VOLCANICOS EXALATIVOS SEDIMENTARIOS

DEPÓSITOS VOLCÁNICOSEXALATIVOS SEDIMENTARIOS
Estos se relacionan con la actividad de soluciones hidrotermales y volcanismo
submarinos, desarrollada en la interfase de unidades volcánicas o
sedimentarias, o de rocas volcánicas-rocas sedimentarias, que originan
mineralizaciones estratiformes, masivas, lentejonares, tabulares, etc.
Los datos isotópicos indican la intervención del agua de mar en la lixiviación
de grandes pilas de rocas, tras su calentamiento por una fuente magmática;
ello ha dado origen a un modelo de circulación de agua de mar en
profundidad.
De acuerdo con este modelo, una cámara magmática bajo una cadena
montañosa oceánica o un volcán submarino provoca la circulación de agua de
mar en el interior de la corteza; de esta forma, el agua se calienta y lixivia los
metales de las rocas a través de las cuales circula. Plumas o surgencias
calientes de fluidos metalíferos ascienden hacia el fondo marino, enfriándose
antes de alcanzarlo y depositando sulfuros en las grietas, oquedades y
fracturas de la corteza, originando un “stokcwork”. Cuando los fluidos
alcanzan el fondo marino, los sulfuros se depositan alrededor de las surgencias
o en depresiones del fondo donde se acumulan. La descarga de las soluciones,
con temperaturas de unos 350º, se hace a través de surgencias o “smokers”, y
su contacto con el agua del mar origina la precipitación de sulfuros y sulfatos.
El factor más importante en el comportamiento de los fluidos o soluciones
hidrotermales exalativos, cuando alcanzan el fondo marino, es la diferencia de
densidades entre el agua del mar y las soluciones mineralizadoras.
La localización de las mineralizaciones está controlada fundamentalmente por
la situación de los lugares de descarga de las soluciones hidrotermales, aunque
puedan sufrir corrimientos o deslizamientos gravitacionales y la acción de las
corrientes marinas, oleaje, etc, que pueden conducir a su remoción, transporte,
selección y depósito, tal como ponen de manifiesto las estructuras
conglomeráticas, de sedimentación gradada, los pliegues de deslizamiento,
etc.
Podemos resumir los ambientes de formación en los siguientes:
- Dorsales oceánicas.
- Centros de expansión en cuencas marginales.
- Arcos islas.
Los (1 a) y (2 a) son transportados lateralmente (1b y 2b) durante la expansión
del fondo marino y confinados a las zonas de subducción. Los depósitos
pueden ser subducidos (1d) o arrastrados a la margen continental y ser
incorporados a las áreas de subducción, detrás y bajo la fosa oceánica (1c).
Los formados en cuencas oceánicas marginales pueden ser emplazados como
parte de una placa ofiolítica obducida durante una posterior colisión arco/arco
(2c). Los formados en aguas someras sobre zonas de subducción en arcos-islas
(3 a) peden ser enterrados o cubiertos con posteriores episodios volcánicos y
sedimentarios afines (3d).
La pirita es el mineral mayoritario en estos yacimientos, calcopirita, blenda y
galena no suelen alcanzar el 10% de la mena. Estas proporcionan
concentrados de Cu, Pb, Zn, Sn y cantidades significativas de Au y Ag,
habiendo desparecido prácticamente su utilización como mena de azufre para
la fabricación de ácido sulfúrico.
Las mineralizaciones son fundamentalmente piríticas, acompañadas de
cantidades variables de calcopirita, blenda, galena, y de contenidos menores
de arsenopirita, pirrotina, bornita, oro, plata, etc. Las mineralizaciones de
Gossan se explotan por su contenido aurífero.
Otros depósitos volcánicos-exalativos sedimentarios.
Los depósitos de cinabrio de Almadén constituyen la mayor concentración de
mercurio existente en el mundo.
Se encuentra en los flancos de una cubeta sinclinal asociada a procesos
volcánicos de edad silúrica-devónica. Unos arman en la denominada “cuarcita
del criadero” o en lavas, estando todos ellos relacionados con aparejos
volcánicos.
La “cuarcita del criadero” está constituida por dos niveles, separados por un
horizonte de pizarras y areniscas, teniendo como muro un paquete de pizarras
(pizarras de muro) y a techo pizarras con graptolites y una potente serie de
alternancias volcano-sedimentarias.
La paragénesis mineral es muy simple: cinabrio como mineral principal,
mercurio nativo y pirita en cantidades menores, y calcopirita y galena de
forma esporádica y accesoria; en ocasiones, cinabrio y pirita masivos se
encuentran asociados.