Recomendaciones para hacer masajes a la guagua

Recomendaciones para hacer masajes a la guagua
Hacer un masaje a tu guagua puede ser una experiencia maravillosa tanto
para tu hijo o hija como para ti. A través de los masajes puedes aprender a
conocer mejor a tu guagua, al mismo tiempo que le entregas cariño y
beneficias su desarrollo y salud.
Puedes comenz ar a masajear a tu guagua desde
el primer mes de vida, al comienzo realizaras
movimientos más suaves, y en la medida que tu
hijo o hija crece, aprenderás sus gustos y
sentirás más confianza para realizar un mejor
masaje. Es ideal practicar el masaje varias veces
a la semana (en la medida que tu tiempo lo
permita) y puedes seguir practicándolo hasta
que tu hijo o hija tenga varios años.
Aquí te damos algunas recomendaciones para que puedas ser el/la mejor
masajista de tu guagua…
Beneficios de los masajes
Los masajes son muy beneficiosos, tanto para el desarrollo emocional de la
guagua como para su salud y desarrollo físico; algunos de los principales
beneficios de éstos son:
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Tonifica la musculatura
Mejora el sistema inmunitario , previniendo enfermedades recurrentes
como gripes o alergias.
Mejora la adaptación e incentiva la inteligencia
Combate el insomnio facilitando el buen descanso
Relaja y disminuye el estrés
Estimula el sistema nervioso y la conexión interneuronal
Estimula la liberación de endorfinas, hormona que ayuda a controlar
el dolor y produce placer
Estimula la producción de melatonina, hormona que ayuda a un
mejor y más fácil dormir.
Aumenta el apetito y la absorción de nutrientes, por tanto ayuda a
aumentar de peso
Disminuye los periodos de hospitalización
Facilita el desarrollo psicomotor
Facilita la maduración del aparato locomotor y digestivo
Recomendaciones
Es importante que el masaje se realice sólo si se quiere dar, tocando con
firmeza, ritmo y lentitud el cuerpo de la guagua. Antes de comenzar relaja
tus manos, muévelas y ponte cómodo/a en una superficie firme.
Usa siempre aceite, puede ser un aceite para bebés o incluso usar aceite
común de cocina. Si la guagua es muy pequeña evita usar aceites con
aromas o esencias ya que estas pueden ser alergénicas. El aceite colócalo
sobre tus manos y frótalas para calentarlo un poco.
Busca una habitación tranquila, cálida, puedes colocar un poco de música
tranquila y bajar la intensidad de la luz.
Así mismo, busca la hora del día más adecuada para realizarlo, no lo
realices si la guagua ha comido recién (ojala después de dos horas de la
última comida). Puede ser antes de la hora de dormir o puedes acabarlo con
un rico baño. Por lo general un masaje dura entre 20 y 30 minutos.
Puedes masajear todo el cuerpo del niño o niña, busca la técnica que más
te acomode, pero establece una rutina que se repita siempre completa. Así
la guagua sabrá “qué viene” y “cuándo” finaliza su masaje.
Recuerda:
• Ten las uñas cortas, y no uses anillos o reloj
• El ambiente debe estar tan cálido como para tener cómodamente al
niño/a desnudo/a.
• Respeta el ritmo de la guagua, ni con hambre ni recién alimentada, y
haz cada movimiento varias veces a un ritmo lento y constante.
• Durante el masaje puedes mirar al bebé, cantarle o hablarle, o
simplemente estar ambos en silencio.
Nunca realices un masaje si…
Nunca realices un masaje si el niño o niña presenta alguno de los siguientes
síntomas:
ü Fiebre
ü Vómitos
ü Dolor abdominal o diarrea
ü Pérdida de sangre
ü Enfermedad contagiosa
ü Ni lo realice sobre heridas, inflamaciones o infecciones locales