Centro de Opinión Pública de la Universidad de Belgrano Terra Networks de Argentina PROYECTO: "ESCENARIOS POSIBLES PARA LA ARGENTINA 2002" INVESTIGACIÓN: "ESCENARIO ECONÓMICO PROYECTADO PARA EL AÑO 2002" INFORME DE INVESTIGACIÓN El Centro de Opinión Pública de la Universidad de Belgrano y Terra Networks de Argentina están llevando a cabo de manera conjunta una serie de investigaciones sobre política y economía que dan forma a un proyecto denominado "Escenarios posibles para la Argentina 2002". En esta oportunidad y en el marco del mencionado proyecto, se ha procedido a indagar el escenario económico que un grupo de personas altamente calificadas conformado por economistas, empresarios y periodistas especializados en temas económicos proyectan para el año 2002 a partir de la situación actual en la que se encuentra el país. La entrevista que se realizó con todos los participantes se articula en torno a cuatro ejes de análisis diferentes. 1. La primera línea de análisis se vincula con la evaluación de las posibilidades de default, devaluación, dolarización y mantenimiento de la convertibilidad. a. La amplia mayoría de los entrevistados cree que es altamente probable que la Argentina ingrese en un default real en el año 2002. 1 El econom ista Marcelo Lascano argumenta que "si se mantiene este programa económico, con las imperfecciones que se deben agregar por el ensuciamiento del régimen monetario bancario imperante, es muy probable que entremos en un default real". Jorge Berardi, ex presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, entiende que "en alguna medida, si no se pagan las jubilaciones y el Estado pospone pagos, el default está presente ya. En el 2002 dependerá del apoyo conseguido del FMI y de los acreedores internacionales para los pagos del año próximo". En sentido coincidente opina Alberto Benegas Lynch, economista y Presidente de la Sección Ciencias Económicas de la Academia Nacional de Ciencias, para quien "el default de facto se produjo cuando comenzó el canje de la deuda" . También Mario Rapoport, Director del Instituto de Investigación de Historia Económica y Social de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, juzga que "de hecho estamos en default" dado que la economía argentina no puede afrontar los pagos de la deuda, un default que sería no solo externo sino también interno dadas las medidas mediante las cuales se procedió a la devaluación de los salarios de los estatales. A criterio del periodista Marcelo Bonelli, "de 100% de probabilidades estamos en un 70% de entrar en un default" y sostiene que "más que de lo económico dependerá de lo que haga el gobierno y de la capacidad política para implementar medidas económicas". Excepciones a esta tendencia las constituyen las opiniones del empresario Francisco Macri, presidente de SOCMA, quien afirma que "en un mundo necesitado de países con recursos y calidad humana para estrechar vínculos cada vez más sólidos y compatibles Argentina, en el hemisferio sur, es un socio estratégico imprescindible para EEUU" y de Manfredo Arheit, presidente de ADIMRA, para quien "no hay razones técnicas que justifiquen la necesidad imperiosa de un default real". b. Con referencia a la convertibilidad, de manera abrumadora la mayor parte de las personas consultadas se inclinó a pensar que no sería posible sostener la convertibilidad durante el año próximo. En alusión a este a este tema Aldo Ferrer, Profesor Titular Consulto de la UBA, indica que la convertibilidad "de hecho ya no existe: las reservas del Banco Central representan el 20% del circulante y los depósitos". De modo similar, Marcelo Lascano cree que "la caja de conversiones no se puede mantener porque ha sido ensuciada con los controles bancarios y con el control que se implantó en diciembre para paliar la crisis. El régimen actual ya es contra natura por la adulteración permanente de sus reglas de juego" y según Jorge Schvarzer, Secretario de Investigación y Doctorado de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, "hay una gran demanda de cambio: la crisis productiva, los problemas estructurales en nuestra economía, la crisis bancaria, la crisis en la balanza de pagos, profundizan la falta de credibilidad y el sostén de la 2 convertibilidad". Por su parte, Rapoport opina que "la convertibilidad está terminada" en tanto las últimas medidas de control de cambios implican su fin. En el mismo sentido, el economista José Luis Espert, titular de Espert & Asociados, apunta que "desde que se emiten cuasidineros (Patacones, Lecops, Quebracho, etc.) y luego del control de cambios establecido a partir de diciembre, ya no hay más convertibilidad". A partir de esta situación, para Sergio Berensztein, politólogo y profesor de la Universidad Torcuato Di Tella, se abren tres escenarios posibles: "o continuar con la convertibilidad sucia o ir hacia una devaluación con dolarización o la flotación del tipo de cambio" c. Consultados respecto de cuál sería el mejor camino a seguir a este respecto dado el crítico contexto económico actual, mayoritariamente hicieron referencia