Foja:107 Ciento Siete Concepción, tres de octubre de dos mil once. VISTO: 1.- Que a fs. 48 comparecen en representación de sus hijos doña Elizabeth Nieves Bustos Bustos por Constanza Solange Gómez Bustos, ambas con domicilio en pasaje 20 N° 538, Padre Hurtado, comuna de Hualpén; don Belfor Fernández Pérez en representación de Aura Rocío Fernández Vidal, con domicilio en calle 8 N° 4462, Padre Hurtado, comuna de Hualpén; doña Nury Sanzana Fuentes por Julio Esteban Cáceres Sanzana, con domicilio en Floresta 2 calle 1 pasaje 14 N° 5981 comuna de Hualpén; don Víctor Landeros Carrasco por Víctor Hernán Landeros Leal, domiciliado en Amberes N° 864 Peñuelas 3 comuna de Hualpén; doña Raquel Vergara Lazcano por Camila Fernanda Vásquez Vergara, domiciliada en Hamburgo N° 4483 comuna de Hualpén y doña Mónica Ivonne Martínez Concha en representación de su hija Daniela Valentina Vidal Martínez, ambas domiciliada en pasaje Romea N° 3817 Conjunto Gran Bretaña, comuna de Hualpén y recurren de protección en contra del COLEGIO PARTICULAR SUBVENCIONADO GRAN BRETAÑA DE HUALPÉN y de su representante legal doña MARÍA ANGÉLICA DRAGO MACHADO, Directora del establecimiento, ambos con domicilio en Avenida Gran Bretaña N° 4630 comuna de Hualpén, por las acciones ilegales y arbitrarias de que tomaron conocimiento el día 30 de agosto del año en curso las que han perturbado y vulneran de manera continua los derechos y libertades fundamentales que la Constitución Política de la República reconoce a todos los habitantes del territorio. Refieren que desde el mes de junio a la fecha y dentro del marco de las movilizaciones desarrolladas a nivel nacional para lograr mejorar al sistema educacional chileno, se presentó en numerosas oportunidades un pliego de peticiones a la dirección del colegio recurrido las cuales no fueron aceptadas por los docentes directivos. El día 29 de agosto de 2011 a las 04:00 de la madrugada doce jóvenes de los cuales seis eran alumnos del establecimiento, intentaron tomarse en forma pacífica el colegio y siendo las 05:00 horas del mismo día llegó carabineros, ante lo cual los alumnos señalaron que era una toma, y reciben agresiones verbales, quedando todos detenidos en la 4° Comisaría de Hualpén, lo que fue informado a los familiares, como asimismo que los daños se estimaban en la suma de diez millones de pesos. Hacen presente que el colegio no dejó de funcionar en ningún momento porque continuaron las clases en forma normal, por esta razón no se explican claramente el avalúo de los daños que, por su monto, debieron ser ostensibles y entorpecer su funcionamiento. Asimismo, indican que en la actualidad se lleva una investigación por el Ministerio Público de Talcahuano, sin que a la fecha exista sentencia condenatoria en contra de los alumnos. Agregan que el día 30 de agosto de 2011 recibieron una llamada telefónica desde el colegio, donde se les informó que tenían que firmar una carta de expulsión de sus hijos, la que ni siquiera fue informada por su directora, sino que por los profesores jefes de cada alumno, carta que no ha sido firmada por ninguno de los apoderados. Indican que la medida tomada por la dirección del colegio ha llevado incluso a no dar cumplimiento a una resolución judicial, toda vez que el 7 de septiembre de 2011 en audiencia ante el Juzgado de Garantía de Talcahuano que sustituyó la medida de prohibición de acercarse al colegio por la de presentarse periódicamente ante el juez o la autoridad que se le designare. A juicio de los recurrentes estos hechos vulneran las garantías constitucionales consagradas en el artículo 19 numerales 3, 12 y 24 de la Carta Fundamental. Piden que acogiendo el recurso se declare que la medida de expulsión aplicada no corresponde a derecho y se adopten las medidas conducentes a lograr el reintegro de los alumnos al colegio recurrido, o las que se juzguen necesarias para restablecer el imperio del derecho y la debida protección a los recurrentes. 2.