Ecosistemas, economía y empleo

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Ecosistemas, economía y empleo
Un acercamiento laboral a la biodiversidad
Ecosistemas, economía y empleo
Un acercamiento laboral a la biodiversidad
Ana Belén Sánchez, Laura Martín Murillo
El presente informe forma parte del proyecto “Reforzando la dimensión laboral
en la agenda sobre la biodiversidad biológica”, que cuenta con la colaboración
de la Fundación Biodiversidad y está cofinanciado por la Federación de Servicios
a la Ciudadanía de CCOO y Sustainlabour.
Las autoras, Ana Belén Sánchez y Laura Martín, de Sustainlabour, quieren mostrar su agradecimiento por sus excelentes comentarios a Catarina Faria Alvés
Silveira, de la Central Única dos Trabalhadores (CUT) de Brasil; a Francisco
Cabezos Rubio y Luis Eduardo Molina, ambos de la Federación de Servicios
para la Ciudadanía de Comisiones Obreras (CCOO) de España; a Paul Opanga
(Regional Education Officer, de la Federación Internacional de la Construcción
y la Madera de África y el Medio Este), a Nicolas Bertrand (Iniciativa Economía
Verde del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente), a Bert de
Wel (asesor, Studiedienst ACV, Belgium), a Arun Kumar (Bureau de los Trabajadores ACTRAV-Asia del Centro Internacional de Formación de la OIT), a
Judith Kirton-Darling (secretaria confederal de la Confederación Europea de
Sindicatos -ETUC-), a Pablo Frutos (Secretaría Confederal de Medio Ambiente
de Comisiones Obreras, España), a Ave Alonso (Confederación de Trabajadores
de Argentina -CETERA-CTA Argentina), así como a Reyes Montiel por su
contribución. Agradecer de igual modo a Judith Carreras y Julianna Angelova,
de Sustainlabour, por su esfuerzo y su trabajo, sin el cual no habría sido posible
la publicación de este informe.
Editado y publicado por Paralelo Edición, S.A.
Resumen ejecutivo
Ecosistemas, economía y empleo: Un acercamiento laboral a la biodiversidad
4
E
n la actualidad, el mundo se enfrenta a una grave
crisis económica, con su impacto más brutal en el empleo. Debemos asumir el desafío urgente de crear 600
millones de puestos de trabajo productivos en el próximo decenio y mejorar los ingresos de los más de 900
millones de personas y sus familias que viven por debajo
del umbral de pobreza1.
Por otro lado, el mundo se enfrenta a una situación
cada vez más crítica de pérdida de biodiversidad. Hasta un cuarto de las especies de plantas está en peligro
de extinción2. Los hábitats naturales de la mayoría de
las regiones del mundo continúan disminuyendo en
extensión e integridad como consecuencia directa de
prácticas agrícolas insostenibles, el desarrollo de infraestructuras, la explotación no sostenible de los recursos
naturales, la contaminación y la introducción y expansión de especies exóticas invasivas. Todo ello ha contribuido a un declive de los servicios de los ecosistemas, lo
cual supone una inseguridad alimentaria creciente y un
aumento del nivel de pobreza, tiene efectos en la salud
y en el bienestar humanos, y ha resultado en el colapso
de actividades económicas como la pesca y la agricultura en algunas regiones del mundo. El cambio climático
agravará aún más esta situación.
El informe de Evaluación de los Ecosistemas del
Milenio3 plantea que “en los últimos 50 años, los seres
humanos han transformado los ecosistemas más rápida y
ampliamente que en cualquier otro periodo de la historia de la humanidad, sobre todo para cubrir las demandas crecientes de alimentos, agua potable, madera, fibra y
combustible. El resultado ha sido una pérdida sustancial
y, en gran medida, irreversible de la diversidad de la vida
sobre la Tierra”.
