes me han dicho que les daría pena decir en confesión las cosas vergonzosas que han hecho. En realidad, nuestros sacerdotes
son entrenados para reflejar la compasión y entendimiento de Jesús al pecador. EI sacerdote sabe que él también es un pecador.
¿Cuantas veces Ie ha dicho a un amigo cercano algo en confianza, para darse cuenta después que su confidente Ie dijo a alguien más? En
cambio, en un sacerdote tiene una sagrada confianza. EI no puede decirle a nadie lo que alguien Ie ha dicho en el secreta del sacramento. Ni
aún para salvar su propia vida!
BUENA SALUD
Es saludable, espiritual y psicológicamente, descargarse en una manera humilde por medio de este maravilloso regalo de Jesús a su Iglesia.
Claro que si todos nosotros podemos decirle a Dios que nos sentimos arrepentidos. Pero solamente el católico que tiene el buen juicio de
confesar regularmente tiene la gran alegría de oír a "alguien con piel" decir esas palabras aliviadoras, "Tus pecados son perdonados. Ve en
paz."