issn 1688–4329 Volumen: 3 Número: 1 Año: 2009 www.gramonbago.com.uy Comité Editorial Dr. Hugo Senra [Coordinador] Dr. Edgardo Sandoya Dr. Horacio Vázquez Dr. Carlos Schettini Dra. Ma. del Pilar Aguilar Julio 2009. CARTA CARDIOVASCULAR MONTEVIDEO, URUGUAY carta Cardiovascular E d u c a ci ó n M é dic a C ontin u a en C a r dio l o g í a Alta tecnología médica: ¿ciencia o ficción? Edición, diseño: dedosproductora.com Dr. Hugo Senra Estamos asistiendo en los últimos 30 o 40 años a un avance vertiginoso del conocimiento científico aplicado a la medicina. Y lo hacemos con asombro deslumbrados por las nuevas tecnologías y también con angustia porque no es posible, al menos para nosotros, abarcar los nuevos aportes, ni siquiera los que se producen dentro de nuestra especialidad Envueltos en ese torbellino de tecnología, que parece de ciencia ficción, como es lograr predecir la vulnerabilidad de una placa de ateroma coronaria, mediante angiotomografía computadorizada, por mencionar uno de los tantos auxiliares del diagnóstico que surgen año a año. Otro tanto ocurre con los procedimientos terapéuticos En ese fárrago de tecnología de ciencia ficción ¿dónde se ubica al enfermo? Poque ya no hablamos de un paciente con enfermedad coronaria, sino de una lesión de tipo A o B y un flujo TIMI I o II, que después de realizada una angioplastia con balón —que se infló a tantas atmósferas— y colocarle un “stent” liberador de tal o cual droga, quedó con un flujo TIMI III. Pero el paciente es mucho más que eso, es la lesión que tiene en esa arteria más otras lesiones en otros territorios coronarios y además es diabético e hipertenso y más que nada un ser pensante, que está sometido a traumas físicos y emotivos, etc., etc. ¡Que equivocados estamos cuando pensamos que al desobstruir una arteria “resolvimos” al paciente! Y en otras especialidades y en otros países sucede lo mismo. El Dr. Eric Topol en un artículo publicado el 19 de febrero de 2009 en “theheart.org” analiza este mismo problema referido a los diabéticos. El sugestivo título reza: Diabetes and Blood Sugar: The Art of De–Peronalized Medicine. Porque el diabetólogo se empecina en llevar las cifras de glucemia y de hemoglobina glicosilada a los “niveles óptimos”, pero en el interín el paciente es bombardeado con dos hipoglucemiantes más insulina y tiene frecuentes crisis de hipoglucemia que hacen de su vida un calvario, eso sí, con una hemoglobina glicosilada de 6.8 CONTENIDO 4. Factores de riesgo: dislipemias mixtas. H. Senra. 6. Diabetes y enfermedad cardiovascular: 10 preguntas clave. C. Schettini. 9. Cuidados en el paciente portador de marcapasos. A. Cuesta, F. Kuster. 14. Muerte súbita: un diagnóstico de 2400 años, un reto de hoy. M. P. Aguilar. 18. Investigación médica ayer y hoy. E. Sandoya Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 4–5. Factores de riesgo: dislipemias mixtas | Dr. Hugo Senra ¡todo un triunfo! Para colmo de males el estudio ACCORD que comparó dos regímenes de tratamiento, uno con riguroso control de la glicemia y la hemoglobina glicosilada y otro con metas de cifras menos ambiciosas, mostró que la mortalidad era mayor en la rama de tratamiento riguroso. Llegamos entonces a la conclusión, por todos conocidas y por muchos olvidada, que la medicina es el arte de poner al servicio de la gente el conocimiento científico considerando al paciente en forma global. 2 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. En este sentido cabe recordar que un interrogatorio y un examen clínico minuciosos, por aparatos y sistemas, nos proporcionará en un 90% de los casos el diagnóstico de la enfermedad. Sin renegar en absoluto de los adelantos de la ciencia, no debemos olvidar que los mismos serán aplicados a un ser viviente, pensante y (en el caso de un paciente) sufriente: es su bienestar la primera meta que nos debemos imponer, sin empecinamientos ni necedades terapéuticas. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 4–5. Factores de riesgo: dislipemias mixtas Dr. Hugo Serna Factores de riesgo: dislipemias mixtas | Dr. Hugo Senra Médico Cardiólogo En números anteriores la Dra. Aguilar se refirió al concepto de riesgo cardiovascular y lo que se entiende por factores de aumento del riesgo. Sin querer entrar en reiteraciones tediosas quisiera enfatizar el concepto de factor de aumento del riesgo. Se entiende por tal aquella condición que si se da en un individuo o en conjunto de individuos, los hace individual o colectivamente más susceptibles de contraer una enfermedad, en nuestro caso cardiovascular, en un determinado período. Para complicar más las cosas, raramente los factores de aumento del riesgo se dan aisladamente sino que en general se presentan asociados, lo cual los potencia, vale decir que se aumenta —en algunos casos en forma exponencial— la capacidad de producir enfermedad. Si se asocian diabetes, hipertensión y dislipemia el riesgo de que el individuo portador de esas condiciones contraiga enfermedad es muy elevado. A efectos de predecir la posibilidad de que realmente aparezca la enfermedad se han confeccionado tablas como la de Framingham o de la Sociedad Europea, que han sido recogidas por la Sociedad Uruguaya de Cardiología, S.U.C.), la cual ha confeccionado nuevas tablas aplicables a nuestro medio para hombres y mujeres, ya que también es conocida la diferencia de acuerdo al sexo en la evaluación del riesgo C.V.: recomendamos su lectura. En un trabajo reciente que se publicará en el próximo número de la Revista Uruguaya de Cardiología [y al que pude acceder gracias a la gentileza de su autor] el Dr. E. Sandoya y colaboradores, evaluando el valor predictivo de esta tabla en nuestra población, concluyen que la misma es aplicable a la población masculina y no a la femenina, en la que se sobrestima la posibilidad de contraer enfermedad en los 9 años siguientes. Últimamente se ha introducido la noción de “estado inflamatorio o proinflamatorio” como importante factor de riesgo, sobre todo para infarto de miocardio. Éste, como la genética, no está considerado en las tablas de evaluación de riesgo clásicas, de modo que es mucho el camino a recorrer en este tema. La S.U.C. ha confeccionado además una “Guía Práctica de Prevención Cardiovascular ” en la que se dan los lineamientos para el tratamiento de los factores de riesgo. Hoy queremos considerar el tratamiento con drogas de las dislipemias mixtas y para la orientación de las medidas generales y particulares del riesgo cardiovascular, remitimos al lector a la mencionada guía.(1,2) Las dislipemias mixtas. Definición, importancia La dislipemia mixta está caracterizada por triglicéridos (TGs) elevados, bajo nivel de lipoproteína de alta densidad (HDL colesterol) y aumento del número de partículas de baja densidad (LDL colesterol). Esta es la dislipemia más comúnmente asociada a diabetes y síndrome metabólico y es considerada como un factor “emergente” de aumento del riesgo C.V. Análisis recientes muestran que los hombres con síndrome metabólico tienen 2,59 más posibilidades de tener un evento coronario mayor que aquellos que no lo presentan. En el estudio JUPITER sobre 17.802 pacientes se observó una prevalencia del síndrome de 41%, tanto en el grupo asignado a rosuvastatina como en el grupo placebo. 4 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Las estatinas han demostrado reducir la morbilidad y la mortalidad tanto en estudios de prevención secundaria como en otros de prevención primaria. Sin embargo, un metanálisis sobre 90.000 pacientes ha demostrado que a pesar del tratamiento eficaz con estatinas, existe un “riesgo residual”, vale decir que aun alcanzando los niveles de LDL propuestos en los pacientes con diabetes y síndrome metabólico, la mortalidad en los pacientes diabéticos era de 6,8% contra 4,2% en los no diabéticos. Este hecho se atribuye a que no se alcanzaron niveles adecuados de HDL y triglicéridos. De modo que parece importante aplicar una terapia adicional tendiente a mejorar el HDL y disminuir los triglicéridos en pacientes que han alcanzado cifras adecuadas de LDL con alguna terapia adicional. Consideraremos la asociación de fibratos, niacina y ácidos grasos omega 3. Fibratos De acuerdo a un análisis “post–hoc” del estudio Helsinki, gemfibrozil baja los TGs entre un 20 y un 30% y aumenta el HDL un 5 a 10%, produciendo en dicho estudio una reducción de riesgo relativo de 28% para enfermedad coronaria. Similares resultados muestra el estudio FIELD, mucho más reciente, en cuyo análisis se observó una reducción de riesgo relativo de 27% en pacientes diabéticos tratados con fenofibrato. A pesar del evidente beneficio de agregar fibratos a los tratamientos habituales con estatinas, antihipertensivos y antiagregadores plaquetarios existen reservas respecto a la posibilidad de producir rabdomiolisis. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 4–5. Niaicina El HDL bajo es todavía un problema en la dislipemia del diabético, en la resistencia a la insulina y el síndrome metabólico. La niacina es el único medicamento actualmente disponible capaz de elevar el HDL en un 20% a 25%, además desciende el LDL (10% a 15%) y los TGs 15 a 20%). Estos son datos para la formulación de liberación lenta y dosis entre 0,5 y 2 g. El CDP es el único estudio disponible con niacina (de liberación rápida) prospectivo, aleatorizado para evaluar eficacia sobre eventos CVs. Se llevó a cabo en 1119 hombres y se comparó con placebo. Al cabo de 5 años se observó una reducción de muerte e infarto no fatal de 14% en los tratados con niacina. Recientemente se publicó el estudio SEACOAST que comparó la eficacia y seguridad del tratamiento de simvastatina más niacina (20/1000 y 20/2000 mg de cada droga) vs. 20 mg sólo de simvastatina. Eran pacientes con dislipemia mixta que habían alcanzado las cifras meta de LDL. Con ambos regímenes combinados se obtuvo una mayor reducción de LDL que usando la simvastatina sola. El tratamiento combinado fue bien tolerado y el “flushing” que se produjo en el 90% de los casos fue leve a moderado y sólo un 7,5% de los pacientes suspendió la medicación. Actualmente se están realizando dos estudios de tratamiento combinado de niacina liberación lenta con estatinas. En el mayor de ellos, que aspira reclutar 20.000 pacientes, la niacina se asocia a laropiprant para reducir el efecto “flushing”. Su publicación será en el año 2012 y se podrá evaluar su eficacia para prevenir eventos y la tolerabilidad o ausencia de efectos colaterales. Ácidos grasos omega 3 Desde hace tiempo se habla de las bondades del consumo de ácidos grasos omega 3 contenidos en los aceites vegetales crudos, sobre todo el de oliva, y en los peces de aguas frías y profundas. Se atribuye al consumo regular de dichos productos la menor incidencia de enfermedad cardiovascular en ciertas poblaciones. En el año 2007 se publicó el estudio COMBO el cual evaluó la eficacia y tolerabilidad, de agregar, en casos de dislipemias mixtas, omega 3 al regimen de 40 mg de simvastatina y comparar los resultados con otra población que recibió 40 mg de simvastatina y placebo. Se hizo un seguimiento de 8 semanas alcabo de las cuales se observó: – mayor aumento de HDL; – mayor reducción de triglicéridos; – mayor disminución del colesterol NO HDL , en el grupo de estatina + omega 3 respecto al de estatina sola. Esto demuestra la tendencia a la normalización de las distintas fracciones de lípidos con este regimen combinado, la eficacia del mismo y la ausencia de efectos indeseables. Sin embargo hasta el momento no hay datos sobre la evolución clínica a largo plazo de ambos grupos. Vale decir que no existe evidencia de disminución de riesgo con esta medicación, aunque por el efecto normalizador sobre los lípidos es de esperar que así sea; dada la ausencia de efectos indeseables su uso estaría recomendado. La proteína C reactiva Desde hace años se han vinculado los eventos coronarios agudos con un estado inflamatorio del organismo o incluso de fenómenos inflamatorios a nivel de la placa de ateroma que produjo el accidente. Se ha propuesto incluso a ciertos agentes infecciosos, por ejemplo Chlamydia, como responsables de ese fenómeno inflamatorio que culmina en el accidente de la placa de ateroma que da origen al infarto. Recientemente el estudio JUPITER, que comprueba la justificación del uso de rosuvastatina para la prevención primaria en pacientes con dislipemias mixtas, además de medir las cifras de lípidos evaluó el “estado proinflamatorio” mediante la dosificación de la proteína C reactiva: observó que la estatina era tanto más eficaz cuanto lograba reducir la tasa de PCR. Este hallazgo plantea si no sería necesario dosificar PCR antes de decidir medicar a un sujeto en prevención primaria. Conclusión La dislipemia mixta o dislipemia aterogénica se caracteriza por: TGs altos, HDL bajo y LDL elevado. Una vez conseguido el nivel de LDL adecuado, en estos pacientes persiste un riesgo remanente vinculado a la persistencia de niveles altos de TG y bajos de HDL. En estos casos es necesario agregar niacina, fibratos o un ácido omega 3 a las estatinas. Parece razonable agregar al monitoreo del tratamiento la determinación periódica de los niveles de PCR, cuyo descenso nos daría otro parámetro de evaluación de la eficacia del tratamiento. Bibliografía 1. Natero V, Araújo O, Aguayo R, Díaz Arnesto O, Sandoya E en nombre de los redactores. Guía práctica de prevención Cardiovascular. Rev Urug Cardiol 2009;24:43–83 2. http://www.suc.org.uy/Gui_Prev_fotos_ archivos/guiaprevencion_Nov2007_W. pdf Factores de riesgo: dislipemias mixtas | Dr. Hugo Senra Por ese motivo se han llevado a cabo estudios que asocian fenofibratos a estatinas, excluída la cerivastatina, y mayoritariamente rosuvastatina, durante los cuales no se han reportado casos de miolisis. En una revisión del sistema de reporte de eventos de la FDA se observó que el número de reportes de miolisis por fenofibrato era 15 veces menor con fenofibrato que con gemfibrozil (0.58 vs. 8.7 de reportes por millón de prescripciones), lo que hace prácticamente inocua la asociación, sobre todo con fenofibrato. 5 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 6–8. Diabetes y enfermedad cardiovascular: 10 preguntas clave Dr. Carlos Schettini Médico Cardiólogo Diabetes y enfermedad cardiovascular: 10 preguntas clave | Dr. Carlos Schettini 1. ¿Por qué se afecta el corazón de los diabéticos? El corazón del diabético se ve afectado de acuerdo a la patología subyacente que la altere. Es así que la afectación dependerá si se trata de: • Comorbilidades de la diabetes (hipertensión, enfermedad coronaria de arterias epicárdicas, dislipidemia, obesidad). • Miocardiopatía diabética. • Cardiopatía autonómica. Si bien la enfermedad arterial coronaria es la principal causa, no se debe desestimar la presencia de las otras entidades que pueden coadyuvar al desarrollo de cardiopatía y que pueden tener graves consecuencias. La afectación coronaria agrede al corazón por isquemia. La hipertensión arterial sin lesiones coronarias produce una hipertrofia ventricular izquierda que lleva a la insuficiencia cardíaca por falla principalmente diastólica. La patogenia de la miocardiopatía diabética es multifactorial habiéndose propuesto: disfunción autonómica, deterioro metabólico (gluco y lipotoxicidad), anomalías de la homeostasis iónica, alteración de las proteínas estructurales, fibrosis intersticial, glicosilación con aumento de la rigidez. Su manifestación principal es la falla cardíaca por disfunción diastólica La neuropatía autonómica cardiovascular es un hallazgo común en los diabéticos y afecta un 5 a 10% de los diabéticos evolucionados. Todas estas manifestaciones pueden verse previamente al desarrollo de diabetes (prediabetes). Un hecho a tener en cuenta es que casi el 70% de los pacientes que se realizan una cineangiocoronariografía son diabéticos o intolerancia a la glucosa. Bibliografía – – – – Kannel W and McGee D. Diabetes and cardiovascular disease. The Framingham Study. JAMA 1979; 241: Nº19; May 11. Bell D. Diabetic Cardiomyopathy. Diabetes Care 2003; 26: 2949–2951. Taubert G, Winkelmann B, Schieffer T et al. Prevalence, predictors, and consequences of unrecongnized diabetes mellitus in 3266 patients scheduled for coronary angiography. Am Heart J 2003;145:285–291 Barr E, Zimmet P, Welborn T et al. Risk of cardiovascular and all–cause mortality in inidviduals with diabetes mellitus, impaired fasting glucose and impaired glucose tolerance. The Australian Diabetes, Obesity, and Lifestyle Study (AUSDIAB). Circulation 2007;116:151– 157 2. La hipertensión del diabético ¿tiene características especiales? La hipertensión arterial es un factor de riesgo independiente para aterogénesis y se sinergiza con los efectos de la diabetes aumentando significativamente el desarrollo y progresión de enfermedad coronaria, insuficiencia cardiaca, enfermedad cerebrovascular y vascular periférica. La hipertensión arterial también predispone al desarrollo de complicaciones microvasculares, particularmente la neuropatía y enfermedad renal terminal cuyo riesgo aumenta entre 2 y 3 veces. Es particularmente resistente requiriendo generalmente la administración de 3 fármacos para su control. Desde el punto de vista patogénico existen diversos mecanismos regulato- 6 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. rios cardiovasculares alterados, pero el eje principal de la hipertensión arterial del diabético lo constituye la rigidez arterial presente en etapas tempranas de la enfermedad y cuya importancia se manifiesta en que además está presente en familiares de diabéticos. La rigidez arterial producida por glicosilación no enzimática de las proteínas produce un perfil hemodinámica particular en la hipertensión de los diabéticos. Así la hipertensión del diabético se presenta: • Con predominio sistólico. • Presión del pulso aumentada. • Aumento de la variabilidad hemodinámica. • No caída de la presión arterial y persistencia de la hipertensión durante las horas del sueño. Los diabéticos tienen un tono miogénico alterado por lo que la presión pulsátil del pulso llega a penetrar en ciertos parénquimas (no protegidos por el tono miogénico) lo que explica las particularidades de las complicaciones renales y cerebrales de la diabetes. A estos hechos se le ha sumado como factor de agravamiento la no caída de la frecuencia cardiaca durante el sueño (normal = 10%) y la presencia de macroalbuminuria. Bibliografía – – – – Nilsson P. Hipertensión in diabetes mellitus. “In Textbook of Diabetes 2”. 3a. ed. Pickup J, Williams G. Blackwell Publishing. 2003. Epstein M, Sowers J. Diabetes Mellitus and Hypertension. Hypertension 1992;19:403–418. Alderman M. Quantifyng Cardiovascular Risk in Hypertension. Cardiology Clinics 1995;13:519–527. O´Rourke M, Safar M. Relation between Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 6–8. 3. ¿Hay antihipertensivos que no puedan emplearse en diabéticos? No existe droga antihipertensiva que no pueda ser utilizada en los pacientes diabéticos. La elección de la misma dependerá del momento de la enfermedad y de la patología que pueda tener el paciente. Todas las drogas antihipertensivas tienen pros y contras en el diabético por lo que podrán o no ser utilizadas de acuerdo a las circunstancias. Diuréticos: provocan hiperglucemia, aumento del colesterol LDL y los triglicéridos, disminuyen las HDL, aumentan la uricemia, pueden provocar hipokaliemia e hipomagnesemia. En dosis bajas no producen estos efectos. Están indicados en la insuficiencia cardiaca, la hipertensión resistente y los de asa en la insuficiencia renal. La indapamida no produce alteraciones metabólicas. Beta–bloqueantes: pueden provocar hipoglicemia, enmascarar los síntomas de la hipglicemia, aumentar el colesterol LDL y los triglicéridos, disminuyendo las HDL, no se pueden utilizar en la arteriopatía periférica. El carvedilol no produce estos efectos. Deben utilizarse en la cardiopatía isquémica, la insuficiencia cardiaca y en algunas arritmias. Bloqueantes cálcicos: los no dihidropiridinicos (verapamil y diltiazem) pueden provocar bloqueo auriculo– ventricular. Los dihidropiridínicos: cefaleas, edemas de miembros inferiores, taquicardia. En general pueden utilizarse con poco riesgo en los diabéticos. Inhibidores de la enzima conversora de angiotensina II (IECA): pueden provocar hiperkaliemia, son capaces de deteriorar la función renal, no se pueden utilizar en el embarazo, frecuentemente producen tos. Tanto en la diabetes 1 como en la 2 retardan la progresión de la nefropatía. Son beneficiosos en la insuficiencia cardiaca, la cardiopatía isquémica y la enfermedad arterial periférica. Antagonistas de los receptores tipo 1 de la angiotensina II (ARA II): tienen casi los mismos efectos que los inhibidores de la enzima conversora. La inhibición del sistema renina angiotensina por los IECA o ARA II es una premisa fundamental en el tratamiento, aunque frecuentemente se deben asociar a otras drogas. En los hipertensos tratados con diuréticos y fundamentalmente beta– bloqueantes existe una probabilidad alta de desarrollo de diabetes. Bibliografía – – – – – Epstein M. Diuretics. In”The ABCs of Antihypertensive Therapy”. Messerli F. Raven Press. New York . 1994. Ps. 69– 78. Hansson L, Svensson A. Beta–blockers. In”The ABCs of Antihypertensive Therapy”. Messerli F, Raven Oress. New York 1994. Ps 79–88. Rosenberg A, Frishman W. Calcium Channel Blockers. In” The ABCs of Antihypertensive Therapy”. Messerli F. Raven Press. New York. 1994. Ps 113– 129. Fegan P, Tooke J, Gooding K et al. Capillary pressure in subjects with type 2 diabetes and hypertension and the effect of antihypertensive therapy. Hypertension 2003;41:1111. Mancia G, Ambrosoni E, Agabiti–Rossei, Leonetti G, Trimarco B, Volpe M. Blood pressure control and risk of sroke in untreated and treated hypertensive patients screened from clinical practice: results of the ForLife Study.J Hypertens 2007;25:2390. 