Las pérdidas en la naturaleza sin duda tienen repercusiones económicas directas y perdurables que no se
tienen suficientemente en cuenta en los procesos de
toma de decisiones de las organizaciones públicas y privadas. Esto significa que, si el valor de la biodiversidad,
los ecosistemas y los servicios que proveen fueran visibles para las economías y las sociedades a las que abastecen, estas verán la necesidad de poner freno a la destrucción que generan, y también de establecer políticas para
abordar estas cuestiones. Cabe destacar que los servicios
de los ecosistemas se pueden valorar desde diferentes
perspectivas, por ejemplo la económica, la ecológica, la
cultural o la espiritual.
Con el presente informe se pretende comprender
mejor los vínculos entre la biodiversidad y el empleo,
que es un aspecto clave de su dimensión social y económica. Preservar la biodiversidad y los servicios de
los ecosistemas no solo es fundamental para sostener
muchos empleos existentes en todo el mundo, sino
que además puede ser una fuente de creación de nuevos empleos.
Organización Internacional del Trabajo (OIT), 2012. Tendencias Mundiales del Empleo 2012: Prevenir una crisis mayor del empleo.
Secretaría del Convenio sobre Diversidad Biológica (2010). Perspectiva Mundial sobre la Diversidad Biológica 3. Montreal, 94 págs.
3
Evaluación de los Ecosistemas del Milenio: Ecosistemas y bienestar humano: Síntesis general.
1
2
cies animales y vegetales, perjuicios para la salud de las
personas y pérdidas de empleos e ingresos.Y el ciclo se
cierra de nuevo, ya que estos daños ambientales reducen
la calidad y productividad agrícola, lo que agrava los
efectos socioeconómicos.
Una biodiversidad rica que dé lugar a servicios
ecosistémicos saludables es un elemento imprescindible para el funcionamiento de la agricultura, el sector
forestal y la pesca, pero también es fundamental para
el correcto funcionamiento de otros sectores como el
turismo, la construcción y el transporte, que dependen
de la provisión de materias primas y los servicios que
ofrecen los ecosistemas: regulación del clima, abastecimiento de agua, regulación del ciclo de nutrientes, etc.
De manera inversa, la pérdida de la biodiversidad afectará a los servicios que proveen los ecosistemas y por tanto
al empleo que se relaciona con estos servicios.
La biodiversidad es clave para muchos
empleos existentes
En general existe una tendencia a cuantificar exclusivamente aquellos empleos que se pierden por medidas
o políticas medioambientales. Durante décadas se ha
hecho énfasis en la parte potencialmente negativa del
cambio hacia la sostenibilidad; en el caso que aquí se
trata, significaría fijarnos también en los empleos que
se pueden perder debido a la implementación de políticas ambiciosas de protección de la biodiversidad. De
hecho existe una mayor cantidad de información sobre
los aspectos negativos del cambio, quizá se deba tan solo
al sentimiento de amenaza que los afectados por estos
cambios sienten frente a ellos.
Sin embargo, para entender la relación entre empleo y biodiversidad tenemos que fijarnos en un número mucho mayor de empleos: aquellos que dependen
de la biodiversidad. Muchos de ellos están afectados y
lo serán aún más por la progresiva pérdida de diversidad biológica. Por ejemplo, se estima que, en la Unión
Europea, 14,6 millones de empleos, es decir el 7% del
mercado laboral, están vinculados con la biodiversidad
de manera directa. En el caso de los países en desarrollo
esta cifra asciende a unos 927 millones, es decir el 35%
de su mercado laboral5.
Nunes, P.A.L.D.; Ding, H.; Boteler, B.; ten Brink, P.; Cottee-Jones, E.; Davis, M.; Ghermandi, A.; Kaphengst, T.; Lago, M.; McConville, A. J.;
Naumann, S.; Pieterse, M.; Rayment, M., y A. Varma (2011) The social dimension of biodiversity policy: Final Report para la Comisión Europea,
DG Medio Ambiente por Contrato: ENV.G.1/FRA/2006/0073 – 2nd, págs vii-205,Venecia/Bruselas, febrero de 2011.
