COLONIA CAROYA Página 1 INFORMACIÓN GENERAL Y TURÍSTICA AÑO 2010/2011 pág 03 Ubicación Geográfica pág 04 Rutas de Acceso pág 05 Actividades Económicas pág 05 Colonia Caroya “Histórica – Cultural” pág 06 Colonia Caroya “Religiosa” pág 07 Colonia Caroya “Rural” pág 09 Colonia Caroya “Gastronómica” pág 10 Colonia Caroya “Enológica” pág 12 Colonia Caroya “Deportiva” pág 13 Colonia Caroya “Fiestas Tradicionales” pág 13 Atractivos Turísticos Regionales pág 14 Estancias Jesuíticas y Museos Regionales pág 16 Alojamientos Colonia Caroya y Jesús María pág 17 Bodegas y Elaboradores de Vinos Caseros pág 18 Servicios Gastronómicos pág 19 Elaboradores y Ventas de Salames pág 20 Empresas, Pymes y Productores Varios pág 21 Calendario de Eventos 2011 pág 22 Información General (Servicios Varios) pág 23 Información General (Clubes, Asociaciones y Grupos Culturales) pág 24 Página Reseña Histórica 2 ÍNDICE Reseña Histórica COLONIA CAROYA se asienta sobre parte de las tierras denominadas originariamente Caroya o Caroyapa, que antiguamente pertenecían a los sanavirones y luego fueron adquiridas por la Compañía de Jesús. Se estima que hacia 1616 comenzó a construirse la Estancia, primer núcleo productivo del sistema organizado por los jesuitas en la provincia de Córdoba. Culminada la guerra de la independencia, una vez organizado el país y ante la necesidad de la apertura a la inmigración para el poblamiento del territorio nacional, durante la presidencia del Dr. Nicolás Avellaneda se promulgó la Ley que dispuso la fundación de una colonia agrícola ocupando las tierras de la Estancia de Caroya. El 15 de marzo de 1878 llegaron aproximadamente 60 familias de inmigrantes friulanos (provenientes de la Región del Friuli, noreste de Italia) quienes vivieron en la Estancia de Caroya hasta que pudieron tomar posesión de sus tierras, que eran "monte virgen", sin agua, completamente aislado de lo que eran los centros poblados y sin la posibilidad de contar con los servicios mínimos. Para los primeros colonos nada fue fácil, desde entonces caracterizó a este pueblo el trabajo, el sacrificio y una profunda fe en Dios. Con tenacidad vencieron obstáculos como la epidemia de cólera, la sequía, el granizo, la viruela. Hubo que desmontar, construir las viviendas, diseñar y trazar la red de acequias, labrar la tierra, todo con precarias herramientas y así fue que con trabajo y alegría se fue gestando el pueblo caroyense, hoy convertido en una ciudad con más de 20.000 habitantes, quienes luchan día a día para mantener vivas las tradiciones heredadas de los abuelos. Viejas casonas fueron fieles testigos de las reuniones que se realizaban una vez a la semana con familiares o vecinos con el fin de cantar, bailar y recordar a su Italia natal, era la oportunidad en la que se compartía algún salame, bondiola o pasta, acompañado por un vino, todo elaborado en casa. El sentir de pueblo caroyense está fuertemente ligado a los usos, costumbres y tradiciones ancestrales, las que se reflejan en el desarrollo social, económico y cultural del mismo. De generación en generación fueron transmitiéndose conocimientos y técnicas aplicadas a la producción de chacinados, conservas y vinos; de igual manera llegaron a través del tiempo hasta nuestros días las canciones, canzonetas, juegos y un particular lenguaje: el “furlan”, lo que se puede vivenciar en ocasiones donde se reúne la comunidad caroyense, como las Fiestas que se realizan durante el año. Página 3 “Colonia Caroya, multicultural desde su origen Colonia: receptora de inmigrantes europeos; Caroya: palabra de raíces quichuasconstituye una síntesis del legado de la inmigración italiana, enriquecido con elementos del pasado jesuítico, de la cultura criolla y el aporte de las inmigraciones actuales.” Ubicación Geográfica Colonia Caroya está ubicada en la provincia de Córdoba, en el departamento Colón, sobre la Ruta Nacional Nº 9 (Norte), 50 Km. al norte de la ciudad de Córdoba, capital de la provincia. Página 4 Junto a las localidades vecinas de Jesús María y Sinsacate forman parte de la Córdoba Norteña, una de las regiones más fascinantes y menos exploradas del territorio provincial. Rutas de Acceso Ruta Nacional Nº 9 o Panamericana: comunica a Colonia Caroya con Córdoba capital y con el Norte Argentino. Desde el km 743 de la mencionada Ruta se puede ingresar a