PROYECTO DE DECLARACION Autores: Senadores del Bloque PJ - FRENTE PARA LA VICTORIA Tema: Expresar el rechazo y preocupación de esta H. Cámara por los ilegales hechos de violencia cometidos en la vía pública por ciudadanos que se arrogaron el uso de la fuerza que sólo puede ser ejercida legítimamente por el Estado. Fundamentos: En los últimos días han acontecido hechos de violencia en distintas ciudades del país, que se caracterizan como linchamientos callejeros a presuntos autores de hurtos o tentativa de hurtos en la vía pública que quedaron en situación de indefensión después de ser aprehendidos, siendo objeto de ataques de violencia colectiva perpetrada con alevosía y ensañamiento. Si bien tales hechos son acciones minoritarias de algunos ciudadanos, este proceder es repudiable desde todo punto de vista, ya que nos retrotrae a una de las formas más primitivas de punición en la etapa pre-científica de la historia del Derecho Penal como lo era la venganza privada, anterior aún a la “Ley del Talión” que históricamente constituye el primer intento por establecer una proporcionalidad entre daño recibido en un crimen y daño producido en el castigo, como límite a la reacción desproporcionada de la venganza. Sin embargo, desde algunos sectores se han calificado a los hechos ocurridos en las últimas semanas como “justicia por mano propia”, como una forma de legitimación y justificación del uso de la violencia, generando un clima social que promueve y multiplica la misma violencia, y pretendiendo instalar un “debate” sobre una cuestión que debería estar fuera de toda discusión, como lo es que ante un hecho delictivo el Estado es el único que puede ejercer el uso legítimo de la fuerza en el sistema democrático y republicano. Entonces, quien decide “hacer justicia por mano propia” lesionando o matando a un posible delincuente, comete el delito de lesiones u homicidio, sin que tales acciones puedan encuadrarse en eximentes de culpabilidad como la legítima defensa o la emoción violenta, cuyos requisitos no se cumplen en los casos de “linchamientos” recientes. Así ha sido explicado por numerosos juristas e, incluso, por dos de los miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. La vicepresidenta de ese Alto Tribunal, Dra. Elena Highton de Nolasco expresó sobre los linchamientos de presuntos delincuentes: “Son homicidios. No hay proporción entre el robo o el hurto de una cartera y un homicidio violento, sangriento y en masa”. En el mismo sentido dijo el Juez Eugenio Zaffaroni que “No se trata de ajusticiamientos, sino de homicidios calificados… Eso es un homicidio doblemente calificado, calificado por alevosía y por ensañamiento, y está en el artículo 80 del Código Penal”. Sin dudas la inmensa mayoría de la sociedad discrepa con este modo violento de resolver los conflictos, habiéndose alzado múltiples voces desde todos los sectores tanto políticos como eclesiásticos, judiciales y de organizaciones de la sociedad civil, reafirmando el principio de resolución de los conflictos en el marco de un Estado de derecho. En ese sentido, el Presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, afirmó que "En un Estado de Derecho el camino a transitar es el acudir a las instituciones que corresponde. Si es 'por mano propia' no es justicia, debemos ser claros", y aseveró que los linchamientos no son "una reacción lógica sino emocional y con un serio componente de irracionalidad” Por su parte, la Asociación Argentina de Profesores de Derecho Penal (AAPDP) advirtió: "Pareciera que 39 siglos después se está desandando el camino civilizatorio volviendo a épocas de la venganza ilimitada por mano propia". Desde la dirigencia política, el repudio fue casi unánime. "Es un horror. No es justicia, ni por mano propia, ni de naturaleza alguna. Es barbarie, es la jungla. Nada puede justificarlo. Hay que ser muy categórico en la condena” sentenció con firmeza el Diputado radical Ricardo Alfonsín. La recuperación de la democracia y el Estado de Derecho hace ya más de 30 años, fue posible por la convicción colectiva de que ninguna forma de violencia y ningún homicidio puede ser justificado por razón alguna. No podemos entonces, desde este Órgano Legislativo, dejar de rechazar estos actos de violencia ilegales y aberrantes, promoviendo desde este Poder el debate público responsable en materia de seguridad y convivencia ciudadana, en el marco del respeto al Estado de Derecho democrático y los derechos humanos. POR ELLO LA HONORABLE CAMARA DE SENADORES DE LA PROVINCIA DE CORRIENTES DECLARA El más enérgico rechazo y preocupación de este Senado por los ilegales hechos de violencia acaecidos en distintas ciudades del país, cometidos en la vía pública contra presuntos autores de hurtos que, habiendo sido aprehendidos y estando en situación de indefensión, fueron objeto de ataques de violencia colectiva que, por las lesiones causadas e incluso el homicidio en un caso, se traducen en la comisión de delitos tipificados en el Código Penal por parte de quienes se arrogaron el uso de la fuerza que sólo puede ser ejercida legítimamente por el Estado. Asimismo, esta H. Cámara reafirma el principio de resolución de los conflictos en el marco de un Estado de derecho, como corresponde en el sistema democrático en el que los argentinos han elegido vivir.