4. ¿Cómo prevenir la enfermedad cardiovascular del diabético? El desarrollo de hipertensión arterial y/o diabetes se produce por factores hereditarios y no hereditarios. La prevención de tales enfermedades puede lograrse mediante un estilo de vida adecuado que comprenda: – peso adecuado, – control de la glicemia, – control de la presión arterial, – nutrientes balanceados, – ingesta moderada de alcohol, – actividad física regular, – reducción de la ingesta de sodio, – no fumar. En los últimos años han surgido dos entidades: la prehipertensión y la prediabetes. La prehipertensión fue tratada con drogas en el estudio TROPHY, demostrándose la prevención del desarrollo de hipertensión definida. Persiste la discusión si el tratamiento de la prehipertensión debe realizarse mediante intervención higiénico nutricional o si es adecuado el uso de antihipertensivos. En tanto en la prediabetes se utilizan drogas hipoglicemiantes como prevención del desarrollo de diabetes. Bibliografía – Julius S, Nesbitt S, Egan B et al for the Trial of Preventing Hipertensión (TROPHY) Study Investigators. Feasibility of Treating Prehypertension with an Angiotensin–Receptor Blocker. N Engl J Med 2006;354:1685–1697. 5. ¿Cuál sería el valor objetivo de PA en el control del diabético? La American Diabetes Association considera hipertensión arterial en el diabético, las cifras mayores de 130/80 mmHg y se deben realizar todos los esfuerzos para lograr cifras menores de 130/80 mmHg. Bibliografía – Arauz–Pacheco C, Parrot M, Raskin P. the treatment of hypertensión in adult patients with diabetes. Diabetes Care 2002;25:633–642. 6. ¿Cuánto tiempo usar un solo fármaco? La utilización de un solo fármaco, con buena respuesta hemodinámica, no es común en el paciente diabético evolucionado. Por lo tanto la utilización de 3, 4 y 5 fármacos es un hecho muy frecuente en esta asociación. 7. ¿Cuándo comenzar a asociar? Diabetes y enfermedad cardiovascular: 10 preguntas clave | Dr. Carlos Schettini aortic stiffening and microvascular disease in brain and kidney. Hypertensión 2005;46:200–204. Consideramos que en los diabéticos con hipertensión grado I se puede es- 7 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 6–8. perar entre 10 y 15 días para asociar fármacos debido a las implicancias de un mal control de la hipertensión y luego agregar semanalmente de acuerdo a la evolución. Bibliografía – – Mancia G, Ambrosioni E, Agabitis Roseis E, Leonetti G, Trimarco B, and Massimo Volpe on behalf for th ForLife study group. Blood pressure control and risk of stroke in untreated and treated hypetensive patients screened from clinical practica: reuslts of the ForLife Study. J hypertens 2005;23:1575. Dahlof B, Sever P, Poulter M. for the ASCOT investigators. Prevention of cardiovascular events with an antihypertensive regimen of amlodipine adding perindopril as requerid versus atenolol adding nedroflumethiazide as required, in the Ango–Scandinavian Cardiac Outcomes trial–Blood Pressure Lowering Arm (ASCOT–BPLA): a multicentre randomized controlled trail. Lancet 2005;366:895–906. 8. ¿Cuáles asociar? 9. ¿Es posible revertir la hipertrofia ventricular en el diabético? El agrandamiento de la masa ventricular izquierda del paciente diabético no se debe exclusivamente a la hipertrofia del miocito, sino que existen otros factores que pueden aumentar el grosor parietal cardíaco. Dentro de ellas se encuentran la fibrosis perivascular, aumento de la matriz colágena, aumento de los triglicéridos, aumento de la membrana lipídica celular. La reversión de todos estos elementos es un tema difícil y no ha sido completamente estudiado. Las dificultades en establecer Diabetes y enfermedad cardiovascular: 10 preguntas clave | Dr. Carlos Schettini Dentro de las asociaciones en los diabéticos están en primer lugar: – IECA + bloqueantes de los canales cálcicos. – ARA + bloqueantes de los canales de calcio, pero existe la posibilidad del agregado de diurético. La asociación de beta–bloqueantes con diuréticos es una asociación poco adecuada para el tratamiento. Recientemente el estudio ONTARGET disminuyó las expectativas creadas por la asociación IECA–ARA al demostrarse un aumento de las complicaciones diabéticas con la misma. 8 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. una conexión entre diabetes e insuficiencia cardíaca son formidables. Bibliografía Tagtmeyer H, Mc Nulty P, Young M. Adaptation and maladaptation of the Heart in didabetes. Part I: General Conceptos. Circulation 2002;105:1727– 1333. 10.¿Cuáles serían las cifras de control de glicemia, HbA1c y colesterol en el hipertenso diabético? La glucemia debe ser menor de 1 gramo/dl; la HbA1c 6%; destacando dentro de las cifras de colesterol las de LDL en ≈ 70 mg/dl. Bibliografía Natero V, Araújo O, Aguayo R, Díaz Arnesto O, Sandoya E en nombre de los redactores. Guía práctica de prevención Cardiovascular. Rev Urug Cardiol 2009;24:43–83 Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 9–13. Cuidados en el paciente portador de marcapasos Dr. Alejandro Cuesta, Dr. Fernando Kuster Servicio de Cardiología Prof. Dr. Ricardo Lluberas Departamento Clínico de Medicina. Hospital de Clínicas, UdelaR Nociones básicas de marcapasos Los MP constan de dos partes identificables en una radiografía de tórax; el generador y uno o más electrodos. Estos salen del primero y por vía endovenosa se dirigen a la aurícula derecha ó al ventrículo derecho. En los MP resincronizadores existe además otro electrodo el que, a través del seno coronario, se posiciona para estimular la cara externa del ventrículo izquierdo. El generador se observa ubicado en el tercio superior de la cara anterior del hemitórax. Su tamaño y forma varían según la marca y el modelo. No es totalmente radioopaco y es normal distinguir piezas en su interior sin que ello implique que esté roto. Los electrodos pueden ser uno, dos y hasta tres, según el modo de estimulación empleado. En pacientes que tienen un electrodo fuera de servicio que no se pudo retirar, puede verse en la radiografía más cables de los esperados para el generador implantado. Incluso puede verse el extremo proximal desconectado. Esto en general es sabido por el paciente o figura en su historia clínica. Los primeros MP tenían como única función la estimulación de una cámara cardíaca (monocamerales) y lo hacían independientemente de la ac- tividad eléctrica propia, es decir eran asincrónicos. Los MP modernos son capaces de censar la actividad eléctrica espontánea del paciente (actividad intrínseca) y adecuar la estimulación de acuerdo a ella. Se ha establecido un código internacional que informa sobre el modo en que funciona un MP. La primera letra dice donde estimula y la segunda donde censa: A= Aurícula, V= Ventrículo, D= Ambas y O= Ninguna. La tercera letra dice lo que hace cuando censa actividad intrínseca: I= Se inhibe, T= Estimula, D= Se inhibe o Estimula según la cámara y O= Ninguna. Pongamos ejemplos de los modos más comunes, que serán útiles para comprender el resto. – Un MP en modo VOO estimula el ventrículo sin importar la actividad espontánea del mismo. – Un MP en modo AOO hace lo mismo en la aurícula. – Un VVI estimula el ventrículo y censa su actividad intrínseca, cuando hay actividad propia se inhibe. – Un AAI hace lo mismo pero en la aurícula. – Un DDD puede estimular aurícula y ventrículo y también censarlos. Si encuentra actividad auricular se inhibe de estimular esa cámara, espera un intervalo de tiempo y luego estimula el ventrículo si éste no mostró actividad. Si censa actividad ventricular no estimula ninguna cámara hasta el próximo ciclo. – Un VDD puede estimular solo el ventrículo pero censa en ambas cámaras. Cuando detecta una depolarización auricular estimula el ventrículo pero si detecta también el ventrículo se inhibe hasta el próximo ciclo. El ECG en un paciente portador de MP El complejo QRS estimulado es distinto al propio y su morfología depende de la posición intracardíaca del electrodo. Cuando se estimula la punta del ventrículo derecho el QRS tiene morfología de bloqueo de rama izquierda y su eje en el plano frontal es hacia arriba. Si existe una remodelación cardíaca importante ello puede variar. Si la punta está en el tracto de salida del ventrículo derecho o en el septum alto el QRS es más angosto, conserva la morfología del bloqueo de rama izquierda pero ahora el eje es inferior. En el caso de los marcapasos resincronizadores se estimula desde la cara lateral externa —epicardio— del ventrículo izquierdo y el QRS puede ser negativo en D1 y aVL. En los MP que actúan en aurícula y ventrículo se programa además el intervalo entre la depolarización propia (P) y/o el estímulo (A) en la auricular y la depolarización propia (R) y/o el estímulo (V) ventricular. El intervalo PV se programa más corto que el AV. Dado que el sensado de la P suele ocurrir ya transcurridos unos cuántos milisegundos de su inicio, con ésta programación se logra que la sincronía aurículoventricular sea similar con ritmo auricular sensado o estimulado. Estos intervalos pueden programarse variables, según la frecuencia y observar esto no es sinónimo de disfunción. Otra función que se ha incorporado a los MP es la capacidad de aumentar la frecuencia cuando el paciente hace ejercicio, se la denomina “adaptación de frecuencia”. Esto se señala agregando a la sigla ya descripta, una cuarta letra que es la R (Rate-adaptative) o no Cuidados en el paciente portador de marcapasos | Dr. Alejandro Cuesta, Dr. Fernando Kuster Este artículo de difusión está dirigido a médicos clínicos que se desempeñan en consultorios y puertas de emergencia. Pretendemos transmitir nociones sobre los marcapasos definitivos (MP), acerca del cuidado de los pacientes implantados y brindar elementos que permitan tener más seguridad en su manejo. 9 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Cuidados en el paciente portador de marcapasos | Dr. Alejandro Cuesta, Dr. Fernando Kuster Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 9–13. agregando ninguna, si no tiene esa función (Ej.: VVIR, DDDR, VDDR). Se utilizan distintas formas para “detectar ejercicio” y algoritmos para la respuesta. Hay que saber que existe, ya que esto implica que un MP funcionando correctamente, no siempre esté estimulando con la misma frecuencia. Si se golpea o moviliza el generador se activa la función, aumenta la frecuencia y ello es un comportamiento normal. El “umbral de estimulación” es la energía mínima con la que se logra la depolarización de la cámara que se trate. Cuando se logra la depolarización se dice que se logra la “captura”, ya sea el ventrículo o la aurícula. A la energía con la que se estimula se la denomina “salida”. Cuánto más bajo sea umbral se podrá programar mas baja también la salida. Con ello ahorraremos batería y prologaremos la vida del generador. La salida se programa siempre con un margen amplio de seguridad, considerando el umbral. Lo habitual es ver una espiga y una onda con morfología estimulada ó ausencia de espiga y una onda con morfología de latido propio. A veces se ve una espiga seguida de una onda con morfología intermedia entre la estimulada y la propia. En éste caso se habla de fusión y se debe a que parte del músculo de la cámara considerada se despolarizó a partir de la vía de conducción normal y parte desde la punta del electrodo. A veces se puede ver una espiga disparada seguida de un QRS con morfología de latido propio. Esto se denomina seudofusión. El estímulo fue tardío y