El turismo y el inmobiliario en Barcelona Un año más, Barcelona afronta la época veraniega desde la posición de una de las primeras capitales europeas de turismo. El flujo de visitantes a la ciudad se mantiene constante, ya sea por los turistas que llegan atraídos por su belleza y monumentos o por aquellos que la visitan con motivo que los numerosos congresos y ferias que acoge. No cabe duda de que el sector turístico tiene un peso muy significativo en la economía y el desarrollo de la Ciudad Condal, un hecho que hay que cuidar si se quiere garantizar la posición privilegiada de la que goza la ciudad en el sector turístico. Uno de los últimos pasos que se han dado en este sentido ha sido la extensión de la suspensión de licencias hoteleras en Barcelona hasta julio de 2017. No cabe duda de que regular la llegada de visitas a la Ciudad Condal es clave para evitar su masificación y permitir que tanto turistas, como residentes la disfruten en su plenitud. Además, es determinante para construir un modelo de ciudad moderna, racional, sostenible en el tiempo y que sea del gusto de las generaciones venideras. Es imprescindible que las autoridades trabajen para instaurar un modelo de equilibrio que permita al sector hotelero actuar según unas reglas claras y coherentes” Todo indica que las últimas decisiones tomadas por el Ayuntamiento en cuanto a la suspensión de licencias no siguen por este camino, ni en lo referente al sector inmobiliario, ni en el turístico. Dada la situación actual, muchos inversores se plantean buscar nuevas vías para poder trabajar y otros están a la espera de conocer las disposiciones finales del PEUAT, el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turístico, que pondrá el broche de oro a esta nueva fase del sector hotelero en Barcelona. En cuanto a los turistas, algunos de ellos verán su demanda insatisfecha y elegirán otros destinos para hacer negocios o descansar. Para poner fin a esta situación de incertidumbre, es imprescindible que las autoridades se replanteen el rumbo de sus actuaciones de los últimos meses y trabajen para instaurar un modelo de equilibrio que permita al sector hotelero actuar según unas reglas claras y coherentes. Solo así se logrará una solución racional, duradera y beneficiosa para todos. ACI NEWSLETTER ENERO 1