San José de Costa Rica, septiembre 14 de 2005 Hola!... a todos mis amigos y amigas y en especial a mi recordada y apreciada familia Betancur, les mando desde esta tierra centroamericana un saludo lleno de amor, Yo no soy de escribir mucho, pero hoy sentí un gran impulso de plasmar en un pedazo de papel sentimientos que guardados dentro de mi lo que hacen es destrozar mi alma, como persona y ser humano sensible que soy, siento un nudo muy grande en la garganta al ver tantas cosas que están sucediendo a nivel mundial y que no están lejos de nuestros ojos; me siento nerviosa, triste y sin confianza, mi piel se eriza al ver en las noticias y en los principales diarios del mundo acontecimientos horripilantes que no caben en la mente de un ser humano normal. En este país por ejemplo dentro de muchas otras cosas inhumanas que a diario suceden, se ve con frecuencia violaciones de niñas y niños de 9 años especialmente, en lo que va del año se han presentado cinco casos, el más reciente es el de Jhosebet Garita que me tiene impactada, una niña de tan solo 9 años que iba todos los días a la escuela caminando tranquilamente con sus sueños color rosa e inocentes… pues sólo hasta el pasado lunes cinco de septiembre cuando regresaba a su casa después de una larga jornada de escuela le duraron esos sueños; fue victima de un ser humano desquiciado que buscando desahogar su odio y sus problemas no tuvo ninguna compasión por ella ni por su inocencia, la violó como quiso y como si fuera poco le quitó su vida, esta semana después de una intensa búsqueda la encontraron unos pescadores a orillas del río Horquetas de un pueblito llamado Zarapiquí, su pequeño cuerpo yacía dentro de un costal amordazado, violado y golpeado brutalmente… Es inhumano lo que está sucediendo, y es tan frecuente que ya a muchas personas estos escalofriantes sucesos no les hace nada, estamos de verdad acostumbrados a esto?, nos insensibilizamos por completo?; pensemos por un instante en todas estas cosas, como lo del inolvidable suceso del 11 de septiembre, lo de Madrid, Londres, ahora de Katrina, sería bueno que se preguntaran ¿por qué a nosotros? Y desde esa pregunta hacer toda una reflexión que no va en la línea de lo económico ni de los poderíos en armas o en dinero. Yo creo que estaría muy bien buscar por otros caminos. ¿No será un llamado para que cambiemos de rumbo desde lo profundo de nuestro corazón, para una vida más solidaria, fraterna que muestre más la misericordia que la prepotencia o la arrogancia? De creerse los salvadores de la humanidad al precio de la vida de los inocentes que nada tiene que ver con los intereses de los que se creen dueños del planeta. Estoy segura que éste es el camino de la conversión por una humanidad más humana. No son los grandes poderes económicos, ni las armas, ni la vanidad en el vivir que nos hace mejores, sino más bien saber responder ¿dónde está tu hermano?.... donde está nuestro espíritu solidario? No hay asomo de duda en mi corazón, el ser humano se insensibilizó por completo, nada tiene sentido, pero como ser humano me abate el sufrimiento ajeno y propio, es tan dolorosamente triste pensar en que tantos seres humanos, ancianos, niños, pobres, enfermos, desvalidos han muerto, sufren. La conciencia de no ser perfectos sino simplemente seres humanos me hace dirigir el corazón no a Dios sino a la tierra que pisamos, y aún el camino hacia el misterio de la muerte vemos mucha más desolación. Resulta fácil echar la culpa a la ambición y a la soberbia. Como el caso de Nueva Orleans, que si se hubieran construido diques en lugar de usar esos medios económicos en la invasión de Irak por ejemplo... la catástrofe hubiera sido menor… pero… ¿A quién le echamos la culpa de que las sociedades no sean perfectas? , esto es difícil de responder, porque para nadie es secreto que a veces no somos capaces ni de poner orden en nuestras propias vidas y de nuestras familias. Para terminar mi reflexión, todo esto es muy triste para mí. A veces pensamos que nunca nos va a pasar nada, o que nunca va a pasar nada en el lugar donde vivimos, hasta que pasa. Como ser humano siento mucho estas situaciones, los noticieros y los diarios son inundados del tema de Nueva Orleáns, de violaciones, de asesinatos, de que la economía de los países va de mal en peor, que el petróleo ya no va a ser más nuestra fuente de energía, centenares de muertos en atentados en Irak, la muerte de millones de personas por hambre etc... Con todo esto el mundo sigue girando como una ruleta rusa, gira y gira sin saber a donde va el curso de la humanidad; allá en Nueva Orleans en este momento hay muchas personas que esperan un abrazo o palabras de aliento y fuerza espiritual para aliviar un poquito el dolor, es importante pues reflexionar y saber lo que cada una de las personas que están allí siente, aunque uno se lo imagine se les puede enviar desde nuestros corazones pensamientos de amor, que cada uno de ustedes allá junto a los suyos se sensibilicen y manden luz de esperanza a toda esa gente, que ellos sientan el apoyo moral que cada uno de nosotros pueda brindarles. SANDRA BETANCUR MONCADA