la ciudad por calle Pedro Patat y desde el km. 751 por Avenida San Martín. La Ruta 9 conecta a Colonia Caroya con el aeropuerto internacional Ingeniero Taravella, el cual se encuentra a una distancia de 58 Km; Ruta Provincial A – 74: une a Colonia Caroya con la localidad de Colonia Tirolesa y posteriormente con Córdoba capital; Ruta Provincial E – 66: comunica a Colonia Caroya con la localidad serrana de Ascochinga, punto en el cual se une con la ruta Provincial E – 53, que llega hasta la ciudad de Córdoba luego de atravesar importantes localidades del Área Turística Sierras Chicas tales como La Granja, Agua de Oro, Salsipuedes y Río Ceballos. Actividades Económicas El sistema productivo de Colonia Caroya se basa en minifundios constituidos por pequeñas parcelas, cuya superficie está comprendida entre las 2 y las 24 hectáreas. El clima templado, con una temperatura media anual de 15º C y un promedio anual de precipitaciones de aproximadamente 826 mm, las tierras de estructura franco-arcilloarenoso, de muy buena fertilidad - 80% de las cuales están bajo riego - son muy apropiadas para los cultivos frutihortícolas. La producción actual está orientada a viñedos, frutales y algunas hortalizas en sistema extensivo tales como batata, ajo y papa. También se observan cultivos bajo cubierta y producciones orgánicas. El cultivo de la vid y la producción de vinos datan de épocas anteriores a la llegada de los jesuitas, quienes aumentaron las plantaciones en la vecina Estancia Jesús María. La vitivinicultura fue retomada por los friulanos a partir de su llegada a Caroya, convirtiéndola en la principal riqueza y potencial económico de la zona hasta la década del ’70. Actualmente la producción alcanza los 2.000.000 de kilogramos de uva en aproximadamente 200 hectáreas, trabajadas por unos 60 productores. En lo que respecta a la ganadería, existen en la localidad establecimientos pequeños y medianos dedicados a la producción de ganado menor; cerdos, conejos y aves de corral. La ciudad es residencia de productores agro-ganaderos, los que comercializan sus productos a través de empresas acopiadoras y ferias, algunas de ellas radicadas en su éjido. Existen además dos Grandes Empresas: GUMA, dedicada a la fabricación de artículos de limpieza y tocador -proveedora de firmas internacionales y con importante inserción en el mercado interno y externo- es la única empresa del sector que no fue absorbida por las líderes internacionales y la empresa ARCOR dedicada a la elaboración de chocolates destinados al mercado interno y a la exportación. Estas tres empresas y la auto-partista WMW INTERNATIONAL, radicada en la vecina Jesús María, generan una gran demanda de mano de obra local y regional. Página 5 Las fábricas de cerámica roja, de distintos tamaños e inversión en tecnología, constituyen otra de las actividades tradicionales de Colonia Caroya. En el sector alimentos, es muy representativa la producción de chacinados ya que los salames de Colonia Caroya son conocidos en todos los rincones del país. Actualmente se elaboran más de 515 toneladas al año, lo cual permite la creación de más de 130 empleos directos. Un importante medio de vida de la población es la elaboración de dulces, conservas, encurtidos, alfajores, repostería, panificación, pastas, vinos y miel con características artesanales, los que conjuntamente con los salames son comercializados a pobladores y visitantes. En elaboración de alimentos fortificados, se destaca NUTRICIÓN DE VIDA. Pequeñas, medianas, grandes industrias y emprendimientos tales como: granjas, bodegas, elaboradores de chacinados, vinos caseros, dulces y encurtidos, fábricas de cerámica roja, tutucas, milanesas de soja, etc. abren sus puertas a los turistas y ofrecen a contingentes, principalmente grupos escolares, la posibilidad de realizar visitas guiadas dentro de sus instalaciones. Colonia Caroya “Histórica – Cultural” Estancia Jesuítica Caroya Construida desde 1616, fue el primer establecimiento rural instalado por la Compañía de Jesús en la provincia de Córdoba. Posteriormente, desde 1814 hasta 1816 se convirtió en la primera Fábrica de armas Blancas del país y finalmente fue la primera morada de los inmigrantes italianos que llegaron desde 1878 a poblar la Colonia. El conjunto comprende: la residencia organizada alrededor de un patio central, la capilla, el perchel, el tajamar, los restos del molino, acequias y áreas dedicadas a quinta. Actualmente es sede del Museo Provincial Casa Histórica de Caroya, posee una interesante colección de objetos de las distintas épocas históricas y es escenario de diferentes eventos culturales. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2000 constituye, junto a las Estancias Jesuíticas de Jesús María (1618) y Santa Catalina (1622), el principal atractivo para el turismo internacional hacia nuestra zona. Dirección: Ruta E-66 s/n (camino a Ascochinga), T.E. 03525-462300. Museo Casa Copetti Este Museo de la Friulanidad funciona en la que fuera una de las primeras viviendas de Colonia Caroya, construída en 1896 por la familia Copetti, con características propias de la arquitectura popular italiana. Actualmente restaurada y declarada Monumento Histórico, en sus salas se pueden apreciar elementos de la vida cotidiana de las familias de la época. En su interior y patios se llevan a cabo importantes eventos culturales. Dirección: Calle 60 (Santina Canale) Nº 590. (alt. Av. San Martín al 5200) T.E. 03525-465555. Avenida San Martín Página 6 Antiguamente denominada “la Calle Ancha” -con un largo total de 11 km- delimita un asentamiento lineal dando un concepto de poblado novedoso, diferente a otros asentamientos urbanos de origen español. La calle avenida fue el origen y soporte del actual asentamiento urbano. Con el tiempo concentró las actividades y absorbió el crecimiento poblacional, donde se asentaron tres centros denominados Lote XI, Lote XIII Y Lote XV. Cubierta casi en su totalidad por frondosos plátanos de vida centenaria -que forman un túnel muy fresco en verano y colorido en otoño- despierta el asombro de quienes nos visitan. Estos fueron plantados por iniciativa del Intendente Céspedes a partir de 1915 comenzando de Oeste a Este y se pueden encontrar, en los primeros tramos, troncos de más de 4 metros de diámetro. Esta calle es el eje alrededor del cual gira la vida de la Colonia desde antaño. Constituye el ámbito de reunión por excelencia, ya que en ella se celebran las principales fiestas populares. Fue declarada Monumento Histórico Municipal. Monumento al Inmigrante Próximo al ingreso sud-este de la localidad se encuentra el Monumento al Inmigrante, que representa a un matrimonio de colonos señalando la“Tierra Prometida” y fue construido en 1978, con motivo de conmemorarse el Centenario de la ciudad. Dirección: Av. San Martin 7400. Plaza Nicolás Avellaneda Ubicada en el centro de Colonia Caroya, esta plaza constituye el principal espacio verde y recreativo en el área urbana de la localidad. Construida en el año 1941, marcó el inicio de un proceso de transformación de la imagen urbana de Colonia Caroya, dejando de lado el legado del territorio europeo y tomando el modelo norteamericano como sinónimo de progreso y modernidad. Sobre la misma se llevan a cabo diferentes eventos comunitarios como la Fiesta Provincial de la Vendimia y Nacional de la Frutihorticultura y alrededor de ella se viven los Carnavales Caroyenses, los desfiles cívico militares y otras manifestaciones culturales. Dirección: Av. San Martin 3900. Casa de La Cultura Ubicada en el antiguo edificio donde funcionara la sede municipal por más de setenta años -desde 1890 hasta 1964- hoy es sede de la Escuela Superior de Música de Colonia Caroya, las Bibliotecas Filomena Rossi y María Elena Walsh y la Sala de Exposiciones, un espacio recientemente creado para apreciar el arte contemporáneo. Dirección: Av. San Martin 3697. Colonia Caroya “Religiosa” Los friulanos fundadores de Caroya eran profundamente católicos. En los primeros tiempos, después de trabajar todo el día en el desmonte de los terrenos que les habían adjudicado, regresaban a la Estancia de Caroya, donde compartían la comida y rezaban cada noche el Santo Rosario. Página 7 Los domingos, días de descanso y fiestas de guardar, la concurrencia a misa era una obligación ineludible para grandes y chicos. Cuando finalmente tuvieron sus casas, siguieron concurriendo a misa en la capilla de la Estancia, trasladándose a pie o en improvisados carruajes. Ese grupo de pioneros ha dejado una preciada herencia a sus descendientes, la fe religiosa, la cual se manifiesta con la presencia, en varios sectores del territorio caroyense, de capillas