5
Nunes, P.A.L.D.; Ding, H.; Boteler, B.; ten Brink, P.; Cottee-Jones, E.; Davis, M.; Ghermandi, A.; Kaphengst, T.; Lago, M.; McConville, A. J.;
Naumann, S.; Pieterse, M.; Rayment, M., y A.Varma (2011) The social dimension of biodiversity policy: Final Report para la Comisión Europea, DG
Medio Ambiente por Contrato: ENV.G.1/FRA/2006/0073 – 2nd, págs vii-205,Venecia/Bruselas, febrero de 2011.
4
5
Resumen ejecutivo
Hasta la fecha, la investigación sobre este vínculo
ha sido bastante limitada. A pesar de las investigaciones
realizadas en años anteriores sobre “empleos verdes” por
parte de diversas instituciones, organizaciones sindicales (como la Confederación Europea de Sindicatos y
la Confederación Sindical Internacional), ambientalistas (como el Worldwatch Institute, Greenpeace, WWF)
e internacionales, como la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Programa de las Naciones
Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), no se ha
abordado de modo exhaustivo el tema específico del
empleo en relación con la biodiversidad. Lo mismo
puede decirse en el ámbito nacional, en donde existe
una gran cantidad de bibliografía sobre empleos verdes;
sin embargo, la relación exacta entre la biodiversidad,
los ecosistemas y los servicios de los ecosistemas, por
un lado, y el empleo, por el otro, no se ha analizado en
profundidad. Una excepción es el informe La dimensión
social de las políticas de biodiversidad (The social dimension of
biodiversity policy)4, recientemente publicado.
Esta relación (de la biodiversidad, los ecosistemas y
los servicios de los ecosistemas con el empleo) tiene tres
aspectos: en primer lugar, la biodiversidad y los ecosistemas son la base de una buena parte de la economía y, por tanto, gran parte de los empleos existentes
depende directamente de su buen estado. En segundo
lugar, la pérdida de biodiversidad es el resultado de su
gestión insostenible. Los sectores económicos de mayor creación de empleo (como la agricultura y el turismo), cuando se gestionan de manera insostenible, son
los principales responsables de los daños, en ocasiones
irreversibles, en los recursos naturales, la biodiversidad
y los ecosistemas y, como consecuencia de ese daño, se
reducen los servicios que todos disfrutamos de ellos. En
tercer lugar, con una buena gestión ambiental que proteja la biodiversidad y los ecosistemas, podría aumentar
la creación de empleo verde.
Por ejemplo, la agricultura en cualquiera de sus
formas insostenibles –intensiva, monocíclica, basada
en el uso de organismos modificados genéticamente
(OMG)– tiene diversas consecuencias: es una de las mayores causas de pérdida de biodiversidad, contaminación
de agua y tierra, aumento de erosión y desertificación
en el mundo. Sin embargo, la agricultura suministra
empleo a muchos trabajadores del mundo. Todos estos
daños tienen como consecuencia la muerte de espe-
Cuando hablamos de los empleos vinculados con
los servicios de los ecosistemas, estas cifras son incluso
mayores. La biodiversidad representa la base de una gran
parte de la economía y el mercado laboral en los países
en desarrollo, donde llega al 84% y a alrededor del 55%
en la Unión Europea. De hecho, en términos generales,
todos los empleos están vinculados de algún modo a la
biodiversidad, ya que todos los sectores dependen tanto
de la biodiversidad como de los servicios de los ecosistemas y los afectan a ambos.
