Resolución sobre el cierre de un centro residencial para personas mayores. EQ-0436/2010 y EQ 0387/2010. Recomendación a la Dirección General de Bienestar Social referente a las actuaciones que se deben llevar a cabo en los casos de cierre de centros de atención social para personas mayores en Canarias. Nuevamente nos dirigimos a V.I. en relación con los expedientes de queja que se tramitan en esta Institución con la referencia más arriba indicada (EQ-0436/2010 y EQ 0387/2010), referente al cierre de un centro residencial para personas mayores en la isla de Tenerife. Una vez llevada a cabo la correspondiente investigación, constan los siguientes ANTECEDENTES I. Desde finales del mes de marzo de 2010, vinieron apareciendo en diversos medios de comunicación de ámbito local noticias referidas al posible cierre de alguna o varias de las residencias de mayores que gestionaba la entidad FUNFEMAC en Canarias. Las residencias a las que aludían las noticias eran las situadas en La Matanza de Acentejo, Buenavista del Norte y Adeje, en Tenerife. Asimismo, se recibió en el Diputado del Común un escrito de queja presentado por un familiar de un usuario de la residencia de La Matanza, alusivo a este asunto. A la vista de estos antecedentes, y con base en el artículo 16.c) de la Ley 7/2001, de 31 de julio, del Diputado del Común, que establece que es función del mismo la protección de los derechos de los sectores de población más desprotegidos, y en el artículo 22.1 de la citada Ley, en cuya virtud las actuaciones del Diputado del Común, en el ámbito de sus funciones, podrán iniciarse de oficio o a petición del interesado, esta Institución acordó la apertura de expediente de oficio para conocer la situación en que se encontraban los referidos centros residenciales para personas mayores. A este escrito de queja se ha acumulado, por razones de economía, la queja instada por un particular (EQ 0387/2010). II. Una vez incoada la queja, el Diputado del Común acordó solicitarle informe acerca de si se había comunicado a esa Dirección General el posible cierre o la suspensión, parcial o total, temporal o definitiva, del servicio, y, en caso afirmativo, si se había acompañado la comunicación de la preceptiva memoria comprensiva de las fases previstas para la 1 realización del cierre o suspensión, información de los eventuales perjuicios que se pudieran ocasionar a los usuarios y propuestas de alternativas para la solución de sus necesidades. Igualmente, en nuestra solicitud de informe requerimos que se nos informase si se había presentado un plan o previsión para la restitución de la parte de financiación no amortizada, en el caso de que el referido centro hubiera estado subvencionado con cargo a los presupuestos públicos y, finalmente, la valoración de la Dirección General de Bienestar Social del posible cierre de la referida residencia y las medidas que se preveían adoptar. III. En respuesta a nuestra solicitud de informe, esa Dirección General de Bienestar Social nos comunicó lo siguiente: “La Dirección General de Bienestar Social en ningún momento ha recibido aviso o noticia directa, por parte de los responsables de la Residencia de Mayores de La Matanza de Acentejo, relativa al próximo cierre del Centro. Únicamente, y de resultas de la comunicación efectuada por este Centro Directivo a la Asociación "Nuevas Alternativas", gestora del Centro por convenio de cesión de la FEMAC , de la suspensión de subvención al mantenimiento por causa del embargo preventivo recaído por deudas a la Seguridad Social, la Directora General de la Fundación Canaria FEMAC remite a esta Dirección General, en fecha 13 de enero de 2010, un escrito en el que informa de sus gestiones para reconducir la deuda existente con la Seguridad Social y de la posibilidad, de no solucionarse el problema, de tener que recurrir al cierre de los Centros. (…). Fuera de lo anteriormente detallado, la Fundación no ha efectuado comunicación alguna a esta Dirección General en relación con la clausura de sus Centros, no habiendo presentado, por tanto, memoria relativa a las fases del mismo, de las previsiones de perjuicios y posibles alternativas, ni