rurales, oratorios familiares y el imponente Templo Parroquial, que fue construido con sus propias manos. Capilla de Nuestra Señora del Rosario de Tronco Pozo Construida por un grupo de vecinos entre 1882 y 1883 y actualmente declarada Monumento Histórico, fue la primera capilla que tuvo Colonia Caroya, donde aún hoy se conserva una imagen de la Virgen del Rosario, traída en un baúl desde Udine, Italia, en 1878 por los primeros colonos. Dirección: calle Pedro Patat (Sur) Nº 1209. Parroquia Nuestra Señora de Monserrat Este templo de grandes dimensiones, construido ente 1888 y 1896, está dedicado a la veneración de la Virgen de Monserrat. En todo su interior hay pinturas murales, destacándose las de la nave central, realizadas por el pintor Carlos Camilloni, que cuentan la historia de los primeros años del asentamiento, en el orden de las oraciones del Ave María. Dirección: Avda. San Martín Nº 3720, T.E. 466245. Oratorio de San Roque Este oratorio familiar, de pequeñas dimensiones, cuenta con un altar con la imagen del Santo Homónimo. Fue construido en 1898 por el señor Antonio Taca, antiguo dueño de la vivienda frente a la cual se encuentra el mismo. Dirección: Avda. San Martín Nº 2300. Iglesia del Santísimo Rosario Fue construida gracias al trabajo de los vecinos entre los años 1891 y 1930. En 1913 se incorporó al conjunto el Retiro del Santísimo Rosario. Desde 1909, con la llegada de los Padres Pasionistas a Colonia Caroya se instaló en el lugar un colegio de enseñanza primaria para varones, el “Colegio San Gabriel”, que funcionó hasta 1944 y en él se educaron muchos caroyenses. Dirección: Avda. San Martín Nº 836 Cristo de la Hermandad Esta obra de arte, ubicada en una plazoleta que lleva su nombre y que representa a Cristo en la Cruz, se destaca por ser la talla en madera de mayor tamaño realizada en una sola pieza, motivo por el cual se encuentra incluido en el libro de Records Guinnes. Dirección: Maestra Olga Prosdócimo N° 2646. Capilla de Nuestra Sra. de Fatima Construida en 1956, presenta una arquitectura sencilla, con fachada de ladrillo sin revoque. En el frente se erige una torre con el campanario. Está ubicada en el Barrio Rural Puesto Viejo Dirección : Calle 124, entre calles 72 y 76. Capilla Virgen Del Valle Página 8 Edificio de arquitectura simple, construido en el Barrio Estación Caroya. Dirección Ruta 9 km. 748. Colonia Caroya “Rural” En forma perpendicular a la Avenida San Martín, parten diferentes caminos que posibilitan el acceso a la zona rural de Colonia Caroya. Un recorrido por estos caminos permite disfrutar de un paisaje singular, constituido por diferentes elementos: el lote, las acequias, las viviendas, las capillas, cuya especial forma de relación es la que da al paisaje una identidad local. El Lote Constituyó un módulo que se fue repitiendo y dibujó el territorio a través de sus límites, calles, verdes y canales. En un comienzo el 100% del ejido municipal estuvo destinado a la explotación agrícola y se subdividió en lotes de 1.000 m x 1.000 m, según estaba previsto en la Ley 774 de 1876, dictada por el Presidente Avellaneda. Con el tiempo el lote original se fraccionó en 4 unidades de 500 m por 500 m, conformación que se mantiene hasta la actualidad. Las Acequias Los primeros inmigrantes y sus descendientes realizaron, a principios del siglo pasado, una obra de ingeniería realmente admirable para la época, los canales Huergo y San Carlos, destinados a la captación de aguas subterráneas para proveer del vital elemento tanto para consumo como para riego a toda Colonia Caroya y zonas aledañas, recurso que era por entonces muy escaso. Actualmente, los canales siguen funcionando y el agua que extraen llega a la planta potabilizadora y a las distintas parcelas de cultivo por medio de un complejo sistema de canales a cielo abierto denominados “acequias”, distribuídos por todo el territorio y que se pueden ver a ambos costados de la Avenida San Martín y en la zona rural, constituyendo uno de los límites del lote. Muchas de ellas están rodeadas de bellas calas y flores silvestres que hacen del entorno un paisaje encantador. La Vivienda Es otro de los elementos con los que se construye la identidad del territorio caroyense. Las casas se edificaron vecinas a la calle y próximas a la toma de agua, con fachadas cerradas para protegerse del