Nuevos empleos para proteger la
biodiversidad del planeta
Ecosistemas, economía y empleo: Un acercamiento laboral a la biodiversidad
6
En un contexto de profunda crisis de desempleo, una
gestión adecuada del medio ambiente –incluyendo la
protección de la biodiversidad y los ecosistemas– puede ser una fuente importante de creación de nuevos
empleos verdes y, por ello, debería ser, de mucho mayor interés desde el punto de vista de quienes elaboran
políticas. La agricultura es un claro ejemplo: la producción agrícola orgánica crea un tercio más de empleos
que las prácticas no orgánicas. Desde una perspectiva de
calidad de empleo, el sector presenta numerosos desafíos: cuenta con el 70% de empleo infantil, alto índice
de accidentes laborales (los trabajadores tienen dos veces más probabilidades de morir en el trabajo que los
trabajadores de otros sectores), incluyendo muerte por
exposición a productos químicos peligrosos utilizados
como fitosanitarios. Un aumento progresivo de prácticas insostenibles en el sector ha resultado en trabajos
de baja calidad y bajos ingresos. Sin embargo, esta situación, de doble impacto negativo, sobre el ambiente y
sobre los trabajadores, puede cambiar. Una agricultura
que respete la biodiversidad es también una agricultura
que mejora las condiciones de trabajo. La gestión y uso
más sostenible de productos químicos utilizados como
fertilizantes y fitosanitarios tiene resultados positivos en
la salud (reducción de exposición de los trabajadores a
riesgos químicos) y en los ecosistemas (reducción de
contaminación de agua, aire y tierra y por tanto de la
pérdida de biodiversidad asociada).
Un sector forestal respetuoso con la biodiversidad
se traduce en una gran cantidad de empleos adicionales
y mejores condiciones de trabajo. La puesta en marcha
de medidas que tuvieran como objetivo la erradicación de la tala ilegal, la mejora en la formación y las
condiciones laborales de los trabajadores forestales, el
establecimiento de zonas forestales protegidas, la reforestación de zonas degradadas con especies autóctonas que aseguren la diversidad biológica, los trabajos
de limpieza de bosques reduciría el empleo ilegal –y
en muchas ocasiones forzoso–, los accidentes laborales, crearían hasta 10 millones de nuevos empleos (de
acuerdo con estimaciones de la Organización de las
Naciones Unidas para la Alimentación -FAO-) y disminuiría la deforestación y los incendios forestales. La
participación de los trabajadores y el diálogo social en
la toma de decisiones sobre gestión forestal se encuentran entre las formas más motivadoras de identificar
estas medidas doblemente positivas.
La pesca es fundamental para la subsistencia y la seguridad alimentaria de más de 200 millones de personas6, en especial en el mundo en desarrollo. Sin embargo, el 29,9% de los recursos pesqueros es objeto de
sobreexplotación, con rendimientos más bajos en relación a su potencial biológico y ecológico, y necesitan
un plan riguroso de gestión para restablecer su rendimiento máximo sostenible7. En la UE, ese porcentaje
es mucho mayor: el 88% de sus recursos pesqueros está
sobreexplotado y casi el 45% de sus recursos se encuentra fuera de los límites biológicos en los que aún es
posible la recuperación. Como resultado se han perdido
muchos empleos en algunas regiones del mundo. Sin
embargo, es posible revertir esa tendencia y crear nuevas
oportunidades si se implementan políticas adecuadas y
contundentes. Por ejemplo, se podrían crear aproximadamente 100.000 nuevos empleos solamente en Europa
si se renovaran 43 de las 150 áreas pesqueras europeas8,
lo que implica un aumento del 28% del total de empleos de la Unión Europea.
Un sector pesquero que proteja la biodiversidad
debería establecer como nivel de explotación pesquera el rendimiento máximo sostenible, es decir, captura
óptima que puede extraerse de una población de peces año tras año sin poner en peligro su capacidad de
regeneración futura. Esto significa una transformación
profunda del sector, tanto de las empresas que lo componen como de los trabajadores. Para que los efectos
negativos sobre ambos sean minimizados y se ofrezcan
oportunidades de trabajo en sectores alternativos es necesario el desarrollo de un marco de transición justa. La
Sobre pesca: una amenaza a la biodiversidad marina, PNUMA, sin fecha.
El estado mundial de la pesca y la acuicultura, FAO, 2012.
