“La economía de mercado y el capitalismo en la enseñanza social de la Iglesia” Ernesto García [email protected] La Iglesia católica “cuando cumple su misión de anunciar el Evangelio, enseña al hombre (...) su dignidad propia y su vocación a la comunión de las personas, y le descubre las exigencias de la justicia y de la paz”1. La dignidad de la persona humana y su vocación a la comunión de personas, en la que esa dignidad se reconoce, se manifiesta y se realiza, son las raíces antropológicas de la enseñanza social de la Iglesia católica. Desde esta perspectiva antropológica, esa enseñanza señala los principios morales que deberían regir la conducta social del hombre y constituye una definición de objetivos morales y no una técnica para resolverlos, la cual está fuera de la competencia de la enseñanza de la Iglesia. Cuando ella expresa un juicio moral en dimensiones temporales – sociales, políticas, económicas– referidas a la justicia social lo hace “cuando lo exigen los derechos fundamentales de la persona”2. Los que están ocupados de modo inmediato en las tareas de la humana convivencia, cada uno en su terreno, deben ser quienes extraigan, en un esfuerzo secular y científico, las consecuencias de esos principios en las cuestiones que, aquí y ahora, se ofrecen como problemáticas. La enseñanza social de la Iglesia no se presenta a sí misma con autodefiniciones de tipo sistemático, sino que ha sido formulada a propósito de las circunstancias sociales, políticas y económicas desde finales del siglo XIX hasta nuestros días. En este trabajo vamos a sistematizar esas enseñanzas referidas a la economía de mercado y el capitalismo, que ofrecen un riquísimo espectro de sugerencias para abordar el temario del XVI Annual Meeting de SASE. 1 2 Catecismo de la Iglesia Católica, n. 2419 Catecismo de la Iglesia Católica, n. 2420