EL ANDAR DEL CRISTIANO AUTÉNTICO Efesios 5:1-21 Ya hemos visto algunos aspectos importantes que debe tomar en cuenta el cristiano auténtico para andar en un mundo del cual no somos ciudadanos, pero en esta ocasión nos ocuparemos de la acción misma del andar del cristiano auténtico que vive sujeto al Espíritu de Dios. En la primera parte hablamos de: El llamamiento del cristiano auténtico. La Transformación del cristiano auténtico. Ahora concluimos con el andar del cristiano auténtico frente al mundo que indefectiblemente camina en contra de los deseos de Dios. El cristiano que ha sido regenerado, tiene un fundamento firme en la Palabra de Dios, ha sido transformado y ha decidido pagar el costo de seguir a Cristo, toma la decisión de ANDAR como Dios quiere que ande en este mundo. Recordemos que lo que en esta parte estudiamos la vida renovada y revestida del cristiano auténtico la cual debe traducirse en acción, ya que no es justificable que nuestro andar no este acorde con lo que predicamos. Según estos versículos debemos: “ANDAD EN AMOR” (v. 2) “ANDAD COMO HIJOS DE LUZ” (v. 8) “ANDAD COMO SABIOS” (v. 15) Si traducimos nuestras vidas en acciones de esta naturaleza, no habrá en nosotros otra cosa que no sea satisfacción espiritual la cual el apóstol Pablo traduce como LA LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO. Entremos en materia de inmediato y veamos la gran bendición que es el andar conforme a la palabra de Dios y los resultados que obtenemos cuando ponemos por obra cada uno de sus designios bajo el bosquejo que sigue: I. EL ANDAR EN AMOR DEL CRISTIANO AUTÉNTICO II. EL ANDAR EN LUZ DEL CRISTIANO AUTÉNTICO III. EL ANDAR SABIO DEL CRISTIANO AUTÉNTICO I. EL ANDAR EN AMOR DEL CRISTIANO AUTÉNTICO (Ef. 5:1-7) A. EJEMPLO SUPREMO DEL AMOR (vv. 1-2) 1. Dios no puede en ninguna manera llamar al cristiano a imitarle sin darle el parámetro que en el mismo versículo 2 se nos Iglesia de Convertidos a Cristo Autor: Pastor Arq. José R. Mallén Malla 2 “El cristiano auténtico” plantea cuando dice: “...Como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante”. B. 2. Dios nos manda a andar en amor, pero debe estar claro que él está hablando dentro del contexto del amor sacrificial, el cual se constituye en una ofrenda y un sacrificio de olor fragante a Dios. 3. Este amor se digiere solamente por medio de una mente que por esencia se ha renovado espiritualmente y produce el AMOR como un parte del fruto del Espíritu. Por esto nos dice (1 Jn. 4:19-21): “Nosotros le amamos a Él, porque Él nos amó primero. Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿Cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano”. LA PERVERSIÓN DEL AMOR VERDADERO (vv. 3-6) 1. De inmediato el apóstol Pablo hace un contraste con aquellos pecados que muestran la perversión del amor verdadero. Entre estos pecados encontramos, la fornicación, inmundicia, avaricia, palabras deshonestas, necedades, truhanerías. 2. Al oír esto tenemos necesariamente que recordar otro pasaje revelado al apóstol Juan en 1 Juan 2:15-17: “No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne (inmoralidad), los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.” 3. La perversión del amor verdadero solo lleva a la separación de dador del amor como nos dice los versículos 3a5. Dios es muy claro y establece que ninguno que practique estos pecados tendrá herencia en el reino de Cristo y de Dios. No obstante esta declaración, veamos: Iglesia de Convertidos a Cristo Autor: Pastor Arq. José R. Mallén Malla C. 3 “El cristiano auténtico” EL ENGAÑO DEL FALSO AMOR (vv. 6-7) 1. Continúa la porción estudiada con una seria advertencia. De corazón creo que aquí es que estriba el problema de muchos cristianos, cuando queremos argumentar sobre las demandas inmutables de Dios, y tratamos de seducir nuestras mentes. Esto está declarado en varios pasajes bíblicos como son: (He. 3:12,13; 2 Co. 11:2, 3; Stg. 1:13-15; Hch. 5:1-11). 