- Que a fojas 73 informe por las recurridas la abogada Luisa Donat Gutiérrez, solicitando el rechazo del recurso, por cuanto la dirección del establecimiento no ha obrado en forma arbitraria ni ilegal. No ha existido vulneración a la libertad de emitir opinión ya que el documento entregado al colegio con fecha 25 de agosto del presente año carece de fecha cierta, contiene 29 rúbricas y no se refiere ni el nombre ni la cedula de identidad de quienes los suscriben, por lo que no consta que correspondan a alumnos del establecimiento. Agrega que en él se indica como plazo de respuesta el día 29 de agosto, sin embargo antes de cumplirse el referido plazo a las 02:45 horas seis alumnos acompañados de seis personas ajenas al establecimiento educacional ingresaron violentamente al colegio, causando cuantiosos daños y sustrayendo especies según consta en el parte de Carabineros de Chile, sin dar posibilidad a las autoridades del colegio de responder a las peticiones dentro del plazo indicado por los alumnos. En cuanto a la vulneración del debido proceso, indica que efectivamente el día 30 de agosto, por instrucción de la dirección del colegio los profesores de curso citaron vía telefónica a cada uno de los apoderados de los alumnos involucrados en los hechos ocurridos en el colegio en la madrugada del 29 de agosto de 2011, con la finalidad de que concurrieran al establecimiento para ser informados personalmente de los hechos y analizar junto con la Dirección del establecimiento el procedimiento para determinar las responsabilidades y posibles sanciones a aplicar a los alumnos por su conducta reñida con las normas de convivencia del colegio, pero lamentablemente ninguno de los apoderados acudió al establecimiento, fue sólo entonces cuando la dirección, considerando que los alumnos habían sido formalizados y, configurándose esta conducta como una de las faltas gravísimas establecidas en el reglamento de convivencia escolar, debió forzadamente adoptar la medidas de cancelación de matrícula en forma inmediata, de acuerdo a lo establecido en el T.VIII artículo 7° del mencionado reglamento, lo que fue informado al Secretario Ministerial de Educación de Concepción con fecha 7 de septiembre de 2011. Por lo anteriormente expuesto indica que no existe ilegalidad en el actuar de la recurrida ya que la medida de cancelación de matricula se encuentra expresamente establecido en el reglamento interno que acompaña a su informe. Expresa que los alumnos fueron reintegrados al establecimiento con fecha 20 de septiembre, dando cumplimiento a la orden de no innovar acogida por esta Corte con fecha 13 de septiembre. Por otro lado, indica que no puede señalarse que se trató de un intento de toma lo ocurrido el 29 de agosto de 2011, toda vez que ingresaron doce personas al establecimiento de las cuales sólo seis correspondían a alumnos del colegio, hechos que de manera alguna pueden calificarse de pacíficos porque los alumnos ingresaron violentamente, rompiendo la puerta de vidrio del área de párvulos, destruyendo durante su permanencia todo el sistema de seguridad compuesto por dieciséis cámaras, cableado del mismo, cinco sirenas y teclado de las alarmas; además, en la sala de computación se destruyeron seis computadores del proyecto “enlace” con una galletera que estaba en el lugar y se sustrajeron nueve pendrives y una cámara fotográfica de uso exclusivo de la página web, provocando así daños en la infraestructura, en los vidrios de puertas de las salas de clases y pasillos del primer y segundo piso, vidrios de entrada al ciclo básico, escritorios de profesores, sillas y escritorios de alumnos. Se dañaron cinco extintores en la Unidad de Enfermería, sustrajeron un monitor de tensión arterial, un saturómetro portátil, glucagen y todos los artículos de curación, lo que puede apreciarse en las evidencias fotográficas y grabaciones de video, además de las facturas que acompañan a la presentación. En relación a lo sostenido por la recurrente en cuanto a que el colegio no dejó de funcionar, indica que se ordenó la inmediata reparación de todos los daños de que fue objeto el inmueble del colegio para no interrumpir y traspasar al resto de la comunidad estudiantil los efectos de tan graves desmanes causados por sus compañeros de aulas. Destaca que los mayores deterioros se produjeron en equipos tecnológicos y en el sistema de seguridad, a pesar de lo cual se pudo reiniciar las clases, toda vez que la infraestructura del colegio es del 3.540 metros cuadrados y, mientras se realizaban las reparaciones, las actividades curriculares fueron reprogramadas y los alumnos del área de párvulos fueron trasladados al auditórium del establecimiento hasta el término de la emergencia a fin de no perjudicar a los alumnos que frente a tales hechos vieron vulnerado su derecho a la educación. 3.