todo o la enorme mayoría del músculo se despolarizó por la vía de conducción normal. A veces se puede ver una espiga que aparece inmediatamente después de una onda y no logra despolarizar nuevamente la cámara cardíaca. Dentro de los 0,3 segundos de iniciada una depolarización lo más probable es encontrar el músculo en su período refractario y no lograr capturarlo. Ninguna de estas tres situaciones implica una disfunción del marcapasos aunque quizás se pueda optimizar sin apuro la programación. El “umbral de sensado” es el voltaje que tiene la onda de depolarización detectada en una cámara cardíaca. La “sensibilidad programada” es el voltaje que el MP le exigirá a una onda para hacer diagnóstico de que hubo una depolarización de ésa cámara. Si se programa la sensibilidad a un voltaje por encima del umbral de sensado, ninguna de las depolarizaciones serán consideradas como tal y el MP estimulará como si hubiera una asístole. Si la sensibilidad se programa por debajo del umbral de sensado las ondas son detectadas y el MP se inhibirá correctamente. Si la sensibilidad se programa muy baja (muy sensible), el MP puede detectar interferencias como si fueran depolarizaciones cardíacas e inhibirse de forma inapropiada. Esta situación puede ser grave en pacientes MP dependientes. Si el MP está programado con una frecuencia mínima de 60 cpm esperará 1 segundo luego del último latido sensado para enviar un estímulo. A veces se programa para que el MP espere un tiempo mayor al determinado por esa frecuencia mínima antes de iniciar la estimulación. Luego de ese primer latido algo demorado seguirá estimulando a 60 hasta que un nuevo latido propio reinicie el algoritmo. Esto se denomina “histéresis” y su propósito es favorecer la ocurrencia de ritmo propio. Puede ocurrir que si el ritmo alterna latidos propios y estimulados la frecuencia promedio sea menor de 60 y sea igual un funcionamiento normal. 10 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Se dice que un paciente es “MP dependiente” cuando no es capaz de mantener una frecuencia espontánea supraventricular por encima de 30 lpm o mantiene una frecuencia algo mayor pero muy sintomática. Esto se puede definir rápidamente en los controles. Los marcapasos que sensan en aurícula (DDD, AAI, VDD) son más propensos a detectar ondas espurias. Como el umbral de sensado auricular es siempre menor que el ventricular la sensibilidad se programa más baja. Si detecta un ruido que interpreta como onda auricular enviará un estímulo ventricular. Habrá entonces una estimulación ventricular inapropiada, que puede ir hasta la frecuencia máxima programada en el generador. Si el MP es un AAI resultará en la inhibición de la estimulación auricular sin que exista actividad auricular real. Cuando se coloca un imán sobre el generador de un MP el mismo para a un modo asincrónico, VOO ó DOO. Esto puede ser hasta que se retire el imán o en algunos modelos, durante un número de latidos predeterminado por el fabricante. Lo otro que ocurre es que estimula a una salida alta. Ambos hechos permiten hacer diagnósticos. Por ejemplo, si asistimos a una taquicardia estimulada con un imán podemos hacer diagnóstico del ritmo auricular de base —taquiarritmia auricular conducida— o interrumpirla y plantear una reentrada por Marcapasos. Si hay pérdida de captura y con el imán captura puede tratarse de un aumento súbito de umbral de estimulación. Además del modo, la frecuencia, los intervalos AV, la adaptación de frecuencia, los límites diagnósticos y los umbrales, hay muchos mas parámetros que se deben programar en cada generador. Algunos muy importantes por razones de seguridad pero agregan poca información útil para el médico clínico. La integridad del sistema, la correcta detección de la actividad intrínseca y la excitabilidad del miocardio son los tres pilares del buen funcionamiento. Todo lo que dañe algún componente del dispositivo, emita señales que puedan ser confundidas o altere los umbrales pueden causar disfunción, transitoria o permanente. La tecnología ha generado aparatos cada vez más seguros, pero persisten algunos problemas que pueden ser perfectamente prevenidos con la adecuada información y educación del paciente. Cuidados post–implante inmediato El implante de un MP se realiza en alguno de los Institutos de Medicina Altamente Especializada cardiológicos y la enorme mayoría son financiados por el Fondo Nacional de Recursos. Una vez realizado el implante los pacientes son dados de alta a las 24 horas. Si el paciente ingresó de coordinación regresa a su domicilio. Si el implante fue de urgencia, puede volver a su domicilio o regresar a la institución de origen para completar su tratamiento. Cuando el procedimiento fue solo el recambio del generador puede ser dado de alta a domicilio en el mismo día. En todos los casos el equipo actuante debe instruir al paciente sobre los cuidados a tener con la herida operatoria, los controles a realizar y la forma de contactarse con el centro. Los pacientes o sus familiares reciben una cartilla en la que constan las características del MP implantado. Uno de los aspectos más importantes a considerar en los primeros días es la herida operatoria. Los cuidados a realizar son los de cualquier cirugía. La mayor diferencia es que debajo de la piel, según la cantidad de tejido subcutáneo, se palpa el dispositivo implantado y esto es lo normal. Las infecciones de bolsillo ocurren en 1% de los casos y hay que realizar su diagnóstico precoz porque el equipo médico actuante debe ser informado el que considerará la necesidad de retirar todo el sistema (generador y electrodos). Esta complicación es raro que se manifieste antes de las 48 horas del implante, por lo que los pacientes suelen estar de alta cuando comienzan los síntomas y signos. Hay que interrogar sobre la existencia de dolor local o signos fluxivos. Buscar la presencia de calor, rubor y secreciones en aumento. En caso de observarse un exudado hay que hacer un primer diagnóstico macroscópico y extraer una muestra para cultivo antes de realizar cualquier antiséptico local. La presencia de síndrome febril debe preocuparnos. La gran mayoría de los casos se debe a focos de otro origen y en particular hay que buscar la presencia de flebitis en pacientes que estuvieron internados. Las infecciones de bolsillo muchas veces no se presentan con fiebre. Por otro lado, la fiebre con una semiología del bolsillo normal prácticamente descarta éste origen. Para plantear una infección del sistema implantado en su parte intravascular, a nivel de los electrodos, el cuadro clínico debe ser el de una endocarditis. Esto no ocurre en los primeros días luego del implante. Hay que priorizar la encuesta bacteriológica y no apresurarse a solicitar ecocardiogramas. El ecocardiograma en los primeros días luego del implante por la precocidad de este estudio no se visualiza todavía la vegetación aunque luego se confirme el diagnóstico de endocarditis. Otra complicación local es la ocurrencia de hematoma. Ocurre en 3% de los casos y en general en pacientes que están antiagregados y/o anticoagulados. Aparece una tumoración a nivel del bolsillo del implante que impide distinguir el dispositivo. Junto a ello, se observa la coloración azul-violácea característica a nivel de piel. La conducta con los hematomas puede ser distinta según el tamaño y hasta requerir la reintervención para drenar. Siempre está presente el riesgo de sobre-infección del mismo. La aparición de equímosis no reviste ningún riesgo ni amerita ningún tratamiento. Lo habitual es que la equímosis se vaya extendiendo, luego desplazando según la posición preponderante del paciente y cambiando de color hasta desaparecer. Los electrodos pueden moverse de la posición en que fueron implantados y ello se llama dislocación. Ocurre en las primeras 24 horas del procedimiento, aunque rara vez puede acontecer días después. Esta complicación se sospecha en el registro electrocardiográfico y se confirma en la radiografía de tórax. Es importante leer el informe del implante para conocer en qué posición fueron dejados originalmente los electrodos. No siempre el extremo distal del electrodo auricular se deja en la orejuela de la aurícula derecha, ni el ventricular en la punta del ventrículo derecho. Los médicos que asisten pacientes con MP deben aprovechar cualquier radiografía de tórax normal para familiarizarse con las posiciones habituales de los electrodos. Ante la sospecha será necesario consultar con el especialista. Cuando hay errores de censado o captura luego de un procedimiento de recambio de generador esto es un problema de conexión o de programación pero nunca de dislocación. Un párrafo aparte merecen las complicaciones derivadas de una selección inapropiada del modo de estimulación o errores en la programación. Mencionaremos solo las más comunes. a) Síndrome de MP. Ocurre por la estimulación auricular retrógrada desde el ventrículo ó por la pérdida de sincronía aurículo-ventricular y habitualmente en los modos de estimulación VVI. Puede presentarse como palpitaciones, disnea, presíncope y rara vez síncope o falla cardíaca manifiesta. b) Taquiarritmia auricular conducida por MP al ventrículo. Esto ocurre en los modos DDD cuando no tienen o no se ha activado una función denominada “cambio de modo automático” que lo previene. La fibrilación auricular se diagnostica por la irregularidad. c) Bloqueo AV con marcapasos AAI. Ocurre cuando el paciente presenta el bloqueo a frecuencias sinusales mayores a la basal y ello pasó inadvertido al implantador. d) Taquicardia de reentrada por MP. Esto puede ocurrir porque el electrodo auricular censa una P retrógrada luego de la estimulación ventricular y vuelve a estimular el ventrículo. También porque cense una onda T acuminada del latido estimulado. En ambos casos se observa una taquicardia estimulada inapropiada para la actividad del paciente. Otras complicaciones de los primeros días son aún más raras. Puede haber captura del nervio frénico o del propio diafragma por proximidad del electrodo. Ello genera contracciones espasmódicas y rítmicas, continuas o en determinada posición. Puede ser referido como “hipo” o como palpitación torácica baja o abdominal intensa. Es muy poco frecuente porque el implantador verifica que ello no ocurra antes de dejar anclado el electrodo. En algunas ocasiones y en pacientes con factores predisponentes, principalmente fibrilación auricular, el implante de los electrodos puede movilizar trombos intracavitarios y presentarse como tromboembolismo pulmonar luego del implante. Puede ocurrir un neumotórax diferido cuando el abordaje venoso se realizó por técnica de punción. Son raros, la mayoría leves y asintomáticos, ya que los importantes se desarrollan en las primeras horas y se ven en la radiografía previa al alta. Otra complicación rara es el derrame pericárdico por perforación que haya transcurrido las primeras horas de forma inaparente. Globalmente consideradas las complicaciones del implante no superan el 3%. La disfunción del marcapasos propiamente dicho, luego del implante o en la evolución, es un hecho extremadamente raro. Cuidados en el paciente portador de marcapasos | Dr. Alejandro Cuesta, Dr. Fernando Kuster Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 9–13. 