APRENDIZAJE LECTOESCRITOR: Dislexia, disgrafía, disortografía y discalculia. Es importante en primer lugar recordar que la lectoescritura es la forma de comunicación más compleja que posee la persona. Es significativo decir que: La lectura es la interpretación del sentido de un texto a través de un proceso de percepción visual y reconocimiento del mismo. Es la decodificación de un texto escrito o impreso, pronunciando o no el valor de los sonidos representados. La escritura es la representación de ideas por medio de signos y más especialmente la lengua hablada por medio de letras, figuras, el pensamiento por medio de signos convencionales. La escritura es la pintura de la voz. Son muchos los procesos implicado en el proceso de lectoescritura. Nos encontramos con los sistemas representacionales, que son todos aquellos que nos permiten reconocer la palabra dentro de una ortografía alfabética; y los sistemas cognitivos implicados en la lectura y en el aprendizaje (atención, aprendizaje asociativo, transferencia intermodal). Al hablar de aprendizaje lectoescritor, no podemos olvidarnos de dedicar unas líneas a la comprensión de textos. Podemos definir compresión (Hodges, 1981) como el proceso de elaborar el significado por la vía de aprender las ideas relevantes del texto y relacionarlas con las ideas que ya se tienen. Es el proceso a través del cual el lector interactúa con el texto. Decir que uno ha comprendido un texto equivale a afirmar que ha encontrado un cobijo mental, un hogar, para la información contenida en el texto o bien que ha transformado un hogar mental previamente configurado para acomodarlo a la nueva información. Los condicionantes de la comprensión que hay que tener en cuenta son: Tipo de texto, El lenguaje oral, Las actitudes, El propósito de la lectura, El estado físico y afectivo general Tras estas consideraciones básicas que nos ayudan a comprender mejor que es la lectura y la escritura podemos decir que los problemas que existen en el aprendizaje lectoescritor son: dislexia disgrafía disortografía discalculia DISLEXIA: El CIE define dislexia como un déficit especifico que no se explica por el nivel intelectual, por problemas de agudeza visual o auditiva o por una escolarización inadecuada. Podemos entender la dislexia como aquella condición relacionada con una alteración en el neurodesarrollo que lleva consigo una discapacidad específica y persistente para adquirir de forma eficaz las habilidades lectoras, a pesar de presentar un nivel intelectual adecuado, disponer de los oportunos recursos escolares y sociofamiliares, buena disposición y motivación hacia el aprendizaje y no presentar ninguna deficiencia neurológica, psíquica ni sensorial. Podemos distinguir varios tipos de dislexia: Dislexia adquirida o Dislexia fonológica o Dislexia superficial o Dislexia semántica o Dislexia profunda o Dislexia auditiva o Dislexia visual Dislexia del desarrollo: no hay signos de daño cerebral Dislexia evolutiva: aparecen dificultades y rápidamente estos síntomas desaparecen durante el aprendizaje Dislexia profunda: o Según el tipo de síntomas Dislexia fonológica Visual o superficial o Según el momento del diagnostico Dislexia especifica Dislexia de comprensión La dislexia afecta directamente a la lectoescritura. Las consecuencias de la dislexia en la vida, van a depender de las características personales. Por ello es necesario una evaluación exhaustiva de cada persona (percepción, psicomotricidad, funcionamiento cognitivo, psicolingüístico, lenguaje) y una intervención personalizada. DISGRAFÍA: Según Ajuriaguerra, los desórdenes en la escritura no son otra cosa que el cristal de aumento de las dificultades motrices, praxicas de tensión, afectivas o de desconocimiento de la lengua. Gracias a esta definición podemos decir que las dificultades en la escritura se presentan en tres niveles distintos: Ámbito motor Ámbito perceptivo Ámbito afectivo A su vez estas dificultades puede tener tres orígenes distintos: deficiencias o carencias personales, carencias socioculturales o déficit en el método de enseñanza. Dentro de la digrafía podemos distinguir: Digrafías adquiridas: según Ortiz, 1995, dentro de este grupo a su vez distinguimos: o Digrafías centrales Fonológicas Superficiales