Aprendemos el juego de los vasos Si hacemos el recitado rítmico acompañando el juego de los vasos de manera acumulativa, ayudamos a memorizar la secuencia de movimientos. El vaso está boca abajo en el suelo o en una mesa. Cogemos el vaso con la mano derecha. Lo cambiamos de mano cuando decimos “cambio” y picamos con la izquierda (plica abajo) con la base del vaso antes de volver a cambiar a la derecha. Cuando decimos “manos” damos una palmada. Cada niñ@, con un vaso de plástico o cartón delante, va recitando a ritmo y esperamos a que todos vayan haciendo cada secuencia sin problemas antes de pasar a la siguiente. También podemos jugar a empezar poco a poco e ir “jugando” a acelerarlo. Cuando ya sale, añadimos un nuevo movimiento i así vamos acumulando sin parar. Cuando ya les sale individualmente, cambiamos la palabra “deja” por “pasa” y empezamos a pasar el vaso al compañer@. Podemos hacerlo encarados por parejas o en corro. Aprendemos el acompañamiento con percusión corporal También aprendemos acumulando movimientos mientras cantamos la canción. Empezamos con los pies, añadimos manos, pecho, etc., mientras cantamos o recitamos la letra con el ritmo de la canción: Plicas hacia arriba = derecha / Plicas hacia abajo = izquierda (en frases 1 y 3) A cada frase repetimos la secuencia empezando con el otro pie (las frases 2 y 4 empiezan con el pie izquierdo) Aprendemos el acompañamiento con instrumentos Orff Finalmente, podemos acompañar la canción con instrumentos Orff. Si tenemos chicos y chicas lo bastante hábiles, pueden aprenderse el bajo (que también podemos aprender primero memorizando los arpegios asincopados y después añadiendo las dos negras que los enlazan para memorizar todo el bajo). Las terceras paralelas de los xilófonos podemos aprenderlas señalando con tres dedos de la mano y cantando el acompañamiento (desde el fa). Cuando ya saben las 4 células rítmico-melódicas de dos compases cada una, añadimos la tercera superior y con movimiento paralelo tocan el acompañamiento mientras cantan la canción (podéis ver la partitura por instrumentos en el pdf ajunto). Finalmente, podemos dividir la clase en tres grupos y cada grupo hace uno de los acompañamientos de la canción. Podemos añadir una secuencia improvisada, con ecos rítmicos, etc., que indique que cada grupo cambie de lugar y asuma el rol siguiente. De esta manera, todo el mundo lo hace todo.