11 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 9–13. Cuidados en el paciente portador de marcapasos | Dr. Alejandro Cuesta, Dr. Fernando Kuster Causas externas de disfunción Las fuentes externas capaces de causar interferencias o daños son principalmente los aparatos o instrumentos que generan ondas electromagnéticas. También pueden tener efectos adversos la corriente eléctrica, las radiaciones ionizantes y las acústicas. Los MP actuales tienen un sistema de blindaje adecuado y suficiente que los protege de las posibles ondas emitidas por todos los equipos de uso doméstico (incluyendo el temido microondas). Todos pueden ser utilizados sin limitación ni precauciónes adicionales al común de los usuarios. Los teléfonos celulares deben usarse a más de 10 cm del generador. La única recomendación es no llevarlo encendido en el bolsillo de la camisa del mismo lado que el MP. Cuando está sobre la oreja del paciente el riesgo es muy bajo pero igual es bueno atenderlo del lado contrario al generador. Al pasar por detectores de metal de accesos públicos, como en los aeropuertos, la alarma se suele activar. No se han observado alteraciones de las funciones y la probabilidad de que ello ocurra es muy baja. Los pacientes pueden pasar seguros pero deben recordar llevar algo que certifique su condición de paciente implantado. Los pacientes también pueden pasar sin problemas por los detectores antirrobo de las tiendas y supermercados. Se recomienda que caminen normalmente a través de estos sistemas, no se detengan dentro del campo y eviten el contacto con las planchas. Hay que tener cuidado cuando se realizan colas o hay aglomeraciones frente a los comercios ya que la exposición prolongada puede no ser percibida y eventualmente llegar a provocar malfunción del MP. En el ambiente laboral sólo pueden tener problemas aquellos que trabajan en sitios donde existen grandes bovinas electromagneticas, imanes o conductores cercanos de alto voltaje. Estas situaciones sólo se presentan en plantas de producción de energía o distribuidoras de alta tensión. Procedimientos médicos post-implante Si es necesario realizar una cardioversión eléctrica de emergencia no hay posibilidad de realizar el control o programación previa del MP. Se debe recordar realizarlo luego que el paciente se haya estabilizado. Las palas o parches de cardioversión se deben colocar preferentemente en posición antero-posterior y siempre a más de 5 cm del generador. El generador debe quedar afuera del trayecto entre las dos palas del cardioversor. Es bueno contar con la posibilidad de “marcapaseo” externo transcutáneo. Para la cardioversión de elección recomendamos coordinar con el especialista. Según el caso puede ser conveniente programar transitoriamente el dispositivo para minimizar riesgos. En cuanto al uso de bisturí eléctrico se prefiere el bipolar. Si se usa unipolar, el electrodo indiferente debe estar lo más cerca posible del campo operatorio y lejos del generador. El parche debe mantenerse bien adherido durante todo el procedimiento. La potencia y el tiempo del bisturí deben reducirse al mínimo y realizar pulsos cortos y espaciados. Debe realizarse monitorización electrocardiográfica continua. Nue- 12 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. vamente recordamos si la cirugía es de coordinación es conveniente consultar con el especialista. La resonancia nuclear magnética puede afectar la función de un MP y hasta dañarlo irreversiblemente. Es de las peores situaciones a las que se pueden exponer y en principio está contraindicada su realización. En los últimos años ha surgido alguna información de que ésta medida absoluta podría ser exagerada. Bajo circunstancias de necesidad, tomando precauciones y asumiendo un riesgo de rotura, se podrían hacer algunos estudios. Los neuroestimuladores y la estimulación eléctrica transcutánea puede interferir con el funcionamiento del MP, espcialmente si está programado con sensibilidad alta y en unipolar. En pacientes que no son dependientes pueden usarse de forma segura. En dependientes se recomienda la reprogramación previa. Durante la radioterapia se debe evitar la irradiación directa del generador. Si no es posible, hay que cambiarlo de lado. Aunque quede fuera del campo a irradiar se lo debe proteger. Se sugiere monitorizar la dosis acumulada y limitarla a 2 gauss. Se recomienda realizar monitorización electrocardiográfica durante las aplicaciones y también un control más estrecho del dispositivo entre las sesiones. Durante la litotricia el punto de aplicación se debe alejar lo más posible del generador. Esto es más importante para los MP de implantación abdominal. Es conveniente realizar monitorización electrocardiográfica continua y controlar el dispositivo antes y después. Apagar la respuesta de frecuencia y dejarlo asincrónico si el paciente es dependiente. Medicación y medio interno Las alteraciones en el medio interno y algunos medicamentos pueden aumentar el umbral de estimulación e incluso llegar a ocasionar fallos de captura. Hay que tener en cuenta que los pacientes con MP suelen tener alguna cardiopatía asociada y recibir medicación variada. La acidosis, la alcalosis, la hipercapnia, la hipoxia, la hiperpotasemia, la hiperglicemia y el hipotiroidismo pueden aumentar el umbral de estimulación. Algunas cardiopatías y en particular la isquémica pueden también aumentar el umbral. Es un clásico la pérdida de captura por infarto de la región donde se apoya la punta del electrodo. Los fármacos que pueden aumentar el umbral de estimu- Complicaciones de los MP. Infecciones (bolsillo y profunda) Hematoma o sangrado Mecánicas (electrodos) Neumotórax Embolia pulmonar Estimulación diafragmática Modo/Programación inapropiada Ver texto desarrollado Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 9–13. y la difenilhidantoína. Los betabloqueantes, la digoxina y los IECA no afectan los umbrales. Los inotrópicos, la atropina y los corticoides pueden mejora el umbral de captura. Las drogas que prolongan el QT pueden ocasionar que se cense la onda T como otra depolarización ventricular. Si el paciente está con una frecuencia de 30 cpm el MP sensará 60 cpm y se inhibirá. El uso de medicación antiarrítmica en pacientes con dispositivos implantados debe hacerse coordinado con el especialista que controla el MP. Todas la demás pueden ser usadas con tranquilidad sin esperarse ningún efecto adverso específico con el implante. Bibliografía recomendada Vista de la posición de los electrodos en un sistema de estimulación tricameral (resindorinzador). 1: electrodo de la aurícula derecha en la orejuela; 2: electrodo del ventrículo derecho en el apex; 3: electrodo del ventrículo izquierdo a través del seno coronario en la cara lateral del mismo. lación son todos antiarrítmicos de clase 1 y 3. Hay que recordar que algunos tienen además otros usos como la lidocaína – – Goldschlager N, Epstein A, Friedman P, for the North American Society of Pacing and Electrophysiology (NASPE) practice guideline committee. Environmental and drug effect on patients with pacemakers and implantable cardioverter/defibrillator: A practical guide to patient treatment. Arch Int Med 2001;161(5):649655. Zhan Ch, Baine WB, Sedrakyan A, Steiner C. Cardiac Device Implantation in the United States from 1997 through 2004: A Population-based Analysis. J Gen Intern Med 23(Suppl 1):13–9 Gregoratos G, Abrams J, Epstein AE, Freedman RA, Hayes DL, Hlatky MA, Kerber RE, Naccarelli GV, Schoenfeld MH, Silka MJ, Winters SL. ACC/AHA/NASPE 2002 Guideline Update for Implantation of Cardiac Pacemakers and Antiarrhythmia Devices. Circulation. 2002;106:2145–2161. Cuidados en el paciente portador de marcapasos | Dr. Alejandro Cuesta, Dr. Fernando Kuster – 13 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 14–17. Muerte súbita: un diagnóstico de 2400 años, un reto de hoy Dra. María del Pilar Aguilar Médica cardióloga, CASMU y Asociación Española Muerte súbita: un diagnóstico de 2400 años, un reto de hoy | Dra. María del Pilar Aguilar “Aquellos que son objeto de frecuentes y graves desmayos sin causa obvia y mueren súbitamente.” (Hipócrates, siglo V a.C.). Siendo nuestros colegas médicos generales los destinatarios más numerosos de Carta Cardiovascular, queremos transmitirles en este capítulo algunos conceptos básicos sobre esta entidad en un momento particular, cuando en nuestro país se pone en vigencia la ley (publicada en el número anterior de la revista) que establece la obligatoriedad de instalar desfibriladores externos automáticos (DEA) en lugares públicos y privados con gran afluencia de público, así como de capacitar a las personas en las técnicas básicas de reanimación. Definición La primera definición conocida es la de Hipócrates en el siglo V a.C. Hoy, todas las definiciones coinciden en que se trata de una muerte natural, ocurrida en un lapso breve (podría establecerse 1 hora pero esto no es absoluto) luego de iniciados los síntomas. Algunas cifras que ayudan a comprender la importancia del tema Según datos del Ministerio de Salud Pública, en el año 2007 murieron en territorio nacional, 33.706 personas de las cuales 10.549 lo hicieron por enfermedad cardiovascular (CV) siendo ésta la principal causa de muerte en nuestro país.(1) En el documento analizado se establecen como componentes de la causa “enfermedades del aparato circulatorio“: el accidente vascular encefálico, el infarto agudo de miocardio y la enfermedad isquémica del corazón. Están establecidas también “las causas mal definidas” que tienen un peso importante en la mortalidad global ya que ocupan el cuarto lugar y en este grupo podría haber muertes cardíacas. Esto nos hace reflexionar sobre la necesidad de mejorar la calidad de los datos que consignamos en el certificado de defunción. Si bien la muerte súbita (MS) no aparece analizada como causa, se sabe que a nivel mundial, ésta constituye entre el 10 y el 30% de todas las formas de morir, por lo que podríamos considerar que por lo menos 3000 uruguayos mueren cada año súbitamente.(2) Etiología La mayoría de estas muertes (90%) se presentan en enfermos cardiópatas, sea su enfermedad conocida o no; en 5% no se encuentra enfermedad asociada y en otro 5% es el desenlace de un proceso extracardíaco grave (como una hemorragia cerebral o digestiva masivas). En el 90% de los casos hablaríamos entonces de muerte súbita cardíaca (MSC). Con respecto a la enfermedad subyacente es la cardiopatía isquémica la que se encuentra en primer lugar, siendo la causa de hasta un 80% de los casos. Ocupa el segundo lugar la insuficiencia cardíaca con disfunción sistólica, que no constituye una enfermedad en sí misma sino un síndrome resultan- 14 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. te de la evolución de varias cardiopatías, contribuyendo con el 10–15% de todos los casos de MSC. (3) En los casos restantes (5–10%) se presentan síndromes y enfermedades de diversa índole como la miocardiopatía hipertrófica, las miocarditis, los trastornos eléctricos (Brugada, WPW, QT largo, taquicardia ventricular polimorfa catecolaminérgica), la displasia arritmogénica del ventrículo derecho, la estenosis aórtica, el prolapso de la válvula mitral y el origen anómalo de las arterias coronarias. El evento final que conduce a la muerte es lo más frecuentemente una arritmia rápida, una taquicardia ventricular sostenida que desencadena fibrilación ventricular, aunque puede presentarse una fibrilación ventricular primaria, sobre todo en los síndromes coronarios agudos.