Profundas Semánticas o Digrafías periféricas: está afectada el área motor. Digrafías grafo-motrices evolutivas o Digrafía primaria o funcional o Digrafía secundaria o sintomática Respecto a la evaluación, podemos decir que no existen pruebas específicas ni completas, dirigidas a valorar el grafismo. Si se cuenta con algunos subtest incorporados a pruebas lectoras que valoran el grafismo. No obstante es importante no conformarse con esto y realizar una evaluación global que nos permita establecer la intervención más adecuada. DISORTOGRAFÍA La disotografia es una alteración en la ortografía que afecta a la palabra; es una dificultad para asociar correctamente los fonemas con sus grafemas, para atender a las peculiaridades ortográficas de las palabras y para asimilar y aplicar las reglas de ortografía. Existen varios tipos de disortografia (Tsvetkova, 1977 y Luria 1989) Temporal Perceptivo – cinestesica Cinetica4visioespacial Dinámica Semántica Cultural Es importante antes de continuar, decir que para la correcta adquisición de la ortografía son necesarios varios requisitos: control motor, desarrollo del procesamiento visual, memoria visual, desarrollo del procesamiento auditivo, percepción espaciotemporal, desarrollo del pensamiento lógico, habilidades lingüísticas, adecuado control emocional, motivación, adaptación escolar. Si tenemos en cuenta estos requisitos podemos decir que las causas de las disortografia son: Problemas perceptivos Problemas de tipo intelectual Problemas lingüísticos Problemas de tipo afectivo – emocional Por tanto la evaluación debe ser global. Es necesario evaluar todos los requisitos necesarios para la adquisición de la ortografía, los cuales hemos mencionado. Además de realizar pruebas específicas de ortografía. Según los resultados de la evaluación, dirigiremos la intervención. Sin olvidar que esta intervención debe ser individualizada. La disortografia tiene repercusión en el rendimiento académico del niño, las características que presentan los textos de estos niños son: Sustitución de fonemas Omisión de fonemas Adiciones de fonemas Inversiones de fonemas Adición de elementos inadecuados Confusión en palabras con fonemas que admiten doble grafía (ej. B y v) Omisión de la letra h Errores en la unión y separación de silabas Errores en las reglas ortográficas Utilización inadecuada de las reglas de puntuación No respetan las mayúsculas Omisiones o uso incorrecto de tildes. DISCALCULIA: Antes de adentrarnos en el tema es importante tener en cuenta que la nueva educación matemática pretende ir mas allá de la enseñanza de un conjunto de técnicas más o menos sofisticadas, útiles en la resolución de problemas y conocidas como matemáticas prácticas, intentando atender algunos aspectos que escapaban a la propia materia como: (Morales, A., 2005) Reconocer en ella un elemento esencial de comunicación Fomentar la confianza en el alumno Desarrollar un mayor dominio en el mismo Potencia hábitos de estudio y responsabilidad Favorecer una nueva visón de cultura, escuela y maestro. Es importante saber que 25% de los alumnos con dificultades específicas de aprendizaje tienen problemas con el cálculo y/o solución de problemas, y cuando se dan combinados con problemas lectoescritores el porcentaje aumenta hasta casi un 55%. Por tanto de estos datos podemos ver la relevancia que tiene el abordaje integral de este fenómeno. Según el manual estadístico y diagnóstico de los trastornos mentales, podemos definir este trastorno en función de los siguientes criterios: Capacidad aritmética: por debajo de lo esperado Trastorno de calculo Si existen déficits sensoriales, las dificultades para el rendimiento en cálculo exceden las habitualmente asociadas a ellas. Si buscamos una definición exacta podemos decir que es un desorden estructural de las habilidades matemáticas que ha sido originado por un desorden genético o congénito de aquellas partes del cerebro que son el substrato anatómico – fisiológico directo de la maduración de las habilidades matemáticas adecuadas a la edad, sin un desorden simultaneo de funciones mentales generales. (Kosc, 1974) Este autor a su vez ofrece una clasificación de las discalculias: Disclaculia verbal Léxica Grafica Pratognóstica Idiognóstica Operacional