8
Empleos perdidos en el mar, New Economics Foundation, febrero de 2012.
6
7
jorar las condiciones laborales, pero para maximizar este
potencial se deben poner en marcha medidas ad hoc
que complementen las políticas de biodiversidad. Habrá
mayores posibilidades de éxito de las políticas, programas y medidas de conservación de la biodiversidad y de
los ecosistemas naturales si se aborda la equidad social
y de género y se brindan medios de vida decentes a las
comunidades.
Los desafíos de la transición: exigir una
Transición Justa
Existen, además de las oportunidades, diversos aspectos
transicionales que hay que entender con mucha mayor
profundidad. Algunos de los sectores descritos anteriormente, que son intensivos en mano de obra, sabemos
que serán afectados gravemente si se siguen desarrollando sin tener en cuenta los límites naturales. Sin embargo, las medidas de protección sobre biodiversidad del
mar, la limitación de la pesca insostenible, por ejemplo,
tendrían también un impacto inmediato en los empleos
de hoy, que hay que analizar y minimizar a través de
medidas concretas.
Además, las consecuencias serán diferentes para empresas y trabajadores. Por ejemplo, si se considera la sustitución de los recursos que se utilizan en la industria de
producción y procesamiento, algunas de las industrias
que dependen de las materias primas que provee la biodiversidad, como la madera y los combustibles, tienen
opciones relativamente altas de sustitución. Es decir, se
pueden encontrar otras materias primas para reemplazar a las que se utilizan actualmente. Por lo tanto, las
industrias tienden a buscar esas opciones alternativas
(buscar recursos en otros ecosistemas y moviendo su
producción a esos lugares) para hacer que las inversiones
realizadas sean rentables y asegurar sus ingresos. Sin embargo, los trabajadores que viven de la extracción de los
recursos naturales perderán el empleo cuando el recurso
se agote y sus posibilidades de encontrar nuevo empleo
dependerán de innumerables factores, que podrían estar
fuera de su control. Los impactos en la biodiversidad
serán muchas veces irrecuperables y también lo serán,
por ello, sus empleos.
Muchos sectores extractivos, que no se analizan en
detalle en el informe, tienen consecuencias de gran
Según cifras de la OIT, el sector proveyó 235 millones de puestos de trabajo en 2010 y según la Organización Mundial del Turismo podría
ofrecer empleo a 296 millones de personas para 2019.
10
Linking Tourism and Biodiversity, Organización Mundial del Turismo (OMT), 2009.
9
7
Resumen ejecutivo
acuicultura sostenible, las actividades de conservación,
el ecoturismo marítimo, además de la pesca tradicional,
son algunos de estos sectores alternativos.
El turismo es un importante sector de creación de
empleo (supone el 8%9 del empleo global) y se espera
que siga creciendo. Gran parte del sector turístico tiene
una alta dependencia de la biodiversidad. Disfrutar de la
naturaleza y conocer ecosistemas ricos en biodiversidad
se encuentran cada vez más frecuentemente entre las
razones que tienen los turistas para elegir su lugar de vacaciones10. Por tanto, la biodiversidad es y debe tratarse
como un capital esencial del sector. Pero también existen numerosos efectos negativos para la biodiversidad.
Por ejemplo, la construcción de infraestructura e instalaciones que puede causar una importante alteración
o destrucción de hábitats naturales; además, el turismo
puede provocar el agotamiento de recursos locales y la
contaminación del agua por la generación de aguas residuales contaminadas.
El ecoturismo o el turismo vinculado a la biodiversidad puede suponer una fuente de empleo local importante. Para ello, en primer lugar, se debe poner en
valor esta riqueza biológica. La participación en la toma
de decisiones que tienen que ver con el uso de la biodiversidad en un marco de promoción de turismo local,
así como programas de formación profesional para valorar la biodiversidad son elementos indispensables para
que este potencial de empleo local se haga realidad.
La gestión de los recursos hídricos también es un
sector que depende fuertemente de la biodiversidad.