2. El cristiano que no está atento a las demandas bíblicas y no tiene en su corazón la firme convicción de la veracidad de la inmutable palabra de Dios, no temerá nunca a Dios y por tanto caerá sobre él el juicio inminente destinado para los desobedientes. 3. Terminan los (vv. 6-7) de nuestra porción: “Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira sobre los hijos de desobediencia. No seáis, pues, participes con ellos”. Está claro que la iglesia de Cristo en toda su existencia ha sido atacada por Satanás con los mismos métodos, métodos que ya nos fueron advertidos de antemano por el apóstol Pablo en su discurso a los ancianos de Mileto en (Hch. 20:28-31). II. EL ANDAR EN LUZ DEL CRISTIANO AUTÉNTICO (Ef. 5:8-14) A. LA MANIFESTACIÓN DE LUZ DIVINA (vv. 8, 9) 1. Así como la naturaleza orgánica no puede vivir sin la presencia de luz, de la misma manera los que viven dentro del reino de Dios no pueden de ninguna manera existir sin Dios, que es el Padre de Luz. 2. Un creyente que mantiene su mente renovada y que se ha despojado del viejo hombre vistiéndose del nuevo, es un creyente que anda en luz y manifiesta el fruto de luz o del Espíritu. Que es aquello que transmite al recibir la influencia de la fuente de Luz (Gá. 5:22, 23). 3. La luz reflejada por nosotros debe ser necesariamente diáfana y clara como aquel que la produce, y debemos de evitar por Iglesia de Convertidos a Cristo Autor: Pastor Arq. José R. Mallén Malla 4 “El cristiano auténtico” todos los medios que nuestra luz sea empañada o que por la asociación o participación con otros nuestro candelero no refleje la luz necesaria que como luminares en este mundo tenemos que reflejar. Aquí está ya advertido de antemano, pongamos esto en práctica… “no seáis partícipes con ellos” (vv. 7 y 11). B. C. LA SEGURIDAD DEL QUE ANDA EN LUZ (v. 10) 1. Es el (v. 10) él que nos declara: “...Comprobando lo que es agradable al Señor”. El cristiano para andar en luz no tiene la receta de todas las situaciones de su vida, pero si tiene la clave para brillar sin amainar su fulgor, y esto lo logramos en la práctica de la vida cristiana en la medida que comprobamos que todas nuestras acciones son aprobadas por Dios. 2. No podemos de ninguna manera andar en luz si no vivimos una vida cristiana práctica y dispuesta a agradar al Señor, sabiendo que realmente lo que hago no lo aprueban mis sentimientos, sino la Palabra de Dios. 3. Él es luz y nosotros su lumbrera, por lo que si analizamos (Mt. 5:14-15) veremos que la luz resplandece cuando es puesta en el lugar en que debe estar, para que andemos seguros en el camino, porque de otro modo la luz no sirve para nada. Es en el campo de batalla que podemos probar a los soldados y saber quienes son los que verdaderamente andan en luz. LA CONVENIENCIA DE ALUMBRAR CADA PASO (vv. 11-14) 1. Cuando un creyente anda como Hijo de luz, alumbrando cada paso de su vida, de ninguna manera participará de las obras infructuosas de las tinieblas sino que las ha de reprender como dice el (v. 11) “Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas”. 2. De igual manera el creyente que es luminar (Fil. 2:12-16), sabe que el pecado debe ser evidenciado en nuestro andar y debe poner de manifiesto toda actitud pecaminosa que a su vez causa vergüenza en una mente renovada y sensible al pecado. Iglesia de Convertidos a Cristo Autor: Pastor Arq. José R. Mallén Malla 3. 5 “El cristiano auténtico” De la misma manera como sabemos que la luz evidencia el sucio en la oscuridad, el creyente con su andar en luz evidenciará a todo aquel que ande en pecado y nunca se le ocurrirá participar en las obras infructuosas de las tinieblas, sino que mas bien las reprenderá, para la gloria de Cristo (vv. 1314). III. EL ANDAR SABIO DEL CRISTIANO AUTÉNTICO (Ef. 5:15-21) A. B. EL SABIO REDIME EL TIEMPO 1. El (v. 15) nos hace una advertencia: “Mirad, pues, con diligencia como andéis, no como necios sino como Sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.” Pablo sabe que los días son cortos y que hay que trabajar duro en la viña del Señor, es por tanto necesario que aquel que ha sido transformado por el poder renovador del Espíritu de Dios sepa redimir el tiempo. 