ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA PROYECTO DE LEY DE LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES GASTRONÓMICOS VARIOS SEÑORES DIPUTADOS EXPEDIENTE N.º 16.485 DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS PROYECTO DE LEY DE LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES GASTRONÓMICOS Expediente N.º 16.485 ASAMBLEA LEGISLATIVA: El Dr. Rafael Ángel Calderón Guardia, promulgó el Código de Trabajo en 1943, esta conquista social dignificó los trabajadores y trabajadoras del país. Cabe reseñar su mensaje en el Congreso, -17 de agosto de 1943-, cuando se refirió a este tema: “El Código de Trabajo, nació así para dar cuerpo a un conjunto de disposiciones claras, humanas, inaplazables, que no son más que el resultado de largo y cuidadoso estudio de la realidad nacional y de un afán de armonizar los justos intereses de las distintas clases sociales que integran nuestra sociedad. Ese cuerpo de leyes no puede nunca considerarse una ruina para ninguna de las clases sociales que conviven en nuestro suelo”. Es así, como nuestro Código de Trabajo establece las reglas claras y justas para las partes en la relación laboral; tanto para los trabajadores como para los patronos. El derecho al trabajo está consagrado en la Constitución Política, que hoy debemos seguir defendiendo para que no se den discriminaciones en ningún grupo laboral del país, y en este marco no escapa la relación laboral que se da entre los trabajadores gastronómicos y los empresarios. Es así como el tres de febrero de mil novecientos setenta y dos se promulgó la Ley N.º 4946, creándose un impuesto del 10% sobre el monto total del consumo -con cargo al consumidor-, por concepto de servicio, que en adelante se cobraría en los restaurantes, bares o establecimientos afines, teniéndose como únicos beneficiarios a los trabajadores gastronómicos, con el afán de incrementarles el ingreso. Tres décadas más tarde, surgen divergencias de criterios entre el empresario y el trabajador, en cuanto a los alcances de la propina como parte del salario y sus repercusiones en el cálculo de las prestaciones laborales y demás cargas sociales. Dicha situación se ha tenido que dilucidar en la vía administrativa y judicial, en donde se le ha reconocido al trabajador su derecho. ÁREA DE PROCESOS LEGISLATIVOS -2- EXP. N.º 16.485 La Sala Segunda de la Corte Suprema de Justicia en Resolución N.º 95-069 de las 9 horas 55 minutos, del 15 de febrero de 1995, reconoce que los ingresos de los trabajadores gastronómicos por concepto de propinas constituye parte integral del salario. No obstante, para que este derecho sea reconocido la parte afectada debe acudir a esta vía judicial, es por ello, que los firmantes reconociendo la injusta práctica que se puede estar dando, proponemos una reforma legal para que esta normativa se aplique conforme a la voluntad del legislador originario y se regule adecuadamente. En la resolución citada, la Sala Segunda de la Corte Suprema de Justicia, dictó: “En lo concerniente a considerar como salario las propinas, estima esta Sala que el recurso es procedente. Al resolver este extremo es importante resaltar que, tratándose del sector privado, ha prevalecido doctrinaria y jurisprudencialmente la teoría del contrato realidad. El salario es la retribución que el patrono debe pagar al trabajador por sus servicios en virtud de un contrato de trabajo y la propina es "..la retribución que el usuario de un servicio abona directamente al trabajador, con carácter voluntario, o consuetudinario al menos, como satisfacción por la atención recibida." (Cabanellas, Guillermo. Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual. I Edición, Buenos Aires, Argentina. 1981. p. 477). La propina obligatoria, fijada sobre un porcentaje de los precios, en nuestro medio la regula la ley N.º 4946 de 24-1-72, modificada por LEY 5635 de 9-12-74, y es una retribución que se paga al trabajador por la prestación del servicio. Resulta entonces que si salario es toda retribución que recibe el trabajador por sus servicios y la propina constituye un tipo de ella, debe ser considerada como salario. Como quien paga esa remuneración es un tercero y no el patrono se ha puesto en discusión su naturaleza salarial. Si bien es cierto estas propinas son pagadas por una persona que no es el patrono, lo hace con ocasión del servicio que le está prestando el trabajador por cuenta del patrono; es decir con ocasión del trabajo. Es el empleador quien contribuye a ello, en el tanto en que facilita los medios, y pone al trabajador en condición de poder recibir tales propinas. El patrono es el que establece las condiciones en que el servicio se desempeñará y, sin lugar a dudas, si no se ejecuta cuando y como él lo indica, estará sujeto a las sanciones disciplinarias correspondientes. Por eso, el hecho de que precisamente este dinero no lo pague directamente el patrono, sino una tercera persona, el cliente, no impide que se considere salario. Además, la modificación sufrida por la Ley de Propinas dictada el 9 de diciembre de 1974, Ley N.