43 DIARIO DE SEVILLA | Sábado 22 de Febrero de 2014 ECONOMÍA CAMPAÑA DE LA RENTA 2013 ● Aunque actualmente la transmisión del patrimonio de padres a hijos soporta una elevada tributación, existen importantes beneficios fiscales para la transmisión de empresas familiares ● Para aplicar estos incentivos, se exige el cumplimiento de ciertos requisitos REQUISITOS BONIFICACIÓN IMPUESTO SOBRE EL SUCESIONES Y DONACIONES (ANDALUCÍA) SECESIÓN PARTICIPACIÓN EN ENTIDADES Participación 5% a nivel individual 20% con el grupo familiar Actividad No gestión de patrimonio mobiliario o inmobiliario Arrendamiento: local + empleado Dirección DONACIÓN Adquirente Cónyuge, ascendientes, descendientes o colaterales hasta 2º grado Arrendamiento: local + empleado Remuneración superior al 50% de la totalidad de sus rendimientos Cónyuge, descendientes, adoptados, ascendientes, adoptantes, colaterales hasta 3er grado y empleados con antigüedad Afectación Actividad Mantenimiento Afectación de los elementos a la actividad Ejercicio personal, habitual y directo Arrendamiento: local + empleado Mantenimiento de la inversión durante 5 años, sin minoración sustancial del valor PARTICIPACIÓN EN ENTIDADES O EMPRESA INDIVIDUAL Requisitos anteriores más… Donante Mayor de 65 años o incapacidad permanente Dejar de ejercer funciones de dirección y de percibir remuneración por ello 5 JAVIER GUAJARDOFAJARDO CABALLOS Asociado senior de Garrigues, Abogados y Asesores Tributarios RAS las últimas reformas, la transmisión de patrimonio de padres a hijos en Andalucía, ya sea por sucesión o por donación, ha pasado a estar gravada hasta en un 43,8% (resultado de aplicar al tipo máximo del 36,5% y el coeficiente multiplicador de 1,20). Además, se ha establecido un valor mínimo a efectos fiscales para determinados bienes –en especial, bienes inmuebles– que en ocasiones es superior a su valor de mercado. Esto supone, en muchos casos, que sea necesario vender una parte importante del patrimonio recibido –o más bien mal vender– para pagar los impuestos derivados de su adquisición, a pesar de que la generación de dicho patrimonio ya tributó en sede de los transmitentes. A pesar de lo dura y fría que resulta esta realidad impositiva en nuestra comunidad autónoma –no en todas las comunidades autónomas se recibe el mismo trato–, la norma contempla una serie de bonificaciones para la transmisión de determinados bienes, bonificaciones que puede llegar a prácticamente exonerar de tributación las transmisiones de padres a hijos. Entre estas destacan las relativas a las participaciones en sociedades y a los bienes afectos al desarrollo de una actividad empresarial o profesional. No obstante, la aplicación de estos beneficios fiscales T EMPRESA INDIVIDUAL Mantenimiento Mantenimiento de los requisitos para la exención en el Impuesto sobre el Patrimonio durante 5 años Incentivos fiscales en la transmisión de empresas familiares está condicionada al cumplimiento de una serie de requisitos. REQUISITOS EN CASO DE PARTICIPACIONES EN SOCIEDADES En el caso de transmisión de participaciones en una sociedad por sucesión, se exige en primer lugar que la sociedad en cuestión desarrolle una actividad económica, no considerándose actividad económica la mera gestión de un patrimonio mobiliario o inmobiliario. En particular, en el caso de arrendamiento de inmuebles, es necesario contar con una persona contratada a jornada completa y con un local en exclusiva para el desarrollo de la actividad. Asimismo, es necesaria una participación previa por el transmitente de al menos el 5% a nivel individual o del 20% a nivel de grupo familiar (cónyuge, ascendientes, descendientes o colaterales de segundo grado), y que el adquirente sea un familiar (cónyuge, descendientes o colaterales hasta el tercer grado) o un empleado con antigüedad. Por otra parte, el transmitente o uno de los miembros del grupo familiar deben haber ejercido funciones de dirección en la entidad en cuestión, percibiendo por ello una remuneración que represente más de la mitad de sus rendimientos empresariales, profesionales y de trabajo personal. Por último, se exige mantener el valor de lo adquirido durante un plazo de 5 años. REQUISITOS EN CASO DE BIENES AFECTOS AL DESARROLLO DE UNA ACTIVIDAD EMPRESARIAL O PROFESIONAL Si lo transmitido por sucesión son bienes afectos a una activi- dad, se requiere el ejercicio de una actividad empresarial o profesional –exigiéndose local y empleado en caso de que la actividad sea el arrendamiento de inmuebles– y afectación de los bienes a dicha actividad. El adquirente debe ser asimismo el cónyuge, descendientes o colaterales hasta el tercer grado o empleados con antigüedad. El requisito de ejercicio de actividad, es, sin embargo, algo más exhaustivo: la actividad debe ejercerse por el transmitente de forma habitual, personal y directa, constituyendo asimismo su principal fuente de renta. Por último, es necesario también mantener el valor de lo adquirido durante un plazo de 5 años. ¿Y EN CASO DE DONACIÓN? Si los bienes anteriores en lugar de ser transmitidos por sucesión lo fuesen por donación, además de los requisitos mencionados se exige que el transmitente tenga 65 años o más, deje de ejercer funciones de dirección y de percibir remuneración por ello, y que durante el plazo de mantenimiento referido con anterioridad se cumplan los requisitos para que los bienes recibidos estén exentos en el Impuesto sobre el Patrimonio. OTRAS MEDIDAS PARA REDUCIR LA CARGA FISCAL Fuera del ámbito de las empresas familiares, existen otras medidas para reducir la tributación derivada de la transmisión del patrimonio a los hijos. Entre estas destacan la donación de hasta 120.000 euros para la adquisición de la primera vivienda habitual o para la constitución de una sociedad –estas donaciones gozan de una exención de un 99%–, o la ampliación del número de beneficiarios de la herencia (atribuyendo por ejemplo bienes a los nietos) para romper la progresividad del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. NECESIDAD DE UNA REVISIÓN PERIÓDICA El importante ahorro que se puede obtener como consecuencia de los incentivos anteriores, unido a la falta de aplicación flexible por parte de la Administración de los requisitos comentados, hacen necesario verificar periódicamente –al menos, una vez al año– el cumplimiento de cada uno de los requisitos anteriores, a pesar de que el margen de maniobra pueda ser reducido. No cabe ya, pues, excusarse en el desconocimiento; realizar las actuaciones necesarias para evitar la carga fiscal asociada a la transmisión de una empresa familiar es una cuestión de responsabilidad.