viento sur y con galerías que se asomaban al patio. La vivienda es un componente integrante de una estructura mayor a la que los Arq. Hugo Peschiutta y Javier Cormenzana en su tesis de grado (1985-1986) llamaron “unidad de producción”. La vivienda se compone de un conjunto de elementos que se reúnen en torno al patio a los que suma el área de cultivo, territorio de explotación agrícola intensiva. A medida que crecían las familias crecieron las viviendas y se construyeron en “L”o en “U”, estando siempre presente el patio, al cual se asoman las galerías, los depósitos, la “stale” (lugar de depósito de cereales), la poza, la huerta, el aljibe y el horno de pan. En las viviendas están presentes la “cantine” (lugar de producción y depósito del vino) y el “fogolar” (lugar del fuego, de la cocción de alimentos y de la reunión familiar). Página 9 Estos elementos otorgan un carácter local a la vivienda rural de Colonia Caroya y dan cuenta de la íntima relación del hombre con el trabajo de la tierra y de la adaptación de los saberes de los inmigrantes a las nuevas condiciones climáticas, topográficas y ambientales. Las Capillas rurales eran construcciones muy simples, que se realizaron adaptando los saberes traídos del país de origen y utilizando los recursos del nuevo territorio. El Barrio Rural: Los denominados “barrios rurales” en Colonia Caroya, no son otra cosa que fracciones destinadas a la producción frutihortícola que históricamente se fueron consolidando como centros de servicios. Tal es el caso de Tronco Pozo, Puesto Viejo, Los Chañares, San Durí (o Colonia Vicente Agüero) Estos barrios no tienen límites precisos pero sí es posible identificar un núcleo compuesto generalmente por la capilla, la escuela, el almacén, etc. El modo de agrupación de los habitantes de estos barrios tiene que ver más con el origen de los mismos que con cualquier cuestión geográfica. Puesto Viejo, por ejemplo, es un barrio de friulanos mientras que en Tronco Pozo predominaron los pobladores de origen véneto. Colonia Caroya “Gastronómica” Colonia Caroya conserva una tradición gastronómica en la cual está presente la herencia italiana ligada a la necesidad de supervivencia en el nuevo territorio. Claro ejemplo de ello son los salames de la colonia, las pastas, platos típicos, conservas y dulces, elaborados con viejas recetas familiares. Cada receta da testimonio de una historia ligada a la costumbre y a la tradición, donde cocina friulana e ingredientes propios del lugar se conjugan para generar platos únicos, que solo pueden saborearse en Colonia Caroya, tales como: Rognose: revuelto de salame, cebolla y huevo; Frico: tortilla de quesos, papas y cebolla; Brovade: preparado a base de nabos y vinagre; Muset cun la Brovade: codeguines y carne de cerdo con brovade; Frisoriade: salame frito en vinagre; Lujanie cun la Polente: chorizo con polenta; Lidríc cun cicinis: achicoria con daditos de tocino fritos en vinagre; Polente rustide: polenta blanca tostada. EL SALAME DE LA COLONIA: Un sabor ÚNICO y con historia… Desde los orígenes de la Colonia, las familias inmigrantes y sus descendientes debieron trabajar duro para obtener su sustento. Página 10 La carencia los marcó profundamente y es por ello que con frutas y verduras elaboraban conservas y con carne de cerdo y vaca hacían embutidos para conservarlas y de esa manera tener alimentos para la familia durante todo el año. El embutido más representativo y tradicional del pueblo Caroyense es el salame, elaborado con la receta italiana, a la que se le agregó el sabor de las carnes argentinas. Este embutido se realiza con carne de cerdo, vaca, tocino y condimentos, y se guarda cual tesoro en los sótanos, donde se madura hasta alcanzar el punto óptimo para su consumo. Debido a que las condiciones ambientales reinantes en Colonia Caroya eran muy diferentes a las que había en su tierra de origen - tales como temperaturas más elevadas y mayor humedad relativa en época estival- los colonos debieron construir ambientes especiales en sus viviendas denominados sótanos, los cuales brindaban mejores condiciones para el mantenimiento de todo tipo de alimentos. Con el tiempo se fue perfeccionando la construcción de sótanos -con dobles paredes de material y ventilaciones estratégicamente colocadas- y se utilizaron métodos caseros de control de temperaturas