Calidad en la Oficina de Farmacia Alberto García Romero Presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid La calidad en la oficina de farmacia no es ninguna novedad, de forma tradicional los farmacéuticos han proporcionado un servicio y un producto de calidad, ya que éstos han dado respuesta siempre, a las demandas de la sociedad, las autoridades y el mundo sanitario en general. La responsabilidad personal (ética y moral) y la responsabilidad profesional asumidas por el farmacéutico han hecho de la calidad y la seguridad una realidad en el día a día. Las exigencias crecientes de la sociedad actual obligan a que el concepto de calidad que se ha tenido hasta este momento evolucione hacia la Calidad Total, es decir hacia la mejora continua de productos y servicios, así como de la organización, con la participación de todas las personas que la integran. La Sociedad ha pasado de buscar la calidad a exigir calidad y de exigir calidad a, simplemente, esperar calidad. El paciente y usuario ha adquirido una conciencia clara de cómo debe de ser tratado y atendido y de que las organizaciones que están a su servicio deben de mejorar sus prestaciones de forma constante. En definitiva el paciente es también un cliente. Por este motivo en el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, se estableció como política prioritaria, la necesidad de introducir procesos de gestión de calidad que permitieran demostrar la realización de un servicio de calidad y con probada eficiencia a la profesión farmacéutica, administraciones públicas y ciudadanos, con el objetivo de que trabajando por la Calidad y los valores que la representan, iniciábamos una nueva vía en nuestro compromiso hacia la Excelencia, siendo por tanto la exigencia de superación del colegio un factor clave en nuestra gestión de los próximos años. Así en el 2006 El Colegio de Farmacéuticos de Madrid ha obtenido la certificación de todos los servicios colegiales según la normativa UNE EN ISO 9001:2000 no limitándose al cumplimiento de los requisitos normativos y legales sino que planteado con una mayor amplitud de miras tales como: el establecimiento de la Política de la Calidad del Colegio, la definición de prioridades y objetivos en materia de calidad, la gestión y control eficaz de los procesos para mejorar el funcionamiento interno de los servicios colegiales, incluir como oportunidades de mejora aquellas propuestas razonables y de interés general expresadas por los profesionales farmacéuticos, el personal del Colegio y sus empresas proveedoras, así como adecuación de las instalaciones y recursos colegiales a los requerimientos de los mismos. Complementariamente, el cambio social ha traído consigo la necesidad de implantar sistemas de gestión de calidad en la oficina de farmacia. El primer modelo que comenzó a implantarse fue el conocido ISO 9000. Para que su adaptación a entornos como el de la oficina de farmacia, fuera más eficiente, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid ha desarrollado una norma sectorial propia CALYFA, que es un sistema de calidad que contiene los requisitos que, a nuestro criterio, constituye un servicio farmacéutico de calidad, que se inscribe en un proyecto de implantación que incluye el diagnóstico de la calidad de la oficina de farmacia, un completo programa formativo, la realización de una auditoría interna y la certificación y concesión de la marca CALYFA por AENOR. La certificación del sistema de gestión de la calidad, del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, en las oficinas de farmacia verifica que se tienen implantados sistemas de mejora en todo lo relacionado con: la calidad y seguridad del servicio farmacéutico integral, el cumplimiento estricto de la legislación, la mejora continua mediante objetivos e indicadores, la formación de todo el personal, la gestión adecuada de los residuos y la responsabilidad social corporativa.