En la ciudad de San Nicolás de los Arroyos, a los 21 días del mes de agosto de 2007, la Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo con asiento en San Nicolás, integrada por los Dres. Damián Nicolás Cebey, Marcelo José Schreginger y Cristina Yolanda Valdez, se reúne en Acuerdo Ordinario para dictar sentencia interlocutoria en los autos "B. J. Y OTROS C/ MINISTERIO DE SEGURIDAD -POLICIA DE LA PROVINCIA S/ PRETENSIÓN INDEMNIZATORIA“, en trámite bajo el nº 177-2007. Según el sorteo efectuado se estableció el siguiente orden de votación: Dres. Marcelo José Schreginger, Cristina Yolanda Valdez y Damián Nicolás Cebey. El Tribunal estableció la siguiente cuestión a resolver: ¿Es ajustada a derecho la resolución apelada? A la cuestión, el Dr. Schreginger dijo: I. A fs. 217/219 la parte actora interpone recurso de reposición con apelación en subsidio, contra la sentencia interlocutoria de fecha 1 de febrero de 2007 -obrante a fs. 214- emanada de la Sra. Juez a quo del Juzgado en lo Contencioso Administrativo nº 1 de Pergamino, por la cual deja sin efecto el llamado de autos para sentencia de fs. 213, hasta tanto se acredite que se ha dictado resolución firme en la causa penal que en copia obra agregada al presente, atento lo prescripto por el artículo 1101 del Código Civil. Para así resolver la Magistrada tiene en cuenta que el citado artículo dispone: "Si la acción criminal hubiere precedido a la acción civil, o fuere intentada pendiente ésta, no habrá condenación en el juicio civil antes de la condenación del acusado en el juicio criminal..."; entiende -con cita de doctrina (v. Bueres, Alberto J. y Highton, Elena I., Código Civil, Tomo 3A, Buenos Aires, Hammurabi, 1999, página 305)- que la norma transcripta en su parte pertinente "deja en claro que lo que debe suspenderse no es la tramitación del proceso civil resarcitorio inherente a la acción noxal sino la sentencia que en el mismo deba dictarse...". Como consecuencia de lo dicho, ordena librar oficio a los efectos de conocer el estado de la Causa I.P.P. Nº 32.453. II. Argumentó la apelante que la resolución recurrida es contraria a derecho, que el fundamento de la responsabilidad del Estado no se asienta en la culpa de los empleados o funcionarios públicos, de manera que, a los fines de determinar la existencia del factor de atribución de la responsabilidad pública, resulta innecesaria la calificación penal de la conducta de los agentes. Citó jurisprudencia y doctrina relacionada con la responsabilidad del Estado por falta de servicio. Indicó que, en el caso, no hay posibilidad de dictarse dos sentencias contradictorias (strepitus fori que intenta evitar la regla de la prejudicialidad), que la averiguación penal podría condenar o absolver al personal policial sospechado, pero no podría negar la muerte de L. J. B. ocurrida en la Comisaría Primera de Pergamino. Adujo que la prejudicialidad automática ocasiona agravio irreparable, puesto que el tiempo que demoraría la sentencia firme de la instrucción penal podría dilatar in eternum la resolución de la pretensión motivo de auto, teniendo en cuenta -dijo- los posibles recursos a interponer e incluso planteo de nulidades. Por último citó jurisprudencia, resaltando que se puede generar un escándalo mayor si se priva a los litigantes del derecho a obtener una sentencia civil en un plazo razonable, finiquitando el conflicto de intereses. Solicitó se revoque el proveído recurrido. III. Corrido traslado a la demandada para el responde, ésta no ha hecho uso de tal derecho. IV. Resuelta la admisibilidad del recurso en análisis (fs. 239), y encontrándose los autos para resolver, corresponde pronunciarme sobre la procedencia de la medida adoptada a fs. 214. La decisión de la a quo -invocando el artículo 1101 del Código Civil- deja sin efecto el llamado de autos a sentencia de fs. 213, hasta tanto se acredite que se ha dictado resolución firme en la causa penal que en copia obra agregada al presente. En adelanto de opinión, tengo para mí que el recurso debe prosperar. Tal posición la sostengo en atención a los términos de la demanda en los que el actor encuadró su reclamo y en los que quedó trabada la litis. Así también, con base en las constancias de la Causa Penal, de las que surge que el resultado final de ella -sea cual fuere- no cambiaría el análisis y el posterior encuadre