Diferentes estudios reflejan la estrecha correlación entre
las áreas geográficas mundiales donde la biodiversidad
está amenazada en mayor medida con las zonas geográficas con mayor riesgo en la seguridad de acceso al agua,
lo que significa que cuando existe una amenaza sobre
la biodiversidad, existe también una amenaza sobre el
acceso al recurso agua. Además, una gestión de los recursos hídricos que respete la biodiversidad podría ser
un yacimiento de empleo verde.
Elaborar una selección de políticas específicas podría tener el doble beneficio en la conservación de la
biodiversidad y en creación de empleo, además de mejorar los ingresos y medios de vida mediante la creación
de empleos decentes. Por tanto es fundamental tener
en cuenta la calidad de los empleos. La bibliografía
existente demuestra que la producción respetuosa de
la biodiversidad generalmente tiene el potencial de me-
Ecosistemas, economía y empleo: Un acercamiento laboral a la biodiversidad
8
magnitud en la biodiversidad. El de la minería es un
sector que supone particulares desafíos que suelen contraponer los intereses de sus trabajadores, interesados en
mantener los únicos empleos a su alcance, con los intereses de las comunidades en las que se desarrollan las
explotaciones, que ven sus hábitats contaminados por
industrias de las que no se benefician económicamente
y que tienen importantes impactos también sobre su
salud. El de la minería, como otros sectores extractivos,
debe avanzar en una producción con mucho menor
impacto ambiental, solo hay que pensar en los gravísimos impactos de producciones como la minería a cielo
abierto, que respete los recursos y los modos de vida de
las comunidades locales, en el que se tenga en cuenta un
desarrollo económico sostenible para las mismas y que
provea de trabajos decentes para sus empleados, lo que
en la actualidad está muy lejos de la realidad.
Afrontar esa situación de manera inclusiva y equitativa es el objetivo del marco de transición justa. Constituyen sus principales elementos la evaluación de oportunidades de creación de empleo como resultado de una
gestión respetuosa de la diversidad biológica, la toma de
decisiones basada en una evaluación previa de impactos
sociales, económicos y ambientales, el establecimiento
de políticas activas de mercado laboral, políticas económicas y sociales complementarias como fiscalidad verde,
el refuerzo de sistemas de protección social en las zonas
afectadas, el diálogo social y la participación en la toma
de decisiones vinculada a la biodiversidad.
La participación de los trabajadores
La conciencia ambiental de los trabajadores y sus organizaciones ha aumentado de manera muy importante
en los últimos años, y aunque en este avance otros temas
ambientales resultan prioritarios para los sindicatos, este
informe también recoge algunas experiencias pioneras
en biodiversidad, en algunos pocos casos de manera directa y en algunos más de manera integrada en el análisis de sostenibilidad de los sectores.
Dentro de las experiencias para construir sectores
más sostenibles de un modo integrado, se recoge por
ejemplo la formación en instalaciones hoteleras sostenibles a trabajadores malayos, la introducción de cláusulas ambientales en los convenios del sector turístico
del sindicato griego, la participación de trabajadores de
Declaración de la CSI a la 10 Conferencia sobre Diversidad Biológica.
11
bosques amazónicos en iniciativas de certificación forestal o la intensa actividad de los empleados del sector
publico en muchos países del mundo por una gestión
pública y sostenible del agua.
Hay además organizaciones que están llevando a
cabo propuestas concretas sobre biodiversidad, el sindicato francés CFDT dedicó un monográfico de su
revista al tema y participa activamente en la coordinación de investigaciones multidisciplinares sobre las
dinámicas entre ecosistemas y la acción humana. El
sindicato español CCOO, a través de su Federación
de Servicios Públicos (FSC), es un actor fundamental
en las propuestas nacionales sobre gestión sostenible
de los bosques y también sobre políticas pesqueras,
haciendo de la defensa de la biodiversidad parte fundamental de sus propuestas. La CUT de Brasil realizó
una fuerte campaña en contra de la modificación del
código forestal que había aprobado el Parlamento brasileño y pidió activamente a la presidenta Dilma que la
vetara. El PIT-CNT en Uruguay propone en la actualidad una nueva política pesquera que genere empleos
sostenibles y que respete la biodiversidad del océano.
