MAS ALLÁ DE LA INCONSTITUCIONALIDAD DE LA TASA RETRIBUTIVA DE SERVICIOS JUDICIALES A LA LUZ DEL ARTÍCULO 15 DE LA CONSTITUCIÓN DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES, EL CÁLCULO DE LA MISMA DEBE REALIZARSE CONFORME LA CONCURRENCIA DE PAUTAS CONCURSALES Y FISCALES.- HORACIO PABLO GARAGUSO Y Guillermo Horacio F. Garaguso Instituto de Derecho Comercial y Concursal del Colegio de Abogados de Mar del Plata I. II. III. Valsecchi, Gabriel Gerardo s/ Quiebra Pequena. Registro 1664. Folio 2857. Expediente 136.910. Mar del Plata, diciembre 5 de 2006. Vistos y Considerando: Vienen los presentes actuados a conocimiento de esta Alzada a raíz del recurso de reposición con Apelación en subsidio interpuesto por el ex fallido a fs. 148 contra el decisorio de fs. 140/141. En el auto que se destaca el Sr. Juez de grado hizo lugar al pedido de levantamiento de la quiebra sin tramite, revocando el decreto de falencia obrante a fs. 28/31. Asimismo, dejo constancia de que el levantamiento de la falencia se encontraba condicionado a la operatividad del depósito exigido a la deudora. A cuyo fin, en los considerandos el Magistrado dejo establecido que previamente a que se cumpliese con el mentado deposito debía satisfacerse el pago de la tasa de justicia y la sobretasa, los honorarios y aportes de los profesionales intervinientes, debiendo establecerse el valor del activo que constituye la base a los fines indicados. En su pieza recursiva el apelante se disconforma de la determinación de los gastos causídicos – particularmente de la tasa de justicia y su contribución- por cuanto se intima a la parte a que en el plazo de cinco días proporcionen pautas para establecer el valor del activo y en base a ello determinar los importes de la tasa retributiva por el servicio de justicia. Por nuestra parte consideramos que el remedio traído merece prosperar. En efecto, siendo que el presente proceso falencial fue incoado a raíz de una petición directa solicitada por un acreedor ( ver fs. 8/10), la tasa de justicia y su contribución ya fueron satisfechas por parte del titular de la acreencia y con relación al monto de la misma, conforme lo edicta el art. 277 inc. “ g” del Codigo Fiscal ( ver fs. 5). Habida cuenta de lo expuesto, pues, resulta claro que es el monto abonado por el acreedor en concepto de tasa y sobretasa de justicia el que integrara el mentado deposito del art. 96 de la LCQ – además de otros rubros - , puesto que es la deudora la que tiene la obligación de restituir tal concepto. Al respecto señala la doctrina que “… se entiende por gastos causídicos tanto los honorarios que la propia sentencia de revocación regulo a cargo del deudor, como también los demás gastos afrontados por el acreedor para la defensa de su derecho. Entre estos últimos cabe mencionar la tasa de justicia abonada por el acreedor al pedir la quiebra, cuyo importe tiene derecho a recuperar del deudor” ( Heredia, Pablo, Tratado Exegético de Derecho Concursal, t. 3 , Pág. 732, ed. Abaco, 2001). Cabe puntualizar al respecto que si bien el art. 277 inc. “g” del Codigo Fiscal menciona en los casos de tasa de justicia en los pedidos de quiebra por acreedor que deberá integrarse debidamente el monto que corresponda conforme a lo previsto en el primer párrafo. (v. gr. Monto que resulte de la liquidación, etc.), deviene inaplicable en el supuesto de autos atento a que el proceso falencial ha beneficiado sin que comenzara la etapa liquidativa, por lo que solo debe tenerse en cuenta el monto abonado a fs. 5 y 6 ( v. gr. $ 23,71). Como corolario de lo expuesto se colige que también resulta improcedente exigir la valuación del activo a los efectos de determinar la tasa de justicia y los honorarios, puesto que el ítem aludido en primer termino ya ha sido abonado en base al monto del crédito por el que se peticiono la quiebra y con respecto al segundo punto porque la Ley Concursal no fija las pautas especificas sobre las cuales se deben regular los emolumentos para esta clase de extinción de la falencia ( argto. Pesaresi – Passaron; Honorarios en concurso y Quiebras, Pág. 293/4 ed. Astrea, 2002). Por ello, en virtud de os argumentos expuestos se resuelve: a) Hacer lugar al recurso de apelación interpuesto por el ex fallido a fs. 148, revocando el decisorio de fs. 140/141 con los alcances indicados y en cuanto ha sido materia de apelación; b) No se imponen las costas de Alzada atento a la inexistencia de contradicción ( art. 68 2ª parte del CPC) y c) Transcurrido el plazo del art. 267 del CP, devuélvase. Arts. 47/8 de la ley 5827.