jurídico que el Juez de Primera Instancia debe hacer para resolver en definitiva. Por una parte los actores recurren a esta sede -según surge de demandasolicitando el resarcimiento de daños y perjuicios contra la Provincia de Buenos Aires por el deceso de L. J. B., no controvirtiéndose el hecho que éste decidió prenderse fuego con la intención de poner fin a su vida cuando se encontraba detenido en la Comisaría Primera de la ciudad de Pergamino. Mientras que, de las constancias obrantes -en autos- respecto de la causa penal surge que, con motivo de la muerte de R. M. C., J. C. T. y J. L. B. se inicia ante el Juzgado de Garantías de Pergamino, la causa nº 32453. En dicha causa se tuvo como imputados a R. M., A. L. T., E. L., D. D., D. A., J. D. G., J. R. P. y R. C. M., por el delito de Violación de Deberes de Funcionario Público; y en fecha 17 de diciembre de 2004 se formuló requerimiento de elevación a juicio solamente para R. M. (titular o Jefe de la Comisaría Pergamino Seccional Primera de Pergamino -septiembre /octubre de 2003-) y para A. T. (Oficial de Servicio) y se postula el sobreseimiento parcial de los restantes imputados. La resolución penal a dictarse -sea de condena, de absolución o de sobreseimiento (para M. o T.)- no influye ni puede producir pronunciamiento contradictorio en esta sede, ya que -como antes expresara- lo que aquí se pretende es responsabilizar al Estado por su actuación u omisión en el ejercicio de sus funciones, alegando responsabilidad objetiva y directa del Estado. Por tanto, no veo que los pronunciamientos a dictarse se encuentren estrechamente vinculados con fuerza para impedir el dictado de la sentencia pertinente. Resulta aclaratorio para el caso la siguiente cita "Existe una corriente de doctrina jurisprudencial de interpretación amplia, que consideramos acertada, que interpreta que el artículo 1101 se aplica a cualquier clase de proceso civil donde la sentencia penal pueda tener influencia importante..." (página 24, Código Civil Comentado. Doctrina - Jurisprudencia - Bibliografía, Responsabilidad Civil Artículos 1066 a 1136 de Jorge Mosset Iturraspe - Miguel A. Piedecasas, Editorial Rubinzal Culzoni). Como bien dice la doctrina referida, la influencia debe ser importante; la que no se visualiza en el caso. Aquí se pretende atribuir una responsabilidad objetiva, más allá de la punición -o no- que pueda corresponder en sede penal a los funcionarios imputados. Luego, y aún considerando innecesario el tratamiento del restante agravio referido al tiempo que demoraría la sentencia firme de la instrucción penal- resulta interesante recordar que la Corte Suprema de Justicia se ha expedido sobre el tema en la causa "Atanor S.A. c/ Estado Nacional Dirección Gral. de Fabricaciones Militares s/ Daños y Perjuicios", A. 342. XLII. En la resolución señalada, la CSJN ha expresado que: "En efecto, al fallar en el caso Ataka esta Corte consideró, ante la suspensión que hasta ese momento se había extendido por espacio de cuatro años, sin posibilidad de una pronta conclusión, que ello constituía una 'dilación indefinida' a la que atribuyó el carácter de agravio a la garantía constitucional del derecho de defensa, produciendo una efectiva privación de justicia (Fallos: 287; 248; 250) cuando existe agravio a la garantía constitucional del derecho de defensa, produciendo una efectiva privación de justicia". Por todo ello, atendiendo las circunstancias del caso, se impone acoger el recurso, por cuanto no existe posibilidad de caer en escándalo jurídico, toda vez que no se violenta la norma del artículo 1101 del Código Civil y, por el contrario, la suspensión -en las condiciones descriptas- no se encuentra justificada suficientemente e implica una denegatoria de justicia para los actores. Por ende, con base en tales argumentos, propongo revocar la sentencia en crisis. ASÍ VOTO. La Dra. Valdez sostuvo: Compartiendo los criterios expuestos por el Dr. Schreginger, voto en igual sentido. El Dr. Cebey señaló: Coincidiendo con los preopinantes, adhiero al voto antes expresado. Por las razones vertidas, este Tribunal RESUELVE: 1º) Revocar la resolución apelada, en cuanto ha sido materia de agravios; 2º) Costas por su orden (artículo 51 CPCA).Regístrese, notifíquese y oportunamente, devuélvase. MARCELO JOSÉ SCHREGINGER CRISTINA YOLANDA VALDEZ DAMIÁN NICOLÁS CEBEY ANTE MÍ: