INFORME TECNICO (R. PESQ.) Nº 40

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INFORME TECNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración de la Unidad de Pesquería
de Alfonsino en Estado de Plena
Explotación
Valparaíso, julio 2004
Distribución:
-
Consejo Nacional de Pesca
Consejo Zonal de Pesca de la I y II Regiones
Consejo Zonal de Pesca de la III y IV Regiones
Consejo Zonal de Pesca de la V a IX Regiones e Islas Oceánicas
Consejo Zonal de Pesca de la X y XI Regiones
Consejo Zonal de Pesca de la XII y Antártica Chilena
División de Desarrollo Pesquero, Subsecretaría de Pesca
Departamento de Pesquerías, Subsecretaría de Pesca
CONTENIDO
Pág.
1. RESUMEN EJECUTIVO ......................................................................................................... 2
2. OBJETIVO .............................................................................................................................. 3
3. ANTECEDENTES LEGALES ................................................................................................. 3
3.1. DECLARACIÓN DEL RÉGIMEN DE PLENA EXPLOTACIÓN ........................................................... 4
3.2. DECLARACIÓN DEL RÉGIMEN DE DESARROLLO INCIPIENTE ..................................................... 4
3.3. DECLARACIÓN DEL RÉGIMEN DE RECUPERACIÓN .................................................................. 5
3.4. NORMAS VIGENTES EN ALFONSINO ...................................................................................... 5
4. ANTECEDENTES BIOLÓGICOS DEL RECURSO ................................................................. 6
4.1. UBICACIÓN TAXONÓMICA..................................................................................................... 6
4.2. DISTRIBUCIÓN LATITUDINAL Y BATIMÉTRICA .......................................................................... 6
4.3. UNIDADES DE STOCK .......................................................................................................... 8
4.4. CRECIMIENTO Y MORTALIDAD NATURAL ................................................................................ 9
4.5. ALIMENTACIÓN ................................................................................................................... 9
4.6. REPRODUCCIÓN ............................................................................................................... 11
4.7. COMPORTAMIENTO ........................................................................................................... 11
5. ANTECEDENTES DE LA PESQUERIA ................................................................................ 13
5.1. CAPTURA Y DESEMBARQUES ............................................................................................. 13
5.2. FAUNA ACOMPAÑANTE (FA) .............................................................................................. 14
5.2.1. FA en la pesca dirigida a alfonsino .......................................................................... 14
5.2.2. Alfonsino como FA de otras pesquerías................................................................... 16
5.3. FLOTA PESQUERA ............................................................................................................. 16
5.4. ARTES DE PESCA .............................................................................................................. 17
5.5. EXPORTACIONES .............................................................................................................. 19
5.5.1. Cantidad .................................................................................................................. 19
5.5.2. Precio ...................................................................................................................... 20
6. ANALISIS ............................................................................................................................. 21
6.1. EVALUACIÓN Y DIAGNÓSTICO DEL RECURSO ....................................................................... 21
6.1.1. Indicadores del recurso y la pesquería .................................................................... 21
6.1.2. Evaluación indirecta del recurso .............................................................................. 24
6.1.3. Diagnóstico del estado del recurso .......................................................................... 29
6.2. TIPO DE RÉGIMEN DE ADMINISTRACIÓN .............................................................................. 30
6.3. ÁREA DE LA UNIDAD DE PESQUERÍA ................................................................................... 31
6.4. ACCESO A LA PESQUERÍA .................................................................................................. 32
6.5. OBJETIVOS Y ESTRATEGIA DE MANEJO ............................................................................... 33
6.6. CUOTA DE CAPTURA 2004 ................................................................................................ 33
7. CONCLUSIONES ................................................................................................................. 34
7.1. DEL DIAGNÓSTICO DEL RECURSO....................................................................................... 34
7.2. DE LA ADMINISTRACIÓN DE LA PESQUERÍA .......................................................................... 35
8. RECOMENDACIONES ......................................................................................................... 36
9. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS ..................................................................................... 37
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
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1. RESUMEN EJECUTIVO
El presente informe tiene como objetivo entregar los antecedentes técnicos y científicos que
justifican la proposición de declarar la pesquería de alfonsino en Estado de Plena Explotación
en el área de su Unidad de Pesquería que se propone, el cierre de acceso a nuevas unidades
de esfuerzo artesanal e industrial; y, la cuota global anual de captura para el año 2004 y su
fraccionamiento.
Se entregan antecedentes de orden jurídico que permiten establecer el marco de referencia,
para determinar el régimen a que corresponde asimilar la pesquería y, junto con esto, se
entregan antecedentes del recurso y la pesquería. En términos generales, se complementan los
antecedentes del recurso con investigaciones realizadas en pesquerías de otros países, al
tiempo que se manifiesta el bajo grado de resistencia del recurso a presiones del ambiente o la
pesca (baja resilencia).
Los antecedentes de la pesquería indican que las capturas de este recurso se realizan
principalmente en el área del Arch. Juan Fernández, mayoritariamente durante el segundo
semestre de cada año. Las capturas las realizan exclusivamente naves industriales, que utilizan
redes de arrastre de fondo operadas sobre montes submarinos a profundidades de 300-350 m.
La captura histórica la han realizado 9 naves industriales que aportan con el 96,8% de los
desembarques; sin embargo, hay 79 naves industriales autorizadas a capturar el recurso, de las
cuales 59 lo están para efectuar faenas de pesca con redes de arrastre.
La pesquería esta orientada en forma exclusiva a la exportación de productos congelados,
siendo Japón (48%) y China (41%) los principales mercados de destino, y alcanzando las
exportaciones un total de USD 10.109.441 al 2003.
Para establecer el diagnóstico del estado del recurso se analizaron algunos indicadores de la
pesquería, y se consideraron dos modelos de evaluación indirecta. En términos generales se
concluye que el recurso ha transitado, a condiciones cercanas a la sobrepesca por
reclutamiento, lo que se ve manifestado en la tendencia a la baja de la CPUE como índice de
abundancia; en la disminución de las tallas y pesos promedio de los ejemplares; y, en los
elevados niveles de mortalidad por pesca al 2003, los son cercanos y en algunos casos
sobrepasan los niveles de mortalidad recomendados internacionalmente.
A partir de este diagnóstico, se adoptó el objetivo de conservar y no disminuir los actuales
niveles de biomasa, a través de una estrategia de explotación constante, implementada
mediante un criterio de explotación que considera como el Punto Biológico de Referencia F2/3MSY
como objetivo y FMSY como un umbral de alto riesgo.
Del análisis integrado de la información, se recomienda (i) declarar la pesquería de alfonsino en
estado de plena explotación; (ii) fijar el área de su unidad de pesquería como la correspondiente
a la Z.E.E. continental e insular; (iii) cerrar el acceso a nuevas unidades extractivas industriales
y artesanales; (iv) fijar una cuota global anual de captura para el año 2004 de 1.670 toneladas;
(v) fraccionar dicha cuota en 1.335 ton como cuota objetivo, 250 ton como fauna acompañante
y 85 ton con fines de investigación; (vi) fijar el mismo nivel de cuota para 2005 y su
fraccionamiento, sujeto a una revisión a efectuarse durante el primer cuatrimestre de 2005.
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2. OBJETIVO
El presente informe tiene como objetivo entregar los antecedentes técnicos y científicos que
justifican la proposición de declarar la pesquería de alfonsino en Estado de Plena Explotación.
Adicionalmente, y producto de lo anterior, este informe tiene por objeto:
a) Establecer el área de la Unidad de Pesquería de alfonsino;
b) Consignar los antecedentes que justifican el cierre de acceso a nuevas unidades de
esfuerzo artesanal e industrial; y,
c) Fijar la cuota global anual de captura del recurso alfonsino para el año 2004 y 2005.
3. ANTECEDENTES LEGALES
El artículo 20 de la Ley General de Pesca y Acuicultura (LGPA) indica que “cuando una especie
hidrobiológica alcance un nivel de explotación que justifique que se la estudie para determinar si
debe ser declarada como una unidad de pesquería en estado de plena explotación, o de
régimen de pesquerías de desarrollo incipiente, o de régimen de pesquerías en
recuperación, por decreto supremo, previo informe técnico de la Subsecretaría, se suspenderá
la recepción de solicitudes y el otorgamiento de autorizaciones de pesca para capturar esa
especie en el área que fije el decreto, incluida su fauna acompañante, por un lapso no inferior a
seis meses ni superior a un año. Asimismo mediante decreto supremo y previo informe de la
Subsecretaría, se limitará la captura y el desembarque total para el período de suspensión,
teniendo como límite máximo el promedio de la captura y desembarque correspondiente a igual
período de los dos años inmediatamente anteriores. Concluido el plazo señalado en el decreto y
no habiéndose declarado la unidad de pesquería en estado de plena explotación de la especie
correspondiente, quedará vigente el régimen general”.
Considerando como vistos el artículo 20 de la LGPA y a través de el D.S. Nº 116 de 2003 se
suspendió la recepción de solicitudes y otorgamiento de autorizaciones de pesca industrial
sobre alfonsino, en el área del Mar Territorial y Zona Económica Exclusiva continental e insular,
entre el 22 de agosto de 2003 y el 21 de agosto de 2004. Este mismo decreto y su
complemento, el D.S. Nº 121 de 2004, limitó la captura y desembarque de esta especie, en la
misma área y período, en los siguientes términos:
Límite de captura y desembarque
Como especie objetivo
Con fines de investigación
Como fau. acomp. de O. roughy
:
:
:
:
5.002 ton
4.277 ton
475 ton
250 ton
Una vez publicado el D.S. Nº 116 de 2003, y con el fin de recabar antecedentes científicos de la
especie para determinar su estado de explotación, se autorizó a la Pontificia Universidad
Católica de Valparaíso, a través de las Resol. Ex Nº 3079 de 2003 y Nº 225 de 2004 la
realización de una pesca de investigación denominada “Situación de la Pesquería de
Alfonsino”. Los primeros resultados de esta pesca de investigación fueron dados a conocer a
la Subsecretaría de Pesca a través Anon. (2004), sobre el cual se basa parte del presente
informe. Al mismo tiempo, y con el objeto de disponer de información relevante sobre el estado
de situación de alfonsino, la Subsecretaría de Pesca a través de Resol. Ex. Nº1285 de 2004,
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aprobó el convenio de prestación de servicios con el Instituto de Fomento Pesquero para
desarrollar el estudio de investigación denominado “Investigación CTP de Alfonsino y
Besugo 2005 (Fase I)”. Resultados preliminares de este estudio fueron proporcionados por
IFOP a la Subsecretaría y fueron considerados para la elaboración del presente informe.
3.1. Declaración del régimen de plena explotación
El numeral 21) del artículo 2º de la LGP define el estado de plena explotación de una pesquería
como “aquella situación en que la pesquería llega a un nivel de explotación tal que, con la
captura de las unidades extractivas autorizadas, ya no existe superávit en los excedentes
productivos de la especie hidrobiológica”.
El artículo 21 de la LGPA indica que para que una pesquería sea sometida a régimen de plena
explotación se deberá contar con la aprobación por mayoría absoluta de los miembros en
ejercicio del Consejo Nacional y los Consejos Zonales que corresponda. También, al artículo 24
de la LGPA indica que durante la vigencia del régimen de plena explotación se seguirá
otorgando autorizaciones de pesca a los armadores que lo soliciten; sin embargo, a iniciativa de
la Subsecretaría y con acuerdo de los dos tercios de los miembros en ejercicio de los Consejos
Nacional y Zonal que corresponda, podrá suspenderse por el plazo de un año la recepción de
solicitudes y el otorgamiento de nuevas autorizaciones de pesca. Por otro lado, el artículo 26 de
la LGPA manifiesta que para el año de la declaración del régimen de plena explotación, se
podrá también fijar cuotas globales anuales de captura para cada unidad de pesquería, las que
regirán ese mismo año.
Finalmente, el artículo 33 indica que cuando se declare una unidad de pesquería en estado de
plena explotación y se encuentre transitoriamente cerrado su acceso, se deberá cerrar, por
igual período, el registro pesquero artesanal en las regiones y especies correspondientes, en
conformidad con lo señalado en el título relativo a la pesca artesanal.
3.2. Declaración del régimen de desarrollo incipiente
Por decreto supremo, previo informe técnico de la Subsecretaría con consulta al Consejo Zonal
de Pesca y con la aprobación por la mayoría absoluta de los miembros en ejercicio del Consejo
Nacional, en aquellas unidades de pesquerías que se califiquen como pesquerías incipientes se
las podrá declarar en régimen de pesquerías en desarrollo incipiente y se autorizará a la
Subsecretaría para que adjudique anualmente, mediante subasta pública, el derecho a capturar
el equivalente, en toneladas, al diez por ciento de la cuota global anual de captura (artículo 40,
LGPA).
Según el numeral 33) del artículo 2º de la LGPA, una pesquería incipiente “es aquella pesquería
demersal o bentónica sujeta al régimen general de acceso, en la cual se puede fijar una cuota