2. Aquí se da la idea de la VIGILANCIA, (velemos por nosotros mismos) porque es muy fácil desperdiciar el tiempo y no aprovecharlo para todo aquello para lo cual Dios nos llamó. Pablo escribe a los hermanos de Colosas y les dice en (Col. 4:5) lo mismo. “Andad sabiamente para con los de afuera, redimiendo bien el tiempo.” Un cristiano que anda sabiamente sabrá que debe predicar y enseñar la sana doctrina en todo tiempo (2 Ti. 4:1-4). 3. Cuanto tiempo desperdiciamos los cristianos, hasta que Dios nos hace pasar por una prueba que nos lleva a comprender cuan cortos son los días de esta vida que él nos ha dado, es aquí donde entendemos que él nos provee el tiempo para que seamos administradores del mismo con toda sabiduría y más cuando sabemos que cada día trae su propio mal. EL SABIO BUSCA DISCERNIR LA VOLUNTAD DE DIOS (v. 17) 1. Ahora nos habla de lo que hacen los sabios cuando dice el texto: “Por tanto no seáis insensatos, sino entendidos de cual sea la voluntad de Dios” La máxima sabiduría es dar valor real y espiritual a todos los momentos que pasan en nuestra vida, Iglesia de Convertidos a Cristo Autor: Pastor Arq. José R. Mallén Malla 6 “El cristiano auténtico” relacionando todo con el plan perfecto de Dios (Pr. 3:5-8). C. 2. El insensato es aquel que vive por vivir, sin saber de donde viene y hacia donde va y ni siquiera sabe que hace aquí, pero el que es sabio, conoce y discierne en su vida cada cosa que vive, porque es un creyente CON MENTE RENOVADA QUE COMPRUEBA LA VOLUNTAD DE DIOS, que no ve problemas en las dificultades sino que ve oportunidades para crecer en los problemas y busca la voluntad de Dios para aprovechar al máximo lo que su padre tiene para él (Ro. 12:2). 3. Todo hijo obediente desea y anhela agradar a su padre en todo, esto es lo bueno y agradable, por tanto, Dios espera que sus hijos, de igual manera desea que nosotros nos preocupemos por conocer cuál es su voluntad perfecta en nosotros para que todo lo que hagamos sea para su gloria. EL SABIO BUSCA VIVIR UNA VIDA LLENA DEL ESPÍRITU (vv. 18-21) 1. Para llenarse del Espíritu sabemos que tenemos que permitir un control absoluto sobre nuestra carne, por la Palabra de Dios y por el Espíritu de Dios, esto tiene que convertirse en una práctica diaria y permanente en nosotros. 2. El creyente que ha RENOVADO su mente es un creyente que se sujeta al Espíritu aunque su carne le pida lo contrario, como nos revela el apóstol Pablo cuando habla de su lucha espiritual en (Ro. 7:14-25). Aquí se establece que esta lucha es continua y todos nosotros como creyentes tenemos que luchar cada día más para poder lograr la llenura espiritual que Dios espera en sus hijos. 3. El sabio triunfa y permanece sujetado a la ley de Dios aunque ella vaya en contra de la ley de su carne. Esta declaración es la que hace la diferencia entre un hijo obediente de Dios y uno que no ha nacido de Dios. CONCLUSIÓN Y APLICACIÓN: El creyente que anda en el Espíritu (vv.19-21) manifestara con su andar la verdadera espiritualidad. Esto será comprobado en la medida que el efecto del poder Iglesia de Convertidos a Cristo Autor: Pastor Arq. José R. Mallén Malla 7 “El cristiano auténtico” transformador de Cristo se evidencie, pues un creyente auténtico, lleno del Espíritu, es un creyente que manifestará un comportamiento como el que declara la Palabra de Dios en el final de esta porción bíblica cuando dice: “Someteos unos a otros en el temor de Dios” (v. 21). Mis amados hermanos, debemos entonces concluir dejando claro que: El cristiano auténtico es aquel que vive ejerciendo la vocación para la cual fue llamado. El cristiano auténtico es aquel que experimenta cada día ese proceso de verdadera Transformación. El cristiano auténtico es aquel que su andar frente al mundo indefectiblemente está dirigido hacia los propósitos de Dios. AMÉN