y humedad tales como la aplicación de paños húmedos para aumentar la humedad o el uso de brasas para disminuirla. Pero en cada sótano se genera un microclima, de manera tal que cada salame adquiere un sabor particular, diferente no sólo al elaborado en Italia, sino también al de otros productores cuyos sótanos tienen distintas condiciones ambientales. Esto ha hecho que el salame de Colonia Caroya posea características que lo hacen único y que dependen exclusivamente del territorio en el que se produce, del sótano en el que madura y de los saberes de los productores, heredados de los inmigrantes friulanos y transformados en la comunidad local: el saber elaborar, el saber detectar el grado de maduración en base a la observación y al tacto, el saber degustar y todos los demás saberes asociados a estos procesos. Por qué y para qué es importante construir una INDICACION GEOGRAFICA para el SALAME DE COLONIA CAROYA El salame de Colonia Caroya es un producto reconocido a nivel nacional, con un importante anclaje cultural en la comunidad. Esta circunstancia motivó que en el año 2006 el Municipio y los elaboradores locales comenzaran un proceso de construcción de una Denominación de Origen, para protegerlo de peligrosas imitaciones. Con respecto a la percepción de los turistas, en un estudio de demanda real realizado en la temporada estival 2009/2010 se les pidió que dijeran tres palabras que acuden a su mente cuando piensan en Colonia Caroya. La palabra que más dijeron, con una amplia diferencia sobre las demás fue “salame”, que se asocia directamente a la imagen de la localidad. Cabe destacar que diferencian claramente salame de otros fiambres. A fines del año 2008 se involucró el INTA –a través del proyecto AETA 2686- y se realizó un primer diagnóstico que permitió identificar los principales factores territoriales que confieren tipicidad al producto: saberes empíricos heredados de los inmigrantes friulanos transformados y adaptados en la comunidad local. Página 11 Se determinó también la no pertinencia de construir una Denominación de Origen, la cual exige que todas las etapas del proceso, inclusive la producción de las materias primas, deben tener origen en la localidad. Pero, el renombre del que goza el salame de Colonia Caroya a nivel nacional y las numerosas usurpaciones de imagen de la que es objeto este producto a lo largo del país, justifica, para los elaboradores y el Municipio local, la puesta en marcha del proceso de construcción de una Indicación Geográfica (IG). Una IG identifica un producto como originario de un territorio, cuando determinadas características del mismo sean atribuibles fundamentalmente a su origen geográfico. Colonia Caroya “Enológica” El cultivo de la vid y la producción del vino en nuestro país comenzaron en la provincia de Córdoba. Las bondades de su suelo y clima permitieron que esta tierra fuera apta para este cultivo. Las primeras cepas fueron traídas por los españoles desde Perú y fueron implantadas en Santiago de Estero donde no prendieron las cepas y en distintas zonas de la provincia Córdoba donde si se desarrollaron en forma exitosa. En 1616, los Jesuitas instalaron la Estancia La Merced en Caroya y la Estancia San Isidro en Jesús María, donde se encontraron con plantaciones de vides y bajo su dirección aumentaron la producción y construyeron una bodega, en la cual elaboraron con uva moscatel un vino dulce -el lagrimilla de oro– que fue servido en la mesa de los Reyes de España. Al llegar los friulanos a Caroya en 1878 encontraron aún algunos viñedos, fueron probando distintos cultivos y en pocos años se dieron cuenta que la vid era el que daba mejores resultados. Entonces intensificaron esa producción y luego de años de intenso trabajo comenzaron a recoger los frutos de su labor y en sus bodegas familiares elaboraron, con la uva chinche o Isabella, el vino frambua, producto característico de la localidad. A partir del año 1997 se puso en marcha el proceso de Reconversión Vitivinícola, mediante el cual se importaron del Friuli –Italia- 60.000 cepas de diferentes variedades de vides tales como: Cabernet Sauvignon, Malbec, Merlot, Ancellotta, Syrah, Chardonnay, Sauvignon Blanc, Malvasia Istriana, Trebbiano que tuvieron una rápida adaptación al clima y al terruño de la Colonia. Paralelamente se llevó a cabo un proceso de