Juan Jose Arreola y ‘El Guardagujas’ Eliza Preiswerk Juan José Arreola fue el escritor que con mayor libertad permitió que la imaginación se desbordara de su causes y consiguió una escritura que se apropia de las convenciones genéricas para revolverlas y dar vida a una literatura novedosa y sorprendente. Nació en 1918, Juan José Arreola no solo era un gran escritor y una inspiración literaria por sus lectores sino en la historia del cuento hecho en lengua española durante su tiempo. El creció en un pueblito que se llama Zapotlan el Grande en Jalisco, y fue el cuarto hijo de una familia de catorce niños. En una entrevista, dijo ‘soy herrero por parte de madre y carpintero a título paterno. De allí mi pasión artesanal por el lenguaje’. No dedicó mucho tiempo a su educación cuando era niño y era autodictada; El poco tiempo que pasó en la escuela primaria (de los ocho a los doce años) fue suficiente para que la semilla de la literatura lo contaminara. Durante su vida, Arreola ha tenido una variedad de empleos diferentes, algo que ayudó sus temas de escritura, porque tenía puntos de vistas no objetivos y un estilo muy diferente de otros escritores de su tiempo. El ha sido vendedor ambulante y periodista; mozo de cuerda y cobrador de banco. Impresor, comediante y panadero; pero ES muy conocido por sus obras escritas creativas y tan únicas. Arreola llegó a su amor por la escritura después de encontrar a un hombre que cambio su vida: Louis Jouvet, a quien conoció a su paso por Guadalajara, y que lo llevó a París cuando todavía era joven. Louis Jouvet, el hombre al que se muestra tan agradecido, fue un famoso actor y director francés, quien descubrió al joven talentoso e intercedió para su estancia en París de 1945 a 1946. Juan José Arreola llegó a actuar en la Comedia Francesa (o Teatro Nacional de Francia), pero al regresar a México no pudo continuar en esta faceta y se dedicó a la corrección de textos y a la escritura de solapas. De regreso a México, fundó en Guadalajara la revista Pan (1945), donde aparecieron sus primeros cuentos. 1 Cuando empezó a escribir obras y cuentos, el recibió en 1979 el Premio Nacional en Letras en D.F. y otros reconocimientos para su trabajos. El solo escribo una novela que se llama ‘La feria’ en 1963. Al paso de los años fue reconocido como uno de los primeros escritores en abandonar el realismo, mediante el uso de su fantasía y su gran cultura. El construyó alegorías universales de la vida nacional con sus obras escritas, dando un punto de vista muy único a los demás. El estilo de Arreola era un poco difícil de aceptar, por su diferencia de otras obras escritas en este tiempo; sin afiliarse a un movimiento, ni siquiera a una vanguardia específica, fue una apuesta por la imaginación. Por otra parte, Arreola escribió también con un sentido de humor y de sarcasmo y que hicieron que su literatura fuera vista con recelo. Por ejemplo, su cuento ‘El guardagujas’ muestra el nacimiento de una nueva tradición de literatura mexicana. En la narrativa de Arreola el absurdo, lo fantástico, lo alegórico se unen en estructuras entretejidas de ironía y simbolismo. El da espacio a los sueños y a la imaginación de cada lector, para que se pueda dar nuestra propia interpretación de sus cuentos. Es también permitir que la realidad deje de ser para que signifique. En "El guardagujas", horrible y festiva caricatura de una realidad nacional sin rumbo. Puede ser verdad, lo absurdo, la falta de sorpresa y de reacción ante una realidad que nos rebasa y nos destruye están presentes, pero el texto nos hace sonreír. Arreola tiene muchos cuentos a analizar, pero voy a enfocarme sobre el del ‘Guardagujas’ que hemos leído en la clase de literatura mexicana. Hay una gran presencia de realismo mágico en este cuento que trata de la visión de Arreola sobre el mundo dentro del cual vivía en el siglo XX en México. El describe sus ideas generales sobre el materialismo y el existencialismo, pero no lo hace de manera directa. Admite con tristeza que no vivimos en el mejor mundo posible y se ríe de aquellas personas que se dejan absorber tanto por ese mundo y nunca pueden librarse de su succión irresistible. En este cuento, Arreola mantiene un estilo muy mexicano, cuando describe los viajes en el tren de la vida sin preocuparse de la ruta que lleva. El solo hecho de abordar el tren es una verdadera iniciativa y debe 2 apreciarse como tal. Como el realismo mágico siempre tiene una base realista, Arreola funde su simbolismo exagerado con una sátira de los defectos del sistema ferroviario de México. Se burla de los trenes que no respetan los horarios; de los planes para túneles y puentes que ni han sido aprobados por los ingenieros; del mejor trato que reciben los pasajeros de primera clase; de la falta de cortesía de la gente en el momento de abordar el tren; y de la costumbre consagrada de subir y bajar del tren sin esperar a que éste se pare. El sistema ferrocarrilero es tan desordenado pero parece normal a la gente que lo usa, porque Arreola combina la magia con la realidad mexicana, para describir un fenómeno real con una imagen surrealista para que el cuento sea divertido. Con la inspiración de su país, su cultura y de todos los trabajos que ha tenido, Arreola supo escribir algunos cuentos con una perspectiva única y un estilo propio a el, mezclando la realidad no tan feliz con la magia para creer cuentos cautivantes con puntos de vistas sobre aquellos nunca hemos pensado. Sus obras siguen siendo muy apreciadas y se salen de otras obras escritas por otros autores en estos años. No solo da un cuento divertido, pero lo mas importante es que los cuentos de Arreola trata de los problemas presente en la sociedad donde vivía, para dar cuenta a la gente de lo que se pasaba en estos tiempos. Es claro que hubo muchos escritores con mucho talento y maneras de escribir muy diferentes de otros, pero me gusto escribir sobre la vida de Juan Jose Arreola porque me parece muy interesante, y me gusto mucho leer su cuento del ‘ Guardagujas’. El se salio de la norma, y empezó un nuevo estilo de literatura que le gustaron a los lectores, y que sigue siendo apreciado en este día moderno. 3