Argentina multiplica las tarifas eléctricas para salir de su crisis energética 04/02/2016@20:19:35 GMT+1 Alieto Guadagni Economista ALIETO GUADAGNI es economista graduado en la Universidad Nacional de Buenos Aires, con estudios de postgrado en la Universidad de Chile y Doctorado en la Universidad de California (Berkeley) • Todos los artículos de Alieto Guadagni http://www.elimparcial.es/noticia.asp?ref=161253 El sector energético argentino está en crisis. Baste decir que cuando comenzó la administración kirchnerista en el 2003, Argentina producía 40 por ciento más de petróleo y 28 por ciento más de gas que ahora. El panorama eléctrico no es mejor, ya que este sector vive tres situaciones críticas que fueron originadas por errores en la planificación energética de los últimos años. Ya llegó la hora en que estos errores deben ser encarados y resueltos. Esta es la tarea que están acometiendo las actuales autoridades energéticas, tomando medidas impostergables pero de difícil aceptación política. Las tres situaciones críticas son: (1) Escasas inversiones que causaron el deterioro en las redes de distribución eléctrica en el Área Metropolitana, baste decir que la duración de los cortes de luz se multiplicó casi 6 veces, al pasar de 6 horas en el 2003 a 33 horas por corte en 2014. También aumentó la cantidad de cortes, ya que entre 2003 y 2014 la cantidad de cortes se duplicó. El costo para la sociedad de estos cortes ha sido enorme: familias sin agua, ancianos y enfermos sin ascensor y pérdidas para comerciantes e industriales, no fueron meros “accidentes”, sino el fruto de políticas erróneas por más de una década. (2) Insuficiente expansión de la capacidad instalada para la generación eléctrica, por debajo del aumento de la demanda. Por esta razón el actual margen de reservas eléctricas es el más bajo de las últimas décadas, esto significa que se exigirán grandes inversiones si se desea satisfacer sin cortes el futuro consumo de energía eléctrica. La situación es frágil, ya que cuando la demanda máxima en MW supera la potencia instalada, dependemos de la voluntad exportadora de Brasil, Uruguay o Paraguay. (3)Tenemos tarifas que discriminan contra el interior del país, ya que los consumidores que habitan el interior del país (fuera del Gran Buenos Aires), pagan mucho más. Una familia en Santa Fe paga la luz 7 veces más que una en Buenos Aires. Un taller mecánico en Córdoba paga la luz 6 veces más que uno en la capital de la República. Las actuales tarifas eléctricas en el Área Metropolitana parecen haber sido diseñadas por “Hood-Robin”, ya que concentran los subsidios no en los sectores más humildes, sino en los niveles socioeconómicos superiores, caracterizados por sus altos consumos derivados de su gran equipamiento hogareño con artefactos que utilizan electricidad. Es hora de salir de esta crisis, el país necesita tarifas que no discriminen contra el interior y que establezca una tarifa “social” que preserve el acceso al consumo de todos los argentinos humildes, es decir no solamente los del Área Metropolitana. Las tarifas deben ser adecuadas, es decir deben cubrir los costos razonables de una eficaz prestación de servicios por parte de los concesionarios. La tarea no es fácil porque se congelaron tarifas eléctricas por 12 años, cuando la inflación en este periodo llegó a 1200 por ciento, nunca en la historia argentina había ocurrido algo así. Ya se están conociendo las nuevas tarifas en el Gran Buenos Aires, con grandes aumentos en el orden de 400 a 800 por ciento, que no son nada simpáticos desde el punto de vista político. No es una tarea grata para la nueva administración del Presidente Macri, pero no tenía alternativa ya que fueron 12 años de descapitalización y deterioro de todo el sector energético. Los gobiernos nuevos siempre asumen sus mandatos sin beneficio del inventario de los errores del pasado.