Tienes un mensaje-Febrero 2016

INSPECTORÍA VIRGEN DEL CAMINO
FMA - LEÓN
FEBRERO 2016
VIVE EL AMOR CON OTRA MIRADA
TOCADO Y FASCINADO
En cada persona habita el deseo de amar y ser amado. Todo ser humano ha sido
tocado y fascinado por el amor. Pero muchas personas también han sido heridas porque su amor
no ha sido correspondido o porque han mezclado la agresión y la insensibilidad con el amor.
Para vislumbrar uno de los aspectos de este gran misterio del amor recurrimos a Elie Wiesel que
sobrevivió a un campo de concentración nazi y afirma. “Lo contrario del amor no es el odio, sino la
indiferencia”. El odio es muchas veces la reacción a un amor no correspondido. Sólo odio a una
persona que es importante para mí. El odio es un sentimiento tan intenso como el amor (y puede
transformarse de nuevo en amor).
Lo realmente contrario al amor es la indiferencia: me encierro en mí mismo, no dejo que nadie se
acerque a mí, soy frío e insensible. Rechazo todo amor y me niego a amar a otra persona. El
indiferente se empobrece y queda interiormente vacío.
EL CAMINO HACIA LA FELICIDAD
Thomas Merton escribe; “El amor sólo se puede conservar cuando se regala. Nunca encontraremos
la felicidad si la buscamos para nosotros mismos, pues una felicidad que disminuye cuando la
compartimos con otros no basta para hacernos felices”. Muchas personas buscan la felicidad en el
amor. Son felices cuando se sienten amadas. Pero el amor no se deja retener. Sólo fluye en mí si
lo regalo continuamente, y no sólo a quien me ama, sino también a otros seres humanos. De lo
contrario, se convierte en egoísmo de dos personas, en una simbiosis que tarde o temprano,
terminará sofocando la vida. El amor compartido con muchas personas es el camino hacia la
felicidad. “Una felicidad que no se puede compartir con otros es demasiado pequeña para poder
hacernos realmente felices”.
Esta es una imagen hermosa.
El amor presupone un corazón grande.
Y la felicidad no respira estrechez, sino amplitud y libertad.
Una felicidad que puedo retener en la mano se me escapa.
La felicidad quiere ser compartida, sólo de este modo
permanece.
TIEMPO DE AMAR
“Un corazón que ama es siempre joven”, dice un refrán griego. Las personas ancianas que
transmiten amor, nos producen una sensación de vida y frescor. El amor nos mantiene jóvenes.
Pero no podemos amar en el ajetreo de la vida cotidiana. El amor nos mantiene jóvenes. Pero no
podemos amar en el ajetreo de la vida cotidiana. El amor necesita tiempo. Quiere ser sentido.
Cuando dos enamorados se separan, no se lanzan a una actividad frenética. Necesitan tiempo
para seguir sintiendo el amor, para saborearlo en su corazón.
UN CORAZÓN ALEGRE
La Madre Teresa de Calcuta ha tocado los corazones de muchas personas
de todo el mundo. Muchas de ellas se han preguntado: ¿de dónde saca
esta pequeña mujer la fuerza, el entusiasmo y la alegría frente al sufrimiento que toca
diariamente con sus propias manos?
Ella misma respondió a esta pregunta: “Normalmente, la alegría sólo brota de un corazón que
arde de amor”.
El amor no es ante todo un postulado moral. Cuando nos obligamos a amar, nos sentimos
sobrecargados. En cambio, cuando el amor toma posesión de nosotros, hace que arda nuestro
corazón. El amor es una fuerza divina. Un fuego que nos da calor y nos inflama. El amor y la
alegría tienen algo en común: ambos abren el corazón y ambos lo ensanchan.
La alegría sólo puede echar raíces en un corazón grande, porque siempre necesita un lugar
espacioso para poder desarrollarse.
Detente en esta lectura del Evangelio de Juan.