-Que el recurso de protección ha sido instituido por el constituyente como una acción cautelar destinada a evitar las posibles consecuencias dañosas derivadas de actos u omisiones ilegales o arbitrarias que produzcan privación, perturbación o amenaza en el goce de alguna o algunas de las garantías constitucionales que expresamente señala la Constitución Política de la República, a fin de restablecer el imperio del derecho y otorgar la debida protección a quien pueda resultar afectado. 4.-Que, la acción constitucional en estudio tiene por objeto que se deje sin efecto la medida de expulsión adoptada por el colegio Gran Bretaña de Hualpén respecto de los alumnos en cuyo favor se recurre, y que se adopten las medidas conducentes a lograr su reintegro al establecimiento educacional, por conculcar las garantías constitucionales de los afectados, de los números 3, 12 y 24 del artículo 19 de la Constitución Política de la República, siendo ilegal y arbitraria. 5.- Que, la medida cuestionada se adoptó considerando que los alumnos habían sido formalizados en causa RUC 1100874300-4, RIT-4725-2011 y porque la conducta en que incurrieron configuraba una falta gravísima, según lo establecido en el reglamento de convivencia escolar, se aplicó la medida de cancelación de matrícula en forma inmediata, contemplada en el T VIII, artículo 7 del mencionado reglamento. 6.-Que, el reglamento de convivencia escolar del colegio en el título VIII relativo al régimen disciplinario, en su artículo 7 de los procedimientos, contempla como sanción de las faltas gravísimas la cancelación de la matrícula en forma inmediata. Señala la regla “Faltas gravísimas. Ante una falta del alumno considerada como gravísima, éste recibirá, previo análisis de la Dirección, una sanción que significará la cancelación de matrícula en forma inmediata.” 7.- Que, el precepto legal antes citado contempla el análisis previo de la Dirección antes de imponer la sanción, lo que implica que deban reunirse antecedentes que permitan fundar la conclusión y, entre ellos, oír a los inculpados. Entendido de otra forma, derivará en una decisión arbitraria que atenta el debido proceso. 8.- Que, por otra parte la Convención sobre Derechos del Niño en su artículo 12. 2 establece que se dará en particular al niño, oportunidad de ser escuchado, en todo procedimiento judicial o administrativo que afecte al niño. 9.- Que, la recurrida tiene la facultad de sancionar disciplinariamente la conducta y hechos en que incurran los educandos, pero dicha potestad no es discrecional sino reglada pues se ejercita en la forma y en los casos contemplados en el manual de convivencia escolar. 10.- Que, de los antecedentes que obran en la causa, lo expuesto por los recurrentes y lo informado por la recurrida, aparece que al aplicar la medida impugnada por esta vía, a los afectados, ésta última no se ajustó al procedimiento que contempla el referido manual de convivencia que establece una investigación de la conducta previa a la sanción. Por otra parte los alumnos sancionados no han sido oídos, infringiéndose de este modo la Convención de los Derechos del Niño que les garantiza el derecho a ser escuchados. 11.- Que, así las cosas la conducta de la recurrida resulta ilegal y arbitraria, contrariando la garantía constitucional de igualdad ante la ley, porque ha procedido a dar un trato desigual carente de toda justificación. 12.-Que, cabe señalar que la circunstancia de que los alumnos sancionados hayan sido formalizados por el Ministerio Público en la causa que se indica, no es razón suficiente para aplicar la sanción sin ajustarse al procedimiento administrativo contemplado para el caso. 13.-Que, en razón de lo concluido no resulta necesario pronunciarse sobre las demás garantías que se dicen vulneradas. Por estas consideraciones y de conformidad, además, con lo dispuesto en los artículos 19 N°2 y 20 de la Constitución Política de la República y Auto Acordado de la Excma. Corte Suprema sobre la materia, se acoge el recurso de protección deducido en lo principal de fs. 48, y se deja sin efecto la medida de expulsión o de cancelación de matrícula que afecta a los recurrentes, quienes deberán ser reincorporados al establecimiento educacional Colegio Gran Bretaña de Hualpén, sin perjuicio de las sanciones que en definitiva pueda imponérseles en aplicación del respectivo manual de convivencia escolar. Regístrese y, en su oportunidad, archívese. Redacción de la Ministra María Leonor Sanhueza Ojeda. No firma el Ministro Jaime Solís Pino por encontrarse con permiso, no obstante haber concurrido a la vista de la causa y al acuerdo. Rol 1125-2011.