a las opciones de devaluación, pesificación de la economía y flotación del tipo de cambio. También, aunque minoritariamente, tuvieron menciones las alternativas de dolarizar e intentar mantener la convertibilidad. Jorge Berardi advierte que si bien "se debe buscar el tipo de cambio con mayor realidad" y que aunque el tipo de cambio es un elemento importante, de ninguna manera puede constituir el eje de la política económica. De manera coincidente, Espert señala que "devaluación, flotación, pesificación, etc., son todos instrumentos de política económica y lo que hay que discutir primero son objetivos de política económica y recién en segundo lugar los instrumentos". Schvarzer visualiza el despegue poniendo el acento en una "baja de las tasas de interés" y cree que "sería mejor devaluar y bajar las tasas a menos de 7% ... desarrollar una política monetaria opuesta a la convertibilidad ... generar una política económica centrada en la actividad productiva en determinados sectores". Juan Luis Bour sostiene que "no podemos persistir en los controles ... es necesario dar señales claras en lo económico y político ... cuanto más control, menos capital y menor inversión ... debemos estructurar la economía desde lo básico". 2. El segundo eje temático abordado en la entrevista refiere a las posibles salidas de la recesión y las probabilidades estimadas como reales de una reactivación de la economía en algún trimestre del año entrante. a. Algunos de los opinantes, como el periodista Daniel Muchnik, pronosticaron que ni siquiera cambiando el esquema de la economía actual existirían posibilidades para salir de la recesión en el año 2002 y 3 que "tomará mucho tiempo en recuperarse la actividad". Según Manfredo Arheit, "desde el punto de vista técnico es posible salir de la recesión en el 2002. Pero teniendo en cuenta la irresponsabilidad ... de algunos referentes de la política, sumado a la absoluta incapacidad técnica de entender los mecanismos técnico-políticos para recrear las fuerzas de trabajo nacionales" no se puede avizorar una salida de la recesión en el 2002 y "las empresas se preparan y/o resignan para un escenario de empeoramiento". De manera concordante, Rapoport prevé un proceso de mayor deflación en el que la recesión continuará. Otros de los entrevistados como Ferrer o Lascano, en cambio, se mostraron más optimistas y si bien manifestaron que no existirían posibilidades de salir de la recesión si se mantienen las condiciones actuales, confían en que sería posible lograr algún grado moderado de recuperación si se cumpliera con la condición sine qua non de implementación de una nueva política económica. Por su parte, Schvarzer sostiene que más que reactivar la economía hay que reconstruirla ya que no hay margen para reactivar por lo que hay que pensar en crear una nueva política eco nómica con un sistema impositivo que no sea perverso y que estimule la producción: "cambiemos el sistema, hay que cambiar la realidad productiva". b. Cuando se los inquirió respecto de los sectores que a su criterio liderarían la eventual recuperación, se inclinaron principalmente por las exportaciones. Los productos de consumo interno, la construcción y la infraestructura también obtuvieron algunas menciones. En cuanto al PBI, mayoritariamente los entrevistados coincidieron en afirmar que no hay expectativa de crecimiento y que probablemente decrecerá. 3. Una tercera línea de indagación alude a los problemas del desempleo y a la relación entre las decisiones políticas y la reactivación económica. a. En primer lugar, debe reseñarse que entre la abrumadora mayoría de los participantes predomina la creencia firme en que la reactivación 4 económica está profundamente atada y condicionada a las decisiones políticas. Daniel Muchnik sintetiza su posición afirmando que "la economía es un instrumento al servicio de la política"; Rosendo Fraga puntualiza que "sin política no hay economía" y Jorge Berardi asegura en el mismo sentido que "la economía depende de la concertación política y de las alianzas con los gobernadores provinciales" y que "la reactivación económica está totalmente ligada a las decisiones políticas y la salida económica es una consecuencia del entendimiento político". De modo coincidente, Arheit refiere que "no hay ninguna duda de que la reactivación económica está atada a las decisiones políticas" y también el economista y empresario Enrique Blasco Garma se muestra convencido de que "actualmente el origen del problema es político y de falta de confianza en la conducción política". Asimismo, Marcelo Bonelli indica que "la reactivación económica está totalmente atada a las decisiones políticas. El epicentro de la crisis económica es una crisis política" no existiendo, a su criterio, ningún instrumento económico que pueda suplantar un mando firme o tener resultado sin él. Para Rapoport el problema se vincula con la clase dirigente y cree que "si no hay un cambio profundo en ella no cambiarán las cosas". José Luis Espert, en cambio, mantiene una posición más relativista a este respecto, afirmando