contenido ponencia - Colegio Oficial de Graduados Sociales de Cádiz

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PONENCIA SOBRE LAS ASOCIACIONES
DE TRABAJADORES AUTONOMOS
La Ley 20/2007, de 11 de Julio del Estatuto del Trabajo Autónomo,
independientemente de configurar un nuevo marco de las relaciones jurídicas
y de un encuadre específico en nuestro Ordenamiento Jurídico contempla en el
Título III y concretamente, en los arts,. 20, 21 y 22, el Derecho de Asociación
Profesional de los Trabajadores Autónomos.
No cabe duda de que estamos ante cuanto determina la Ley 1/2002 de
22 de Marzo, reguladora del Derecho de Asociación, es decir, proyecta su
protección desde una doble perspectiva;
por un lado, como Derecho de las
personas en el ámbito de la vida social y, por otro, como capacidad de las
propias asociaciones para su funcionamiento. Es decir, dicha Ley reconoce la
importancia del fenómeno asociativo como instrumento de integración en la
sociedad
y de participación en los asuntos públicos,. Donde los poderes
públicos han de mantener un cuidadoso equilibrio, de un lado, en garantía de la
libertad asociativa y de otro, en protección de los derechos y libertades
fundamentales que pudieran encontrarse afectados en el ejercicio de aquélla.
Curiosamente, hasta el momento de la publicación en el BOE de la
Ley 20/2007, existían muchas asociaciones que constituidas al amparo de la
referida Ley Orgánica 1/2002, venían actuando y desarrollando su labor y
misión dentro del marco jurídico correspondiente, es decir,
defendían sus
derechos de asociación y se regulaban como tales, pero nunca como ahora
se encuadran de lleno y con una misión específica en una Ley como es la del
Trabajo Autónomo.
El art. 20 se denomina “Derecho de Asociación Profesional de los
Trabajadores Autónomos”, es decir, independientemente de cuanto al respecto
establece la Ley Orgánica 1/2002, reguladora del Derecho de Asociación, es
precisamente aquí, donde en el punto 2 de este art. 20, define específicamente
la defensa de los intereses profesionales de los Trabajadores Autónomos
y funciones complementarias, lo que de alguna manera el Legislador, los
menciona con carácter especial para reivindicar y defenderse específicamente
por su condición de autónomos.- Es más, el punto 3 del referido art. 20 obliga
a inscribirse y depositar sus Estatutos en el Registro especial de la Oficina
Pública establecida al efecto en el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales o
de la correspondiente Comunidad Autónoma,
en el que la Asociación
desarrolle principalmente su actividad, siendo tal registro
DIFERENCIADO DEL QUE
ESPECÍFICO Y
CUALESQUIERA OTRAS ORGANIZACIONES
SINDICALES, EMPRESARIALES O DE OTRA NATURALEZA QUE PUEDEN
SER OBJETO DE REGISTRO POR ESA OFICINA PÚBLICA. Por consiguiente,
entiendo que las Asociaciones construidas antes de esta Ley deberán no sólo
inscribirse como tales, sino que tendrán que ser de diferente naturaleza a las
sindicales y empresariales que ya existen, con su particular idiosincrasia. Es
más, estas asociaciones podrán ser declaradas de utilidad pública, conforme a
lo previsto en el art. 32 de la Ley Orgánica 1/2002, siendo en este caso una
garantía para sus asociados y para la Administración.
En este punto intento pararme, pues
hasta el momento el Ministerio
de Trabajo y Asuntos Sociales no tiene aún constituido el referido Registro, es
decir, hasta el momento
Estatutos
quien desee depositar en base al art. 20 unos
que contengan
lo que estipula la presente Ley, la propia
Subdirección General de programación
y actuación administrativa del
Ministerio de Trabajo los están derivando a la Dirección General de la
Economía Social del Trabajo Autónomo y del Fondo Social Europeo, que es la
que al parecer responderá de su competencia. Como se comprueba, un
incumplimiento de tanto de los que esta Ley posee desde su
aprobación por
Las Cortes Generales, pero que más que otra cosa ha sido cumplir un
programa electoral, al que por cierto se le unió todo el arco parlamentario
existente en ambas Cámaras.
No sólo se puede hablar de este Registro en la Ley, ya que el art. 21
contempla la determinación de la representatividad de las Asociaciones
de Trabajadores Autónomos contemplando que aquellas asociaciones que
demuestren una suficiente implantación en el ámbito territorial que actúen y
debidamente
acreditado
tendrán
mayor
participación
o
cuota
de
representación en el mundo del trabajo autónomo. Es decir, indirectamente, se
están beneficiando aquellas asociaciones que poseen mayor número de
afiliación y mayor implantación en el territorio, por lo que no será igual una
asociación local o autonómica que una de ámbito nacional, o por qué no decir
una Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos.