(4) Con menor frecuencia puede registrarse una Torsades de pointes (casi siempre asociada a efecto proarrítmico de fármacos) o una bradiarritmia severa que lleven al paro cardíaco. Prevención En la población general, se puede lograr un impacto negativo sobre la MS, tratando todos los factores de riesgo CV conocidos: factores metabólicos, HTA, tabaquismo, diabetes, etc. ya que estas acciones disminuyen la incidencia de cardiopatías que son el sustrato de la muerte súbita. Además con una correcta investigación clínica podrán detectarse mayor número de “enfermos” desconocidos hasta ese momento. Con respecto a los que ya han manifestado signos de enfermedad, se utiliza el término prevención primaria para aquellos que a pesar de no haber sufrido taquiarritmias ventriculares sostenidas previas, se consideran con alto riesgo de padecerlas y morir súbitamente. El tratamiento preventivo en los enfermos que ya han experimentado un paro cardíaco o una taquicardia ventricular sostenida, se denomina prevención secundaria. ¿Algún fármaco ha demostrado ser útil en la prevención primaria de la MSC? – Los inhibidores de la enzima de conversión de angiotensina (IECA) disminuyen la MS en forma significativa luego de un infarto de miocardio y en la insuficiencia cardíaca. (3) El efecto sobre la mortalidad es mayor en las clases funcionales más avanzadas. Los inhibidores de los receptores de angiotensina II (ARA II) agregados o sólos no han demostrado mejoría extra de la mortalidad en forma significativa. – Los antialdosterónicos, como la espironolactona, demostraron disminución del 30% en el riesgo relativo de MS en con insuficiencia cardíaca severa. (Clase III–IV de la NYHA). (5) – Los betabloqueantes (carvedilol, metoprolol, bisoprolol) tanto luego del infarto de miocardio como en la insuficiencia cardíaca independientemente de la clase funcional en que se encuentre el paciente.(6) Se asocian al tratamiento anterior. – La terapia con estatinas en enfermos con cardiopatía isquémica, ya reduce el riesgo de eventos CV, muerte súbita y arritmias ventriculares.(6) Con respecto a los fármacos con propiedades electrofisiológicas, sólo los betabloqueantes (grupo II) demostraron beneficio ya que los bloqueantes de los canales de sodio de la membrana, también llamados “antiarrítmicos del grupo I”, como la flecainida y la propafenona, pueden ser perjudiciales para suprimir arritmias ventriculares en los portadores de cardiopatía isquémica o insuficiencia cardíaca aumentando la mortalidad. En cuanto a la amiodarona (antiarrítmico del grupo III), puede usarse sin riesgo para tratar las arritmias ventriculares y la fibrilación auricular en pacientes portadores de las patologías mencionadas pero diferentes ensayos coinciden en que el cardiodesfibrilador (CDI) es superior a ella para reducir no sólo la muerte súbita, sino también la mortalidad total.(3) ¿Cuándo se debería indicar el implante de un cardiodesfibrilador? Existen numerosos ensayos clínicos que evidencian la ventaja de los CDI, en relación al tratamiento con drogas antiarrítmicas, para la prevención de la MSC. Los pacientes de alto riesgo con disfunción del ventrículo izquierdo por infarto de miocardio (pero no reciente) o por cardiopatía no isquémica, que estén recibiendo un tratamiento médico óptimo, se benefician del implante de un cardiodesfibrilador, disminuyendo significativamente su mortalidad tanto en prevención primaria como secundaria. (6) No se demostró beneficio en los primeros meses posteriores al infarto. Existen otras patologías que tienen clara indicación y que no analizaremos, como algunos casos de cardiopatía hipertrófica, en la displasia arritmogénica del ventrículo derecho, y en los trastornos eléctricos, como el síndrome de Brugada, y otros. Para tomar la decisión correcta es de fundamental importancia mejorar la estratificación de riesgo de MSC y para ello se han evaluado diferentes parámetros. La fracción de eyección del ventrículo izquierdo disminuida, en los diferentes ensayos igual o menor de 35%, tiene una importancia fundamental, pero no es un elemento exclusivo, por lo que se han estudiado otros signos como: – La disminución de la variabilidad de la frecuencia cardíaca que tiene un valor predictivo per se, y denota una alteración autonómica con aumento del tono simpático o disminución del vagal, existiendo una fuerte asociación con arritmias letales. Además constituye un signo temprano de neuropatía diabética. – La presencia de alteraciones de la conducción intraventricular, como el bloqueo completo de rama izquierda. – Diversos hallazgos del estudio electrofisiológico. – La alternancia de las ondas T (variaciones en el voltaje con cada ciclo cardíaco), que se debe a cambios en los potenciales de membrana detectables por métodos especializados (análisis espectral), que alteran la repolarización y favorecen la génesis de arritmias.(3) En todos los casos se trata de enfermos que deben ser evaluados por un especialista electrofisiólogo quién liderará la toma de decisiones. Tratamiento La supervivencia de un paro cardíaco sigue siendo muy desfavorable y es por esto que el mejor tratamiento es la prevención. A pesar de ella, se producirán muertes súbitas cuyo número tenemos el reto de abatir. Existen Directrices Internacionales que recomiendan las acciones básicas que todos podemos aprender (SOPORTE VITAL BÁSICO) y las especializadas, llevadas adelante por el personal de emergencia (SOPORTE VITAL AVANZADO). Las posibilidades de supervivencia disminuyen un 10% por cada minuto que pasa y por esto es tan importante que se reconozca la situación y se inicie inmediatamente la resucitación, sin esperar a que llegue la emergencia. La llamada “CADENA DE LA SUPERVIVENCIA” establece los siguientes pasos: – Reconocimiento de la situación de extrema urgencia. – Activación de los servicios de emergencia. – Resucitación cardiopulmonar inmediata. – Desfibrilación. – Soporte vital avanzado. Tomamos las recomendaciones difundidas por el European Resuscitation Council en 2005 que no deben considerarse excluyentes de otras publicadas en la literatura.(7) (Figura 1, página siguiente). Muerte súbita: un diagnóstico de 2400 años, un reto de hoy | Dra. María del Pilar Aguilar Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 14–17. 15 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 14–17. 1. 2. Muerte súbita: un diagnóstico de 2400 años, un reto de hoy | Dra. María del Pilar Aguilar 3. 16 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 14–17. Conclusiones Como mensaje final reflexionamos sobre la importancia del avance en los conocimientos sobre la etiología, la fisiopatología y la prevención de la MSC. Continúa siendo un gran reto identificar adecuadamente el riesgo de los enfermos y en lo que respecta al tratamiento, elaborar y llevar a la práctica planes que permitan capacitar a integrantes de la comunidad y de los servicios de salud y así aumentar las posibilidades de salvar de la muerte súbita a un número cada vez mayor de personas. Está demostrada la utilidad del DEA, pero creemos que en dónde esté instalado debe también existir un plan específico para ese lugar con el adecuado entrenamiento de los involucrados. La Sociedad de Cardiología y la Comisión Honoraria para la Salud Cardiovascular participan en la reglamentación de la ley y han realizado una convocatoria para redactar las Guías Nacionales de Resucitación.(2) Este tema no es patrimonio de la Cardiología, sino que nos involucra a todos y es responsabilidad de toda la sociedad. Bibliografía 1. Estadística del Ministerio de Salud Pública, año 2007. www.msp. gub.uy/uc_2618_1.html 2. Reyes Caorsi W, Facc. Prevención de muerte súbita: un compromiso de todos. Rev. Urug. Cardiol.; 23:247–248, 2008. 3. Hohnloser S. Muerte súbita cardíaca y reanimación cardiopulmonar. Tratado de Medicina Cardiovascular de la European Society of Cardiology.–; Cap.33:1049–1069, 2008. 4. Bayés de Luna A. Primer Congreso virtual de Cardiología. Conferencias de Miembros del Comité de Honor: Muerte súbita cardíaca, 2000.– www.prous.com/ttmcardiologia. 5. Pitt B. The effect of Spironolactone on morbidity and mortality in patients with severe heart failure. N Engl Med 341: 709, 1999. 6. Priori SG. Guidelines for management of patients with ventricular arrythmias and prevention of sudden death.– ACC/ AHA / ESC. Eur Heart J ; 27: 2099–2140, 2006. 7. European Resuscitation Council: Recomendaciones en Resucitación Cardiopulmonar 2005. www.erc.edu 8. Hallstrom A. Public access defibrillation and survival after out– of–hospital cardiac arrest. N Engl J Med 351: 637–647, 2004.– Muerte súbita: un diagnóstico de 2400 años, un reto de hoy | Dra. María del Pilar Aguilar Si al soporte vital básico se agrega el uso del desfibrilador, las posibilidades de éxito aumentan. El mayor ensayo sobre acceso público a la desfibrilación (8) , llevado adelante en 993 localidades de los Estados Unidos por 19.000 voluntarios, demostró que se aumenta la supervivencia significativamente si además del entrenamiento en reanimación cardiopulmonar, se dispone de un DEA. Los autores concluyeron que cualquier persona entrenada puede usar este dispositivo en forma segura y eficaz. Se denomina “automático” porque realiza un análisis automático del ritmo y “recomienda” si está indicada o no la descarga. Puede también descargar automáticamente o ser semiautomático y requerir que el usuario oprima el botón. Tiene una altísima precisión por lo que los choques inapropiados son muy escasos. (Figura 2). El SOPORTE VITAL AVANZADO que el equipo de emergencia inicia y continúa al internar al paciente se resume en la figura 3. 