global anual de captura CGC , en que no se realice esfuerzo de pesca o éste se estime en
términos de captura anual de la especie objetivo menor al diez por ciento de dicha cuota y
respecto de la cual haya un número considerable de interesados por participar en ella”. En
términos analíticos se debe cumplir la siguiente ecuación:

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
4

Captura Anual  10%  CGC
sujeto a : * ser pesquería demersal o bentónica
* estar sujeta al régimen general de acceso
* que haya un número considerable de interesados en participar en la pesquería.
3.3. Declaración del régimen de recuperación
El artículo 39 de la LGPA declara que “por decreto supremo, previo informe técnico de la
Subsecretaría, con consulta al Consejo Zonal de Pesca y con la aprobación por la mayoría
absoluta de los miembros en ejercicio del Consejo Nacional, en las pesquerías en estado de
sobreexplotación, en las cuales se demuestre que el recurso hidrobiológico se encontrare en
recuperación, se las declarará en régimen de pesquerías en recuperación y se autorizará a la
Subsecretaría para adjudicar anualmente en pública subasta el derecho a capturar, cada año, el
equivalente, en toneladas, al diez por ciento de la cuota global anual de captura”.
Al mismo tiempo, dicho artículo indica que “desde la fecha en que se declara una pesquería en
régimen de recuperación, expirarán por el sólo ministerio de la ley todas las autorizaciones de
pesca relativas a esas unidades de pesquería. Mientras se mantenga la vigencia de este
régimen, no se otorgarán nuevas autorizaciones”.
Finalmente, la LGPA define a una pesquería en recuperación como “aquella pesquería que se
encuentra sobreexplotada y sujeta a una veda extractiva, de a lo menos tres años, con el
propósito de su recuperación, y en las que sea posible fijar una cuota global anual de captura”.
3.4. Normas vigentes en alfonsino
A parte de las normas establecidas por los D.S. Nº116 de 2003 y Nº121 de 2004, anteriormente
comentados, la única norma vigente sobre este recurso es aquella que establece que en la
pesca de orange roughy, entre el área de su unidad de pesquería, se puede extraer alfonsino
como fauna acompañante de la captura total, en un máximo de 10%, medido en peso, por viaje
de pesca (D.S. Nº44 de 22/02/00).
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4. ANTECEDENTES BIOLÓGICOS DEL RECURSO
4.1. Ubicación taxonómica
El Alfonsino (Beryx splendens Lowe, 1834) (Fig. 1) es un pez teleosteo de cuerpo alargado con
un perfil dorsal delantero convexo y una línea lateral que se extiende hasta la aleta caudal
(Masuda et al., 1984). Tiene un total de 4 espinas dorsales, 13-16 rayos dorsales blandos, 4
espinas anales y 26-30 rayos anales blandos. El primer hueso infraorbital con una espina
proyectada lateralmente sobre el extremo anterior. Posee un disco carnoso en la cara interna
del área expuesta de las escamas. En peces juveniles, el segundo rayo dorsal esta elongado
(Masuda et al., 1984). Nakamura et al. (1986) indican que la aleta pectoral y tiene una espina y
17 rayos blandos.
Acorde con el Sistema Integrado de Información Taxonómica (ITIS) (http://www. itis.usda.gov),
la posición de alfonsino es:
Reino
Tipo
Subtipo
Superclase
Clase
Subclase
Infraclase
Superorden
Orden
Suborden
Familia
Género
Especie
:
:
:
:
:
:
:
:
:
:
:
:
:
Animalia
Chordata
Vertebrata
Osteichthyes
Actinopterygii
Neopterygii
Teleostei
Acanthopterygii
Beryciformes
Berycoidei
Berycidae
Beryx
Beryx splendens
Figura 1. Ejemplar adulto de Alfonsino (Gentileza de
Pablo Reyes L-T)
4.2. Distribución latitudinal y batimétrica
Desde una perspectiva mundial, el Alfonsino (Beryx splendens) es una especie bentopelágica
que habita desde los 25 m hasta los 1.300 m y su distribución está asociada a aguas marinas
temperadas y tropicales de todos los océanos (Rico et al., 2001a) (Fig. 2), aunque las capturas
se efectúan generalmente entre los 300 y 660 m de profundidad.
En Chile, los registros de desembarque indican la presencia de la especie principalmente sobre
los montes submarinos ubicados en el archipiélago de Juan Fernández (entre los paralelos
33º15’ S y 34º00’ S y meridianos 76º30’ W y 74º00’ W), en las zonas de Bajo O´Higgins y Punta
Sierra y, en la zona continental desde la IV a la XII Región (Tascheri et al., 2002), informándose
tambien registros en al WNW de Isla San Felix (25º50’S y 82º50’W) (Fig. 3).
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Figura 2. Distribución mundial de las especies del género Beryx. (+) decadactylus, () splendens, (*) mollis (Fuente:
seminario “La nueva pesquería del orange roughy y alfonsino”, septiembre de 2000, IFOP).
Figura 3.
Distribución de Alfonsino en Chile (a partir de registros de
desembarque Sernapesca 2001-2004; Tascheri et al., 2004, 2003,
2002; y, seminario “La nueva pesquería del orange roughy y alfonsino”,
septiembre de 2000, IFOP).
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En Chile, la distribución de alfonsino esta
fuertemente asociada a los montes submarinos
aledaños al Arch. de Juan Fernández, localizándose
las agregaciones por sobre estos montes (Fig. 4) a
profundidades que van desde 300 m hasta 850 m.
El rango de profundidad donde se registran las
mayores capturas por lance esta comprendido entre
300 y 349 m; sin embargo, la mayor frecuencia de
lances se efectúa en el estrato de profundidad 450499 m (Fig. 5).
40%
30%
20%
650-699
600-649
550-599
500-549
450-499
400-449
10%
Frecuencia de lances
50%
350-399
16.000
14.000
12.000
10.000
8.000
6.000
4.000
2.000
0
300-349
Captura (kg) por lance
Figura 4. Pantalla de ecosonda que muestra una
agregación de alfonsino y su posición en la
columna de agua respecto a un monte submarino
(Fuente: seminario “La nueva pesquería del
orange roughy y alfonsino”, septiembre de 2000,
IFOP).
0%
Profundidad (m)
Figura 4. Captura (kg) promedio, límite inferior y límite superior de alfonsino por lance según
estrato de profundidad y frecuencia porcentual del número de lances efectuados según estrato de
profundidad (a partir de registros colectados por IFOP)
4.3. Unidades de Stock
Actualmente, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso esta llevando a cabo análisis
genéticos, morfométricos y de contenido estomacal para identificar si existen diferentes
unidades de stock de alfonsino en Chile. Resultados preliminares, muestran que las relaciones
morfométricas son estables, y los indicadores generados son muy similares a los disponibles en
la literatura internacional, por lo que no hay evidencias para suponer que los alfonsinos de la
zona centro sur de Chile representan dos o más unidades de stock.
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4.4. Crecimiento y mortalidad natural
En el archipiélago Macaronésico (Rico et al., 2001b) y en Nueva Caledonia (Lehodey y
Grandperrin, 1996) se encontró que dos anillos, uno traslúcido y otro opaco, son depositados
cada año sobre los otolitos de alfonsino. Se cree que los anillos traslúcidos y opacos
generalmente son depositados en los otolitos durante períodos de crecimiento lento y rápido,
respectivamente (Williams y Belford, 1974). Los ciclos de crecimiento estacionales pueden estar
relacionados con cambios producidos por la influencia de temperatura, reproducción y régimen
alimenticio (Morales-Nin y Ralston, 1990). En el archipiélago Macaronésico, el anillo opaco se
forma durante los meses de primavera – verano, cuando la temperatura del mar es más alta, y
el anillo traslúcido durante los meses de otoño – invierno, cuando la temperatura del mar es
más baja.
Lehodey y Grandperrin (1996), argumentan que las variaciones de temperatura del mar en las
capas de agua donde habita B. splendens influyen directamente en su crecimiento, señalando
marcas importantes en los anillos de crecimiento de sus otolitos. Es más, en el caso de eventos
como El Niño, se encontró que las fluctuaciones de temperatura aparecen en sus anillos con
algunos meses de retraso, lo que les permitió concluir que el crecimiento de alfonsino es
influenciado por los eventos de El Niño aún cuando los peces vivan en aguas lejanas a la zona
en la cual se inició el evento.
En general, los investigadores concuerdan en que el crecimiento de alfonsino es lento, sin
embargo, existe cierta discrepancia al señalarse que el crecimiento es similar entre machos y
hembras (Rico et al., 2001b); en tanto que otros autores indican que las hembras crecen más
rápido que los machos (Kotlyar, 1987; Massey y Horn, 1990; y, Lehodey y Grandperrin, 1996).
En Chile, Gili et al. (2002) describen que el crecimiento de alfonsino es lento, y estadísticamente
diferente entre machos y hembras, con parámetros de crecimiento de la curva de von Bertlanfy
de L∞= 58,54 cm; k = 0,106 y t0= 2,393 en machos y L∞= 63,59 cm; k = 0,095 y t0= 2,458 en
hembras. En Chile, las hembras de alfonsino son más longevas que los machos y crecen más
lentamente. El valor de la tasa instantánea promedio de mortalidad natural para machos es
0,162 año-1y para hembras 0,152 año-1.
La edad máxima estimada es altamente variable entre diversos autores que han analizado
muestras de alfonsino en distintas áreas; así por ejemplo, se ha detectado una edad máxima de
7 años para el alfonsino de la bahía Sagami en Japón (Ikenouye, 1969) y de 23 años para el
alfonsino que habita en la isla Izu de Japón (Adachi et al., 2000). En nuestro país la estimación
efectuada por Gili et al., (2002) señala 19 años como tmax.
4.5. Alimentación
En las Islas Canarias, la dieta de B. splendens está compuesta principalmente por peces,
crustáceos y cefalópodos. De hecho, la dieta podría dividirse en dos grupos, la de especies de
migración vertical diurna y la de especies meso o bento-pelágicas interzonales. Los mictófidos y
algunos decápodos mesopelágicos como Acanthephyra purpurea y Sergestes spp. pertenecen
al primer grupo. El segundo grupo permanece exclusivamente en la capa mesopelágica, a
saber, Argyropelecus olfersi, Gonostoma denudatum (Osteichnthyes) y Systellaspis debilis
(decápoda) (Dürr y González, 2002).
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Estos autores señalan que la variación de la alimentación de B. splendens es dependiente de la
hora del día y, por lo tanto, resultado de la migración vertical de los organismos presa.