que "si hoy existiera acuerdo político, como el consenso es sobre ideas económicas totalmente incoherentes (cerrar la economía, no bajar más el gasto público y emitir cuasidineros o terceras monedas para reactivar), la situación seguiría siendo caótica como hoy. Obviamente que para implementar un plan coherente ... se necesita muchísimo poder político". Sergio Berensztein cree que "en un principio la crisis era política y arrastró a la economía, pero ahora la crisis es económica y arrastra a la política" por lo que "no alcanza con un acuerdo político para salir de la situación de depresión económica". b. En cuanto a los valores que proyectan para la tasa de desempleo para el año 2002, las opiniones también fueron divergentes aunque en su mayoría sostienen que el desempleo se incrementará. Del lado de quienes creen que aumentará , Muchnik pronostica que "del 18% actual la tasa puede trepar al 23% o 24%", Espert que "rondará el 25%" y Bonelli estima que, de continuarse las condiciones actuales "ya en la medición de mayo va a aumentar el desempleo ". Arheit también cree que "la profundización de la crisis provocará un incremento de las cifras" y Rapoport anticipa que se mantendrá en los valores actuales o aumentará. 5 A criterio de Aldo Ferrer, lo que suceda con el desempleo dependerá de la implementación de una nueva política económica en tanto "si se mantiene la política económica actual se mantendrá también la tasa de desempleo y si, en cambio, cambia la política económica, podría disminuir significativamente". Una posición semejante es compartida por Marcelo Lascano, para quien el desempleo podría disminuir "aunque no muy sostenidamente y siempre y cuando haya otra política económica". Comparte dicha postura Benegas Lynch quien considera que los valores que alcance la tasa de desempleo dependerán "de la política económica de aquí en más" aunque su apreciación es que "los problemas se agudizarán" mientras se sigan incluyendo restricciones. Jorge Berardi juzga que existen chances de que disminuya el desempleo "si hay entendimiento político y, en consecuencia, un nuevo programa económico". Consultado también a este respecto Francisco Macri, conjetura que si se hiciera desaparecer el trabajo en negro y se controlara con firmeza el ingreso de nuevos residentes en Argentina "se puede aspirar a reducir a un máximo del 15% la desocupación". Schvarzer comenta que la crisis es "estructural" y que el desequilibrio se refleja fundamentalmente en la desocupación y afirma que "desde el año '94 estamos por sobre el 10% de desocupación con un promedio del 14% durante los últimos 7 años que, junto con la caída del PBI, durante tres años consecutivos reflejan la crisis de enorme ineficiencia del aparato económico". 4. Finalmente, un cuarto punto de la entrevista apunta a conocer cuáles son, a criterio de los entrevistados, las medidas económicas prioritarias e indispensables para salir de la crisis económica en la que se encuentra inmerso actualmente el país. Las propuestas evidencian una gran diversidad. Las que concentraron el mayor consenso fueron: *En primer lugar, la necesidad de mantener en equilibrio las cuentas públicas, controlar el gasto público y lograr la aprobación de un presupuesto balanceado para el año 2002. *En segundo término, también hubo alto consenso en torno a la necesariedad de reformar el sistema impositivo y tributario . * Otras medidas que también fueron apuntadas se refieren a: * la resolución del problema de la coparticipación, 6 * la implementación de políticas favorables para la producción nacional a los fines de reactivar la cadena productiva, *la reformulación de las políticas de exportaciones e importaciones, *modificaciones relativas a la política cambiaria (aunque en diversos sentidos, dado que hay quienes proponen que lo adecuado sería un ajuste del tipo de cambio, otros un ajuste con flotación de la tasa de cambio y otros se inclinan por el mantenimiento del control de cambios) *la reforma del sistema previsional, * la reforma del sistema aduanero, * la renegociación de la deuda, *modificar la política crediticia *implementación de un seguro de desempleo *reformar el rol del Estado *establecer una política monetaria opuesta a la convertibilidad, optando por un régimen monetario consistente con lo fiscal entre otras. FECHA DE REALIZACIÓN DEL INFORME: 19 DE DICIEMBRE DE 2001 FICHA TÉCNICA: Tipo de estudio: Indagación cualitativa realizada mediante entrevistas de tipo individual Fecha de realización: entre el 6 y el 18 de diciembre de 2001 Participantes de la investigación (por orden alfabético): Manfredo Arheit, Alberto Benegas Lynch, Jorge Berardi, Sergio Berensztein, Marcelo Bonelli, Juan Luis Bour, Luis Mario Castro, José Luis Espert, Aldo Ferrer, Rosendo Fraga 1, Enrique Blasco Garma, Marcelo Lascano, Francisco Macri, Daniel Muchnik, Mario Rapoport, Jorge Schvarzer. 1 Todas las citas al Dr. Rosendo Fraga provienen de un documento que amablemente nos hiciera llegar en carácter de colaboración con la presente investigación, titulado "Sin política no hay economía". 7 8