capacitación y viajes de intercambio de varios productores que tuvieron la posibilidad de mejorar las técnicas de manejo de viñedos y vinificación. Los vinos elaborados por bodegas y productores de vino casero de Colonia Caroya una de las pocas localidades de la provincia donde se producen vinos- han obtenido en estos últimos años importantes distinciones en prestigiosos concursos nacionales. Caminos del Vino La provincia de Córdoba se ha incorporado recientemente a los Caminos del Vino de Argentina. Colonia Caroya concentra –dentro de la provincia- la mayor cantidad de bodegas y productores de vino casero. Con el objetivo de seguir fortaleciendo la industria y en pos de generar mayor valor agregado a la actividad, es que las bodegas, productores de vinos caseros, elaboradores de chacinados y otros prestadores de servicios de la localidad están comenzando a trabajar en conjunto para brindar una experiencia única al viajero motivado por el gusto de una buena mesa. Página 12 Dentro del recorrido se podrá participar de las actividades propias en las quintas de vides de acuerdo al ciclo de producción, realizar actividades recreativas, degustar vinos de alta gama en catas dirigidas, probar el único espumante en la provincia realizado con el método champenoise, disfrutar de un almuerzo con recetas típicas de la Región del Friuli, vivenciar la tranquilidad de la zona rural y compartir una merienda con masas, dulces y pan casero, en una granja o en el sótano de una antigua bodega; además de conocer íntimamente la elaboración de salames caseros. Para hacer realidad esta experiencia, se proponen tres circuitos de día completo. Por consultas e informes relativos a este producto se debe llamar al Nº 03525-463868 ó 0352515548906 Colonia Caroya “Deportiva” Complejo Deportivo Mecánico Valentín Lauret está ubicado en un predio de 17 has., trazado sobre un terreno con pequeñas elevaciones, por lo cual tiene una forma particular. Está integrado por el Autódromo Valentín Lauret, en cuyo circuito se llevan a cabo numerosas competencias de automovilismo tales como: zonalazo y carreras de karting en tierra y por el Kartódromo Caroya, especialmente diseñado para los amantes de estas competencias deportivas. Los diferentes clubes de la ciudad cuentan con infraestructura necesaria para la práctica de diversas actividades deportivas y recreativas tales como: bochas, futbol, gimnasia, básquet, paddle, vóley, tenis, club de tiro, pileta y dentro de los mismos se realizan encuentros deportivos y competencias en las diferentes categorías. Para mayor información se sugiere consultar en página 24. Colonia Caroya “Fiestas Tradicionales” Fiesta Provincial de la Vendimia y Nacional de la Frutihorticultura: Esta fiesta se realiza cada año, al concluir la cosecha de la uva, generalmente en la primera quincena del mes de marzo. El objetivo del evento es homenajear a los inmigrantes italianos que fundaron la localidad y mantener vivas las tradiciones friulanas, a través de la música, la danza y la gastronomía típica. Sagra Nacional de la Uva: Se realiza cada año, al día siguiente de la Fiesta de la Vendimia. Este evento tiene origen religioso puesto que los fundadores de Colonia Caroya tenían una especial devoción por la Virgen y por ello participaban (en su tierra natal) de todas las celebraciones en su honor, las que se realizaban en distintos pueblos, a los cuales debían asistir salvando grandes distancias, en precarios medios de transporte. Por ello, como la jornada era larga, llevaban consigo comida y bebida para pasar el día. Al mediodía se hacía SAGRA, (del latin: SACRUM, que significa sagrado) que consistía en almorzar compartiendo lo que habían llevado, cantando y bailando hasta el caer de la tarde. Al llegar a la Argentina, continuaron con esta costumbre y actualmente la Sagra de la Uva conserva el espíritu originario: se trata de una gran reunión familiar y de amigos, que se realiza frente a la Casa del Friuli, sobre la Avenida San Martín, bajo la sombra de los plátanos. Fiesta de las Comidas Típicas Caroyenses: Página 13 Tiene lugar en el mes de julio durante las vacaciones de invierno y ofrece a los visitantes la posibilidad de degustar la tradicional gastronomía caroyense, al tiempo que se disfruta de danzas y canciones italianas. Fiesta del Salame Casero: Esta fiesta, generalmente se realiza en el mes de octubre en el Club Juventud Agraria Colón y consiste en un almuerzo acompañado de un espectáculo de danzas, música y canto típicamente italianos. El objetivo de la misma es promocionar los chacinados caroyenses, en especial el salame. Además de las Fiestas descriptas, Colonia Caroya cuenta con un nutrido calendario de eventos durante todo el año. El calendario para el año 2011 se puede consultar en página 22. Atractivos Turísticos Regionales Circuito de Estancias Jesuíticas Además de la Estancia Jesuítica de Caroya (1616), en la zona se encuentran otros dos establecimientos que pertenecieron a la Compañía de Jesús, declarados Patrimonio de la Humanidad por UNESCO (2000). o Estancia Jesuítica Jesús María Esta estancia fue el segundo núcleo productivo del sistema organizado por la Compañía de Jesús a partir de 1618. La misma se caracterizó por su producción vitivinícola, ya que fue entre los muros de su bodega, donde se elaboró el primer vino América del sur servido en la mesa de los Reyes de España. Actualmente, el museo circunscribe la iglesia, la residencia y la bodega, restos de antiguos molinos, el perchel y el tajamar. o Estancia Jesuítica Santa Catalina La Estancia Jesuítica Santa Catalina, fundada en 1622, es la más grande de todas las estancias de la provincia. Fue el gran centro de producción agropecuaria, con miles de cabezas de ganado vacuno, ovino y mular. Actualmente, el conjunto comprende la iglesia, con su imponente fachada barroca, la residencia con sus tres (3) patios, las ruinas del noviciado, la ranchería, el tajamar, restos de acequias y molinos. Posta de Sinsacate Muy cerca del Museo Jesuítico de Jesús María, en la localidad de Sinsacate se encuentra el “Museo Rural Posta de Sinsacate”, cuya popularidad se debe a que en la capilla de la misma, fueron velados los restos de Juan Facundo Quiroga, asesinado en el cercano paraje de Barranca Yaco. Es un monumento de gran valor, por cuanto ocupa una importante página de la historia de nuestra provincia y nuestro país. Córdoba Norteña Página 14 Colonia Caroya es la puerta de entrada sur a Córdoba Norteña, una de las regiones más fascinantes y paradójicamente menos exploradas del territorio provincial. Esta región se oculta tras los mágicos senderos de la historia, en la mirada y la amistad de su pueblo, en las milenarias escrituras de sus laderas y en la mano de los lugareños que desde una galería de adobe nos ofrecen un mate y con él las historias y leyendas de esta fantástica región. La magia Córdoba Norteña sólo se brinda a aquellos que saben buscar su historia e identidad cultural. Implicados en el desarrollo de la región y revalorización del patrimonio histórico, cultural y natural, surge la necesidad de un trabajo territorial; así juntos los municipios de: Colonia Caroya, Jesús María, Sinsacate, Villa del Totoral, Deán Funes, Quilino, Las Peñas, Villa del Valle de Tulumba, San Francisco del Chañar, San José de la Dormida y Villa De María del Río Seco y las comunas de: San Pedro Norte, Caminiaga, Santa Elena y Cerro Colorado nos invitan a: Recorrer los rojos senderos de la Reserva Cultural y Natural de Cerro Colorado, descubrir como en sus laderas, entre la frondosa vegetación, nacen las imágenes que fueron plasmadas hace más de mil años por los pobladores originales de esas tierras. Caminar por las empedradas calles de Villa de Tulumba, descubrir los antiguos pueblos y templos que se alzan en el trazado del Camino Real al Alto Perú, llegar al paradero de prestigiosos artistas que eligieron esta región como su lugar: Athaualpa Yupanqui, Leopoldo Lugones, Fernando Fader, Pablo Neruda, Rafael Alberti, son sólo algunos de los nombres que recorren el paisaje de la zona. Página 15 Córdoba Norteña guarda las historias de los tiempos fundacionales del país; pugnas políticas, guerras civiles, la fatídica emboscada que terminara con la vida de Facundo Quiroga, el tigre de los llanos, la muerte de Pacho Ramírez y hasta las huellas de Ernesto Che Guevara en el sanatorio puente de San Francisco del Chañar. Tierra de leyendas y misterios, de largas procesiones que atraviesan el corazón de cada pueblo cuando se vuelcan a las calles a expresar su fe. Cada año, los diferentes pueblos de Córdoba Norteña organizan sus festivales para consagrar la tradición y la música del lugar.