En el caso de los cefalópodos, las especies que son presa de alfonsino habitan en las capas de
aguas profundas y solamente realizan una migración vertical por la noche, momento en que
ocurren sus encuentros con alfonsino.
Por otro lado, existe una relación entre la edad de los alfonsinos y sus dietas, esto es en el caso
de los juveniles la alimentación se sustenta en crustáceos, mientras que en adultos, se
sustenta más en peces. De la misma forma existe una relación directa entre el tamaño de la
presa y del predador (a mayor tamaño de alfonsino, mayor es el tamaño de la presa que
consume ya sea crustáceos o peces).
También se ha encontrado que la cantidad de alimento que consume B. splendens está
asociada a las fluctuaciones estacionales que afectan a las presas. Esto conduce a que en
períodos de bajas temperaturas (otoño, invierno) hay mayor disponibilidad de presas que en
primavera –verano (Dürr y González, 2002).
Dada la composición de su dieta (Tabla 1), los alfonsinos capturados en las cercanías del Arch.
de Juan Fernández presentan una alimentación preferentemente zooplanctófaga, siendo los
eufáusidos (E. mucronata), el ítem presa dominante (Anon., 2004). Independientemente de la
longitud del alfonsino, el grupo crustáceos siempre esta presente en su dieta. No obstante, hay
una tendencia al consumo de presas de mayor tamaño (cefalópodos y peces) a medida que
incrementa la longitud del alfonsino.
Tabla 1. Importancia de las presas de alfonsino según el método numérico (%N), gravimétrico (%W), frecuencia
de ocurrencia (%F) e índice de importancia relativa (%IIR). Enero de 2004, n=194 (Fuente: Anon., 2004)
Item alimentario
CRUSTACEA
Euphausia mucronata
Solenocera vioscai
Oplophorus novaezeelandiae
Sergestes arcticus
Amphipoda
Total Crustacea
%N
86,63
2,86
0,52
0,17
2,30
9,12
26,83
0,69
0,26
0,13
%F
73,19
12,37
3,09
2,06
9,79
%IIR
%IIRGrupo
85,87
4,50
0,04
0,01
0,30
90,72
MOLLUSCA
Ommastrephidae
Calamar s/i.
Total Mollusca
0,09
0,61
PISCES
Myctophidae
Trichiuridae
Teléosteos digeridos (s/i)
Total Pisces
3,43
0,13
3,26
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W%
30,77
6,74
1,03
7,22
0,09
2,77
2,86
5,74
3,68
16,18
5,15
1,03
24,23
0,58
0,05
5,80
6,41
10
4.6. Reproducción
Observaciones histológicas, análisis de la evolución del IGS y de los estados de madurez
efectuadas por Lehodey et al. (1997) indican que el período de crianza de alfonsino en Nueva
Caledonia ocurre durante el período de verano, desde noviembre a marzo, con un máximo
entre diciembre y enero. Aunque el alfonsino es capturado en profundidades desde 500 a 900
m, donde las fluctuaciones estacionales en temperatura y luminosidad son limitadas, son
capaces de efectuar una migración vertical nocturna alcanzando aguas más tibias,
(Galaktionov, 1984) lo que puede ser un factor que induce a la maduración y su posterior
desove (Lehodey et al. 1997).
En Nueva Caledonia, se han observado machos y hembras en desove de alfonsino en los
mismos montes submarinos en que habita el alfonsino, lo que indica que la reproducción en
esta especie no involucra necesariamente migraciones ya que se reproduciría en la misma área
donde habita (Masuzawa et al., 1975; Aleksev et al., 1986). Sin embargo, debido a que las
tallas varían entre estratos de profundidad (Masuzawa et al., 1975; Humphreys et al., 1984;
Massey y Horn, 1990; Lehodey et al., 1994), puede inferirse que hay diferencias de hábitat –
zonas vegetativas para alfonsinos juveniles y zonas reproductivas para individuos maduros. El
transporte de huevos y larvas entre esas zonas podría ocurrir por migración o deriva por las
corrientes. (Lehodey et al., 1997).
Lehodey et al. (1997) encontraron que la talla de primera madurez de hembras (34,5 cm LH) es
mayor que la de machos (33,2 cm LH) de alfonsino, lo que concuerda con lo encontrado
previamente por Masuzawa et al. (1975), quienes indican que el alfonsino alcanza la primera
madurez sexual con longitudes sobre los 34 cm. Asimismo, Annala et al. (2000) informa una
longitud de primera madurez sexual cercana a los 30 cm LH que representa 4 ó 5 años de
edad.
Respecto de la fecundidad, el estudio realizado por Masuzawa et al. (1975) indica que existe
una relación directa entre fecundidad y tamaño del pez, estimando entre 300.000 y 500.000
huevos para una longitud aproximada de 40 cm. Por su parte, Lehodey et al. (1997) señalan
una fecundidad de 675.000 huevos para la misma talla.
En nuestro país, de acuerdo a los estudios efectuados por Tascheri et al. (2002), existe una
presencia constante de hembras inmaduras y en pre-maduración en todas las áreas de pesca
analizadas. En consecuencia, no ha sido posible identificar áreas o períodos de desove, talla de
primera madurez sexual ni valores de fecundidad.
4.7. Comportamiento
El alfonsino se asocia estrechamente con los montes submarinos y se cree que su ciclo de vida
puede estar limitado al área inmediata alrededor de estas zonas (Marakov, 1998). De ser así, y
dada una baja tasa de reclutamiento a cada monte submarino, la presión de pesca reduciría
considerablemente la biomasa de reserva en esa área y, en consecuencia, las tasas de
recuperación serían sumamente lentas. En definitiva, se estima que alfonsino es un recurso de
una muy baja resilencia o resistencia a la presión de pesca o a efectos adversos del medio.
Un estudio realizado por Lehodey et al. (1994) señala que las variaciones de estructura de
tallas observadas en Nueva Caledonia son similares a las de Japón y Nueva Zelanda, donde
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
11
estas estructuras fueron asociadas a migraciones edad-específicas. En Japón, se observó que
el alfonsino se mueve al sur a medida que crece, los juveniles predominan sobre unos montes
submarinos y los peces viejos sobre otros.
Diversos estudios de este recurso en aguas japonesas y el Océano Atlántico, señalan que el
alfonsino tiene una conducta migratoria vertical, distribuyéndose densamente durante el día en
el fondo y luego, al anochecer forman cardúmenes ascendiendo a mediagua para dispersarse.
Posteriormente, al amanecer, se agrupan nuevamente en cardúmenes para descender al fondo
(Galaktionov, 1984; Uchida y Tagami, 1984 fide Gili et al., 2002).
El trabajo desarrollado por Lehodey et al. (1997) plantea que existe un ciclo de vida
esquematizado en Nueva Caledonia, el cual describe una circulación basada en un remolino
que rodea la zona de montes submarinos de Nueva Caledonia (a 700 m de profundidad) y que
participa en el desplazamiento de las distintas etapas de crecimiento de alfonsino. Basado en
esta hipótesis, establece que si las larvas juveniles de alfonsino utilizan este mecanismo para
transportarse a las zonas de alimentación y reproducción, entonces ésta podría ser la evidencia
de que se trata de una sola unidad de stock.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
12
5. ANTECEDENTES DE LA PESQUERIA
5.1. Captura y desembarques
Los primeros registros oficiales de desembarque de alfonsino se informan en 1989, y
correspondieron a 47 ton extraídas por la flota industrial y desembarcadas por puertos de la X
Región (30 ton) y XI Región (17 ton). Posteriormente, para el período 1989-1997, los
desembarques de alfonsino fueron irregulares, con un promedio de 12 ton/año, destacándose
que en 1996, se registró el desembarque de 1 ton por la flota artesanal.
Puede decirse con propiedad que la pesquería de alfonsino comenzó en 1998, año en el cual
se desembarcaron oficialmente por la flota industrial 144 ton, capturadas en aguas
internacionales. Posteriormente, los desembarques de alfonsino experimentaron un fuerte
crecimiento, incrementándose en casi un 1.300% entre 1999 y 2003 (Fig. 5). El 22 de agosto de
2003, la Subsecretaría de Pesca decide aplicar el artículo Nº20 de la LGPA, fijando un límite de
captura y desembarque de 5.002 ton (4.277 ton como especie objetivo) por el lapso de un año.
Posteriormente, el 7 de octubre de 2003 el Servicio Nacional de Pesca informa que en
conformidad al volumen desembarcado, se ha completado el límite de captura antes indicado,
por lo cual se deberá suspender la extracción de alfonsino.
Los desembarques efectuados con posterioridad y hasta el 9 de junio de 2004, ascienden a 583
ton, de las cuales 393 ton se han capturado y desembarcado en el marco de pescas de
investigación y 189 ton se han capturado por sobre el límite máximo de captura establecido.
Como se mencionó anteriormente, las mayores capturas se han originado tradicional-mente en
los montes submarinos ubicados en el área cercana al Archipiélago de Juan Fernández; sin
embargo, también destacan otras zonas de pesca, ya sea por su frecuencia de viajes con pesca
de alfonsino o por los rendimientos de pesca que generan. Así por ejemplo, en base a la
información registrada por el Sernapesca, es posible clasificar las áreas de pesca en tres
grupos:
Área roja: es la correspondiente a los montes submarinos del Arch. de Juan Fernández y el
Bajo O’Higgins (Fig. 3), en que se observa una alta frecuencia de viajes con captura de
alfonsino y a la vez las capturas promedio por viaje son altas (47 a 64 ton/viaje).
Área amarilla: es la correspondiente al área ubicada entre la IX Región y el paralelo 41º28,6’S,
en la cual se observa una baja frecuencia de viajes con captura de alfonsino y capturas
promedio por viaje de pesca intermedias (7 a 8 ton/viaje).
Área verde: es la correspondiente al área ubicada entre la VI y VIII Regiones, y entre el 41º28,6’
S y la XI Región, en que se observa una frecuencia moderada de viajes con captura de
alfonsino y bajas capturas promedio por viaje de pesca (0,02 a 3,4 ton/viaje).
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
13
Desembarque (t)
10.000
8.000
6.000
4.000
2.000
0
1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004
Año
Figura 5. Desembarques (ton) anuales de alfonsino por la flota nacional (a partir
de Anuarios Estadísticos de Pesca e información preliminar de Sernapesca)
En relación a la estacionalidad de las capturas, es posible indicar que el grueso de las capturas
(realizadas en Arch. de Juan Fernández y Bajo O’Higgins) sigue un patrón estacional bien
definido que muestra incrementos en los niveles durante el segundo semestre principalmente.
Así por ejemplo, a pesar de que en la zona del Arch. de Juan Fernández ya en junio se
comienza a observar una alta incidencia de alfonsino en los viajes de pesca (producto de la