Como el Padre me amó, yo también os he amado a vosotros; permaneced en mi amor. Si
guardáis mis mandamientos permaneceréis en mi amor, como yo he guardado los
mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. Os digo esto para que mi gozo esté
en vosotros, y vuestro gozo sea colmado. Nadie tiene mayor amor que el que da la vida por
sus amigos. Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando. No
os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a
vosotros os he llamado amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre
os lo he dado a conocer. No me habéis elegido vosotros a mí, sino que
yo os he elegido a vosotros, y os he destinado a que vayáis y deis
fruto…”
Jn. 15,9-16
AMEN DEL UNIVERSO
A veces palpamos en nosotros un amor que fluye hacia todo
lo que existe. En él nos sentimos una sola cosa con todo.
Novalis se refiere a esa experiencia cuando escribe: “El amor
es el amen del universo”. El amor llena todo el universo.
Fluye y hacia nosotros desde una flor hermosa. Sale a
nuestro encuentro en la belleza de las montañas. El
universo dice “sí” a los seres humanos amándolos. Quien se
abandona en brazos de la madre Tierra, tendiéndose en un prado lleno de flores
en primavera, experimenta palpablemente este amén del
universo. Se siente atravesado y rodeado por el amor. El sol
lo llena de amor, el viento acaricia con amor sus mejillas. Y
todos los sonidos de la naturaleza le permiten escuchar la voz del amor.
CUARESMA, UN VIAJE AL INTERIOR
Cambiamos a un tiempo especial. Un tiempo diferente, si cabe de más intensidad: LA CUARESMA
Una ocasión ideal para prepararnos a algo que por su valor nos lleva a un gran acontecimiento.
Tenemos que tener nuestro corazón listo y dispuesto a acoger el amor que se nos regala.
EL CAMINO PARA ESTE VIAJE, es una convocatoria que se puede alcanzar por diversas vías.
Es un método de exploración en la búsqueda de la Tierra Prometida, del Reino de Dios que está
dentro de nosotros… para ello hay que viajar hasta el límite de la tierra conocida.
 el límite nos indica quienes somos,
 regula nuestra identidad,
 es la frontera que nos muestra hasta donde podemos avanzar.
CUARESMA, camino emprendido por los peregrinos de la fe para realizar un proceso de
transformación interior.
“Sal de tu tierra, de tu patria, de la casa de tu padre y ve a la tierra que yo te mostraré…
(Génesis 12,1)
“Mientras iban caminando, uno le dijo: “TE seguiré a donde quiera que
vayas”. Jesús le dijo: “Las zorras tienen guaridas y las aves del cielo
nidos; pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar su cabeza”
Lc. 9,57)
Es el CAMINO DEL SILENCIO. El silencio es un bien escaso. No se encuentra en cualquier lugar
ni se compra en cualquier establecimiento. Una campana, una iglesia abierta….pueden ser una
llamada a poner en orden lo que tal vez llevamos atrasado: La oración.
Es el CAMINO DE LA PALABRA. ¿Cómo podemos encontrar el camino si no dejamos que Dios
nos lo indique? El camino cuaresmal nos hace llegar con prontitud a la escucha de la Palabra. Es
un tiempo de captar aquello que es esencial para nuestra fe.
Es el CAMINO DE LA REC0NCILIACIÓN. Hasta la mejor prenda, necesita de vez en cuando, ser
llevada a una buena lavandería. Nuestras almas, en las
que se encuentra impreso el sello de Hijos de Dios.
Tienen derecho a ser puestas a punto. La hora de la
confesión nos facilita un nuevo rostro: la alegría de
sentirnos reconciliados con Dios y con nosotros
mismos.
HAZ UN ACTO DE VALENTÍA
 ¿Con quién tienes cuentas pendientes?
 Acentúa la oración en estos cuarenta días.
40 kilómetros…
FELIZ CUARESMA