° 5635 establece que "...Con relación al monto se le aplicarán al patrono las mismas disposiciones y sanciones que el Código de Trabajo establece para todo lo relacionado con el salario." y las sumas correspondientes a las propinas que no las percibe el trabajador por culpa del patrono se considerarán deuda de éste con aquél. Con esto DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS ÁREA DE PROCESOS LEGISLATIVOS -3- EXP. N.º 16.485 se evidencia que las propinas están establecidas, con rango legal, como salario.” (el subrayado es nuestro). Resulta que, si salario es toda retribución que recibe el trabajador por sus servicios y la propina constituye un tipo de ella, entonces, esta debe ser considerada como salario. Siendo que quien paga esa remuneración es un tercero y no el patrono se ha puesto en discusión su naturaleza salarial. Cabe señalar que el trabajador realiza su actividad con ocasión del servicio que está prestando por cuenta del patrono; es decir con motivo del trabajo para el que fue contratado. Es el empleador quien contribuye a ello, en el tanto en que facilita los medios, y pone al trabajador en condición de poder recibir tales propinas. El patrono es el que establece las condiciones en que el servicio se desempeñará y, sin lugar a dudas, si no se ejecuta cuando y como él lo indica, estará sujeto a las sanciones disciplinarias correspondientes. Por eso, el hecho de que precisamente este dinero no lo pague directamente el patrono, sino una tercera persona, llámese el cliente, no impide que se considere salario. Siendo que la Asamblea Legislativa mediante Ley de la República estableció un ingreso adicional en favor del trabajador gastronómico con cargo al cliente -al consumidor-, es fundamental establecer con claridad y en apego a los derechos laborales un régimen que regule esta situación -tan particular-. Siendo que las conquistas sociales deben protegerse, no podemos permitir que algunos patronos coticen al Seguro Social única y exclusivamente el salario mínimo legal de sus trabajadores, disfruten de vacaciones obligatorias única y disfrutar de pensiones, ya sea por invalidez, vejez o muerte, calculadas sobre los salarios mínimos legales. Con motivo del expediente N.º 14.677, que se tramita en la Asamblea Legislativa: “Para dar interpretación auténtica al artículo 4 de la Ley N.º 4946, de 03 de febrero de 1972,” proyecto que pretende adversar lo dicho por la Sala Segunda de la Corte Suprema de Justicia, al buscar que las propinas no sean consideradas parte del salario y que por ende, no afecten las cargas sociales, ni las demás prestaciones laborales a cargo de los respectivos patronos. Consideramos inconveniente y perjudicial para los derechos laborales de las y los trabajadores que se apruebe este proyecto de ley, el cual roza con el principio de justicia social que ha garantizado la estabilidad y la paz social del sistema costarricense que se ha venido construyendo a partir de la gran reforma social de los años cuarenta. Dada nuestra responsabilidad constitucional y atendiendo a las demandas de los ciudadanos; queremos resaltar el criterio del Sindicato Industrial de Trabajadores Gastronómicos (Sintrag), por medio de su secretario general, el señor Manuel Granados, el cual se opone al proyecto N.º 14.677, “Para dar DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS ÁREA DE PROCESOS LEGISLATIVOS -4- EXP. N.º 16.485 interpretación auténtica al artículo 4 de la Ley N.º 4946, de 03 de febrero de 1972”, argumenta su oposición con base en los siguientes puntos: 1 “Durante años los saloneros sufrieron consecuencias con respecto a la correcta interpretación del pago de la propina en sus derechos laborales, decenas de casos fueron llevados y analizados en la vía administrativa y la vía judicial en reclamo del respectivo reconocimiento y pago. El voto emitido por la SALA SEGUNDA manifiesta claramente que todo salonero tiene derecho al reconocimiento y pago en sus derechos laborales, de manera que el criterio jurisprudencial de la Sala Segunda vino a llenar el vacío dejado por la Ley de Propinas. No recordamos que un patrón haya en estrados judiciales ni manifestado públicamente haber estado en contra de la aplicación de dicha jurisprudencia ni que le perjudicara su actividad económica. En países como España, México y Argentina, para citar algunos ejemplos, mucho antes que en Costa Rica esas mismas condiciones laborales se venían aplicando y con un mayor índice de turismo y de mano de obra empleado en dicho sector, sin que a la fecha esas cargas financieras laborales hayan afectado la estabilidad empresarial y laboral de los negocios. Los interesados en esta modificación no lograron demostrar las “grandes pérdidas económicas” producto de la resolución de la Sala Segunda y con ello, del pago de indemnizaciones laborales. De