tampoco de la existencia o previsión de plan alguno para la restitución de la parte de financiación no amortizada. La Dirección General de Bienestar Social, antes del cierre del Centro, y ante la evidencia de la situación deudora de la Entidad con la Seguridad Social y el consiguiente embargo preventivo que tal situación genera, adoptó, con obligado carácter cautelar, la medida de comunicar al responsable del Centro la imposibilidad de otorgar subvención económica alguna mientras persistiese la situación irregular del mismo con la Seguridad Social. Una vez sobrevenido el cierre de la Residencia, esta Dirección General no pudo tener intervención en el caso, por causa de la asignación de competencia en materia de gestión de Centros Públicos o financiados de atención a Mayores efectuada a los Cabildos Insulares respectivos.” 2 A la vista de los hechos reseñados, esta Institución estima necesario realizar las siguientes CONSIDERACIONES Primera.El Decreto 63/2000, de 25 de abril, por el que se regula la ordenación, autorización, registro, inspección y régimen de infracciones y sanciones de centros para personas mayores y sus normas de régimen interno, señala en su artículo 19 que cuando el titular de un centro proyecte su cierre o la suspensión, parcial o total, temporal o definitiva, del servicio que presta, deberá comunicarlo por escrito, con tres meses de antelación, a la Dirección General de Servicios Sociales. Además, el titular del centro debe acompañar dicha comunicación de una memoria comprensiva de las fases previstas para la realización del cierre o suspensión, información de los eventuales perjuicios que se pudieran ocasionar a los usuarios y propuestas de alternativas para la solución de sus necesidades. Finalmente, el epígrafe 3º de dicho artículo especifica que en el supuesto de que el centro haya estado subvencionado con cargo a los presupuestos públicos, se deberá restituir la parte de financiación no amortizada. A la vista de su informe, no consta que el titular del centro haya cumplido con las obligaciones formales, materiales y financieras que comporta el cierre de un servicio residencial para personas mayores. Pese a lo anterior, en su informe se hace una referencia a la asignación de competencia en materia de gestión de Centros Públicos o financiados de atención a Mayores efectuada a los Cabildos Insulares respectivos, lo cual a su juicio imposibilita la intervención de la Dirección General una vez sobrevenido el cierre del centro. Segunda.La Ley 8/2001, de 3 de diciembre, de modificación parcial de la Ley 14/1990, de 26 de julio, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas de Canarias ha establecido una nueva redacción a la Disposición Adicional Primera de la citada Ley, de forma que se transfieren a las Islas, en su ámbito territorial respectivo, entre otras, las competencias administrativas sobre las materias de asistencia social y servicios sociales. Hasta el momento de entrada en vigor de la Ley 8/2001, estas competencias figuraban como delegadas, por Decreto 160/1997, de 11 de julio, teniendo en cuenta la legislación vigente aprobada con posterioridad al referido Decreto. 3 En desarrollo de esta Ley se ha dictado el Decreto 113/2002, de 9 de agosto, de traspaso de funciones de la Administración Pública de la Comunidad Autónoma de Canarias a los Cabildos Insulares en materia de servicios sociales especializados a personas mayores, minusválidas y mujeres. Entre las competencias que se transfieren mediante este Decreto a los Cabildos insulares, en lo que se refiere a centros de mayores figuran: “b) Gestionar los servicios y centros de atención social de personas mayores y de personas con minusvalías. c) Conceder, con informe preceptivo y no vinculante de la Administración de la Comunidad Autónoma, las autorizaciones de apertura y funcionamiento de los centros de mayores y minusválidos de titularidad pública y/o privada radicados en su ámbito insular, informando de ello al Departamento de la Comunidad Autónoma competente en materia de servicios sociales a efectos de la oportuna inscripción en el Registro de ámbito autonómico regulado en el Capítulo