- SUMARIO DEL FALLO 1) Cuando la quiebra pedida por acreedor concluye sin liquidarse el patrimonio cesante no es aplicable a los fines del cálculo de la tasa de justicia la regla del artículo 277 inciso g del Código Fiscal de la Provincia de Buenos Aires.- 2) Es improcedente exigir la valuación del activo a los efectos de determinar la tasa de justicia y los honorarios, puesto que el ítem aludido en primer término ya ha sido abonado sobre la base del monto del crédito por el que se peticionó la quiebra y con respecto al segundo punto porque la ley concursal no fija las pautas específicas sobre las cuales se deben regular los emolumentos para esta clase de extinción de la falencia.- COMENTARIO El fallo citado ha puesto en claro el alcance de la regla del inciso g del artículo 277 del Código Fiscal, razón por la cual sólo es aplicable cuando el proceso falencial ha producido la liquidación de activos del fallido. Por lo tanto si la conclusión se produce anticipadamente por reposición o revocación de la sentencia falencial, no es lícito recabar pago alguno de tasa de actuación judicial, que exceda la que fuera oblada por el acreedor peticionante de la quiebra.Este razonamiento no se modifica aunque se hayan liquidado bienes del deudor con carácter excepcional, pues conforme el artículo 97 LC. “ La interposición del recurso no impide la prosecución del proceso, salvo en cuanto importe disposición de bienes y sin perjuicio de la aplicación del artículo 184”. Por su parte el artículo 98 LC. regla que “la revocación de la sentencia de quiebra hace cesar los efectos del concurso. No obstante, los actos legalmente realizados por el síndico y la resolución producida de los contratos en curso de ejecución son oponibles al deudor, aun cuando los primeros consistieren en disposiciones de bienes en las condiciones del artículo 184”.Si la quiebra concluye por revocación de la sentencia en virtud de recursos específicos o apelación – cuando el mismo procede – haya o no liquidación de bienes, la tasa de justicia abonada por el acreedor solicitante es suficiente para el “pago del servicio de justicia” , sin que haya que indagar sobre el activo o el restante pasivo que conforman el patrimonio cesante.Estimo por otra parte que esta regla debiera aplicarse a otros supuestos de conclusión sin liquidación de bienes, salvo aquellos previstos por el artículo 184 LC. – perecederos, fácilmente corruptibles o de conservación dispendiosa o expuestos a bruscas pérdidas de valor-, como los casos de CARTAS DE PAGO E INEXISTENCIA DE ACREEDORES conforme la manda del artículo 229 L. C. No constituye el objeto de esta glosa el análisis de la “tasa de justicia” y la abierta inconstitucionalidad de la misma en la Provincia de Buenos Aires, ni tampoco la inviabilidad del acceso a la jurisdicción por el deudor mediante el “beneficio de litigar sin gastos”, pero no puedo dejar pasar la oportunidad de enfatizar que este gravamen vulnera el derecho a la actuación de la justicia en la resolución de los conflictos y vulnera no solo el Pacto de San José de Costa Rica sino el texto expreso del artículo 15 de la Constitución Bonaerense.Desde luego que sentencia que acota la voracidad de los agentes judiciales asociados al fisco provincial, merece una actitud laudatoria por todos aquellos que pensamos que la jurisdicción debe ser allanada a todos de una manera universal y gratuita.-