Las tres centrales sindicales belgas están representadas
en los consejos regionales ambientales así como en el
consejo de desarrollo sostenible federal, en el que se
deciden las políticas de biodiversidad. En la Minaraad
flamenca, las tres centrales sindicales son consultadas
y participan activamente no solo sobre cuestiones de
políticas de biodiversidad, sino también sobre proyectos prácticos muy concretos, como las nuevas áreas
protegidas.
Las organizaciones sindicales pueden además hacer
mucho más, y en la cumbre de Nagoya se comprometieron a comenzar un marco de trabajo que recoja los
siguientes elementos11:
• Promover una normativa y estrategia desde las Administraciones públicas acordes con la gravedad del
problema.
• Demandar un nuevo modelo productivo que conserve la diversidad biológica, en el que se internalicen todos los costes y se evalúen las pérdidas y ganancias del recurso natural.
• Demandar la inclusión de la variable de biodiversidad en las diferentes políticas públicas y en los pro-
yectos privados en todos los ámbitos y sectores, especialmente en el de las infraestructuras de transporte,
industriales y turísticas.
• Defender la financiación de las políticas de biodiversidad, demandar la protección de los ecosistemas
y gestionarlos contando con la participación de las
comunidades que viven y dependen de ellos.
• Ayudar a evitar cambios de uso de suelo y de urbanización realizados sin criterios de conservación de la
naturaleza, especialmente los que conllevan deforestación, degradación de humedales o destrucción de
cualquier lugar de alto valor natural.
• Promover nuevos modos agrícolas, pesqueros y ganaderos, como la agricultura o ganadería ecológi-
cas, la pesca extractiva tradicional o la acuicultura
sostenible.
• Crear alianzas con otros actores sociales con los que
se compartan objetivos.
El marco de transición justa es parte fundamental
de las propuestas sindicales, en las que se trata de realizar la planificación y transformación de las economías
que generen empleos decentes en los que los derechos
de los trabajadores sean respetados, que a través de la
inversión en nuevos sectores ayude a revertir la crisis
de empleo y de biodiversidad, y que marque el camino
para una transformación de los sectores existentes en la
que se garanticen los medios de vida de los trabajadores
afectados por los cambios con medidas de protección y
diversificación económica.
9
Resumen ejecutivo
Se ha hablado mucho sobre los problemas sociales y ambientales interrelacionados
que enfrenta el mundo. El presente informe busca destacar dos dimensiones que
habitualmente no se abordan de manera conjunta: el empleo y la biodiversidad.
Este informe:
• Ofrece una perspectiva de la relación empleo-biodiversidad, describiendo los
vínculos existentes entre ambos, cómo se refuerzan y cómo se debilitan mutuamente. En este sentido, el informe recoge información sobre oportunidades
económicas y de creación de empleo derivadas de la conservación de la biodiversidad y la gestión sostenible de los recursos naturales y de los ecosistemas.
• Describe los desafíos a los que tendrá que enfrentarse el mundo del trabajo
en esta transición a una gestión más sostenible de los ecosistemas y la protección de la biodiversidad. El informe tiene entre sus objetivos identificar cómo
pueden tratarse estos desafíos desde una perspectiva de la transición justa. El
informe trata no solo de la dimensión cuantitativa, sino también de la calidad
del empleo.
• Finalmente, el informe también pretende contribuir a mejorar la comprensión
de estas relaciones por parte de las organizaciones sindicales y a fomentar la
incorporación de la protección de la biodiversidad en sus políticas y propuestas sindicales. En ese sentido, el informe también incluye ejemplos de trabajo
pionero en esta área realizado por sindicatos en todo el mundo.
Con la colaboración de:
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