17 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 19–24. Investigación médica ayer y hoy Dr. Edgardo Sandoya Médico cardiólogo Investigación médica ayer y hoy | Dr. Edgardo Sandoya Desde los orígenes de la medicina quienes la practican han estado dominados por la inquietud de develar los misterios de la estructura y el funcionamiento del prodigio humano, por entender las razones que le hacen enfermar, así como por desarrollar terapéuticas que contribuyan al restablecimiento de la salud. Cuando se da una mirada curiosa hacia al ayer, no deja de sorprender y de provocar admiración la tarea tesonera de tantos, los que muchas veces tuvieron que desafiar las creencias dominantes en su época con alto costo personal, para plantear su visión, la que a la postre constituiría un gran aporte a la medicina. Este artículo sobrevuela someramente la historia de la investigación médica y es resultante de una clase preparada para el curso de Investigación Clínica para alumnos de postgrado de la Sociedad Uruguaya de Cardiología y de la Cátedra de Cardiología, el que a instancias del Dr. Senra hoy compartimos con ustedes. fermedad cuando es evidente su curación espontánea. Los médicos mediocres tratan la enfermedad en el curso de su evolución. Los médicos superiores previenen los desequilibrios evitando que la enfermedad se desarrolle. No deja de sorprender que tantos años después de esas afirmaciones, las mismas sean de total actualidad, lo que habla del avanzado grado de desarrollo de la medicina china en ese entonces. En el siglo V aC Hipócrates describió lo que posteriormente sería conocido como el método hipocrático. En el mismo establecía que la observación es un componente fundamental en la medicina; “una gran parte del arte es ser capaz de observar” decía el famoso maestro. Es notable su descripción del edema pulmonar: “El agua se acumula, el paciente tiene fiebre y tos, la respiración es rápida, los pies se vuelven edematosos, el paciente sufre como si tuviera pus interno, solo que menos severo y pro- Figura 1. Nei Ping, 2600 aC La investigación médica ha sido una constante desde los orígenes de la historia, de lo que es muestra elocuente el Nei Ping, un texto chino del 2600 aC. En el mismo, diversos autores, a partir de sus observaciones establecían que: Los médicos inferiores tratan la en- Figura 2. Juramento Hipocrático 18 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. longado. Uno puede reconocer que esto no es pus sino agua. Si pone su oído contra el tórax puede oír un burbujeo como el del vino amargo”. Hipócrates fue además quien separó a la medicina de la teología y de la filosofía, algo que hasta entonces era parte de un todo, estableciendo así a la medicina como una ciencia independiente. Su Juramento hipocrático continúa hasta nuestros días como una de las principales fuentes de inspiración moral y ética de la profesión médica. Unos 6 siglos después de Hipócrates, Galeno ejerció enorme influencia en la medicina de su época. Dado que vivió buena parte de su vida en la antigua Roma, donde estaba prohibida la disección de cadáveres, sus investigaciones anatómicas las realizaba en animales. A partir de sus observaciones hizo numerosos aportes a la medicina, por ejemplo estableciendo que los músculos eran controlados por la médula espinal, que el cerebro era el encargado de controlar la voz, que por las arterias circulaba sangre y no aire, como se pensaba entonces, entre muchos otros. Asimismo describió diversas enfermedades, entre las que destaca su descripción de la peste y su forma de propagación. Sus trabajos en relación a los métodos para conservar fármacos y realizar preparaciones medicinales fue notable, siendo la base de las preparaciones galénicas que con ligeras diferencias han persistido hasta la época actual. Su tratado Methodo medendi (El arte de la curación) tuvo enorme influencia en la medicina, influencia que se extendería durante varios siglos, hasta avanzada la la Edad Media. En 1453, cerca de Florencia nació Leonardo da Vinci, quien además de sus facetas más conocidas como artis- Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 19–24. Figura 3. Anatomía de los músculos del miembro superior (izquierda) y del hombre de Vitruvio (derecha) por Leonardo da Vinci. Hacia el 1600 William Harvey estableció, a partir de lo observado en sus investigaciones, que la sangre es distribuida a través de todo el cuerpo mediante el bombeo del corazón. De esa forma confirmó la idea de Descartes, quien postulaba que las arterias y venas eran tubos que llevaban nutrientes a todo el cuerpo. En su libro Exercitatio Anatomica de Motv Cordis et Sangvinis in Animali, publicado en 1628 Harvey planteaba Quia omne quod movetur, necesse est habere motore, dubitabile videtur quid moveat cor, et qualis sit eius motus (dado que todo lo que se mueve necesita tener un motor la duda es ¿qué mueve al corazón y qué tipo de movimiento tiene?) Resulta sorprendente, cuando se conoce la investigación en torno a la circulación sanguínea, que en realidad no fue el británico el primero que estableció el mecanismo circulatorio tal cual siempre lo conocimos, sino que Miguel Servet, un religioso y pensador español describió la circulación pulmonar 25 años antes del nacimiento de Harvey. Publicó su descubrimiento en el libro Christianismi Restitutio, el que fue conside- Figura 4. Portada del famoso libro de William Harvey rado una obra hereje por las concepciones religiosas que allí se vertían, razón por la cual Servet murió en la hoguera. Tres copias del libro se encontraron décadas después de su muerte, lo que permitió que su descubrimiento tomara estado público. El primer ensayo clínico En el siglo XVIII el escorbuto hacía estragos entre la tripulación de los muchos barcos que por esa época surcaban los mares. En 1746 James Lind, un cirujano naval escocés, estuvo embarcado en el buque Salisbury relatando que en uno de sus viajes de los 350 marineros que partieron, tan sólo 80 sobrevivieron. Lind pensaba que el escorbuto, una enfermedad que hoy sabemos que obedece a deficiencia de la vitamina C, se debía la putrefacción del cuerpo, lo que podría ser prevenido por los ácidos. Eso lo llevó a que en 1747 desarrollase una investigación la que a la postre constituiría el primer ensayo clínico de la historia. En el mismo evaluó el valor de diferentes terapéuticas para esta enfermedad, para lo cual distribuyó a 12 marineros con la enfermedad en 6 grupos. Todos recibieron la misma dieta y además de ello un grupo recibió 25 gotas de elixir de vitriol (ácido sulfúrico diluido), el segundo una cucharada de vinagre, el tercero ¼ de pinta de agua de mar, el cuarto 250 ml de sidra, el quinto una receta de los médicos en esa época —ajo, mostaza y nuez moscada—, mientras que el sexto recibió dos naranjas y un limón diarios. Al cabo del período ninguno de los marineros de los 5 primeros grupos sobrevivió mientras que sí lo hicieron los 2 del sexto grupo. En 1758 publicó A treatise of the scurvy pero sus hallazgos no fueron tenidos en cuenta por sus colegas, por lo que pasaría bastante tiempo (hasta después de 1800) para que fueran reconocidas las cualidades preventivas de los cítricos en esta patología. Hacia fines del siglo XVIII unos instrumentos terapéuticos llamados tractores tenían enorme popularidad. Estos eran fabricados con una aleación secreta de metales, lo que, según se afirmaba, les confería propiedades únicas para tratar procesos inflamatorios y reumáticos. John Haygarth, un médico inglés de la época tenía grandes dudas de que los tractores tuvieran las propiedades que se les reconocían, por lo que fabricó unos de madera de aspecto similar a los metálicos. Con ellos obtuvo resultados comparables a los observados con los tractores originales. La publicación de sus hallazgos en 1799 en el libro Acerca de la imaginación como causa y cura de los trastornos corporales implicó la introducción del concepto de placebo en medicina. Edward Jenner era un médico rural inglés que vivió en un momento en que la viruela constituía un temible azote, pues llegaba a afectar al 60% de la población y mataba a uno de cada tres que la padecían. Jenner observó que las tamberas que ordeñaban vacas no contraían la enfermedad, por lo que formuló la hipótesis de que habían sido inmunizadas al contagiarse de la viruela boba, una manifestación leve de la enfermedad que afecta a la ubre vacuna. Convencido de que el pus en las ampollas que las tamberas adquirían a partir de las vacas enfermas les protegía de la viruela, en 1976 extrajo líquido de una pústula de Sarah Nelmes y se lo inyectó a James Investigación médica ayer y hoy | Dr. Edgardo Sandoya ta, inventor y arquitecto, fue un maestro de la anatomía topográfica. A partir de sus investigaciones en cadáveres humanos realizadas en Florencia, Milán y Roma (tenía permiso para su disección por ser un artista de éxito), realizó notables estudios de huesos, músculos y órganos. Su dibujo anatómico más destacado es el Hombre de Vitruvio (1490), un estudio de las proporciones humanas basado en el tratado del arquitecto romano Marco Vitruvio. 19 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 19–24. Phipps un niño de 8 años, el que no sufrió la viruela a pesar de haber estado expuesto a ella en múltiples oportunidades en los siguientes 20 años. Pero cuando reportó sus resultados a la Royal Society, los mismos no fueron publicados. Sus colegas de la época se opusieron a su vacuna, siendo finalmente expulsado de la Asociación Médica de Londres con el argumento de que quienes utilizasen su método terminarían pareciéndose a un bovino. Debieron pasar muchos años para que su vacuna fuera reconocida y pasara a jugar un papel fundamental en el control de la enfermedad a escala mundial, la que en 1980 fuera declarada como erradicada por la OMS. Investigación médica ayer y hoy | Dr. Edgardo Sandoya La introducción de la estadística Desde la escuela médica de la antigua Grecia, el conocimiento médico tiene una vertiente que proviene de la experiencia, lo que en el 280 aC denominaban empirismo: aprender de las propias observaciones liberadas al azar, aprender de los colegas pasados y presentes y aprender del razonamiento por analogía (“este paciente es parecido a uno que vi”). La segunda vertiente del conocimiento médico proviene de la fisiología experimental, desarrollada por Xavier Bichat, Claude Bernard y otros, los que comenzaron a emplear la validación de hipótesis mediante experimentos controlados en animales. La tercera vertiente del conocimiento médico sería desarrollada por un francés llamado Pierre Charles Alexandre Louis quien introdujo lo que denominó el Méthode Numérique, es decir el método matemático a la medicina. Louis postuló que el conocimiento de la enfermedad, su historia natural, así como presentación clínica y su tratamiento podían ser derivados de los datos agregados de pacientes. Poniendo en práctica su postulado investigó el papel de la sangría en el tratamiento de la neumonía, la erisipela y la faringitis, registrando cuidadosamente las características, síntomas, tratamientos y resultados, comprobando que no había diferencia entre los pacientes sangrados y los no sangrados. Los resultados de su investigación publicados en 1835 (Researches sur les effets de la saigneé dans quelques maladies inflammatoires) contribuyeron a la declinación de la sangría, una práctica habitual en la Francia de entonces. El caso de Ignác Semmelweis es ejemplo de tenacidad y templanza para superar todos los obstáculos que debió enfrentar. Este era un obstetra húngaro que trabajaba en Viena, donde comenzó a estudiar la sepsis puerperal a pesar de la oposición de su jefe. A partir de sus investigaciones comprobó que la enfermedad era tres veces más frecuente en la sala donde había estudiantes de medicina en comparación con la sala a la que concurrían las parteras en formación. La muerte de un médico amigo por una infección adquirida durante una autopsia lo llevó a pensar que la infección era transportada por los estudiantes desde la morgue a la sala. A partir de ello estableció un procedimiento que consistía en que los estudiantes debían lavarse las manos en una solución de cal clorada antes de concurrir a la sala. Mediante su intervención experimental la mortalidad anual cayó dramáticamente, pasando de 18,3% a 1,3%, llegando incluso a ser de 0% en algún mes de 1848. Su jefe no creyó en sus resultados y las desavenencias con el mismo hicieron que un año más tarde Semmelweis fuera despedido. Convencido de sus resultados, volvió a Budapest donde se hizo cargo de una unidad obstétrica que padecía de sepsis puerperal endémica. Allí repitió su experimento y consiguió similares resultados: la mortalidad fue menor de 1% mientras que en Viena y Praga era de 10–15%. Su investigación sentó las bases de la prevención de infecciones, y fue reportada en un artículo titulado La etiología, conocimiento y prevención de la sepsis puerperal, el que fue rechazado por el Vienna Medical Journal, debiendo pagar de su bolsillo para verlo publicado. En el año 1870 se publicó en Londres el primer número de una de las revistas médicas de mayor influencia desde entonces: The Lancet. El mismo incluía una investigación de Joseph Lister, quien proponía que las infecciones tenían origen bacteriano (siguiendo a una publicación reciente de Louis Pasteur) y que no provenían del miasma existente en el aire como era la creencia dominante. Su trabajo presentaba los resultados de la investigación realizada empleando ácido fenólico para lavar el instrumental, las manos de los cirujanos y vaporizado en las sábanas y las incisiones quirúrgicas. De esa forma consiguió reducir la incidencia de las infecciones operatorias; la mortalidad de la amputación quirúrgica (una de las operaciones más frecuentes en su época), pasó de 43% antes de su experimento a 15% en los pacientes tratados con el nuevo método antiséptico. “Estos números, sin duda, son muy pequeños para una comparación estadística satisfactoria” dice Lister en el trabajo ¡pero si los analizamos hoy mediante el test de chi2 sus resultados eran estadísticamente significativos: p=0,003! Dado que la historia tiende a repetirse, la situación no fue fácil para Lister, pues sus resultados no fueron aceptados, siendo duramente atacado por la comunidad médica de su tiempo dado que controvertía las creencias dominantes. Figura 5. Figura 6. Palangana en la que debían lavarse las manos los estudiantes Trabajo de Lister publicado en el primer número de Lancet 20 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. William Whitering (1741–1799), un médico de Birmingham, Inglaterra, tenía un paciente con insuficiencia cardíaca que no mejoraba a pesar de los diversos tratamientos practicados. Quedó muy sorprendido cuando observó que el mismo experimentaba una notable mejoría al recibir un preparado de plantas tradicional de la zona. Investigó la causa de esta evolución y descubrió que la sustancia activa responsable se encontraba en las hojas de la digitalis purpurea. En 1785 publicó The Foxglove and some of its Medical Uses, donde describió sus pruebas clínicas y la toxicidad del digital. De esa forma esta droga se incorporó al arsenal terapéutico Un estudiante de medicina alemán, Werner Forssman (1904–1979), pensaba que la inyección de drogas directo al corazón con catéteres venosos podría ser útil para tratar algunas situaciones. Mientras realizaba el internado no fue autorizado por sus jefes a intentar esta vía terapéutica, por lo que un día se dio anestesia local y se introdujo por una vena del brazo un catéter uretral “bien aceitado” de 65 cm hasta el corazón. Bajó rápidamente la escalera y fue a la sala de rayos donde localizó la punta del catéter con los rayos X. Fue muy criticado por sus colegas alemanes por el cateterismo realizado, ante lo cual abandonó la cardiología y se dedicó a urología. El reconocimiento llegaría más tarde, cuando en 1956 le fuera otorgado el Premio Nobel de Medicina. Nacen los ensayos clínicos aleatorizados Ronald Fisher, un matemático inglés introdujo el concepto de la distribución en grupos al azar para evaluar el resultado de una intervención. Su incorporación de la estadística en el diseño experimental sentó las bases de la ciencia estadística actual. En su libro The Design of Experiments publicado en 1935 estableció las bases para el desarrollo de la investigación con grupo control, lo que aplicó que evaluando diferentes tipos de siembra y de fertilidad de las plantas en la Estación experimental de Rothamsted, Inglaterra. De esa forma estarían sentadas las bases para que en los años 1940 el Medical Research Council inglés realizara el primer ensayo clínico aleatorizado (randomizado). En el mismo, pacientes con tuberculosis pulmonar de varios centros fueron asignados al azar a estreptomicina más reposo en cama o reposo en cama solamente. El resultado se evaluó me- Figura 7. Radiografías de tórax antes y después del tratamiento del paciente Nº 69 diante radiografías de tórax realizadas antes y después de la intervención, las que eran analizadas por un radiólogo y un clínico que no conocían la opinión del otro ni a que grupo pertenecía el paciente. Tanto la sobrevida como la mejoría radiológica fueron superiores en el grupo que recibió la estreptomicina. Mason Sones, trabajando en la Cleveland Clinic de los Estados Unidos realizó la primer coronariografía de forma inesperada. El 30 de octubre de 1958 se hallaba realizando un estudio contrastado a un paciente portador de estenosis aórtica cuando al mirar el intensificador de imágenes se paralizó: había inyectado contraste dentro de una arteria coronaria. Quiso suspender el procedimiento pero era demasiado tarde, una considerable cantidad de contraste ya había sido infundida. Comprobó con asombro que no sucedió nada al paciente, siendo ese el punto de partida para que luego investigase e introdujese este método diagnóstico. René Favaloro, compañero de Sones en la misma clínica, llevó adelante diversos experimentos en animales hasta que finalmente puso a punto el bypass coronario en humanos para tratar las obstrucciones coronarias, lo que daría fama mundial a este excepcional médico argentino. Andreas Gruentzig, un médico suizo, realizó la primera angioplastia coronaria en un paciente de 38 años, luego de haber puesto a punto el procedimiento experimentando en arterias periféricas. La angioplastia fue realizada en la arteria descendente anterior, produciendo alivio total de los síntomas del paciente. Este dejó de fumar y estuvo asintomático por 23 años. En 2000, a la edad de 61 años, comenzó con dolor torácico realizándose un cateterismo el que mostró que la zona dilatada permanecía tal cual había quedado luego de la angioplastia. Archie Cochrane, un epidemiólogo inglés de gran influencia, impulsó una visión científica de la medicina. En su libro Efectividad y eficiencia: reflexiones aleatorias sobre los servicios médicos, publicado en 1972, resaltó la necesidad de realizar ensayos clínicos aleatorizados para evaluar los tratamientos. Allí también denunció la falta de información proveniente de este tipo de estudios, planteando la necesidad de revisar regularmente los resultados de las intervenciones en cada especialidad médica. Su prédica dio lugar a la conformación de la Colaboración Cochrane, una organización independiente sin fines de lucro dedicada a la realización y diseminación de revisiones sistemáticas acerca de los efectos de los cuidados sanitarios. A mediados de los años 1980 dos megaestudios que investigaron el efecto de la estreptoquinasa en el infarto agudo de miocardio serían punto de partida de un importante cambio en la investigación clínica en medicina cardiovascular. Este tipo de investigación, denominada investigación clínica de poblaciones, abarca a la generalidad de los pacientes asistidos en gran cantidad de centros, lo que permite que sus resultados sean trasladables a la asistencia real. La diferencia esencial de estos ensayos clínicos con respecto a los que se realizaban hasta ese momento radica en que estos tienen como objetivo principal conocer el efecto del tratamiento sobre la mortalidad, incluyendo el número de pacientes necesarios para ello. Los grupos de Oxford y de Milán lideraron el cambio hacia esta modalidad de investigación clínica, la que posteriormente fuera adoptada por la comunidad científica Investigación médica ayer y hoy | Dr. Edgardo Sandoya Carta Cardiovascular. 2009; 3(1): 19–24. 21 © Carta Cardiovascular [Montevideo, impr.]. Julio, 2009. internacional. Como resultado de la misma hoy disponemos de diversos tratamientos que han demostrado ser efectivos en el manejo de patologías frecuentes en medicina cardio- vascular, tales como la hipertensión arterial, las dislipemias, el riesgo cardiovascular elevado, la cardiopatía isquémica y la insuficiencia cardíaca, entre otras. Eventos internacionales de interés general Heart and Art: An Update on Common Cardiovascular Disorders Ann Arbor (Estados Unidos) 18 de julio de 2009 Segundo Congreso Innovación en Cardiología y Medicina Vascular Monterrey (México) 20 al 22 de agosto de 2009 ESC 2009 European Society of Cardiology Congress 2009 Barcelona (España) 29 de agosto al 02 de septiembre de 2009 2009 Scientific Conference of the British Hypertension Society Cambridge (Reino Unido) 14 al 16 de septiembre de 2009 The Cardio-Renal Interface 2009 (RCP 2009) London (Reino Unido) 21 de septiembre de 2009 The Society for Acute Medicine 3rd International Conference Birmingham (Reino Unido) 01 al 02 de octubre de 2009 Clinical and Laboratory Update in Thrombosis and Anticoagulation Rochester. Minnesota (Estados Unidos) 01 al 02 de octubre de 2009 Cardiothoracic CT New York (Estados Unidos) 05 al 07 de octubre de 2009 8th International Congress on Coronary Artery Disease - ICCAD 2009 Prague (República Checa) del 11 al 14 de octubre de 2009 20TH Annual Coronary Interventions. San Diego (Estados Unidos) 14 al 16 de octubre de 2009 4th Annual Heart Failure & Arrhythmias: From Prevention to Cure San Diego (Estados Unidos) 17 al 18 de octubre de 2009 National Heart, Lung, & Blood Advisory Council Meeting Bethesda (Estados Unidos) 20 de octubre de 2009 Interventional Cardiology London (Reino Unido) 22 al 23 de octubre de 2009 SEC 2009. El Congreso de las Enfermedades Cardiovasculares Barcelona (España) 22 al 24 de octubre de 2009 6th International Conference on Intensive Cardiac Care Tel Aviv (Israel) 25 al 27 de octubre de 2009 20th Annual Coronary Interventions San Diego (Estados Unidos) 28 al 30 de octubre de 2009 19° Congreso Mundial de la Sociedad Mundial de Cirujanos Cardiotorácicos Buenos Aires (Argentina) 04 al 06 de noviembre de 2009 FISALUD Feria Internacional de la Salud Madrid (España) 26 al 29 de noviembre de 2009 3er Curso de Cardiopatías Congénitas del Adulto Barcelona (España) 01 al 02 de diciembre de 2009 Edición, diseño: Daniel Pereira / Dedos Productora | Editorial (02) 900 2813 | [email protected] Impresión: Fanelcor SA. Montevideo, Uruguay Comisión del Papel Depósito legal: 343.641/09 Material sin valor comercial. Distribución gratuita. Se permite la reproducción parcial siempre que lo autoricen los autores, no sea con fines de lucro, se envíe copia de lo publicado a los autores y se cite la fuente.