operación sobre de orange roughy), las capturas realizadas registran niveles máximos entre
septiembre y noviembre de cada año (Fig. 6). Por otro lado, en el área del Bajo O’Higgins los
viajes de pesca con capturas de alfonsino son casi nulos entre enero y mayo de cada año, y los
mayores desembarques promedio por viaje se aprecian entre agosto y diciembre (Fig. 7).
5.2. Fauna acompañante (FA)
5.2.1. FA en la pesca dirigida a alfonsino
En la pesca dirigida a alfonsino, con red de arrastre de fondo, en el área del Archipiélago de
Juan Fernández y desde la IV a XII Región, se ha detectado en las capturas la presencia de las
siguientes especies que se indican en la Tabla 2. Particularmente, merluza de cola, orange
roughy y chancharro de Juan Fernández, son especies que aparecen con mayor frecuencia
pero en niveles bajos, en tanto que el resto de la fauna acompañante aparecen a nivel de
presencia solamente (Jessica González, com. pers.)
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
14
Tabla 2. Especies de la fauna acompañante en la pesca dirigida a alfonsino con
red de arrastre de fondo entre la IV y XII Región. (Fuente: Gálvez, 2003 y
Jessica González com. pers).
Nombre común
Merluza de cola
Orange roughy
Chancharro de Juan Fernández
Cola de látigo
Granadero escamoso
Mugil - plomizo - Jurel JF
Langosta enana
Congrio profundidad
Fofo
Basurero negro
Tollo negro de cachos
Besugo de Juan Fernández
Pejegato de profundidad
Pejeperro de profundidad
Mantecoso
Cangrejo dorado
Brotulín
Cola plana
Anguila espinosa
Jibia
Nombre científico
Macruronus magellanicus
Hoplostethus atlanticus
Helicolenus lengerichi
Caelorhynchus fasciatus
Macrourus carinatus
Emmelichthys nitidus cyanescens
Projasus bahamondei
Bassanago nielseni
Mora moro
Lepidopus xantusi
Centroscyllium nigrum
Epigonus robustus
Apristurus brunneus
Centroscymnus cryptacanthus
Ruvettus pretiosus
Chaceon chilensis
Gadella obscurus
Tripterophycis svetovidovi
Notacanthus sexspinis
por identificar
45
40
100
35
80
30
25
60
20
40
15
Desembarque
20
Viajes
0
10
Viajes con alfonsino
Desembarque (t) promedio
por viaje
120
5
0
1
2
3
4
5
6 7
Mes
8
9 10 11 12
Figura 6. Desembarques (ton) promedio de alfonsino por viaje de pesca y viajes totales de pesca
con captura de alfonsino en la zona del Arch. de Juan Fernández, período 1997-2004. (a partir de
información Sernapesca)
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Declaración régimen Alfonsino
15
20
70
18
16
60
14
50
12
40
10
30
8
6
20
10
Desembarque
4
Viajes
2
0
Viajes con alfonsino
Desembarque (t) promedio
por viaje
80
0
1
2
3
4
5
6 7
Mes
8
9 10 11 12
Figura 7. Desembarques (ton) promedio de alfonsino por viaje de pesca y viajes totales de pesca
con captura de alfonsino en la zona del Bajo O’Higgins, período 1997-2004. (a partir de información
Sernapesca)
5.2.2. Alfonsino como FA de otras pesquerías
El alfonsino es fauna acompañantes de pesquerías dirigidas a otros recursos comerciales,
principalmente a aquellos que se capturan con redes de arrastre de fondo. Hasta la fecha no se
disponen de antecedentes analizados de la proporción de alfonsino que es capturado cuando la
pesca se orienta a otros recursos, sin embargo es posible indicar que aparece como fauna
acompañante en las siguientes pesquerías:
-
Pesquería industrial de gamba con arrastre de fondo (zona centro sur)
Pesquería industrial de merluza común con arrastre de fondo (zona centro-sur)
Pesquería industrial de merluza de cola con arrastre de fondo (zona centro-sur)
Pesquería industrial de besugo con arrastre de fondo (zona centro-sur)
Pesquería industrial de orange roughy con arrastre de fondo (zona centro-sur y Arch. J.F.)
Pesquería industrial de merluza de cola con arrastre de fondo (zona sur-austral)
Pesquería industrial de espinel de merluza del sur (zona sur-austral)
Pesquería industrial de espinel de congrio dorado (zona sur-austral)
5.3. Flota pesquera
Actualmente no existen autorizaciones de pesca sobre alfonsino para embarcaciones
artesanales, siendo por lo tanto la pesquería de carácter eminentemente industrial. La flota que
dispone de autorizaciones de pesca de alfonsino esta compuesta por 79 naves con una
capacidad de bodega acumulada de 43.968 ton (promedio = 586 ton/nave) y una potencia de
1.666 hp en promedio.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
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De las 79 naves autorizadas, 59 disponen de autorizaciones con redes de arrastre, 2 con
enmalle, 1 con espinel y 17 con palangre. De las 59 naves autorizadas a operar con redes de
arrastre, 43 lo pueden hacer en el área del Arch. de Juan Fernández (Fig. 8); sin embargo,
muchas de estas naves autorizadas con red de arrastre son naves doble propósito o cerqueras,
que actualmente no se encuentran acondicionadas para efectuar faenas con redes de arrastre,
por lo que constituyen parte del esfuerzo potencial. El esfuerzo de pesca real históricamente ha
sido efectuado por 9 naves, que en el período 1997-2004 han efectuado el 96,8% de los
desembarques de alfonsino.
5.4. Artes de pesca
Los artes y aparejos de pesca autorizados a la flota industrial, para la captura de alfonsino son
(i) red de arrastre (de fondo y media agua); (ii) red de enmalle; (iii) espinel; y, (iv) palangre. Sin
embargo, el grueso de las capturas se realiza con red de arrastre de fondo principalmente y con
red de arrastre de media agua en segundo término.
Dado que las principales naves que capturan alfonsino pertenecen a armadores que disponen
de permisos extraordinarios de pesca de orange roughy, las naves frecuentemente utilizan el
mismo arte de pesca tanto para la captura de alfonsino como orange roughy, lo cual no
necesariamente quiere decir que el arte de pesca empleado sea el más adecuado, desde el
punto de vista de la selectividad a la especie, para la captura de alfonsino (Gálvez, 2003).
Figura 8. Autorizaciones de pesca industrial sobre alfonsino, por arte de pesca y zona.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
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17
Atendiendo lo anterior, es posible indicar que los principales modelos de redes de arrastre de
fondo para la captura de alfonsino son los siguientes:
-
Modelo NOVA 118 de 4 paneles, de la empresa Nordsea Ltda.: Esta red tiene 52 m de
relinga superior, 12,1 m de relinga en el panel lateral y 31,3 m de relinga o borlón en el
panel inferior. La longitud total de la red es de 65,42 m, con una longitud de tunel y
copo de 28 m. El diseño contempla alas cortas, lo que la hace especial para fondos
duros (Fig. 9). Esta construida fundamentalmente en PE, a excepción de las alas que
son de PA. Los tamaños de malla en el cabezal superior e inferior son de 250 mm con
diámetro de hilo de 6 a 4 mm. Los tamaños de malla de los paños medios del panel
superior fluctúan entre 250 y 165 mm, mientras que los paños del belly tienen tamaños
de malla de 165 mm. El cabezal de la red y los bellys están reforzados con doble malla
de diámetro de hilo cada una de entre 3 y 4 mm.
-
Modelo CASANOVA de 4 paneles, de la empresa Nordsea Ltda.: Esta red tiene 44,6 m de
longitud de relinga superior y 57,6 m de relinga inferior o borlón. La longitud de la red
es de 50,9 m, con un túnel y copo de 20 m. El diseño contempla alas cortas, lo que la
hace especial para fondos duros (Fig. 9). La red esta construida en su totalidad con
PE. El cielo y belly de proa tiene 200 mm de tamaño de malla con diámetro de 4 mm y
el cielo y belly de popa mallas de 140 y 160 mm con diámetro de hilo de 3 mm. El
cabezal de la red (ala inferior) y el último cuerpo del belly están reforzados con malla
doble.
-
Modelo Carmen de 4 paneles, de la empresa Hampidjan A.S.: Esta red tiene 60,8 m de
longitud de relinga superior, 21,2 m de relinga en el panel lateral y 69,7 m de relinga o
borlón en el panel inferior. La longitud de la red es de 78,7 m, con una longitud de
túnel y copo de 28 m. Esta construida fundamentalmente en PE, a excepción de dos
cuerpos contriuidos de Dyneema a nivel del cielo. Los tamaños de malla y diámetros
de hilo son similares al modelo NOVA a excepción de los paños de Dyneema que
tienen diámetro de hilo de 2,5 mm.
Figura 9. Red de arrastre modelo NOVA de Nordsea Ltd. (Fuente: www.nordsea.ca).
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Declaración régimen Alfonsino
18
2.000
1.800
1.600
1.400
1.200
1.000
800
600
400
200
0
2002
Dic
Oct
Nov
Ago
Sep
Jul
Jun
May
Abr
Mar
Feb
2003
Ene
El valor total de las exportaciones de alfonsino
durante 2003 ascendió a USD 10.109.441, lo
que representó un incremento de poco más de
5,2% con respecto a 2002. La estacionalidad
del valor de las exportaciones de este recurso
fue similar en ambos años y sigue un patrón
acorde
con
el
observado
para
los
desembarques industriales de esta pesquería,
es decir con un alza en el valor de las
exportaciones durante el segundo semestre del
año (Fig. 10).
Valor (miles USD)
5.5. Exportaciones
Mes
Figura 10. Valor (miles de USD) de las
exportaciones totales de alfonsino por mes para
2002-2003.
5.5.1. Cantidad
Durante 2003, las cantidades exportadas de productos elaborados a partir de alfonsino
aportaron con el 6% del total generado por la pesquería demersal centro-sur, lo que significó
4.400 toneladas y un aumento de 23% con respecto a lo observado durante 2002. Cabe indicar
que esta conducta corresponde a un sostenido incremento de las exportaciones a partir de
1999.
La oferta exportadora nacional se distribuyó en 5 firmas que enviaron productos a 10 mercados.
Se observa un aumento en el número de exportadores participantes y una reducción de los
mercados respecto al período anterior (9 exportadores 14 países). La importancia relativa de
los principales mercados continúa siendo cualitativamente la misma respecto de 2002, donde
Japón (48%) y China (41%) son los de mayor representación. Sin embargo, se observa un
mayor posicionamiento de los productos en el mercado chino, alcanzando niveles similares al
del mercado japonés. El resto de los países tiene una importancia menor, donde gran parte de
ellos no supera el 1% de la oferta chilena.
De lo anterior se desprende que el bloque económico de APEC concentra el 89% de las
cantidades exportadas, seguido por un conjunto de países de diferentes áreas (8%) y en tercer
