13.3. TRANSFORMACIONES CULTURALES. CAMBIO EN LAS MENTALIDADES. LA EDUCACIÓN Y LA PRENSA. 1. TRANSFORMACIONES CULTURALES. 2. CAMBIO EN LAS MENTALIDADES. 2.1. Tradicionalismo e innovación. 2.2. Las mentalidades de las clases sociales. 3. LA EDUCACIÓN Y LA PRENSA. 3.1. La educación: - Ley Moyano - Institución Libre de Enseñanza - Escuelas del Ave María 3.2. La prensa 1. TRANSFORMACIONES CULTURALES. El régimen liberal permitió a los intelectuales y artistas acercarse a las corrientes burguesas europeas. Durante la primera mitad del siglo XIX llegaron a España las corrientes artísticas denominadas Neoclasicismo y Romanticismo, durante la segunda mitad el realismo y el Naturalismo. El despertar de la cultura española coincidió con la crisis de finales del siglo XIX. En estos años se inició una etapa de gran esplendor científico y cultural: Ramón y Cajal y generación del 98. A partir de 1898 los intelectuales lograron una fuerte proyección pública interviniendo en la vida política y social mediante la firma de manifiestos, colaboración en periódicos y revistas, celebración de conferencias, creación de Asociaciones o incluso la participación en las elecciones (como fue el caso de Pérez Galdós y de Pio Baroja). La generación del 98 criticó los defectos del sistema político de la Restauración: el Regeneracionismo. (Página 287 del libro de texto). En la generación del 98 destacaron ensayistas como Joaquín costa o escritores y periodistas como Unamuno, Pio Baroja y Valle Inclán. 2. CAMBIO EN LAS MENTALIDADES. 1.1. Tradicionalismo e innovación Durante el siglo XIX chocaron tradicionalismo e innovación. a) Tradicionalismo: basado en los valores propios del Antiguo Régimen y del liberalismo más conservador: tradición, jerarquía, orden y moral. Era defendido por intelectuales como Menéndez Pelayo. b) Innovación: integrado por pensadores liberales como Giner de los Ríos que defendían una cultura abierta a las novedades del pensamiento europeo (darwinismo, racionalismo y positivismo) para superar el atraso cultural y científico. Esta corriente surgió en las ciudades y expresaba una nueva mentalidad moderna, laica, revolucionaria y anticlerical. A pesar de los cambios producidos, permanecieron vigentes muchos valores y costumbres de épocas anteriores como el sentido del honor, la infravaloración del trabajo, … 1.2. Las mentalidades de las clases sociales. En la sociedad española se distinguían tres clases sociales con mentalidades diferentes: a) Las clases altas: eran minoritarias y formaban un grupo homogéneo, unido por la conservación de las viejas actitudes aristocráticas como la ostentación de su riqueza y la vida palaciega. b) Las clases medias: formadas por un grupo muy heterogéneo y diverso, tanto económicamente como ideológicamente. Muchos de sus componentes aspiraban a intervenir en la vida política. c) Las clases populares: representaban más del 80% de la población. La influencia del movimiento obrero marxista y anarquista desarrolló entre ellos la conciencia de clase y multiplicó su capacidad reivindicativa. 3. LA EDUCACIÓN Y LA PRENSA. 3.1. La educación. a) Ley Moyano (1857). Fijaba el modelo educativo oficial. Dividía la enseñanza en tres niveles: educación primaria, secundaria y universitaria; declaró obligatoria la enseñanza primaria y encargó su financiación a los ayuntamientos. Mientras en Europa prácticamente había desaparecido el analfabetismo, en España a finales de siglo superaba el 60 %. La ley Moyano establecía igualmente el derecho a la creación de centros privados, garantizando la influencia de la iglesia en la enseñanza siguiendo los acuerdos del Concordato de 1851. A finales de siglo XIX la Iglesia impartía el 33% de la enseñanza primaria y el 80% de la secundaria. b) Institución Libre de Enseñanza (ILE). Siguiendo un concepto de renovación educativa y haciendo frente al conservadurismo de la enseñanza oficial, Francisco Giner de los Ríos fundó en 1876 la ILE. Se trataba de un centro privado y laico; rechazaba la afiliación política y religiosa de los profesores y alumnos y tenía como objetivo la formación de personas libres, fomentando la tolerancia y el espíritu crítico. Sus planteamientos ejercieron una gran influencia en la cultura de su tiempo y en otras fundaciones posteriores: la creación, por ejemplo, de la JAE (Junta para la Ampliación de Estudios e Investigaciones científicas), dirigida por Ramón y Cajal. c) Las Escuelas del Ave María. Creadas a finales de siglo siguiendo la iniciativa del padre Manjón. Se aplicaban unos planteamientos pedagógicos similares a los de la ILE, pero se diferenciaba de ella en dos aspectos: su carácter religioso y su carácter social a los sectores más marginados. Por su parte, el movimiento obrero fomentó la enseñanza popular a través de escuelas de alfabetización de los ateneos obreros. En este sentido hay que destacar al pedagogo libertario Francisco Ferrer Guardia, creador de la Escuela Moderna. En ella se rechazaba la pedagogía tradicional y se inculcaban valores de libertarios de igualdad y solidaridad. Se expandió por Cataluña y Andalucía, por ser regiones de influencia anarquista. 3.2. La prensa. La prensa tomó un marcado carácter político desde principios del siglo XIX. Su papel fue decisivo en la difusión de las ideas liberales, aunque tuvo que luchar contra las prohibiciones que impusieron el absolutismo de Fernando VII y los gobiernos conservadores de Isabel II. El pleno desarrollo de la prensa tuvo lugar a partir de la ley de libertad de imprenta tras la revolución de 1868. En 1873 se editaban en Madrid más de 100 publicaciones o gacetas. Nació una prensa informativa independiente con periódicos como El Imparcial o La Vanguardia, que incorporaban nuevos contenidos con secciones de humor, anécdotas, folletines (novelas por capítulos),… con muy buena acogida por los lectores. Los nuevos formatos de periódicos aumentaron sus tiradas y se hicieron frecuentes las lecturas colectivas, las lecturas en cafés, ateneos y tertulias. Paralelamente surgió la prensa obrera, que difundía los proyectos políticos de socialistas como El Socialista, o anarquistas como Tierra y Libertad. Igualmente cabe destacar la revista ilustrada satírica como La Flaca y El Motín.