Hasta aquí tratamos de analizar lo que el movimiento asociativo puede
dar de sí, pero sin embargo la realidad puede ser otra, ya que al igual que las
asociaciones patronales y sindicales poseen sus brazos o anexos para este
tipo de asociaciones, no sería lógico trasladar su poder asociativo de su
verdadero ámbito a otro donde sólo lo deben formar los puramente
trabajadores autónomos, es más, existe hoy la obligación de estar de alta en el
RETA, por lo que son también autónomos, más de un 90% de profesionales
colegiados, los cuales a su vez, pertenecen como tales y de forma obligatoria,
a Corporaciones de Derecho Público como son los Colegios Profesionales. Por
ello, me quiero parar aquí para explicar mi experiencia y mi doble condición
profesional: es decir, los Graduados Sociales, al igual que:
-
Administradores de Fincas,
-
Agentes de la Propiedad Inmobiliaria
-
Asistentes Sociales
-
Capitanes, Jefes y Oficiales de la Marina Mercante
-
Censores Jurados de Cuentas
-
Delineantes
-
Diplomados en Trabajo Social
-
Doctores y Licenciados en Ciencias Físicas
-
Doctores y Licenciados en Ciencias Políticas y Sociología.
-
Economistas.
-
Farmacéuticos (titulares de Oficinas de Farmacia)
-
Ingenieros Agrónomos.
-
Ingenieros Técnicos, Facultativos y Peritos de Minas.
-
Notarios.
-
Odontólogos y Estomatólogos.
-
Ópticos
-
Periodistas
-
Titulados Mercantiles.
-
Veterinarios.
-
Profesionales colegiados a partir del 10-11-1995, cuyos colegios no
tengan Mutualidad de Prevención.
Como se comprueba, ya prácticamente todas las profesiones
colegiadas, independientemente
aquellas que no lo están,
y que están
especificadas en la norma pertenecen al RETA, lo que conlleva el alto índice
de profesionales que aún cuando se rigen por sus Estatutos o por la propia
Ley de Colegios Profesionales, como tales Corporaciones de Derecho Público,
tienen una incidencia especial y que no alcanza a la defensa de dichos
colegios, cual es su inclusión en dicho Régimen, es decir, su inclusión les ha
hecho de lleno entrar
y participar
de los derechos y obligaciones que la
presente Ley 20/2007 regula.
Hasta aquí hemos visto como esta norma que Las Cortes Generales
ya publicaron en su momento y posteriormente
la Ley quedó también
sancionada por Su Majestad el Rey, está pendiente de un desarrollo que no
entendemos cómo
conlleva tanta lentitud, pues si
la regulación entre los
TRADE y el Autónomo principal aún no se ha regulado, curiosamente el
Registro
de
las asociaciones
de profesionales aún existe menos.
Recientemente, es decir, el pasado 19 de Marzo de 2008, la propia Secretaría
General de Empleo y en su nombre el Director General de la Economía Social
del Trabajo Autónomo y del Fondo Social Europeo, han venido a manifestar
que si bien el art. 20.3 de la Ley 20/2007 de 11 de Julio, del Estatuto del
Trabajo Autónomo establece: que las asociaciones
profesionales de
trabajadores autónomos deberán inscribirse y depositar sus estatutos en el
registro especial de la oficina pública ......, desde la aprobación del Estatuto
del Trabajo Autónomo y, especialmente desde su entrada en vigor en
Octubre, se está trabajando en la elaboración de un reglamento que
desarrolla dicha Ley, y que entre otras cuestiones aborda la creación del
registro de asociaciones profesionales de trabajadores autónomos, que
tendrá carácter estatal y afectará
a las asociaciones de trabajadores
autónomos que no desarrollen principalmente su actividad en una
Comunidad Autónoma, sin que en ningún caso dicho registro determine
la representatividad de las asociaciones que se inscriban en el mismo. A
la luz de lo dispuesto, parece obvio que todavía no pueden inscribirse las
asociaciones de trabajadores autónomos en el registro especial del art.
20.3 de la Ley 20/2007, ni pueden depositarse sus estatutos o acta
fundacional hasta tanto un Real Decreto los regule.
Es decir, pese a tanta voluntad política de poner en marcha una Ley
como esta y habiendo transcurrido seis meses desde su entrada en vigor, no
tenemos el más mínimo atisbo de cómo estas asociaciones van a inscribirse,
se van a regular, qué representatividad tendrán y en su conjunto, qué derechos
poseerán y les amparan.
Para terminar estamos ante una prueba práctica de una Ley deseada,
controvertida y que como siempre serán los Tribunales de Justicia, y en este
caso, la Jurisdicción del Orden Social, la que al final venga a poner orden en la
variopinta normativa que la VIII Legislatura ha venido a desarrollar.
JOSÉ BLAS FERNÁNDEZ SÁNCHEZ
Presidente del Excmo. Colegio de
Graduados Sociales de Cádiz y
Presidente del Consejo Andaluz de
Colegios de Graduados Sociales.
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