lugar la Unión Europea (3%), con Portugal, España y Alemania como países de mayor
importancia para los exportadores chilenos.
Los congelados son los principales productos exportados a partir de este recurso, estructura
similar a la observada durante el período enero-diciembre de 2002 y en años precedentes
(Tabla 3). La cantidad de productos congelados se incrementó en un 24% con respecto a 2002,
siendo la principal forma de presentación el pescado congelado eviscerado y sin cabeza (HG
c/cola).
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Declaración régimen Alfonsino
19
Tabla 3. Cantidades exportadas de alfonsino (t), según línea de
elaboración. Enero-diciembre 2003.
Mes
Congelado
Total
Enero
362
362
Febrero
397
397
Marzo
208
208
Abril
551
551
Mayo
209
209
Junio
325
327
Julio
159
161
Agosto
167
167
Septiembre
514
515
Octubre
841
841
Noviembre
420
420
Diciembre
287
287
Ene-Dic 2003
4.441
4.445
Ene-Dic 2002
3.579
3.611
Var (2003-2002)
24%
23%
Fuente: Tascheri et al. (2004)
5.5.2. Precio
Durante 2003, los precios (FOB) promedio de exportación de alfonsino presentaron un
incremento de 5% respecto de 2002, oscilando en torno a 2,3 USD/kg. Este valor ha significado
un incremento del 60% respecto al precio más bajo de los últimos 5 años (2001).
El precio promedio total más alto se obtuvo en el mercado chino, siendo un 11% superior al
precio promedio total logrado en el mercado japonés; sin embargo, presentó comparativamente
una mayor variación negativa respecto de 2002. Cabe destacar que el resto de los mercados
presentaron conductas positivas para los productos congelados y fresco refrigerados,
desempeño que se refleja en el promedio general (Tabla 4).
Durante 2003, el precio de los productos congelados registraron una leve tendencia al alza
situándose en 2.275 USD/t, presentando un máximo en julio y un mínimo en abril, con un rango
de 522 USD/t entre los extremos (Tabla 4).
Tabla 4. Precios FOB (USD/t) promedio de alfonsino, según principales destinos
de las exportaciones. Enero-Diciembre de 2003.
Promedio
Mes
Japón
China
General
Enero
2.505
2.930
2.248
Febrero
3.131
2.613
2.433
Marzo
2.535
2.717
2.395
Abril
2.145
2.430
2.153
Mayo
2.139
2.272
2.229
Junio
2.393
2.392
2.306
Julio
2.270
2.915
2.667
Agosto
2.438
2.429
2.430
Septiembre
2.214
2.434
2.271
Octubre
2.283
2.273
2.279
Noviembre
1.959
2.388
2.052
Diciembre
2.310
2.599
2.236
Ene-Dic 2003
2.267
2.476
2.274
Ene-Dic 2002
2.302
2.545
2.167
Var (2003-2002)
-1,5%
-2,7%
5%
Fuente: Tascheri et al. (2004)
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
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6. ANALISIS
6.1. Evaluación y diagnóstico del recurso
6.1.1. Indicadores del recurso y la pesquería
Los indicadores que a continuación se presentan, tanto del recurso como de la pesquería,
fueron tomados del informe final del proyecto Investigación Situación Pesquería Demersal
Centro-Sur, 2003 (Tascheri et al., 2004).
6.1.1.a. Captura por unidad de esfuerzo
La captura por unidad de esfuerzo (CPUE) es ampliamente usada como índice de abundancia
relativa en muchas pesquerías del mundo. Las variaciones de este índice, se asocian
principalmente a las características y composición de la flota, así como a factores de tipo
ambiental. Naturalmente, para que la CPUE pueda ser interpretada como un índice de
abundancia, se necesita que las tasas de captura de la pesquería sean estandarizadas, para lo
cual se utilizó información proveniente de las bitácoras de pesca entre los años 2000 y 2003.
Para realizar dicha estandarización, se emplearon modelos lineales generalizados (MLG),
técnica que actualmente constituye el método mas utilizado en la estandarización de la CPUE
(Tascheri et al., 2004 fide Punt et al., 2000), se analizaron varios factores y se consideraron los
registros de las tres naves más representativas de la pesquería.
La CPUE estandarizada muestra una tendencia general a la baja y los intervalos de confianza
de la CPUE estandarizada se presentan estrechos, por lo que el error asociado a la estimación
se considera bajo. Este índice muestra una baja entre 2000 y 2003 de 18,0 ton/h.a. a 12,5
ton/h.a., lo que representa un disminución de 30,5%. En contraste, los rendimientos nominales
se presentan con una tendencia al alza (Fig. 11).
Figura 11. Serie de CPUE estandarizad (línea continua), intervalos del 95% de confianza (línea
fraccionada) y rendimientos nominales (cuadrados). (Fuente: Tascheri et al., 2004).
6.1.1.b. Composición de tallas de la captura
El rango de tallas de los ejemplares de alfonsino en la captura de 2003 fue de 17 a 49 cm LH,
con un promedio de 34,9 cm LH. Estratificando por sexo, las hembras presentan un promedio
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
21
de 36,0 cm en un rango de 18 a 49 cm LH, mientras que los machos alcanzan sólo los 33,3 cm
de promedio, fluctuando entre 17 y 47 cm de longitud horquilla. La captura estuvo constituida
por ejemplares juveniles y adultos, teniendo en cuenta que la talla de primera madurez para la
pesquería en Nueva Caledonia de esta especie, se ha estimado en 34,5 y 33,2 cm en machos y
hembras respectivamente (Lehodey et al., 1997).
Comparado con la temporada 2002, se aprecia una disminución en la talla promedio global y
principalmente de la talla promedio de las hembras de alfonsino, la cual cayó de 40 a 36 cm,
con una reducción además en la talla máxima observada de 12 cm (de 61 cm a 49 cm LH).
Durante la temporada 2003 los ejemplares más grandes fueron capturados en JF2 y JF5, con
un promedio de LH de 36,6 y 36,7 cm respectivamente, mientras que los más pequeños en JF4,
con un promedio de 33,5 cm en un rango de 19 a 47 cm de longitud horquilla.
La estructura de talla de alfonsino para todas las zonas de operación y toda la temporada se
presenta multimodal, con la moda principal centrada en 38 cm LH global (Fig. 12),. Para los
machos, la moda se situó en 37 cm, mientras que para las hembras, en el rango 39 – 41 cm LH.
Comparadas con el año 2002, las tallas modales por sexo aumentaron 1 cm en machos y
hembras, reflejando la intencionalidad de la flota por capturar ejemplares de mayor talla. No
obstante lo anterior, apareció una segunda moda, de menor importancia, en los 26 cm LH tanto
para machos como para hembras, que correspondería a ejemplares juveniles. Cabe destacar
que en las estructuras por sexo de la presente temporada (Fig. 12), existió un mayor
pronunciamiento de las modas principales, además de la aparición de una mayor
representatividad en las tallas de ejemplares de menor tamaño.
Figura 12. Distribución de frecuencias de talla (LH) de las capturas de alfonsino
durante 2003. La sección achurada representa la fracción de ejemplares
supuestamente inmaduros(modificado de Tascheri et al., 2004).
6.1.1.c. Peso de los ejemplares
El peso total de los ejemplares de alfonsino capturados en todas las zonas de pesca y durante
toda la temporada 2003, estuvo distribuido entre 125 y 2.650 gramos con un promedio global de
1.009,8 g. Al igual que lo observado en otros recursos como el orange roughy, las hembras
alcanzaron mayores pesos y tallas que los machos. Al respecto, el peso medio de las hembras
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
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fue de 1.117,9 g en un rango que fluctuó entre 130 y 2.650 g, mientras que el promedio en
machos fue de 844,4 g, variando entre 125 y 2.050 gramos.
Al comparar los valores recién mencionados con los registrados en la temporada 2002, se
observa una reducción del orden del 40%, tanto en forma global como por sexos individuales.
Esta reducción podría relacionarse con el hecho de que en el 2003, sobre el 50% de capturas
provino de JF1, monte que presenta una estructura poblacional con un porcentaje importante de
ejemplares juveniles (Fig. 13). En forma general, desde el 2001 se observa una correlación
directa entre el peso medio de los ejemplares y el origen espacial de las capturas, asociándose
menores tallas y pesos, a capturas obtenidas en JF3, JF4 y JF1 (Fig. 13).
Figura 13. Distribución de frecuencia de talla (LH) de las capturas de alfonsino por
zona de pesca (monte) en la temporada 2003. El área sombreada representa la
fracción supuestamente inmadura. (Fuente: Tascheri et al., 2004).
6.1.1.d. Índice gonádico y madurez sexual
Al igual que en temporadas pasadas, el estudio de la evolución temporal de los estadios
macroscópicos de madurez sexual de alfonsino, muestra la presencia constante de hembras
inmaduras (EMS2) y en estado de premaduración (EMS3) (Fig. 14). En el caso de las diferentes
zonas de pesca, se presenta una evolución coherente del índice gonádico (IG), confirmando los
resultados del análisis macroscópico. Sin embargo, y como ha sido mencionado anteriormente,
la temporada de pesca 2003 de alfonsino, sólo se extendió hasta octubre, por lo que se carece
de antecedentes de los meses de verano y parte de primavera.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
23
Si bien para JF1, la proporción de EMS3 aumenta entre julio y septiembre, no se observa un
posterior incremento de estadios de desarrollo más avanzado. En JF2 se advierte un
comportamiento más errático, con una disminución del EMS3 ente mayo y junio, y elevadas
proporciones de hembras en maduración en septiembre y octubre. Sólo se registraron hembras
en estado de desove en JF5 y JF2 los meses de marzo - mayo y julio respectivamente, pero sin
antecedentes previos de un patrón reproductivo secuencial.
Los resultados presentados para la temporada 2003 (Fig. 14), más los antecedentes
disponibles de temporadas anteriores, indicarían que esta especie no desova durante el período
otoño – invierno, confirmando lo propuesto por Lehodey et al. (1997), para alfonsino de Nueva
Caledonia, cuya época de desove ocurriría en el verano del hemisferio sur, evento que tendría
mayor intensidad los meses de diciembre y enero.
JF1
JF2
3,5
3,0
2,0
40%
1,5
IG
2,5
60%
1,0
20%
0,0
Feb
Mar
May
Jun
Jul
Ago
Sep
2,5
60%
2,0
40%
1,5
1,0
0,5
0%
Oct
0,0
Feb
Mar
May
Mes
EMS1
EMS2
EMS4
EMS5
IG
EMS1
EMS2
JF4
2,0
40%
1,5
1,0
20%
0,5
0%
0,0
Jul
Ago
% Madurez
60%
EMS3
EMS4
EMS5
IG
3,5
3,0
2,5
60%
2,0
40%
1,5
1,0
20%
0,5
0%
0,0
May
Jul
Mes
EMS3
Oct
80%
2,5
IG
% Madurez
80%
EMS2
Sep
100%
3,0
EMS1
Ago
JF5
3,5
May
Jul
Mes
EMS3
100%
Mar
Jun
IG
Ene
3,0
20%
0,5
0%
3,5
80%
% Madurez
80%
% Madurez
100%
IG
100%
Ago
Sep
Oct
Mes
EMS4
EMS5
IG
EMS1
EMS2
EMS3
EMS4
EMS5
IG
Figura 14. Proporción mensual de estados de madurez sexual macroscópicos e índice gonádico (IG) de
alfonsino en las principales zonas de pesca durante la temporada 2003. (Fuente: Tascheri et al., 2004).
6.1.2. Evaluación indirecta del recurso
Se consideraron dos modelos de evaluación indirecta que permiten un acercamiento hacia la
dinámica poblacional del recurso alfonsino. El primero es un modelo probabilistico basado en
tallas (Sullivan et al.,1990; Sullivan, 1992; Chen et al., 2000) que es extensamente descrito por
Quinn y Deriso (1999); mientras que el segundo es un modelo de reducción de stock propuesto
y aplicado en la pesquería de Nueva Zelanda (Francis, 1992).
Es posible indicar que le primer modelo utiliza una aproximación convencional hacia la dinámica
del stock, ya que asume que la explotación pesquera se realiza sobre la fracción del stock en la
cual se verifican los procesos de reclutamiento y reproducción y desove. En tanto, el segundo
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
24
modelo intenta recoger la dinámica del stock hasta el momento observada a través de las
capturas, en la cual se desconocen aspectos del proceso reproductivo que son estimados por el
modelo (edad o talla de madurez sexual); en otras palabras, este modelo evalúa lo que se
considera la fracción vegetativa del stock de alfonsino.
Detalles de las formulaciones empleadas, supuestos considerados, procesos modelados y
resultados pueden ser encontradas para el caso del primer modelo en Anon et al. (2004);
mientras que para el segundo modelo se pueden encontrar en Wiff (2004).
6.1.2.a. Modelo de Sullivan et al. (1990)
Para abordar este modelo se utilizó información proveniente de la pesca comercial de los años
1999 a 2003 colectada por IFOP. Esta serie de información contiene datos de longitud de los
ejemplares (frecuencias de tallas), datos biológicos (peso, estado de madurez, etc) y datos de
bitácoras de pesca (esfuerzo, captura, posición, etc), con los que se estimaron rendimientos de
pesca nominal (CPUE). A partir de la misma información, se construyeron las matrices en tallas
de captura y de pesos medios.
Esta información fue complementada con el vector de los desembarques, los parámetros de la
curva de crecimiento del modelo de von Bertalanffy y la estimación de la tasa de mortalidad
natural reportada por Gili et al. (2002), junto con una aproximación teórica de la ojiva de
madurez sexual generada a partir del estudio de Lehodey et al. (1997), debido a que no existe
una estimación local para la especie, dada la dificultad en localizar agregaciones con individuos
sexualmente maduros.
A pesar de las limitaciones de los datos, y por consiguiente del estudio, los resultados logrados
poseen buen nivel de ajuste en las estructuras de la captura y el desembarque, considerándose
en términos relativos, deficitario el ajuste para el rendimiento de pesca.
Este análisis consideró que el año 1998, la población de alfonsino se encontraba en estado de
equilibrio, y la población estaba inexplotada, es decir se supone el año 1998 la condición del
stock era virginal, y a partir de este punto se realiza la evaluación de stock. Los resultados
indican que el 2003 la biomasa total y desovante correspondía al 73% y 67% del valor que pudo
haber existido en 1998 (Fig. 15 y Tabla 5). Del mismo modo se puede apreciar que la reducción
más importante en la abundancia en número, la registran los reclutamientos, los que a inicio de
2003 son el 12% de lo que eventualmente existió a inicio de 1998, producto de un explosivo
aumento en los desembarques y por ende en la mortalidad total. Esto redunda en tasas de
explotación para 2003 igual al 15,76% y 22,39%, en número y peso respectivamente (Tabla 5).
Para estimar la incertidumbre en la estimación de ciertos parámetros y variables del modelo
utilizado, se re-muestreo la distribución conjunta a posteriori de estas variables, siendo posible
informar que a un 95% de confianza, la biomasa desovante estimada para el año 2003 fluctuó
entre 17 mil y 42 mil toneladas, en tanto que los reclutas a la pesquería variaron entre 10
millones y 23 millones.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
25
6
x 10
Biomasas a inicio de año
4
Toneladas
5
4
Simulación del stock en Equilibrio
3
Biomasa Total
Biomasa Desovante
Biomasa de Reclutas
2
1
0
1992
7
1994
x 10
1996
7
1998
2000
2002
2004
2000
2002
2004
Abundancia en número
6
Simulación del stock en Equilibrio
Nº
5
4
3
N Total (inicio de año)
N Medio
Reclutas (inicio de año)
2
1
1992
1994
1996
1998
Años
Figura 15. Trayectoria de las biomasas (ton) y abundancias (número) simuladas y estimadas de
alfonsino. (Fuente: Anon., 2004).
Tabla 5. Información resultante del modelo de evaluación del stock de alfonsino.
Evaluación
Simulación
Años
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
Biomasa
total (t)
55.216
55.216
55.217
55.217
55.217
55.218
56.021
55.355
54.406
50.254
47.063
40.826
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
Abundancia (millones)
Total
Reclutas
68,10
14,58
68,10
14,58
68,10
14,58
68,10
14,59
68,10
14,59
68,10
14,59
69,87
11,90
69,35
12,33
66,71
9,71
61,91
5,03
61,52
4,72
56,16
1,46
Fcr
0,004
0,021
0,137
0,180
0,370
0,471
Z
0,2455
0,2621
0,3778
0,4208
0,6111
0,7122
Tasa de explot.
Nº (%) Peso (%)
1,41
5,56
6,88
12,21
15,76
0,26
1,28
8,02
10,31
17,35
22,39
26
El cálculo de puntos biológicos de referencia (PBR) tiene dos implicancias, la primera y más
directa es lograr contrastarlos con el valor de la tasa de mortalidad por pesca del año más
reciente (Fcr). A la vez que se construye el conjunto de mortalidades por pesca, que podrían
utilizarse al minuto de proyectar el stock en el futuro.
En la Fig. 16 y Tabla 6, se evalúa de manera gráfica el nivel de mortalidad por pesca, ejercido
en el año 2003, sobre el grupo de tallas en que los organismos están completamente reclutados
a la pesquería, es decir, en torno a los 52 cm (LH). Es destacable que dicha mortalidad supera
de manera importante, valores de PBR: F40% y F33%, que consideran los efectos de la explotación
en el largo plazo y que son considerados en pesquerías de recursos con mayor resilencia,
como objetivos de manejo (F40%) y en algunos casos, límite precautorio de sobreexplotación
(F33%).
Del mismo modo, el valor de mortalidad por pesca del año 2003 supera de forma importante, el
valor de mortalidad por pesca FMSY, PBR que es actualmente considerado como umbral para
evitar la sobreexplotación.
Por lo tanto, no es sustentable mantener los actuales niveles de desembarque y una
administración en ese sentido se alejaría de las políticas de manejo que actualmente se aplican
Nueva Zelanda, donde la pesquería de alfonsino se administra con el PBR F2/3 MSY, Annala et al.
(2003) (Tabla 6).
Tabla 6. Estimación de Puntos Biológicos de Referencia (PBR) a partir de los modelos de
rendimiento y biomasa por recluta (Y/R y B/R), y Máximo Rendimiento Sostenido (MSY)
PBR (Y/R y BD/R)
F50%
F40%
F33%
F20%
F0,1
Fmáx
Estimación
0,1850
0,2566
0,3250
0,5400
0,2758
0,6624
PBR (MSY)
F2/3 MSY
F3/4 MSY
FMSY
Estimación
0,1198
0,1347
0,1797
500
2500
450
Y/R
BD / R
400
2000
300
1500
250
Fc r 2 00 3
F 50 %
200
150
F m áx
F 0 ,1
1000
BD / R (g)
Y / R (g)
350
F 33%
100
500
50
0
0
0,0
0,1
0,2
0,3
0,4
0,5
0,6
0,7
F [ 1 / año ]
Figura 16. Curvas de rendimiento y biomasa desovante por recluta en la pesquería de
alfonsino., con PBR de interés. (Fuente: Anon., 2004).
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
27
6.1.2.b. Modelo de Francis (1992)
Para abordar este modelo se utilizaron los desembarques de los años 1998 a 2003, informados
por Sernapesca (no se utilizó el de 1997 por ser de solo 7 ton). Además se utilizaron las
estructuras de tallas y pesos medio a la talla de la captura, lo que fueron obtenidos del proyecto
de Seguimiento de la Pesquería Demersal Centro Sur y Aguas Profundas, entre los años 20022003. Al mismo tiempo, se utilizó como calibrador el índice de densidad de alfonsino obtenido
de la evaluación hidroacústica desarrollada sobre orange roughy y llevada a cabo entre junio y
agosto de 2003 por parte del Centro de Estudios Pesqueros, Universidad Austral de Chile
(Boyer et al., 2003) y la CPUE estandarizada entre los años 2000 y 2003, cuyos resultados se
muestran en la Fig. 11. Los parámetros de historia de vida tales como crecimiento individual,
mortalidad natural, edad de reclutamiento, edad terminal fueron tomados desde Gili et al.
(2002), en tanto que la edad/talla de primera madurez sexual fue estimada en el modelo a la
forma de función “filo de cuchillo” en donde la edad de madurez de entrada corresponde a
aquella encontrada en los alfonsinos de Nueva Caledonia (Lahodey et al., 1997).
Con el modelo empleado se lograron buenos ajustes de las capturas observadas, en la
distribución de frecuencia de tallas de las capturas y en la biomasa hidroacústica, en tanto que
el ajuste fue deficitario en las CPUE estandarizadas.
Los principales resultados de este análisis se grafican en las Figs. 16 y 17, en las que se
observa que la biomasa total se ha reducido desde el inicio de la explotación desde 60.000 ton
a 38.000 ton (un 63% de la biomasa original o virginal), en tanto que la biomasa vulnerable ha
seguido la misma tendencia. La mortalidad por pesca se ha incrementado continuamente hasta
valores de 3,2 año-1 en 2003.
La curva de biomasa desovante por recluta para una edad de primera madurez sexual de 7
años (Fig. 18) muestra que el recurso al 2003 se encontraba en una situación muy delicada,
reduciéndose a un 34,4 de la biomasa desovante virginal y sobre los valores tradicionalmente
recomendados de mortalidad por pesca F50%BD o F45%BD, lo que claramente indica un nivel de
sobrepesca por reclutamiento.
Figura 16. Estimación de la biomasa total de
alfonsino a inicios de año (BT) y biomasa vulnerable
a mediados de año (BV). Fuente: Wiff (2004).
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
Figura 17. Mortalidades por pesca anuales de
alfonsino estimadas por el modelo. Fuente: Wiff
(2004).
28
Figura 18. Curva de Biomasa por recluta y PBR de interés. Fuente: Wiff
(2004).
6.1.3. Diagnóstico del estado del recurso
Teniendo en cuenta los resultados de ambos modelos de evaluación considerados es posible
manifestar que:

La biomasa total de alfonsino se ha reducido de valores virginales de 56.021-60.106 ton
a 37.443-40.826 ton y dependiendo del modelo considerado la reducción es entre un
62% y 73% de la biomasa virginal total. En tanto que la biomasa desovante ha seguido
una tendencia descendente mucho mas pronunciada llegando a valores cercanos al
33% de la biomasa desovante virginal e incluso menos, dependiendo del modelo que se
considere.

Entre el año 1998 y el año 2003 se ha estimado que el número de reclutas que ingresan
a la pesquería se habría reducido en un 88%, lo que de ser efectivo, es una situación
compleja en extremo.

Según el primer modelo analizado, el nivel de mortalidad por pesca del año más reciente
(2003), excede en 1,84 veces el valor del PBR F40%BD y en 1,45 veces el valor del PBR
F33%BD. Mientras que en el segundo modelo, la mortalidad por pesca de 2003 excede el
valor del PBR F40%BD en 1,22 veces y esta muy cercano al valor de F33%BD.

En relación a la recuperabilidad del stock, al interior de la comunidad internacional, no
existe claridad de cual es la fracción mínima de biomasa desovante, recomendable a
dejar en el mar, respecto del valor de la biomasa virginal. Al basarse en el PBR F40%, y
siendo optimistas en cuanto a la capacidad de resilencia del recurso, en el año 2003 se
está en presencia de un stock expuesto a la sobre pesca por reclutamiento.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
29

Desde un enfoque de manejo precautorio de la pesquería, basado en mortalidades por
pesca derivadas del cálculo del rendimiento máximo sostenido (FMSY) y mortalidades por
pesca que a su vez se derivan de ésta última, la mortalidad por pesca del año 2003 es
2,6 veces el valor del PBR FMSY, que generalmente se considera como umbral o límite de
explotación.
Finalmente, es posible que la explotación pesquera del recurso alfonsino, tal como se estaba
llevando a cabo hasta el 2003, inició un tránsito poco viable, ya que se está en presencia de un
stock, que al menos, está en proceso de sobre pesca y con serio riesgo que se esté incurriendo
en una sobreexplotación por reclutamiento.
6.2. Tipo de régimen de administración
Para que una pesquería sea declarada en recuperación, no sólo se requiere acreditar que este
sobre explotada, sino que al mismo tiempo debe haber sido sometida a una veda extractiva de
a lo menos tres años. Esta situación no se ha producido en la pesquería de alfonsino, por lo que
se debe descartar la posibilidad de declararla en estado de recuperación y someterla a dicho
régimen de administración.
Por otro lado, para que la pesquería de alfonsino sea declarada en estado de desarrollo
incipiente, debe cumplirse la ecuación consignada en el capítulo 3.2 de este informe. Esto
implicaría que una eventual cuota global anual de captura del recurso, debiera ser superior a
91.000 ton, si se considera la captura y desembarque de alfonsino realizada durante 2003
(cerca de 9.100 ton). Como se verá más adelante (capítulo 6.6) una cuota de captura de
alfonsino de ese nivel es del todo improbable bajo cualquier escenario de análisis para la
situación actual del recurso. Por lo tanto, se debe descartar la posibilidad de someter a la
pesquería de alfonsino al régimen de desarrollo incipiente.
Atendiendo las consideraciones anteriores el régimen mas conveniente parea declarar esta
pesquería sería el de Plena Explotación; para lo cual es necesario demostrar, atendiendo el
diagnostico del recurso, que las capturas efectuadas se han extraído en cantidades superiores
a los excedentes productivos que genera el recurso.
Si bien los modelos utilizados no permiten el cálculo directo de los excedentes productivos del
recurso para evaluar la condición de plena explotación, un proxi de ellos es el nivel de
mortalidad por pesca FMSY, ya que representa la mortalidad por pesca que genera del recurso el
mayor rendimiento sostenible, o en palabras más simples, representa el nivel de esfuerzo que
permite la mayor captura del recurso en el largo plazo, considerando que éste esta en equilibrio.
Como se puede apreciar en los capítulos 6.1.1 y 6.1.3, el año 2001 la mortalidad por pesca
ejercida fue muy cercana al FMSY y los años sucesivos estuvo por sobre FMSY. En consecuencia,
existen elementos objetivos para declarar a la pesquería de alfonsino en estado de plena
explotación.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
30
6.3. Área de la Unidad de Pesquería
Para la fijación del área de la unidad de pesquería se ha tenido presente lo siguiente:
1. Distribución geográfica del recurso: como ya se mostró anteriormente (Fig. 3) el
recurso se distribuye en el Mar de Chile asociado a la costa continental desde Coquimbo
(29º57’ LS) hasta la XII Región (56º32’ LS) y en el área circundante al Arch. de Juan
Fernández e Islas Desventuradas.
2. Autorizaciones industriales de pesca: las autorizaciones industriales de pesca sobre
el recurso alfonsino (Fig. 8) cubren toda la Zona Económica Exclusiva continental e
insular, con énfasis en el área circundante a las Islas Oceánicas y la zona de la V
Región.
3. Principales zonas de pesca: descontando el área de la ZEE del Arch. de Juan
Fernández y el área correspondiente a las primeras 60 mn frente a la V Región, donde
históricamente se ha realizado el 80,67% y 15,61% de las capturas de alfonsino,
respectivamente, y acorde con el esquema de zonificación que utiliza el Sernapesca, las
principales zonas de pesca de alfonsino están localizadas en las zonas 114 a 118 y 150
(Fig. 19)
Como se puede apreciar de los antecedentes expuestos en los párrafos anteriores, el recurso
alfonsino, se distribuye y se captura desde la IV hasta la XII Región, incluyendo la ZEE
circundante al Arch. de Juan Fernández. Sin embargo, también se distribuye en el área de la
ZEE asociada a las Islas Desventuradas (ubicadas a la cuadra de la III Región), y es probable
que se encuentre frente a Taltal (II Región), ya que ahí se han identificado 5 montes
submarinos (72º29,30’ W y 27º31,35’ S; 72º15,12’ W y 25º27,79’ S; 72º50,83’ W y 25º21,99’ S;
75º09,33’ W y 25º23,15’ S; 77º16,18’ W y 25º45,15’ S) con características morfológicas
similares a otros donde se ha comprobado la presencia de alfonsino. También, en el área
marítima de la I Región existen algunos montes submarinos que aún no han sido explorados y
que representan áreas características de hábitat de alfonsino.
Lo anterior lleva a concluir que el área de la unidad de pesquería de alfonsino debiera
corresponder a la ZEE continental e insular, lo que se ve refrendado por el hecho de existen
autorizaciones de pesca para todas estas áreas.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
31
Figura 19. Localización de las principales zonas de pesca de alfonsino,
descontando el área 132 y 111, a partir del esquema de zonificación utilizado
por el Sernapesca.
6.4. Acceso a la pesquería
Como se ha mencionado anteriormente tan sólo 9 naves industriales han dado cuenta del
96,8% de las capturas históricas de alfonsino, y un total de 15 naves industriales da cuenta del
99,96% de las capturas históricas. Durante el 2003 (año en que se efectuó el mayor
desembarque histórico) estas 15 naves capturaron y desembarcaron sobre 9.100 ton de
alfonsino. Si se toma en cuenta que hay 59 naves industriales con autorización para capturar
alfonsino con arrastre, se tiene que el esfuerzo potencial que puede desplegar la flota industrial,
excedería con mucho los niveles máximos de captura y desembarque registrados hasta la
fecha.
Por otro lado, si se tiene en cuenta los excedentes productivos que ha generado el recurso (ver
sección 6.1.1) y que es capaz de producir en el corto plazo (ver sección 6.1.3), se aprecia que
hay una sobre capacidad de pesca industrial, sólo si se considera a la flota que efectivamente
realiza faenas de pesca significativas (15 embarcaciones). Ahora, si se considera a la flota
potencial que puede operar con redes de arrastre (59 naves), la capacidad de pesca de que
puede desplegar la flota excede con mucho las posibles cuotas futuras y los excedentes
productivos que es capaz de generar el recurso.
Por lo anterior, es altamente recomendable, cerrar el acceso a la pesquería a nuevas unidades
de esfuerzo ya sea industriales o artesanales, y buscar mecanismos que tiendan al
ordenamiento de la pesquería.
INFORME TÉCNICO (R. PESQ.) Nº 40
Declaración régimen Alfonsino
32
6.5. Objetivos y estrategia de manejo
Como se ha descrito anteriormente, desde el comienzo de su explotación el recurso ha
transitado hacia una condición de sobreexplotación, que ha sido manifiesta por la considerable
disminución de su biomasa y a través de la evaluación de los PBR contrastados con los Fcr. Es
necesario tener en cuenta lo anterior, pues a partir de esta condición es que se deben fijar
objetivos de manejo y estrategias de explotación, los cuales deben ser necesariamente
vinculantes a la condición inicial con la cual se comienza a administrar la pesquería
Atendiendo la baja resilencia del recurso y que las proyecciones de la biomasa bajo diferentes
criterios de explotación, no manifiestan recuperaciones de la misma a niveles superiores a los
observados en 2003 y años previos (Anon., 2004 y Fig. 15), el objetivo de manejo que se
plantea mantener los actuales niveles de biomasa en el corto y mediano plazo.
Para lograr el objetivo planteado considerando las características del stock (baja tasa de
renovabilidad, madurez sexual cercana a los 7 años, crecimiento lento, edad máxima de 19
años), una estrategia de explotación constante en el mediano plazo (5-7 años) resulta ser la
mas adecuada, la que debiera ser implementada a través del PBR o criterio de explotación o
F2/3MSY, de forma similar a la estrategia de manejo que se utiliza en Nueva Zelanda para el
mismo recurso. Adicionalmente, debiera considerarse un umbral de explotación, de tal modo
que la biomasa no disminuya a niveles indeseados, y debieran fijarse acciones de manejo en
caso que tal circunstancia se verifique. Un criterio ampliamente utilizado, y que se propone para
la administración de esta pesquería, es que la biomasa nunca sea inferior al valor que se
obtiene con FMSY; y en caso que esta situación se alcance, adoptar estrategias tendientes a su
recuperación como es el caso de vedas temporales y/o zonales.
6.6. Cuota de Captura 2004
Para determinar la captura biológicamente aceptable o captura total permisible (CTP) del año
2004 se consideraron las proyecciones que se derivan del primer modelo analizado. Los
criterios de explotación analizados fueron F2/3MSY como objetivo y FMSY como umbral no deseado.
Para aproximarse a la evaluación de riesgo en la estimación de la CTP, se consideró la
incertidumbre en la estimación de la biomasa virginal solamente.
Los resultados de esta proyección (Tabla 7) indican que la captura total permisible para 2004
debiera ser de 1.671 ton, considerando un riesgo de 10% de no cumplir el objetivo de manejo,
que es mantener la biomasa 2003. Por otro lado, una CTP de 2.470 pondría al stock en una
situación de serio riesgo, pues implica niveles de mortalidad por pesca cercanos al MSY,
situación limite y no deseada que podría implicar para 2005 la necesidad de establecer vedas,
por ejemplo.
Finalmente, dado el desconocimiento de importantes procesos biológicos de este recurso, dada
la longevidad relativamente alta de la especie, atendiendo el bajo nivel de resilencia, y
considerando que los resultados hasta acá mostrados corresponden a la primera aproximación
que se hace a la evaluación del recurso, es altamente recomendable adoptar una posición
precautoria, no solo en el objetivo de manejo, sino que además en el riesgo que se esta
dispuesto a asumir para no cumplir dicho objetivo. En otras palabras, no es conveniente
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considerar un riesgo superior al 10%, por lo que la cuota global anual de captura no debiera
exceder las 1.670 ton.
Tabla 7. Valores esperados de CTP 2004 de alfonsino en toneladas, para cada uno los
PBR y niveles de riesgo, considerando incertidumbre en la estimación de la biomasa virginal
(Bo). (Fuente: Anon., 2004)
PBR
F2/3 MSY
FMSY
0,1198
0,1797
10%
1.671
2.470
20%
1.821
2.687
Riesgo
30%
1.923
2.837
40%
2.015
2.973
50%
2.098
3.095
Atendiendo la carencia de piezas de información científica para una mejor comprensión de la
dinámica del recurso, se hace necesario reservar el máximo legal de la cuota global anual de
captura con fines de investigación; esto es un 5% de dicha cuota. Al mismo tiempo, se hace
necesaria la reserva de una fracción como fauna acompañante de otras pesquerías,
particularmente de la pesquería de orange roughy, en donde el alfonsino aparece
frecuentemente como fauna acompañante, por lo que el fraccionamiento propuesto de la cuota
2004 es el siguiente:
o
o
o
Cuota objetivo de la pesquería:
Cuota como fauna acompañante:
Cuota de investigación:
1.335 ton
250 ton
85 ton
No obstante lo anterior, durante el presente año se esta capturando alfonsino como fauna
acompañante de o. roughy, por lo que todas esas capturas deberán imputarse a las 250 ton
consignadas en el presente informe como fauna acompañante, de tal manera de no exceder la
cuota global anual de captura recomendada para 2004.
7. CONCLUSIONES
7.1. Del diagnóstico del recurso
-
La CPUE como índice de abundancia ha disminuido en un 30,5% entre 2000 y 2003.
-
La mayoría de los indicadores relativos a la talla de los ejemplares de alfonsino
muestran una situación preocupante, en que se evidencia una disminución general en la
talla de los individuos capturados, al comparar la temporada de pesca 2002 y 2003.
-
Coincidentemente con lo anterior, el peso promedio de los ejemplares en las capturas ha
disminuido en cerca de un 40% entre la temporada 2002 y 2003, lo que implica que para
lograr un mismo nivel de captura en peso se requirió de la extracción de más ejemplares
durante 2003.
-
Durante 2003, al igual que temporadas anteriores, no se logró constatar ni zonal ni
temporalmente el proceso de desove de esta especie.
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34
-
Los modelos de evaluación considerados muestran que el stock ha transitado hacia
niveles cercanos de sobre-pesca por reclutamiento, lo que se manifiesta en que las
mortalidades por pesca anuales se han acercado a niveles críticos (FMSY).
-
La biomasa del stock de alfonsino se ha reducido considerablemente a valores al menos
de un 67% de su biomasa original.
-
El stock estima una reducción considerable en el número de reclutas que ingresan a la
pesquería, lo cual representa una situación preocupante, debe tenerse presente que
esta la estimación de esta variable representa un alto nivel de incerteza.
7.2. De la administración de la pesquería
-
Los análisis efectuados permiten concluir que con las unidades de pesca que
actualmente operan (y más aún con las potenciales) los excedentes productivos estarían
siendo extraídos en su totalidad, por lo que se recomienda declarar a pesquería en
estado de plena explotación, y cerrar el acceso a nuevas unidades de pesca.
-
El área de la unidad de pesquería de alfonsino corresponde a la Zona Económica
Exclusiva de Chile continental e Insular.
-
Atendiendo la condición del recurso, el objetivo de manejo es no disminuir la biomasa a
niveles inferiores a la actual y procurar su mantención en el corto y mediano plazo, para
lo cual se debe utilizar un criterio de explotación F2/3MSY.
-
Para 2004, la cuota global anual de captura que mantiene los niveles de biomasa es de
1.670 ton, considerando un 10% de riesgo de no cumplir dicho objetivo.
-
El fraccionamiento de la cuota global anual de captura de alfonsino para el 2004
corresponde al siguiente:
o
o
o
Cuota objetivo de la pesquería:
Cuota como fauna acompañante:
Cuota de investigación:
1.335 ton
250 ton
85 ton
-
Las capturas que se realicen durante el presente año (como fauna acompañante) antes
de la fijación de la cuota de 1.670 ton, deben ser descontadas de las 250 ton, con el fin
de que la captura y desembarque total 2004 no sobrepasen la cuota recomendada.
-
En atención a que hasta enero de 2005 no se dispondrán de nuevos antecedentes de
esta pesquería, es conveniente fijar la misma cuota global anual de captura para 2005,
sujeta a una revisión a efectuarse durante el primer cuatrimestre de 2005.
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8. RECOMENDACIONES
En atención a los análisis efectuados y las conclusiones que de estos se derivan se
recomienda:

Declarar la pesquería de alfonsino en estado de plena explotación;

Fijar el área de su unidad de pesquería como la correspondiente a la Z.E.E. continental
e insular;

Cerrar el acceso a nuevas unidades extractivas industriales y artesanales;

Fijar una cuota global anual de captura para el año 2004 de 1.670 toneladas;

Fraccionar dicha cuota en 1.335 ton como cuota objetivo, 250 ton como fauna
acompañante y 85 ton con fines de investigación; y,

Descontar las capturas y desembarques efectuados durante el presente año como fauna
acompañante, de las 250 ton consignadas en el punto anterior.

Fijar una cuota global anual de captura para el año 2005 de 1.670 toneladas, con igual
distribución que en 2004, sujeta a una revisión a efectuarse durante el primer
cuatrimestre de 2005.
Mauricio Gálvez L.
C:\Mauricio Galvez\besugo\RPESQ040-2004 Plena explotacion de Alfonsino.doc
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