Guadalajara, Jalisco, a 6 de diciembre de 2013 Etgar Keret: las palabras en la Luna Diego Luna trajo a la vida cinco relatos del escritor israelí, frente a una audiencia que aplaudió de pie el esfuerzo de ambos Al momento en el que se les dejó pasar, las personas situadas al frente de la línea tenían tres horas a la espera. Apretados en el salón, con una fila enroscada que ocupaba todos los espacios y resquicios posibles, las sillas dentro del Salón Juan Rulfo quedaron, desde antes de comenzado el evento, declaradas insuficientes. Algunos de los asistentes estaban ahí atraídos por el actor Diego Luna, otros, por los textos del israelí Etgar Keret, cuyos talentos se conjugarían esa noche, frente al público, mediante una lectura dramatizada de los cuentos de Keret en la voz del actor. Todos los asistentes, sin embargo, debieron hacer un ejercicio de paciencia para poder ser parte de “Etgar Keret: una noche con Luna”; paciencia que, después de que las ocho de la noche de ayer, pasaran, se fue diluyendo ante la puerta cerrada del Salón Juan Rulfo, lo que provocó un estallido de aplausos cuando se dejó pasar al primer grupo de personas. En diez minutos la sala estaba llena. Un público, en su mayoría joven, se acomodó en todos los lugares de la sala, que había sido acondicionada en lo posible para poder albergar a 400 personas, cincuenta más de las previstas en un principio. Diez minutos antes de las nueve de la noche, se recibió entre aplausos al autor israelí, quien se sentó entre el público. Marisol Schulz, directora de la FIL; subió al escenario para recordar a Nelson Mandela, fallecido apenas unas horas antes, y honrar su memoria desde la Feria con un minuto de silencio por parte de los asistentes, silencio que se vio interrumpido, varias veces, por timbres de celulares dispersos en la sala. Después de las palabras de Marisol Schulz, los aplausos no se hicieron esperar, esta vez hacia Diego Luna, quien subía al escenario acompañado de Alejandro Castaños, quien sería el encargado de producir en vivo los ambientes sonoros que acompañarían la lectura, junto con las proyecciones que se prepararon especialmente para cada historia, realizadas por Antonia Fritche. Diego Luna planeó una lectura distinta para los cuentos de Etgar Keret. Después de que él y Castaños tomaran sus lugares, cada uno en un lado del escenario, las luces bajaron y comenzó a proyectarse un video que, si bien al principio tuvo que ser repetido por fallas técnicas, presentó al propio Keret contando, en varias situaciones, la anécdota de cómo es que comenzó a escribir. Justo después de finalizado ese video se escuchó la voz de Luna, quien comenzó a relatar el cuento “El Gordito”, acompañándose de ambientes sonoros creados a partir de la trama del cuento e imágenes que complementaron las ideas del autor para crear, al conjuntar todos los elementos, un ambiente que envolvió a la audiencia hasta situarla lo más cercano posible a lo que se sucedía en la historia. De esta manera, con el actor haciendo uso de las voces de todos los personajes en cada cuento, se sucedieron “¿Qué animal eres?”, “De repente un toquido en la puerta”, que tuvo una particular respuesta positiva por parte de la audiencia, y “Útero”; para finalizar con “Pez dorado”, cuento en el cual hacia el final, Luna detuvo su narración y, de pronto Keret se levantó de su asiento y comenzó a leer, junto con Luna, el mismo fragmento en hebreo para dar por terminada la lectura al unísono, en los dos idiomas. No hubo un instante de silencio. Después del punto final, el público comenzó un aplauso que se prolongó y provocó que toda la sala se pusiera de pie para aplaudir las palabras de Keret y la interpretación de Luna. No hubo una sola fila de la audiencia en la que no hubiera, al menos, un teléfono celular que quisiera atrapar el momento en una foto. Después del prolongado aplauso, el autor tomó un micrófono para hacer un agradecimiento. Recordó que en “De repente un toquido en la puerta” él mismo dice que escribe historias, pero no las cuenta, compartió con el público que esto no es, del todo, cierto: “Sí cuento historias. De hecho, las historias vienen a mí como un sonido, una voz, luego ya se transforman en palabras. Tengo la sensación de que la próxima vez que me siente a escribir historias, la voz en la que pensaré sonará mucho como la de él”, subrayó el autor señalando a Diego Luna, para finalizar: “Lo único que me preocupa es que este cuento suene en español”. Después de la lectura, los asistentes se fueron con una sonrisa en la boca, ya que para la mayoría, haber esperado casi tres horas valió la pena, en las palabras del público: “Totalmente”. Mariño González Coordinador general de Prensa y Difusión Press and marketing division [email protected] +52 (33) 3810–0331 +52 (33) 3268–0950 Karla Bañuelos Asistente de Contenidos de Prensa y Difusión Contents assistant [email protected] +52 (33) 3810–0331 +52 (33) 3268–0952