V del Decreto 63/2000, de 25 de abril. d) Gestionar, en el ámbito insular, un Registro de Entidades, Centros y Servicios de Atención a Personas Mayores, sin perjuicio de la competencia de la Comunidad Autónoma de Canarias para gestionar el Registro de ámbito autonómico referido en el apartado anterior. e) Aprobar, cuando se adecuen a la normativa en vigor, los Reglamentos de Régimen Interno de los centros y servicios de atención a personas mayores y minusválidas. h) Vigilar y exigir el cumplimiento de las condiciones y requisitos de los centros objeto de transferencia, sin perjuicio de la competencia de inspección y control, y de la potestad sancionadora que la continuará ostentando la Comunidad Autónoma de Canarias. i) Tramitar, valorar y resolver las solicitudes de ingreso de usuarios a plazas en centros de atención social, propias o concertadas, de atención a las personas mayores y a personas con minusvalía, así como las peticiones de acceso temporal y estancias diurnas.” Sin embargo, no figura entre estas competencias transferidas alusión alguna a los procesos de cierre de los centros de mayores, cuyos requisitos formales y materiales están regulados, como indicamos anteriormente, en el artículo 19 del Decreto 63/2000, de 25 de abril, por el que se regula la ordenación, autorización, registro, inspección y régimen de infracciones y 4 sanciones de centros para personas mayores y sus normas de régimen interno. Por el contrario, a tenor de lo dispuesto en este Decreto 113/2002, de 9 de agosto, corresponde a la Administración Pública de la Comunidad Autónoma la potestad inspectora, controladora y sancionadora regulada en los Títulos IV y V de la Ley 3/1996, de 11 de julio, de participación de las personas mayores y de la solidaridad entre generaciones (artículo 3 d.), así como “Cualquier otra competencia que expresamente no haya sido transferida a los Cabildos Insulares” (artículo 3 n.). Entendemos que ante la ausencia de transferencia específica de la función de recepción de la comunicación, documentación y propuestas de solución que van aparejadas a un proyecto de cierre de una residencia, éstas deben continuar siendo ejercidas por esa Dirección General de Bienestar Social, sin olvidar el inicio de las actuaciones tendentes a la restitución de la financiación no amortizada, en el caso de que haya percibido subvenciones a cargo de los presupuestos públicos, procediendo, en caso de que se produzcan incumplimientos de las obligaciones legalmente establecidas a comunicar las mismas al órgano competente para incoar el correspondiente expediente sancionador. En virtud de los antecedentes y de las consideraciones expuestas, de conformidad con lo dispuesto en el art. 37.1 de la Ley 7/2001, de 31 de julio, HE RESUELTO remitir a V.I. la siguiente Resolución del Diputado del Común: RECOMENDACIÓN - En los casos de cierre de centros de atención social para personas mayores, esa Dirección General de Bienestar Social debe verificar el cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 19 del Decreto 63/2000, de 25 de abril, por el que se regula la ordenación, autorización, registro, inspección y régimen de infracciones y sanciones de centros para personas mayores y sus normas de régimen interno y proceder, en caso de incumplimiento, a comunicar los hechos al órgano competente para la incoación de expediente sancionador por infracción de lo dispuesto en la Ley 3/1996, de 11 de julio, de participación de las personas mayores y de la solidaridad entre generaciones. De conformidad con lo previsto en el art. 37.3 de la citada Ley 7/2001, deberá comunicar a este Comisionado Parlamentario si acepta o rechaza la presente Resolución del Diputado del Común, en término no superior al de un mes. En el supuesto de que acepte la Resolución, deberá comunicar las medidas adoptadas en cumplimiento de la misma. En el caso contrario, 5 deberá remitir informe motivado del rechazo de la Resolución del Diputado del Común. Para su conocimiento, le comunico que esta Resolución será publicada en la página web institucional (www.diputadodelcomun.org), cuando se tenga constancia de su recepción por ese organismo. 6