36 A. CABRERA A u n en terreno llano, el ser derribado de g r u p a no implica desventaja ninguna para un caballo. E n la raza inglesa de carreras se v e n tantos ejemplares, p o r l o míenos, de g r u p a derribada como de g r u p a horizontal, y estos caballos que un hipólogo intransigente consideraría defectuosos no hacen en los hipódromos peor papel que los otros, antes bien se cuentan entre ellos muchos f a mosos ganadores de grandes premios ( F i g s . 20 y 2 1 ) . Fig. 21.—<Ukko», caballo inglés de carreras, del Marqués de Villamejor, ganador del Gran Premio de San Sebastián en 1 9 1 8 . Otro ejemplo notable de grupa derribada en la raza «rhoroughbred». Fot. A. Cabrera. III.—El caballo moruno y el indígena.—Costumbres hípicas marroquíes. T o d a v í a m á s que el trato que los moros d a n a sus caballos, influye en que éstos se estropeen y arruinen, perdiendo' una g r a n parte de sus buenas cualidades, el u s o p r e m a t u r o que de ellos hacen. Generalmente, el indígena de M a r r u e c o s empieza a montar el caballo hacia los dos años, y aunque es v e r d a d que entonces p r o c u r a no hacerle trabajar demasiado, no le importa e m - plearlo en largas marchas ni hacerle dar fatigosas carreras. A