Oficio 220-051689-12 (Temas varios)

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SUPERINTENDENCIA DE SOCIEDADES
Oficio 220-051689 de 2012
(Junio 26)
ASUNTO: Temas varios.
Me refiero a su comunicación radicada en esta entidad con el número 2012-01135555, por la cual se refiere a una situación que se viene presentando con
accionistas en una sociedad, “que no se les permite ejercer sus derechos,
partiendo del supuesto que la sociedad no cuenta con utilidades liquidas para
readquirir las acciones” y con base en ello plantea una inquietudes que serán
absueltas en el mismo orden de manera clara y concreta.
Antes de entrar a absolver sus inquietudes, es preciso anotar que cada acción le
confiere a su propietario los derechos que se encuentran consagrados en el
artículo 379 del Código de Comercio, y por ende, no se comprende el porque se
limitan los mismos aduciendo que la sociedad no cuenta con utilidades para
readquirir las acciones, siendo que esta operación, por la cual la compañía
adquiere sus propias acciones, es algo que en nada debe influir en el ejercicio de
los derechos a que alude el citado artículo.
“1. En el evento en el que una sociedad A se liquide sin incluir dentro de los
activos en el trámite liquidatorio, acciones de la Sociedad B, ¿qué trámite debe
iniciarse para que se entreguen estos títulos a una persona, natural o jurídica, que
pueda ejercer los derechos de estas acciones?
R/ Frente a este asunto, debemos acudir a lo que sobre el particular dispone el
artículo 27 de la Ley 1429 del 29 de diciembre de 2010, cuando con posterioridad
a la liquidación de una sociedad aparecen nuevos bienes de la persona jurídica
que no fueron incluidos en el inventario, como es el caso de la aparición de
acciones que se tenían en la composición del capital social de otra compañía,
como es el caso descrito en su comunicación.
En efecto, veamos lo que a la letra expresa el citado artículo:
“ARTÍCULO 27. Adjudicación adicional. Cuando después de terminado el proceso
de liquidación voluntaria, aparezcan nuevo bienes de la sociedad, o cuando el
liquidador haya dejado de adjudicar bienes inventariados, habrá lugar a una
adjudicación adicional conforme a las siguientes reglas:
1. La adjudicación adicional estará a cargo, en primer término del liquidador que
adelantó la liquidación de la compañía, pero si han transcurrido cinco (5) años
desde la aprobación de la cuenta final de liquidación o el liquidador no puede
justificadamente adelantar el trámite, la Superintendencia de Sociedades lo
designará para que adelante el trámite pertinente.
2. Podrá formular la solicitud cualquiera de los acreedores relacionados en el
inventario del patrimonio social, mediante memorial en que se haga una relación
de los nuevos bienes y se acompañen las pruebas a que hubiere lugar.
3. Establecido el valor de los bienes por el liquidador, éste procederá a
adjudicarlos a los acreedores insolutos, en orden establecido en el inventario del
patrimonio social. En el evento de no existir acreedores, adjudicará los bienes
entre quienes ostentaron por última vez la calidad de asociados, según el
porcentaje de participación que les correspondía en el capital de la sociedad.
4. En acta firmada por el liquidador se consignará la descripción de los activos
adjudicados, el valor correspondiente y la identificación de la persona o personas
a las que le fueron adjudicados.
5. Los gastos en que se incurra para la adjudicación adicional, serán de cuenta
de los adjudicatarios”.
Tenemos entonces que las acciones que figuran en cabeza de una sociedad ya
liquidada, pero que no fueron incluidas en el inventario, es claro que cambian de
titular por virtud de una adjudicación que de ellas se haga en la adjudicación
adicional a que alude el artículo 27 de la Ley 1429 citada.
2. En el evento en el que un accionista de la Sociedad B muera sin que en su
proceso de sucesión se hubieren incluido las acciones de la sociedad B, ¿qué
trámite debe iniciarse para que se entreguen estos títulos a una persona, natural o
jurídica, que pueda ejercer los derechos de estas acciones?.
R/ Este asunto hace relación directa con un proceso de sucesión, regulado por las
normas del derecho de familia, ajeno a la competencia de esta entidad. Es claro
que al no haberse incluido en el proceso citado las acciones de las cuales era
titular un accionista en un momento determinado, se hace necesario proceder a
la apertura de un nuevo proceso en el cual se adjudiquen las acciones
respectivas.
3. En caso de que se presente un embargo sobre acciones de la Sociedad B, ¿es
posible que se vendan los títulos estando vigentes el gravamen?
R/ Al respecto es necesario realizar las siguientes consideraciones:
El artículo 142 del Estatuto Mercantil consagra que “Los acreedores de los
asociados podrán embargar las acciones, las partes de interés o cuotas que éstos
tengan en la sociedad y provocar su venta o adjudicación judicial cómo se prevé
en este código y en las leyes de procedimientos”.
A su vez el artículo 414 de la misma obra dispone que “Toda las acciones podrán
ser objeto de embargo y enajenación forzosa” y que el embargo “se consumará
mediante orden del juez para que la sociedad retenga y ponga a su disposición
las cantidades respectivas”. A su vez el artículo 415 ibídem., establece que “El
embargo de las acciones nominativas se consumará por inscripción en el libro de
registro de acciones, mediante orden escrita del funcionario competente... “. (Los
resaltados son nuestros).
Vistas la normas legales anteriores, nos vamos ahora a lo que sobre dicho asunto,
consagra el artículo 681 del Código de Procedimiento Civil, modificado por la Ley
794 del 2003, en el numeral 6º, en donde se dispone de manera clara y precisa
que el embargo de las acciones en sociedades anónimas, debe ser comunicado
a la sociedad, con el fin de que el representante legal proceda a efectuar la
anotación en el Libro de Registro de Acciones. Ocurrida dicha anotación no hay
duda alguna que las acciones embargadas quedan fuera del comercio y en
consecuencia es obvio que los administradores no pueden realizar transferencia
alguna de las mismas.
4. ¿Con que mecanismo cuenta una entidad para que se cambie la titularidad de
acciones en los casos en que existan socios que no ejercen sus derechos, sin
conocer el paradero de estos?
R/ Al respecto debemos afirmar que la expedición de los títulos que acreditan la
calidad de accionistas de una sociedad, así como el cambio de los mismos es un
asunto que le compete directamente a la administración del ente jurídico y la
Superintendencia de Sociedades no es competente para proceder en dicha
operación.
Ahora bien, el no ejercicio de los derechos por parte de uno o varios asociados,
no da lugar a que se pierda la titularidad por decisión de la sociedad emisora,
pues si se quiere extinguir el derecho por falta de su ejercicio, deberá adelantarse
un proceso de prescripción adquisitiva ante jurisdicción ordinaria, sin una decisión
en tal sentido las acciones continuarán en cabeza del accionista, aunque no
comparezca o ejerza derecho alguno.
5. ¿Existe un mecanismo a través del cual una sociedad puede obligar a sus
accionistas a enajenar las acciones de las que es titular?.
R/ Los asociados de una compañía son propietarios de una o de varias acciones
y en ejercicio de los derechos que les da la calidad de tal (artículo 379 del
Estatuto Mercantil), dentro de la autonomía de la voluntad privada, bien pueden
disponer o no de las acciones y en caso de serlo, debe procederse a la
negociación de las mismas mediante el procedimiento pertinente.
Es así como, no puede la administración de una sociedad, obligar a sus
accionistas a enajenar sus acciones, pues se recalca, ello es un asunto que solo le
compete al asociado.
En los anteriores términos se ha dado contestación a su consulta, no sin antes
anotarle que los efectos del presente pronunciamiento son los descritos en el
artículo 25 del Código Contencioso Administrativo.
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