aprobarse esa Ley, se estaría profundizando una mayor precarización del empleo en este sector y un agravamiento social, al dejar a decenas de familias sin un ingreso que hoy día tienen para poder paliar el costo de vida.” Si hay falta de claridad u oscuridad en una norma, antes de apoyar una interpretación auténtica que vaya en detrimento de las y los trabajadores, y que contribuya a ensanchar la brecha de inequidad existente entre pobres y ricos en el país; optamos como legisladores por llenar esos vacíos y hacer las modificaciones legales necesarias para completar y hacer más justa una ley que fue hecha con buenos propósitos, pero que es posible mejorar. No es posible, estar de acuerdo con una interpretación auténtica que ignore la conquista social y lesione los derechos adquiridos de los y las trabajadoras gastronómicas. Además, toda interpretación auténtica, según lo ha indicado la 1 Nota enviada al despacho de la diputada Ana Helena Chacón, con fecha 25 de octubre del 2006. DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS ÁREA DE PROCESOS LEGISLATIVOS -5- EXP. N.º 16.485 misma Procuraduría General de la República, tendrá efectos retroactivos, dado que es para mejorar, aclarar y entender la intención del legislador sobre el mismo artículo. El tema de los efectos de una interpretación tiene que ver con los efectos retroactivos que pueda tener sobre situaciones jurídicas consolidadas. En este caso -hay muchos casos pendientes sobre este asunto- que podrían declarar con lugar las pretensiones de las partes, pero no por una decisión del juez. El ir hacia adelante en un concepto de interpretación, puede prestarse a una eventual inconstitucionalidad, por los derechos adquiridos de los trabajadores, a la luz de lo que ha establecido la Sala Segunda. Se pretende con esta iniciativa que las sumas que perciban los saloneros, camareros y trabajadores del servicio gastronómico, por concepto de propinas, constituyan parte de su salario; por consiguiente, deberá computarse para efectos de las cargas sociales y demás prestaciones laborales a cargo de los patronos. Además, se impondrá pena de hasta seis veces el salario base, al patrono que se niegue a girar, oculte o retenga dinero por concepto de propina, y que además, no reporte estos ingresos para efecto de las cargas sociales. Por lo anteriormente expuesto, sometemos a consideración de las y los señores diputados el siguiente proyecto de ley. LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA DECRETA: DE LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES GASTRONÓMICOS ARTÍCULO ÚNICO.Adiciónase un párrafo al artículo 2 y se reforma el artículo 4 de la Ley N.º 4946, de 3 de febrero de 1972, para que digan: “Artículo 2.[...] Las sumas que perciban los saloneros, camareros y trabajadores del servicio gastronómico en virtud de la aplicación de este artículo, constituyen parte de su salario; por consiguiente, deberá computarse para efectos de las cargas sociales y demás prestaciones laborales a cargo de los patronos.” “Artículo 4.Los patronos no podrán reservarse ni tener participación alguna en la propina que forma parte del salario de los trabajadores enunciados en el artículo 1 y 2 de esta Ley. No deberán, por ende, impedir el cobro legal de la misma, por parte de sus trabajadores. DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS ÁREA DE PROCESOS LEGISLATIVOS -6- EXP. N.º 16.485 Cualquier suma que por ese concepto, deje de percibir el trabajador por causa imputable al patrono se considerará como una deuda de este con aquel. En relación con el monto que se le aplicará al patrono, regirán las mismas disposiciones y sanciones que el Código de Trabajo establece para todo lo relacionado con el salario. Se impondrá pena de hasta seis veces el salario base, al patrono que se niegue a girar, oculte o retenga dinero por concepto de propina, y que además, no reporte estos ingresos para efecto de las cargas sociales. La denominación "salario base", contenida en este artículo, corresponde al monto equivalente al salario base mensual del "Oficinista 1" que aparece en la relación de puestos de la Ley de Presupuesto Ordinario de la República, aprobada en el mes de noviembre anterior a la fecha de consumación de la falta. Dicho salario base regirá durante todo el año siguiente, aun cuando el salario que se toma en consideración, para la fijación, sea modificado durante ese período. En caso de que llegaren a existir, en la misma Ley de Presupuesto, diferentes salarios para ese mismo cargo, se tomará el de mayor monto para los efectos de este artículo.” Rige a partir de su publicación. Lorena Vásquez Badilla Jorge Eduardo Sánchez Sibaja Ana Helena Chacón Echeverría José Luis Vásquez Mora Bienvenido Venegas Porras José Merino del Río Óscar Andrés López Arias DIPUTADOS 5 de diciembre de 2006. NOTA: Este proyecto pasó a estudio e informe de la Comisión Permanente de Asuntos Sociales. DEPARTAMENTO DE SERVICIOS PARLAMENTARIOS